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Trastornos a La Tiroides:

Incapacidad de expresar mis verdaderas necesidades

No es casualidad que 10 de cada 100 chilenas sufra de algún trastorno a la tiroides. Más allá de las
teorías existentes que surgen para explicar este fenómeno, que afecta entre 6 y 7 veces más a la
población femenina, existen los factores “metafísicos” o sico-espirituales que inciden sobre la
manifestación expresa de esta, o cualquier otra enfermedad.

Para comprender qué son estos factores “metafísicos” tenemos que partir del postulado que “TODO
ES ENERGÍA”, que incluso la materia más densa es energía pura. Por lo tanto, todo lo que le sucede
a nuestro cuerpo (densidad) es una resultante de procesos o circunstancias energéticas que le
anteceden. Puesto que las emociones y los pensamientos también son una manifestación energética
que gatillan una serie de reacciones corporales inmediatas, es importante observar también cómo
ciertas experiencias vividas generaron determinadas estructuras emocionales o mentales que, a través
del tiempo, desencadenaron en un síntoma o enfermedad. Es importante recalcar que desde la
perspectiva metafísica o sico-espiritual todas las enfermedades, sin excepción, son somatizaciones
de procesos o situaciones emocionales, mentales e incluso espirituales.

A nivel físico, la tiroides es la glándula encargada de importantes funciones como regular el crecimiento,
la temperatura corporal y el consumo energético. Desde la perspectiva metafísica y energética, la
tiroides es una glándula que está regida por le chakra laríngeo, ubicado en el huequito que se forma
entre las clavículas. Este chakra se relaciona principalmente con la voluntad de expresar el amor a
si mismo a través de la expresión verbal del YO SOY. Este chakra regula toda la zona laríngea como
también la zona de la nuca, cuello, cervicales y hombros. Por lo tanto, la mayoría de las somatizaciones
que se producen en estas zonas surgen para evidenciar una incapacidad de reconocer y expresar
verbalmente las verdaderas necesidades de la persona, aunque con matices diferentes según cada
síntoma o enfermedad.

Más allá si el trastorno es el hipo o hipertiroidismo o bien, nódulos a la tiroides, la enfermedad manifiesta
el imperativo de descubrir y reconocer la necesidad de vivir la vida satisfaciendo las verdaderas
motivaciones de la persona; aquellas motivaciones que van más allá de la complacencia o el proveer
de bienestar a los seres queridos. La enfermedad manifiesta la urgencia de satisfacer aquellas
necesidades que le reporten a la persona la posibilidad de desarrollarse y ser todo aquello que desea
ser. Esta actitud exige muchas veces que la persona sea capaz de hablar desde sus necesidades o
de pedir la ayuda que sea necesaria para conseguir lo que desea. Sin embargo para muchas personas
y principalmente para muchas mujeres esta conducta no es siempre tan sencilla como parece, puesto
que detrás de la dificultad existen estructuras de pensamiento, creencias o valoraciones que la hacen
pensar que sus emociones o ideas no valen, que son tontas o que no tienen importancia. También
puede sentir que sus necesidades o deseos son egoístas, que pueden causar daño o simplemente
prefiere callar para evitar conflictos o bien, para que otros realicen sus deseos. Debido a que el
síntoma o la enfermedad aparecen para mostrarnos que algo está fuera de equilibrio, se debe recordar
que habitualmente la nueva conducta que logrará recuperar el equilibrio natural y el estado de salud,
es la que justamente más dificultad impone.

Hipotiroidismo
El hipotiroidismo es una insuficiencia en la producción de hormonas por la tiroides, y detrás de esta
somatización existe una tendencia de la persona a pensar que no tiene derecho a hacer lo que quiere,
que no es rápida en obtener lo que necesita, siente miedo de pedir ayuda o expresar sus necesidades.
Muchas veces detrás de esta conducta pasiva existe una historia donde a la persona la hicieron creer
que no era capaz de hacer grandes cosas o hacer bien las cosas por si misma. En este sentido
habitualmente también se ha desarrollado una baja autoestima, lo que dificulta aún más que la persona
exprese verbalmente sus necesidades. Para que la persona revierta esta situación se sugiere que
ante todo comprenda que más allá de la experiencia de vida que le tocó enfrentar y de la cual se
desprende su incapacidad de expresión, ésta se presentó para que ella finalmente aprenda a creer
en si misma y a demostrar su propia voluntad. Aprender a oír las necesidades y deseos internos,
expresarlos y luchar por ellos es una de las conductas que apoya la sanación de la tiroides.

Hipertiroidismo
En el caso del hipertiroidismo existe una superproducción de hormonas por lo tanto el metabolismo
de la persona es más acelerado, generándole habitualmente una hiperactividad. Es común que
personas que desarrollaron esta enfermedad estén siempre haciendo, sintiendo que todo es urgente
y que todo debe resolverse rápido, pasando por alto lo que ellas en verdad necesitan. Así como se
exigen a sí mismas exigen también al resto. Muchas veces detrás de este hacer constante existe
una búsqueda de reconocimiento, valoración o afecto por lo tanto, la persona necesita comprender,
ante todo, que las acciones que ella desarrolle tienen que ser consecuentes con sus verdaderas
necesidades, más que por “lo que se debe hacer”, pero para ello debe bajar sus revoluciones y
descubrir cuáles son sus verdaderas necesidades y motivaciones. Para favorecer la sanación de
este trastorno se sugiere que la persona sea más flexible, que se de cuenta que ella no es indispensable
y que también puede delegar. Debe aprender a priorizar su quehacer en relación a sus necesidades
y dejar de postergarlas.

Pamela Díaz Carreras

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