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Campomanes, que en su patria ha dejado fama de hombre de talento, culto y valiente, era

pequeño, moreno y de una fealdad sin paliativos, pero oyéndole hablar llegaba uno a encontrarle
hermoso. (...) Todo cedía a la incisiva ironía de su razonamiento. ¡Cuántos prejuicios ha demolido
este Voltaire español con el pico de su pluma! A él debe su país el decreto de expulsión de los
jesuitas, puesto que él descubrió al conde de Aranda todas las intrigas de esta pestífera sociedad,
mostrándole los hilos de una trama hábilmente urdida, cuya red, tendida de una punta a otra de
Europa era una amenaza constante para todos los países. Campomanes pasaba por ser el autor
de todos los panfletos anónimos que, dirigidos contra los jesuitas, inundaban las cortes de Europa
por aquella época. (...). La inquisición había jurado perderle... En efecto, cuatro años más tarde,
encerrado en las prisiones de la Inquisición, no salió hasta que no se retractó. Olavide, su amigo y
comensal nuestro, acabó peor: todos sus bienes fueron confiscados y murió en el exilio. Y el conde
de Aranda, protector de estos dos hombres, pudo escapar a los furores frailunos gracias al que el
rey, para sustraerle a la venganza de sus enemigos, le nombró embajador en París. Carlos III, que
murió loco, hizo prodigios tratándose de un rey español y de un hombre de carácter débil,
fantástico y beato.
Giacomo Casanova, Memorias

NATURALEZA DEL TEXTO: el texto es narrativo, pues se trata de una obra biográfica;
el carácter de este fragmento es político-religioso y es una obra fuente.

EXTRACCIÓN DEL TEXTO: el texto es de origen privado.

ÁMBITO HISTÓRICO: contexto nacional español, pero las ideas vertidas allí por el
autor tienen amplia difusión internacional. Época del Despotismo Ilustrado en su
máxima expresión: monarquía absoluta bajo la capa racionalista de la Ilustración, con
marcado paternalismo: a ese modelo responden o tratan de responder los reyes de la
época, desde José I de Portugal a Federico II de Prusia, pasando por el emperador José
II o Catalina la Grande de Rusia. La obra es además de carácter autobiográfico.

AUTOR: Giovanni Giacomo Casanova (1725-1798), aventurero veneciano. Expulsado


del seminario por conducta inmoral a los 16 años, fue secretario, soldado del ejército
veneciano, predicador, alquimista, jugador, violinista, director de loterías y espía;
enredado siempre en intrigas políticas, debió su fama a sus dotes de mujeriego
seductor. Encarcelado en Venecia en 1755 acusado de impiedad y magia, huyó
espectacularmente de la prisión en 1756 y viajó por toda Europa, introduciéndose en
los círculos más selectos por su ingenio y su encanto, ganándose amistades y
confianzas. Favorito en la corte de Luis XV de Francia fue amante de madame
Pompadour. Retirado en el castillo de un amigo en 1785, escribe sus Memorias, que
contiene 4 capítulos de su estancia en España.

