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Publicación
de la Liga Internacional
de los Trabajadores (LIT-CI)

Internacional
Cuarta Internacional
Nueva época. Núm. 155

www.litci.org
Enero de 2010

El día 12 de enero, un violento

Urgente
solidaridad
terremoto azotó Haití. El terremoto
tuvo su epicentro a pocos kilómetros
de su capital, Puerto Príncipe, donde
vive un cuarto de la población del de los
país, y provocó una terrible catástrofe.
En este momento, se calcula que
existen ya cerca de 200 mil muertos,
trabajadores
es decir, 2% de la población haitiana,
de aproximadamente 10 millones de
habitantes. La Cruz Roja estima que
casi 3 millones de personas están
heridas o sin vivienda. Estamos, por
lo tanto, ante una tragedia humana
gigantesca.

Una catástrofe natural

de proporciones gigantescas,
en uno de los países más
de todo el mundo
pobres del mundo con el pueblo haitiano Foto de Tatyana Makeyeva - Reuters.

Esta catástrofe natural de dimensiones atemo-
rizadoras, que sería destructora en cualquier parte,
ocurrió en uno de los países más pobres del mun-
do. Ya antes del terremoto, 80% de los haitianos
vivían por debajo de la línea de po breza. Más de
70% de la población vivía con menos de 2 dólares
por día, y 56% con menos de 1 dólar. Un tercio de
la población dependía de ayuda alimentaria para
sobrevivir. Sólo 30% de los haitianos tenían acceso
a la red pública de salud.
En este contexto, los efectos del terremoto se
vuelven aún más devastadores. Según ingenieros y
arquitectos que ya trabajaron en Haití, citados por
el periódico Folha de São Paulo, la mala calidad de
las construcciones, debido a la falta de materiales
adecuados y a las prácticas incorrectas de cons-
trucción, agravaron todavía más la fragilidad de las
casas y los edificios. Después del terremoto falta
lo más básico: agua, luz, comida y un mínimo de
asistencia médica. Los servicios de rescate son casi
inexistentes y no hay sistema de salud para tratar
a los heridos y proporcionar medicamentos y aten-
ción básica de urgencias, lo que hace que muchos
acaben muriendo. A la vez, la falta de cualquier
infraestructura mínima hace que los muertos se
acumulen en las carreteras y calles, agravando el
riesgo de una epidemia. Los pocos campamentos
de refugiados son, en su mayoría, improvisados por
la población, con tiendas de sábanas.
Haití: una historia de dos siglos
de intensa explotación imperialista
y cinco años de ocupación
por las tropas de la ONU
La situación de extrema pobreza en Haití es
producto de dos siglos de intensa explotación por
diversas potencias imperialistas. El país fue escena-
rio de la primera y única revolución victoriosa pro-
tagonizada por esclavos en el mundo y la primera
revolución negra y anticolonial de América Latina.
Entre 1791 y 1804, los esclavos haitianos trabaron
diversas luchas contra la potencia colonial france-
sa, hasta que, en 1804, expulsaron a los franceses,
tomaron el poder y alcanzaron la independencia.
Desde entonces, Haití se volvió una amenaza para
Francia y demás países imperialistas, así como
para la elite esclavista que dominaba toda América
Latina, y que intentaron por todos los medios aislar
económicamente el país para sofocarlo. Desde los
inicios del siglo XX, los haitianos sufrieron diversas
invasiones imperialistas y dictaduras sangrientas.
Más recientemente, desde 2004, Haití fue
ocupado por las fuerzas de la ONU, después de
que los EE.UU. intervinieran militarmente para
forzar la retirada del país del presidente Aristide.
Actualmente, las fuerzas de ocupación de la ONU
(Minustah) son dirigidas por Brasil, que ayuda
así a los EE.UU. a mantener sus intereses en la
región, aunque con una ocupación militar de cara
más “amigable”, integrada por tropas argentinas,
bolivianas, jordanas, entre otras.
El discurso oficial es que la presencia militar
en Haití es necesaria para que el país no se vuelva
un caos. Sin embargo, durante los últimos cinco
años las condiciones de vida del pueblo haitiano
no mejoraron: el salario mínimo, de aproximada-
mente 40 dólares, es el más bajo de América Latina.
Las tropas de la Minustah están sirviendo no para
ayudar a traer paz y mejoría social a Haiti sino, por
el contrario, para garantizar los grandes lucros de
las multinacionales de las principales potencias
imperialistas, sobre todo de EE.UU., que obtiene
grandes ganancias a costa de trabajo casi esclavo.
La reciente represión ejercida por las tropas
contra los trabajadores que luchaban por un au-
mento del salario mínimo dejó muy claro el papel
de la Minustah. En declaración reciente, su coman-
dante, el general brasileño Floriano Peixoto Vieira
Nieto, explicó que los proyectos ejecutados por los
batallones de ingeniería del Ejército brasileño son
realizados primordialmente con fines militares y
no diplomáticos o civiles, lo que significa que los
beneficios para la población son indirectos: “Cuan-
Sigue en la pág, 2

