Documenti di Didattica
Documenti di Professioni
Documenti di Cultura
Unas modestas notas dieron origen al "Curso de Epidemiología para estudiantes de Salud Pública
Latinoamericanos", libro que, como hecho de fondo y sin variación, está inspirado con un profundo cariño
hacia esta ancha tierra a que pertenecemos: América Latina.
Parecería que ese mensaje de solidaridad con quienes compartimos una historia y un destino común
hubiera sido captado. Es muy grato comprobar que el libro circula y ha sido útil entre muchos cultores de la
salud pública, prácticamente en todos los países al Sur del Río Grande. No podría existir mejor recompensa
ni estímulo para el autor.
Por ello y, consciente de las imperfecciones y vacíos de la edición anterior, se ha preparado esta edición,
que pretende poner al día el contenido e incorporar materias nuevas. En estos años transcurridos ha
continuado la empresa colectiva de capitalizar experiencias, lecturas, viajes y contactos humanos. Hemos
tenido el privilegio de indagar en las fuentes más selectas del Viejo Mundo y de las Américas.
La presente edición constituye una revisión substancial del "Curso de Epidemiología" Se han incorporado
capítulos nuevos, tales como Administración de Programas de Epidemiología, el cual cristaliza la
experiencia de muchos compañeros de trabajo. Se ha incorporado un número apreciable de materias que
pretenden llenar algunos de los vacíos de la edición anterior, tales como: teoría de las epidemias;
importancia del diagnóstico en epidemiología; caracteres generales de las enfermedades transmisibles;
control y erradicación; expresiones de uso frecuente en epidemiología: vacunas vivas de uso oral en
poliomielitis; leptospirosis; cambios en la población y el cuadro epidemiológico; aterosclerosis coronaria;
presión arterial; cáncer; enfermedades colectivas de la nutrición; diabetes; bronquitis crónica y
enfermedades mentales.
En el momento de someter este libro a la benevolencia del lector, es nuestro deseo que constituya algo más
que un simple manojo de tecnología, y que nos sea permitido expresar una inquietud. Nuestros países viven
un período crucial de su historia. Se asiste a un fermento del pensamiento y de la acción frente a los
problemas del subdesarrollo. La explosión demográfica, la migración interna, la distribución injusta de la
riqueza, la concentración del poder económico en unas pocas manos, la dependencia económica y otros
fenómenos gravitan seriamente sobre la salud de nuestros pueblos. En todo el continente se escuchan
voces que claman por la ejecución de medidas que modifiquen profundamente las estructuras y por
encuadrar los programas de salud dentro de los planes integrales de desarrollo. Se persigue alcanzar
nuevas metas sociales y económicas que inciden en los planes de salud, porque salud y economía son área
interdependientes.
Es imperioso entonces que los epidemiólogos salgan más allá de los viejos marcos clásicos para buscar
una ubicación correcta en el plano histórico. Es necesario confrontar la Ciencia de la Epidemiología con el
reto planteado por la realidad presente; con el patrimonio cultural común a través de cuatro siglos en busca
de un destino, y con la inquietud social de esta hora que se vive en Latinoamérica.
CAPÍTULO 1
PRINCIPIOS DE EPIDEMIOLOGIA
Se han intentado numerosas definiciones de salud, pero ninguna satisface todas las
exigencias.
Desde el punto de vista fisiológico se concibe la salud como aquel estado de armonía y
equilibrio funcional que se traduce por un "silencio orgánico". El corazón se contrae, el
intestino hace movimientos peristálticos, el pulmón trabaja a 16-18 respiraciones por
minutos, la sangre circula por arterias y venas, etc.; todo en absoluto "silencio", es decir,
no tenemos noción de que tanta cosa está ocurriendo. Es comparable a lo que sucede
con el automóvil cuando funciona correctamente. Basta que un órgano se altere para que
se tenga conciencia de él: corazón, pulmón, estómago, etc.
Pero esta manera de concebir la salud es puramente individual y mira las cosas desde un
punto de vista clínico. Además, hay otros aspectos del ser humano, la vida social, mental
y emocional, que no son cubiertos por la definición.
La OMS ha dado una definición mucho más integral. "Salud es un completo estado de
bienestar físico, mental y social" y agrega, "y no solamente la ausencia de enfermedad".
Resulta entonces que es muy difícil definir qué es salud y establecer los límites dónde
comienza la enfermedad. Porque salud y enfermedad son dos estados entre los cuales
fluctúa el individuo toda su vida, dos condiciones estrechamente ligadas por conexiones
recíprocas.
Para mejor comprender el asunto, hay que llegar al concepto ecológico de enfermedad.
Los estados de salud y enfermedad dependen de numerosas variables en juego, que
pueden agruparse en 3 elementos fundamentales:
Si se examinan las relaciones entre el hombre y los microbios, se tiene una oportunidad
para comprender mejor el concepto ecológico de la enfermedad.
Evolución histórica
Los apartados fundamentales que integran la salud publica son higiene, medio ambiente
definida por Dahl, es un modo de vida abarcando todo lo que rodea al individuo, la
salubridad es intentar hacer que el medio sea lo mas adecuado para la vida del hombre, y
el saneamiento como el medio y la vida del hombre.
Salud y enfermedad
Difícil a nivel ecológico, no nos interesa el diagnostico individual, sino el estado del grupo
pero para poder llegar al diagnostico de grupo necesitamos el diagnostico individual y este
es el medio para acceder al colectivo.
La definición de salud y enfermedad cambia según culturas, individuos,…
La relación entre salud y enfermedad sobre un grupo social se hace teniendo en cuenta la
población, combinación de variables para ver resultados utilizamos comparaciones con
datos de referencia y variaciones múltiples como la tensión arterial dependiendo altitud
esta tomara un valor u otro.
Antes de llegar a definir Epidemiología, resulta imperativo hacer una breve excursión
histórica, para examinar las relaciones entre el hombre y la enfermedad. Este análisis
podrá facilitar la comprensión de los complejos factores en juego.
Hay un enorme vacío en el conocimiento de este ser primitivo hasta llegar al hombre de
Crô-Magnon, hace unos 20 mil años. En la cueva de Trois Frères, al Sur de Francia, hay
pinturas murales que se han conservado prodigiosamente. En una de ellas se muestra la
primera imagen que se conoce de un médico, ataviado con pieles y máscara y ejecutando
una danza como los hechiceros del África actual. Este médico tenía por misión ahuyentar
malos espíritus, curar enfermedades y augurar una buena caza. Curiosa fusión de
funciones: de reparación y protección de salud asociadas estrechamente con la provisión
de alimentos. Integración de medicina y economía tal como se plantea hoy día.
El estado de tensión provocado por las ondas epidémicas sucesivas estimuló un fervor
religioso jamás visto en la historia. La Iglesia incrementó la rigidez de sus leyes y vivió
muchas décadas de poder omnímodo sobre la comunidad. Las fábricas de dados -se
anota como dato curioso- se dedicaron a producir cuentas para rosarios, que alcanzaron
una demanda fabulosa.
La peste bubónica destruyó los ejércitos de Marco Aurelio y Lucio Verus, en el siglo v D.
C., arrasó Roma, luego Constantinopla, donde morían 5 a 10 mil personas al día y abatió
el Imperio Bizantino. Del siglo vI al xIv hubo calma respecto a peste; pero en 1345 estalló
una epidemia en Asia y África que rápidamente se extendió a Europa. En 1348 (año
santo), el Papa Clemente VI hizo un llamado a toda Europa, a fin de que se congregaran
peregrinos en Roma a orar y pedir clemencia al cielo. Entre 1.200.000 peregrinos que
acudieron al llamado papal a Roma, vinieron varios enfermos de peste bubónica y se
desencadenó una epidemia de espantosas proporciones, en que murieron el 90% de
ellos. Durante la epidemia, el Papa se encerró en una habitación y se puso a salvo. En el
siglo XIV, solamente en Europa se estima que murieron 25 millones de personas de peste
bubónica.
En aquellas epidemias, en que como lo describen los historiadores, en una misma fosa
iban a parar los cadáveres de testadores y herederos, familias enteras, amigos y
enemigos, se dio origen a todo género de reacciones de piedad, de crueldad, egoísmo,
etc.
Una de estas pasiones desatadas tiene bastante interés para el asunto que nos preocupa.
La gente empezó a advertir que, a pesar de las oraciones, cuantiosas donaciones a la
Iglesia, etc., no se ejercía influencia alguna sobre la cólera divina. Empezó entonces a
buscar presuntos culpables humanos. Como existían razones para odiar a los judíos, que
eran prestamistas y que llegaron a controlar los bancos, se les acusó de envenenar
norias. Miles de judíos fueron quemados. En Maguncia en un solo día fueron quemados
12.000 judíos.
Gibbon, historiador de fines del siglo XVIII, escribió sobre la epidemia de peste en
Constantinopla del siglo VI: "...Hasta el final de un calamitoso período de 52 años, la
humanidad recobró su salud y el aire recuperó sus cualidades de pureza y sanidad".
Como se ve, se buscaron causas cósmicas para explicarse el origen de la enfermedad.
Se desarrolló fuertemente la idea de que el aire se corrompía en determinadas ocasiones
y se generaban las epidemias. De aquí nació el uso de vestimentas especiales para los
médicos, consistentes en largas túnicas, botas y narices postizas. Se usaron a larga mano
diversas especies y perfumes, a fin de "purificar el aire" de las habitaciones, de las ropas,
etc. Por ejemplo, el Agua de Colonia tuvo su origen en esa época.
