Sei sulla pagina 1di 45

13

Yertiente sistemática:
Fundamentación y contenido
de la ética política

En este cápítulo se pretende hacer una fomulación sistemática de la


éiicapolítica desde la perspectiva cr¡stiana.l-as vefientes bíblica. socio-
lógica e histórica, des¡rrolladas en los capílulos anteriores, cobran sü
oleno sentido en orden a Ia veriente sisremática-
La (on{deracion.i.rcm¡ricá de la elica polnrc
pnncipales| la funda»eúa.r'á, de la dimensión mo
Ia exposición de su .rnre,,¿¿. El presente capítulo s
lomo a estos dos aspectos submyados:
I. FundameDtácién de lá moral políaica.
II. El contenido de la mor¡l polílic¡ desde Ia p€rspectiya cris-
tiana.

I
FUNDAMENAACION DE LA MORAL POLITICA

Elementos para una teoría éticá de la polític¡i

¿Existe una ,rod políticá? ¿Puede hablarse con rigor cítico de una
diñüsión ética enla realidad de la pohica? ¿La política, además de ser

I P- l^É, H¡stoú'e rle ld s.iencc pol¡t¡qn¿ daB s¿s ¡appor* aver la norale
(P is. l9l3'): L- Sr¡:M. Pol¡ti.¿. Morul¿ (BoloDia, 1955): B. CRoc, ¿¡i.a ¿
po¡i¡ica lBúí, 1956)a l- R.tz-GtMí^ú, li políti , deber y der¿cho rl¿l hanbte
(M.d¡id, 1958)i M. wEBrR. ¿¡r,¡4¡,¿ .t pohiqr.: F,spnt zt \t959) 225 U5: C.
cñN, Ld holdle a, poli¡iqz¿ (Pdís, l%2): t. E^RErM! Ueb¿r ¿as val¿ihtl!
wn Pol¡ik und Morut: Ds Prcbtem der ordnung (1962) 94117: A. C. Mono,
Sp¿c¡lica ordhá ddl a¡¡ni¡n p¿lrnr: Srudium 60 (1964) l5ss.: J. L L. ARAro!-
618

u cjencia. un¿ téc¡ica, una praxis y un¡ fonn¿ de ser de lo humano,


cs ta¡¡bié,r y al mismo ¡iempo un n¡.g¿r É¡¡.ol Si la conresración ¿ las
preguDtas anteiorcs es afirmariva. y en la medada en que se¿ iJimativa,
surgcD otros inte¡rogan¡es: ¿,qué .,r¿r¡or morales inregran la insmncir
ética de 1¡) político? itcómo se püedc hacer una /o/r¡¡¡1¿.i¿in coherente
de 1a teoúa ética e¡ relación con la política?
Exañina¡ros los interogan¡es planteados apon¡ndo un conju¡to de
oíenraciones cn tor¡o a dos ejes de reflexión: referencia histórica del
Foblema y justificació¡ de la posible relación entc érica y política.

REN. Ern? I P,lri.¿ (lvladrid- r9ó8r) 6l I I l: R. CoeE. Er¿nt.lio t tolít¡.d (Ma


dtid, 1969): E. G:Á.1\ ESIÉBANB Á¡ üo @" n' \ h n¡ar¡l p.lr¡.¿ (Barcelona,
1970): G. RrmR, ¡/ p/¿rl¿D,o ¿t¡.o ¿¿l potl¿r \Ll¿Ann, 1972)i A. ToRRs DEL
NloRAL, E/i.¿ I pd¿¡ (Nladrid. 1974): W P{Ni¡E6. P¿&¡i¿¡¿ ,§¿.r/¡¿g¿, aar'
.hrirll¡che Elh¡k: Gla bc d rr*¿t I?¡', lMunicl¡- 1975) 15ó 175: F. X. WTMER,
P¿lili.f ¿xl ¿l¡i.r (Nuera Yo¡k, lr75): F. E. O¡¡E\ ErM, ¿at pt¡kiplas narul¿s ¿n
¡af¡¡osolía polí¡icd (ñé\ico. )975): S. H. tYrRNrft. P¿rl,t und ce¡¡:s¿ cevis"
rc, r,l P,h¡n (Einsicder¡, l976t. B. SoRcE,l- op.¡ón polit¡.a del.rieidno (M¡
dnd, 1976): O. Rr.nnERt. 1 prohleDú (tisútto d¿l¡ ag¡rc pl¡t¡.o: R¡sse9n di
Teologia 18 (1977) t4-26: I 1)e. C¡¿rc¡a políti.¿ )" ralorcs: Estudios Filosó
ficos 27 (1976) 2?l-286: lD- ^ Enti/l od Politi* \Stutginr, 1970): C F nhNsrLA-
Palit¡cd. nt"ol ) cspenn:a: Estndios Filosóñ.os 27 {1978) 299 ll.li A. NÍ{N\RAN-
.n , Acúu¿e¡ ct istianas dt polh¡.a \Madin. t979). P L- BER.E{, Pn áni.1e ¡1¿
sacnficiat Elica palnnu ]- t¿,r,p J¿.¿¡l (Súhdcr, 1979); P. VaL¡DER. Á3ir ¿¿
¡¿tui4,¿ (Pafis- r9801: v.§ros, E¡na ! polít¡.a.h l¿ lt|¿ad l€,¡¿.,n¡i.d (Nlxddd,
1980)i G. E N'f ANscol8r, trnr. Á"/¡ji¿, ¿¿zl P¿¿.i.r (Oxlo«l- l98l)i C. V^1,
vEtDE. ,,¡.¿ r polrn¿ (Vadnd. lgljl,: J. DÉ Lr ToRRE Cr¡a¡oo\ en 1¡t yni.dad
l,¿lili., (Nhdnd. 1982)i A. CLosE-C.i.iss." ú.1.t Politiklcraz. 1982): B. Russ¡LL,
\ocic.hd hunún¿: ¿¡¡c¿ ! tolri.¿ (\,I.drid- 1984): v- Cits. Mát dllá d¿ Lo! li@s
!.le lós ¡ne¿ias: ¡d prugnú|i ¿.l¿ tol¡¡¡.d: Sistema- n ?0 (i986) 6:l-76; J.M.
St:¡ti\, Rozó ¡1o¡í¡ica J M.ó, ¿¡i¿r !gl6i. viva, n. I22 12i (1986) l5i-l?4r J,
Maú\\Á\r, T eolasía polít¡.'a. E¡iü pol¡tit¿ \S,lañanc., 1987)i F. ,. L^poRr¡, r¡i.¿
)?,lr¡¡.¿: Claves, ñ 2 (r990) l5 2l: \ &6. Cohr¡..ion¿s polítn:as, respatsdbili-
d¿d¿§ l¡ü¿§ (B¡rcclo¡a 1990): R. ¡!trc, iirirri¿ ) ¡)¿lr,.a (Esrella, i990)i ID..
Sabrc la contpas¡ókt ld politn!: vaRros- Elica día tras día (Mad.id. L99t) 271 296i
l. 'foLaLl, Etic¿ | palni.o: c;en.ia Toñisl¿ I l8 ( l99l) 349 -167: y a1los, tl palnno
di p.,lsi,,¿: Ririsia di Tcologia Nrorale 2¡ 11992). n. 94. 147 177; E. CH¡aB.cr,
P¿li¡ic¿: Nuelo Diccionúio dc lcologia ñfotul (N,ladrid. 1992) 1437 l,t48r f. R.
Lóp87, ú LA Osa. Poh¡cd ! t ¿,2/: iI v'D:' (Ed.)- Conc.pros Fündamentales de
ética @ológica (Madnd, 1992) 697.70?: A Gar Bm, J,ínu r co pnniso polít¡ca:
VARros, La jusrici¡ social (Iiad.id. !991) L1l54l7: v^ os- Lo politico ¿ il b.n¿
¡r¿-!,.: Riv¡ta di Teolo-Eia Morale ¡ (199:l)- n 99, 317150: A. Di R., ¿¡i.¿ ¿
polr¡.ar E. B.R! G. CArrpA$r. Di:io"dr¡o ¿¿ . i¿.e politn:h¿ (Rona- 1993) 153-
l6?i L GoNz¡¡-Ez CARrr{, E i.a p¿¡i¡.¿: A. ,4 CuaDFoN- Manu¡l de Doctri¡a
Social de la Iglesia {Iradri.l- 1993) 665 679.
u ¿rlcA Polmca 619

1, POSICTONES TIISTORI'A§ ANTE EL PROBLEMA DE L\ REL.{CION


ENIRI POLITICA Y MORAL

L¿s principales postúas que se han adoPtado ante el problemá de Ia


rclación ente política y ñoral pueden ser clasificadas en tres grüpos: el
¡ntegrismo ético, §egún el cual éúca y polític¡ son dos realidades radi-
calmente opuestas y, al tener que elegir una de eltas, ta elección ha de
recaer en Ia ética: el real¡sno Polít¡co, sesún el cuat, en el caso de
oposición enlre moral y políticá, la elección debe rccaer en la potític¿
con sacrificio de los principios éticos: la ír¡Pt¡§, siemFe dramátic¿ y
provi§ional, entre las dos rcalidádes.
El integrismo élico conduce al rechazo de la política por razones
moralest el realismo político propicia la exai¡aciór de la política con el
consiguiente rechazo de la monl, y la opción por la síntesis conlleva el
intento de moralizar lapolítica, moralización que adopta diversos cauces

a) Rechazo d€ la polítka por "inlegrismo moral"

La polílica ha sido considerada con frecuencia como el lugar de cita


de la hipocresíá, la mentira, el engaño y d€más vicios contrarios n La
limpia ejecütoda del hombre moral. Más aún,lapotiti.¿ en sí misma ha
sido vista como reaiidad contr¿ria a la ética y, consiguientemente. como

Entre las posluras que, por motivos de integridad moral, rechazan la


política se deslacan las cuatro sigüientes: 1) la.epulsa buryuesa, qte
nace de la redücción ndividuálista y farisaica de la mor¿l y que conduce
a considerar y a hacer de la polírica un "luego sücio" en el cual los
políticos han de claxdicar iievitablemente de sus principios éticos (re
cordar Iá drámalizació¡r de A"ríB¿,¿. de Anouith, por lo que se refiere
al político eD el poder. y l^ de lns mdnos s¡rcias de Sdtre en relación
con el político en la oposición cla¡destina).2) l^ repnlsz anarquisra,
que nace de la absoluta desconfianza ante toda forma de poder ("ni Dios
ni amo") y qüe conduce a busc,r la solución de los problemas de 1á
clase obrem en la actuacién directa de los afectadosi 3) la repulsa ndr-
r¡rtd (del narxismo ofodoxo), s€gún la cual las estructuras políticas
pertenecen a la etapa alienada de la humanidad, supraesln¡cturas que
desaparecerán necesariamente en la elapa ftnal en la qüe la sociedad
civil encontrdrá su perfecta identiñc¿ción; 4) 1a repulsa teolóeica (de
algunas corientes protestántes), según la cual el cristiano vive el empe-
ño moral político como un no puedes, pero debes'.
t
620

b) Rech¡zo de Ia moral por "rcálismo político"

E1 "realismo político" coincide con el "integrismo moral" en una


cosai en que ética y política son ire.onciliables. Pero §e distinguen en
I¿ toma de postura: mientras que el integismo moral opta por la ética,
el rcalismo político prefiere sacriñcar los principios moral€s en bien de
1os intereses políticos-
Los "reálistás" y los "realismos" abundan e¡ Ia hisioria de la acción
y de ]a doctrina políticas. El teórico más notable del "realismo político"
es Maquiavelo. Otros propugnanán ]a autonomía rolal de la polírica y
considerari¡ la acción política como noma de sí rnisma, exigiendo la
eliminación de cualquier rclerencia a la moral. Hegel llegárá a identifi-
car el ser y el deber ser en la categoía dei 'tstado ético". La "ruón de
estado" será Ia concreción nomariva del realismo político.
No escapan de los presupuesros y de lás conclusiones de1 realismo
político 1a mayor pafte de los sociólogos y cuhivadores de la ciencia
políiica (Weber, Pareto, Mosca). I-a pretensión de tlna ciencia política
regida rinicamente por leyes estrictamente técnicas, es decir. éticamente
neutales, debe considerarse como una foma más de re¿lhmo político,
en e'que enban por rgual la vúud maqui¡vel;c¿. l¿ r¿rdn de Enado'
o la ,c¡tzl Éigengcvrzli.áA"¡r de lo polili.o'r.

c) SíDtesis entre ética y política mediante la 'tnoralización


de la política!'

Son muchos los intentos que se han hecho p¿ra corciliar la política
con la ética. Recordemos, entre otras, las siguientes fomas de sÍotesis
entre política y moral 1) moralización del "PrÍncipe". paniendo de Ia
ba'e de que. moralizando el suJelo pnnc'pal del poder. rodo el si\remá
políico queda morah¿ado': 2) morai'zac'on de lá polrird medianre el
control de la relieióna: 3) moralización de las estructuras políticas
medianie sistemas de autocontrol de las mismns eslructuras (división de
poderesi paficipación popular; la ley como foma configuráda del Es-
tadoi etc.)i 4) moralización del 'lacitismo" de los siglos XVI y XVI:

I"Por ¿so se coúprende qüé tdos ¡os Eatad6 medievals y modernos de


Egimi¡c p.incipum, desde lc scolásticos h¿ra Quev€do, Gmcián o Saavedra Fa-
jddo artre Dosor¡os. hayan comislido siémpÉ e¡ pú¿s admoniciones ¡eligiosas o
exhortaciones morales { imorales' y 'ñ¿qui¿yAicas'. ruro da- pda que €l
híncipe eterza 'bien' el Doded (ANcLlu-_, ¿. c., 132)-
' tbíd.. 191-2oo-
LA EITCA POLTT1CA 627

"eI tacitismo entra en diálogo con M¿quiavelo y acepta su planteamierto


rcalisla de la política. Pero cree superárlo haciendo ver, por ulla parte,
el valor, políricamente útil, de la virtud, su función pr¿gmática: la vér-
dadera raz6n o coñenie cia de Estado necesita imFescindiblemente de
la viÍud moral, como nos enseña la historia a tÉvés del fracaso político
de los príncipes rnaquiavélicos. Los Sobe úntes malor son siempre, en
definir\\L, malos gobe i,¡r¿r"'; 5) mor¿lización bürguesa y farisaica,
consistente "e¡ la 'acomodación de la conciencia moral, es decir, en
componérselas casuístictunente para que el comportámienb elegido sa-
tisfaga, a la vez. a la exieencia ética y a la instancia política. En efecto,
con manga dDcha' y u¡a ciefa ,¡"r,?ir¿ro¡ siempre se püede llegar a
un 'compromiso' rranqüilizador de la conciencia"ó.
Creemos qne la postum auténtia es la de rár¿s¡ entre ética y
polític¡. El modo concreto de ent€nder esa síntesis 10 exponemos a

2. ETICA Y POLITICA: DOS MACNITT DES REFERENCIABLE§

Elica y política son dos magniludes aurónomas; no son reductibles


I¿ una a la otra. Sin embargo, su mutua autonomí¡ no es óbice para que
puedan rel¡cionarse y constituir así una entidád nueva: la política 'mo
ralizada" y la ética "politizad¿"-
Fijándonos exclüsivamente' en la primera forma de relación (14
política "moralizada"), es decir,la que sale de laética y tra¡a de alcanzar
la política, r^zommos la afirmación aludiendo ¿ dos focos de ilumina-
ció¡: reconocimiento de la autonomía de la polític¿ y descubdmiento de
su posible integración en la ética.

a) Autonomía de la política

La política se compone de la doble vertiente de realidad humana y


de ciencia. En cnl'nto ruil¡¿ad hma o /t¿ política tiene una especial
densidad de contenido; es, al mismo ¡iempo. acción y eshuctura, o mejor
dicho, es la relación dialécrica entre la liberad y las medi¿ciones obje-
tivas del poder. Por lo que respecta a Ia acsión, la política es una cor-

' Ibíd..6a.
'- sobÉ l¡ neesari¡ po,iiiación de lá mor¿l- cl ToRN DEL MoR^l. ¿. ..,
299 313.
jugación de arte. de técnica y de s¿ber. Las estrudums polílicas, por su
p¿fe, tienden a exrender c¿da vez más su ámbito de actuación. En
cuarto .irr.i¿, la política perterece al cxadro de los saberes positivos;
su estaturo científico se justifica por el descubrimienro de leyes positi-
vas dentro del fenóm€no de la politicidads.
líti.a
dtrdñornia. Ti.ne sus leye, propra.. rro nc. e'irz 1
ci¿ u l¡ mofti y rnucho menos d td rclrEion.
La autonomía de la política debe ser rcspetada por Ia mism¿ moral.
Est¿ no puede enlrar en €l campo especíl'ico del saber polfico como si
fuese predio de su dominio. Las opciones polílicas cn cü¿n¡o políticas
sor neulras con rel¿rción a la moral.
Ei reconocimienro de l¿ autonomír de la pollica es un dato incues-
¡ionable para el hombrc ¡ctual. Desde el Rcn¡cimicnto, el hombre oc-
cidental viv€ y cnticnde l¡ política corno un.l rcalid¡d secular y autó-

b) La nccesar¡a ref€r€ncia d€ la politica


al uriverso d€ la ótico
Reconoccr h aulono¡nÍa delcomport Inicnto y dcl sab€rpolíticos no
supolre ncgiir $u rclerencia nl univcr'so de k é1ica. Si Ins opciones po-
líticas so¡¡ rculras moralnrente dcnlro dcl frmtrito restringido de Io po,
lílico, Do h son, sin embargo, ¡l quedur situadas denrro del ¡mplio
horizoDlc dc !a rcalización tol¿rlizanle dc lo humano.
Sor varias las orient ciones qLrc sc han seguido pam descubrir y
exprcs¡r la referencia de ltl políLica a la mornl. Recordaoms nlgunas.

\- La §Ido ie l^ polír\r det,tL ¿, lt^, ¿¿r,'! J¿ lo , '^i.tn)


2){,a4!g'r{ercidn
hu con.i(le,al rún,o lx tr l de ld drmension morx¡ de l¡r
pullica. En cuanlo:rcri!¡dáJ hurn nr. lu plrricd adqDie'. rod¿ lr den-
sid.rd propia de la persona; queda situada de¡rro del Dniverso dc inten-
cioDalidades y de fines en los quc se realiza la pelson¡. La política tiene
la densidad de la inrencionalidad y de la finálización. No perenece
exclusivamen¡e ál reino dc los mediosr se introduce eD la región de los
fines. Al poner en jue-so el universo pel§onal, 1a polílica no pucde dejar
de teDer una referencia :r la ética en cuanio que ésia es la cxp¡esión del

3 M. P¡ÉLor, 1,.¡¿¿.¿ p¿lrn? (Brcnos


Anes, l9?lr): J. MEyraú- 1nr¿-
duc.ión a la .ienLia polític¿ (Madrid, 1960).
LA ElIc^ PoLr¡cA 623

reino de los fines. La responsabilidád en la actividad política es la tra-


ducción subjetiva de la moralización así enterdida'!.
Esta ma¡era de descuhir y de expresar la dimensión ética de la
política, a través de la consideración de ésta como actividad humana, ha
sido utilizada con bastante lrecuencia por los autores católicosL0 y por
quienes consideran la polltica como acción humara responsableLL.
En esüecha rel¿ción coD el planteamienlo anterior, oÍa línea dc
lellexió¡1 seorie ¿ po¡ el camino de l¿ a dogía. Como dice Coste,
_paü un cri\li¿no. es e\idenrc quc la pohlira no puedc ser human¡ i
no esrá somelidá a la, reglas rra.ccndcnralcs dc ld moralidad ''. La
polític¿ está encu¿drada dentro del univerco de valores que rigen la
vjda humana. Este encuadre le proporciona las pautas de una autértica
re¿liz¿ción. Por eso mismo. no pu€de existir confliclo objetivo enlfc
vílores éticos y auténtica vida política. La ll¿mada "mzór de est¡do"
no tiene justificsción objetiva, si se entiende como 1¿ ¿ceptación axio-
lógic¿ de l¿ incompalibilidad eDtre realización política y valores mo-

T¿mbién se ha tr¿tado de fundanrentar la referencia de la política a


la ética acudiendo a lu liraLi¿ad jus¡ilca¿on (le 1¿ comuDidad polílica.
Si el poder político se jusrilica por la obte¡ción de un bien, es la re¿-
lización de este bien lo que necesarirne¡te inlcgrAla ética y la política.
Los toistas haÍ inlroducido ls reflexión por este cauce y han conside-
rado el bien común €omo ese bjen al que necesariamente debe tender
una auténlica polític¿r¡. Alsunos, como Marilai¡, sir descartar el bien
(omún han \ubrxyJJo el valor dc la pcnona Lomo carcsofa ¡r\rilicddo-
rr de la moral polÍric¡r''.

