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REV ESP PATOL 2002; Vol 35, n.

º 2: 187-200

Enfermedad trofoblástica gestacional


Aspectos clínicos y morfológicos
José María Ezpeleta1, Alfredo López Cousillas2
1 Servicio de Obstetricia y Ginecología. 2 Servicio de Anatomía Patológica. Hospital Universitario Virgen del Camino, Pamplona.

RESUMEN

La enfermedad trofoblástica gestacional agrupa a diferentes entidades interrelacionadas:


mola completa, generalmente diploide con origen cromosómico paterno, mola parcial general-
mente triploide, tumor trofoblástico del lecho placentario y coriocarcinoma, con tendencias varia-
bles a la invasión local y a las metástasis, cuyo denominador común es la hipersecreción de
hCG. El coriocarcinoma es diploide y proviene de ambos progenitores, excluyendo probable-
mente su origen directo en la mola completa. El tumor trofoblástico del lecho placentario está
constituido por trofoblasto mononuclear intermedio no conteniendo vellosidades coriónicas e
inmunohistoquimicamente caracterizado por expresar muchas de sus células hPL y unas pocas
hCG. En el artículo, desarrollamos una revisión y actualización de aspectos clínicos y morfoló-
gicos de la enfermedad trofoblástica gestacional.

Palabras clave: Enfermedad trofoblástica gestacional. Tumores trofoblásticos gestacio-


nales.

Gestational Trophoblastic Diseases


Clinic and Morphologic Data

SUMMARY

Gestational trophoblastic diseases includes a group of interrelated entities: complete mole,


generally diploid and from paternal chromosomes origin, partial mole generally triploid, pla-
cental-site trophoblastic tumor, and choriocarcinoma, that have varying propensities for local
invasion and metastasis, with a common denominator which is a hypersecretion of hCG. The
choriocarcinoma is diploid and its genetics material comes from both parents, this probably
excludes a direct filiation between complete mole and choriocarcinoma. The placental-site
trophoblastic tumor is composed almost entirely of mononuclear intermediate trophoblast and
does not contain chorionic villi, and immunohistochemical staining reveals many hPL-produ-
cing cells, and few hCG-producing ones. This report will review and update main clinical and
morphologic data of the gestational trophoblastic diseases.

Key words: Gestational trophoblastic diseases. Gestational trophoblastic tumors.

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coriónica (hCG), que constituye un marcador


tumoral sensible que se correlaciona bien con la
progresión y persistencia de la enfermedad,
excepto el TSP que produce lactógeno placenta-
rio (hPL) (2), con tendencias variables a la inva-
sión local y a las metástasis y se encuentra entre
las raras enfermedades que se pueden curar,
incluso en casos de extensa diseminación (3).
La mola hidatiforme es un producto de la con-
cepción que se caracteriza por una hiperplasia
trofoblástica y por la tumefacción edematosa de
Fig. 1: La principal característica de la mola completa es las vellosidades coriónicas, cuyo diámetro oscila
la degeneración hidrópica de la mayoría de las vellosida- entre 0,1 y 3 cm, adquiriendo la morfología de
des y la proliferación del trofoblasto, que puede ser lla- bandas y cúmulos de vesículas, que confieren el
mativa o mínima según cada caso. (H.E., Neg. X 40).
típico aspecto de «racimos de uvas».
La variedad de mola hidatiforme más fácil-
Se conoce con el nombre de enfermedad tro- mente identificable es la completa o clásica, en la
foblástica gestacional (ETG) a un conjunto de pro- que falta el feto y donde todas las vellosidades
cesos benignos y malignos poco habituales, deri- presentan degeneración hidrópica (fig. 1) y son
vados de una proliferación anormal del trofoblasto avasculares aunque puede observarse algún
de la placenta humana (hiperplasia) y del genoma vaso degenerado, siendo notable la hiperplasia
paterno, con una contribución materna ocasional; del citotroblasto y del sincitiotrofoblasto (4). Se
incluye la mola hidatiforme completa invasiva o no, suele identificar precozmente por un patrón eco-
la mola parcial y los tumores trofoblásticos gesta- gráfico característico, descrito hace muchos
cionales, coriocarcinoma y tumor del lecho o sitio años (5).
placentario (TSP) (1). Es extremadamente raro El segundo tipo de mola hidatiforme, la par-
hallar trastornos similares en otras especies dife- cial, presenta al mismo tiempo características de
rentes a la humana. Estas enfermedades se con- una placenta de desarrollo normal y de una mola
sideran peculiares, ya que el producto de la con- hidatiforme completa, con una gama de vellosi-
cepción a partir del cual se originan, es genética- dades desde normales a quísticas (fig. 2), mien-
mente extraño al anfitrión materno. tras que la hiperplasia trofoblástica es sólo focal
La ETG representa un espectro único de y por lo general afecta a la capa sincitiotrofoblás-
patologías interrelacionadas con el denominador tica y se asocia con el festoneado del contorno
común de una hipersecrección de gonadotropina de las vellosidades (fig. 3) y la presencia de