Hasta mediados del siglo pasado, William Farr creía firmemente en la doctrina del
miasma. Atribuyó el cólera en Londres al juego de mareas del río Támesis y presentó
datos con los cuales pretendió demostrar que a más bajo nivel la incidencia de cólera era
mayor, debido a la influencia más marcada de las mareas.
Podríamos citar innumerables ejemplos para explicar las complejas interrelaciones de las
diversas especies biológicas entre sí. Durante mucho tiempo los biólogos estuvieron
intrigados por saber qué sucedía con el nitrógeno (le las grandes cantidades de aire que
la ballena almacena en cada respiración. El aire contiene 20% de oxígeno y 78% de
nitrógeno. Si la ballena consume gradualmente el oxígeno, se debe acumular una presión
parcial de nitrógeno tan alta que debería causar la muerte del cetáceo y, sin embargo,
esto no ocurría. Se descubrió que en la sangre del cetáceo existe una abundante flora de
bacterias nitrificantes, las cuales metabolizan el nitrógeno. Este es un curioso ejemplo de
simbiosis entre 2 especies de dimensiones tan diferentes y que se benefician en forma
recíproca: la ballena suministra nitrógeno a los bacterios y los bacterios defienden la vida
de la ballena.
La vida sobre la tierra es el resultado de relaciones muy intrincadas y complejas entre las
numerosas especies. La lucha consiste en una competencia permanente por el alimento y
esta lucha crea simbiosis, asociaciones complicadas y antagonismos que trazan, en
conjunto, un cuadro extraordinariamente complejo. En un punto de este cuadro se
encuentra el hombre, sometido al juego biológico de todas las especies con que convive.
Zinsser, plantea muy bien el asunto para aplicar estas ideas a la enfermedad. Cuando un
león devora a un misionero, no lo hace seguramente por maldad, sino que está
procurándose alimento. De todos los alimentos el que preside la lucha es la albúmina.
Esta línea de pensamiento nos lleva a interpretar la enfermedad cono un accidente poco
afortunarlo que suele aparecer como conflicto o choque entre dos especies.
Definiciones de Epidemiología
Frost (1927)
Greenwood (1934)
Lilinfield (1977)
Last (1989)
Armijo (1994)
MacMahon (1996)
En conclusión, la Epidemiología es una ciencia que trata acerca ("epi"), del estudio
("logos") de las poblaciones ("demos"). Inicialmente su objeto de estudio eran las
enfermedades infecciosas y de éstas las de mayor contagiosidad (epidemias).
Posteriormente, sin embargo, también se estudiaron otras patologías no infecciosas, tales
como las enfermedades carenciales (fundamentalmente, el escorbuto, la pelagra y el
raquitismo). Actualmente su centro de atención son las enfermedades neoplásicas, los
accidentes, las enfermedades mentales y las enfermedades cardiovasculares.
Resumiendo:
Aplicaciones de la epidemiología
USOS DE LA EPIDEMIOLOGIA
Los usos clásicos de la Epidemiología son:
Funciones de la epidemiología
Descubrir los factores que aumentan el riesgo de contraer una enfermedad (su etiología).
El caso índice tiene hasta cierto punto un carácter administrativo, porque corresponde al
primero notificado a la autoridad sanitaria y conduce (indica) hacia un brote localizado.
Esta expresión se usa bastante en tuberculosis y enfermedades venéreas.
No basta que sea el primero en orden cronológico, pues todos los casos podrían haberse
originado de una fuente común. Es preciso demostrar que este primer caso contagió a los
demás, que pasan a ser secundarios, porque se cumplen las condiciones expresadas
más adelante.
En verdad, la definición está dada por el brote, que fija arbitrariamente o sorprende en el
tiempo a uno o más casos en la posición de primarios y otros de secundarios. Si se
medita un poco, todos los casos son secundarios a otro, porque son los eslabones de una
cadena cuyo origen nos llevaría a la especulación sobre cuál fue el primer caso. De modo
que el caso considerado primario para un brote, es en verdad secundario dentro de la
cadena universal.
b) El contacto con el caso primario ocurrió cuando éste era contagioso, a menudo en el
período de máxima difusibilidad (sarampión-coqueluche). Pero también puede ser
contagioso en la convalecencia (tifoidea y difteria).
En cuanto a tiempo, hay focos de vida fugaz que originan brotes epidémicos. Otros se
mantienen y clan origen a condiciones endémicas. En este último caso, se combinan una
serie de factores ecológicos de difícil remoción. La definición se complica más si se
considera el tipo de reservorio natural de la enfermedad (humano exclusivo, animal, mixto,
etc.). En las infecciones con reservorio humano exclusivo el foco tiende a coincidir con los
individuos infectados, pero en aquellas. de reservorio más amplio y complejo la noción el
foco tiende a hacerse más difusa.
En difteria ocurre algo parecido. Se trata de portadores faríngeos, nasales y de otros sitios
extrafaríngeos.
El mero hecho de comprobar por medios bacteriológicos que un individuo presenta bacilo
diftérico en la garganta o tiene un coprocultivo positivo para gérmenes patógenos del
intestino, no autoriza a calificarlo de inmediato como portador. Podría ocurrir que ese
individuo sea un portador accidental y encuadrar en alguna de las siguientes situaciones:
Scott Thompson logró hacer recuento de gérmenes por gramo de heces en portadores
conocidos tíficos y de Salmonella paratyphi B.
Reservorio: Es el hábitat natural en que vive, se multiplica y/o crece un agente infeccioso.
Puede ser humano, animal, planta, suelo o materia inanimada.
a) Fase descriptiva
Carácter de las variables (por ejemplo, sexo: cualitativa; edad: cuantitativa; nivel de
estudios: cualitativa).
Escalas de clasificación (por ejemplo, edad: cuantitativa discontinua; nivel de estudios:
cualitativa ordinal).
Relación entre las variables (relación entre nivel de estudios y sexo).
Estandarización de las variables.
Elección de las técnicas de medida (así, los niveles de estudios basados en criterios de
los niveles educativos de una determinada época, por ejemplo).
Cálculo de los indicadores epidemiológicos:
Características de persona
Características demográficas
Características familiares
Características endógenas
Estilos de vida
Características de lugar
Zona de residencia: Urbano/rural
Características de tiempo
b) Fase analítica
IDEA CLAVE:
El método epidemiológico ANALITICO empieza cuando se inicia la verificación de la
hipótesis planteada.
Snow describió la historia del cólera en Londres (epidemias de 1832, 1849, 1853 y 1854)
y los 9 abastecimientos de agua de la ciudad en 1849, su captación y grado de
contaminación, de modo que señaló que los más contaminados tenían su captación en el
bajo Támesis y distribuían el agua en distritos al sur del río (compañías Southwark y
Vauxhall, y Lambeth).
Ordenó los 38 distritos de Londres en relación con la mortalidad por cólera y observó que
los 9 distritos abastecidos por las dos compañías anteriores presentaban tasas de
mortalidad más altas que cualquier otro distrito.
En 1853, la compañía Lambeth trasladó su captación de agua río arriba, fuera de la zona
contaminada por la descarga de las alcantarillas. Southwark y Vauxhall permaneció con la
misma captación.
2. Formulación de hipótesis
La frecuencia del cólera está relacionada con el suministro del agua de bebida. La
compañía Southwark y Vauxhall captaba el agua de la sección del Támesis más
contaminada. La compañía Larnbeth la captaba más arriba de ese punto. Por lo tanto las
personas que bebían agua suministrada por Southwark y Vauxhall tenían mayor riesgo.
Lambeth 26.107 98 37
Southwark & Vauxhall 40.046 1.263 315
RELACIONES ENTRE AGENTE Y HUÉSPED
Así como el león no se come al misionero por maldad, tampoco el microbio está animado
de malos propósitos contra el ser humano, al microbio no le conviene matar al hombre,
porque esto significa destruir su base de nutrición y destruirse a sí mismo.
Reed esquematiza las relaciones entre 2 especies con el ejemplo del zorro y el conejo.
Especialmente en islas se han hecho repetirlas experiencias de introducir una especie
tratando de destruir otra preexistente. Imaginemos una población de zorros. Como el
zorro es carnívoro, empieza a devorar conejos, con lo cual la población de zorros
asciende rápidamente y empieza a bajar la población de conejos hasta un mínimum.
Producida esta situación, la población de zorros empieza a decaer, debido a la escasez
de alimento. El descenso en la población de zorros da una oportunidad para que la
población de conejos empiece nuevamente a ascender hasta un punto en que los zorros,
al aumentar el alimento, inician otra onda de crecimiento y descenso que se contraponen.
Estas ondas se van gradualmente amortiguando y se llega finalmente a un equilibrio
biológico, que permite la supervivencia simultánea de las dos especies.
Hay 3 tipos de argumentos para demostrar que las relaciones parásito-huésped siguen la
trayectoria descrita:
1. Historia de la medicina;
2. Epidemiología experimental, y
3. Epidemias teóricas.
1) La Historia de la Medicina muestra cómo, durante la Edad Media, las enfermedades
más prevalentes fueron: viruela, tifus, peste bubónica y cólera, que ocurrían en forma de
grandes epidemias, como ya se ha hecho mención más atrás. La Revolución Industrial de
los siglos XVII y siguientes, cambió profundamente la vida. Surgieron las modernas
ciudades, el artesano medieval se fue transformando en obrero especializado, la máquina
de vapor y los progresos que le siguieron, iniciaron la era de los grandes viajes.
