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MODULO 1

SALUD INFANTO

JUVENIL

SITUACION DE LA SALUD INFANTO JUVENIL

CONCEPTO GENERALES

SITUACION DE LA SALUD INFANTO JUVENIL

RIESGOS Y PROBLEMAS DE SALUD INFANTIL Y

FAMILIAR
INDICE

MODULO 1
SITUACION DE LA SALUD INFANTO JUVENIL
1. CONCEPTOS GENERALES 3

2. EPIDEMIOLOGIA. CONCEPTO 8

3. SITUACION DE LA SALUD INFANTO JUVENIL 12

4. RIESGOS Y PROBLEMAS DE SALUD INFANTIL Y FAMILIA 15

ACTIVIDADES 19

BIBLIOGRAFIA
SITUACION DE LA SALUD INFANTO JUVENIL
1. CONCEPTOS GENERALES

 Factores que determinan la salud del individuo

El ser humano se va estructurando desde su concepción hasta su muerte, en


un continuo proceso de evolución y adaptación que presentan ciertos rasgos
comunes a la mayoría de los individuos, lo que permite alcanzar etapas sucesivas
(periodo embrionario, fetal, recién nacido, lactante, preescolar, escolar,
adolescente, adulto y adulto mayor), donde las necesidades y posibilidades varían
en cada etapa y los factores determinantes inciden de modo diferente en cada una
de ellas.
Son cuatro los grandes grupos de factores que interactúan:
a. Biología humana
b. Estilos de vida
c. Medio ambiente
d. Organización sanitaria
El ser humano puede modificar en su propio beneficio o perjuicio estos
factores, dependiendo de la toma de decisiones que realice. Cuando es referida a
un niño depende de sus padres, mientras que en el adulto, es de su propia
responsabilidad.

Biología humana. Factores biológicos:


Se refieren a factores hereditarios y congénitos:
La enfermedad congénita se produce por la influencia de factores
ambientales negativos durante el embarazo, que pueden ser prevenibles y
evitables mediante la educación oportuna de la mujer y la familia. Estas
enfermedades se manifiestan en el momento del nacimiento y en algunos casos
se hacen evidentes durante los primeros años de vida o durante la adolescencia.
Desde antes que el individuo se constituya como tal, los factores
hereditarios y ambientales interactúan, dando como resultado un ser humano
parecido a sus progenitores, pero con características morfológicas, psicológicas y
sociológicas propias (biotipo). Existen ciertos aspectos del biotipo que inciden
sobre la salud.
a. Constitución heredada: características que se inscriben desde la
concepción.
b. Constitución genética: la buena o mala alimentación de la madre
durante el embarazo, las enfermedades que puede sufrir en ese
período, alcoholismo y drogadicción, pueden ocasionarle
malformaciones o alteraciones orgánicas y funcionales al feto como
déficit mental, sordera, déficit intelectual o infecciones, entre muchas
otras.
c. Raza: ciertas razas se caracteriza por presentar inmunidad natural
frente a determinadas enfermedades, como por ejemplo, cáncer de
piel que es raro en individuos de raza negra.
d. Sexo: hay enfermedades que son propias de cada sexo como la
hemofilia en el hombre, órganos genitales como el cáncer de útero
en la mujer.
e. Edad: cada etapa de la vida presenta enfermedades que le son
preponderantes, como por ejemplo, las eruptivas de los niños o las
degenerativas en el adulto mayor. Edad de los progenitores: ¿las
madres menores de 20 años presentan mayores dificultades? Tienen
mayor probabilidad de hijos con bajo peso al nacer y de
malformaciones. Las madres mayores, tienen menor capacidad para
soportar el embarazo y pueden presentar más abortos espontáneos.
f. Hábitos, costumbres y creencias: se refiere a la influencia de ciertos
hábitos sobre la salud del individuo. Las creencias que se transmiten
de generación en generación, puede ser favorables o perjudiciales
para la salud mental o física de las personas.

