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BUCARAMANGA, SANTANDER
EMPEZAR
Érase una vez una joven y bella princesa llamada Blancanieves que vivía en un reino muy
lejano con su padre y madrastra.
2. ESCENARIO:
La casa de los enanitos: Pequeña, acogedora y llena de muebles hechos a la medida de los
enanitos.
3. PERSONAJES:
- Blancanieves
- El príncipe
- La madrastra
El príncipe: El héroe apuesto, encantador y caballero que llega para salvar a su amada
Blancanieves.
Los siete enanitos: Cada uno tiene una personalidad peculiar. En conjunto son muy
amables y colaboradores con Blancanieves
4. PROBLEMA:
5. ACCIÓN:
6. RESOLUCIÓN:
El beso del verdadero amor hace que Blancanieves rompa el hechizo y vuelva a la vida.
Érase una vez en un día nublado una chica transgénero ubicada a la esquina de una calle.
Ella muestra su cuerpo con seguridad y lanza siempre una mirada seductora. No, ella no se
dirige a ningún lugar; ese es su lugar. Se hace llamar Blancanieves, porque su piel es
blanca como nieve, los labios rojos al igual que la sangre y su cabellera negra como la
noche. Ella busca un cliente que quiera pagar por poseer su cuerpo escultural, y gozar de
sus maravillosas habilidades para complacer a un hombre. Las demás no la quieren, dicen
que se roba toda la atención.
Y el hombre le contesta:
- Somos siete amigos, ¿qué tan buena eres para complacernos a todos? Te pagaré
muy bien si me demuestras que vales la pena.
Cae la noche y la fiesta empieza a tomar un color rojo pasión, el ambiente trasciende a un
experimental de roces y toqueteos deliberados con pretensiones ambiciosas. En medio de
la música, los tragos y la cocaína llega el clímax de la fiesta y justo cuando la transpiración
de los cuerpos danzantes es protagonista de la noche, el mundo parece confabularse para
que Blancanieves y uno de los 7 amigos, ese que tanto le acaricia los senos, terminen en la
cama culminando lo que empezó hace unos minutos en la pista.
Media hora más tarde Blancanieves y su cliente estelar salen de la habitación aún con la
percepción borrosa. Entre la confusión del alcohol escuchan carcajadas de los demás
amigos. El amante fugaz de Blancanieves no comprende qué pasa y les pregunta:
Era él. El que había disfrutado de sus caricias, era también quien, en un momento de ira
extrema, la había golpeado en la cabeza con una botella de Vodka, y ahora se encontraba
de pie, sin ningún remordimiento, mirando su cuerpo desfallecer…
Capítulo 4. DISEÑO