Fig. 2: La mola parcial tiene dos poblaciones de vellosi- Fig. 3: En la mola parcial son frecuentes las vellosidades
dades coriales: unas son de tamaño normal y otras son con contornos festoneados y al menos algunas vellosi-
marcadamente hidrópicas. (H.E., Neg. X 40). dades contienen cisternas centrales. (H.E., Neg. X 40).

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inclusiones trofoblásticas en el estroma (6). En en algunos casos, no era importante según ellos.
algunos casos de mola hidatiforme parcial está En actualidad se acepta que la hiperplasia es un
presente el feto, pero su desarrollo es casi siem- elemento esencial para establecer el diagnóstico
pre anormal, y aunque en la mayoría de los anatomopatológico de mola hidatiforme (10).
casos el feto no está presente, puede deducirse Los autores ya mencionados, pudieron com-
la existencia de desarrollo fetal por la demostra- probar que las molas hidatiformes completas
ción de hematíes nucleados en los vasos san- eran diploides y las parciales, generalmente tri-
guíneos de las vellosidades, es decir fetales (7). ploides (8,9). La definición anatomopatológica y
El carácter propio de la mola hidatiforme par- genética de estas dos entidades de mola hidati-
cial se confirmó por los estudios sobre la consti- forme fue confirmada más tarde por otros auto-
tución genética, generalmente triploide, o aneu- res (11,12) (tabla I).
ploide con trisomía para un cromosoma, sugi- Los tumores trofoblásticos gestacionales,
riendo que las molas hidatiformes comprendían también llamados ETG persistente (ETGP), ocu-
dos entidades diferentes no solo anatomopatoló- rren tras la evacuación o el fin de la gestación y
gicamente, sino también desde un punto de vis- pueden proceder, no sólo de la mola hidatiforme,
ta genético (8,9). Dicho estudio, definió las molas sino después de cualquier suceso gestacional,
hidatiformes parciales, como aquellos productos incluido abortos, terapéuticos o espontáneos,
de las concepción en los que existía un feto, cor- gestaciones ectópicas y embarazos a término.
dón o membranas amnióticas con vellosidades El término tumor trofoblástico gestacional,
normales e hidrópicas; la hiperplasia, presente comprende la mola invasiva y los tumores malig-

Tabla I. Características diferenciales entre mola completa y mola parcial

Mola parcial Mola completa

Ploidía Triploide 69,XXY.69,XXX.69XYY. Diploide 46,XX. 46,XY

Origen Paterno y materno Paterno

Embrión/feto Presente (datos directos o indirectos) Ausente


muerte precoz

Carácter Notable festoneado que aumenta con Contorno redondo u ovoide, retraso
la fibrosis de las vellosidades, no hay de la maduración, necrosis irregular
necrosis celular mesenquimal. de las células mesenquimales durante
la formación de las cisternas.

Tumefacción hidrópica Netamente focal, menos pronunciada Pronunciada; todas las vellosidades se
y lenta en su evolución. afectan precozmente en la evolución molar

Vascularización Ccapilares persistentes y funcionantes Capilares formados «in situ» exangües


Vellosidades. que tienden a desaparecer tardíamente que desaparecen al formarse las cisternas.
de las paredes de las cisternas; a
menudo eritroblastos fetales (nucleados).

Trofoblasto Inmaduro y focal; hiperplasia leve a Importante hiperplasia del citotrofoblasto


moderada, principalmente sincitial. y sincitial de distribución irregular

Ecografía Aumento del tamaño placentario con Imagen en «panal de abejas» o en


espacios quísticos; cambios vasculares «nevada».
focales; saco gestacional aumentado

