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Material de apoyo didáctico integrado y compilado por el INCA Rural, con la finalidad de complementar la formación del participante a
través de la lectura, análisis y discusión de los temas y contenidos de los procesos “Formación en Línea para el Desarrollo Rural”.
No expresa una posición institucional con respecto al tema.
Formación en Línea para el Desarrollo Rural
Desarrollo de Capacidades Rurales
Por otro lado, necesitamos considerar los enfoques que puedan ayudarnos a desarrollar los
aprendizajes significativos necesarios para potenciar capacidades asociadas a la
autonomía, autogestión y la participación de la población rural.
En la metodología para la formación de adultos rurales que ha desarrollado el INCA Rural tiene
un papel principal el método trabajo-aprendizaje y los enfoques constructivista y
participativo para el desarrollo de capacidades en adultos rurales. A continuación
explicaremos cada uno de ellos de manera sustantiva.
Es, en términos generales, un método para capacitar y considera las siguientes características
especiales de:
Este método propone que la capacitación con pobladores del medio rural debe ser para el
trabajo y en el trabajo. De ahí el nombre del método: Trabajo-aprendizaje.
Este método constituye un modelo flexible para la capacitación en el sector rural, ya que forma a
los capacitadores en el dominio de fundamentosmetodológicos del aprendizaje con personas
adultas, para que con esta formación posibiliten la transformación de los procesos de trabajo en
procesos aprendizaje.
La recomendación entonces para quien desea desarrollar procesos de capacitación con adultos,
es: convertir situaciones de trabajo en situaciones de aprendizaje.
Sociología. “El aprendizaje en el hombre sucede mediante la interacción social. Por ende, un
prerrequisito del aprendizaje es la significación social que tiene para el individuo que aprende”.
La recomendación es echar mano de lo que sea que le signifique algo a la gente, que sea de su
interés o por que esté presente cotidianamente en su vida o porque reviste una importancia
fundamental para su sobrevivencia.
Por ejemplo, puede tener mejor resultado diseñar un programa de capacitación derivado de un
diagnóstico de necesidades de los propios productores, que imaginarme, desde mi propia
perspectiva académica, en qué deberían capacitarse.
Un buen Formador / Facilitador deberá poner en entredicho aquello que les “ha funcionado” a
los productores y proponer cómo puede funcionarles mejor.
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Ejemplifiquemos: Existen zonas en México donde los campesinos aprendieron que el surco se
hace en dirección de la pendiente y así lo han hecho por generaciones.
Si como Formador / Facilitador / Capacitador lo que deseo es que lleven a cabo una agricultura
con las menores pérdidas en suelo y agua, tendré que mostrarles (con los medios más
adecuados), las desventajas de sembrar en dirección de la pendiente y las ventajas de hacerlo
con base en curvas de nivel y/o surcos en contorno: pueden obtener mejores cosechas, podrían
introducir cultivos intercalados, habría mayor humedad en la parcela, etc.
Pedagogía. “La capacitación, aunque se basa en principios didácticos generales, por sus
particularidades, necesita una didáctica especializada cuyo eje metodológico es el trabajo-
aprendizaje, sustentada esta concepción por el desarrollo de las ciencias antes mencionadas,
incluyendo las ciencias pedagógicas y los resultados de la práctica de los procesos de
capacitación para productores del sector rural”.
Convertir los procesos de trabajo en procesos de aprendizaje es una condición para lograr los
objetivos de aprendizaje propuestos.
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Por otro lado, debe conocer la lógica interna de los fenómenos que son tema de la capacitación,
porque están regidos por leyes que van a actuar quiera o no el capacitador. Por ejemplo, existen
variedades de café que son aptas para cultivarse bajo sombra y a dos metros de distancia entre
matas, como la variedad arábiga. Si llevamos esta misma variedad a un modelo intensivo de
producción a pleno sol con un distancia de un metro de distancia entre matas, lo más seguro es
que no obtengamos la producción esperada.