Suplemento Internacional- N° 645 - Febrero de 2010 1

 Haití
Viene de la pág, 1
do usted repara una carretera para que pase una
tropa, para asegurar movilidad, ésta queda también
para la utilización de la comunidad.”
El reciente terremoto, a diferencia de lo que
dice la propaganda oficial, demuestra de la forma
más explícita y cruel que cinco años de ocupación
militar no sirvieron para dotar al país de más in-
fraestructura o mejores condiciones de vida. Por el
contrario, el desastre natural desnudó la catástrofe
social que es la vida en Haiti.
La tragedia haitiana genera conmoción
y solidaridad entre los pueblos
del mundo entero
La tragedia humana provocada por el terre-
moto en Haití conmueve a los pueblos de todo el
mundo. Personas de varios países están enviando
dinero, comida, medicamentos y ropas, movilizán-
dose para enviar ayuda y solidaridad al pueblo
haitiano. Esa solidaridad humana internacional es
un sentimiento más que justo y probablemente la
única cosa positiva en toda esa catástrofe.
En realidad toda la ayuda que llegue a Haití
en este momento es fundamental para intentar
salvar la vida de miles de sus pobladores. En ese
sentido, tenemos que exigir de los gobiernos de
todo el mundo que envíen recursos humanos y
materiales de rescate, médicos, medicamentos,
comida, agua potable porque, sin eso, miles de
haitianos no conseguirán sobrevivir. En especial,
exigirlo de los gobiernos de los países imperia-
listas, que a diario ganan fortunas inimaginables
a costa del trabajo de los haitianos; y en parti-
cular Estados Unidos por su dominio del país y
su proximidad geográfica, tiene que garantizar
inmediatamente los recursos básicos para la
población haitiana.
Una ayuda humanitaria que no llegó
a la mayoría de la población afectada
A pesar de la conmoción internacional, la
ayuda humanitaria que llegó hasta la fecha a
Haití es casi insignificante, de cara a las ne-
cesidades. Mientras hablan de solidaridad, los
mismos gobiernos que dieron 25 billones de
dólares para los bancos en la crisis económica,
ahora ofrecen 145 millones de dólares para Haití.
En cinco años de ocupación militar, la ONU gastó
3.500 millones de dólares y ahora “ofrece” 10
millones de dólares para ayuda por el terremoto.
A pesar de las miles de vidas en juego, delante
de esta gigantesca catástrofe el imperialismo
muestra su verdadera cara: todo para salvar los
lucros millonarios de los bancos y sólo migajas
para salvar las vidas del pueblo más pobre de
América Latina.
La situación es alarmante, pues la mayoría de
los expertos afirma que las personas soterradas [so-
brevivientes que se encuentran atrapados por los
escombros] difícilmente consiguen sobrevivir por
más de tres días en esa situación. Según el diario
español El País (15/1/2010): “La ayuda todavía
no llegó a la mayoría de los residentes de Puerto
Príncipe, que vagan por las calles fétidas, buscando
desesperadamente agua, comida y ayuda médica”.
2 N° 645 - Febrero de 2010 - Suplemento Internacional
Incluso en este momento de emergencia, para
poco está sirviendo la supuesta misión humanita-
ria de las tropas de la ONU en Haití, tanto como
fuerza de apoyo para la población como de rescate
o de auxilio médico. Según Folha de São Paulo:
“los funcionarios de la ONU están concentrados
en ayudarse a sí mismos, enfocando acciones de
rescate en sus instalaciones y en el Hotel Montana,
donde vivían los altos funcionarios. (…) La atención
a los haitianos es sólo ocasional.”
Noticias recientes muestran que la ONU
tenía toneladas de alimentos almacenados en
Haití, pero que hasta la fecha no los había dis-
tribuido y ni siquiera había informado sobre su
existencia. Fue necesario que la población des-
cubriese el lugar de almacenamiento y tomase
la iniciativa de apoderarse de los alimentos, a
pesar de la ONU.
En realidad, delante de la tragedia que alcan-
za a todos los haitianos, independientemente de
su clase, queda claro que la “ayuda humanitaria”
Las tropas de la ONU sólo han servido para r
de la ONU está priorizando a aquellos a quienes
siempre sirvió: los más ricos. noticias dadas por diferentes periódicos, algunos
haitianos habían empezado a apilar los cuerpos de
las víctimas en las calles, lo que es una necesidad
Las hipocresías de una ayuda humanitaria
no cumplida por las fuerzas “humanitarias”, que
controlada por los gobiernos imperialistas puede ser entendida, a la vez, como protesta contra
En realidad, además de que la ayuda es
la demora en socorrer a la población afectada. Si
totalmente insuficiente, la gran contradicción es
la Minustah ya era la fuerza militar que reprimía
que lo poco que llegó hasta ahora a Haití es
estudiantes y trabajadores, ahora lo será aún más,
