Sei sulla pagina 1di 7

I.

ALEGATOS DE CONCLUSIÓN DE LA DEFENSA

El caso que nos atañe surge de la presunta comisión del delito de LESIONES PERSONALES
DOLOSAS EN CONCURSO HOMOGÉNEO, HETEROGÉNEO Y SUCESIVO CON DAÑO EN BIEN AJENO
por los señores LIZETH CATERINE RODRIGUEZ MARTIN, CLARA PATRICIA MARTIN RAMIREZ,
VICTOR MANUEL PARRA CARREÑO, WILLIAM RODRIGUEZ MELO en contra de los señores ANDRES
FERNANDO RODRIGUEZ AGUDELO, IVAN FRANCISCO RODRIGUEZ AGUDELO

Los señores LIZETH CATERINE RODRIGUEZ MARTIN, CLARA PATRICIA MARTIN RAMIREZ, VICTOR
MANUEL PARRA CARREÑO, WILLIAM RODRIGUEZ MELO no cometieron ninguna de las conductas
típicas por las que fueron acusados.

A. ATIPICIDAD

Al referirse a la tipicidad, el artículo 10 de la ley 599 de 2000 expresa lo siguiente:

“Artículo 10. La ley Penal definirá de manera inequívoca, expresa y clara las características básicas
estructurales del tipo Penal.

En los tipos de omisión también el deber tendrá que estar consagrado y delimitado claramente en
la Constitución Política o en la ley.”

Según Gerardo Barbosa Castillo, “La tipicidad, por su parte, es una noción dinámica que responde
al proceso lógico de comparación (adecuación) entre el comportamiento concreto y la descripción
abstracta del tipo”. De lo anterior se puede concluir que, la conducta será típica cuando después
de comparar los hechos que se reprochan al acusado con la descripción hecha por el legislador se
concluya, que los primeros son la materialización de la segunda, es decir, que el acusado llevo a
cabo la descripción plasmada en la ley por el legislador.

En el caso concreto, estamos en presencia de hechos que presuntamente configuran el delito de


lesiones personales en concurso con daño en bien ajeno, por ello tenemos que contraponer los
hechos que aquí se han expuesto, con la descripción de dichas conductas por el legislador en el
artículo 111, 112 inciso 1 y artículo 265 del Código Penal respectivamente, así:

‘’ARTICULO 111. LESIONES. El que cause a otro daño en el cuerpo o en la salud, incurrirá en las
sanciones establecidas en los artículos siguientes’’

‘’ARTICULO 112. INCAPACIDAD PARA TRABAJAR O ENFERMEDAD. Si el daño

consistiere en incapacidad para trabajar o en enfermedad que no pase de treinta (30) días, la
pena será de prisión de dieciséis (16) a treinta y seis (36) meses.’’

LOS SEÑORES LIZETH CATERINE RODRIGUEZ MARTIN, CLARA PATRICIA MARTIN RAMIREZ,
WILLIAM RODRIGUEZ NO COMETIERON LA CONDUCTA TIPICA DE LESIONES PERSONALES

El día 20 de febrero de 2016 los señores LIZETH CATERINE RODRIGUEZ MARTIN, CLARA PATRICIA
MARTIN RAMIREZ, WILLIAM RODRIGUEZ, acudieron a la vivienda del señor IVAN RODRIGUEZ y su
madre la señora HILDA AGUDELO, en búsqueda de la señora INGRID TATIANA RODRIGUEZ familiar
de los acusados, toda vez que esta les había pedido ayuda, puesto que ese mismo día había
sufrido agresiones por parte de su esposo el señor ANDRES FERNANDO RODRIGUEZ, tal y como se
probó en juicio por medio del testimonio de la señora INGRID TATIANA RODRÍGUEZ y por la
denuncia, N.C 110016000019201601244, instaurada por ella en contra del señor ANDRES
RODRIGUEZ por el delito de violencia intrafamiliar.