 Estilos de vida
Haules H. define al estilo de vida como las conductas y actividades que son
adaptadas por los individuos para encajar en el propio grupo social. Gran parte de
las patologías que provocan enfermedad y muerte, tienen relación con conductas
y hábitos de la población (alimentación, consumo de tabaco, drogas, conducta
sexual, etc), lo que confirma a los estilos de vida como uno de los determinantes
principales de la salud-enfermedad de los individuos. En el desarrollo del estilo de
vida, tiene un papel importante el medio sociocultural (ambiente), donde la
estructura de valores que rodea al individuo, responde a su conducta reforzándose
o inhibiéndola. A su vez, este medio tomamos decisiones que hacen a nuestra
salud y a las de los que nos rodean, lo que constituye una forma de vida positiva o
negativa para nuestra salud.
 Factores ambientales
 Ambiente materno: de ella, el ser humano obtiene lo que necesita para
sobrevivir. Pero también toma de ese medio: tóxicos que ingiere la madre
como alcohol, nicotina, drogas, estrés, emociones violentas, rechazo, que
pueden afectar al bebe aún antes de su nacimiento.
 Ambiente externo: el hombre vive rodeado de un ambiente al que
constantemente modifica e influye en su provecho. Este mismo ambiente
actúa sobre el individuo afectando su salud física, mental y su
comportamiento en la sociedad. Su alteración y variación permanente
modifica el crecimiento, desarrollo y salud según la capacidad adaptativa
del individuo.

 Los factores ambientales determinantes de la salud son:

1. Factores físico-químicos: aire, agua, luz, radiaciones, temperatura, sustancias


inertes, etc. Cada uno de estos elementos debe reunir determinadas
condiciones de calidad y cantidad sin los cuales puede resultar nocivo para el
hombre.
2. Factores biológicos: el hombre utiliza este ambiente para satisfacer sus
necesidades biológicas (alimentos, abrigo, etc.), pero también encuentra en él
elementos que provocan la mayoría de sus enfermedades y aún la muerte:
microorganismos, vegetales, animales, seres humanos. Los microorganismos
patógenos provocan enfermedades infecciosas o transmisibles. La enfermedad
se manifiesta en el huésped (hombre), debido a la acción del agente
(biológicos) y a la reacción del huésped contra dicha acción, relación que se
efectiviza en el ambiente (físico-químico, biológico o sociocultural).

Ambiente

Huésped Agente

Algunas especies vegetales pueden provocar en el hombre enfermedades:


hongos, micosis, plantas que producen sustancias tóxicas, irritativas.
 Animales: representan riesgos para la salud humana, unos por ser reservorios
y/o vectores de microorganismos patógenos y parásitos (vinchuca, mosquito),
otros por su acción directa sobre el ser humano (araña, serpiente).
 Seres humanos: que son fuente de enfermedades para otros seres humanos.
Ej. Tuberculosis
Factores psico-socio-cultural: lo realizado por el hombre como ser social. La
sociedad donde vive influye sobre él a través de las tradiciones, costumbres,
religión, sistemas políticos, condiciones económicas, etc.
En el plano psíquico, el individuo desarrolla mecanismos de defensa que le
permiten enfrentar los factores perturbadores del ambiente o de sus propias
crisis evolutivas.
El individuo reacciona frente al medio biofísico y sociocultural, adaptándose
mejor o peor a él, según su constitución psicosomática, su cultura, su grado de
educación sanitaria y sus posibilidades socioeconómicas.

La familia: es el marco en el cual se ejercen las funciones paternas y maternas,


en especial en cuanto a amor, alimentos y cuidados de los hijos durante el
crecimiento, elementos básicos indispensables para que el niño no enferme o
muera. Además deben brindarles educación, recreación, orientación religiosa,
laboral y protección contra las noxas físicas, biológicas y sociales. En el hogar se
plasman las principales características biofísicas, psicológicas, morales y
culturales del individuo en los primeros años de vida.
Una pareja armónicamente relacionada y dotada de seguridad, transmite
esa armonía y esa seguridad a sus hijos y es el factor más importante de la salud
mental de los mismos. Es necesario tener en cuenta, que muchos de los
trastornos biológicos y psicológicos del niño son el reflejo de las llamadas
“enfermedades de la familia”, por falta, exceso o mala calidad del afecto.
La sociedad frente a la enfermedad: la sociedad a través de las personas,
organizaciones y los organismos gubernamentales, crea sus mecanismos de
defensa frente a la enfermedad. Esta se enfrenta no sólo con los recursos médicos
sanitarios, sino también con las acciones que tienden a elevar el nivel social y
económico de la población y a promover su bienestar y cultura.