controlado por los gobiernos imperialistas y sus
aprovechándose de esta situación para aumentar
instituciones, como la ONU. En ese sentido, esa
su control sobre el país.
ayuda es claramente hipócrita.
En primer lugar, los gobiernos que ahora se
dicen muy conmovidos con la situación y prestos a
Estados Unidos pasa
a comandar la ocupación militar
ayudar son los mismos que vienen aprovechándo-
se de Haití. La ayuda que pretenden dar es mínima Sin embargo, a partir de ahora, además de la
represión a los posibles levantamientos sociales, lo
delante de la que podrían dar y que ganaron con
que está en juego es, sobre todo, quien controlará
la explotación de mano de obra barata en Haití.
Haití y quien ganará con su reconstrucción de
Nótese que Bill Clinton y George Bush (que era
aquí en adelante.
presidente en la época en que los EE.UU. habían
Por ello, junto con la “ayuda humanitaria”,
forzado el derrocamiento y el exilio de Aristide y
el gobierno Obama envió un contingente militar
habían promovido la ocupación de las tropas de
que, de un momento para otro, puso a los EE.UU.
la ONU) son los que van a comandar la comisión
como el principal país de la fuerza militar de
de la Casa Blanca que coordinará los esfuerzos
ocupación, pasando por encima de la Minustah
de rescate y ayuda a Haití.
y sin preocuparse por “autorizaciones” de la ONU.
Pero lo peor es que los gobiernos imperialistas
Los norteamericanos ya anunciaron que enviarán
y los que mantienen la ocupación de Haití están
10.000 soldados, 2.200 de los cuales forman la
aprovechando la tragedia y la crisis social devenida famosa tropa de asalto de los “marines”: los fusi-
de ella para, en nombre de la ayuda humanitaria, leros navales.
reforzar la ocupación y la represión en el país. Los EE.UU. mandaron el portaaviones “Carl
Debido a la tragedia, para gran parte de la Vissom”, cargado con 19 helicópteros. El destructor
población la vida se redujo sólo a la búsqueda “Higgins” también se encuentra en la región y
por la supervivencia, y son normales los saqueos en breve deben llegar 3.500 soldados de la 82.a
a supermercados destruidos por el terremoto, en División Aerotransportada de Infantería del Ejér-
busca de comida. Con el argumento de mantener cito. En las próximas dos semanas deben llegar
la seguridad y evitar la criminalidad, los efectivos el crucero “Normandy” y la fragata “Underwood”,
militares se preparan para “evitar” (leáse: reprimir) ambos equipados con misiles dirigidos. También
esas situaciones, ante una población que, con toda irá el barco de asalto anfibio “Bataan”, acom-
justicia, lucha por su vida. pañado de otras dos naves del grupo de asalto
Además, está creciendo la insatisfacción de la anfibio: el “Fort MacHenry” y el “Carter Vestíbulo”.
población. Como relata el portavoz de la Minustah Es decir, llegaron los verdaderos jefes de la ocu-
(Folha de São Paulo, 15/1/2010): “la precariedad pación militar y fue puesta en segundo plano la
de las condiciones de las fuerzas de seguridad y frágil Minustah.
las carencias en la atención a la población están El hecho de que el principal envío de
generando impaciencia en la población. ‘Ellos [los personal de EE.UU. hacia Haití esté compuesto
haitianos] están cada vez más irritados’.” Según las por soldados especializados para el combate
 ¡Es necesario que la ayuda humanitaria tal como aconteció en catástrofes naturales an-
sea controlada por las organizaciones teriores, lo más probable es que buena parte de
populares y de trabajadores de Haití! la ayuda humanitaria quede perdida en medio
En este juego de fuerzas e intereses, quien de la corrupción y sea utilizada para garantizar
queda en último plano es nuevamente el pueblo el bienestar de los más ricos y no la vida de los
haitiano. La Minustah es una fuerza militar de más pobres.
seguridad y fracasó completamente cuando fue Para salir definitivamente de esta situación
necesaria una verdadera ayuda humanitaria. Los de tragedia humana y social, los trabajadores
gobiernos imperialistas están más preocupados sólo podrán contar consigo mismos, tomando su
en controlar militar y económicamente Haití destino en sus propias manos. Algunos relatos
para transformarlo en una colonia, que por la que nos llegan a través de la prensa internacional
supervivencia del pueblo haitiano. El gobierno y muestran que ya hay indicios de esa conciencia,
las instituciones haitianas están ausentes y más como los campos de refugiados auto-organizados
preocupadas consigo mismas que con su pueblo. o una operación de rescate en la universidad GOC
El presidente Préval, dejó eso claro cuando afirmó (Group Olivier Collaborateur) hecha por los propios
que la mayor prioridad es restablecer las comu- estudiantes y sus familiares.