CRONOLOGÍA, LUGAR DE REDACCIÓN Y/O PUBLICACIÓN, DESTINATARIO: la


obra se redactó a partir de 1785, en el castillo de Dux perteneciente al conde
Waldstein (Bohemia). Su obra se publicó póstumamente en 12 volúmenes abreviados
entre 1826-1838, haciéndose una edición completa en su original francés en 1960. La
obra estaba destinada al público en general.
TEXTO Y TESTIMONIO: la credibilidad del autor no es demasiada ya que el texto
presenta errores, confusiones, además de valoraciones subjetivas fruto de sus ideas
ilustradas, quizá por su experiencia carcelaria en Venecia, acusado por el Santo Oficio.
Es testigo directo.
FUENTES: testigo presencial, se informó con seguridad de otras personas y parece
que no muy bien (o quizá le fallara la memoria), ya que atribuye erróneamente al rey
Carlos III problemas psíquicos, algo de lo que sí padecieron su hermano Fernando VI y
su padre Felipe V. La mención de Voltaire nos habla de su familiaridad con las ideas de
este representante de la Ilustración del siglo XVIII (amigo de su amante la marquesa de
Pompadour, la cual -por cierto- odiaba a los jesuitas).
IDEAS BÁSICAS: Casanova apologiza la política regalista de Campomanes frente a la
Iglesia y secundariamente a políticos como Olavide, Aranda y, menos, al rey Carlos.
ACLARACIÓN O EXPLICACIÓN DE PASAJES, PALABRAS Y ALUSIONES: aparte de
la confusión arriba mencionada, hay que decir que él presenta a Aranda como ejecutor
de la expulsión de los jesuitas (1767) cuando no fue el máximo responsable; por otro
lado, Olavide no murió en el exilio sino bastante después que el propio Casanova, en
España. Por lo que se refiere a las alusiones a personajes: el rey Carlos III de España
(1759-88) sencillo, religioso y austero (no “débil”), destacó por el reformismo agrario,
industrial, comercial, urbano, cultural que dio auge al país y abrió nuevas perspectivas;
el Conde de Campomanes (1723-1803) fue ministro del Consejo de Hacienda, fiscal del
Consejo de Castilla en la época del viaje de Casanova y luego consejero y gobernador
del mismo. Con el rey Carlos IV, presidió las Cortes y fue consejero de Estado. Redactó
informes, memoriales y respuestas fiscales sobre la cuestión agraria, planteó la
promoción industrial, impulsó Sociedades Económicas de Amigos del País... además fue
un regalista anticlerical que intervino en la expulsión jesuítica. Pablo de Olavide (1725-
1802), de origen peruano y protegido del conde de Aranda, ocupó diversos cargos,
como la superintendencia de la política de colonización agrícola en Sierra Morena en
1767; perseguido por la Inquisición y condenado, huye a París, donde también sufre
persecución por los revolucionarios, lo que le llevó a dar un giro radical su vida,
escribiendo contra la descristianización. El Conde de Aranda (1719-98), quien conoció a
Voltaire y D’Alembert fue presidente del Consejo de Castilla con Carlos III (lo era en la
época de la visita de Casanova), reformista ilustrado de universidades, milicia,
cofradías, formas de vida, intenta control clerical y de la mendicidad, alienta la
participación popular en los gobiernos municipales y tuvo que ver en la expulsión de
los jesuitas. Desplazado y enviado a la embajada de París (1773-1787), siguió
intrigando; trazó planes de gobierno y previsiones clarividentes sobre Indias.
INTERPRETACIÓN: la estancia en España de Casanova parece darse entre el invierno
de 1768-9 y 1771; muy rápidamente se acerca a las grandes esferas, por ejemplo al
conde de Aranda1 “más poderoso que el mismo rey. [...] echó a los jesuitas de España.
Era temido por todos...”; “...de gran capacidad, muy activo y emprendedor...”; a Mengs
(checo, pintor del rey) y cena con Olavide y Campomanes “Enemigo de la iglesia... se
pronunciaba siempre y abiertamente contra los abusos...”. El tema central de este
fragmento es la expulsión de la Compañía de Jesús y las críticas a la Iglesia y sus
instituciones (como el Santo Oficio o Inquisición). En el caso hispánico esta política
regalista2 comenzó desde 1759 con los ataques a la inmunidad eclesiástica (limitación
de sus jueces, se restablece pase regio) y culminaron en la expulsión jesuítica
(1/04/1767), merced al Dictamen Fiscal redactado por Campomanes (fueron acusados
de instigadores del “motín de Esquilache”3, de enemigos del Rey y del sistema político,
de afán de poder y riquezas; se cuestionaba su postura doctrinal... ); el Papa Clemente
XIV disolvió la Compañía de Jesús en su bula Dominus ac Redemptor (21/07/1773),
presionado por los políticos, temerosos de la enorme influencia jesuítica. Sin embargo,
la Inquisición no se quedó quieta: Olavide fue denunciado en 1775, encarcelado en
1776 y condenado en 1778 a 8 años, destierro perpetuo, confiscación; Aranda hubo de
irse como embajador a París.
Los jesuitas, leales servidores del poder papal, destacados educadores y misioneros de
la contrarreforma, muy presentes en las cortes absolutistas donde influían en la
1
Complacido de conocer a Aranda, a quien el propio Voltaire había alabado y regalado con motivo del asunto jesuítico.
2
Derechos y prerrogativas exclusivas de los reyes, inherentes a la soberanía.
3
Esto ocurrió en 1766, contra este ministro reformista siciliano.
política, en esta época encontraron una fuerte oposición de los dirigentes de los
estados católicos al desarrollarse el regalismo y también de los otros clérigos, por su
carácter reformista; a lo que se añadía la oposición de los intelectuales ilustrados
racionalistas de gran influjo en estos dirigentes, que veían en los jesuitas sus enemigos
ideológicos pues veían a la Iglesia como esclavizadora de la inteligencia humana y la
razón y centraban la felicidad en este mundo. En el caso de la Inquisición, ésta era ya
una institución libresca y decadente, guardiana de las viejas estructuras y adversaria
de los ilustrados y lo nuevo, que se ocupaba en poner en su Índice sus obras. Muy
afectada por los reformistas: en 1770, se autorizó la impugnación pública de la tortura
judicial autorizada por el Consejo de Castilla; en 1771, bigamia y el adulterio pasan a
competencia civil; se vetó el encarcelamiento sin pruebas de herejía; en 1769-73 pasó
a competencia civil la prerrogativa de censura; en 1776 veto a las denuncias públicas
de magistrados reales sin licencia del rey...
INTERÉS Y ALCANCE DEL TEXTO: ésta es una obra de recuerdos de andanzas, pero
posee valor histórico por sus grandes descripciones de los pintorescos caracteres y
modales de la época, además de los personajes que conoció en persona.
POSIBLES ERRORES, LAGUNAS DEL TEXTO: lo antedicho.
CRÍTICA U OPINIÓN PERSONAL DEL TEXTO, DEL AUTOR Y SU OBRA: el autor
ofrece una opinión subjetiva que ilustra acerca de la época pero no goza de mucha
credibilidad dado el tipo de vida que llevaba que obviamente lo indisponía con el
estamento clerical.
BIBLIOGRAFÍA UTILIZADA:
Caso, J.M. y otros. “La Ilustración española” en Cuadernos de Historia 16, nº 44, 1985.
Domínguez Ortiz, A. Las claves del despotismo ilustrado, 1715-1789. Barcelona,
Planeta, 1990.
Domínguez Ortiz, A. Carlos III y la España de la Ilustración. Madrid, Alianza, 1988.
Escudero, J.A. “La Inquisición en España” en Cuadernos de Historia 16, nº 108, 1985.
Gicciardi, J.P. “La aventura de la Enciclopedia” en Cuadernos de Historia 16, “La
Enciclopedia”, nº 3, 1985.
Lacouture, J. Jesuitas. 2 vols. Barcelona, Paidos, 1994.
Solé, J.M. “Casanova, aventura en España” en La Aventura de la Historia, nº 18, 2000;
pgs. 76-82.
Voltes, P. Carlos III y su tiempo. Barcelona, Juventud, 1988.
www.geocities.com/estherortas/publicaciones2002.pdf

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