 Organización sanitaria
Es importante que la comunidad conciba la salud como expresión de una
mejor calidad de vida y no solo como ausencia de enfermedad, que asume la
vigencia de su derecho a la salud. Se necesita poner los servicios a su alcance y
darle oportunidad de plantear sus necesidades a partir de una participación
sostenida de los individuos que incluya las decisiones.
Los servicios de salud son responsables sólo en pare del estado de salud
de la población. La salud de las personas y grupos, es el resultado de un proceso
dinámico de interacción del individuo y su ambiente.
La organización de los servicios de salud y atención médica, comprende
varios subsectores:
- Servicios públicos estatales financiado por el gobierno
- Servicios de obras sociales
- Servicios de medicina privada
Dentro del sistema de salud, la atención de las personas se realiza según
niveles de complejidad crecientes llamados Niveles de Atención.
Existen 3 niveles:
- Primer nivel de atención
- Segundo nivel de atención
- Tercer nivel de atención
Es indispensable destacar que los niveles de atención, no son equivalentes
a los niveles de prevención de Leavell y Clark (prevención primaria, secundaria y
terciaria), que están basados en las distintas fases de la Historia Natural de la
Enfermedad.
1. Primer nivel de atención: es el conjunto de acciones poco complejas,
efectivas, que se ponen al alcance del individuo, la familia y la comunidad, para
promover y conservar la salud así como repararla y prevenir la enfermedad.
Es el punto de contacto o interrelación entre el sistema formal o institucional de
salud y el sistema informal o comunitario. El primer nivel de atención
corresponde al conjunto de servicios de complejidad mínima, brindados con la
participación y recursos de la comunidad como parte de un sistema nacional de
salud y mediante un enfoque multisectorial.
Estas acciones deben extenderse a los hogares, en los locales comunitarios,
en centros de salud, etc.
2. Segundo nivel de atención: por tener una complejidad asistencial de nivel
medio, requiere disponer de unidades de salud, con consultorios de algunas
especialidades así como de hospitalización. Las unidades corresponden a
hospitales generales, con servicios de especialidades básicas (pediatría,
ginecología, obstetricia, medicina del adulto y cirugía general). Este segundo
nivel debe estar interconectado con los niveles primero y tercero a través del
sistema de regionalización.
3. Tercer nivel de atención: incluye los hospitales de especialidades y los
institutos nacionales de alta complejidad asistencial, con una amplia red de
especialización. En esos hospitales e institutos se emplea en general una
moderna tecnología de elevado costo, que requiere una adecuada referencia
de pacientes desde unidades de menor complejidad.

3. EPIDEMIOLOGÍA
 Concepto
La epidemiología es el estudio de la distribución y las determinantes de
salud y enfermedad en la población humana, a fin de asegurar una racional
planificación de los servicios de salud, la vigilancia de la enfermedad y la ejecución
de los programas de prevención y control.
tiempo
Distribución de las lugar
Enfermedades persona
Qué biología
Objeto de estudio Agente físico
Determinantes de químico
las enfermedades
Huésped de la persona
Medio cultural
recursos
Ambiente social
sociológico
económico

Para qué racional planificación de servicios


Aplicabilidad vigilancia de la enfermedad
Ejecución de programas de prevención y control
La esencia del método epidemiológico consiste en comparar la frecuencia
con que sucede un fenómeno en la población en relación con el tiempo, el lugar y
las personas, analizando todos aquellos factores que intervienen o se presume
que influyen en la producción de la enfermedad en estudio.
La epidemiología, es un instrumento utilizando para la prevención de las
enfermedades dentro del campo de la salud pública, y está dirigida a las acciones
de salud destinadas a mejorar la calidad de vida del individuo y de la sociedad.