' L §ANctrú Ac6rA, ,.¡dtd d¿ ¡¿otla troll¡¡cd: Ct^o lL Doc in¿ M¿iaL
td¡ólitd (Madnd, 1961) 336-340.
¡ I Ruú-A,JÉNu, Ld paLf¡i.d, d¿bd t d.¿t¿.ho ¿¿L hohlbk (Mad¡id, 1958) 40-
49.
rL Ton¡És DÉL MoR^L, ¿.
.., 251-253. "Si lo humno e6 moral, estructurélnente
norJ. lo pol tro. cr' cuar o óf i.,menrc hlm¿no. Emoién lo §crá'r¡.251r
' R. Coip. I a'. at,¿n-dor1, " t¿rr¡ ¿,' Brr¡lo.¿. laTl/ ó--68 \r I f aeio¿, óó
1r
E GARCTA EsrÉBNEz, E/ óien conún t ln norat polt¡icd (Bdlolona, l9?0)
l2l !128 (oó bibliosrofkr.
verl¿, . de GaRcra FsruaNEz
rr Sobrc el pensmiento polltico de Müilain, ver: G. PECE$BñBA, /¿/sotr¿,
Socie.la.l, Estada. Peúsaeieito social , pol{tico de Mdtkd¡h (Málid, 1962)t .
BaRS, La palÍtico según Mai¡a¡n (Buems Air4. 1964)i M. DuausM, ¿a ¿lil¿sop-
hie poti¡ique dc .Iacques Malrai,: Mé1mses §cience Religieuse 32 (1975) 43-56;
G. CAMPANTNT, ¿ !,opü d¿lla \uora cristia bA, Ikttu hzioñe al p¿kr¡¿tu póli¡ico di
JaLqud Mdrítain lBres.ia, 19'15).
614

Desde los presupueros de la filosofía analí¡ica ha eslüdi.tdo OppeD-


heim r'la ética política. formulada por los grandes erpoDentes dei ¡en-
samiento polílico. Sc 1¡ ata de una aprDximaciórr üotablc¡nenre original al
estudio de ]a obieli!idad crítica de la ética política.
Por ú]lin1o. co¡vieDe recordar la postüm dc aq cllos que considen¡r
la relaciórvfuDcñ¡ de 1a ética con respeclo á la polírica desde la cate-
goía dc la loblemaricidad". Arangtr¡i¡ ha calificado ]a dimensión
moral do la polÍtica corno una "constrLutiva problen¿ticdad. vilidr
dra¡láticamcntc" r '. Esta comEensióD dranrátlca "quiere decf alnm¿,
ción de una cor¡patibilidad ardua. siempr c cucstio¡atrle, siempre proble-
málica, dc lo ético y lo político, fundad¡ sobrc una tensión de caráclcr
más gcnerrli la de la rid¿ ,r.,?/ coDro lutha naral, cor¡o ta]ea inaca
b.bl ) rn "or ,a,1{¡11.ion. !i..,,r., \¡/ nñr n43! e, Jn .¡J4r\ d¡.
pe|F..
'Jr-i6 lJ¡ K A\elo, l:r ,¿ ,, rd. ..r. r.l'e. en lr pol ¡r.
"así, loda política genera ürIá étic¡, presuponiéndose mbas, rccíproca
meDtc" '. Paft este pensador, "las imflicaciones entre ]a ética y ia po
ltuica no tienen ya que ser de¡rosrrádaf"l'). L-á función de l¡ éticn esiÍ
en "problematizar" la polílica.

Il
EL CONTENIDO DI] LA MORAL POLITICA
DESDE LA PERSPECTIVA CRIS'TIANA

Despu¿s de hatrer examin¿do ll:¡s problcmas relacionados con l¿r


üretodología y ltrndamenración de la ética políLic¿. r4tamos ahom dc
erüdi¡r los tem¡s prin.ipales que htegrul y constiluycn el cooienid(,
concl€¡o de la moral política.
Exponemos el conrenido de la rnoral políLicá mediante una serie dc
ipnnnacrc¡es concéntricas. En pri¡ncr lugár luSar romamos not¿ dc
lxs insislcncias te¡náticas er) la reflcxión teolórico noral recienre: crr
segundo lugar rcaliTanos jdéntica conslatación c¡ l¿ propuesta de I
Doctnra soc l de la lglesia; a conlinuacióD of¡cce¡nos una sinlesis
denho dc u¡a opción que ll¡¡lramos dc 'lrcrspecriva integr¿dora"; por
ú11ü¡o, aludimos a los inlerog¿ntcs ¡nás radi.ales que tiene actüalmenlc

¡ ¡ L OpúuEIv, ¿,s p,i,.:¡pn^ n.ñlr! dc la l¡k^itu poli¡¡.a l\¡éxic..


r975)
' r\RaNorRnx, ,. ., 103 ll1.
K \' \ ¡/., r...,.¡.df.-.,.r... L\iJtio ! t.,
'" ,r,./. r50
O Dtr U EIICA POLITICA 625

la moral poiítica. haciendo para ello üna plesentación deDlo de una


percpectiva que denominamos "crítica".

, LL LON"TF\IDO DP .A E.TIL 4 POI III.C L\ LOS \,fA\U\LP5


DE, MOR,\I ,.

Par¿ hacer una selección coffecta de los temas más impofantes en


rclación con la ética polílica nos parece cotrveniente recordar la temática
estudiada por algunos recientes Ma¡uales de Moral. Recogemo§ a con_
linuación el contenido que algunos de esos Manuales desañoll¿n en el
lratado de la étic¿ pollüca. Esta breve encüesta nos iluminará etr oden
a la selección y orientación de los prircipales Foblemas morales en
relacitu con 1a política.
Messner" centra l¡ renexión en la realidad del Estado; consiguien
iemente. aI hatado le da el dlulo de "Étic4 estal¿I". Anclada la conside
mción en el Estado. 10 estudia balo cuatro aspeclos; natu¡aleza. sobem
nía, funciones y dinámica . L^ na¡ ralezd de1 Estado viene sintelizada en
la siguiente definiciónr "comunidad de un püeblo asentado sobre on
deteminado te itorio, dotada del más alio poder de dominio, p¿ra la
fundameniación completa de su bienestar social". La sobera ía del
Estado es una realidad histórica que, en Occidenle, hace su aparición al
final de Ia Edad Media; desde el punlo de vista ético, inieresa señ¿lar
Ios problemas relacionados con el poder soberano del Estadoi su origen,
su naturaleza, su tjtular, su ejercicio (y lás coÍesPondientes actiludes
ante é1: obediencia y rcsistencia), su forma de organización. eicéteü.
Respecto a las |u¡lcíones del Eslado, Mes§nd comienza afirmando el
principio de subsidiariedad de las funciones eslatales para señalar ¿
continuación las que juzga más impoÍantes: función jurídica (Cons1i11t-
ción, Legislación, Administación de la justrcia); función de bienestar
(orden económico. po1ítica social); función cultüral (enseñanza. foúento
de la cultura); funciones en el ámbito de la religión; función admiris

r F. W. FoERsre. P¿lr¡r.¡¿ Erl¡it (Reckli¡¡ausen, 19581)i !i. Ts¡ELIcrc. E¡¡it


dtt PóLr^chen (ttbúe¡- t958)i UN¡ó\ IMNACToN{ DD EsruDlos socl{Ls, cldi8,
rle tkotdl pa\tica (sdt¡ndú, 1959): w. KcNMr!, P¿l¡¡,r Ddnan und
'vi¡.¿¿n
Gat¡. E¡be ctuisdicha E¡hik d?r Prlnrc&¿, (Berlfn, 196l): J. NEWM{N. Jr"di¿r ir
pal¡ticdl Mordliry lohi.¡Ea.1963)i R. NEBm. M¿,?/ M¿n antl in o¡alSacitr' A
Stutlr in E¡hics and PóLn¡cs ll-ondEs 1963)i E. C¡IAva..I. Eri¿¿ Prlri.d (Roma.
196.1)i J. MESM, -4¡i.4 ro.i1l, pol¡¡ica I eco óüicd a ld luz d¿l dúecha natrrul
(Madrid. 19ó7) 811 1115 ("Etica Estat l"); R. Co!té, Las Lonunidd.l4 poll¡cas
(Bdcelona. 1971): G. MA1rAI, Moldle pólnka lBolo¡ir 1971)i A. BoNDoLn, .6¡ica
roti¡_ 'd. | . Co .. .w Pr.\',.o odr \lo¡ale roro lV,B e.ra. l98i) q3_130.
MFSSNFR,. 3ll-lll5
626

tráriva (política impositiva y presupuestada). En el aspeclo de la din¿-


,r.l, del Esrado se estudian temas ¡an importantes como: la raán de
Esrado, I¿ guerra, los movimientos de población, el n¡cionáIismo, el
imperialismo, el militarismo, la revolución, el progreso y la decadencia
de los pueb¡os.
Hfing:3, lo mismo que Messner, reduce la moral polílica a um
"ética de Eslado". De una form¿ breve y sln desprcnderse pleo¿mente d€
1os intereses c¿suísticos estudia los siguientes aspec.os: esencia y Iímiles
de1 estado; origen y sujeto del poder de1 esiado (fom¿s polílicar, de-
beres del eslado (defender el derecho, promover el bieneslár, promocio-
nar la cultúá), poderes del estado (derccho a idligir la pena de muefe,
derecho de guena); la comunidad inlemacional; deberes de los súbditos
ftente al estado (ob€diencia y respeto, patriotismo, corrcsponsabilidad);
derecho de Ios súbdi¡os frente al estado (derechos fundrmentáIes de la
persona, derecho a la rcsistencia, revolüción, tiranicidio)- Por la simple
enuneración de los temas se advierle que la síntesi§ de Hiinng queda
excesivamente recortáda al juego de derechos y deberes entre el Estado
y el lDdividuo.
Coste:r pretende ampliár el horizonte de su esiüdio par¿ ofr€cer
"una reflexión teológica sobre el fenómeno político", adaptnda a la si-
tuación aciual, pero en conexión con la tradicióD teológica sohe la
mateia (san AgustÍn, santo Tomás de Aquino, Frrncisco de Vilria,
T¿parelli d'Azeglio, etc.). Organiza la tenática en tomo a t¡es ejesi
estudio del fenómeno político y de su valoración ética ("lo político y l¿s
políticas"); análisis de las estructuas intem¿§ de la comu dad política
("estructuras intemas"), y exposición de lás relaciones entre las diversás
comuDidades políticas ("relaciones recíprocas")- La Primem pafe cons
titüye una tundament¿ción de la étjca po!ílica, mediante la con§idera-
ción de los posibles focos de iluninación (la razón, el ideal evangélico,
las dnecrices de la Iglesi¿, etc.). En la segünda parte se encuentra el
cuerpo sisiemático de Ia ética política de Cosle. Tambiéo este autor la
concrela en el estudio del estado, ya que p.Ia él la comrnidad política
de nuestra época se identifica con el estado contemporáneo- En relación
cor eI Estado desarolla los sigüentes asPectos: organización (elemen-
tos constitutivos, nacimienio y mueÍe del E§tado, panomma de los re_
gímenes políticos, funciones del poder, administración ceotral, comuni-
dades Iocales e instituciones especializadas, se icios públicos); misión

'B. Haañc. ¡, ¿¿r l¿ C¡¡rro, IIi (Brceloda, 19685)138_180. E¡ sü úl¡ina


sínlesis de é¡i.! ieoli€ica. Libef¡d y Fidelidad en Crisro- HiÚing hIa el leñá de
la moral pohi.á e¡ el lercer ioúo ("Responsabilidail del hoDbe ete Ia vida'l pp.
338 402 (Búelo¡a 1983).
L4 ETICA POLNTCA 627

promocron comuniraria rcul


del Eqado er 'os dite §oL aspccro5 de-l¿
,,,,i..",..i"". relacron dFl e'rado con lo' cue'Pos inreme
'o.,al). asocidcrone'': reracion der
:1:1,;X;;;-:;,d:;i;;,".i.¿"¿.'..'''r'"
j
i-1,¿5-.i^"r p;;;.,
r¿' coTrniqlesio;lii
v con :.::: ;?,':'::::
D¿rte Denenece a lo que se lhma moral rnrem¿
:-;¡n;fi;:'*rr,t.;' *he 'r Pocas 5rnIe'r' de mor¡r poriúta consi
de daro' de rJ
liii'i" t.i .i, r;" que po'ee la de cosre:
.dbrrndancra
moral equiliora'lr:
i.",rl¿"¿'r.1,,'*, am'ptrtia ae conreniao:' aloración
poslula abierta: etc.
M
',rr,'ton,tír\c \u moral pol;rtca con abundanle Inareridl cien'ia
,".il.""i,"i'ii¡"., ) ""a'isi' pr¿g-
;;i."c- v "ipenertcir h,m'na ;rrca de
'
,,'''"'*;.i;;;rr; ui'l;úro tieno de ,rpon'cione' v sugerencrhs'
i'Il"l^r. '. .*"."u - * Iorno a rnco ere' rernauco' que d¿n lusar d
L

.'"" t*Á rrni' * q* 'e ditrderenotneno er libro: l' Fenomenolo8rd porrr¡c¿'


porrrrco en (us rormurdcio-
'-: til,^.'"..il;;* ";,
:;A#; ie.r¡ra der
¿cruale': 2' Ra/on ) Fe rrenr€ ar
" ','' "ranramienros un¿ erica porirrca
i:;il;;;r i,;,;;ilr¿e 'e atude a ra' ruenre' de
ecre'ra'rico rele\ion
:';ltli;;;, Á;;ii;.';;;,""d pa'*ri'a masi'rerro a erercrcro der ooder
;J;;;;:, :; L:,;,*;' áe r,losco¡u¡r¿aá porrri( v
Ia mor¿r c'Larrl
li,,il "."-¿. * r¡",ddn cla"icos problema' de
#";::1;ññ;;;pJ,ricd. er bien ¿"',''' *,"" ri¡ de ra 'omu-
I','"'.i'.L,,'*" ü,,,1.n¿á¿ DolrIic¿ roÍna'
en la.omunrdad I-srado
'le
r ' eer'ona' v PrLrpo' en ra
,l'é;H;;:': ;"..::;; i-J-pá¿.i porui-' ciud'dJno rerJción der
i";r]"n,;al ae,.cio' ¡ aeoc'e' der
de pre'ion 'indrca-
i",ililiiii rl'";1;i;,,
e,,lp* r*ermedio' 'p¿nroo' .grupo' ool'ri'J e lgle.ia: murua
i.." *,i'i*.'á
'i i,"¿.' porrrico: 5' Comunidad
poco curdadr' despro-
;i;;i;;l ;;."-¿;';:iericien, ias
'e\po'icio;
crc.' cort'ideramo' la obra de Marrai
oo,,,o".n Jl.q,ir,r,;o ¿e Dare'.
iil" ,", u,il" ',nre,i' de errcd polruca en el ' anpo de la moral
católica.
Las md' ,ecrenre§ srnrcrs de Ftica reolóerch
tamb'*
polilica Fn ¡lguno\ "h:::ll.l1l:-
c¿sos las'2rusro'
.*r"."ip.,',.*'"ot* lamoral
er rrararrue¡ro 'e encuenba 'u-
';,;'t..''. Ln oÍo''r/ er
cambro
f"".
,.icrtemenle desarrollndo

i. ,lia"., r,¡ ciación a ta práct¡cd tte td re¿l'sr¿ v (Marlrid'


^ o" i'lii,i,ll
*" pB.. co'!o dé \4o,¿re Iv Bres'r¿'
i';h" . ¡ , ¿ p.r., ¡'r. udn u
.,c
,*5, i-lio. o íoto. ur,.t ¿" v¿'¿l s'lJl BÚcc' roer'! bo r.r¿ A'
;;.;";,. rrr'BJrso'' rouJ'! ror-en/ Pú' Ln
;",',,', M¿'r'. 'onocimienro
;[,;"" o; ;. oi;;;'. ' .," r¿ mol Do ü " de'püe;
:{trrrLo de I Or@r\zu. ¿a".uatdt sottat l ¿t toü.
) fl,]i'li',].:. ü il
62S

2, LA ETICA IOLITIC,A EN LA DOCTRINA §OCIAL DE LA IOLE§IA¡

Son numerosas las orie¡raciones dc Ia Doctrina sociat de 1a Istesir


'ñb¡e l. po'I,c" cn .u a.oL. o n oral Dc.ra.ár. . o,.o btu,tu, \ mp;rrhl
r¡\ .J\ er^¡i,rnl¡. d. Leon \l de Pr,, \tt. uc.tuJ \\t¡¡ e;crcti..,
Pd., a ., --,.'.,. Je laD.o Vl rc,n. .po',o,,., O.dt¿\ú.d od t, rt. rs
t,
) el ( or cilio VbricJno [ ,.¡t, utu-t\ oe t" ,egund:r p ne de ,¡ ! on+
fLrución p¡sro1¿l Gau¡:littn ct S/:es¡:"
A . on r¡¡, inI recogclo. to. ,crn:r! q
c \ on nr¡\.,r in.rs.er . i.,. cn
nunrero y en n¡portancra. aparcccn en la Docüina social de t¿ Isiesia.
Lo' .d.rc nJ. r eqoi r, ..eo. r, n:rllo\.
1) N¿cesi¿td ,- canJisuroc¡ón tüsfd .tc ta au¡oti.ta.t potlitd
(del podet polh¡co)

.ocr/l de L, Itlp. r ha ,¡iatJdo .ñn rrec,rcr. i¡ .ún


rrinJ
.:r
-lJ do,
i¡.rj ld neLe.rdrJ
)
oel poJrr por.tr.o Jc, ro d. t¡ .ocreJ¡d fl irn dc
cur'.ri'uir lb,onunidJJ pot i.¡.omo uni -eJtiJdo ñece.-ri¡
desenvoh,imiento de Ia persona.
fruJ et
Ali J. L ruroridrd potrriJJ. flJpec,u en e' que
¡bdJ lJ 1..r.rdJo
rn ..Io d.
un Irodr t,xrlrcur¡r Leor Xllt .,d du.Irn., J. t ttte.ri,c
fija en las condiciones de su iusta actüación. Se señatan dos cotrdicio¡cs