Se destacan las experiencias de Topley, cuya técnica ha sido la más perfecta para
demostrar la evolución de tina enfermedad a través del tiempo. Partió con 10 ratas
colocadas en una jaula, una de ellas infectada con pasteurellosis. Reemplazó el
nacimiento de nuevos seres por la adición diaria de 6 ratas susceptibles. Todos los días y
durante 6 meses, llevó una detallada cuenta de la mortalidad provocada por la
Pasteurella. Se observa una serie de ondas epidémicas sucesivas que van poco a poco
perdiendo intensidad. Algo ha ocurrido en esa población de ratas o en sus relaciones con
el germen, que reproduce exactamente las observaciones de la historia de la medicina.
Amoss se ha acercado aún más a las características de una población humana viviendo
en ciudades: ha creado verdaderas aldeas de ratas, construyendo grandes cajas con
pequeñas divisiones. Sus observaciones son enteramente comparables a las de Topley.
Es decir, la ocurrencia de ondas sucesivas de epizootias entre las ratas, tal como sucede
en grupos humano en plazos de años o siglos.
3) Epidemias teóricas. William Farr, a mediados del siglo pasado inició el estudio
matemático de las epidemias. Existen numerosos trabajos que han llevado a formular la
teoría, y demostrar que el estallido, el curso y el término de una epidemia siguen ciertas
leyes que ha sido posible desentrañar. El sarampión, debido a sus características tan
especiales ha permitido, más que ninguna otra enfermedad, aproximarse a estas leyes
epidémicas. Hedrich, en su clásico estudio hecho en Baltimore, demostró cómo la
epidemia estalla citando la proporción de susceptibles pasa por encima de cierto nivel, y
cesa cuando la proporción de susceptibles cae por debajo de un nivel crítico. Pero existe,
además, una cantidad de variables que operan sobre un factor llamado "p" (probabilidad
de contacto adecuado). Todos estos estudios han conducido a fórmulas que permiten
calcular el número de casos en un período, si conocemos el número de enfermos y
susceptibles en el período anterior. Cuando se utiliza la fórmula C t+1 - S (1 - qct) en una
población dinámica, en que se imitan las condiciones de una ciudad, la cifra de enfermos
calcularlos origina una serie de ondas epidémicas con tendencia a declinar. Es decir, se
repite la clásica curva de la epidemia experimental y de la historia de la medicina y que
expresa las relaciones huésped-agente.
Los mismos resultados se obtienen en una máquina de azar donde enfermos y
susceptibles están representados por bolitas de distinto color. Si se agregan 10 bolitas en
cada tiempo sucesivo de la operación, que reemplace al nacimiento de nuevos
susceptibles, las curvas obtenidas son enteramente comparables a todo lo anterior
descrito.
Previamente, definiremos en forma breve que Ecología es la ciencia que estudia las
relaciones entre las especies vivas y el ambiente, por lo tanto envuelve de manera amplia
al hombre.
En resumen, a través de los argumentos discutirlos más arriba, se pueden establecer los
siguientes conceptos:
La etimología de la palabra nos lleva a tres raíces griegas (epi = sobre; demos - el pueblo,
la gente, y logos = estudio, tratado) , lo cual indica que se trata del "estudio de algo que
cae sobre la gente". En lenguaje moderno y de un modo amplio se podría formular como
"el estudio de todo aquello que afecta a la comunidad", concepto que está muy próximo a
una definición propuesta por Gordon.
Frost la define como "historia natural de las enfermedades". Gordon, como "estudio de la
enfermedad como fenómeno colectivo o fenómeno de masa", o también como "un amplio
método biológico aplicable a toda enfermedad que envuelva a grupos humanos".
b) Como ciencia inductiva trata de encuadrar esa distribución dentro de una doctrina
consecuente (epidemiología analítica) .
La multiplicidad de definiciones refleja la riqueza del material que estudia, puesto que
abarca todos los factores relacionados con la vida humana. En este sentido la
Epidemiología es sinónimo de ecología médica.
Morris afirma que la Epidemiología "es la Cenicienta de las Ciencias Médicas" y, que "es
preciso insistir en que la Salud Pública necesita más estudios epidemiológicos al igual que
la medicina en general, y hasta cabe decir, la Sociedad en su conjunto".
Esta expansión insospechada de la Epidemiología hace cada vez más compleja la tarea
de encontrar otra definición adecuada. Todas las propuestas más arriba resultan limitadas
como para abarcar sus variadas aplicaciones y posibilidades en la investigación y en el
planeamiento, ejecución y evaluación de programas de Salud. De aquí surgen tentativas
para definir la Epidemiología como la "ciencia diagnóstica en Salud Pública" o de
"ecología médica".
A manera de resumen, podríamos intentar una definición un tanto personal, diciendo que
la Epidemiología es una ciencia, fundamentalmente un método de raciocinio inductivo que
se utiliza en la investigación y solución de cualquier problema de Salud que concierne a la
comunidad sin importar su etiología.
EL MÉTODO EPIDEMIOLOGICO
Esta es una forma de pensamiento que intenta abordar problemas sanitarios con el rigor
de las ciencias matemáticas. Esta se basa en dos pilares fundamentales a saber:
Periodo científico: la enfermedad no ocurre por azar.
Existen factores causales: por tanto preventivos que pueden ser identificados mediante la
investigación, de forma que, la 1ª nos hace olvidarnos de la parte religiosa y la 2ª es un
animo al trabajo.
Esta se define como el estudio de la distribución y los determinantes de la frecuencia de la
enfermedad en poblaciones humana, esta nos habla de la frecuencia de la enfermedad es
una valoración cuantitativa de la enfermedad.
Distribución realizada en función persona-lugar y tiempo.
Determinantes los factores causales o de riesgo.
Poblaciones humanas pues esta se desarrolla en poblaciones humanas, pero también
trabaja en aspectos fisiológicos, bioquímicos, experimentación con animales, este método
epidemiológico se estudia en causas afines, se estudian aspectos relacionados con
factores que condicionan una determinada condición de salud, trabajamos en
tratamientos, mejora de estos y aspectos relacionados con factores medio ambientales.
La epidemiología aporta 2 misiones complementarias, estas se resumen en:
1. nos permite contrastar hipótesis sobre el papel del medio ambiente.
2. estudiar fenómenos inabordables desde el laboratorio.
Razonamiento epidemiológico
Mecanismo de trabajo del epidemiólogo, este comienza con la sospecha, esta puede ser
en base a lo descrito en la literatura o en base a una experiencia personal. En cualquier
caso la sospecha esta avalada por los pensamientos científicos, la sospecha de
enfermedad es algo que se debe de hacer, realizar hipótesis, justificar por que se produce
el suceso, que ocurre en individuos comunes para tratarlos a todos, después
comprobamos la hipótesis esta se adecuara a ella, evaluamos los resultados teniendo
mucho cuidado hacia la determinación de errores, estos pueden o no ser conocidos, en
base a los resultados examinamos los datos y es la que nos permite determinar la
existencia de causalidad importante.
Aplicaciones
Nos aporta información en el mundo real, por lo que esta se aplicara en las prioridades
sanitarias de la comunidad.
Método epidemiológico
Sucesión de etapas que permite realizar una investigación, con la característica de que
una etapa sucede a la otra y no puede cambiarse el orden sucesión y el fracaso de una
etapa supone el fracaso del estudio pues se rompe la continuidad en el trabajo.
En las páginas precedentes se usan los términos "ciencia" y "método" para intentar definir
la Epidemiología. Milton Terris ha señalado los excesos cometidos al abusar del concepto
"método epidemiológico" para bautizar cualquier esfuerzo mental que se aplica a una
variedad de problemas en salud o áreas relacionadas. Aníbal Osuna, en su amplia
exposición sobre Filosofía de la Ciencia, agrupa todos los aspectos que cubre el método
científico y sus interrogantes filosóficas: la noción de "problema"; el material de la ciencia;
la abstracción: el análisis, la síntesis y sus leyes; el factor personal en la investigación
científica; creencia y criterio de verdad, inducción y deducción; teoría de la causalidad.
En resumen, creemos que la Epidemiología es una ciencia compleja por sus variadas
conexiones y raigambre, al nutrirse de las ciencias biológicas, matemáticas y sociales.
Exige de sus cultores una actitud inquisitiva frente a los problemas que les son
planteados. Por su naturaleza y propósitos ha desplegado un método que constituye su
porción nuclear. Pero este método encuadra dentro del método científico, una compleja
arquitectura del pensamiento humano desarrollada a través de la historia. Desde
Hipócrates se advierten los primeros intentos de relacionar la enfermedad con factores
ambientales, hasta llegar inevitablemente a un gran clínico londinense, John Snow, quien
entregó a la ciencia la versión más acabada y uno de los productos más clásicos del
método llamado epidemiológico.
Creemos oportuno hacer una advertencia contra esa actitud encasilladora. La ciencia es
una sola y lo único que varía son seis campos de aplicación, que le imprimen ciertas
características especiales. El método usado en Epidemiología no escapa a las leyes y
principios generales de la ciencia. Más adelante se verá su paralelismo con el método
clínico. Entendido así, se ilustra con la brillante lección dejarla por John Snow a través de
sus investigaciones sobre cólera en Inglaterra hace más de un siglo.