 Usos de la epidemiología
 Como instrumento de predicción, a fin de establecer tendencias y
proyecciones. Por ej.: si se puede predecir la ocurrencia de una epidemia
por sarampión, ésta se podría evitar implementando campañas de
vacunación.
 Para describir la enfermedad en la comunidad, su distribución en la
población y su relación con otros factores.
 Para identificar grupos más vulnerables.
 Para evaluar servicios o programas, a través de los indicadores de eficacia,
eficiencia y efectividad.
 Para completar el cuadro clínico de la enfermedad.
 Para identificar síndromes nuevos
 Para identificar factores etiológicos causales de enfermedad
 Indicadores e índices de salud
Un indicador es una expresión que resume o refleja un determinado
aspecto de una población en lugar y tiempo determinado. Existen indicadores
cualitativos (indicadores del nivel cultural) y cuantitativos. Los primeros son
difíciles de objetar y medir.
Un indicador cuantitativo es una expresión matemática que busca reflejar
en forma resumida, oportuna, sensible y específica, las características de un factor
de riesgo, de un factor de protección, o de un problema de salud específico en una
población en lugar y tiempo determinados.
Las medidas que más frecuentemente se utilizan son: tasa, razón,
proporción, etc. que expresan los problemas de salud, nivel de vida, bienestar y
cambios en la situación de salud.
Un índice es una expresión matemática, un resumen elaborado en base a
dos o más indicadores.
Los datos recogidos para hacer un diagnóstico de salud y enfermedad de
una población, permiten definir el perfil demográfico y de salud, las condiciones de
vida de una población, los recursos y la utilización de los servicios de salud.
Estos datos se muestran a través de los indicadores, cuya finalidad es
establecer las relaciones entre la frecuencia de los hechos y el grupo o población
en que los mismos pueden ocurrir.
Los indicadores utilizados más frecuentemente en Salud Pública pueden
agruparse en:
 Indicadores que miden necesidades de salud:
o Demográficos: estado y variaciones de la población: edad, sexo,
nacimientos, etc.
o De nivel salud: tasa de mortalidad y de morbilidad.
 Indicadores que miden los recursos de salud y su utilización:
o Físicos, humanos, financieros
o Indicadores de producción, rendimiento y utilización de recursos
 Indicadores que miden las condiciones de vida de una población:
o Indicadores de nivel de vida: recursos naturales, salud,
producción, trabajo, comunicación y transporte, ingresos,
alimentación, vestimenta, vivienda, seguridad social, tiempo libre,
derechos humanos y libertad, educación.

Para el análisis de la situación de salud, es necesario recordar algunas


definiciones:
 Riesgo: es la probabilidad de que un hecho se produzca. Es la probabilidad de
que un individuo libre de una enfermedad, la desarrolle durante un periodo
determinado.
 Factores de riesgo: es cualquier variable que aumenta la probabilidad de
enfermar.
 Tasa: una tasa relaciona un hecho con la población expuesta al riesgo de que
el hecho ocurra.
Para medir el riesgo de morir se utilizan las tasas de mortalidad
La mortalidad es uno de los indicadores de nivel de salud de la población
con más frecuencia utilizado por su significación como daño máximo de salud.
Describe la incidencia o número de individuos que mueren durante un período
específico.
Para medir ocurrencia de enfermedad (morbilidad) se utilizan las tasas de
prevalencia y de incidencia.
La prevalencia mide el número de personas en una población que tiene la
enfermedad en un momento dado. Mide el riesgo de estar enfermo.

Nº total de enfermos por una determinada patología 100


En un área determinada en un momento dado 1000
Tasa de = x 10000

Prevalencia Población del área estimada al momento dado 100000


La incidencia mide la frecuencia de aparición de enfermedad en un lapso
determinado de tiempo, o sea el nro. de casos nuevos de un padecimiento en una
población en un periodo determinado. Mide el riesgo de enfermar.

Nº de enfermos nuevos por una determinada patología 100


En un área determinada ocurridos durante 1 año 1000
Tasa de = x 10000

Incidencia Población del área estimada a mitad del año considerado 100000

También existen otras tablas de uso frecuente en epidemiología, como por


ejemplo, las tasas de nupcialidad, de natalidad, de mortalidad fetal, de mortalidad
materna, etc.