L.
LENTTDR, D¿r C/irir¡,nd .t¿t Stdd¡. F¿s¡stettu ge i rt¿n
ll\\ n .h \ 1,. a \tlt ,t t .t.1 r,ü- __ .., crun^ritzLihet
- /., ¡. (, .,., "., lv ".. t"-,:'i H
D-.h.,¡ tnd ¡- ptn'L !,rrn1, dr / r .< rtr)rüO tot lti I
- ..1_ r_,,.,- ,td^o__....,,pñ tu,rr,., tqo...A D o,r /,,. 11-
nt palll¡ca de la ¡gl¿r¿ (Btlbao, 1965): R. ALDERD¡, L! ti¡1d cn ". tt ra ui¡¿a¿
plí¡i.ar Esqtrema XllI (Madri¡l. 1967) 3l I 343: R. LA VaLLÉ, Ld r¡¿u & ta Cah
,nbd politica: Ln l9lesi¡ en cl nundo dc h.y (Madrid, 1961)t R..lú.d- La \nj¿ ¿r
¡üal-l/a1.,, 1.1."., ,n.'r, r,,o.er,o\ \¡J.r rd to0,...-4,.J.
, , ,a . . -,,o d.t_ ....¡ r,." R-;en,. I t,nrñg,. _8 .o 4lo.
'<ubr, lcm.¡1, ¡ t,ol.Ld". -n ,
\:.¡. ^ LtLeI¿\¡,tc...t .d.r d-r-\!Lr
el hccho de quc u¡ problcma como cl de tos tircs del Esiado v de las relx.n,.cs
_ q l.k , r Lr ¡ ñ t. n,, J¡r¡. c,ol
', -'
¡'r ¡i-o.,,o rgo d" ^. ! .. td .,.r,. t.t. , te.¡
.'i ,rir'o.'. 1 ¡J.ni ¡ l^ .¡vtu:¡
\ -obre Lt -uJt t,1,,
.o .Jl I ,,,,,,"f.,i" ¡. iro¡ ,ror,) o(,oj
P. oJ. I fl',o er..r,'or. ) r ".rpo.i,i^ .n
Limida c¡mo Ia quc se haih en cl c¡ptuLo Me Lx scgunda p;fie .le ta-cs,, (R. l_a
Y¡ .t, ."td,'¡,'aú,¡1..tD...., - nLrd"n h l\4.ri..
06 r1', P ld .t c'.ro..J" ut"..n. "rgh.raret
_r ,o,,.o/.,.td ,.te .1,r¡r..(
1065t no hubo mds que ruJrro iúer.¡dorls.
"rr.r L.C'r", / t\-a-d¡- t a.a1¡. t--,n-L!a.¿,,n nDn
,u , Sa a' ., t,t t.¡.-a I MdJ id te I h n
/

ru[Jnmenr¿le', que v]n necesariámenle Ü1]oa': el poder potitrco debe


r!trlrrarse denro del orden moral ). por lo ranto. debe ter,er como meta
iu rc,rlización del bien común. Estas ion también las dos condiciones en
(tnc ha de basarse una comunidad polític¿ si quierc ser justa
Juan XXIII, en l^ ercíclicz Paceñ in ¡eflis, etporc de xn modo
$i$temárico (nn. 46-52) la p mera condición: la autot;d^d polfilca deb?
tidt al orde noral:
'oñe¡ida
''La autóridad no ouede co¡siderdse exe'la de soúerimiento a orú 3u
n¡*,on laaloitdad cuñ':r'en 1..- u'rod de mándr'cgln l" rp ¿
".""i p. . 'L ruer/" oblitsJrori poeJ dcl
',;o". " """*.,."nrem.rrque
.iene a Dio' como p'rñer p'm'rpro J ünrmo nn"

Fl e"tl 'omerrdo d oroen moral en l¡ medida en que


Doder Dolruco
r'"'," pLr t'náli¿¡ la ,calizacón del h,"n.onún. F\i'ren abundanlec
i"*i..'a"r rnu";'r.no ..l"srdrrrco en qt'e se e\pone ene cnterio decrsivo'
I(ccord¿mo' ;l pdsaJe de la can¿ apoa'lica O' togcvna ad' ea'?ns:
-P, noder Dolfi o. ore co\rr.Jle "l i'uo 0dÚr¿l ) necP)a o fÚá
"*."",'r"."¡i,'"" ¡.. .*_pu .o.id aeDe I ner (oro rna"dad l¡ Eal'7a
.,i J.i ut" .".- Re:rrúdo l¿' e8 tira' lroer-d"' de '" i'd¡rduo"
de.1' .rrrll". J de'o' gruPu' rD'idrÚro'' "Úve ¡dacreÚ'ii'dnenrcau)
"" p.'^¡" +i.o. l,icon¿c:orr'
requ-,d, pára 'on'ee!ir e' bier
:n uido cu de'l ñ' r§Dnluar se oe§fneg!
ren:ico I comple o oel hoaD'e
iompeÉncra que ored'r rr
{,
¡.nL.o á" lo.l'.'"" n'.p'o d. 'Uqqf,'
-"*. r"' - * r .o''pueb.o' lnre^ ren" iemo e moJ do por el d'ro Je la
,1i.,,. l, a",i,-u.ión "l bi"n comLn. oel qLé'reoe'1 re'Pon'rrf ipo Ldad
i lr¡-¡ tlo our¡. ¡ue.. ¿ los i_dr\ rduo', d los, u"rPo' inr"rmedjo' "l
,1.,r v d"je, , ;c.Don abi,id ae, rrap,¿, @ c"o.. lo. L1e. Le. ,ndlcen ¿
r:
."".rr en l,;eaü;d!,ón del b,en comun

2) Folnas potíticas J "rélimen dltténticdnente denoctático"

La doctrina social de la Iglesia ha señalado con claddad que en cuan-


ro á lorma5 de eo¡rerno ro romt polrri.as. o regÚnene' polrlrco'\
l¡'
ex,r. olJrali'mo de'oD.rone(, con ral de q!,e la' eleg;dd' re¿licen el bien
."-.in si".-¡-s,j. tod?' ld§ lofm¿' polrricas han de ser comparibles
,t..,ri" el de la democracra lundamenrrl' Judn XXIÜ
".r - :¿er -r-",.t: que ld auroridad proviene de Dio' no debe en
i".,.ai oue rrec¡o ¿e
mooo als;o ded.rcire que lo' hombres no rengan dcrecho ¿ clegir go

' p*t.. ú. 4'-50 On ' qtra¡1?' lPt\ot?'' »J:U'


Pac?n ¡n
i- ¿t- Oa " p'ord ! en'oj?--5r _<zz. vcr o',lo'
^*,...¿,¿w'...
.,,."":.'.i'd"r la noa '0 dP e{e nJme'o Je la "o''osP'in' dJ\cn*ni"
-
rr af J L. GurrÉRRú. Fr¡r¡as d¿ t¿obierna- a. c.,II. \87-195
630 Itr MOR{ SOCL{L

bema¡tes de 1a nación, eslablecer ta foma de gobiemo y determina.r los


procedrmrenro\ J los iimire. en et ejercic,o de ta uuroriJad. De aqui que
l, docrrina q e acabamos de exponer pueda conciti¿re con cu;louier
cl¿.e de régijDen ¡urenricamenre democrarico. .

. . Ha sido Pío Xn quien,'sobre todo en el Radiomensa.je de Navidad


del año 1944, ha desáÍollado d6 un modo más amplio y sistemárico et
tema ü la denocmcia. Co¡srala pío )(It .,La rendéncia der¡ocrática se
apoder¿ de los pueblo. ) obriene por doqurer t¿ aprooacion ej con,er-
rrmrentodcqurene\ a.púan acolaborar ma. ef¡caTmenle en to,desdnos
)
de los individuos y de 1a sociedad,,r5. Más aún, ..t¿ forma democrárica
de gobiemo Jpafece a mucho' como un po5tutado naturat ,mpuesto por
la mr.ma rrzon 6. Hecha e,r¿ conq¿r¡cion.,li.ringue pro \tiao. niie-
les en la democraci¿r el nivel de las fomas concretas C.admire disrinhs
fomas y puede rener su realización así er las monarquías como en tas
repúblic¿s") y el ¡ivel del conrenido fundamenrat. Es precisamente este
segundo nivel el que más ]e inreresa y et que desalfotlien su Radiomen_
saje. "Lá preocupación y soticitud de la Igtesta se dirige no tanro a la
estructl¡r¿ y orga¡ización extérior (de la democracia) _tás cuales de_
penden dc la' asp acione5 peculffec dc crda pueolo-. t uanlo at hom-
bre como ral. que. leios de .er ct objero ) un elemenro pa.ivo oe ta vida
socral. es. porel co¡uano. y debe ser ) permanFcer.,u qujero su tur-
damento , sr ñn'".
Esra es también la perspecriva que adopra el Concilio Vaticano I:
"L- mod.,,d&r, !on(.aa pur ta. qle t. romtnrL. d ooh.LJ ór. iza
5u-p.orrud aDdqñeddl J,r eqlr.ibrio de to. p dpre. put,.os rue¿-"r .e¡
dile.cnre.. regdn el gelro oe cqda pucbo \ td múcha ¿e .L ll.iona. pe¡o
.lrb"n Fnne . crtE r to nar un I po dc hombF .u.ro. p1f.t .n y oenero.o
re.pe, b ¡- lor dema. ptuj er provectode.odr td fm.'.a hum;.. ¡.

3) Acti|idad palítica bajo el tlobte signo de ta particípación


y .lel plurulisno

Vi Ln,onex¡on con la alimrcion oe un resimen..aurenricamenre de


/\{nocr¿lrto . lr docrrinasocial de la tgte"ia concibe IJ acri\.dad potrtica
'bajo el doble.rg¡o de la pan'cipJción ) det pturatrsmo.

" Pu a. in tp ti:, n. : On,, yahtte, r?n,óJ":,225. Vr to. do!unenro:


crl¡do. pn ld ro¿ 16 de e.re numero oe iá .nJ.ern n rem5,'.
rr P. GMNDo, Cot¿.Lión de
Ehcícticas y Doctneh¡os ponfif¡cios, edic,5_,
(Madid, 1955) 233.

3' Qatuirh e¡ Spes,


n, 14.
O DE LA ETICA POLMCA 63]

La necesid¿d del pluralisno político (v de los medios para ga


r¿.ntizarlo: libertad de asociación política. existencia de partidos, acep-
lación de los grupos ideotógicos y de presión, etc.), encuertra en el
Concilio Vaücáro II y en la carla apostólica octogesiña adveniens nn
notable eco afirmativo:
''El cristimo debe reconocer la legftima PLurálidad de oPiniones temPo
raer .l sJ eo¡nrc! \ Jeoe ¡.rpe a á los . irdd'lÚo' qur. Lun ¿erlpdJo"
defic¡de¡,em"r ; .u ñan.r oe.er. Lo\ pdrJo. Ilolrnú. coca prJmo
ver todo lo que a s¡ iuicio exige el bien coúú4 ¡!Dc-a. sin embargo está
p nitido aniepóner útere§s úopios al bien com¡tn"r'.
"Luchen con inLes¡i<lad nor.l y con Prudenci! co¡tú la i¡justicia v la
oDrrsiun. .on''d ld úorrdn, id ) el ab.olr NTo Jc Lr' 'o o honore u de Ln
.oo portoo pñlrro..onieren'e ton ':r' enddJ \ F'lrrÚd' m¿c dln' 'on
rdrJ¡J ] lorr¿e7a po"r:.'t. d .Pnr.ro Jc rodo'"". \o pérenece n al
ru¡o n su:re¡a o§ pxrrroo' pol to' quc r te
el r"d o" rmnorer :oa r,Jeotosra por mcdio. que @rnbo.Jlan ea lá
octddrr¿ Je lo, ..pr rr'. lJ p"or o" rodas lotd t lo: grupo' e§Lblc' ido'
nor ui^L o, cL-rLr¡^ r rc.isio.o. áeo ro de l.r llo'i ad q
i,-. -,..non¿c- ¡e'colLit ei el ruerp. qo.-ol, dc mane ¡ Je'rnre'e'dJa
I por .u ¡;opio cmino. e{d' -on\ic,ioae' ül.r na' som .á narudreTa' el
o rEen ) el nn dc. honbre I oe lJ,n.iedtrd--".

El prÁclpio de pañ¡cipar;l¿ en la vida política ha sido §übmvado


de un modoispecial por la cárta apostólica Octogesiñú advenie s:
"La doble asPüación ha.ia 1¿ igllaldad , la Páficipación lrala de Promo_
,- rño de 'or eco d"n o,'orrc.. DiLe 'o' mod_ o' hd §rdo ProPÚe 'o§:
'.¡¡u¡o, ce ¡'o. hú'ido ld e\nerimrn'dJo'. nir,Slno !risr2'" com¡|"_
r.ienre. r .b,'q:eda tr"áa aoi.r , enne t- endencras ideolo-r'c'\ d'
pr¡cmíi;s. El distiaDo tiene 1a obligación de Paficipr en esta b¡lsqüeda
ili-sual que en la organización y eD Ia vid¿ políticas. El hombre ser social
conitru; su destino a través de un. serie de asupáciones pÚticularcs que
requie;n, püa su Perfecionaniento, una sociedad nás v.sta, de c'rácler
tni\er-|. iJ 'ñ,Éo.,1 poll ia. lodr c.ri"'dao p"fnula Gbe cñlo'"r'e en
rr..J.-;dád pli& ) con ello. ld d-mersiol drl oi'l'omún ' '
' " "dqü",c.

4:) Confis racíó noral det Estado

La re¡lidad pohli, a del fnado ha ocup¿do nolJblemerLe la arencion


del magr'terio écle.i¿''ico" Frenle al
arquismo. el absoluÚsmo el

a\ octaees¡na ddtbie s.n.25: Oa.¿ sdnd* ñensd.ies' 514.


q tbíd.24: Onc¿ srundes eisaks, sa9.
43
Ver u¡ bue¡ ¡eumen en ¡. L. GurÉMz: ,rr¿d¿: o c.. tr 109 130-
632

rolali,an¡mo ) ta\ drcradur¿s. h do.lr|nr \o(rat de td Ietelrll oroctx,¡n.


ra ncce\idad dei Fsrado. su r,nat¡d¿d
de s._,.,)l i;,;:;.;;;.;'l'i:il
srupos inrermedio.. r carader subs,¡ri,"o. su;;;;;;i;;];;¿,';':;
\ rnfu,acrón al Derecho
LimirárJono\ at üttrmo aspecro. recopenrcs las e^igencrn,
por Juan XX|U cn Ia encrctrci po.?u in mrrr¡,t \
t.nts:
_De r¡dJ
lo r\puc\ro hasr¡ rqur
xu(.r, rrja. ro ¡,,m.,n qu" i"qu,"e dcnvr r (o
pten¡ -rar..hd oLr. rn
EsJdo r\ r¡U¿cr¿r! .o¡ rdmutas ". ü.¡.,\a\
.n rj .,ij;;;;..;,-.,ij::: ,iJi
dr.\1,n. rrnJrmcr.rJrc\ ircr h..,r* _r,l r¡os ún cnhprnu,o dc
L
'r¿,¿i. 'N
en l¡ (on$ir r ión c¡ncrút
oct rna.u "
\. rql,uR.. .n \crrundo tuE¡r. quc. .n r¿rmrnos estlcrrh.nrc nr.L,,-
.r erJDoE unr cnr¡r
ión púb¡n,r rtr (r\¡n Lúmun,\¡r pot,,."."",,,iii",J
ut
u uün .. pm.cJ,mruro\ pjrn d.s,Ennr ta $otrñ:.nrcs. ¡,",,n,rr.r.,i
r,.. que ne(,rr r,.r¡tc debn¡, qu,r[(N R¡ac,on¡hL
i¡¡\ ,r\te{1rvJ\ fónrpcrc,,cr¡Ls y. cnre ],. l* -,.," ¡.
tnr ut¡nn¡,. ti\ ndmJs nb g,,,",". .¡,. r"-
,rr (t/rdrr rt cjcNrüio ile su\ [rD(k,,rs
'r
y., illuc¡.,rct
rnDtñMtc. qu"
rSr.r,!Lrcr. !iurt,r,l n, * U"n,"n U,, .*" *r. ic,, t,,s ttc¡ccho,
cx sus nt{Lnrri (.
1", ,
¡ys.1la ,t. t,fln.¡ .,rx. tun- ,"i , p,i,,.p,t ,ri. i*_.,"r,;t;i.,l
"i,n,ir"¡+, ".*.."
,.{11r...n . ¡c\¡.1,r. u(nri, ,uuru". rui"r, vir,"u,"r,,,
r(rh,^ ..¡ri,,,, ;" "l,l:;'
t,_-.r;-
) Jshrrc\ ttct üiu,t,rd¡Dt,-x

3. ErrcA pour¡cA EN -priRspEc.r.rvA


il|l3s1if&14
,,r."{,a¿d¡? ¡quer modir de enrbcar er crhoñ
^,," l].".1,1:lll::
(t,,c. t"w*,',,
:,ccprrrrdo ta\ csr,u(tu,xs cvotn(i¡rnxdas (tc
¡ p,Jtiri(r ,t"nro..r;ii;,i,
lr,,tt¡]c"irt.g,ar enc J. j:r,tir¡x1Niúretrsrprr.rtr",,r,*¡r..n.",i,_
!u-w-. r¡c,J :u r(re¡,rs a revrsrón c|| otros nc,o
c¡mbid üü liritivo, es Jccir, ¡evotucion¡rio:
nunca p¡r rextj/.rr un

Ni',se fueJc nrSar que ere rnodo,t( entcnder


tr (:r,(r poj¡Icn:u-
¡ole,clemrllo, critico,: .in embargo. en su cst¡u(lura gtobJj es rnu
tr'omr ire srgno rnregrador.
," enfoquc en h nrd,da en que ¡cepra ra ,err,cn-
. ,.. ;1:.ig:11:.^'-1'jt,.
ol ra
;i:.1,:Jl<:,1:j-, rmpe(rrva cririca. por orra pare. Ieni, un¿ norlbrc
,u,¡r,rul
truaSoSrc¡ ¡a,d aquclla§ situr(rones hi§torica\ en l¿\ oue n^ ..
sc rmprde llegrr á tas rotás atcJUa¡las p*
democririca de ia humJnrdad t, .r"fr,ij,

4 Pac¿ki ¡ terr¡s, ¡1.75-17. Oh.. etu,¡¿.s D.,sajd.2.J2 233.


L^ ETJ'^ TODIC^ 6:J3

Podenos decir quc la .ct'lexió¡ teológico mo l y el m¡gislerio


eclesiásrico se han colocado, en téminos generales. denro de este en
lbque de ótica integrudora al abordar los problemas morales de la polí'
Lica. En muchos casos, esa mo¡al ha ejcrcido una fuDció¡ justificadora
de los nvanccs rerles y teóricos de la política y en otros casos hr estj-
mtrl¿do a los individuos y a los grupos eD el proceso de mayor hum0-
nización de la rerlidad polataca.
A continuación aludinos a los princip¡les con¡enidos de la érica
polílicr planteada tle:d¿ \'pam una persp€ciiva i¡legradora.

x) La comrnidád politi(a: erigercia necesar¡¡


para la reali-¿áción humana

"Los hombrcs, l¿s t¡Nilias y bs divctsos grupos quc coDstituyeD la


comunida.l civil, son conscicnlcs dc su propia ¡rsulicieDcia parn lograr
unn vida plen¡mcntc huNana y plrcibcn h ncccsidad dc unr conNDklad
rrrls ¿ntplia, en la cLral todos cor.jugucD ¡ di¡rio sus creryías cD orden
l un meior pmcuración (lc¡ bic'¡ conrúr. Por cllo li,nn{n comuni(l¿rd
polílica según tipos institucionalcs Varios"i'.
La comunidrd po¡írici nacc dc la nrrr¡r.¿rxi¿ de l comunklAd
civil: óstt! ri no sc estructura hrnbién co¡Io conrunidrd polílic.r, no
pLrcdc rcLrlizar "una vidr plcnaDlcrlc huoraDa". Así. pucs. la ncccsidad
(le la co unidad polÍlica (no dc lns fornus políticas que ha lonocido
históric¿rmcntc la hurr¡nidad) sc tunda on h i,Ipotcncia dc los ¡¡rupos
inl¡riores. t{¡nili$ y grupos socialcs i cro)cdius, pam alcrn^r el bieo
conrún necesario en orden rl pleno dcstlrrollo dc los individuos y dc hs

Anótese que par.r rel¡rirsc a ln di¡rrcnsión polfica ya no se halrla dc


''sociedad peri¡cla . sino dc una añpliación dc I.r comunidad, dc una
''comunidad más ampli.r". rlay quc ¡dvcfir, .tdcnrás, lr itnplíci(a dis(in-
cnirr enne "co¡nunidnd civil' y "corruflid{d pulílica .
Frente r los impugnadores del orden po¡ílico en cuanlo tal el cris-
tiano reconoce la neccsidad de la comunidad polílica.
o líDiIes de l¡ comunidad polílica es
- somelida ahslas.d¿1ol7¡dr
Cuáles se¿n
cuestión transformacioncs dc h hümanidLrd. El Estado
rnoderno es unn.lc csas formas hisróric¡s. Posiblcmcnlc sc halla dcsli
n¿do a desaparccer. pero su desaparición ¡o indica la desáparición de l.r
comunid¿¡l política. hajo otras fomas-

't' oar¿iun et sp¿s. n.'1,t.


