ANÁLISIS CRÍTICO

TEMA: TRASTORNOS DE LA PERSONALIDAD

La personalidad, desde una perspectiva sistémica, puede definirse como la dimensión del individuo
de su experiencia relacional que ha sido acumulada por diversos factores, es decir, los diversos
factores a los que ha estado expuesto el individuo han influido para la formación de aquello que lo
identifica, a lo cual se llama personalidad, es individual porque hace referencia al concepto
individual de cada persona, asimismo es una experiencia relacional porque las personas son
moldeadas al estar expuestos en su relación con los demás, de la misma forma es una experiencia
pasada y presente, ya que las experiencias pasadas han influenciado definiendo ciertos patrones,
sin embargo, como el ser humano sigue experimentando a lo largo de su vida, es posible volver a
reescribir el pasado, es decir, modificar algunos patrones establecidos en el pasado. De la misma
forma la personalidad también tiene su componente biológico, ya que la genética probablemente es
la encargada de transmitir ciertas predisposiciones o inclinaciones a desarrollar determinados
rasgos de personalidad de una generación a otra, de igual forma el contexto cultural cumple un rol,
igualmente, influyente en la definición de ciertos patrones que caracterizan a las personas. Sin
embargo, de todos estos factores el más importante e influyente es el aspecto relacional, es decir:
social y familiar en el cual se va a desarrollar el individuo, mayormente el entorno familiar, las
relaciones familiares, la funcionalidad o la disfuncionalidad familiar cumple un rol preponderante en
la formación de la personalidad de los seres humanos, un niño necesita satisfacer distintas
necesidades en su entorno familiar, pero la necesidad relacional, es decir, el trato, afecto o cariño
que reciba por parte de su grupo familiar es importante, pero no solo necesita de afecto, también
es importante que al niño lo reconozcan como un individuo independiente, reconocerlos y
valorarlos apropiadamente, los niños necesitan satisfacer no solo su necesidad afectiva, sino
también emocional; estas experiencias que va almacenando el niño van formando en el niño una
percepción acerca de su entorno y también de sí mismo, va creando historias, las cuales van
formando su identidad. Las familias disfuncionales van influir negativamente en la formación de la
personalidad del niño, al no existir una nutrición relacional plena o adecuada en el entorno familiar,
la parentalidad primaria se encontrará deteriorada. En el pasado la psiquiatría alemana y Nazi
definía a la personalidad de tal forma que se veía evidenciada en las producciones de películas
tales como “M el vampiro Dusseldorf”, en donde se ve reflejada la psicopatía; en Estados Unidos,
por los años 30 igualmente lo representaban con la sociopatía de Al Capone; además del trastorno
borderline, que posteriormente se convirtió en el trastorno límite de la personalidad, y era
interpretado por Marlon Brando, James Dean, entre otros. En la actualidad, la psiquiatría moderna,
la American Psychiatric Association (APA) ha creado una serie de manuales que definen y
distinguen a los diferentes trastornos de la personalidad, por ejemplo, según el DSM-IV-TR, en el
Eje II, distingue 3 grupos, de los cuales en el Grupo A se encuentra el Trastorno Paranoide,
Trastorno Esquizoide, y Trastorno Esquizotípico; en el Grupo B encontramos al Trastorno
Antisocial, Trastorno Límite, Trastorno Histriónico y Trastorno Narcisista; finalmente en el Grupo C
se encuentra el Trastorno por Evitación, Trastorno por Dependencia y el Trastorno Obsesivo
Compulsivo, de las cuales el Grupo a representa a las Psicosis, el Grupo B a las psicopatías y el
Grupo C a las neurosis.

REFERENCIA
 Linares, J.L. (2007). La personalidad y sus trastornos desde una perspectiva sistémica.
Clínica y Salud, vol. 18 n° 3 pp. 381-399.