- Proporción: una proporción denominada comúnmente porcentaje, relaciona


una parte con el total al cual pertenece y se expresa en por ciento (%). Por
ejemplo:

Enfermos internados de sexo masculino 70


x 100 = ………… x 100 = 74,5%
Total internados 94
O sea que, de cada 100 internados, 74 son hombres.

- Razón: una razón relaciona dos categorías distintas del mismo fenómeno (por
ej. Hombres y mujeres) o las intensidades de dos fenómenos distintos en un
mismo lugar (por ej. Superficie y población).

Enfermos internados de sexo masculino 70


= ……… = 2,9
Enfermos internados de sexo femenino 24
O sea que, entre los internados se encuentran tres hombres por cada mujer.

3.SITUACION DE LA SALUD INFANTO JUVENIL


La salud infantil se puede considerar desde las perspectivas de las
tendencias de mortalidad y morbilidad en las diversas edades. Por ej.: tasa de
mortalidad fetal, enfermedades en el 1er año de vida, etc. la información sobre
mortalidad y morbilidad abarca datos importantes como: causas de muertes y
enfermedades, grupos de edad de alto riesgo, avances en el tratamiento y
prevención de enfermedades, etc.

- Morbilidad
La presencia de enfermedades es un indicador primordial de la salud. Los
países en desarrollo presentan graves problemas de salud que los desarrollados
han solucionado con éxito. Entre estos problemas están patologías respiratorias,
la desnutrición del niño menor que afecta su desarrollo fisico y mental, la diarrea
aguda epidémica en épocas estivales, las enfermedades infecciosas como el
sarampión, varicela y tuberculosis, las enfermedades parasitarias, los accidentes
en el hogar. Sin duda, las medidas más eficaces frente a estos problemas se
encuentran en el terreno preventivo.
Los niños menores de cinco años sufren alrededor de tres episodios de
enfermedades agudas al año. Por lo común, las enfermedades agudas son menos
frecuentes en menores de seis meses, aumentan hasta la edad de 3 o 4 años y
disminuye poco a poco durante el resto de la niñez. En los primeros años
escolares aumenta levemente a causa de la exposición a nuevos contagios. Las
enfermedades respiratorias abarcan un 50% de las dolencias agudas.
Los niños de familias pobres tienden a padecer más problemas de salud.
Por ello, se pone mayor atención en los niños que carecen de hogar o viven en la
pobreza, los que presentan bajo peso al nacer, los que padecen enfermedades
crónicas.
- Mortalidad