63,1

. . A partir de esta apreciación: hay que esrimar en mucho la aparición


del_E'rddo modemo. corno un producro de madru¿cron human;, como
un lecho Lulluraldc ;rnporunriál pero no ha) que vrjordto como et trn
de la evolucion humúa (Hes.lr.
_ .-
Pero, ¿qué es lo que riene de urac¡¿ñsrico :- pecut¡dr t^ yidl
poLILa pr¿ que medranre ilta puedán tos homrrre. ri¡t,zar un¿ vr¿:r
tlenamcnre humana. He Jqur ja respuesra:..8n td \ida porrrit¿. to:
nombrc! no \on \rmptemente productores de biene, economrcos. cJyo
\alor hrLna de de¡ender unicamenre de su (¿picrddJ de produccián,
sino que son ciu¿la¡ianos, reconocirlos como tiles por todos, y cuyoi
dere( hú\ tunddmenrales los que perenecen ,t ho;¡re en .ua¡ro r:i_
'e hallrn proregidos. Adcmar. en t¿ smredád potrrrca. et homb,e escJpx
de Io\ e.rrecho{ fim,req de.ú rámit'a. de s; grupo. de
"u ctar. pira
enrar en una comurudad mJ¡ vasta. y. por consigurenk. mas nc¿ y m.b

Sus obligaciones, sus responsabitidades, .se yuelven más amptias,


DorqLe.)a no rienen quc ler con inrereses paricutre, o ae grupo. ,inu
con el bren Lomún de la comun¡dád en su Lo¡rtidad. La hu.querlz de un
t,ien m¡\ va{o que el Jel indrv'¡tuo y et ¡:tet Brupo aludr;t hombre x
\ olvcr.e rnÁ plcnarnenrc hombre y, en consccuencra. a realzar
u¡a v,.ln
más plenamenle huma¡a"4.
l'or e:o renemo\ que de(ir que ta ..pot¡r¡c,Jad" o lo potnrco cs
$x dti,e ston ottroputófl.dl es un¿ dimens;on propi¿ det hombre, dc
rodo hombre. Pü eso mi,mo se debe atúmár que :ta iomunrda,l porrrrcn
ry ld ,,utoriddd pubLca, se tundán en ja n¡rurate/a humdnd.
). por to
mrsmo. peflenc.en al o¡den prevrjo por D;o\ aun cuJndo t¿ delemi,
nación del reBimen poLri( o v ta ddsien¡croÍ de to" eobFmfles ,e deJcÍ
a la libre desisn¿.ion de Ins cruda¡t¡nos r?.

"El L,rado es una rnsrirucrdn.rrabteci¡:t¿ por Dro, rt .rctu ta n]|u-


rdlela humana lcf Rom ll jr. No depende n, dependio nuncd det cap¡i-
cho del hombre el organi/arse o no en Estado o so( iedad ,conE¿riamen-
te a la teoría del contnro sociat). EI Esrado es una corporación orgánica
y por natwalez¿ necesarja, sin la cual los hombres no Do¡trían vivi¡
tunro\en pa/ \ en orden. con rusri.ra y pmspendad.,o cudt <e ¿ptr(¡ r
roJú el genero humano. aj menos despues de ta cáida onsin¿t.. ..

of;á Effj,#r.,,r, - , .oht,it¿.t poth¡.¿. L¿ rlt sia en €r mundo de hoy


a Gakltu et SD¡s ¡ 14
"' tlrmo , ,.1 rrt rrc
b) Legitimidad ética d€l poder político¡'

"La cornünidad política na§e, pues, para buscar el bien común, en el


oue encuenrrd §u iusrilicacron plena y su §entido y del que deri\a 'u
lisrumrdad onmrsenia v oropia. El bren comün abarc¿ el conjunro de
..-,el-tas conAicione. a" v¡da sociál con las cu¿les los hombres las fa-
Initir. 1 r.o.'r.,on.s püeden logr con mayor plenjrud lacilid¿d
l* I
su pfopra perreccron
La exisencia de la comuridad política se halla indicada por su fina-
lidad: el bien común. Fuera de este bien común' la comunidád política
no encuenüa sentido ni justificación, corviriéndose en puro instrumen
to de dominación de unos hombres por otros
Sobre este aspecto ya hemos insistido bastante en páginas ánteriores'
No c¡eernos necés¿¡io rcpetir aquí lo que ya hemos dicho más aÍiba

c) Aspectos éticos de la a$loridad polítrcr5'

.La autoritud: eaiCeacia de Ia comun¡dad po¡ítica. La coNecución


del bien común exige necesariámente la €xistencia de uIia autoridad que
coordme v hdpa Lonverger h.cia ese bren común los e§luer/o' de la"
dirrima, óerio;ac \' de los diversos grupos "A fin de que por la plura-
lidad de parecereino pere/ca l¡ comunidrd polilic0. e§ údi'pen\able

{ .t l¿ Ponwi. l¿Eit¡ñ¡t¿ résistañce. in ¡rc.¡iot


R. HEcrr, ¿¿ chtiti¿n
lParís. 1962)i G. pr¿ól¿tu énú det Po¡ler M^¿nl' 1962)r A' ZtEcLR,
RIlm, ¿¿
ii"*"i,?.u:r nDrat¡heoloeirh¿i Fra«n.td Gdaha¡L¿ndun3: Theologische Be
nchte (Zu¡ch. 1972) I. 285 3 tO. V ñ6- P.obkms ¿ti.o! del Poder: Coliliñ n'
90,r9i1,: couu,fu, z,ñ Ptohtpn ¿?' G@¿h in rl ,hntL h L¡hi,-Ftc;'
H.
¡,ii*i¿i tu*t¡. tq?¡, 148 ló/, R GueN. El ¡dP¡ rMcdad. la 8 |
"i,,.
\ +.as, tot,? ?t p;1"..1eolog't , V'dá ,'0 I l§?a). n 4: R A] BÑr l '¿l'n'ir' J
po¿et;oLitico: L; i,le iddd cris¡i¿na en.l c@Pronitu ec¡al (Mad¡d' 1982) 117_
30: L K. CALBLú..4,¿¡ouí1,.k| po¿¿,lB¿reló¡o- t984): Vños. ¿¿s ./ir¡¡o,,c
'r

\ ¿,,,¡l¿, Rclisl" Cál(iliu ¡nl.maional6ll984r. n. l: O \o\ NÜ{l¿BR|sc'


Ma h n" d¿ ch'-En P'oál'¿: snmen de¡ zeir 'la85r l8c: D'
\La\c;. fi ¡¿d, or¡fiho, 'ú -inoultu oF.no d¿t .dDó¿ '20J
.¿' ,d/ ^r ¡Slesra vivd' ú'
7r- ) r, rs36i )\' \ 4 l t X. Úñr. P.tit. t¡¿olor..lk potryo NRl,08 (lo8o' 64
r r t

15: L. \a e.fl- Potl '. Nuevo Dtm'dúo de Tmlo8r¿ Mordl rM¿drid' loo2)
r¡ )7 r1 16 H r-Rod^Hoñ^. /v\ hts N. ¿s set Kdñ mtl Ab"l " D.r' h' -nL h' C lan
be uún di; cevdtt: 'nÉotósie der cegenwar 37 (1994) 55'67i \¡ ños' Et he.hizo
deL po¡ter Rlblia y F. m lt»4), n. 5a-
5r Gdutriuñ et n- 74.
5\ P Yñ^DtE".L'a onú
'oes. d norale. E¡tdd 379 11993) 2t3224 En el C¿¡ecis_
no de Ia Iglesia Calóli@, nn. 1897 1904, * eDcüen1r@ las afma.iones ñorales
636

una autoridad que dirija la acción de rodos hacia el bien común no


mc,iIi.d o de.polrcdmcnre, s'nu ob¡dJo prrncrp.tmenle como un:¡
Lrcr/a morá1. que ,e bu.a en h tibeflal I en et \enr,do de rc\Don\Jh!
liJ¡d de caJa uno" (CS. 7 t ).
La autolidád es, pues, una fueza inmanenre de lacomunida¡l política,
es L'na exigenci¿ interior. no exrcrior. La función dc ¡¿ aurorid¡d;s ta de
uDificarlos esfuerzos rendentes h¿cia el bien comúniyesto node una ma
ncramecánica, sino iibrc y rcsponsabtemcnle. Solamente entonces las per-
sonasi alsonrelercea la autorid¡td, noqüedan humiltadas. sino liberadai.
.
Ot¡een de la autotida¿. La auroridad esiá previsra en el orde_
nnnrienro ¡itural:'te funda en ta naturatez-a hnmana y, por lo mismo,
pcnenece rl orden prcv¡\ro por Dios ' En docurninro. oonririri,rs
xnrcnorc{ \e decia .tuc ta -auroridad provrcDe (t( Dros..''. Soixmenle en
ur pllno /4,/¿¡,ci.,, .c pueLlc dc(ir quc la auroridrd vrenc Je Dros.
La ,uro¡id¡d 1¡ licne Ia comunidad en cuánro t¿l: en este senrido la
¡ul(nidad vicne "de" la comu'ridrd. La democl'¿icia. en cuanto visión
pr,,lund., Jcla ur(ridrd- e{ un posrutado de h conrunidal polni(.,.
"Pursnr quc Dins (oloür dr,.ecranlcnrc x dctcr inrd:,. p"r.onn" it ri.nrc
del [.rad,,..cría cDnrrn Ia e\periencin y conrra ta rminer,, generrt con
rtuc Dro\ ol)rx cn cl nrundo, quc cs a rravé\ de t:rs (usar rigunaa,..'a.
Lxs Íúrm . Lonr(l¡r tlL.derign.rckr dc tos Eob(rnrnrc, sc Jci¿n ¡ tn
..
lii)l,(..clcL.i,ir¡ dc Iu' üiu,lüJ -Ahor¡ b'('r. (ict lc(ho (tr que ia ¿uro-
ril, pr,'vicne de D¡u\. nu Ltchc 'ros.(n moJo
t'tsuno dedutrr.e qie los h"m"
brc: Iu rcnfxn d,:rclho u ctcgn tos gobcma-nrcs ,te tr n¡ti,,n, e.rabtccer
l,r rbrmd ,lc gobrcnrÚ ) dcrcrminar tos pro(edrmienror y ¡or tírn c, cn ct
c.ter(rrro üc lu aurori,-lJJ. Dc rqui que t¡ doctr,n¡ que .l(ab.,nros de c\po-
ncr pL(Jc con(.rirar.c cull rurtqurer ctasc tte rdsinien :lurCnri,:unentc ¡c.
muLruticú ' . La Jr.renDi'rJ(ión det drinÉn ñtfico y td dctigll¿crón Je
lu\ Aobcrranles sc JejrD r I¡r desrso¡Nió'r Lbrc dc ¡os c¡u,hdlnos ' .
Se prcJc rdoprrr cualquier tbmr de Aob,erno rmon,,rquia. rc-
pIblica,. Lon Idi quc :e salvc el senriJo dernóc¡¡rico li¡nrl¿me;hl. rJnx
rrr.rnra ab\úluta ,cn \cltido Lt¿irico) y un Efado torxt ano (en 5entrdu
dcruJl) son rcFob¡blc{ Lo\ pucbtos m¡duros son tos que pueden rene,.
ur) rdgrmen derrocrarico: ) L.t rdgimen denroc¡¿irir o hrie á,¿urur r lu"
nrdividuos y a los grupos en ru vida de responsabilidad potíricas.

t1 Pdr.
úlcnis,¡.16,cit¿"do ¡ L¡tn XIII en l¿ ¿ncictr.a rmmortale Dei,,r
O¡rf q,¿d.r'¿.,rdl.\. 221.
" H,\EkrN. ¿ r III IJ1
Po.nr ta ,c,-^ t \t Ot.. rt¿4d.\ n¡4\ai¡\. ))\
' Coudirnt ¿t | 14
'pts,
DL LA F-TI.^ POLITCA 637

. Ertuilíbtio rle podercs "Las modalid¿des conc¡et¿s Por las que Ia


comunid¿d políticá organiz:r su cstrüctura fuDd¡me¡tal y elequilibrio de
los po.ieres públi.os. pueden scr diferentes, scgún el ge¡rio de cada
nu.Élú y l¡ n,d hd Je Ju hr«oria. Perodchcn Itnder srer,prc I lormar
.r, ripu ,le lrombre , ul¡o. p.rcrlir o y benevolo rcspeLro a lo' Jcmá'. pJra
el frolr.ho de todJ ln tamrlra humarl¡"".
Desde Montesquieü se ha impueslo Ia división liparrita dcl Poder e¡
lc¡,la'i\o. ereculrtu ! tudrcr l D( hecho la drvi'ron dei podcr e' fo_
.rnl. ¿e'er¡tc Ln lo. rearmencs.le locriri(os \e rr
'
to el porler
'e.Lr\! Prrldmeri-
legislativo, al gobierno cl ejecuiivo (iunro con el derccho de
prcsent¡r los proyectos de ley, al n¡ellos cuando Do son gobicrnos Pu-
r.rmentc deco|a¡ivos)r cl poder judicial .rdminisl¡¡ l.t jusricia ¡rdcPen-
dienlemcnle del parlamcflto y del gobilrmo, Pero coDfornre .l las lcves
dictrdus por ésios. En el poder judicirl se incluye neces¡ri¡mcDle el
poder coolciiivo, clcual reqriere. pal1l sereticnz, clpodet Policírso. qut
cstii, sin cmb¿¡so. baio l¡rs ó'denes dcl podcr cjcculivo. El podcr Poli-
cí¿co vcla por Ia Paz inlemn y obra conlra ¡os e¡re¡nigos iffenro§ dcl
or(leni cl poder nrilitar csr¡i enc¿rrgado principal,nc,¡tc de Ir delen§.t de
los dcrechos sobcranos del Estado.
. Mot¿t ¿? rohofid t?! | rú|,¿itos. La núr 1 cristiaDa h sisie-
nrrU/:rüu fon prrli(ul:rr Inlc¡is lus enlcrk^ y dch(r(' JIi(oi quc hrI rlc
rlir lx \r1., ilc l"' g.rlt'manrc. y i.l. lt^ suhJrro' (n r(hc¡,in (,rt Jl
h'n,nn!,, rtrr,rdxdtrh.dirnci:r "
El (¡?tú¡o ¿c I.t dt¡¡»'nl¡¿l adquicrc lcgil;¡l]id¡d élictr si oun]plc la§
siguientes condicioncsi crando se ejercc derrlro de los hnite§ del ordcn
nrolal; cn vistas r procumr €l bie¡ común, co¡rcebido diDÍnricamcnle;
.(rún el ú¡rl(n tun,lco lú!'ilirn¡mer,le csr¡rbl(cido,r p,r L'slrtrlc(cr. {l
ctcrrr i,, lc¡rri¡rio de l rurorrdnd c¡trft'po,r(lc l crirrnJi! rrrorxl J. lJ
,.1r,1.,.,, e. eDIon(cs (u do l('s citrdddrn.,. úntin oblr!rd,* (n
l".
conciencia .t obedecel
Cu¡ndo el ejercicio de la au¡or ad no tiene lcgiliflidad ética los
súbditos lienen el derccho y el d€bcr de /-¡'r¡r/en.(¡ "Cuardo la aulori-
,r:,i] nub,,cr, rel'J':,nJo \u conrPek'n(ra. oprrrrre r Iu. crudadartu'. i'ros
nu d;hcn rehur l:b.\rscnLrn\ obicriv \ del bier¡ . umtrD: le' e" ltr iru. crn
emba€o. det¡nder sus derechos y los de sus conciudada¡os contra el

s' Ihítl..n 71:Cl. A. BóNDoLn- S,r¡¿¿¡¿J


¿,/i/n or: Nücvo Diccion¡rio de Teo_
lo$J Vo JL (Nl¡dnd, laa2t l7l8 ¡728
' (,. \l,r^,/v,/ar' tr¿t.tux¿' Ntr"YoDtrtron¿riod" leolol'¡\for., VJ
.lrid, 1992) 609 628 Vcr la erposición que had el C.tccismo de Ia Iglc§ia Calólicr'
nn. 22:1,1 2243, sobrc tos dcb.res dc la aulorid¡<les y de los ciudadúos
'!
638

abuso de.tál axrorida¡I, gDardando tos tímiies que


señata la ley n{¡r¡r¡t
y evangélica"tu.
"El Concilio Varicano II ha vuetto a reco.dar ta doctrina de tr rc
d"r poire¡. do(rnná que hib,a pa,"Jo ,, _;a;,,.i,,
:i:l:1...j1 i !:.,,b,:".
prano durante tos úlrimo\ sigtosi se ta con\iderabr Inctu.o
:l:11:*'i,I * r¡ ruzP¡ba prris,o\a ^' Los moral,.ra\ con L¡nr-cir,rr
prorona*, (,
ocrecno d r¡ reJslcncrá hasLá lás concreciones de ja tegrrrma
rcvoir iórr
), er rúnr(idio . Pero cobre cstos rspe.to" ¿. l"¡,;"r*,"1 ,"rri,i",,"
br crD¡ruto dcdrcddo a ta morat de ta violenci¿

d) Exigencias éticas de Ia párticipación polític¡ór

La polílica debe
;;;d:;1á:1",fi #::§j1, jl.
ser obra de rodos. Las exi
,i"ip*i¿;;;r;;;ñ.ffi
Dcrecho y deber de lan¡cipar. ..Es
una eyisenLü cr ett, ¿,? t^ ¡tin-
uddd humand-que lo\ hombres puedan con pteno de*.r,"
vroa pubt¡ a -. ¡.t (-oncitio recuerda et dere(ho y et
¿¿,."".
deber de ror¡r". ^i,,
, - Ampjrrxd de e.a prnrcipzcrdn: en et esr¿btecimrenro de to5 Iun-
o¿menro. JUndr.o, de la com¡rnidad pot,tn a. en
et gúbremo ¡te ¡r cosn

6' Tuc.r,
/. ... 686.
6?
... [I. 176-ta0
a R. SwzL,.Denacrac¡a
AaERrNc,
\ or¿. ,¡ont (Pltc.totu, tg62)i SEúNAS So.aler
r D.?,o.t" id \ t^po .at tt¿¿¿ rvJilnd tco8,
i ,E. "*.,1:".*4nd", I Rú ;;l
rP-¿de,bom. loóor. r. Pnn ¡u ta pa,,:do,
::"ia,1Í!'- ! pn,t;;: \\,1).
ll1 ll,,!l:l .o,t ú,otro
.
FtL¿,.d?",¿n¡.a. e",¿." ¡¡"_,".. io,rs,/,,
¡a.tnfftonah-¿iot d? a opt¿ t.rud,o. F. ^
terls.
I .o. 51 ro
r¡o 8. I
A. Lt 6^?r., D¡ho¿a, tu ún¿,,i,,",-i.n. in _.
208.
:11i11, ':-8l LI/ H. B sro lotu\. ¿¿ ,u,i.p ¡¿a ,a:,ia\d t;ut,,
Aj
r. tn
to¡a. 1978,, ¡. Son r o l, d.a;,, o,
,,,¡,¿ Mi,.n,AL,..rj _,' l08 r, 588-.¡(,?., M G N, ú Rt L,to, "_",, "LiJr,l
L toD,a t,,, i,,
¡ 77 r¡o84, l)¡4-6,/. E DLw La t,,, ,:o,-n,* ¡.1
1111-, li:,:1."1-! 6{, o85) r2r: M r,Nc.\. ¡u,¿, ¿;¿.,,,i¿ (JmDo_
ot 2t7: J. v Covrr/ F
elNq \ed.). r-,,., Ji u.i.-
Io,r8r \,.ñu\. ¿ni¿.o,¡¡¡¡r."^" ¿".,,,,.,,, $u"it,,,
"
4d laa2¡ ljr8-lr¡/. J.v Sr.Ñ. fathot¡ ¡stlt ¿d nrc roth;¡r D._"--,.
lo0 En ctcate.ismo de ta tel.." rra¡, , _ rqii-

". P:, n, ú -r:, 1 ., Oh.. Btond.r ñ¿n:qps, 2t)


úa dtun ct s?cs. n 1t.
u mca PorlcA 639

públicá, en la determinación de los campos de acció¡ y de los límites de


las difercrtes instjtuciones y en la eleccióÍ de los gobemantes66.
Efectividad jurídica: "Es pefectamente conforme con Ia na-
- humana que se constituyán esúucturas polílico-juídicas que
turaleza
ofrezcan a todos los ciudadanos, sin discriminación alguna y con perfec-
ción creciente, posibilidades efectivas de tomáI páre Iibre y a«ivamen-
1e... Para que Ia cooperación ciudadana responsable pueda lograr resol-
lados felices en el curso diano de la vida pública, es necesano un orden
juídico positivo que establezca Ia adecuada división de l¡s tunciones
institucionales de la autoridad política, así como también lá protección
eficaz e independiente de los derechos""'.