Mapa original del Dr. John Snow. Los puntos muestran los casos de muerte por cólera
durante la epidemia ocurrida en Londres en 1854. Las cruces representan los pozos de
agua de los que bebieron los enfermos.
El triángulo epidemiológico causal de las enfermedades está formado por el medio
ambiente, los agentes y el huésped. Un cambio en cualquiera de estos tres componentes
alterará el equilibrio existente para aumentar o disminuir la frecuencia de la enfermedad,
por lo tanto se pueden llamar factores causales o determinantes de la enfermedad.
Desde niño reveló un talento particular para las matemáticas, tal vez el primer indicio de
una mente organizada y lógica. A la edad de 14 años se inició como pupilo de un cirujano,
Mr. William Hardcastle, en Newcastle-on-Tiny, donde adquirió sus primeras experiencias
sobre el cólera entre 1831-32, que le fueron muy valiosas para más tarde.
Víctima de una tuberculosis pulmonar incipiente y más tarde de nefritis crónica, atendido
por Bright, se vio obligado a descansar, pero sin desmayar en su afán inagotable de
investigación.
Es difícil encontrar en la Historia otra figura que compita con John Snow en esa capacidad
increíble de investigación y cobertura de tantos aspectos variados en el riquísimo campo
de la medicina. En todos sus trabajos persiste la misma hondura y solidez, el pensamiento
brillante y el raciocinio inductivo de la mente más organizada que produjo la era victoriana.
Es difícil imaginarse a este hombre extraordinario en su ajetreo incesante, atendiendo
enfermos, administrando anestesias, estudiando y, encima de todo, empeñado en su
tarea de investigación.
A nosotros nos interesa John Snow porque a través de sus estudios sobre el cólera, legó
a la posteridad el método epidemiológico. Existen numerosos trabajos y observaciones
que hizo Snow sobre el cólera, colectados en un libro publicado por Frost, Snow on
Cholera. La lectura de estos trabajos revela el fino espíritu de observación, la brillantez
genial de su pensamiento y la solidez granítica de su raciocinio inductivo.
Los pasos que se dan en el método epidemiológico, en esencia, son los mismos que se
siguen en el método clínico. El método clínico es un sistema de pensamiento aplicado al
individuo enfermo y cuya finalidad es establecer un diagnóstico e instituir un tratamiento.
El método epidemiológico es una forma de pensamiento sistematizada que se aplica, no
ya al individuo, sino a la comunidad, y cuya finalidad es establecer causas e indicar
medidas de control.
Al definir Epidemiología, se dijo que esta ciencia describe la enfermedad como fenómenos
de masa, a diferencia de la clínica que describe los síntomas, signos, evolución de ellos
en un individuo. En cambio, el epidemiólogo se ocupa de describir la enfermedad en la
comunidad: distribución en el espacio y tiempo, distribución por edad, sexo, profesiones,
prevalencia estacional y otros rasgos que permitan diferenciar una enfermedad de otra
por su conducta frente al grupo social. Para comprender la enfermedad como fenómeno
de masa, es preciso apoyarse en otras ciencias que coloquen al médico en mejor posición
para entender todos los fenómenos complejos que resultan cuando el hombre vive en
comunidad.
Clínico Epidemiológico
Substrato Individuo enfermo o sano Comunidad enferma o sana
Colección deAnamnesis personal,Antecedentes del área a partir
antecedentes familiar, remota y actual de varias fuentes
Inspección del área en
Examen físico general y
Examen personal general y particular a
especial
determinados servicios
Hipótesis Diagnóstico clínico Hipótesis epidemiológica
Medidas
Tratamiento inicial Recomendaciones generales
transitorias
Exámenes (sangre,Exámenes de agua,
Laboratorio
orina, etc.) alimentos; otras muestras
Conclusión
Diagnóstico definitivo Diagnóstico epidemiológico
diagnóstica
Medidas definitivas Tratamiento definitivo Medidas de control
Clínica por mejoría delEpidemiológica por remoción
Alta
enfermo de la causa
Registro de la
Historia clínica. Epicrisis Ficha epidemiológica Informe
acción efectuada
Compensación Honorarios cobrados alSueldo cobrado a la
económica paciente comunidad
Epidemiología
Metodología en epidemiología
Un progreso muy importante en el siglo XX, publicado en 1956 con los resultados
del estudio de médicos británicos, fue la demostración de la relación causal entre fumar
(tabaquismo) y el cáncer de pulmón.
Transición epidemiológica
En líneas muy generales, las medidas de control pueden clasificarse en 2 grandes grupos:
1) Medidas frente al foco, y 2) Medidas permanentes.
Si llamamos foco al sitio donde se han producido uno o más casos, el concepto es amplio
y puede aplicarse a una familia, a una institución o área geográfica. En muchos países de
Latinoamérica los servicios sanitarios se limitan a acudir cuando se tiene conocimiento de
un foco, mediante acciones aisladas, esporádicas y con buen despliegue de recursos.
Estas acciones toman el nombre generalmente de campañas y en muchas ocasiones han
dado origen a estructuras que siguen operando en forma más o menos permanente
(Campaña del tifus, Campaña antivariólica, etc.) . Si las circunstancias lo exigen, surgen
fondos de emergencia, se adquiere equipo y se contrata personal. Una vez pasada la
emergencia, ese personal queda incorporado al servicio sanitario y en esta forma han
nacido nuevos departamentos o divisiones (Departamentos. de Tuberculosis, de Malaria,
de Tifus, etc.).
Pero estas acciones intensas y aisladas no aparecen coordinadas con el resto (le los
programas. Es un tipo de acción comparable a la de bomberos que acuden al incendio,
pasado el cual se retiran al cuartel para adoptar una burocrática posición de reposo. La
tendencia actual es abandonar el viejo concepto de campaña y pasar al concepto
de programa, que significa acción planeada y sistemática, con etapas definidas de
planeamiento, ejecución y evaluación. Es decir, de acciones temporales sobre el foco, la
atención se desplaza hacia acciones permanentes.
Se comprende que las medidas generales permanentes son las más importantes, por
cuanto son aquéllas dirigidas a rebajar el riesgo de enfermar en la comunidad en todo
momento. En cambio, las medidas frente al foco son pasos de emergencia de valor
transitorio que se adoptan localmente cuando ya se ha producido un caso. Se discutirán
separadamente unas y otras.
MEDIDAS PERMANENTES
Mientras que las medidas que se adoptan frente al foco equivalen a la acción limitada y
esporádica de los bomberos frente a un incendio, las medidas permanentes de control se
aplican a diversos niveles con el objeto de rebajar el riesgo de enfermar a un mínimo. Las
medidas permanentes más importantes son: inmunización, control de insectos vectores,
saneamiento, control de alimentos, educación sanitaria, etc.
Las vacunas muertas son cultivos inactivados por la acción del calor o medios químicos.
Se pretende conservar íntegramente el poder antígeno, lo cual ha significado vencer
numerosas dificultades. Por ejemplo, la vacuna anticoqueluche exige que el cultivo sea
fresco, en fase I.
Se podría decir que en las enfermedades respiratorias el mayor éxito se ha logrado con la
aplicación de inmunizacionesa nivel de susceptibles. En las enfermedades digestivas se
podría concluir que el control ha estado centrado en las medidas de saneamiento
ambiental, que opera a nivel de las vías de transmisión. En las enfermedades que se
transmiten por contacto directo el control se ha polarizarlo al tratamiento de la fuente
infectante. Finalmente, en las enfermedades que se transmiten por vector, el mejor
rendimiento se ha obtenido al aplicar medidas De control sobre los insectos transmisores.
En todas las enfermedades tiene importancia el aislamiento, como también la educación
sanitaria. El saneamiento ambiental ha producido sus mejores frutos en las enfermedades
digestivas y aquéllas producidas por vector.
CONTROL Y ERRADICACIÓN
Para que ocurra un caso de difteria, no basta con la existencia de bacilo de Loeffler,
porque es preciso que concurran una serie de factores dependientes de la tríada huésped
-agente- ambiente: hacinamiento, oportunidad de trasmisión, huésped susceptible, dosis
infectante, cepa toxígena y virulenta, etc. Lo mismo ocurre en tifoidea, tos ferina o
tuberculosis. Como se ha visto a través de todo el curso, la enfermedad es la resultante
del libre juego de un conjunto de variables que encuadran en un principio general de
multicausalidad. Lo mismo ocurre en las enfermedades crónicas no trasmisibles, donde
un número todavía mayor y no bien determinado de variables se entrelazan de manera
compleja hasta determinar la aparición de enfermedad. El período de incubación es
conocido y breve para las enfermedades trasmisibles agudas. Toda la evidencia clínica y
anatomopatológica demuestra que también existe un período no precisado de incubación
para las enfermedades crónicas no trasmisibles. Lo único que se puede afirmar es que
debe ser muy prolongado, tal vez de varios años. A lo largo de este periodo operan en
manera silenciosa y compleja los factores etiológicos, proceso que plantea un serio
desafío- para la investigación epidemiológica.
Cuadro Resumen
ESCALAS: Las escalas miden las características o atributos de los elementos existentes
en el proceso de observación y medición de una realidad epidemiológica, la cual tiene
fases y las aplicaciones cuando queremos conocer la realidad.
1. Escala nominal:
Es la más elemental o menos compleja y clasifica los grupos de acuerdo con la presencia
o ausencia de un atributo o característica o sea que tiene dos posibilidades, ejemplo: vivo
o muerto, hombre o mujer (es dicotómica); cuando ofrece más de dos posibilidades
ejemplo: grupo sanguíneo A, B, AB, O; es politómica).