El Enfoque Constructivista3
Preguntas como ¿Qué procesos mentales intervienen para que se dé el aprendizaje en una
persona? ¿Qué elementos se asocian en los procesos de enseñanza y aprendizaje? Y ¿De qué
manera se aprende fácilmente? Dieron paso al desarrollo en los principios del siglo XX, de
teorías que intentan explicar cómo aprenden los seres humanos.
Dentro de las teorías psicológicas del aprendizaje existen dos enfoques dominantes: el enfoque
conductista y el enfoque cognoscitivista.
El constructivismo se ubica en esta última clasificación, aunque no puede verse como una solo
teoría psicológica del aprendizaje, sino como la confluencia de varios enfoques de autores como
Piaget, Ausubel, Vygotsky, Gagné y Atkinson y Shiffrin, entre otros.
De igual forma, postula que el aprendizaje se produce cuando el estudiante, como arquitecto de
su propio conocimiento, relaciona los conceptos que va a aprender y les da sentido, a partir de
los esquemas de conocimiento que ya posee. Para que el aprendizaje sea verdaderamente
significativo es necesario distinguir aquello que el estudiante es capaz de hacer por sí solo y lo
que es capaz de aprender con la ayuda de otras personas.
La actividad mental constructiva del estudiante se aplica a contenidos que ya han sido
elaborados (mediación social), es decir, son el resultado de ciertos procesos de
construcción en el ámbito social (saberes y formas culturales). Un ejemplo de lo
anteriormente dicho lo representa la escritura.
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Síntesis elaborada de: Ma. del Carmen E. Gil Rivera. “Aportaciones de las teorías psicológicas del aprendizaje a la
educación abierta y a distancia”. INCA Rural.
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Los adultos rurales deciden si aprenden o no. De ahí que un Formador / Facilitador /
Capacitador debe contemplar aquellos contenidos que les sean significativos y de
interés para atraer su atención y lograr que su cerebro piense intensa y sostenidamente
o la circunstancia que generar una problemática que se desea transformar.
El Enfoque Participativo
Ello implica el reconocimiento de que la gente de la comunidad es la que sabe y conoce cómo
está su situación y qué puede hacer para cambiar las cosas que no le gustan y que les impiden
vivir mejor. La gente local sabe con qué recursos cuenta y, sobre todo, si los usa o no en el
diseño de una eventual estrategia de mejoramiento de sus condiciones de vida.
Para ello, quienes se propongan como agentes externos tienen que saber escuchar a la gente
local, aprender de ella y trabajar con ella como mediadores.
La gente local conoce su situación mucho mejor que los agentes externos. Por tanto, son
ellos los que deben conducir el proceso de desarrollo.
Las personas tienen derecho a analizar su situación, pensar y planificar un futuro mejor,
implementar la acción y evaluar sus resultados.
Hay que respetar la diversidad. Gente diferente (de distinta clase económica, de distinto
grupo social, etc.) tiene ideas diferentes, necesidades diferentes y deseos diferentes.
Los agentes externos deben respetarlos y escuchar a todo el mundo para
conocer la realidad.
Escuchar a las personas de la localidad, aprender de ellas y apoyarlas en la toma de
decisiones.
Respetar el conocimiento y las prácticas indígenas. Aprender de ellos.
El proceso de desarrollo debe ser simple y entretenido, para que incluso los analfabetos
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Conclusiones
Para concluir diremos entonces que el desarrollo del que aquí hablamos tiene en su centro a los
seres humanos, a la gente que habita los pueblos y comunidades rurales del país y que requiere
fortalecer sus capacidades para trasformar su realidad hacia mejores condiciones de vida.
Los enfoques que refuerzan este método son el constructivista y el participativo. El primero se
deriva de las teorías psicológicas del aprendizaje como el enfoque psicogenético Piagetiano, la
teoría de la asimilación y el aprendizaje significativo de Ausubel, la Zona de Desarrollo próximo
de Vygotsky, la memoria y el procesamiento de la información de Robert Gagné y Atkinson y
Shiffrin, entre otras corrientes.