€) El Estado: estrurfura y l¡ml¡dadó¡

¿Qué idea debe hacexe un cristiano del Eslado? ¿Es para éI la etapa
final de la eyolución de la hummidad, lal como lo pensaba Hegel, o
simplemefte un "servidoi' o "diáco¡o", lal como pensaba Pablo?
Nos interesa señalar aquí Ia fisonomía del Esrado, tratando de ver
también sus competendas, §us límites y sü finalidad dento de una vi-
\ron rntegral del hombre y de la huma dád@.

6 Oúog*ina adflk6- n- 41
§ Gaudtun ?t Spes.
63 ^.15 et lEta¡ (P ís,1953)i w.
J. MetrAN, ¿ ¡r,¡¿¿ S.HoELGN, ¡¿.¡¡,d
B¿deuhng des Staates imüchte.ler Katholisth¿" Moraih¿¿l,gp @om, 1954): H.
A. RoMNN, ,l Erado ¿¡ ¿l ¿ensan¡.n|o ..nólito lMadrid. 1956): A. F. Uu, ¡ol
ncn hrd Ct.q-¿n det Subsdt¿t dh Pnn:ips (HridelbeB. fo56l. O ro\ \rr
Brñ"-H S{, 18, Z,r atulsnúh. St@tskhc \FÉtbuüBr , lo)" )' a De\.+.
ta ltotoÍ¿ dd E§¿¿a ctistiM ¿n Espaía (M:¿<t'id, t96t\; L L A¡aNGIREN, ,ri.¿
sacjol ! función or¿l dz! Es¡tulo G¡ r¡guúa, 1962): vs6, Cntad¡bo e Stata ¿i
lran¡¿ atta nordt. l't\tí¡.1965): s. tffR, ¿¿ Sr¿r¿ rd,7/¿ coitedporan¿o (F.oma,
1966)i J. IUIN'P. HúLER J. ELL, Los c¡¡st¡aúos f el Esrado (Bilbáo, 1969)i D.
zbLó, La ¡¿oia conmis¡a d¿ a ¿stinzion¿ d.llo Stato (8.¡i. t974)-. E . D¡^2, Esrado
¡1e Derccha t socieiad detu tn .d (Maúid. I95ó)r M- c*ci,{ Ptuyo, ¿¿r ,/¿¡r
finnd.iona dd Estada .dt¿htpor¿neo ¡-Nla&1d,l9r?i w. MoLNsn, .t,¿"r lrd
¡rr¡¿l: Sdmen de¡ Zei¡ 195 ( 1977) 825'816: o. vóN NEL BR]]lMc. D¿r Sr¿¿, ,rd
d¡e Gruk.leerte: §tioDen der iI 195 0977) 378-38q M. Dú, Eel¡se et Etat
r¿lrn v¿,r¿r.¡¡: Ephemerids Thúlogic¿e t¡ldiens 54 (1978) i45 i60i VsDs,
Sobr¿ ¿l Estado: Sisfema, n- 38-39 (1980): l. RG'o, ¿¿ lr¿pía éti.a ¿el E$a.lo is¡o
d5de Ptattu a Ravts (v!¡.ñi¿, t 2). l- Prc. Teo¡í¿s sobre el"Weliqe S¡a¡¿':
§htena. n.70 (1986) 41 61: G.Mññ- Est¿.lo t.¡u.la.la¡o: Nuevo Diccio¡{io de
Teolosia Moral rM¿dnd- 1992t 6$ 624.
" tl. Ahcmr. ¿.... t85 2ó2. Ver una buem siniesic moral coo e el EsEdo
ü F. Co€o. Er¿d¿: Dieimdio eociclopedico de aeobgía mo¡al Olad.id, 197:l)
n{0

1) Concepc¡onei ) re(lt¡:adones futsas tt¿t Est¿do


Estodo »1¡t¡fiLa.lo. parr et crisriano, et Estado no es una reatidad
míric¡, divina o sobrenarurat. Et crisriánismo desmitifica, desrcratiza. ct
l:.rdJú. L.re., una rc¡lidad pt(namenrc sec tdr o rempr,¡t. \pcvrü.
lar lo,n¡r.a,rales.n que sc ha manire\radu et r.ri,lo ¡enri,_, de h
sociedad cristiana, el cristianismo reconoce hoy la completa p.ofanidad
del Estado y de la política.
F\td,],, tolal;tü\,, At L¡istra o Ie repugnr tu,J(J d< un Lsri(to
lor¡lrr,I io tl E.tado ni, es Dn ,in e¡r s, ,nr\rno: et poJ(r r:,rnpoJo e. un
finpar¿ él mismo. Par¡ un crisriano, et Estado td¿litario: es rin atentatto
conlra Dios;.cs uD ilolo y unr btasfcmiai es ün rtenr¿do contrn ta per-
'orh: cl lornbrc --{n , u nro Jrcr¡onx rr¡\(tr nde t:r .t ¡ruliJxJ potilc¡
\ cl ¡i.rJdo. (, un ícnrrJo cuntr¡ tas rnstrtucrones ,Drcrnredit.". irmiti .
curtunrd,rles urvilcs.

,, Et tu rorúrp'tta(iún ¡rbcr.rt..t E:hrlo !.rft¡ i7r I:h


-.l:-n..hl.,ttl\t,l
lihcnl,l(. dc lú: irrir!¡du,,s. pc,¡, qu¿ j¡b(
(dc Jc| rc rrt .¡. y .tJe qu(
(c lr¡rx:' Trnc,r¡,s quc dc.'r qrrc se t¡xtJ de tr¡cr¡¡¡la i.lorniu.
'rnlivitlu,\
l(\ y qu.: \e trJl]. nu (lc r,{!,\s krs in(trvntuor.:¡n,, Jc t,,\ rn.tiriJua,
burguescs. Lr libeí d dct tibcratisnro es r.a tibcrrad ¡ncranrentc..tor,
m I". Lr libc ad lihcrut cs un{ Iihcnnd fornat parr rr:dos, pero un..pri_
vil(ri,i prrx urxh p,,cu,. Ir hur!uc\rr cnpilJtrsLr I I ErrnLt(,,k.t t¡isr'c/-
t.urs c- ur F(rr(,u in(t'r(!z y. ttl\Fr¡. H p(orrnricnto ,nJrvi,tUrtrsri ,t.t
\r¡n' xlx lIr¡r1,, (l lir Jrl E\r J¡'.rtord,rnJ ,kti(,,y¿:h.c\ct ,i\tlmenl,.
r |r :alrx¡u,,rJix ,te t trl,ca,rt(tc pc,sont,\ y pr,¡;e(tr,r(,
- E:nklt)
¡Í\cr.r.
¿¿l hic c,txt¡. locútt. Et EslrÍto licnc quc cunrplir con
rxrcJ. Jc p(,tfrrt¡.oc,xjy e(o,ro¡nrc¡ R.fl,c.re E.txdo,i( Bren-
r.srxr fu(dc Lo vc rr,i cn et .i\tado-pn,vrrten( i .. qrtr.rcrmrn por
.unlrnrxr xl rn.ii! iJuú. r,{rsrde,jrxli,to .umo un niño y in¡niput.rn.l,,
su
lrl,c a,l. Fl E,rrd,, c. .t proororor (tet bjcneyrr y ct pronioror <tc tr
t u rurJ: I'cro u \J de ürc{r r¡n ripo de honrbre -.on,r,i,,i¡¡¡..

- E\t,Ll,, tt t ,tl,itk,,. No cabc dudi,ruc l,I rumcnrrdú Lr d¡mcn.


\róri de la r¡c icd cI lodos lús nrvetcs hu,nxno\ de h¡,y [.rmh en en (J
rlunJo poiii(o. PoJcnro. J..rr qr¡e x Ir pnr,tcn.ra potirrc.r r.rnro vir.
rur rrr.trrcnslrrd. ie esli rcernptr¿Jndo tx crenci y tx
lnrmx Je rcilrzr(iDf polni(¡
Lo que se busca hoy dín es la funcionatidad y, consiguientemenre,
.la eticacla- Esto se logra medi¡nre la racionatiza¿ión de ia potítica, ei
decir. medinDle su tccrificación.
Estn tecnificacjó¡ se advierre en muchos aspectos. A ta disminucióñ
de la n¡porrbcia del ParlanrcDro corespoÍ¡te un aumento en tn tecno-
LA Éfl',\ rcLTICA &1I

burocracia; a la imporancia de la "ley" abstracta, producto de los juris


lxs, sucede la impóÍ¡¡cia del "plan' ¡écnicoeconómico. el¡borado por
Jonrsronc\ +DeCrah/aJ¡( de erudio v equrpos,le rrabalo: n ld' "r¡1eo
1o... .oltrio¡rde h"l dra la real Ptoblemártr'asocro-econom(a. A J(
id¿ologías 1as sust,tuyen 1os conflicros de intcreses-
La polílicr se hace más sobria y r¿'cnica. La brillantez, las gÍandes
invocaciones a la esencia 'metafísica" de lá nación v a la grrndeza
*nirir--l de e.lJ. ,leran de \únslrlurr el (onlenrdo l,'lriLo prru -'r 'J=
,Iurdo. oor un r¡rbnro Di,(ilivo que. (umparudo (ún lxs errn,l+ e'pe_
culrciones iDlclectuales y I¡s impre§ionánles sínlcsis ideológico históri-
c s. resulta "secunilario" y "ab rrido". L¡ polít¡ca tiende a convcrirse
cn adünristracxj¡r. Por eso, sc ha podido cscribir quc l¡ noia caracterÍs-
ric¡ (le las democr¡cirs occidcntnles eslabilizndas, es que se encucntrao
.n unr tasc "pospolílica".

2) l:1 Estu¿o ¿! Dtr«lto: ?listn.iu tit¡..t it Pr?tt¡¡t¿ibl!


1.il r.n,iiiur Jr¡rt,l(l llr.tJo Pu¡ (l Dcr((ho (' urr.r c^rEcrrJi.r (rr(?
rurrrrsinJibjc. ,rQuc 'isn,,,ctr h e\Prcs'on E\r lo tle D(rc(húl
L c\pr,."i,in I:nt¡,1,,rlü Dcrcello" lilc urrliTldx f'ur prinrerr vc7 nor
l(,'l'hcI) V,rn Vuhl cn(l Ii,, I8ll.Conlnl (\r'r.:nrr. (l ttul'n xlcnrtin
l,* Jr¡rfíliüi* quc lü ,lt,Plxr,'rr l'oslcriurmcnlc. qrrc¡i¡n tlclinir urr Lrfr
¡oxrcro Jc ll'rr,1,,. r(itllx,tu dc:u srrm':r,nr .l Dcrc(ho. ) quc Jcbír
(.r) rr LUn(ur\rt
F^J(r unr ..¡ i.' Jc rrolJ' ,, clc¡rrcnlr's lund.trtrcr,I]lcs. :rrr
¡., ,r J rulérrriJrurcnlc un E'r do dc Dtrccho
Es(rs nolas o exigencias fundanrent¡rl€s expüestas ¡nuy esque-

L EI inrperio de I¡ lcy. .oosider¿ndo a ési¿ como exprcsión de la


voluntad general. L.rs exigcncins eo qüc sc concrct¿ csle pnnc¡pro sonl
a) t-! ley ha de ser claborada por un órgano popular rcpresent tivo,
librcnrcrte escogido por los ciud lanos
b) L¡ ley o conjünlo de normas de c¿.ácter general se sub{lividc
ierhrquicame e. entrc leyes r¡ñd¿menlales lue cofltponcn la Consti-
iución y leyes ordinarias, debiendo éslns estrr subordnudas anquéLlas'
c) Todas las disposicio,cs y actuaciones de la Adninistración v
los p¡rticulffes fian de someterse a la ley.

r¡ Recogemos a conliúua.ión el contenido de u¡ edíorial de Mundo Social 17


( I 9? I ) ó ver tmbién E. Dit . Eaor¡o .k D¿¡..ho \ Sd¡e/dd d¿no.r.lil
(.Maúil
19?5i).
el2

d) Para asesurar la conexión y subordinación jerárquica de las


leyes, se precisa un conrrol consrilucional de las mismas.

2. La separación de poderes. Sisnifica que cada una dc las tres


fuDcio es en que se divide la labor del Estado, corespon¡len a rres
poder€s independie¡tes cnrre sí: el pode. legistarivo. el ejeculivo y el
iudici.)l.I¡ separación de poderes va más altá dc una merá e,p"ciaiiza-
ción de funcioDes. Significa que cad¿ poder posce pam sí un imbito de
compclc¡rcia irrenünciable y exclusivo. al mismo rielnpo Ii itado. Con
ral ,eparrriur .e prcrcnde ev ar ct -¡huso de prJer" i. ¡c..r. h excc-
srvd Jún(enrracion Llc todere\ cn uno de Io¡,{g,,nos Jet F.r¡do L:
cieío qüe en ruesrros días, debido r ta existcnci, del Esrado nroderno
intervencionist . sc produce una inevitable prnnacír delpoder ejecutivo,
pero lo $e¡cial cs que no llegará a ser nunca itnnitada o absoluta. por
la existcncia de 1os orros podcrcs independicntcs.
3. Legalid.rd de l Adminisrración. Sc coocrcm cstc principio en In
L.\i!cn(rI JL quc Ioda acrur(i,nr det pod(r ejecurrvo rlchei;i e.r:ir sunrc-
riJr x l¡ l(). 1,,.u l (onrlule t! do{ conse(u(oc'rs ftrn,trtrrd xte,: ct
prin(ipro de runrn'l ) Jc lI rc\ponsnb'tid¡(t ,le ln nJnr¡ni\rr., ón. Con
lnls prlr(i¡ius sc Lo',,iguc dc un:r pr ( gxr¡nri/rr h iurldnr
dc kx particulares: por olra, evitar la arbitr¿riedad de"c¡.u¡iJrJ
ta actuaaión ad-

4. Di reconocinricnro dc k,s dcrcchos y libert¿rdes firndamen¡ates


con sü ndccurdn prorccción y B{ran!ír jurídico-torm¡t y realizaciúr
wrtcrial. Quiere eslo decir qüe no sólo se han de proclamir ..solemnc-
nrerr( h,s Jerechr( tund¡mentalcs. si o qr( \u cJcrci(iu hr de en.rr
redulrJ,) (onv.nrcnlcnrenre rsi r,'rno etrcaznrcnre pioregirto. L.r prorcr-
ción dc lor derechos cxigirá en uDas ocasiooes un ..no haceC,pol partc
del podcr ejecutivo y cll oras ¡r crcación de las condiciones neces;ri¡s
pnra quc su uso y disf¡lte alcnn cn a la roulidad de tos.iu.ladános

Pl¡nre¡do a'r. creenrús quc ct concüpt,! de Esr.rJu de Derethu c\


rn.F ur 'de,iJ Urn qur und reatrdad. No huy. en riccro. ningril
Erado que posea plenamenrc lodas y ca¡ta um de las notos descri&N
¡quí csquemáricamenre. Pero la catiticación de un Estado concreto y
dcLermiDado coDo Esrado dc Derecho' scrá ranto rn¿is correcta o inco-
nccla en tanlo sc acerque o se ale.je de los elemenros quc Io detemnun

3) Las tlrcds .l¿l Estu.ro


L¿ étjca crisiiana ha estudiado detenidamcnre hs tareas que incum
ben al Estado. Recordamos dos asp€ctos:
D! LA ETICA POL¡T¡C} 64]

Elhecho de Iacreciente intervencióndel Estado. "A consecuenciá


de la- comp{ejid¿d de nuestr¿ época, los poderes público§ se ven obliga
tlos a inteivenir con más frecüencia en materia social, económica v cul
rL,l. prrJ cre¿r (unJrcrones rn¿r tavo¡abtcs que a) ude¡ a lo' (iuLladJn"{
y r lo' prupo' cn l¡ bu\quedx I'b'e del bieD rompleto del honrbre '
Regta pala ñcdir lajusta inrcrvenc¡ón dclE§ado: elPrnrcipio de

.1 INTERROGANTES ACI'UALES DE LA tsTIC¡ POL¡TICA


EN'PERSPECTIVA CRITIC "

l-x incidencia dc ln ética cristiam en la t€¡lidad polític puede cae


cer dc Varios r¡odos. Hemos señal¿do. en el aparlado arterior. la lbnna
de ¿bordar los prohlcm¿rs mor¡lcs de h polílica cuando el ethos crisliano
se sitún en "perspectiva inlegr¿dora". Esla persPcliva corresponde a la
li¡nci¡tn /,orir¡llr/¿¡ de h ética: "nrlr¿lizai' l¡ rerlidad le¡liendo e¡r cuen'
tn I.Ls posibilidades hislóricas del d¿rk, concrelo.
Pero cl cthos cristirno tiene, ¡ emás y sobre lodo. un.t funcion lidad
,tt,tt,¿. rh (ue \¡ (lrxlir'¡i\'¡rncntc unid l funcrun lid,l ,rri.¿
Ur,rI'I¡ y crriti '"n tlos lurr\'iu ts escn(i¡lcs,tc r(xlo crho{ } Jc rrroJu
Drrri ul.rr .lcl cthos c¡ istüno. C'rrndo s,r p,¡nu Pn jur'go lI luetzr utópirr
,i( l iri..r ¡oJcnroi h¡hlrr du prrsPccrrvl (trr,cx Ln cl ,.:nfo'luc dc k^
problemas mordes.
El contenido de la ética polfica dcbicra ser ¡'eplarlcado desde h§
l,r.'upucno: Jc lx perspc(liva (rilico_ut,,Pi(r d.l crr\rr ninno. Scñrla_
i,'"',ilsunn' p,,,rui ti',c".,tu. pre(isan un ¡eorrenr¡(irrr rerrrar('I

¡) Pod€r y érica (kratos Y ethos)