2. Escala ordinal:
Como su nombre lo indica permite establecer un orden, una secuencia lógica que califica
la intensidad del atributo ejemplo: excelente- regular- malo; frío máximo- frío medio- frío
mínimo. Como se puede apreciar es una escala de graduaciones o grados entre las
observaciones y por lo tanto no permite un manejo estadístico (promedios, porcentajes
etc.)
3. Escala numérica
Es la más desarrollada, la más compleja, la que permite establecer un orden de las
observaciones y conocer la distancia o grado que separa una (s) de otra (s) ejemplo, peso
en gramos, talla en centímetros, temperatura en grados, edad en años, número de casos.
Error y sesgo
Precisión e Imprecisión
Figura
ERROR SESGO
Cuando las observaciones no difieren hechos entre sí, Se dice que la medición es precisa;
o imprecisa en el caso contrario. La parte izquierda de la figura indica imprecisión
(además de error). En la parte derecha se puede observar bastante precisión, pues la
distancia entre los disparos en bastante pequeña, además hay sesgo).
Lo ideal es poder realizar las observaciones sin error y sin sesgo; sin embargo en la
práctica esto es muy difícil. La epidemiología dedica buena parte de su tiempo a la
evaluación es estas dos fuentes de equivocación y a la forma de evitarlas.
El observador
Ya vimos como existen situaciones e error y sesgo que tenemos que neutralizar para
poder hablar con la exactitud necesaria. Pues bien de estas situaciones se conocen otros
factores que influyen en el resultado los cuales en la mayoría de los casos son ejecutados
por el observador y tienen que ver con:
1. Las cifras absolutas y relativas, señalan cuantos hechos existían en una cierta fecha o
período en tal sentido ayudan a definir la magnitud de un problema lo cual les confiere
utilidad para ciertos propósitos ejemplo: 500 nacimientos en una ciudad dada, en el
año anterior es una información valiosa para planificar con propiedad un programa de
salud materno- infantil.
Sin embargo las cifras absolutas no son muy útiles para medir y comparar los fenómenos
de salud y enfermedad en una comunidad en función de ciertas variables persona-
tiempo- lugar9 lo cual es una de las funciones primordiales de la epidemiología. Para ellos
es necesario recurrir a las cifras relativas, que como su nombre lo indica proviene de
relacionar una cifra absoluta con otra u otras. Ejemplo: número de casos cualquiera/
número de población.
Razón- proporción- tasa; acerca de cuyo significado no hay acuerdo general, de todas
maneras se consideran los criterios más usados en medicina y salud pública:
Una razón indica el tamaño de un número respecto a otro ejemplo: hombre/20 mujeres.
Las dos cantidades que se relacionan no están contenidas dentro de la otra. Se lee
diciendo que hay veinte mujeres por cada cinco hombres.
Una proporción indica el tamaño de una parte o proporción de un total con respecto a
ese total ejemplo: de 45 egreses hospitalarios 9 son pacientes de sexo masculino: 9/45 =
0.2 el numerador se contiene en el denominador. Se lee en términos de porcentaje
diciendo que 0.2x100 = 20%, el 20% de los egresos hospitalarios corresponden a
pacientes de sexo masculino, o el 0.2 de los egresos... o la quinta parte de los egresos...
Tasas: para medir el riesgo de que ocurra un evento dado en una población y poder
hacer comparaciones validas, se debe relacionar ese evento con la población en la cual
aconteció o puede acontecer. Constituyen el mayor instrumento de comparación en
epidemiología y debe tener tres (3) elementos a saber:
Las tasas pueden clasificarse de acuerdo con la naturaleza del evento en: Natalidad-
morbilidad- mortalidad- letalidad.
Otra base de clasificación reside en la constitución del denominador o población:
Crudas (brutas o globales) cuando los eventos se refieren a la población total; y
especificas cuando se refiere a una parte de la misma, definidas tanto la una como la otra
conforme a una o más características (sexo- edad- ocupación- estado civil- etc.,).
Una tasa puede hacerse tanto específica como se quiera, siempre que sus elementos se
identifiquen con toda claridad.
INDICADORES DE MORTALIDAD:
CABE DESTACAR:
Indicadores de Morbilidad
Lo anterior, permite a su vez, establecer los tipos de demandas, que existen, para los
usuarios en los programas de salud.
a- 1 Demanda satisfecha
b- 2 Demanda no satisfecha
c- 3 Demanda potencial.
Repasemos
Razón: cociente de una frecuencia absoluta en relación con otra frecuencia absoluta
independiente. Razón de mortalidad = nacimientos/defunciones; masculinidad =
varones/mujeres
Proporción: cociente de una frecuencia absoluta en relación a un total en que ella esta
incluida. Proporción de hombres en la población colombiana = hombres/población total.
Por lo tanto un indicador de este tipo tiene tres partes fundamentales, a saber: un título,
una ecuación y la explicación de la interpretación de cada parámetro que tuvo en cuenta
el que construyó el indicador.
EPIDEMIOLOGIA DESCRIPTIVA
Ramas de la Epidemiología
De una manera muy general, los estudios epidemiológicos cumplen al menos dos
funciones; describir y analizar de acuerdo con el diseño y con la medida de riesgo
utilizados, los estudios epidemiológicos son:
Variables.
Tres preguntas esenciales hay en epidemiología descriptiva para tipificar un fenómeno:
¿A quién afecta?, ¿Donde acaece?, ¿Cuando sucede?. A ellas responde precisamente
las características de persona, lugar y tiempo.
Desde tiempo inmemorial se sabe que las enfermedades se distribuyen de manera
diferente en la población en función de ciertos atributos y/o características del ser
humano.
Para un individuo una característica es una general, permanente o no, que distinguen a
una persona como: edad- ocupación- religión- educación- status socio económico etc.;
mientras que un atributo es una cualidad inherente en su constitución, como sexo- raza-
grupo sanguíneo- etc. Mientras que una persona con el correr del tiempo conserva
atributos como el sexo; otras características como edad varían en el mismo individuo.
Esos atributos y/o características del ser humano, que condicionan diferencias en el
comportamiento y ocurrencia en los eventos de salud- enfermedad, son: Edad- sexo-
raza- ocupación- status socio económico religión- estado civil- lugar de nacimiento- etc.
Raza: Ya sea por las costumbres, estilos de vida, o por una herencia biológica, es una
variable que registra diferencias de ocurrencia y comportamiento de enfermedades
ejemplo: blanco y negro- indios y mestizos- caucásicos y mongoloides.
Religión: Tienen relación con el grupo étnico, condiciona comportamientos humanos,
estilos de vida, etc. Ejemplo, no aceptar transfusiones los adventistas, hacerse la
circuncisión los judíos.
Capítulo V
Epidemiología Analítica
Estudios de Cohorte
Son estudios que proporcionan una buena aproximación a la etiología de la enfermedad,
a la antecedencia de los factores de riesgos y a la subsecuencia del efecto o enfermedad,
o sea que son estudios de seguimiento con dirección hacia delante. A veces se requiere
de un tiempo prolongado para su ejecución dependiendo del periodo de incubación de la
patología en estudio.
Por eso se llaman prospectivos, porque la observación se inicia desde la exposición al
factor causal hasta la aparición de la enfermedad, se escogen dos grupos uno expuesto al
factor de riesgo y otro no expuesto, estos grupos son observados durante un tiempo para
determinar la frecuencia de la enfermedad que se presenta en ellos. También puede
hacerse sólo con individuos ya enfermos, el ejemplo clásico es el de la cohorte con los
pacientes que padecen tuberculosis y que trimestralmente se les hace la cohorte.
La Medida de Frecuencia: Cohorte de expuestos y cohorte de no expuestos.
La Medida de Asociación: Riesgo relativo.
Ventajas:
Dan las mejores respuestas en cuanto a la determinación de riesgos.
Menos posibilidades de sesgo.
Es el mayor valor en la determinación de un factor causal.
Produce estimativos directos de la incidencia de la enfermedad tanto en los expuestos
como no expuestos.
Desventajas:
Sólo sirven para enfermedades relativamente frecuentes.
No son útiles en afecciones de baja prevalencia.
Su costo es elevado.
Pueden ser duraderos y de alta complejidad.
Ventajas:
Cuando la enfermedad es rara, ejemplo el cancer cuya incidencia es baja.
Cuando no se tiene una hipótesis concreta y se pueden explorar varios factores.
En lineas generales son más baratos, se pueden realizar en menos tiempo y son más
fáciles de ejecutar que los estudios de cohortes.
Desventajas:
Son poco útiles cuando la frecuencia de exposición del factor causal investigado, es muy
baja.
No produce estimativos directos de la incidencia de enfermedad en los expuestos y no
expuestos.
Puesto que se trata de averiguar eventos que ocurrieron en el pasado, el aspecto
relacionado con la memoria del entrevistado adquiere una importancia capital.
Se considera de menor valor en la confirmación de una hipótesis, por la facilidad con que
se introducen sesgos.
Existen estrategias para minimizar errores y sesgos, a través del estudio ciego, en donde
los grupos experimentados no saben cual es el control o el sujeto del experimento, y el
estudio doble ciego cuando ni el experimentador ni los experimentados conocen el grupo
sujeto experimentado, por ende existe en este caso una tercera persona que si sabe las
variables.