Acudieron a dicha vivienda porque los señores ANDRES RODRÍGUEZ e INGRID TATIANA
RODRÍGUEZ no se encontraban en la vivienda donde residían, la cual era cercana a la del señor
IVAN FRANCISCO RODRÍGUEZ y su madre HILDA AGUDELO. Al llegar a la vivienda mi defendido el
señor VICTOR MANUEL PARRA CARREÑO sufrió agresiones por parte de los señores IVAN
RODRIGUEZ y posteriormente por el señor ANDRES FERNANDO RODRIGUEZ, tal y como se probó
por medio del testimonio de LIZETH CATERINE RODRÍGUEZ MARTIN A dichas agresiones el señor
VICTOR MANUEL PARRACARREÑO respondió en ejercicio del derecho de LEGÍTIMA DEFENSA,
circunstancia que se mencionara más adelante. Ninguno de mis demás defendidos respondió a las
agresiones propiciadas al señor VICTOR MANUEL PARRA CARREÑO simplemente intentaron
hablar con los señores ANDRÉS FERNANDO RODRIGUEZ y el señor IVAN FRANCISCO RODRIGUEZ
para que estos detuvieran la agresión. Pero, sin ningún éxito se mantuvieron al margen de las
agresiones físicas hasta que estas se detuvieron.

El bien jurídico tutelado en el delito de LESIONES PERSONALES es la integridad personal. Este bien
jurídico no se consagra expresamente en la Constitución Nacional, pero, al interior de esta, sí se
articulan sus fundamentos. En primer lugar, en los artículos 3 y 49 constitucionales cuando se
refieren a los fines y funciones del Estado colombiano en el reconocimiento de la salud como
derecho fundamental, de allí puede inferirse también el ámbito constitucional de validez de la
integridad personal.

En segundo lugar, en el artículo 1 constitucional frente al respeto de la dignidad humana como


fundamento del Estado, la Constitución suministró un criterio para la protección de la integridad
personal, pues resulta inconcebible la concepción de la persona humana sin referencia a un
sustrato material.

Estas múltiples normas constitucionales muestran el claro interés del Estado en proteger el bien
jurídico.

El artículo 111 del código penal consagra el delito de lesiones personales, y establece que el verbo
rector será “el que cause a otro daño”, en el caso en concreto, los señores LIZETH CATERINE
RODRIGUEZ MARTIN, CLARA PATRICIA MARTIN RAMIREZ, WILLIAM

RODRIGUEZ no causaron ningún daño o agresión que terminara con la lesión al bien jurídico de
integridad personal de los señores IVAN FRANCISCO RODRIGUEZ y ANDRES FERNANDO
RODRIGUEZ.

Si bien la integridad personal de los señores IVAN FRANCISCO RODRIGUEZ y ANDRES FERNANDO
RODRIGUEZ se vio lesionada, esta afectación no es resultado de agresiones propiciadas por los
señores LIZETH CATERINE RODRIGUEZ MARTIN, CLARA PATRICIA MARTIN RAMIREZ, WILLIAM
RODRIGUEZ.
Por otro lado, si es cierto que mi defendido VICTOR MANUEL PARRA CARREÑO, los lesionó, es
decir, por parte de éste sí hay tipicidad del delito de lesiones personales en contra de los señores
ANDRÉS E IVAN RODRIGUEZ AGUDELO.

De la práctica probatoria de la fiscalía desplegada en el juicio oral, no se encuentra ninguna


prueba que desvirtué la presunción de inocencia, en el sentido, en el cual, no se probó en ningún
momento la supuesta lesión, efectuada por LIZETH CATERINE RODRIGUEZ MARTIN, CLARA
PATRICIA MARTIN RAMIREZ, WILLIAM RODRIGUEZ.

