Salmo 63:4 Así te bendeciré en mi vida, En Tú Nombre alzaré mis manos.
La adoración es un estilo de vida, sucede desde que nos levantamos hasta
que nos volvemos a dormir. Debe estar presente desde los quehaceres más simples hasta las tareas más complejas del día. El asunto está en el entendimiento de que jamás salimos de la presencia del Señor. Acompaña a la adoración, la acción de gracias a medida que usted agradece a Señor por quién es, por lo que tiene y por los que le rodean, se expresa su adoración. No sé como estará viviendo ni lo que le reserva Dios a usted, pero sé que puede adorarle hoy y siempre. Tiene más motivos para agradecer que para lamentar, su camino es victorioso a pesar de las derrotas que hicieron, hacen y harán parte de este. Hoy es tiempo de adorar a Dios.
Postrados a tus pies entendemos que no podemos salir de tu presencia, por
eso debemos, como pueblo tuyo, adorarte con todo nuestro ser todo el tiempo. Amén.