EI problema decisivo de la moral polírica es cl de l^ justifk:|ción


ttica ¿?t pdeL "Si conccdemos que la esencia dc lo políiico es el
1t c¿utli!ñ et sp¿!, n. 15.
rr ci: J. L. cúiáRREz, Slrri¿i¿,i¿¿¿: ConccPlos lundamc talcs en la Doctrin.
Social dc la t8lesin, IV ( Nl¿¿.¡d, l97 l ) 299 ]lI). Cf B. v M^^^ó, 5ri,si¡'/¡¿'ilr¿l )
t t rt ¿l t ir' P,\\pn h\ ¿ l, h,nl.¿ ru,1¿l r-onctllun', n I 18 8 I l{/8' 4 ¡Ó ¡01: O.
\rl .Br,.'u, r,r! \/t. p J., ü.elh.h¿l- Suhd tt¿t u n \rtrJut't l¡\
"o\
btrr!, r99o)r E. NASARR.. ¿l pritcip¡o ¿c elbs¡.liariellad: rx ri8¿,.k: VÁRrós. So
l úidad y susidia.i«lad ¿n la socied¡d espmola lMadnd. 1993) I I 22: M SPrÉ(rrl
Dts Subsittidriúr'prin ¡p A¡thropuloq¡rth.l:oru $et.rke¿ nd Polit¡s¿t¿ K. tt
4!¿,,¿xr Neue Oidnung .18 (i994) 22_:14.
61,1

poder. la problematicidad de la relación enr.e la política y la étic¿ sc


.or,rrefle en e\u offa: ia problematrcid¡d de ta ret¿cion enue r,,¿/or v

Ls cono(ido el punro de vrta. aun no superado, de M. weber en (t


¿narr.r, oe la leg rm¡c'un soc¡ologn¿ del pode|et cafism¿. td ley. r.,
raorcron,. Tambren ec I ono( rda la pcrspecrrva m¿^i.tr que
no encuen-
tra otra legitimación que la proveniente de ta fo¡ma dercrminad¿ dc
producción económica- La érica ha rmtado de legir¡m¿r el +¡"idlo dct
poder oor l¿ con,ecucion del b¡en.omun. pero ron respecro ar or.¡gr'l
del poder ld errca. de,puec de habeN trberado dc erpL.acione. mirtr.ri
y sacr¡lizantes, todavía no ha eocontrado una patabr¿ definitiva.
La pregunta decisjva de lá ética potíric¿ sigue sin contestación: tA
eriúencia y e1s¿ntido ¡lelpr¿¡¿r_ "Conocemos la antigua pregunra de los
filósolos: '¿por qué ¡¿y Ser, por qüé hay Ser en vei ¿e-"oáal' ral es,
acaso, el uuevo problemaj habría que ¡omar ta decisión de conveÍirto,
si bien no en nuestro vérigo, por lo menos en. nuestra oblisación: .l por
qué existe el Poder. por qué ei Poder en vez de orra cosa1..,?a. -
La ótica necesita hacer un ¡¡álisis preciso sobre et contenidoreal det
poder. El poder político. ¿es fue¡za, es domiDio, es autorid4d?,
¿es todo
a la vez? Si el poder surge (esrá surgiendo conrinuamente) de ta der-
¡gr¿7d¿d ¿puede conducir a la justicia? Sin caer en fácites soluciones
anarquistas. es preciso, sir embdeo, desraca. et cafácter amhietro .lel
- uardr de !critrcar-o
poder ) conr;decl ta r¿n conocrd¡ ¿iirmicron Jc
Lord Actoni el poder corompej el poder absotuto corompe absolura-

La ética crisriúa no püede aceptar sin más et poder político como


un dáro. corno un punro de panida TÉne que núra't¡ pn .u mi5mr
rci/.ignitrcarrra. C llca de l¡ que no s¡rtdr¡ düeotado, srno de*
mitificado y descubierto en sus malévotas y recóndiras i¡tencionesrd.
z ARANC¡]M. , .. 133
1r B.
lJEw LE!y, r, ,¿r¿¿,-i..o" totro htun¿,o (Ct¿cas. t91a) B.
" R CúaoNr. E/ ¡¡r¿, (^4¡drid. toTlj.l
" \o .noo jTpdr.. Du lu\ se'c\ humrno\ qu. aootrlen d. td pc.ron ü.t
noJe P1. nu.h,.,mo m b ,embh quc .qúe us m; Drece (t poda h,;o.o ,rdo,
.u.rdf.a'lo ) de.encmádo. el PodFr .nn mayusutá. que por rodd. p¿r(. nu,
a.ech¿ I que arasúa a l marioneras que * prisenre mmo sus dereni;dores Sin
'rbdgñ. . por p",ñ e.pe.eJd.É qu( s l¿ plrrdJ. nu dchcño. ceJe. a ni,o en
dlfin'r,va ld.c r¡. d" ié nrsrsüb'trd¡J dFt P.der Dcbemo. hJ.ér (urro cr" a
nncsirc alcance po¡ su dismnificaciód, y. en.uanro irtel€ctu¿les. et ma a nuoslro
alcance par¿ resistirle es el aálisis. la círica, l¿ .on ie¡cia dc que no es ¡ingún
myste¡ium, snro aparato. ¡unque desh¡muizado. metuente hmúo (J. L.-L,
ArAf6LRrr, ;1¡ r¿rúrrt¡¡¿.tud ./.1 Po.!.r?: EL pr''Is. t8 de enero de 1977_ p. 9).
rcLmcA 645

En esta cl¿ve desmilificador¿ del poder político pueden ser leídas


Ias referencias que hace Juan Pablo n en h encíclica "Centesimus a¡-
nus" (n. 25) a la "condición pecaminos¡" de la potítica. EI poder potí-
tico que no conoce süs límiles tiende al 'tndiosamiento" y, consigxien-
temente, a la máxima extrapolación que consiste en situarse más allá del
bien y del mal. "Cuando Ios hombres se creen en posesión del secreto
de una organización social perfecra que hag¿ imposible el mal, piensán
también que pueden usar todos los medios, incluso la violencia o la
mentira, para reaLizarla. La polílica se convierte entonces er una 'reli_
gión secular', que üee ilusoriamente que puede construir el paraíso en
este mundo" (CA, 35).

b) La d€mocratización y la ütopía de la igualdád

El estado democrático es, si¡ duda, una maduracitu del espíilu


humano. Pero la democratización de la existencia polílica ha sido peñ
sada y rcalizada preferentemente desde la utopía de Ia libeúad- El "li'
beralbmo ha 5ido el t¡mbienre de lá democracra.
La democratización liberal se ha reducido muchas
realidad "fom¿l", sin conte¡ido concreto. De ahí que deba ser objeto
de un esfuerzo constante de lucidez humma. "l-á democracia. como
Iorma insritucionalizada de moralización del Estado, no es nada fácil
de hacer dlrar. Requierc u.Í dispositivo técnicojüúd;co del que se ocupó
Montesqüieu y qüe ha de mantenerse siempre a punto. Requiere el
rcconocimiento legal de unas libefades (de prensa y en generai, de
expresiór, de asociació¡, etc.). Requiere la existencia de unas minoías
que den conciencia, ilusiración y noción política a las masas. Requiere,
en fin. la voluntad moral de la denocracia- Esta volunlad se debilita
y aún extingue con facilrdad, porque al hombre le ca¡sa la pesada
y con frecuencia, hace entrega de ella a
carga de 1á libef¿d potítica,
u jefe, a cámbio del orden y la seguridad, pea poder dedicarse
lunquilamenie a sus diveñiones o a sus negocios, a Ia vida pdvada

A la vista de las tentaciones de la democr¿tizaciór libe¡al de Ia


existencia política, la ética presentá la ütopía de la ¡gunldrl¿ como el
ámbito rnás adecuado para peÍsár y realizar la democracia. De este
nodo la "democracia social" puede ser Iá aliemativa válida a la "demo-

ri J. L. L. ARANcmñ, E .¿ I P,&,.¿ (M¡dnd, l9ó8:) 161.


646

La é1ica polític¿ ha de pos.nl^¡ hoy úa profind¡.ac¡ón y \na e\¡en'


sión del ideal democráiico '':

l) Superúción de to.las las fomds d¿ "rotal¡tatis¡ o'


La "extensión" del ideal democrático indica la necesidad de que el
sistema político básicameme demciirico alcance a las sociedades que
todavía viven en reeímcnes n¡rcados por divemas formas de toralira-

regínrc¡es de matriz m¿rxisra y de confesión comunista;


-
er¿do§ autoritarios controlados por oligarquías económic¿§
mediante la intenención drrecla de Ias fuerzas am¿dás:
siste¡nas de ciefa lomalidad democ¡rítica pero realmente domi
nados por un paÍido -'único'- o "prevalente":
autocracias de carácter todavía feudal o dc vinculación a un clan.

Estas y otras fomas polílicas, por desgr¿ci¿ todnví¿ bnstante exten-


didas en el mundo actual. no poseen el nivcl dcmocráti.o hoy en dia
convencionallnente admiiido: a) no realizan Ia dcmocr¡cia políiica; b) y
tampoco consiguen elevar süficie¡Iemenrc la democracia socio econó-

La eDcíclica "Cent€simus annus" h, rc¡lizado una crítica radical al


totalitarismo en su forma marxislá leninista- En su sentido protundo esta
crítica es váIida para todas las resranrcs fomas de tot¿liruismo. "El
totalitarismo, en la forma marxista, conside.a qúe ¿lgunos honlbres, eo
vi¡tud de un conocjmiento más proñ,ndo de lás leyes de desanollo de
la sociedad. por una parlicular situación dc clase o po¡ contacto con las
fuentes más profundas de la conciencia colectiva, están exentos dei eíor
y pueden, por tanto, arrogarse el ejercicio de un poder absoluto. A esto
hay que añadir qüe el loráliransmo nacc de Ia nega.ión de la verdad en
sentido objetivo. Si no existe una verdad lrascendcnte, con.uya obe-
diencia el hombre conquista su plena identidird, tmpoco existe ningún
pi¡cipio segwo que g¿raniice relacio¡es jüst¡s cntre los hombres: los
13
Ver nor¡ 63 de ese capítulo Añ¡dn: R CtraREú, E ¡ torno a ta ¡coríd ¿¿
la d¿úoctocíd l.Madnd,l99O)-, D. flrLD. Motl¿los ¿k t!."'a¿u.¿ (Madrid. L99l)i F.
R.-rruFio, ¡ar l¿z¿.,¿.¿r (Búce¡ona. l99l): R. C¡¡tr. D¿,",.¡¿:¿i E BERrr G.
C\IDANrNr, Dizio¡dio delle ide pDliriche (Roma, I99ll 15:l-167: C SARroRi, ¿d
ddaÜd.La despu¿s 4¿¡ conlx,iyrl (Ir¿dnd, l99l): A. Co{rNa. ¿¡i.¿ ¿pl¡.a¡1a,
¿cna.rd.ia tddi.¿l ¡.N^.trid. 1993): v*os- E ¡t? tr ¿r¿,,¿.¡¿.¡i¡: Pafo.al Misione
h. ¡. 187 (1993), vcr, sob¡e todo- el lrliculo de J. t¡rs. ¡po¡t¿ció .tisridna d la
d¿nactac¡d. pp. 13-61.
LA ÚG PoL'TICA 647

intercses de clase, gupo o nación los cootraponen inevitáblemente unos


a otros. Si no se reconoce la verdad úascendente, triu¡fa la tuelza del
poder, y cada uno iiende a utilizar hasla el exaremo los medios de que
dispone pára imponer su propio inteÉs o Ia propia opiDión, sin respetar
Ios derechos de los demás. Entonces el hombre es rcspetado solamente
en la medida en que es posible instrumenlalizarto para que se afirme en
su egoísmo. La raíz del iolalitarismo modemo hay que verla, por tanto,
e¡ la negación de Ia digÍidad trascendente de la persona humana, ima-
gen visible de Dios invisible y, precisrmente por esto, sujeto natüral de
derechos que nadie puede violar: ni el individuo, el grupo. la clase
sociat, ni ta nasión o el Eslado. No pu€d€ hacerlo tampoco la mayola
de un cuerpo social, poniéndose en contra de la minoría, margináDdol
a, opimiéndola, explolá¡dola o incluso intentando destruüla (Cf.
León xI. enc. Liberias praestantissimun: Acta, VIII tRomae 18891
224-226\"1'g.

2\ Hacia la "deñoc¡acia in¡egrul


La "profundización" de la vida democrátic4 en aquellas sociedades
que Ia tienen al menos formalmenfe, ha de orientarse hacia la demoüa
tización integral mediante:
la mayor y mejor participación socio'económica- SiD democracia
- eco¡ómica es imposible que exista genuina democracia po1ítica.
En este sentido, la m¿íxima extensión dei nivel económico y la
añplitud social de las clases medias son gara¡tía e índice de la
demo€ratización auténlic¿.
la creación de mecanismos populares de paficipación y de con
trol en el juego del poder polílico y en la actuación de la admi-
nistración. Tiere mucho de verdad el eslog¡¡ de que hay que
"reiÍveniar Ia democmcia"; es necesario crear formas nuevas de
paricip¿ción social y pol''ricá.
eI rechazo del "peligro del fanatismo o tundámentalismo de
- quienes, en nombre de una ideología con pretensiones de cien-
tíñca o religiosa, creen que pueden imponer a los demás hom-
bres sü concepción de la verdad y del bien"8o-

La encíclica "Centesimus annus" ha lanzado un mens¿je de apoyo a


la demoüatización de Ia vida política, si bien ha suhayado también la

1' centesinus ann s- r- 44-


3o
Cent¿sinus a"nus, ¡ 4ó.
6,18

necesidad de una demoüacia qüe ro prescindade los ¡'valores". Merece


la pena leer lo. panafos qüe tomulan ese mensate:
"La lglesia apIeciael sistemade la demonracia, en Ia medida en que
asegua la participación de los ciudadanos en Ias opciones políticas y
garantiza a los gobemados la posibilidad de elegir y controlar a sus pro-
pios gobemantes, o bi€n lá de susúturrlos oportunámenre de maner¿ pa-
cílica (Pío )(II: AAS 37 u9451 10-20). Por esro nismo no puede favore-
cer la formación de grupos dirigentes resrri¡gidos que. po. intereses
pa iculares o por motivos ideológicos, usurpán el poder del Estado.
Una auténtica democracia es posible solámente en un Esrado de
deÉcho y sobre Ia base de una recta concepción de la persona human¿.
Requiere que se den las condiciones necesa as para la promoción de l¿s
personas concretas mediante la ütucaciór y la formación en los verda-
deros ideales. así como de la "subjerividad" de Ia sociedad medianre ta
creación de es§ucturas de paficipación y de co.responsabilidad. Hoy se
liende a afirmar que el agnosticismo y el relativismo escéptico son la
filosofía y la actitud fundtunental conespondien¡es a las formas poüticas
democráticas, y que cuantos están convencidos de conocer la verdad y
se adhieren a ella con flrnezá no son fiables desde el punro de visra
democrático, al no aceptar que la v€rd¿d sea determinada por ]a mayorla
o que sea variable según los diversos equilibrios políticos. A esie pro-
pósito hay que observar que si no existe una verdad última, Ia cu¿l guía
y orienta la acción polític4 entonces la§ ideas y las convi§ciorcs huma-
nas pueden ser instrumentalizadas fácilmente para l'rnes de poder. Una
democmcia sin valores se convieÍe con facilidad er un totalitdsmo
visible o encubiefo, como demuestra la historia"sl.

c) La transformación del Es¡ado: orientaciones éticas


Más aribá hemos formulado los critedos éticos que har de confi-
gular la comprensió¡ y la realización del Estado. Queremos retomar el
lema en perspectiva crítica a f'¡ de proponer un conjunro de orientacio-
nes élicas en esta hora en que el Esrado se encuentra en la din,ifnica de
noaables lr¿¡sfomaciones 3l

11
ccn¡¿sinus amur n 46
¡: M. c*.r{ pÉL\yo. ¿¿r ,.¿,sfo.mciones d¿t Esta.lo tottdpotu ea luadrid,
t9'1',]).
POLITICA 649

t) La d,nplihd del Estado: la aiirnación tu Ia "sociedad citit"

La configuración actual de la Política, en cuanto interwención efec


tiva del poder político, se encuentra ante el reto de encoDtrar el rímbno
exacto de su ¿ctuación. El campo de inrervención del Estado ha de
sihrárse eñtr¿ ¿sros dos exremos:
la minimización del Estado: no se p'rede reducn has.a tal punto
el Estado ("el F^stado mínimo") que hága su aparición ta "barba-
rie" de la anarqüía o de la "fi,erza" de Ios más poderosos. El
Est¿do es la salvaguffdá de los más débiles-
la "teviatanización" del Estadoi la omnipresencia del poder po-
- lítico y su invasión en los restantes campos de la vida oügináría
un totalitarismo burocrático administmtivo que apagaría las füer-
zas creativas de la vida social.

El Estado tie¡e su lugar exacto en el respeto, en 1a promoción y en


la necesaria regul¿ción de las insla¡cias intemedias de la lida social. Es
necesario apoyar ]a creación de una amplia e intensa "sociedad ciyil"-
Jtlan Pabto II habla de la necesidad de uoa "subjetivización de la socie
dad": "Según la Reñln nolarun y la doctrim social de la Iglesia, la
socialidad no se agot¿ e¡ el Estado, sino que se rcaliza en diversos
grupos intermedios, comenzando por la familia y siguiendo por 1os gru
pos económicos, sociales, polí¡icos y culturales, los cuales. como pro
vienen de la misma ¡atur¿leza humana, rienen su propia autoromía. sin
salirse del ámbito del bien comú¡. Es a esto a lo que he llamado 'sub-
jetividad de Ia sociedad',1a cual.junto con la subjetn idad del i¡dividuo,
ha sido anüIada por el socialismo real"sr,
La persona se encuentra hoy día ante el peligro de ser atrap¿da por
et poder y la burocracia. "El individuo hoy día queda sofocado .on
frecuencia enúe 1os dos polos del Estado y del mercado. En efecto. da
la impresión a veces de que existe como productor y consumidor de
mercancías, o bie4 como objeto de la admini§tración del E§tado, mien
ftas se olvida que la convivencia entre los hombres no tiene como fin
ni el mercado ni el Estado, ya que posee en sí misma un valor sjngular
a cuyo servicio deben es.ar el Estado y el mercado"81.
De ahí que sea necesaflo apoyar la funcién posjljva de la familia
"como comunidad de trabaio y de solidaridad" 3J y de las resta¡tes socieda

É cen¡x¡nus annx, r. 13 (ver, adeñás- los úú. z¡6 y 49). En Ia encfclica


Sollicitudo rei s@ialis, ,n. 15- 28, pl¡rteó luan P¡blo s¡a o¡ic¡láción.
ra cent6in6 annt6, n. 49-
R:
c¿kt¿s¡hüs amls. n. 49.
650

des in(emedias. "Efeclicañeme, ésrás madüran como verd¿deras commi


dades de perso¡as y refueEd¡ el lejido soci.rt, impidiendo que c¿iga en el
anoni¡rato y en una masiñcación impeBonal, bastante frecuente, pordes-
graciá. cn l¿ co.icdrd modcm¡r. En mcdiodccsa mulriplc inre¡bccion dc :N
rclarionc: vive la llcr:unt! y rrc¡ e la subjcriv'drd d. la iu(,edad'ó
Dentro de es¡a inreDre¡ac¡ón dialéclica de h lunción del Estado en
relación con la "sociedad civil" cobra sen¡ido un fenómeno humano qüe
hace su ap¿rición con gran l'uerza: es el l¿¡t¿nub .l?l roluntariado,
"que la lglesia favorece y promueve, sol¡citando ¡a col¿boración de
todos p¿ra sostenerlo y aoimarlo en sus iniciativas *'.