nicaciones, en particular entre los miembros del Es por todo eso que creemos que la única
gobierno, en segundo lugar, la remoción de los solución es que el propio pueblo haitiano controle
destrozos para desobstruir las vías, y, en tercer la ayuda humanitaria que llegue a su país. En
lugar, el auxilio de combustibles para los coches caso contrario, toda la conmoción de los pueblos
del gobierno (Folha de São Paulo, 15/1/2010). del mundo entero y sus esfuerzos para ayudar a
Además, sea bajo las manos de los gobier- los haitianos quedarán en buena parte perdidos
nos imperialistas o de los gobernantes haitianos, o serán utilizados de forma indebida.
reprimir a la población y entorpecer las labores de rescate y solidaridad.
militar y no por expertos en rescate, médicos o ¡El pueblo haitiano necesita agua, medicamentos
protección civil, deja bien claro que su objetivo
es el control militar y no la ayuda humanitaria
y comida, no fusiles, marines y represión!
al pueblo haitiano.
¡Por una campaña internacional
El imperialismo quiere aprovechar de solidaridad, promovida por los trabajadores
la catástrofe para recolonizar y las organizaciones populares!
definitivamente a Haití
Si toda la ayuda humanitaria es bienvenida, con- dad de la clase trabajadora de todo el mundo para la
El gobierno de EE.UU. se aprovecha de esta
sideramos que es fundamental que los sindicatos, las clase trabajadora y la población pobre de Haití. Esta
situación de crisis para tomar el control directo y organizaciones estudiantiles y populares, las organi- campaña debe servir, en primer lugar, para ayudar al
total sobre Haití. Baste decir que fueron ellos quie- zaciones de derechos humanos independientes de los pueblo haitiano, pero también para reanudar la tradi-
nes asumieron el control del aeropuerto de Puerto gobiernos burgueses, recauden fondos que sean en- ción de lucha obrera internacional y los fundamenta-
Príncipe y quienes dirigen todas las operaciones, tregados directamente a las organizaciones populares les lazos de solidaridad entre la clase trabajadora del
sin consultar con Brasil, que hasta ahora coman- haitianas. mundo entero.
daba las fuerzas de la ONU en el país. La Coordinación Nacional de Luchas (Conlutas) Por último, la LIT-CI llama a que esa ayuda sea
Delante de la iniciativa unilateral de EE.UU., en Brasil, junto con otras organizaciones obreras, ya entregada a las organizaciones obreras y populares
Francia, antigua metrópoli colonial que dominaba tomó la iniciativa de hacer una campaña para recoger de Haití, por ejemplo Batay Ouvrière (BO), una de las
fondos y ayuda para llevar a los trabajadores y al pue- principales organizaciones obreras del país, que des-
Haití, buscó también entrar en el juego. La pro-
blo haitiano. Es fundamental que esta iniciativa sea de el inicio se opuso a la ocupación militar hecha por
puesta de Sarkosy de realizar una Conferencia también emprendida por las organizaciones sindicales la Minustah y que encabezó la reciente lucha por el
Internacional sobre Haití es la expresión de esa y populares de todos los países, de forma indepen- aumento del salario mínimo. Es con el objetivo de en-
disputa entre los varios países imperialistas sobre diente de sus gobiernos. tregar esa ayuda solidaria a la clase obrera y el pueblo
quién pasará a controlar el país de aquí en más. La LIT-CI llama a todas las organizaciones de pobre que nos proponemos organizar una delegación
Y esto queda explícito por el hecho de que el los trabajadores a realizar una campaña de solidari- internacional a Haití.
presidente haitiano u otro miembro cualquiera
de su gobierno ni siquiera fueron invitados para
La población haitiana es presa del desespero por la falta de alimentos y atención médica.
esta Conferencia. Es decir, bajo el pretexto de la
reconstrucción se esconde un proyecto de trans-
formar el país en una nueva colonia del imperia-
lismo americano, mientras el imperialismo francés
busca también garantizar su parte. Hasta Brasil,
que en los últimos cinco años estuvo sirviendo
al imperialismo al dirigir la ocupación militar,
busca en este momento conseguir su parte en
el reparto de los negocios de la reconstrucción y
del control futuro del país.
Frente a esto, el presidente haitiano, René Pré-
val, está demostrando su papel de títere completo
de EE.UU. Su agradecimiento público al gobierno de
EE.UU. por el envío de las tropas, cruceros, etc., que
llegan a Haiti para ocupar el país, es la expresión
máxima de un presidente absolutamente servil al
imperialismo, y que es todavía utilizado por Obama
para colocarse como el gran humanitario, mientras
se propone recolonizar definitivamente Haití.