En conclusión, los señores LIZETH CATERINE RODRIGUEZ MARTIN, CLARA PATRICIA MARTIN
RAMIREZ, WILLIAM RODRIGUEZ NO cometieron la conducta típica de lesiones personales
consagrada en el Código Penal Colombiano puesto que mis defendidos no causaron daño alguno
en los bienes jurídicos protegidos por el ordenamiento jurídico de los señores IVAN FRANCISCO
RODRIGUEZ y ANDRES FERNANDO RODRÍGUEZ

HACER UNA INTRODUCCIÓN O MENCIONAR QUE ME VOY A PRONUNCIAR SOBRÉ EL DAÑO EN


BIEN AJENO.

Por otro lado, refiriéndome al otro tipo penal objeto de la imputación de la fiscalía.

Ahora bien, refiriéndonos al delito de daño en bien ajeno consagrado en el artículo 256 del código
penal:

´´ARTICULO 265. DAÑO EN BIEN AJENO. El que destruya, inutilice, haga desaparecer o de
cualquier otro modo dañe bien ajeno, mueble o inmueble incurrirá en prisión de dieciséis (16) a
noventa (90) meses y multa de seis puntos sesenta y seis (6.66) a treinta y siete puntos cinco
(37.5) salarios mínimos legales mensuales vigentes, siempre que la conducta no constituya delito
sancionado con pena mayor.

LOS SEÑORES LIZETH CATERINE RODRIGUEZ MARTIN, CLARA PATRICIA MARTIN RAMIREZ, VICTOR
MANUEL PARRA CARREÑO Y WILLIAM RODRIGUEZ NO COMETIERON LA CONDUCTA TIPICA DE
DAÑO EN BIEN AJENO, TODA VEZ QUE LA FÍSCALIA NO PRACTICÓ NINGUNA PRUEBA QUE
AFIRMARA ESTE HECHO.

La Anterior afirmación quedó plenamente demostrada en juicio con los testimonios de los
señores VICTOR MANUEL PARRA CARREÑO, LIZETH CATERINE RODRIGUEZ MARTIN, CLARA
PATRICIA MARTIN RAMIREZ, WILLIAM RODRIGUEZ, JULIAN DAVID AGUIRRE,

DIEGO ARMANDO RICO, que mis defendidos nunca ingresaron el día de los hechos, es decir, el 20
de febrero del 2016, a la vivienda de los señores IVAN RODRIGUEZ e HILDA AGUDELO.

La conducta típica descrita en el código penal colombiano trae varios verbos rectores ‘’ el que
destruya, inutilice, haga desaparecer o de cualquier otro modo dañe bien ajeno’’. Así destruir
significa hacer perder la forma de la cosa, de forma tal que impida su utilización; hacer
desaparecer implica que la cosa pierde su existencia para su dueño con ocasión de la conducta
punible desplegada, dañar es causar cualquier forma de deterioro que no implique la total
destrucción de la cosa. La norma entonces contiene un tipo penal abierto.
En el caso concreto ninguno de los verbos rectores descritos en el artículo es desplegado por
ninguno de mis defendidos, los señores LIZETH CATERINE RODRIGUEZ MARTIN, CLARA PATRICIA
MARTIN RAMIREZ, VICTOR MANUEL PARRA CARREÑO Y WILLIAM RODRIGUEZ.

De acuerdo con la acusación hecha los señores LIZETH CATERINE RODRIGUEZ MARTIN, CLARA
PATRICIA MARTIN RAMIREZ, VICTOR MANUEL PARRA CARREÑO Y WILLIAM RODRIGUEZ, estos
desplegaron la conducta de daño y destrucción de algunos de los bienes muebles que se
encontraban en la vivienda del señor IVAN RODRIGUEZ y su madre la señora HILDA AGUDELO,
esta acusación no fue demostrada en juicio, contrario sensu, se demostró con los testimonios de
los señores VICTOR MANUEL PARRA CARREÑO, LIZETH CATERINE RODRIGUEZ MARTIN, CLARA
PATRICIA MARTIN RAMIREZ, WILLIAM RODRIGUEZ,

JULIAN DAVID AGUIRRE, DIEGO ARMANDO RICO, que mis defendidos nunca ingresaron a la
vivienda de las presuntas víctimas y mucho menos causaron cualquier tipo de daño o destrucción
sobre sus bienes.

