LAGUNAS URBANA EN CONCEPCIÓN COMO OPORTUNIDADES DE VALORIZACIÓN DE LA

IDENTIDAD Y CALIDAD DE VIDA: DESAFIOS PARA LA GESTIÓN COMUNAL.

La valoración que las personas hacen de los elementos naturales se va modificando

en relación a los momentos socioculturales, y en especial al conocimiento que acerca
de ellos se tiene. Así, lagunas y pajonales pasan de ser reconocidos como lugares
infecciosos y focos insalubres a ser apreciados como elementos de identidad y
valoración de un territorio. El rol que una comunidad asigne a dichos elementos
determina las formas en que éstos son segregados y abandonados, o integrados y
preservados.

La ciudad de Concepción se caracteriza por un entorno natural constituido por

elementos muy reconocibles, dentro de los cuales, y por encontrarse inmersos en la
trama urbana, las lagunas constituyen los elementos naturales más próximos a la
experiencia cotidiana de sus habitantes. Esta relación de proximidad ha determinado
tanto la degradación de los cuerpos de agua como el interés por su recuperación e
integración al paisaje urbano.

Ya el Plan Regulador del año 1962 establecía como uno de sus principales objetivos
“la conquista y preservación del paisaje natural de Concepción”. A 20 años de su
aplicación, se comprobó que este objetivo no había sido alcanzado. La política
urbana de los años 80, caracterizada por la liberalización del mercado de suelo,
produjo instrumentos de planificación territorial carentes de visión en lo referido a la
conservación del paisaje y los recursos naturales. No obstante lo anterior, a fines de
esta década, y ante el evidente estado de deterioro de las lagunas y sus áreas
circundantes, el municipio emprende diversos proyectos de recuperación mediante la
construcción de áreas verdes en torno a éstas, con lo cual se generan condiciones de
acceso a la comunidad, incentivando, así, el interés por su conservación e
integración a la vida urbana. Si bien dichos proyectos tuvieron efectos puntuales,
esto no es suficiente para una mejora substancial en el estado de los cuerpos de
agua.

El plan Regulador aprobado el año 2004 asume la situación de deterioro de las

lagunas y propone, tanto medidas de conservación, como de integración de éstas a la
trama urbana, bajo la premisa que su valoración como elemento del paisaje
incentiva prácticas tendientes a su protección. Los lineamientos que establece dicho
plan, requieren de un programa de acciones concretas que promuevan su concreción.
Dicho programa deberá basarse, tanto en conocimientos científicos acerca de la
problemática ambiental, como en el discernimiento de la realidad sociocultural que
determina las posibilidades de aplicación del plan.

Esta convocatoria nos reúne para reflexionar acerca del problema actual de deterioro
de las lagunas urbanas así como de los caminos que conduzcan a su rehabilitación.
Para esto, es fundamental definir el objetivo de su recuperación como recursos
naturales, así como su futuro rol en la ciudad. De esta manera, un plan de
rehabilitación deberá asumir aspectos determinantes de su aplicación, tales como el
régimen de la propiedad de los terrenos que circundan las lagunas, la creciente
valoración de estos terrenos, fundada precisamente en la existencia de elementos
del paisaje natural, la demanda de bienes urbanos relacionados con el esparcimiento
y la recreación, el instrumentario de la planificación territorial y urbana, etc. Esta
articulación de principios de conservación ambiental y desarrollo urbano será clave
para una aplicación exitosa del plan de rehabilitación, lo cual se verá reflejado tanto
en el buen estado de salud ambiental de los cuerpos de agua, como en su integración
como elementos valorizadores de la calidad vida en nuestra ciudad.