El diagnóstico no constituye un fin en sí mismo, sino que una etapa fundamental que
origina muchas acciones. En la esfera individual del paciente, donde se mueve el clínico,
un buen diagnóstico conduce a un buen tratamiento. En la esfera de la comunidad, el
diagnóstico tiene mucha importancia epidemiológica y administrativa, porque da origen a
una serie de acciones trascendentales.
Esto supone que el médico en su práctica necesita reunir las condiciones de sagacidad
clínica y epidemiológica a fin de hacer mejores diagnósticos. Por lo tanto, el conocimiento
sobre las enfermedades más frecuentes en su comunidad, sus características
epidemiológicas generales, su modo de transmisión, etc., constituyen un elemento
valiosísimo para el buen ejercicio clínico. Esto abre las puertas para que un buen clínico
sea, sin proponérselo, un buen epidemiólogo y recíprocamente, para que un buen
epidemiólogo desarrolle las potencialidades para desempeñarse como un clínico
aceptable.
Por cierto no puede postularse una inclusión mutua de ambos campos, que usan técnicas
y persiguen objetivos diferentes. Pero deseamos insistir sobre el hecho de que existe una
ancha zona de contacto entre la clínica y la epidemiología, que no ha sido suficientemente
reconocida ni explorada.
Antes de referirnos a los caracteres de cada grupo, queremos insistir sobre ciertos
conceptos muy generales que ayuden a una mejor comprensión del método.
De un modo concreto, para ilustrar la idea con ejemplos, el reservorio de difteria está
constituido por los miles de gargantas infectadas con bacilo diftérico en la comunidad
(enfermos clínicos, infecciones subclínicas, inaparentes y portadores sanos) . La porción
más activa de este reservorio es seguramente la de casos clínicos. Pero también importa
el tiempo durante el cual cada individuo está eliminando bacilo diftérico. Supongamos
1.000 enfermos con un promedio infectante de 10 días cada uno. Esto haría una imagen
teórica de 10 x 1.000 - 10.000 días-persona, para expresar el tamaño del reservorio más
activo. Supongamos que un antibiótico reduce la longitud del período infectante a 5 días
en todos los casos. El tamaño del reservorio se ha reducido a 5.000 días-persona. En
este impacto del tratamiento sobre el reservorio radica su importancia epidemiológica. Por
este motivo, el tratamiento del paciente alcanza su máxima importancia en aquellas
enfermedades con reservorio humano exclusivo o preferente.
Sea humano o animal, el reservorio es vivo, lo cual está indicando un alto grado de
parasitismo del microbio, que exige la presencia de tejidos vivos para sobrevivir,
multiplicarse y mantenerse. Hay algunos microorganismos capaces de adoptar formas
esporuladas o simplemente de resistir las condiciones adversas del ambiente exterior. El
bacilo de Koch es capaz de resistir meses en el polvo de una habitación. La espora del
bacilo carbuncloso o tetánico puede resistir por años en el suelo. El histoplasma
capsulatum resiste igualmente años en el ambiente exterior. En estos casos, aun cuando
el reservorio original era vivo, se ha constituirlo un vasto reservorio adicional en el suelo y
otros sitios, de muy difícil o imposible control. Es la situación producida también en varias
enfermedades parasitarias, en que formas larvarias aguardan al huésped humano en el
suelo, en el agua y otros sitios (anquilostomiasis, esquistosomiasis).
La otra vía de extraordinaria importancia que pueden seguir los microbios está constituida
por todo aquello que llega a la boca del hombre, es decir, todos los alimentos. Pero el
éxito de la transmisión por alimentos depende de ciertas condiciones: la dosis infectante
que cayó sobre el alimento; que el alimento sea un buen medio de cultivo; que exista una
temperatura adecuada para la multiplicación microbiana y que transcurra un tiempo
suficiente desde la contaminación hasta el consumo del alimento. De aquí que adquieren
mayor significación epidemiológica todos aquellos alimentos que reúnen las condiciones
descritas.
Una vía de transmisión muy particular la constituye el insecto vector. Los insectos
vectores pueden utilizar diversos mecanismos. Algunos actúan simplemente como
vectores mecánicos, por ejemplo, la mosca, que acarrea gérmenes patógenos intestinales
en las patas y en su cuerpo. Pero mucho más interesantes son aquellos
vectores biológicos, en que el microorganismo se multiplica y hace una parte de su ciclo
vital en el cuerpo del insecto. El plasmodio de la malaria se multiplica en el estómago del
mosquito y llega hasta las glándulas salivales. El mosquito infecta a un susceptible,
porque, junto con picar hace una verdadera inyección hipodérmica de saliva infectada. En
el caso de la pulga Xenopsylla cheopis, la transmisión de la peste bubónica se hace por
rejurgitación. En el tifus exantemático clásico es la deyección infectada del piojo el
mecanismo por el cual se transmite la enfermedad. En estos casos toda la transmisión de
la enfermedad se concentra y se identifica en un insecto, único puente de conexión entre
enfermo y susceptible.
Por último, en un grupo importante de enfermedades no existe una vía entre enfermo y
susceptible, porque éstos se ponen en contacto directamente y la transmisión se opera a
través de piel o mucosas.
Es necesario aclarar qué entendemos por contacto directo: la transmisión que ocurre por
relación física entre susceptible y fuente contagiante (relación sexual, beso, etc.).
Es difícil muchas veces fijar límites entre la infección por contacto personal y la infección
aérea, porque se puede trazar una línea que establece relaciones entre ambas. La nariz y
la mano, como se verá más adelante, son los órganos más importantes en la recepción y
transmisión de muchas infecciones.
Se han descrito brevemente las tres variables fundamentales que rigen a toda
enfermedad transmisible. Se insiste sobre estas tres variables, porque también se hallan
presentes en cualquiera enfermedad que no sea necesariamente infecciosa, cuando se
estudia como fenómeno de masa. Por ejemplo, en algo muy alejado aparentemente de las
enfermedades transmisibles, como son los accidentes del tránsito, se puede aplicar el
método epidemiológico e identificar los tres elementos en la siguiente forma:
Tiene importancia recordar estas tres variables para propósitos de control y para poder
establecer a qué nivel se obtiene mayor rendimiento con las medidas adoptadas.
Cuando Chapin estudió tasas de ataque secundario, postuló que si la tasa aparece baja,
puede sospecharse la existencia de enfermedad a nivel subclínico. Ya Wickman, en 1905,
al estudiar un brote de poliomielitis en Estocolmo, fue capaz de trazar cadenas
epidemiológicas entre los casos paralíticos y postular la existencia de formas no
reconocidas de la enfermedad.
Llamamos enfermo clínico a aquel que presenta un cuadro reconocible, que puede ser
típico o atípico, pero en todo caso llama la atención del individuo, la familia y el médico.
La enfermedad clínica, por constituir una entidad manifiesta, motiva consulta al médico o
al hospital. Con toda la variada gama de cuadros a que da origen constituye el material de
trabajo habitual del médico clínico.
En un pueblo de North Carolina, con una población de 701 habitantes, estalló un brote
epidémico de tifoidea en 1944, estudiado por Murphy. En una primera fase se obtuvieron
coprocultivos de 642 personas, de las cuales resultaron 80 positivos. Estos 80
coprocultivos positivos correspondieron a los siguientes casos:
1. Infección inaparente 11
2. Casos ambulatorios 11
3. Enfermos en cama 1-9 días 20
4. Enfermos en cama 10 días o más 38
Esto constituye una buena demostración de la variada gama de reacciones en una
población expuesta al mismo riesgo: hubo 38 formas que podríamos catalogar
como clínicas (4); 31 formas subclínicas (2-3) y 11 formas asintomáticas oinaparentes. A
no mediar la investigación epidemiológica y los exámenes de laboratorio, jamás esos
individuos habrían sabido que tuvieron tifoidea. Una enfermedad leve, consistente en
cefaleas, fiebre moderada y molestias vagas constituye una patología que ordinariamente
se mitiga con analgésicos y se rotula de mil maneras ("catarro", "malestar pasajero",
"gripe", etc.). Para el clínico es una patología sin importancia, porque no amenaza la vida
del individuo, porque no llama la atención ni consulta médico. Para el epidemiólogo es
precisamente una patología muy importante: éstas son las formas que contribuyen con
una fuerza enorme a mantener, difundir y perpetuar la enfermedad transmisible en la
comunidad.
Al encasillarlas así surgen algunas dificultades, porque en ciertos casos una enfermedad
puede transmitirse por más de una vía (carbunclo, peste bubónica, etc.). En estos casos
se ubica según sea su vía de transmisión más frecuente.
Queda el problema de algunas enfermedades, en que hoy por hoy se desconoce la vía de
transmisión. Por ejemplo, en poliomielitis lo único que se puede afirmar es que se
transmite por alguna manera de contacto personal, en que probablemente las vías
respiratoria y digestiva juegan, un rol importante.
insecto
Z Respiratorias Digestivas Contacto directo
vector
Humano Humano y
1. Reservorio. Humano y animales Humano y animales
exclusivo. animales
2. MorboMuy alta. GrandesAlta. brotesEndemia y Baja.Muy alta.
-Mortalidad. epidemias. epidémicos. Epizootias. Epidemias.
3. Todas
Predominan Todas edades. Predominan
Distribución po edades.Predominan
infancia. Predominan juventud. edadadulta.
r edad. edad adulta.