Además, la fiscalía no aportó en tiempo ningún tipo de facturas o cualquier tipo de comprobante
del monto de los supuestos daños causados por mis defendidos, se limitó a aportar con el
traslado de escrito de acusación algunas fotografías donde no se logra observar ni el objeto ni la
calidad del daño causado.

Por lo anterior, la conducta de daño en bien ajeno por la cual fueron acusados mis defendidos, los
señores VICTOR MANUEL PARRA CARREÑO, LIZETH CATERINE RODRIGUEZ MARTIN,

CLARA PATRICIA MARTIN RAMIREZ, WILLIAM RODRIGUEZ, es atípica, toda vez que como se
demostró en juicio mis defendidos no desplegaron la conducta consagrada en el artículo 265 del
Código Penal Colombiano, esto es destruir, hacer desaparecer, inutilizar o dañar el bien propiedad
de los señores IVAN RODRIGUEZ e HILDA AGUDELO.

B. ANTIJURIDICIDAD

‘ARTICULO 11. ANTIJURIDICIDAD. Para que una conducta típica sea punible se requiere que
lesione o ponga efectivamente en peligro, sin justa causa, el bien jurídicamente tutelado por la ley
penal.’

Analizando la antijuridicidad, conformada, por un lado, por la antijuridicidad formal, la cual es


aquella que presenta cuando una conducta es meramente contraria al ordenamiento jurídico. Y la
antijuridicidad material, la cual exige la puesta en peligro o la efectiva lesión al bien jurídico
tutelado por el ordenamiento.

Es menester la mención de las aristas de la antijuridicidad, dado que la norma del ordenamiento
penal colombiano exige la concurrencia de ambas para que se entienda antijurídico el
comportamiento.

Por tanto, la antijuridicidad formal no es más que la oposición entre un hecho y la norma jurídica
positiva y respecto a la antijuridicidad material, se entiende que un hecho es materialmente
antijurídico cuando el mismo transgrede una norma jurídica positiva, lesionando o poniendo en
peligro con ello un bien jurídico.
Sobre esto debemos decir que la conducta desplegada por el señor VICTOR MANUEL PARRA
CARREÑO configuró una infracción directa al derecho penal al haberse vulnerado los artículos 111
Y 112 inciso 1 del Código Penal Colombiano, configurándose así la antijuridicidad formal, y
además, con este hecho efectivamente resultó lesionado un bien jurídico, toda vez que se
dictaminó incapacidad definitiva de 10 días al señor ANDRES FERNANDO RODRIGUEZ, y una
incapacidad definitiva de 6 días al señor IVAN FRANCISCO RODRIGUEZ AGUDELO ambas
incapacidades sin secuelas médico legales, sin embargo coetáneamente a la conducta típica
desplegada por mi defendido concurren circunstancias que permiten acreditar que existe una
causal de justificación o de ausencia de responsabilidad, esto es, el ejercicio del derecho de
LEGÍTIMA DEFENSA por parte del señor VICTOR MANUEL PARRA CARREÑO, y que permite concluir
que si bien la conducta desplegada es típica, no es antijurídica porque concurre una causal de
justificación o de ausencia de responsabilidad.

EL SEÑOR VICTOR MANUEL PARRA CARREÑO ACTUÓ EN EJERCICIO DEL DERECHO DE LEGÍTIMA
DEFENSA Gunter Jakobs en su obra ´´Derecho Penal. Parte General. Fundamentos y teoría de la
imputación´´ sostiene que ´´las causas de justificación son motivos jurídicos bien fundados para
ejecutar un comportamiento en sí prohibido. A diferencia de lo que ocurre en el comportamiento
atípico, en el justificado se trata de un comportamiento socialmente no anómalo, sino aceptado
como socialmente soportable solo en consideración de su contexto, o sea, a la situación de
justificación.’’