2) Lor ptinti'¡os t?suhtlores ¿¿ tu fuk ntn ¿cl F.turto

Las fuDciones del Eitado han de esrar resulads por el prin€ipio


generaldel ¿,?,¡ .¿,r¡¡n,. Sobre el sisnificado y la ¿plicnción de este
pn rlr¡, )r rc ha hablrdo cr csle hbro'*.
'l erierdo como lektn dc lb¡ o cl prnrcipio del bie¡r común es rcce-
sario resaltar de foma nrás iomcdiala la inlcrvcnción do oiros dos prin-
cipios: el de r¡!¿rnl¡¡¿,r¿¿¿ y el de soli¿ui.la¿. El principio de subsidia-
ridad obliga rl Eslado a nranlenerse cn sus propios línitcs y a t€ner
conoicnci.r de su carácler instrumcntal, "yr quc cl individuo. la lamilia
y la sociedad son aDleriorcs a él y e¡ Estado rnismo cxiste p,ua tutcl¿r
los derechos de aquél y de éstns, y no p¿ra solbcarlosNe.
El principio de solidaridad promueve h neccsarir inrervención dcl
Eslado y la oricnh h¡cia bs individüos y hacia los gmpos mhs necesi-
l.ldos: "los indiviLluos. cunnro más indctcnsos cst¿in cn una socicdfld.
r¡nru ¡r)J\ necJsfJn cl Jpuyo y c¡ cu'dr(lo dc los Llc¡nd\. cn pxri(ular l.r
I)tcrven(ión Jc ld Juroridal pühlic¡ *.
Podríanlos decir que cl principb dc solid¿ridad ticndc a f¿rvorecer a
Io' que "rncno' tienen'I, mienrrás quc.l prin,ipi,!dc suh:idi¿ridrd csr,f
.n iun(iún Llc lo{ quc -{( dcl'cnd(n por c¡lo} mi\moi ':. Lnú y urro
xr ()r t¡h1ü\ ¿kh t t1 49
t) C.üt.!¡ñüt o nu¡,n.49 Sobrc el voltr¡t¿riado ver, €ntrc olrás n¡uchas expo-
slciones: VaRns. ¿l rr¿¿r¿,r¿¡./¿: l',norul Misiorcrn. n. 188 (1993).
¡r Vcr cl capitulo 2 dc crc lomo.
t' C. k\n us ankls. n. 11.
't C.nt.tit us anhus. n. 10.
'r e{osición hecha en este tomo. c. 2.
Sobre el principio de solid¿rid¿d- ver ln
" ver noia ?2 de
este capítuIo. Añadir: A- FERNi\oü, T.ologia Mon!, Íl
(Burgos, 1993) 776'778. El Calecismo de la Islesin Católica recoge el principio de
subsidinridad en los dr. ll83 1885.
a Erca Polmc^ 651

pnnc,pro h¿n de ser equ¡ltbr.dos en la inretvencrdn iu'rd del Eirado'


iJ¿blr;do del papel del Eslado en cl mundo Jcl lrabaio pero pudiendo
rDlicar.e esh ¿o. rrtna a rodas las reslnnles area{ del Poder Polrrrco. Juan
P;hlo ll \enat¿ do. tolm¿s de a(ru¿cion del Esrado. drrecrr e indirecrd
mcnte. "Indirectamente y seg:úrl el princiP¡o de sulrsirliari¿¿d cre¿rdo
las con¡liciones lávorabies al libre ejercicio de Ia ¡ctivjdad económica'
encauzáda hacia una ofera abundante de opofunjdades de tübajo v de
luentes de riquezá. Direct¿menre y .egÚ,n el pi ci\io de solidrlidad,
oonicr,lo, en ¡elcnsa de los más deb'lcs. alg'rno\ lnnires a la ¡uronomra
¡le lus n¡rre' que J..rden las condrcioncs de lrJbrJ,,. ) aseguranJo en
ro¿o.,i'. ,n,n'.o u,rrt rl I'abrtador en paro .
"n

1\ D¿l "Estado.tc Rie|stú|" .tl "Estado de.itstitia sacial


A lodos e\ Dalente h crisis del llrmado E{l.do de Dicnesldr' qu(.
tn rirrro modo. \e ha (onvertdo en Esrado si'rcncial
* iQué pensrr
de esta crisis y cómo orientarh? ¿Haciá dónde han de encaminarse l'r
conccpción y ln renlización del Estado? Señalanos trcs cr¡ter¡os orren-
talivos pnrá responder a esl¡s pregunl¡s.
Primer crilerioi el "Est¿do asislcNial" no es la solüción Más que
dessranar razones preferimos apofar un texlo poDdcrado de l encíclicr
"Ccntesimus annui" en el quc scñalan los límiles del asistencialismo

"En los Liltimos años ha lenido lugar üna vasla ampliación de cse
riDú .le inrerven(ion, quc hr llcgado con\lilurr €n (icno Inodú urr
rj.,,,lo,le,n.h'le nuev¡: cl Eslado dcl bieneslar'. E\lü e\ulu(iun \c ha
,]Jdo cn Jls.rnos E\r do\ parr reiponder de miis úccurrda a
'nancra
,nu¡h¿. neciuttatles r (d¡encias, rrnrando de ¡cmcdiar lormas de pubrc-
/r y de privación ináignas de la pcrsona hüm¿n¡. No obfanle. ro han
t,rltrdo éxcesos y abusós que, especialnente en los ar-io§ m¿is r€cienics,

''r c¿r,¿r¡flrr ¿x¡ri, n l5.


cnPfúlo. Añ.dir y le¡er cfl cuenl!: R. C^rch CoranÉLo
'r Ver notL 68 de esr.r:b.t¿ q
ati¡L , Júat tolt¿ &l dJ l\tado ¿. Bka¡ta,: St' PmJ. n. 80 I ' la37)
\-)i t Pn , 'l.otit^:obr. ¿l E:tn¿o d¡ Bi" ttt¿t \\tt'Jrd, lqonr: a. Or . ' 4
n'adn:tione¡ ¿ ¿! Eltado.k B¡a".!tú luaúfid. 1990): R MtÑoz DD Busllllo
Ínñ. ) C,t\i: \ t.tnt..bl Lsn ¿ ¡1¿ Bt.t¿:t¿, \lln¿nt)- t sl¿o': D L A'tuqr'¿'
o,.t t
"".",i,¿, d\dtotto ¿" ¡¡,,r¿v¿r rv¡dnd, lsro,, G A R .1R. ¿/ ,.'¿J¡ 'r u/
sl ot¡sen r ',).t., ot Mo ronPanLió¡ iLt.múo.ol \Madid 199l): E- ollvas
n-,."P';ht.n.A J" t"Ait'nd¿¿ ¿' t "e¿¿. n¡nt t\¡atlnd.lool'. I vtr¡\ r'\' /-¡_
,t,h¿¿ tt.t LntJo r. q¡ph.!,, (Beelora, loq2). F. R¡\' _M. Jr \u A"
\¿¿r¡ll¿¿s,.d: Nuevo Diccionlrio de Teol.sí. Monl(Mádrid. I992) 148-163i A'
"r"
C.;^^. DelEslado !1. b¡.n¿nd at Esta.to rt¿ i6ti.¡ot cla\es n.4l (1994) 12-20'
652

lran provocado dur¿s crítjcas a ese Estado det bienesrar, catiiicado como
'Bstado asisle¡ci¿l'. Del'iciencidr y abüsos del mismo derivan de una
inJdecuadñ ,omprensrdn de los debe'cs propros Jrt Enrdo. Fn estc
,irnbiro rJnrbiin debe ser rcspeBdo el r
k.ipio ¿t¿ subs iatkl¿d tJn¡
cshuctura soci¡l de orden superior no dcbe inrerfbrn eo la vida intem
de un prup,,,ocral de orJen,ntenor. privandota dc \u\ comperencrJs.
.rno que riJ. hren deb( {o\renerlá.n caso de nc(e\rdrd
¡ a,aartr
coordinár su accióD con Ia de tos demás componentes sociates. con"
miras 11 bie¡ co rú¡ (Ct QA, I).
Al intcrveDir direcra¡nente y quir¡r responsabitidrd ¿ tx socied¿d, et
E:rJdo ,Éi'rcncral pro\,\.r Ia perditl.' de enerpia\ humun.6 ) ct runrenro
er,,pflrJu dc ios i,p.r¡¡lui publnos. don'intut;s por lo¡rcrrs'brrrorriritr,
nr.ir,¡ur. ¡oI la preú(.upt¡cron dr scrvrr a tos usurnos, con enorme crc.
cinrienlo de los gnfos. Efec¡ivamcn¡e, parece que conoce mejor I
necesidrdes y logra salislace ¡s de modo más adecu¿do qui;n €srt
pr(iximo a ellas o quieD esrá ce,c¡ del necesit¿do. Adem¡is, un cierro ripo
de ncce.sidades requierc con liccuencia un.r respuesra quc sea no sOlo
¡nJrcri l. sinu.lu§.c¡r dcslul,flr su eris(ncr¡ hunrlnl mx. nroiun.tr.
Crn\ r(.nc pcns¡r rhnrt rirr cn Ia rrru crón dr lo. prrifugo, ¡ cmrgrrntes.
dc los ancianos y colennos, y cn lodos tos dcnrás cnsos, ¡rcccsitirdos <lc
.Ai\rur(rr. (umú e. cl (lc lu{ drog¡rdi(ros: pcr:onns rod:r\ clxs que pnc
,lcn ,(r t¡)udaJx' dc rnrncrx cfi(¡z soi¡me t( porquicn tes oticcc, rp¿rr-
re Jc los LUiLI:rdo. cccrario\. un rpoyo srn(cr:rmcnte ri:rlerno ':. '
SegunJu crircrio: Pur r¡ldn del prin('pio dc soti(h¡idrd ct f{tñtu
lrcne que \eBuir inrervinrcndo. Err rntcrven(ió hr de ser pen:rJr
)
c.iecutada en fun€ión dcl bicn común dc roda ta sociedad y de mod;
especial e¡ funcióD de los dercchos de los miis d¿bj¡es. La encíctica
"Ccnlesimus annüs", nada proclive rl cotcctivismo y menos a¡ estatatis-
lno, señaln cer(e¡amente la necesidad de Ia inresención del Est¿rdo.
Anota, como campos prevalcntes en tr snuación actllat. Ios siguientes:
Ll nd,,o utt¡¡knad. jtniln¡ v F,lit o- I-l Era(to lr<nc tI
in(umbencrh ,lc detender un n,arco Juri¡ho ju\ro prrx tr Jcruac.dn \o
ci¡lde los rnJrviJu,r y de los Brupos. En ¡.tercncra dI((r J treconu-
mía, señala Juan Pablo tI: "La actividad económica, cn paficuta¡ ta
cconomía de mercado, no puede desenvotverse en medio de un vacfo
infitucional, jurídico y político. Por e¡ contrario, supone una seguddad
que garanliza l¡ Iibefad individual y h propiedad. además de un sistema
monetario eslable y servicios públicos eñcientes. La primera i¡cumben,
cia del Eslado es, pues, la de garanrizar de manera que quien habaja y
produce pueda gozar de los frutos de su trabajo y, por tanro, se si¿nti

'\ Ce teshu\ onnus, n. 49.


O DE LA ETIC¡ POL'ICA 653

csl¡nulado a rcalizárlo eficieole y honestamente. L¡ f¡lta de seguridad,


juDto con la corupción de los poderes públicos y La proliferrción de
lxentes inlpropi¿s de enriquecinienlo y de beneficios láciles. basados en
actividades ilegales o pur¡mente cspeculálivas, es uno de los obstáculos
princ¡rales para el dcsanollo y p¡tra el orden €conómico "rÚ.
1 ta¡1,etuionts sobre s¡r aciotrcs.tue a¡eLta a fu brc a »tufthd
¿c la soli¿¿a¿ en su únl!/r¡d. En rclación con la cconomíá le corres-
poDde al Eslado "la ircumbencia de nrmonización y di.ección del des¿
rollo". Más concretanenie tiene el derecho y cl dchc. de nttervenir
''\ u nJ,, \irux.iorrr\ pJrrrcul¡res de monopolo creen rcmúrh U oL.r.i'J
o( rl JcirlNllu '. E.rr rrirerio lrene aplcacron. rn:llóriLünL.nrc. ¡ l.r\
re§raDtes áre¡s de la vida socinl (sanit¿rin, educativa. cuhural, ctc.).
tul(itrl?s¿c rlplctr ¡r. "El Eslrdo puede ejercer funciones de
-
suplcnci . En siruaciones e)rcepcionalcs, ou¿ndo seclores sociales o $is-
tctnrs de enrpresas, demasiado débilcs o cn vías de lbrm.rción. sean
iD dccu¡dos para su co,¡elido. Tales i crvcnoiones de s!¡plenc i.t, .iustili-
cLrdN poL razones urgenles quc alañen al bictl conllin, en h nredidt dc
lo posiblc doben ser li¡»ilad{s tcmpolalmcnte, prr¡ no privar est.rblc-
nrcntc de sus conrpelcDcias a dichos scclores sociales y sistcmtN de
cDrprcslrs y para no ampliAr exccsivaNcnrc cl imbito dc irtefvención
.nxr,,l,",lc nr.,ncrr pcr|u(li(irl p r¡r I' hb(rlxd I nrr c(,'n'nni(., (urnu

- Delo:to \ t tckt ¿. l!]s 'át¿,r¿s .r1¿.r¡r,r". "Es (leber del Estrdo


provccr a la lurel¿ do los bicncs (olcctivos co¡no son el
del'eo§n y
rrbiente nalural y el ¡mbiente hümrno. cuy.r salvaguffdia no poede
cstar asegurada por Io§ §imp,es ntcrnismo§ dc mcrcado. A§í conto eÍ
lielnpos del viejo c¡pit¡lismo cl Estado rtrnín el debe¡'de det'en.lc¡ los
dcrcchos fundame¡taler del ¡"brjo. así ahora con el nuevo capitalisnx)
cl Eslado y Ia sociedad liere¡ el detrer ¿c ¿.¡¿n¿¿t'lo! hi.¡t(! ok'úitos,
que, eúlre olms cosas, conriluyen cl único m¡rrco dentro del cual e§
posible paIa cada uno consegun'bgiti amcntc sus fines individu¿lel"!.
Li i¡? .t la "irloldt,fui \ tot.tc¡dad d¿l nefta(b. El F,s¡ado
¡pa¡ece hoy como uD límile a la exuber¿nte r¿milic¿ción det merc¿do.
Hr conexión con 1.r necesana protección de los bienes colcctivos, anota
Juan l,atrlo iI: "Hc ahí ün nuevo límite del mercado: existeñ necesidades
colectivas y cualitativas que no pueden ser satisfechas mediante sus

\t' CeN¿sú us dn as, n- 4a.


' Ceúcsints dn as. n- 4a.
'it
q C¿nt¿¡inüs d as. n- 4a-
C¿nBnnus an s. ¡- ¿O-
654

mecali§mosi hay exigenciás huma¡as impof¿ntes qüe escapá¡ á sü


lógica; hay bjenes que. por su natumleza, no se pueden ni se deben
vender o complar. Ciertamente, los me€anismos de mercado ofrecer
veDtajas seguras; ayuda¡, entre otras cosas, a u¡ilizar mejor los recursos:
favorecen el intercambio de los productos y, sobre todo, dan la primacía
a la voluntad y a las preferencias de la persona, que, en el contrato, se
conlrontan con las de otas persooas- No obs¡ante, conllevan el desgo
de una rdolarña del mercado. que la ex¡stencra de bienes que.
por su naruraleza. no son ni pueden 'enora
sef simples mercancias .
Tercer cri.erio: el ideal éiico del "Eslado de juslicia social"- Las
formas modemas de Estado hán sido pe¡sadas preferentemente e¡ clave
b libefiad- Si¡ peÁer este valor, es necesario pensar y configürar el
Estado er clave de is¿¿l¿¡d. Juá[ Pablo tr ha reáIizádo el bálance de las
formas de Estado nacidas después de la segundá guerra mundial: el
estado totalilario de carácter márxista (CA, n. l8), el estado sociál de
derecho que cülmina en el estádo de bienestar (CA, n. 19) y et estado
de següridad nacional (CA, n- l9). De entre eaás formas, únicámente
tiene futuro el estado sociál de derecho co¡ tal que sep¡ conegn 1) los
desviácionisúos 1¿¡to del egoísmo individr¡álista liberál; 2) como del
despersonaiizador asistencialismo; 3) no cáiga en Ia tentación de cons-
iituirse en ün Estado ú¡icamente garánle del mercado; 4) y evolücione
hácia ú ¿utenri(o Esládo de jusri.iá sociál ¡Dr r h¿ciá e\Eucruras y
luncione. de 'oci¿li/¡.idn personal'adom y solidúirru:.

1) Entrc los Nacionalisnos t el Estado htt€nacional


Por último, qüerenos dejd constá¡ci¿ de un problem¿ que afecta
sedamente a Ia vida polílica acrual y, más concreramenre, a la configu-
ración del Estádo. Nos referimos a las tensiones entre "nacionalismo/
¡egion¿lismo" e "intemacionálismo" ¡Ú.
se encuentra tensionado por fuezas intemas a él y
El Estado actual
qüe pe
enecen a 1á realid¿d humana y sociál qüe lo co¡figuran: sürgen
viejos problemas históricos relacion¡dos con razas, etni¡s, peculiarida-
des lingüístjcas y sociales, etc. Todo ello da lug¿r al fenómeno de los
nacionalismos. Por otra pane, el Estádo aclual se abre a formas qúe

)ü C¿nt¿rinus ¿ t s. n. 40-
ro' Af,NcuN. ¿. ... 255-262-
rd Cf J. G{.t{ R@, P¡íó¿.¿ ptia.lo ¿ ü
I ta acción eciaL. D¿l Estado
Binestü al Es¡ado social \M¿&id, 1992t-
\ Mos. lns
101 (Zmgoza, 1994.); A. DE Brs GGRNo, N¿.io-
nalieios y nacione¡"acionntisms
e E"ropd (Madnd, 1994).
r]CA rcLITICA 655

desbordar el Estado-náción (intentos de aSrupación política supe or a


los Estados, como por ejemplo, el intenro de un "Estado europeo"). Esla
aDerura es plenamente ¡esbordante cuando se piensd en la , onve enci¡
r h¡ri en r, nece.,dad d. t¡"Estado un¿ial -
No nos detenemos aquí sobre estos ¿§pectos' ya que serán tratados
al analizárla Mor¡l tntemacional".