Suplemento Internacional- N° 645 - Febrero de 2010 3

 Haití
Directo desde Haití
La ayuda
internacional
no se ve,
no se come y no se
bebe, sólo se escucha
Traducido por Fernando Graco,
tomado de Opinião Socialista
Otávio Calegari Jorge, es estudiante de la Unicamp
[Universidad de Campiñas] y militante del PSTU [Partido
Socialista de los Trabajadores de Brasil]. Estaba en Haití
en el momento del terremoto que devastó la capital,
Puerto Príncipe. Pudo testificar la destrucción del desastre,
también la increíble solidaridad del pueblo haitiano y el
verdadero papel que cumplen las tropas de la ONU en
ese país, como lo describe en ese artículo para Opinião
Socialista1.
Estuve en Haití junto a un grupo de estudiantes,
una fotógrafa y un profesor de la Universidad Esta-
dual de Campiñas, desde el día 3 de enero. El pro-
1- Opinión Socialista es el periódico del Partido Socialista
de los Trabajadores Unificado (PSTU) de Brasil.
Comunicación
con Didier Dominique1
Didier Dominique,
dirigente de la orga-
nización obrera re-
volucionaria haitiana
Batay Ouvriye2, visitó
nuestro país en di-
ciembre del 2007, en
el marco de la cam-
paña por el fin de la
ocupación de Haití por
parte de la MINUSTAH, impulsada por el Encuentro
Latinoamericano y Caribeño de Trabajadores del
cual hace parte.
Después de varios días de intentos vanos,
desde la LIT y el FOS logramos comunicación con
Didier. En una nota bajo el impacto de los acon-
tecimientos, nos informó que sus camaradas más
cercanos están vivos. Pero todos tienen víctimas
en sus familias. Seguramente las habrá también
entre los miembros de Batay Ouvriye.
Todos los esfuerzos están centrados en la dura
tarea de la sobrevivencia. Pero con gran ánimo
revolucionario, Didier está requiriendo ayuda para
poder avanzar, responder en medio de las dificulta-
des a la situación, recibir solidaridad. Y poder trans-
formar la gran bronca ante el desembarco de miles
de marines en acción contra la invasión.
Desde el FOS, más que nunca, estamos a
disposición de nuestros compañeros de Batay
Ouvriye.
1
Tomado de Lucha Socialista, periodico del Frente Obrero
y Socialista (FOS) de Argentina, organización política
de la Liga Internacional de los Trabajadores en ese país.
2
Batay Ouvriye es una central obrera de Haití.
4 N° 645 - Febrero de 2010 - Suplemento Internacional
En realidad no desapareció. La Minustah estaba
totalmente empeñada en rescatar sus propios mili-
tares y civiles, así como en remover los escombros
del Hotel Montana, donde se hospedaban ricos
huéspedes extranjeros. Los haitianos ayudan a los
haitianos, la ONU ayuda la ONU, esta ha sido la regla.
Desatención de la “comunidad
internacional”
La ayuda internacional, tan propagandeada por
doquier, no llega. Como dijo un haitiano al periódico
El País, de la República Dominicana, la ayuda “no se
ve, no se come y no se bebe, sólo se escucha”.
Los problemas físicos de Puerto Príncipe, que
hasta ahora sirven de argumento para la tardanza
en la llegada de ayuda, esconden el verdadero
aspecto del problema. Infelizmente, no se tratan de
problemas de logística, como quieren propagandear
los organismos internacionales, sino de una total
Una mujer haitiana expresa su rechazo
a las tropas de ocupación yanquis. desatención con la población haitiana. En ningún
momento fueron consultados los propios haitianos,
yecto de investigación que pensábamos desarrollar
que colocan la ciudad en movimiento, sobre la ma-
englobaría diversos aspectos de la realidad haitiana,
nera de cómo debería ser organizada la llegada de
entre ellos, las percepción de la población acerca de la
alimentos, medicamentos o agua.