Secuelas malignas <10% 15-20%

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unos 100 casos en el mundo y la mortalidad esti-


mada oscila entre un 15 y un 20% (16). En 1995
se describieron dos casos en España, en mujeres
de 25 y 27 años que manifestaron la enfermedad
con hemorragia genital persistente, con antece-
dentes en ambos casos de abortos previos 3 años
antes (17). Se ha descrito la eritrocitosis como
patología asociada al tumor, resolviéndose la poli-
citemia tras la histerectomía (18).
Recientemente se ha publicado el caso de una
paciente con prolongada remisión (19) tras metás-
Fig. 4: El coriocarcinoma es un tumor maligno compues- tasis consecuentes a tumor del lecho placentario
to de trofoblasto y que carece de vellosidades coriales. tratada con quimioterapia. También recientemente
(H.E., Neg. X 100).
se ha expuesto la experiencia de 7 casos de TSP,
3 de los cuales fueron tratados con histerectomía
nos coriocarcinoma y tumor trofoblástico del por tumor confinado al útero, 2 evolucionan satis-
lecho o sitio placentario e incluye a procesos con factoriamente y continúan con quimioterapia por
secreción anormalmente elevada y prolongada sus metástasis pulmonares y 2 han fallecido por
de hCG más de 6 semanas después del suceso enfermedad metastásica a pesar de la terapia
gestacional. Esta secreción es independiente de (20). El TSP es de lenta progresión.
la naturaleza del trofoblasto, que puede ser mal- El TSP se origina a partir del trofoblasto del
formativo y de crecimiento limitado en las molas lugar de implantación de la placenta y está cons-
parciales y completas o neoplásico, de creci- tituido por trofoblasto intermedio (21), principal-
miento ilimitado y rápido en el coriocarcinoma o mente por citotrofoblasto mononuclear, con muy
lento en el TSP. escasas células sincitiotrofoblásticas plurinuclea-
En la mola invasiva se produce la invasión del das; la casi total ausencia de sincitiotrofoblasto
miometrio o de sus vasos sanguíneos por células caracteriza a dicho tumor y lo diferencia del
del citotrofoblasto y del sincitiotrofoblasto; este coriocarcinoma. Tiene tendencia a formar nódu-
proceso se distingue morfológicamente por las los generalmente múltiples, e infiltra la decidua,
persistencia de las vellosidades placentarias, que el miometrio y las arteriolas espirales. La inmu-
no se observan en el coriocarcinoma ni en el TSP. nohistoquímica demuestra gran cantidad de
El coriocarcinoma en la proliferación atípica células productoras de hPL y unas pocas células
del trofoblasto (fig. 4), comprende tanto al cito- productoras de hCG (22).
trofoblasto como al sincitiotrofoblasto, sin pre- Desde el punto de vista genético puede pro-
sencia de estroma; es típico que la lesión esté ceder tanto de un producto de la concepción nor-
formada por un área central de tejido necrótico, mal, como de una mola hidatiforme o aborto (23).
rodeada por un anillo periférico de tejido tumoral La enfermedad trofoblástica gestacional per-
(13). No se puede deducir la clase de gestación sistente, puede metastatizar más allá del cuerpo
previa a partir de las características histopatoló- uterino, originando el estadio de la enfermedad
gicas; sin embargo la naturaleza de dicha gesta- denominado ETG metastásica o tumor trofoblás-
ción previa es importante en la consideración de tico metastásico (10). Es conveniente recordar
la genética del coriocarcinoma. que en el embarazo normal se produce, a veces,
El tumor trofoblástico del lecho placentario fue cierto grado de embolia trofoblástica a los pul-
descrito en 1976 como un pseudotumor no neo- mones, aunque es excepcional el transporte de
plásico, pero posteriormente se definió anatomo- vellosidades completas (3) (fig. 5).
patológicamente como entidad propia (14), y se El diagnóstico de la ETG es esencialmente
determinó su potencial maligno, al observarse que anatomopatológico, aunque en ciertos casos es
algunas pacientes desarrollaban metástasis y apoyado por técnicas citogenéticas, por la citome-
fallecían por la enfermedad (15); se han descrito tría de flujo y la utilización de sondas moleculares.

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Historia Obstétrica ETG

Concepción Gestación

Resultado ectópico aborto parto

No molar MOLA HIDATIFORME No molar

Destino del trofoblasto Resolución PERSISTENCIA Resolución


velloso (o del lecho
placentario)

Tumor trofoblástico MOLA INVASIVA CORIOCARCINOMA


gestacional

METÁSTASIS

TUMOR D EL LECHO PLACENTARIO

Fig. 5: Evolución de los productos de la concepción en la ETG.