El descenso de la mortalidad sirve para medir el nivel de atención médica


junto con las demás acciones de salud. El uso y manejo de los datos de
mortalidad facilitan al equipo de salud la planificación de actividades orientándolas
a las causas principales de muertes y a los grupos más vulnerables según sexo,
edad y lugar de residencia.
La evolución de la mortalidad y la diferencia entre regiones, países y grupos
de habitantes ofrecen indicios sobre las causas prevalentes de mortalidad, que al
ser puestas de manifiesto, promueven la investigación y el progreso de la ciencia.
La mortalidad infantil se mantiene elevada en comparación con países más
desarrollados a pesar de que existen adelantos importantes en medicina que
permiten reducir su índice. Se ha observado una notable disminución de los
índices de mortalidad debido al control de infecciones, mejor estado nutricional,
avances en cuidados perinatales. Sin embargo, mantiene valores elevados si se
compara con otros grupos de edad.
El número de muertes resulta importante cuando se comparan los diversos
grupos de edad. La incidencia de muertes más baja corresponde al grupo formado
por niños en edad escolar y púberes; sin embargo ocurre un aumento notable
hacia finales de la adolescencia por accidentes, homicidios y suicidios. El número
de muertes por causas violentas ha aumentado en todos los grupos de edad,
particularmente en mayores de 10 años. En niños de corta edad a causa de
maltrato.
A partir del nacimiento, debe destacarse el papel que desempeñan las
afecciones del período perinatal que tienen su origen la mayoría de las veces en la
vida fetal, como causa frecuente de morbimortalidad y que condicionan
notoriamente secuelas invalidantes.
Sin duda, los datos de la salud infantil están influidos significativamente por
las condiciones propias de la salud materna, incluidas las pertinentes al periodo de
desarrollo fetal, y las características del recién nacido. Cabe destacar la existencia
de importantes riesgos de morir durante el parto, la mayoría de ellos prevenibles.
La inmadurez y el bajo peso al nacer constituyen circunstancias de alto valor
predictivo de la salud infantil tanto por lo que se refiere al riesgo de muerte como a
las condiciones de salud ulterior. Otros factores que se deben considerar son la
baja edad materna, el número total de hijos y el número de orden de los hijos en la
familia.
Asimismo, debe destacarse que el riesgo de muerte en los niños menores
se ve agravado por la reducción de la lactancia materna, llegando en los primeros
meses de vida hasta duplicarse la mortalidad por dicha circunstancia y siendo el
fenómeno más severo si no existen alimentos sustitutivos adecuados o si faltan
condiciones higiénicas básicas.
La mortalidad infantil se determina con frecuencia por al intercurrencia de
enfermedades infecciosas como las respiratorias y entéricas, cuya magnitud aún
es elevada, aunque con tendencia relativamente declinante. Sin duda, el mayor
progreso se ha realizado en el control y disminución consiguiente de las
enfermedades infecciosas prevenibles mediante la administración de vacunas
(TBC, sarampión, difteria, poliomielitis). Sin embargo, el verdadero sustrato de
defunciones, que es la desnutrición, no registra su real prevalencia,
investigaciones al respecto han demostrado que, pese a su tendencia declinante
en nuestros medios, la desnutrición en la infancia unida a la insuficiencia ponderal
del recién nacido, se revelaron como causas básicas y asociadas de las muertes
ocurridas en la infancia en un gran porcentaje. Se demostró que cerca de medio
millón de niños desnutridos mueren en el 1er año de vida por enfermedades
diversas, para las que las deficiencias nutricionales han sido causas subyacentes.
A partir del año de edad cambian las causas de muerte. La principal son los
accidentes que provocan un alto índice de muertes entre 1 y 24 años. Analizar las
muertes por tipos específicos de accidentes según edad y sexo, es útil para
identificar grupos de alto riesgo y tomar medidas preventivas. Los accidentes
automovilísticos pueden ocurrir como ocupantes de vehículos o como peatones a
cualquier edad, pero predominan en la adolescencia. Durante la lactancia, la
aspiración o la asfixia suelen ser causa de mortalidad infantil, en cambio esto no
ocurre en niños mayores. Más de la mitad de las intoxicaciones tienen lugar en
niños menores de 2 años, y entre los 15 y 24 años, como ser las intoxicaciones
intencionales (por suicidio) sobre todo en mujeres o por abuso de drogas.
En el grupo etáreo de niños de 1 a 4 años, el riesgo de morir es menor que
durante el primer año de vida, predominando como causas de los decesos las
enfermedades infecciosas, las entéricas, las respiratorias y los accidentes.
En años recientes se ha registrado un descenso apreciable en las tasas de
mortalidad infantil y en menores de 5 años, debido a un cierto progreso en el
desarrollo económico y social, a una mayor cobertura y eficiencia de las
actividades sanitarias correspondientes y fundamentalmente a una mayor
educación y motivación familiar y comunitaria.
Los riesgos de morir más allá del periodo de la niñez y durante la
adolescencia son considerablemente menores, estando las causas prevalentes en
esta época relacionadas con accidentes, muertes violentas, ciertas enfermedades
infecciosas, afecciones metabólicas, endócrinas y tumorales.
También hay una tendencia general relacionada con la mortalidad infantil de
todas las edades, relacionadas con la raza y sexo. Entre los blancos se producen
menos muertes a cualquier edad, y en tanto entre los blancos como entre los
negros, las muertes de varones superan a las mujeres.
El control de las enfermedades infecciosas y las inmunizaciones han
reducido notablemente los índices de mortalidad y ha permitido que otras
enfermedades adquieran preponderancia en las causas de muertes, entre ellas, el
cáncer. El cáncer es la primera causa de muerte por enfermedad, en niños de 3 a
14 años. La forma más común en menores de 10 años es la leucemia.
También adquieren importancia en esta edad los trastornos psicosociales
que contribuyen y/o son consecuencia de la desarmonía familiar y que se traducen
en drogadicción, tabaquismo, alcoholismo, trastornos sensoriales, dificultades del
aprendizaje, y trastornos de la conducta que pueden llevar a la prostitución y a la
delincuencia juvenil.
Una mención importante merece la patología ligada a la iniciación del ciclo
reproductivo como consecuencia del cambio progresivo de los roles y de los
valores pertinentes y de la falta de una adecuada educación sexual y para la vida
familiar. Todo ello favorece la aparición de enfermedades de transmisión sexual,
de la procreación no deseada y del aborto.