Edmundo René Bodero en su libro ‘’Derecho Penal Básico’’ afirma que ´´para que funcionen las
eximentes de justificación no basta que exteriormente se den los requisitos de esta (…) sino que
se debe verificar el factor subjetivo, esto es, un actuar con la intención de defender´´

La causal de justificación o de ausencia de responsabilidad por el ejercicio del derecho de legítima


defensa se ha reconocido en la gran mayoría de las legislaciones del mundo, o por lo menos del
mundo occidental, toda vez que no se puede exigir a una persona que no reaccione ante una
agresión injusta e inminente de bienes jurídicos protegidos por el ordenamiento jurídico, y que
además no puede ser evitada de manera distinta.

El ordenamiento jurídico no sancionara a quien, actuando en legítima defensa, lesione un bien


jurídico, porque dicha lesión, es el resultado de ejercer el derecho de defender una agresión a sus
propios bienes jurídicos.

Dicha causal de justificación o de ausencia de responsabilidad se encuentra consagrada en el


artículo 32 numeral 6 del Código Penal Colombiano, así:

ARTICULO 32. AUSENCIA DE RESPONSABILIDAD. No habrá lugar a responsabilidad penal cuando:

1. Se obre por la necesidad de defender un derecho propio o ajeno contra injusta agresión
actual o inminente, siempre que la defensa sea proporcionada a la agresión.

Con esta definición del Código Penal Colombiano podemos concluir que los requisitos para que se
configure la causal de ausencia de responsabilidad son:

• Que exista una agresión actual o inminente

• Que dicha agresión sea injusta


• Que no se evitable de otra manera o se evidencie la necesidad de defensa

• Que la defensa sea proporcionada

En el caso concreto, el señor VICTOR MANUEL PARRA CARREÑO actuó en ejercicio de dicha causal
de justificación toda vez, que el día y en el lugar de los hechos fue agredido por los señores IVAN
FRANCISCO RODRIGUEZ y ANDRES FERNANDO RODRIGUEZ, tal y como se probó en juicio por
medio de los testimonios de los señores LIZETH CATERINE RODRIGUEZ MARTIN, CLARA PATRICIA
MARTIN RAMIREZ, VICTOR MANUEL PARRA CARREÑO, WILLIAM RODRIGUEZ, JULIAN DAVID
AGUIRRE, DIEGO ARMANDO RICO y GUSTAVO ANDRES ROMERO CUERVO y por el INFORME
PERICIAL DE CLINICA FORENSE No. GCLF-DRB-04835-2016 que dictaminó la incapacidad definitiva
de 25 días.

El día 20 de febrero de 2016 el señor VICTOR MANUEL PARRA CARREÑO acudió a la vivienda del
señor IVAN FRANCISCO RODRIGUEZ, en compañía LIZETH CATERINE RODRIGUEZ MARTIN, CLARA
PATRICIA MARTIN RAMIREZ y WILLIAM RODRIGUEZ, toda vez que la señora INGRID TATIANA
RODRIGUEZ, familiar de mis defendidos, había sufrido agresiones físicas y psicológicas por parte
de su esposo, el señor ANDRES FERNANDO RODRIGUEZ, tal como se probó en juicio con el
testimonio de la señora INGRID TATIANA RODRÌGUEZ y la denuncia instaurada, por la misma, por
violencia intrafamiliar en contra del señor ANDRÈS RODRIGUEZ.

Mis defendidos acudieron a dicha vivienda porque no encontraron a la señora INGRID TATIANA
RODRÍGUEZ ni a su esposo en la vivienda donde residían (vivienda que era cercana a la del señor
IVAN RODRIGUEZ, hermano menor del señor ANDRES RODRIGUEZ.