Las Cero en
Menos que
4. Difusibilidad.enfermedades má Limitada. ausencia de
respiratorias.
s difusibles. vector.
Por lo general,
Por lo general,
5. Inmunidad. sólida.Otras muyRelativa. Relativa.
escasa y transitoria.
transitoria.
Clínico y
6. Forma deClínico yPredominan formas subclínico.
Clínico y subclínico.
ataque. subclínico. subclínicas. Predomina
clínico.
7. Prevalencia En relación
Invierno. Verano. Variable.
estacional vector.
Mayoría
enfermedades
Importancia Mayoría
eruptivas caen en Control
8. Rasgos en mortalidad infantilzoonosis caen en
este centrado
especiales Diarrea, este grupo.
grupo. Importancia alvector.
síntomaconstante. Venéreas.
en mortalidad
infantil.
9. Vacunas. Las más eficaces. Valor discutible. De uso veterinario. Uso
limitado.
Eficacia
satisfactoria
Importante junto con Sin objeto
10. Valor delRelativo,
desinfección concurren Muy efectivo. en ausencia
aislamiento. discutible.
te. vector.
11. Valor del Importancia Muy
Muy dudoso. Muy importante.
saneamiento. sóloindirecta. importante.
12. ValorImportante
epidemiológico comoprevención
Importancia individual. Muy importante. Importante.
del decomplicaciones
tratamiento. y muerte
ANEXO
Capítulo VI
Teóricamente la fuente más importante debería ser el médico tratante. Pero hay
otras fuentes: hospitales, laboratorios, instituciones, familiares, maestros. Una
fuente de importancia muy particular, pero tardía y reveladora, es el Registro Civil.
Pero descubrir casos a través del certificado de defunción significa el testimonio de
una ignorancia respecto a lo que ocurre en la comunidad.
A pesar de la diversidad de formación en las escuelas médicas y las múltiples
variables relativas al ejercicio de la profesión, los médicos de todo el mundo
comparten una característica común: escasa colaboración o interés por notificar los
casos.
Una encuesta hecha en Santiago de Chile (1947) reveló una gran variedad de
respuestas, pero posibles de reunir en 3 grandes grupos principales:
b) No notifican porque no están convencidos que tenga alguna utilidad (puros fines
estadísticos) ;
Q u é s e p u e d e h a c e r p a r a m e j o r a r l a n o t i f i c a c i ó n . Confrontando
las razones .aducidas, las medidas más prácticas que pueden sugerirse son las
siguientes:
b) Reuniones con los médicos para explicarles y discutir con ellos las ventajas y la
importancia de la notificación. Empezar en la Escuela de Medicina, y
C ó m o e s t i m a r p r o p o r c i ó n d e c a s o s n o t i f i c a d o s . La suma de
factores hace que la denuncia se mantenga más o menos constante. Se estima
que el número de muertos se conoce con mayor exactitud que el de enfermos. Si
se computan tasas de letalidad relacionando muertes y enfermos notificados, la
tasa resultante es extremadamente alta. Por ejemplo, en Estados Unidos la
letalidad para meningitis aparece del orden de 25%, aunque sabemos que en
series controladas de enfermos no debería exceder de 5%. En las fuerzas armadas
es de 6%. Se supone que en las fuerzas armadas y en las instituciones se conoce
el número total de casos y muertes, pero en la comunidad el principal defecto está
en el número de casos, hecho que afecta el denominador. Un denominador
reducido produce una tasa de letalidad excesivamente alta.
La fiebre tifoidea, antes de la introducción de la cloromicetina, tenia una letalidad
bastante constante alrededor de 10%. Con el advenimiento de los antibióticos y
cortisona, esta letalidad oscila en series controladas de enfermos entre 2-3%.
Se obtiene así el número estimado de casos que deberían ocurrir como para
producir ese número de defunciones. A1 comparar el número de casos estimados
con el número de casos notificados se puede estimar qué proporción se está
conociendo.
M a n e r a d e m e j o r a r l a n o t i f i c a c i ó n. La experiencia ha demostrado
que ni las medidas coercitivas o los premios dan resultados en cuanto a mejorar la
notificación.
Así podría convenirse con el equipo participante una pauta razonable de plazos
para cada tipo de examen que se propone ofrecer, según las disponibilidades
locales y el uso de otros laboratorios regionales. Esto supone entrar al detalle de
tubos, etiquetas y formularios que permitan una acción expedita, movilización de
personal y sistemas de comunicación entre los individuos envueltos.
Este solo servicio gratuito, llevado a cabo en forma rápida y cortés, produce
excelente impresión en la familia y en el médico, como para estimular hacia una
mejor notificación.
Aquí el administrador local puede hacer arreglos o convenios con el hospital del
área, a fin de obtener una cuota razonable de camas con prioridad para admitir
casos enviados por el servicio sanitario. La hospitalización puede facilitarse si se
cuenta con servicios de ambulancia para el traslado del enfermo. Tanto la
hospitalización como el traslado deben efectuarse en condiciones satisfactorias
desde el punto de vista de la comodidad del paciente y técnicas de aislamiento.
La atención de los pacientes que no puedan pagar un médico particular debe ser
responsabilidad del Servicio de Salud, ya sea del médico epidemiólogo o de algún
profesional a quien se asigne esta tarea.
No hay duda que la visita oportuna por epidemiólogo al grupo familiar cumple
varios propósitos útiles:
CENTRAL DE NOTIFICACIÓN
En este esquema se pretende facilitar la comprensión sobre el rol de las partes que
componen el sistema, a saber:
Viruela
Fiebre Recurrente -
Respecto a las restantes para agregar a la lista, podría solamente sugerirse dos
categorías:
Grupo A Grupo B
Tifoidea. y
Sarampión
Paraiifoidea
Tifus exantemático Escarlatina
Brucelosis Coqueluche
Difteria Influenza
Enfermedades Diarreicas
Encefalitis
Agudas
Poliomielitis Intoxicación alimentaría
Meningitis epidémica Erisipela
Carbunclo Parotiditis epidémica
Rabia humana Varicela
Paludismo Tracoma
Triquinosis Hidatidosis
Venéreas Hepatitis Viral
Tuberculosis Rubéola Lepra
Fiebre reumática Tripanosomiasis
Tétanos
Cualquiera que sea la lista adoptada, que varía considerablemente según las
características regionales, esto no implica que el médico quede compelido a un
margen rígido. El principio fundamental es que toda enfermedad que signifique un
peligro para la Salud Pública, debe ser notificada aunque no forme parte de la lista.
Así, por ejemplo, la comprobación de un caso de psitacosis, toxoplasmosis,
leptospirosis, esquistosomiasis o cualquiera otra de significación clínica y
epidemiológica, debe ser notificada a la autoridad sanitaria. Es la única manera de
que ésta llegue a conocer el cuadro completo de la patología regional.
En consecuencia, los datos que sirven para este propósito y la forma de entrada
que se sugiere es la siguiente:
Año.......................... Mes ........................................
I n s t r u c c i o n e s p a r a ll e n a r e l l i b r o de n o t i f i c a c i o n e s.
Nº. Anotar número correlativo del caso. La numeración se inicia el primer día hábil
del año y se cierra al final. Con este mismo número se inscribe el caso en la tarjeta
y ficha epidemiológica.
Dados los objetivos de este libro, no parece necesario complicarlo con otras
anotaciones. Cuando se trata de buscar un caso, se puede hacer si se tiene
cualquiera de los siguientes datos: número correlativo, fecha de notificación,
nombre o domicilio o combinaciones de estos datos.
El número debe ser el mismo con que ingresó al Libro de Notificaciones. Domicilio,
escrito con la mayor precisión posible. Diagnóstico, iguales observaciones que para
el Libro de Notificaciones.- El diagnóstico final, confirmado o (le descarte se
anotará con tinta.,
Las fechas tienen interés para medir rendimientos del trabajo expresado en
algunos índices, para conocer fuentes de notificación, proporción de casos
hospitalizados, etc.
Alta clínica corresponde a la fecha de salida del hospital o alta autorizada por el
médico tratante.
Resultó importante anotar el nombre del médico o enfermera responsable del caso,
a quien se puede pedir información en un momento dado.
Llamará la atención que el espacio para imprimir el rótulo del formulario, servicio,
país, etc., se ha dejado para el final. Esto responde a una necesidad funcional. El
espacio más valioso de toda tarjeta o formulario es el superior, el cual debe dejarse
para lo realmente importante. En este caso, para los datos de identificación del
caso (nombre, edad, sexo, número, domicilio). El rótulo, servicio, país, provincia,
etc., constituye una rutina que puede dejarse para el segmento inferior de la tarjeta.
La primera idea que fluye frente a esta dispersión doctrinaria y administrativa es que la
epidemiología es una sola. Representa un método de análisis y enfoque de las
enfermedades como fenómeno colectivo, cualquiera que sea su etiología. Existen
principios 'y métodos comunes de control, que justifican postular que toda acción
epidemiológica a nivel central debe estar bajo un solo comando, en manos de un equipo
unificado.
Cualquiera que sea la naturaleza y magnitud de los problemas de salud, las funciones de
epidemiología a nivel central deben estar concentradas en una sola sección o
departamento. Esto facilita, además, el trabajo de las estructuras regionales y locales, si
las acciones epidemiológicas están claramente definidas.
Está claro que una formulación que obedece puramente a inspiraciones técnicas y
doctrinarias atenta contra los intereses individuales y políticos en juego. Afortunadamente
los servicios de salud se encuentran en una etapa de tecnificación progresiva que hace
factible la reorganización de ellos con criterio funcional.