Desde el punto de vista clínico, la ETG agrupa diagnóstico precoz de la enfermedad, la pree-
entidades malignas como el coriocarcinoma y el clampsia, que se debe sospechar cuando es de
tumor del lecho placentario y otras, cuya caracte- aparición muy precoz en las molas parciales, el
rística clínica es el riesgo de complicaciones hipertiroidismo asociado, que es muy poco fre-
hemorrágicas, como es el caso de algunas molas cuente pero que si se sospecha debe ser tratado
completas (invasivas), o las raras hiperplasias previamente a la evacuación de la gestación molar,
trofoblásticas que complican a veces las molas ya que se puede desencadenar una crisis tiroidea,
parciales; otras son benignas como la mayoría de y la insuficiencia respiratoria aguda, de aparición
las molas parciales y las molas completas. La esporádica pero grave, consecuente con la emboli-
hemorragia genital es el síntoma más frecuente zación trofoblástica de los vasos pulmonares.
en las pacientes con mola completa, y se debe a En la exploración se puede encontrar: aumento
la separación del tejido molar de la pared uterina. del tamaño uterino causado tanto por el volumen
En general, el cuadro clínico inicial, tiene sínto- del tejido coriónico, como por la existencia de coá-
mas y signos de la amenaza de aborto y en oca- gulos retenidos dentro de la cavidad, y se correla-
siones, el diagnóstico sólo se realiza tras el estu- ciona bien con los niveles de hCG; la tercera parte
dio histológico del material de un aborto, y aun- de las pacientes con mola completa asocian masa
que el diagnóstico, hoy en día, es mucho más anexial, a veces superior a 6 cm de diámetro, son
precoz, el riesgo de desarrollo de enfermedad los quistes tecaluteínicos, generalmente bilaterales
trofoblástica persistente permanece invariable. y multiloculares que se atribuyen a altos niveles de
Otros signos o patologías asociados son: la hCG (superiores a 100.000 mUI/ml) y suelen desa-
hiperemesis gravídica, de baja frecuencia por el parecer espontáneamente tras la evacuación de la

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mola, a los 2-3 meses, pudiendo requerir trata- Se han realizado múltiples clasificaciones de
miento si se asocian con hemorragia y/o dolor agu- las enfermedades trofoblásticas. En 1980 Surwit
do por rotura o torsión. y Hammond propusieron desde el punto de vista
Las exploraciones complementarias se basan clínico, pronóstico y terapéutico la de Enferme-
en la ecografía y en los niveles de hCG, siendo dad Trofoblástica:
desde el punto de vista clínico más útil la subu- • De evolución benigna:
nidad β (la subunidad α es similar a las subuni- – mola hidatídica.
dades α de la LH, FSH y TSH). En la gestación • De evolución maligna:
normal el pico de hCG ocurre entre la semana 9 – mola invasora o corioadenoma des-
y la 14 de la gestación, por lo que una persisten- truens.
cia más prolongada sugiere una gestación molar. – coriocarcinoma
La mola parcial, que representa entre un 10- * no metastásica
20% de las molas hidatiformes, suele manifes- * metastásica
tarse en la clínica más tardíamente que la mola - de buen pronóstico
completa, y lo hace a finales del primer trimestre - de mal pronóstico
o a lo largo del segundo, como una amenaza de En 1979 la Sociedad Internacional para el
aborto. El útero suele corresponder o ser menor estudio de las Neoplasias Trofoblásticas, propu-
que el tiempo de amenorrea, siendo similares so la clasificación en estadios clínicos, aceptada
pero menos frecuentes los síntomas asociados. por la OMS, la FIGO y la SEGO y diferenció:
Casi todas se presentan con un embrión muerto • Mola o embarazo molar, con bajo o alto riesgo
al final del primer trimestre. La situación de feto • Enfermedad trofoblástica persistente
vivo con ecografía sugestiva de mola, es com- (ETGP) con los estadios I-IV dependiendo
pleja por las alteraciones cromosómicas de estos de la extensión de la lesión y de que sea:
fetos; se debe realizar el diagnóstico diferencial con o sin metástasis y de alto o bajo riesgo
con el aborto, el embarazo ectópico, la gestación La clasificación de la ETG preconizada por la
múltiple y el hidramnios; el diagnóstico anatomo- OMS (10) y que es ampliamente aceptada, se
patológico del legrado es definitivo. basa fundamentalmente en criterios macroscópi-
La primera descripción «exacta» de mola cos tradicionales: vellosidades hidrópicas con o
hidatiforme es del médico español Cristóbal de sin embrión y tumor sin vellosidades y lesiones
Vega en el año 1564 (24). diversas.
En 1839 Cruveilhier describe la mola parcial y • Mola hidatiforme completa o parcial.
Saenger en 1889 hace la primera clasificación de • Mola hidatiforme invasiva.
conjunto, distinguiendo tres tipos de neoplasias: • Coriocarcinoma.
sarcoma decidual o deciduocelular sin participación • Tumor trofoblástico del lecho placentario.
visible de los elementos coriales, sarcoma deciduo- • Lesiones trofoblásticas diversas.
celular con participación de elementos coriales, y – Reacción exagerada del lecho placen-
formas intersticiales destructivas, cada una de ellas tario.
con sus correspondientes subclasificaciones. – Nódulos y placas del lecho placentario (27).
Marchand en 1895 impulsa y establece tres • Lesiones trofoblásticas no clasificadas.
grupos de enfermedades trofoblásticas, afirman- También se acepta desde el punto de vista
do taxativamente que la mola no es un tumor: anatomopatológico la clasificación (1):
mola vesicular o hidatiforme, mola destruens y • Tumores que forman vellosidades: Mola
corioepitelioma. parcial o completa.
Hertig y cols. describen en 1956 un continuo • Tumores sin vellosidades: endometritis sin-
evolutivo, comenzando por la mola parcial, citial, tumores del sitio placentario y corio-
pasando a mola completa y a mola invasiva y ter- carcinomas.
minando en coriocarcinoma (25). La utilización del cariotipo, la citometría de flu-
En 1977 Kajii y cols. determinaron el origen jo y la biología molecular, permiten también una
paterno de la mola completa (26). clasificación citogenética (28):