3. RIESGOS Y PROBLEMAS DE SALUD INFANTIL Y FAMILIAR


Los factores de riesgo están relacionados con la ubicación geográfica, las
características climáticas y las condiciones socioculturales donde vive una
población.
Surgen problemas de salud propios de las condiciones de vida de regiones
que no tienen medios adecuados de comunicación, con migraciones importantes y
decreciente ruralidad, alto analfabetismo y bajo ingreso per cápita y sub
alimentación, que originan problemas de salud importantes: alta mortalidad infantil,
desnutrición, prematurez, elevada incidencia de trastornos digestivos,
enfermedades infecto-contagiosas y parasitarias, etc.
La situación de un grupo etáreo definido como la infancia, la niñez y la
adolescencia, está condicionada por la problemática en que se desenvuelven los
estratos sociales donde el niño nace y vive. Es necesario, por lo tanto, analizar los
factores demográficos, los ligados al desarrollo económico, social y cultural, las
condiciones de la vivienda, la calidad del medio ambiente, la alimentación y la
nutrición y la participación comunitaria, incluidos los aspectos ligados a la
recreación, la orientación vocacional, la incorporación de la familia a la fuerza
laboral, entre otros.
Casi el 40% de la población es menor de 15 años y constituye el sector mas
susceptible, el que depende en forma más directa de las condiciones familiares
que lo rodea, tanto económicas como culturales.
Desde el punto de vista de la dinámica demográfica, cabe destacar entre
los hechos más importantes el significativo incremento de la población,
determinado mayormente por descensos apreciables de la tasa de mortalidad y
más restrictos de la tasa de natalidad. Este proceso puede ser muy distinto de un
lugar a otro y está influenciado por el descenso de la fecundidad en los últimos
años. Un rango singular es el ritmo acelerado con que se produce el proceso de
urbanización y su tendencia a la concentración en ciudades grandes. Se han ido
formando cinturones de pobreza constituidos en gran parte por familias rurales
que han emigrado de los campos en busca de mejores posibilidades de vida. Este
fenómeno ha creado una necesidad de salud mayor, por lo que el sistema de
salud ha debido proyectarse hacia los centros periféricos para atender la demanda
con criterio social y preventivo.
El tamaño y la composición de la población están fuertemente relacionados
con los procesos económicos y sociales: oportunidades de empleo, niveles de
vida, en particular en términos de salarios y de nivel educacional, factores sociales
y culturales y perspectivas que los individuos tienen para ellos mismos y sus hijos.
Estos procesos condicionan las tendencias que revelan los hechos vitales
fundamentales, tales como las tasas de mortalidad, de fecundidad y de las
migraciones.
Los parámetros que definen el desarrollo económico constituyen los
índices de mayor trascendencia que influyen en la calidad de vida de los países y
de las comunidades. El crecimiento lento de la economía en los últimos años, se
ha acompañado de grandes cambios estructurales y de limitaciones en la
movilidad social que se han constituido en factores determinantes de importantes
tasas de desempleo, principalmente juvenil. Todo ello traduce la incapacidad de la
economía para generar oportunidades laborales e impacta de un modo especial
en las condiciones sociales y sanitarias de la población, las desigualdades en la
distribución del ingreso son muy acentuadas. La concentración de mayores
ingresos en los estratos sociales altos aumenta el número de pobres, las
condiciones de marginalidad, pobreza extrema o crítica y la indigencia. Es
fundamental la implantación de políticas para la asignación prioritaria de recursos
que permitan lograr ascensos significativos del nivel de vida, en particular, de los
grupos vulnerables de la población.
Las condiciones de la vivienda y el hábitat: son el resultado tanto del grado de
desarrollo económico alcanzado como de la dinámica demográfica. La extensión
del perímetro de las ciudades ha dado origen a barrios de condiciones
habitacionales precarias, a los que deben añadirse sectores céntricos antiguos no
renovados y deteriorados.
En lo que respecta al saneamiento ambiental básico, el problema es más