ocupación militar de la Minustah, liderada por Brasil.
Lo que se ve es justamente lo contrario. No sólo
Infelizmente fuimos sorprendidos por el terre-
los alimentos están acaparados en el aeropuerto y
moto del día 12, lo que nos hizo revaluar nuestra
las decenas de coches y camiones de la Minustah
permanencia en el país, así como el propio papel que
están parados en los batallones, también hay una
podríamos cumplir a través de la denuncia sistemá-
predisposición clara en priorizar el envío de militares
tica de los recientes acontecimientos.
para “garantizar la seguridad” de la distribución.
Los casos de saqueos y violencia, hasta el mo-
La ocupación y la solidaridad popular mento en que permanecimos en Puerto Príncipe, eran
El terremoto, más que una catástrofe natural, extremadamente puntuales. Es más, eran padres y
fue la explicitación más brutal de una catástrofe madres de familia que estaban intentando rescatar lo
social ya en marcha en Haití. La situación por la cual que fuera posible de los supermercados destruidos. La
pasamos después del día 12 nos reveló, sin ninguna Policía Nacional Haitiana, frágil y pequeña, ha cumplido
máscara, diversos aspectos del momento por el cual
pasa Haití hoy.
bien su papel: resguardar las tiendas y supermercados,
aún los destruidos, frente al pueblo hambriento.
La ocupación de la ONU se mostró totalmente
fracasada. El ya frágil Estado haitiano literalmente se
La violencia, como se daría en cualquier país
del mundo, tiende a aumentar. La causa de ese
desmoronó. Con él también los principales edificios aumento, sin embargo, se da por la falta rápida de
de las Naciones Unidas, tanto civiles como militares. socorro. Mientras más tiempo tarda, más se rebelará
Lo que pudimos presenciar en los cuatro días el pueblo. Estados Unidos ya percibieron eso, al igual
después del terremoto, antes de dejar Haití, fue una que la ONU y Brasil.
solidaridad envidiable del pueblo haitiano y una Miles de muertos de más, para la comunidad
ausencia completa de los militares y civiles de la internacional”, no son importantes, finalmente; son
Minustah. negros, pobres y rebeldes. Lo importante es decidir
Caminar por la Champ de Mars, principal plaza quién controlará, a través del mayor y más poderoso y
de Puerto Príncipe, los días posteriores al terremoto, efectivo [aparato] militar, es el futuro de los haitianos
nos mostró la realidad desnuda y cruda. Mientras que sobrevivirán.
veíamos en los medios internacionales que millones
de dólares serían donados para ayudar los haitianos,
lo que pudimos presenciar fue una ciudad extrema-
damente destruida, pero extremadamente viva.
Las plazas que cercan el Palacio central se trans-
formaron en inmensos campos de refugiados. Miles
de personas se aglomeraban, y aún se aglomeran, en
todos los lugares donde no haya edificios o casas cerca.
El más increíble, sin embargo, fue la organización po-
pular. Lo “chien jambe” –comercio informal de comida
en las calles– se manifestó como el único medio de
acceso de los haitianos que habían perdido sus casas,
así como sus parientes y amigos, o la comida.
Los únicos camiones eran de la iniciativa pri-
vada, probablemente liderados por los propios con-
ductores, que distribuían agua en la filas inmensas.
También la organización para retirar escombros y res-
catar personas se dio de manera muy rápida, a pesar
de la precariedad de los instrumentos. Pudimos ver, en
varias horas de caminar durante los días siguientes
al terremoto, sólo algunas pocas retroexcavadoras
y algunos camiones para remover los cuerpos que
se acumulaban por las calles de Puerto Príncipe. La
ONU simplemente desapareció.