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• Con origen en trofoblasto perivellositario • Estadio III. Enfermedad trofoblástica gestacio-


– Hiperplasia trofoblástica con triploidía, nal que se extiende hasta los pulmones, con o
tetraploidía o aneuploidía. sin afectación de vías genitales conocida.
– Mola hidatiforme completa (invasiva o – IIIa. sin factores de riesgo.
no). – IIIb. con un factor de riesgo.
– Coriocarcinoma gestacional. – IIIc. con dos factores de riesgo.
• Con origen en el lecho placentario. • Estadio IV. Todos los otros sitios de metás-
– Carcinoma trofoblástico del lecho placen- tasis.
tario. – IVa. sin factores de riesgo.
Básicamente la ETG se ha dividido en mola – IVb. con un factor de riesgo.
hidatiforme y en tumores trofoblásticos gestacio- – IVc. con dos factores de riesgo.
nales (29). Los factores de riesgo que afectan al estadia-
Clasificación de Enfermedad Trofoblástica je son:
Gestacional según el Colegio Americano de Obs- HCG >100.000 mU/ml y duración de la enfer-
tetras y Ginecólogos: medad mayor de 6 meses a partir de la termina-
• Mola Hidatiforme ción del embarazo precedente. Deben conside-
– Completa rarse los siguientes factores de seguimiento y
– Parcial pronóstico y anotarse en el historial clínico en
• Tumores Trofoblásticos Gestacionales caso positivo: se administró quimioterapia previa
– No metastásicos por tumor trofoblástico gestacional diagnostica-
– Metastásicos do; deben informarse por separado los tumores
* Bajo riesgo sin factores de riesgo. del sitio placentario; no se requiere verificación
* Alto riesgo algún factor de riesgo. histológica de la enfermedad.
- Niveles de hCG previos al tratamien- El estadiaje permite la comparación objetiva de
to > 40000 mU/mL los datos estadísticos sobre resultados aportados
- Duración > 4 meses por los distintos autores en sus publicaciones.
- Metástasis en hígado o cerebro • Estadio I. Pacientes con concentraciones de
- Fracaso de tratamiento quimiterápico hCG persistentemente elevadas y tumor
previo confinado al cuerpo uterino
- Antecedente de embarazo a término. • Estadio II. Pacientes con metástasis hacia
El término de neoplasia trofoblástica gestacio- vagina, pelvis o ambas.
nal no es muy empleado, porque la mola invasi- • Estadio III. Pacientes con metástasis pulmo-
va no supone la formación de tejido nuevo de nares con afección uterina, vaginal o pélvica
carácter tumoral (30). o sin ella. (El diagnóstico se basa en la con-
Desde el punto de vista clínico es importante centración creciente de la hCG en presen-
el estadiaje de los tumores trofoblásticos gesta- cia de lesiones pulmonares en las radiogra-
cionales propuesta por la Federación Internacio- fías u otras técnicas de imagen).
nal de Ginecología y Obstetricia (FIGO): • Estadio IV. Pacientes con enfermedad avan-
• Estadio I. Enfermedad confinada al útero. zada y afección de cerebro, hígado, riñón o
– Ia. sin factores de riesgo tubo digestivo. Estas pacientes se encuen-
– Ib. con un factor de riesgo. tran en la categoría de peor riesgo, porque
– Ic. con dos factores de riesgo. en ellas el tumor será casi seguramente
• Estadio II. Tumor trofoblástico gestacional resistente a la quimioterapia. Suele encon-
que se extiende fuera del útero, pero que se trarse el patrón histológico del coriocarcino-
limita a los elementos genitales (anejos, ma, y a menudo la enfermedad surge des-
vagina, ligamentos anchos). pués de un embarazo no molar.
– IIa. sin factores de riesgo. Además de la clasificación basada en el esta-
– IIb. con un factor de riesgo. diaje, es importante considerar variables para
– IIc. con dos factores de riesgo. pronosticar la probabilidad de resistencia farma-