El señor VICTOR MANUEL PARRA CARREÑO interrogó al señor IVAN RODRIGUEZ acerca del
paradero de ANDRES FERNANDO RODRÍGUEZ e INGRID TATIANA RODRÍGUEZ a lo que el señor
IVAN RODRIGUEZ reaccionó violentamente propiciándole agresiones físicas y expresiones soeces.
El señor VICTOR MANUEL PARRA CARREÑO se defendió ante la agresión, mientras los señores
LIZETH CATERINE RODRIGUEZ MARTIN, CLARA PATRICIA MARTIN RAMIREZ y WILLIAM
RODRIGUEZ trataban de separarlos. El señor ANDRES RODRIGUEZ llegó a la vivienda y empezó
junto con su hermano, a propiciarle golpes al señor VICTOR MANUEL PARRA CARREÑO.

Tal y como se probó en juicio con los testimonios y el informe pericial ya mencionado, mi
defendido, el señor VICTOR MANUEL PARRA CARREÑO, sufrió agresiones físicas por parte de los
señores ANDRES FERNANDO RODRIGUEZ e IVAN FRANCISCO RODRIGUEZ AGUDELO, en respuesta
a dichas agresiones el señor VICTOR MANUEL PARRA CARREÑO, en ejercicio legítimo del derecho
de LEGITIMA DEFENSA agredió a los señores RODRIGUEZ toda vez que esta era la única manera de
evitar que el bien jurídico protegido por el ordenamiento jurídico resultara mayormente agredido.

El señor VICTOR MANUEL PARRA CARREÑO cumplió con los requisitos del ejercicio legítimo de la
legítima defensa toda vez que, existía una agresión actual proveniente de los señores ANDRÉS
FERNANDO E IVÁN RODRÍGUEZ que resultó en la lesión del bien jurídico protegido, tal y como lo
demuestra la incapacidad definitiva médico legal de 25 días contenida en el INFORME PERICIAL DE
CLÍNICA FORENSE No. GCLF-DRB-04835-2016.

La agresión actual propiciada por los señores RODRIGUEZ era una agresión injusta, es decir,
antijurídica, sancionada por el ordenamiento jurídico colombiano, la actuación de los agresores
no era válida, ni estaba cobijada bajo ninguna causal de justificación toda vez que el señor PARRA
CARREÑO solo quería conocer el paradero de la señora INGRID y nunca agredió a los señores
RODRIGUEZ antes de que estos lo agredieran y mi defendido reaccionara en protección de sus
bienes jurídicos.

Además, dicha agresión actual e injusta no era evitable de otra manera y se evidenciaba la
necesidad de defensa, puesto que el señor PARRA CARREÑO estaba siendo agredido por dos
personas lo que le impedía evitar la agresión de manera distinta.

Por último, mi defendido cumplió a cabalidad el requisito de proporcionalidad, puesto que, y en el


entendido que la proporcionalidad se refiere a los medios utilizados para ejercer la legitima
defensa y bienes que resultarían agredido en el ejercicio, mi defendido se defendió con golpes y
nunca utilizo armas cortopunzantes u otro tipo de medio para la defensa.

En conclusión, mi defendido reúne los requisitos que establece el ordenamiento jurídico


colombiano para el ejercicio legítimo de la legitima defensa, por ende, se encuentra inmerso en
una causal de justificación o ausencia de responsabilidad y debe resultar absuelto del delito de
lesiones personales por el que fue acusado.

En consecuencia, la conducta desplegada por el señor VICTOR MANUEL PARRA CARREÑO no es


antijurídica.

Teniendo en cuenta los anteriores argumentos, le solicito señor juez que se proceda a proferir
SENTENCIA ABSOLUTORIA en favor de los acusados LIZETH CATERINE RODRIGUEZ MARTIN, CLARA
PATRICIA MARTIN RAMIREZ, WILLIAM RODRIGUEZ por la atipicidad de

los hechos que se le imputaron y por los cuales se le acusó, toda vez que la fiscalía no logro probar
más allá de toda duda razonable que mis defendidos cometieran el delito.

Por otro lado, en el caso del señor VICTOR MANUEL PARRA CARREÑO, la sentencia debe ser de
igual manera absolutoria por la antijuridicidad de los hechos por los cuales fue acusado debido al
ejercicio de la legitima defensa.

Potrebbero piacerti anche