Consecuente con esta definición general, las funciones de esta sección o departamento
deben ser las siguientes:
Tuberculosis.
Enfermedades venéreas.
Enfermedades parasitarias.
Enfermedades crónicas.
Accidentes.
2. Asesorar a las regiones para el cumplimiento y perfeccionamiento de, las normas, a fin
de que. sean aplicables y prácticas.
6. Establecer los índices más adecuados para medir los rendimientos obtenidos en el
terreno.
12. Asesorar a los departamentos biológicos en las pruebas de terreno para estudiar la
potencia, inocuidad y otros caracteres de agentes inmunizantes y demás productos
utilizados en la prevención de enfermedades transmisibles.
15. Colaborar con las instituciones privadas que ejercen alguna función relacionada con
epidemiología.
-Enfermedades transmisibles agudas, que sin duda reclama atención preferente pero no
exclusiva.
-Tuberculosis.
-Enfermedades venéreas.
-Enfermedades parasitarias.
-Zoonosis.
S e c c i ó n o u n i d a d d e e n f e r m e d a d e s t r a n s m i s i b l e s a g u d a s: Se
ocupará de: programas de vacunación; medidas de control con enfermos y contactos
(aislamiento, notificación, encuesta, coordinación con Hospitales y médicos clínicos, etc.) ;
control de puertos y fronteras.
Esta sección, por la cuantía de los problemas relacionados con enfermedades
transmisibles agudas, exige la presencia de uno o más epidemiólogos a tiempo completo.
Si se admite que una función importante es dar asesoría a la periferia, será necesario
contar por lo menos con dos epidemiólogos en la sección. De no existir la Sección
Zoonosis, el veterinario asesor de todo el departamento .debería también formar parte- de
ella.
-Epidemiología de la enfermedad.
-Programa de vacunación.
La primera función, enunciada tan brevemente, constituye el nudo del correcto manejo del
problema. En la práctica, a menudo ocurre que las acciones epidemiológicas, control de
contactos, pesquisa, atención cerrada y ambulatoria se presentan como islotes separados
entre sí. Esta falta de coordinación disloca toda intención de programa, despilfarra
recursos e invalida toda acción útil. De aquí la fuerte necesidad de una mente central que
maneja el problema en su conjunto, desde el departamento de epidemiología.
El o los individuos a cargo de esta sección requieren una formación muy completa en
epidemiología y también clínica de la enfermedad, a fin de que estén en la mejor posición
de dominar tuberculosis como unidad clínico-epidemiológica- y de poder discutir con los
especialistas de las regiones o zonas. Por ello resulta muy complejo formular una
recomendación sobre los requerimientos precisos para los integrantes de esta sección.
Parecería justificado postular la necesidad de por lo menos dos técnicos: uno, con
preparación preferentemente epidemiológica, y otro, venido del campo clínico y
suficientemente adoctrinado en salud pública.
-Enteroparasitosis.
-Ectoparásitos.
-Zoonosis parasitarias.
-Control de Roedores.
Los dos primeros grupos son de inclusión obvia. Las zoonosis parasitarias suponen una
acción estrecha y conjunta con la Sección Zoonosis, pero de no existir esa sección
individualizada, se ha hecho mención a un veterinario a tiempo completo que asesore en
todo el Departamento de Epidemiología. Este funcionario tendrá necesariamente que
asesorar a las Secciones de Enfermedades Transmisibles agudas, de Enfermedades
Parasitarias y de Tuberculosis, en todos aquellos aspectos que reclamen su participación
integral dentro del equipo.
Las funciones relativas a roedores y artrópodos vectores guardan muy estrecha relación
con secciones dependientes de Higiene Ambiental. Luego será materia del jefe del
Departamento el obtener una buena coordinación a fin de evitar duplicación de funciones
y producir una buena definición funcional de atribuciones.
Toda la sección deberá estar servida por uno o más médicos especializados en
Parasitología, con sólida formación en epidemiología.
S e c c i ó n d e E n f e r m e d a d e s C r ó n i c a s y A c c i d e n t e s: En el momento
actual, estas funciones no existen o se encuentran limitadas a una fase de investigación y
asesoría. Es posible que transcurran varios años hasta que los servicios cuenten con
personal idóneo para abordar estos campos, y que la Salud Pública alcance un grado de
maduración que exija la creación de una sección especifica que se ocupe de
enfermedades no transmisibles. Pero no puede perderse de vista la necesidad de esta
sección, en países de fisonomía cambiante, con incremento evidente de las muertes
violentas y enfermedades crónicas, en que se destacan cardiovasculares y cáncer.
-Cáncer.
-Enfermedades cardiovasculares.
R e l a c i o n e s d e l a e s t r u c t u r a n a c i o n a l c o n l a p e r i f e r i a:
En este plano de relaciones humanas tan delicado, los individuos que trabajan en los
niveles locales estarán felices de ejecutar cosas en cuya ideación ellos mismos han
participado. No hay duda que la participación activa y entusiasta en el programa fluye
cuando el individuo lo siente como cosa suya. Es su programa, son sus normas de
trabajo, que ha incorporado sus ideas. Esto es bien distinto cuando un poder central
Kaffkiano le impone normas que las siente ajenas y distantes, que hasta le resultan
odiosas porque su espíritu tiende a rebelarse contra la autoridad.
De un modo concreto, las infinitas situaciones que exponen a roces entre la estructura
nacional y las organizaciones locales, se pueden resumir en algunas formas mas
frecuentes. Todas ellas ponen 'a prueba constantemente la elevación espiritual de los
individuos como para salvar la dificultad poniendo por encima de toda consideración los
intereses superiores de la epidemiología.
Otras veces hemos visto al individuo afable y sencillo, que escucha a la gente antes de
hablar él. El individuo que sugiere hábilmente las cosas, que aplaude y estimula las
iniciativas locales y, cuando propone algo nuevo, lo hace con tacto como para no imponer,
sino insinuar las ideas en la mente local. Está demás señalar que el trato afable y cortés
jamás expone a la pérdida del respeto.
No hay nada que aliente tanto a quienes trabajan en el nivel local, como el sentir que se
les tome en cuenta, que se les escuche. Si están equivocados, el jefe nacional debe
hacerles ver el error de una manera fina, sin aprovechar la oportunidad para humillar o
lesionar la dignidad ("tal vez tenga Ud. razón, pero examinemos estos otros hechos").
Poner ideas en el cráneo de otro individuo y hacerle sentir que son suyas, es la tarea más
sutil y difícil para el jefe nacional. ("Como Ud. dice muy bien, debería hacerse tal cosa").
La visita debe dejar un saldo positivo de ayuda técnica y administrativa. El jefe nacional a
menudo se ve forzado por las circunstancias a dedicar una apreciable proporción de su
tiempo a solucionar problemas administrativos muy variados en su naturaleza: acelerar un
trámite; obtener el envío de equipo y materiales, en suma, a solucionar problemas
administrativos que entraban a veces seriamente la ejecución técnica.
A menudo se cae en variados vicios de la ayuda. O bien se niega o llega muy tarde, o se
cae en el extremo (le irrumpir con recursos exagerados y ahogar o anular los medios
locales. Luego viene la disputa por la gloria ganada, por publicar o presentar un trabajo
científico, por "robarse la película" y menospreciar las iniciativas y la abnegación de los
equipos locales. Esto exige de parte de los jefes nacionales una actitud ponderada y
siempre generosa,, (le absoluta honestidad y justicia.
Este tipo de organización resulta interesante como modelo para los países
latinoamericanos, toda vez que no se caiga en el vicio de crear superestructuras costosas
e inoperantes. No se trata de copiar o trasplantar un modelo, sino de adaptar o incorporar
ideas que la experiencia demuestra como buenas.
Hacia abajo, la estructura regional se, entiende con los jefes locales de las áreas. Hacia
arriba, se entiende con la autoridad central. Por cierto, la estructura regional no puede
limitarse a un buzón que tramita documentos en ambas direcciones. Su papel consiste en
convertirse en un Centro Motor de la región, que administra los programas y representa
en la zona a la autoridad nacional. Cuenta con delegación, presupuesto, autonomía y
recursos propios que le permiten manejar los asuntos de la región con entera o casi
entera independencia.
c) Servir de enlace e intérprete a las áreas locales, transmitiendo hacia el nivel nacional
las informaciones y sugerencias de importancia epidemiológica;
d) Servir de enlace e intérprete de la autoridad nacional ante las áreas locales bajo su
dependencia;
Este epidemiólogo zonal tiene, en menor escala, la mayoría de las funciones del
Departamento Nacional referidas al área geográfica bajo su dependencia. Se comprende
que de su idoneidad, empuje y competencia depende el éxito de las delicadas relaciones
centro-periferia comentadas más atrás.
Habitualmente, esta representa la posición más difícil, colocada entre dos frentes de
presión permanentes. Por una parte; las áreas abruman al epidemiólogo zonal con sus
problemas y demandas técnicas y administrativas. Por otro lacio, la autoridad nacional
exige rendimientos y la responsabilidad de la marcha de los programas en toda la zona.
Resalta entonces la importancia crucial del epidemiólogo zonal. El individuo escogido para
esta función debe reunir cualidades sobresalientes de idoneidad y dinamismo, de
capacidad ejecutiva y condiciones humanas compatibles con su delicada y enorme
responsabilidad.