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cológica y ayudar a seleccionar la quimioterapia la inmunogenicidad del tumor trofoblástico. Sin


apropiada. La OMS ha propuesto un sistema de embargo la histocompatibilidad entre la paciente
puntuación pronóstica que permite predecir, con y su pareja no es un requisito previo para el
toda confianza el potencial de que ocurra resis- desarrollo y progresión de la ETG persistente.
tencia a la quimioterapia. Las pacientes con Por otra parte el sistema HLA influye en la evolu-
enfermedad en estadio I suelen tener una pun- ción progresiva y fatal de los tumores trofoblásti-
tuación de bajo riesgo y lógicamente las pacien- cos gestacionales. Se ha comunicado (33) que la
tes en estadio IV tienen una puntuación de alto resistencia a la quimioterapia en coriocarcinoma
riesgo, por lo que se aplica fundamentalmente a se asocia a incrementos en la histocompatibili-
pacientes en estadios II y III. dad entre la paciente y su pareja. De forma simi-
Este tipo de clasificaciones por etapas posibi- lar se ha observado que la histocompatibilidad
lita protocolizar el tratamiento de los tumores tro- entre la paciente y su pareja va asociada a un
foblásticos gestacionales persistentes. grave riesgo de metástasis en tumores trofoblás-
Las destacadas posibilidades curativas de la ticos (34). La mola completa tiene cromosomas
ETG, incluso en presencia de metástasis amplias sólo de origen paterno, induciendo una intensa
pueden ser parcialmente atribuidas a la respuesta respuesta inmunológica de la madre. Compara-
inmunológica, de la madre portadora, a los antí- do con placentas normales, la mola completa tie-
genos paternos expresados en las células trofo- ne cinco veces más infiltración de células T (35).
blásticas (3). El pronóstico de pacientes con corio- En los inmunocomplejos circulantes, en pacien-
carcinoma gestacional es mejor si se evidencia la tes con mola completa, ha sido establecido el
infiltración de linfocitos y monocitos en el límite contenido de antígeno HLA paterno (36). La
entre el tumor y el tejido materno (31), porque los madre con mola completa está por tanto, sensi-
linfocitos y macrófagos que infiltran el coriocarci- bilizada a los antígenos paternos HLA A, B, C. La
noma gestacional son probablemente expresión distribución de antígenos HLA en las vellosida-
de las oncoproteínas y antígenos paternos, muy des coriónicas de la mola ha sido determinada
activadores de las células inmunitarias. por inmunofluorescencia. Los antígenos HLA A,
La ETG constituye una situación única de B, C, han sido detectados en las células del
tumor humano naturalmente injertado parásito estroma de las vellosidades coriónicas de la
de la madre. Como aloinjerto el tejido trofoblásti- mola, pero no en el trofoblasto velloso.
co con constitución antigénica diferente a la La madre puede ser sensibilizada por los antí-
madre, puede ser rechazado espontáneamente, genos paternos HLA, cuando el trofoblasto vello-
pero también se adapta, prolifera y constituye un so es alterado, y células del estroma velloso HLA
tumor invasivo. Las células inmunológicas acti- positivas son liberadas en la circulación materna.
vas promueven la regresión de los tumores trofo- Algunas mujeres con cierto desequilibrio
blásticos gestacionales a través de la liberación genómico podrían tener una predisposición
de citocinas. Está bien documentado que las constitucional para la ETG. Se han descrito
citocinas inhiben la proliferación de células de casos de enfermedad trofoblástica en mujeres
coriocarcinoma, in vitro y del incremento de la con mosaico trisómico (37).
expresión de HLA en las mismas células, tam- Las técnicas de estudio utilizadas son múlti-
bién in vitro, incrementando de esa manera la ples (38). El análisis citogenético en metafase
inmunogenicidad (32). permite estudiar la ploidía del ADN por citometría
Se ha preconizado que el desarrollo y progre- de flujo, y el origen genético por análisis de los
sión de la ETG persistente podría estar favoreci- polimorfismos cromosómicos y enzimáticos y de
da por la histocompatibilidad de la paciente y su la longitud de los fragmentos de restricción en
pareja. Si la paciente y su pareja son histocom- molas y tejidos de los progenitores con PCR.
patibles, el tumor trofoblástico que contiene antí- La citometría de flujo detecta variaciones de
genos paternos puede no ser inmunogénico para ploidía entre el 4 y el 10%, variaciones más débi-
la madre portadora. La intensidad de la respues- les no son detectadas por este método. La hibri-
ta inmunológica en la portadora se relaciona con dación «in situ» en interfase explora igualmente

