OBRA: COMENTARIO DE TEXTO: AQUÍ

FABLA LA JUSTICIA, DE PEDRO LOPEZ

DE AYALA
 INDICE

1.Localización del texto.

2.Fecha y periodo.
3.Género literario y forma de expresión.
4.Tema y argumento.
5.Estructura del texto.
6.Contexto.
7.Narrador.
8.Lenguaje.
9.Análisis de la forma
10.Métrica.
11.Juicio Crítico.
 1. Localización del texto.

El poema “Aquí fabla de la justicia” forma parte del libro RIMADO DE PALAÇIO, cuyo
autor es Pedro López de Ayala, en el siglo XIV. Este autor ha escrito otras obras como:
las traducciones de “los Morales de San Gregorio”, “De consolatione philisophae” o “el
libro de la caza de las aves”.

2. Fecha y periodo.

En esa época, la poesía estaba dominada por el llamado mester de clerecía. Se

escriben libros fundamentalmente moralizadores, basados en la renovación del
lenguaje poético y el uso de la lengua romance.

La cuaderna vía se impone a los demás metros, es su obra más conocida, se suele
considerar como uno de los monumentos de la primitiva poesía castellana y es un
ejemplo del crecimiento y la expansión que comenzó en este siglo de una literatura
mucho más elaborada y trabajada que en épocas anteriores.

3. Género literario y forma de expresión.

Es una obra lírica cuya finalidad es didáctico-moral, se entremezcla la moralidad de

tipo religioso y los consejos políticos.

4. Tema y argumento.

El tema principal es la justicia, desde el punto de vista de que al rey se le atribuye la

salvaguarda y protección de la justicia. Se basa en un ideal de justicia, en cuanto que
Dios debe condenar a través de ellas al culpable y absolver al inocente y la certeza de
que la justicia divina, incomprensible o clara, se cumple siempre.

Este poema es un reflejo de las corrientes espirituales de la época que buscan una
mayor intimidad con Dios, fruto directo de la meditación.

5. Estructura del texto

El libro RIMADO DE PALAÇIO, que se compone de 8550 versos, se puede dividir en dos
partes, el poema que comentamos pertenece a la segunda parte, que es la más larga,
se podría considerar este verso como independiente, no tiene introducción ni
conclusión. Ayala concebía como un todo organizado esta obra y no como partes mal
enlazadas. Se ve la voluntad del autor de realizar una obra caracterizada por su unidad.
 6. Contexto.

El autor en la estrofa trata de responder de una forma segura y cierta la voz de la

sociedad, que se expresaba a través de un miembro importante de la misma.

La estrofa tiene un carácter moralizador, como la literatura de la época, que se basa

fundamentalmente por su aspecto doctrinal y moralizador.

La intervención de Dios en la vida cotidiana se basa en la fe, que es una característica

de esta época.

Esta obra tiene un claro tono crítico hacia las reglas del buen gobierno, evoca las
virtudes que el cristiano debe practicar en este caso, el rey, con una peticiñn del
perdón de Dios.

El texto habla de la justicia, nos recuerda los catecismos de la época.

7. Narrador.

Describe lo que piensa con respecto al tema de la justicia, está escrito en tercera
persona (narrador omniscente).

8. Lenguaje.

El lenguaje es preciso y claro, que permite una lectura fácil. El texto posee un
vocabulario que denota una gran cultura, aunque, con respecto a la retórica, es
bastante pobre, está escrito en castellano antiguo.

9. Análisis de la forma.

Realiza un análisis didáctico de la justicia, con una intención crítica. La forma en la que
está escrita provoca la idea de que el autor hable de su experiencia personal. El estilo
es ágil y claro, y permite una lectura amena.

10. Métrica.

Está escrito en cuaderna vía, se trata de una estrofa de cuatro versos de catorce sílabas
(alejandrinos) cada uno, todos con rima asonante. Cada verso está dividido en dos
hemistiquios por una cesura.
 11. Juicio crítico.

La conclusión a la que nos lleva el texto es moralizante, es decir, la justicia hay que
administrarla y llevarla a cabo aunque no sea un trabajo grato para el que la
administra.

Aunque en la opinión de los no cristianos, la referencia que hace a Dios como el

máximo exponente de juez que premia a los buenos y castiga a los malos no la
admiten.

Dentro de los textos que he podido leer de la época es de los más fáciles que he
podido leer y con el que más estoy de acuerdo.