favorable en las áreas urbanas que en las rurales respecto a la disponibilidad de
agua potable y cloacas. Esto influye positivamente en la reducción de la
morbimortalidad que aún registran infecciones infantiles como las entéricas.
La cobertura del sistema educativo es otro factor importante a considerar.
La reducción del analfabetismo y la mejora en los niveles de instrucción se ha
visto influida por la urbanización acelerada y la industrialización, que ha obligado a
la incorporación de mano de obra capacitada a la economía de mayor
modernización.
Con respecto a la condición alimentaria y nutricional se ha comprobado
que ha existido un incremento de consumo calórico y de proteínas, pero que aún
se mantienen importantes diferencias entre las diversas regiones. Todo ello en
relación tanto con la diferencia en la producción y disponibilidad de alimentos,
como con su distribución más equitativa, la capacidad adquisitiva de consumo, el
nivel educacional, y las políticas paliativas de intervención nutricional y
alimentarias que se llevan a cabo. Consecuencia de la situación expuesta es la
prevalencia significativa de la desnutrición, principalmente la que afecta a la madre
durante la gestación, que origina así tantos daños en su salud, en el niño de bajo
peso al nacer y que condiciona cuadros de malnutrición en especial en los
primeros años de vida, sea del tipo de marasmo o de Kwashiorkor.
No se puede hacer un enfoque realista de los problemas de la salud de la
población sin poseer un conocimiento adecuado de las costumbres, hábitos y
creencias que tienen las personas que la constituyen. Las familias rurales que
han emigrado a las ciudades mantienen sus costumbres y creencias, muchas de
ellas heredadas de sus antepasados y no han logrado integrarse a la cultura
propia de los sectores urbanos. Esto crea inconvenientes en la acción médica
frente a enfermedades como la desnutrición, la diarrea infantil, la bronconeumonía,
las infecciones. Empacho, mal de ojo, superstición, son algunas de las
características principales. Se requiere conocimiento y buen manejo de ellas para
lograr confianza de la comunidad y facilitar la introducción de la medicina
científica.
Otro aspecto de mayor trascendencia es la situación de la familia, medio
ambiente más inmediato en que transcurre la vida del niño, la cual influye en forma
decisiva en las condiciones de la normalidad de sus integrantes, en especial de
quienes tienen una mayor vulnerabilidad biológica y/o social. La estructura y la
dinámica familiar condiciona en forma decisiva la calidad de la vida y el bienestar
de sus miembros: la unión de hecho de los padres, el divorcio, la madre soltera, la
ausencia de los padres del hogar, por razones muchas veces justificadas, como
búsqueda de oportunidades laborales, la falta de suficiente conocimiento sobre las
responsabilidades de la vida familiar, que conduzcan a la armonía familiar y al
cuidado adecuado de los niños, son aspectos que influyen negativamente en la
salud de los niños.
La existencia de estratos sociales diferentes y la crisis de la familia que se
ve amenazada de disolución, trae como consecuencia la ola de rebeldía,
descontento y frustración de la juventud. Los sectores más favorecidos
económicamente se enfrentan con estos graves problemas con sus escolares y
adolescentes. En los sectores más modestos, existe el mismo problema pero por
causas diferentes, relacionados con el alcoholismo, la ilegalidad y la delincuencia.
Esto requiere el desarrollo de la psicología infantil y la búsqueda de soluciones
preventivas a problemas como el del niño en situación irregular en todas sus
formas y formar equipos multidisciplinarios para abordar en forma integral la
problemática de la adolescencia.
Otros factores de riesgo son la distribución de los profesionales de la
salud y las condiciones de infraestructura de los servicios. Hay mayor
concentración de médicos y enfermeras en las ciudades, quedando con escasos
recursos los pueblos pequeños y la población rural. Esto exige imperativamente el
desarrollo y la distribución adecuada de los recursos humanos desde el punto de
vista cuali-cuantitativo y con un enfoque preventivo.

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