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la ploidía y el sexo (39). La utilización de onco- viable, el cariotipo XY es siempre letal, resultan-
genes, c-myc, c-ras, c-erb-B2, bcl-2 (40,41), do un cigoto diploide pero con sólo ADN genéti-
podría ayudar a precisar el pronóstico de los camente paterno y ADN mitocondrial materno. El
tumores trofoblásticos, pero no se ha encontrado resto de las molas completas son heterocigotas
correlación con el riesgo de persistencia de una y resultantes de la fertilización de un óvulo anu-
enfermedad trofoblástica gestacional (42,43), y cleado o inactivado por dos espermatozoides
actualmente no existe ningún marcador genético con lo que el cigoto diploide resulta 46 XY o 46
para predecir la evolución y potencialidad de la XX, pero siempre de origen enteramente paterno
ETG (33). Incrementos en la expresión de p53 y (53) (fig. 6).
c-fms han sido observados en molas completas Existe un tercer mecanismo descrito en las
(44,45), e incrementos de ras y c-myc ARN han molas completas homocigotas, resultado de erro-
sido cuantificados en coriocarcinomas (46). res en la segunda división meiótica del esperma-
Recientemente se ha investigado la expresión tozoide (26), con el resultado de un espermato-
de varios factores de crecimiento y oncogenes zoide diploide, pero que no se ha encontrado
en la placenta normal, en la mola completa y par- nunca, y aunque está demostrada la existencia
cial y en el coriocarcinoma (47). La mola com- en sujetos sanos de espermatozoides diploides
pleta y el coriocarcinoma están caracterizados 46XX, 46XY, 46YY, su participación en la génesis
por la sobreexpresión de c-myc, c-erb B2 y bcl-2, de molas completas está por demostrar.
y estas oncoproteínas son importantes en la Algunas raras molas completas son aneuploi-
patogénesis de la ETG. La expresión de la pro- des (haploides o tetraploides). Se ha demostrado
teína c-fms no se diferencia entre la placenta
normal y la enfermedad trofoblástica. La mola 1A) Un espermatozoide haploide 1B) Dos espermatozoides
completa y el coriocarcinoma se caracterizan 23, X o 23, Y) fecunda un óvulo haploides (23, X o 23, Y)
anucleado, formando un cigoto fecundan un óvulo vacío,
además, por incrementos de expresión de p53, 46,XX (o 46 XY). Forma resultando un cigoto (46,XY)
homocigota o 46 XX. Forma heterocigota
p21, Rb y MDM2 (46).
Durante los acontecimientos epigenéticos,
ciertos genes se expresan normalmente en cual-
quiera de los alelos maternos o paternos. Altera-
ciones en el encuentro entre los alelos maternos
y paternos, en la metafase de la primera división
meiótica del cigoto han sido asociadas con molas
completas y coriocarcinomas (48,49), jugando un
importante papel en la patogénesis de los tumo-
res trofoblásticos gestacionales. El descubrimien-
to del origen paterno de la mola hidatiforme com-
pleta, gracias a la utilización del polimorfismo en
banda, data de 1977 (26). Generalmente las
molas completas son diploides, comprendiendo
dos juegos de cromosomas paternos con la per- 46XY Gameto no viable
sistencia de un ADN mitocondrial materno. En el
85-90% de los casos el cariotipo es 46XX y en el
10% 46 XY (50). Analizando el origen genético y Espermatozoide
las técnicas de biología molecular, entre el 60 y
70% de las molas completas son homocigotas y
resultado de la fertilización de un óvulo vacío, sin Óvulo vacío en el que el ADN nuclear no participa
en la formación del cigoto
núcleo o inactivado (51), por un espermatozoide
haploide con duplicación del genoma masculino
(espermio 23 X que se duplica a 46 XX) (52), el Fig. 6: Mecanismo de formación de molas completas
concepto 46 XY es teóricamente posible pero no diploides.

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Ezpeleta JM, López Cousillas A REV ESP PATOL

también que el 20% de las molas completas son El concepto de impresión genómica es impor-
de origen mixto (39). Estas molas completas se tante para comprender el desarrollo de la ETG.
encuentran en gestaciones múltiples asociando Las diferencias biológicas entre las distintas
un desarrollo embrionario normal y una mola categorías de molas hidatiformes dependen del
completa, con serias y complejas implicaciones genoma nuclear. La presencia de dos juegos de
clínicas, ya que los tumores trofoblásticos gesta- cromosomas paternos en una mola hidatiforme
cionales ocurren comúnmente tras mola comple- completa diploide origina un fallo en el desarrollo
ta (3). Aproximadamente el 60% de mujeres con embrionario y favorece la proliferación del trofo-
embarazo gemelar, coexistiendo feto evolutivo blasto. En la mola hidatiforme parcial triploide la
normal y mola completa, requieren quimioterapia presencia de un juego de cromosomas mater-
por tumor trofoblástico gestacional persistente nos, además de dos juegos paternos, es compa-
(54). Se ha descrito que el 70% de los casos tible con el inicio del desarrollo fetal, pero tam-
requieren evacuación, antes de la viabilidad fetal, bién con más proliferación trofoblástica que en la
con serias complicaciones hemorrágicas o pree- placenta normal (59). El desarrollo de un corio-
clampsia muy grave (55). carcinoma es considerablemente más frecuente
La mayoría de las molas parciales son triploi- después de una mola hidatiforme que de un
des, mola embrionada, diferenciándose de las embarazo normal, lo cual sugiere que la presen-
molas completas en que retienen parte de la cia de dos juegos de cromosomas paternos pue-
contribución genética materna. Contienen 69 de constituir un factor de riesgo; en cambio raras
cromosomas (XXY el más habitual, XYY, XXX) veces aparecen secuelas malignas después de
el cariotipo YYY no se ha encontrado nunca ya una mola hidatiforme parcial, lo cual sugiere a su
que es letal. Algunas y raras molas parciales vez que la presencia de un juego de cromoso-
son aneuploides (haploides o tetraploides). La mas maternos puede constituir un factor contra-
frecuencia de aparición de mola parcial en los rio a la persistencia de la ETG. El factor pronós-
productos abortivos (de aquí la trascendencia tico asociado a la composición genética es difícil
del estudio de la unidad feto-placentaria (56)), de comprender. Globalmente la progresión hacia
oscila entre en 10 y un 15% (57). El 85 % de las la ETG persistente es del 20%, admitiéndose
triploidías corresponde a un fenotipo masculino, que el riesgo se acrecienta en las molas hetero-
un ovocito haploide es fecundado por dos esper- cigotas, y más especialmente en las molas con
matozoides haploides. El 15 % de las molas par- cariotipo XY, no mostrando el análisis genético
ciales corresponden a un fenotipo femenino ninguna diferencia en la tasa de resistencias a la
(58), resultando de la fecundación de un ovocito quimioterapia ni en el número de ETG metastá-
diploide por un espermatozoide haploide. La sica (60). En la práctica, la biología molecular
existencia de dos juegos de cromosomas mater- precisa el origen parental de los tejidos en la
nos favorece el desarrollo de un feto anormal ETG, no pudiendo prejuzgar su evolución, inde-
asociado a un trofoblasto sin aspecto molar. Por pendiente de que sean benignas (molas parcia-
el contrario, la existencia de dos juegos cromo- les), presumiblemente benignas (molas comple-
sómicos de origen paterno, da como resultado tas) o malignas (tumores trofoblásticos gestacio-
una placenta de aspecto molar y el desarrollo de nales).
un feto normal (57). De todos modos, esta dis-
tinción de fenotipos no es absoluta. Aunque la
mola parcial pocas veces origina enfermedad BIBLIOGRAFÍA
trofoblástica persistente metastásica (sólo el
2,3% frente al 13-20% en las molas completas), 1. Mazur MT, Kurman RJ. Gestational trophoblastic
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son menos sensibles a la quimioterapia, aunque p. 1049-93.
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Fig. 13 de La Histología del Sistema Nervioso

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