1"EXTO

JUAN PaBLo II, "Centesimus annüs", c. 5: Estado v cul türa" (nn. 44-52)
:14. León xlII no ignomba q@ n wa t oría.1¿l Estd¿o era necesúia lda
asegu¡d el desmllo ;omd d; ls ¡ctiri.tads hum¡d: 16 esPiri¡uales v las
ña¿ri¿res, entrmbar indislersablB. Por esio. en u¡ púaje d. tá R¿r,n nawtukl
el Papa preserla la orga;iación de l¡ sñ¡edad estruclü.ada eo t¡es loderes
lep;. ¡r,o eie.ubvo; iud. ial-. lo cuxl , onsr,tu¡a enrñne" Ln" no\edd'l en l"
.n€;rnl1s de la lElerá. T1l otdenañrerro rflrÉ úm \isión Éal.qa d" l" nárL_
r"lez¿ \(.al d.l h;mbe, l¿ cudl e\'Ae nna les'ilacóD ade.u¡da P@ prokger la
1ih€rtad de todos. A este rcsPéc¡o es Prcferible que un Podei esté eqnilibndo po'
úuo" ood.eq \ uua eilems de compelemr¡ que lo flÚtenPd 'n 'u JÚ'o liT're'
Is e.r; a pn&rpro d, "E"láJo dr deEbo_, en el cu¿l es sobflúa . le) ) 10 L
voluntad dbitrúia de los hoñbEs-
A esta concepción se ha oPuesro en iiempos modemós el tolálil¡rismo el cüal,
cn l¿ foma m;Graleririsra consideÉ qüe algunos hombres, en virud de un
conociñien1o más prcturdo de ls leyes de desúollo de Ia sociedad. por !¡a
'de ,
oúrcu,ú ,iruá. ion Iar las tu.nles ma Ptotund} de l'
ion-rncia co«¡'¡. es¡ qenic del cmt v pueden. por Mro. úoeús" e' eier
ücro de Jn Dode, ab\olu'o. A eslo hav que madü qüP el loLlt ri no r¿.e de la
nes"cio, d" i¿. er<l¿d s.nll.lo ohjer¡vo S' no ex^k und \e'dad tu. endenre. ton
"n
cuva obedienciá el hombÉ co¡quisla sü plená iderlid¡d, lasp@o exrsie nogún
pri;ipio seguro que arúti@ El¿ciones jusbs entrc los hoobrcs: los in1erc§es de
i,tu".._E.upo o nuiian 16 contñPonen inevn¡bbmede u¡os a ot'os- si ¡o se .{o'
noce ú leidad trdce¡denre, triünfá ¡a ñ¡ea del Pode¡ v .ada üno dende a utiliz
l-¿{d e. exrrero loi medios de qu€ dr\pom tua úpon.r \u proP o inrcE§ o ld
.ú rP(pf,rd los d€Fchc de los demás. Enronce' el hombe .'
;e.;ekd; en l¿ med'da en que s pG'ble in'hmendi/dlo Paá que :e
'olden¡e
,, Li ai¿ &l lol¿lilúsmo modemo há) quP verld. Por rúro
-
";.l¿ nesaüon¡e
en "e",.."
h drsrdad lrN cndenre Je lá pc^ona humea. imagen \ brbh d'
Dro. ,n,l{bte 1., prcci.;tu¡e por sro. su,eio n¿rural d€ de,echos que l¡d,e fLcoc
viold: ni €1in¡ivlduo. el 8ruPo, l¿ clase si¡I. ni ¡a nación o el Estado. No?uede
t¿, e ro ¡mDo,o l¿ mayor; d. un (uerpo ü'¿1. pon'eúdo'e cn,on_, de.á riro ia
magrnmd"ia. opnmrenaota. .rplor.ndolr o ¡orcnrddo de'lruú1.
'oclus
45. La.ultua y la prdis del to¡aülúismo comPo¡t¡¡ ádenás La nega.ión de
dlelerJ El E{adú. o bien el pd'do, que cE Poder @lilú en l¡ hÉro¡ia cl brr'
db.; uro \ ( enee poren(imj de rodc los valores. oo pDcde roletú que'e'olenra
ú cr¡teno obj¿tivo d¿! biet t- d¿, a¿1, Por encima de Ia voluniad de los gob.rnetes
7

CA POL¡TEA 657

47. Después de la calda del lolalitdlsmo comunisl¿ y de otros ñuchos regíme-


nes totalita¡ios de isegüidad ¡acio¡al". asisiimos hoy al predóúi¡io, no sin con-
,
tr¡stes, deL ideal democÉlico junLo con una viva ¡iención y preocupáción por los
deiechos htma¡os. Pero. precismente por esto. es necesa¡io que los puebLos qrc
erán ¡elb¡múdo sns ode¡mientos den a la democncia un auLéntico y sólido
lundamenlo, mediatrte el rcconocimiento eaplfcito de efos derechG Entre los p¡i¡-
cipales hay que recordú: el deÉcho a Ia yida, dcl que forma pa¡te inLeg¡mte el
derecho del hi.io a íeoer lrajo el corazón dc la madre, después de ¡aber sido con
cebidoi el derecho a !i!i en um f¡ñilia uDida , en un Mbiente mora1, tavorable
al desaüollo de l¿ propi! petlondlidddr el dcEcho a madurar Ia proDia lnteLige¡cia
, la !rcpia libcrtad a Lravés de la búsqueda y el conocimiento de I{ veid¡di ol
dcrccho a p¡r1i.iDu en el Lrabajo laia valoff los bienes de ld Lie a y rccab¡r dcl
mismo elsuste¡to propio y de los seres queddosi el le¡eoho fonrl librchcrLe uha
Imiln\ d {coser y educ¡¡ a los hUos, haciendo uso rcslDúMble dc ld propid sexúa-
lid¡d. Fuentc y lfntosis de eBtor derechos os, en cierro seniido, l¡ libc¡tdd religiosu.
ente¡dida como de,ocho r livn e¡ ln vc,ilad de la prlpi¡ lc r e¡r oonÍomidud co¡
h dig¡id¿d lH.endone dc l{ prcpi! peNono
Tañbién cn los p¡rsc! donde ol.tD vigentes lbrmas de gobic ro dcmrorlti.ó no
sicmpre son ¡cBtctidos toshcDrc oslos dorochos Y tros rellrihos no sold,nenre ¡l
cÁctud lo dcl ubo¡to, shó l{mbictr I divor§os a¡peclos de uu üisis de bs sisLenras
de¡rcc¡áticos, que a veccs p rtce que hAh o h c.p¡cidrd do de.idir sesún el
lt,d
biq oomlln. Lo$ irroroguDtcs quc se pl¿rfcan cn h lo.icdi¡d ¡ menudo ro ol
cx ñhudos sosún crilcrios dc irstioi y modidld, sn¡, ,¡ds bieD dc acuordo or
l¡ llcrzu elccLd¡l o iinuncicr'¡ dc h! g¡upo! quo los sosLienen. Seúci¿úlrs dolvia-
o oocs dc ld Acriri¡nd polltio!.ou cl liompo prcducctr de|o(»rl'i ¡z
y dpuLiu, oon lo
ou l disminuye l¡ p fioip¡cióD y cl c$piiLu oÍvico onrrc la poLrl oión, qre se sichLc
rqj',.1.'d.' \ .l....lL,iuiJJr Dc .,hf vi(n( r r.cr1 (','.'¡t i('.1,r t.¡rr cn(ur.[!r
J. i, cr.\{, pJ,ri.uhr... (,. inJ qnri(rhc,ro ú Jr. L r'
,rmün. [rc, etr ctc(ú,
no cr hsiml lc {rma do lo$ intcrcscs parlicll¿ics, sino qre implicr w vuloruljón y
rúonización, hechu ñgún una cquilibrada ]corquh de !¡loies y, cn úLtimo i¡Nrlu-
cü, scgrin uD! cxaola comp¡ensión dc la dignidad y dc lú de¡echos de h pclson .
rlspcr¡ la /carlr¡a autokóñtt .ld otl¿h tlotoct¿tll¿¿,' pero no posee
L¡' lglesi¿¡
LfLüló nlguno p{ra e¡prcs¡r prcloro¡cias por un¡ u or¿ solucióó nNl¡ucio¡¡l o
consLilücion¡l L¡ rporLación quc ella ofrccc c¡ esLe sentido cs preds.men€ el
concePto de l¡ dignidad de la pesona, quc se maniiiesL! en roda plenitld cn el
nhre,io del verbo etuú.do.
48. Esr¡s cousidoncionos sencrales se rcfLejd tañbtén sóbÉ d papal del
Estddo ?n et v.tot dc la ao¡rrla. La aclividad económico, en púLicú]á¡ l¿ ecó-
nomla de ñúca(to, no puede dese¡volverse en ¡¡odio de un vaclo insliLucionáI,
ju¡ldico y polltico. Por el contnrio, supoDc una sesuridad que gúanriza ]a libefrd
indiyidual y l¡ propiedád, ádemtu de un sistema moneLa¡io estable y seivicios p¡1-
bli.os eficienr4, La priñe¡¡ incumbenci¡ del Est¡do es, pucs, la de gúmtizar esa
sesuridad, de manera que quien üabaja y produce pueda sozar de los nrtos de su
tmbajo y, por 1o1o, se sienta eslinulado a re.1üúlo eficiente y houestameDle, La
falta de s.gulidad, ju¡lo co¡ la corupción de los podercs públicos y la proliferació¡
de fuentes imprcpias rle enriqueciniento y de beneficios láciles, basados on elivi-
dades ilegales o puramente esteculalivs, es uno de los obslácuios priDcipalos para
el desúóLLó y pda el orden ecoDónico.
658

on? incuúlle¡cla del Esrado es 1a de visllú y ercauzú ej ejercicio de Ios


Júec'rG humJ.,6 er c !cr,o, c.onom.ro: p .ro en c.; . ,ñ¡o td pri,rc k , e.pon.abi,
I dad r o.s Jel P rnda nno de, ¿oq pr\on. y de o. d, .r.o.
dj;po. J,so.: ¡cjon"s
en que \c docu.r ld so! icdtrd. F¡ tslldo Io podnJ.,"gurd ¿i*r¡m, nre etaqm¡o
¿unpuelod rrcbtrjo d. lGlo. o' ciJncJdro. . n erl ctbrd 8rodnc-.c Lodo 'r
,'da ecrnonn r r .utr r d ||ó,e i.ici¡.iL J oe'o. in,t¡ rduo) l_o :udt. sin emhá,!o
r'n .ipnd(¡ quc (l L.rbda uo .enÉd n coape.en!rJ er, -te ibiro. como t;n
Jimc.lr qurnc. o up'rerd 1 rcn..r'eLnx ttc regt". cñ t,, (,r.rz Lronrn r, E. ma§,
el FilJJo Ictu .l Jebe. o. .qLndu lr .crivr.l"o d. L. flhtrc.T. cre¡rdo conurcro-
rr" qJe r.ceutrr o¡J Lr.id¡le\ .lc rr hJru (rirnrt..n,totJ dond¡,." rn.rtiienreo
suslenrcn,lo x cn moncnto: dc cri\i\
. r Eq J.lú lrcr'c. Jü!ñ.i.. . d(re.ho J
,le mor'ntnl'o -rccr' rómJrd. L ñbsrc.utJ.
jr crvLñ . c,.nudu . ur. .nc. p.rlrcltre!
rt dc.Jru ". pero. Jprr., oe .,lrr. in, um-
b..n(,¿,,10 crmr,',/r"i¿n r d,...-cion .tc d".Jro..u. et t-\',.t,
i,*.t. "jeRú ri,".i;
ncr ¿. .¿t¡ 4, t,t (r. n'ur(runu, c\ier(.un"t!r, (LJr.u,, .e.rorr. ,".i.t.., o yrcm
d. cmt,RrJ.. demJ.iJ.l. déoile.. rn rfr..L .armJ(iun.,üJn j.uLtc.u .lo\ nrr¡,.r
.ñm rr¡u. T:'l(r rnt(r\cnr nn(\ d( ,ut,h.n.i.,, ithr..t...\tJ, ¡nr ,,r",1., ,,"..i".
Jn,r¡ Ib-s,.,'mun.unlJrn¡ r.,.. .iJ t¡ f. \. b:( out,.r .u ' rm. rr,t rurpi,rttmrrite,
","
p. J 1u fr¡ ü\ Jil(ñrnJ Jr {F., ,p hjr(i_. h (t,rt,o..:-,..t^ *t,ir". y urtc-
hJ.,lr 'n1t!!...i J r¡r., nJ ",1ftiJr j^-r..\!n(nrc:l .,nrl¡,r" ue :,rrru¡¡r.¿rir,rar.rl
Llc nn'crJ f(r uJni.,l fJ.x l.' lincrrJLt uj ,, r.,,n¡ñr-tr ..,r..hrt

Ln l.h rhinr.. ..rl hr re trl¡'L!J ur,r \ .nr ¡,n,tj .,.1ñn c rt ript, Jc tr cF


\ .(ióñ q'tr h., llc!r.ta^ r (.,nniruir or (,dr¡ 1n..t¡. Li. I ..r.t,, J( ,n,t¡io nu$.,.¡t
''E{¡.1., Jcl oi.n(!J, . L{r ..v.,.ur..n n hr !tJ,t¡ yn lrurLh tit..Ju, ú"r. rcrDóndcr
rlr mrn(k h:., x.l..Lt.h,iJ J mL(h-,,r((ri.",lu, y. ;m,., ,,.,.*.i..1.. ,"ir"¡i,i
l. trm¡. Jr. ful.k/¡ y ¡( tfl\..(ión trkIÉr'x\ tte.n
"c..ñnr humJnJ. N..,t-rj c, no
hrD lJhr.l,..r\-r.$ J rL-\,t .,. citluri,'t. r(nrs .n t,\ ,no, mr. ric re., hrtr
¡rnrñ(J,1,, tlujJ. -r1r.1\ ¡ c\e F! tl,j.tL. t.hrtrn-r. c,, rt,.r.t,,LUn,, -L{.do:ri.-
tcncirl" Dclicicnoids y husos ltct mismo derivrn dc un! inrdcouddr co,¡p,!nsió;
dc los debercs propiós dcL Eslado. En osre lmbiLo ximbiéu.tcbc scr rcsDot¡.16 él
F,n, i ¿Jr \uhlntidri,ln,t l n.r e,trr! .r,J....tr' dc.{!. .u¡crio¡ o Jch{ inLciri ,
cn lx \'d., .rcna oc.trr grltn -,(r_t ,jr orlt.n ,.,1.,o, r,,i.,uul:.r",,,.o,"o".
rorcir,..r.qlin'hIi(ólic.r.nrenert,,cIcr.o.te:,er:c.r.lJ.t):,JU.trrtuJ,ü¡
dinÚsu acoión con Ia dc los demts componentcN soci¡tes, cor mi;r! ut üicn común.
A ir'rtrcn Jirnldñenr..) qurrr rc\ror¡rbj...hd ,,.,.oc.cd.d. ct Eskdo
J.¡rcn, iJl pr.vocr lJ p.iltrlJ y et run.cr.to e\J6e,rdo Je to.
rpn:'^. t1,b ' o,. !1,'n',úo. "ñ, t"d(A Lt,J.r. r: mr,,tre oo tJ;.e".upa.,ó,,
de r¡r\i, s lo, ..1iñicn o o. ro, g:ro. Eierr ,amcnre,
pde.cquecuro,cmcDr'tr.-¡,cbiJJ,le.Jtng.J,.ti,r¡ccri.a.kmodomx.rdecu&.
,lú q'rcr c.ró pró\ mo r ..t.s o quicn c. J c.rcJ ort neccsiladu. c,temc\. ux cicno
r'fJ de nR$ .lode. ÉquÉrc , o¡ rrccúe0. id una ,c.fuerr oLc re¿ ro qñto nr¿teri¿t,
nnú auc.cf1.lr,'rbrr.u r\igFn.iJ hlm¿-¿ má, fjut,tr,dá (on|en. pen.r rrm-
h'én en ld .irua.irt' dc lo. t{ótLEUr J 0ñ,8r¡nF.. de o. ¡n,I uo. y elt;,,rñs y el
ñdos lú. d.¡J. !,,o§. -p(c..rodo. dr a i,kn,i., comó
- -rdc'lur.Iooadi.br:
pcno1,,. rod¿. c..1. que fucJen ser a)r d¿ds d- nane.J (r.,, .o.cñ*F D;r qu e,,
lcs ol'e.'e. ,p¿ne o( lo\ !u Jcdoe nr.c.úo\. un apñlo .rn.flamcnre t.dre.no
49. ED !s!e cúpo l¿ lglesia, tiel al nandato de Crisro, sü tundador, estl
p¡esenLe desde siempre co. sus obEs, que riende¡ a oiFcer al hombre Dece;ita<lo
O DE LA ETICA TOINIG 659

un apóyo naterial que no lo humiue ¡i lo reduzra a ser únicmente objeto de


asiún;ia, sino que io áyüde a salir de su situació¡ prccfii, promoviondo su di8
L¿J ltre decú quc l¿ .drrJod ofc
n.dád de ffÍson¿ Cm.ia J Dio\,
ha i p¿raio en l. sle.r¡ ). ei má.. .ie.e acrumcnrc u i rurrlormc J .orNolddor
inoménto. A est respecto es digno de meúción esPeci.l e, fehóneao del rolubta
tu1,, que la Igbs lhvoiece y promúeve, solicitando l¿ colábor@ió¡ de Lo<los pda
socteúerlo y a¡in¡rlo en su iniciatilas.
PJ'J .urcÍ.r .a renr¡.,Jad indrv dur ru. hoy dr, rrr, .Ifun.l..la reqrierc úñ
.o-¡,¿n,,i.ot,¡na. onda'úat1J tlttld¡l. qLc !om'en7o denro 'de h mili¿
.on'lámLrud'.\u,l¿de.o.e.po'o.j.lueCo,con'b.rrrnc.onc§qurlr'generc-,oc'
.c oreun cnui s. oe erc roodo 0 rm,liJ sc (udlrtr.n .oñn corJritlxd Jr úcbajo
v ¡e solidalidM. Pero ocure quo cu¿ódo l¿ iamili¡ decide re¡liz Plenanente I
vocrcióu, §e puede eúcontra¡' §in el apoyo necesüio Po, l)&rte del E§ado. quc no
,lFpoñc dc rc¡u,'ú' E. ur8cñrc. fl,ror'(es. nromo\cr rn'r rvr polf'kr\
'uncrcnrc.
no ¡o,o cr fuvór rlc lc ldmiliJ,.no rrñb'cn pJ1'cd\ 'ociálcr \lL, l.n8e como
ooicuvr Dr ncin-l r ,r lrmrllJ ñi'mc, rlud¡nüola mcoi"nr. l: trrgnacrÁn tlc rccuF
,o' ,oc.¡¡¡o. e.n.rrur¡cnrcs elrÚLc. tle xyLJ4. bicn 'cr Pr_r ¡ etlucrLi¿n tle lúr
lito'. bnlr icJ ¡JrJ h .n..'ron Je lo. ao, i¿oo'. cviLnlJo \J Jlul¿ñrenlc Jcl nürlüo
,dmr|lx J !ñ ....|,,nJr 'r. - LtF tc cr.,(iú¡c'.

Adomás de lá t¿nniliu. dcs rollan L¡mbiéo lunoiorcr¡ Primári¿R v Pone úr


m¡r!h! es¡uc(rr1s c|pe(ficás dc solid¡rid¿kl olrs sociodades inlemcdi¡¡s Eltcxivd-
monrc, és$s m¿¡duún ooño vcdudcrus comunidude$ dc Pe¡$nf y rcluorr.n el
rJi,.tJ,u(i¿|. imt'i,jici,lú ttur c¡'r., in (l J Unimul'. y rn úrr" mu.'l'.'r,.'i'n im
ou'.mu.. u¡r¡rr,i lre.mnr¡, nor Jc.Errcir, e¡ .r nrnrLJ mo.lcn1r. Etr ne,ln J( c'a
;u.,rD.¡ .nr,r:.ki,'n ,le 1". ñil:(i,'nes \^e lJ Nr:,'nr J rtrcj ru'!ubicri\iJ..J Jc ll
-\rcil .l'.El n i\i.lJú hu, .llx,tnJ,lr -,ll,Ldtlo $n rN.ren.r Ln.rc h\Ju'pulur
Jul Erlro \ ,lel m(r!:do, Fn el¡r!,, Jr l.' .mpNion \e,c'.1.'quc c\i'e'ól'
."n,o ur",l¡.'. r runbun',J,{,le le'(rnr( ".ú Lis1, (,'m¡,,Uiru.lL h lm.r'i-
rú(ió; Jcl Prho;. micnr.¿' .( ñ.r..h ttue h rr,¡ i\(n(iJ Lnrrc lo' I'JmbEo n I rk ns
oomo úi cl meroado ni elEst¿do, ya quo póicc cb I misma ú !ulo! sinsular a
li¡
cl LsrrJo y el mt(-au. El nombrc c'. " c rJd'. Ln rt
qu: oI.¡ l¡ \¡.rlr.l) { clLer¿J fur \'\ iih y frolun'ji/JrlJ cn un d.r.oro ('nrinJo
que irlpLtrr J la\ Eencrrciure5 tEsJ,lds I lirtrrrrs
50. EsLa bLbquedd dbierta de la verddd. que se renücvd cdda ge¡eración, cuftc_
tet\zr Á .abura di ta nac¡ón En erecto, el patrimo¡io de Los lalores ¡c,td¿dos v
raquiriuu' es srcmprc obFlu dc conrcLliun to¡ p['e Lo JÚrcnes. Co'lf,rd. Por
.d; Dme - o,'"" ¡eir nec^a ¡nentc ue" u.r'o 'lcrecnd/ú ¿4¡¡¡' !trrú que
ru,e¿.:sniri,; .obre rodo'omcre, 1¡rueod en ld Prolio \id¿ J. rru§ $t¿ \ean'
i¡c.on ci¡..er.,¿1, nJcer que e\u\ r.vo.. a.tut'§ ) pú¡onalc§.
disce¡nie¡do lo que en la tladición es válido EsPecto de falsedades v erores o de
iomas obsoletds, que pucden ser surituidas Por orrus ñás en consouúciá con lo§

En este coúLexto convieÉ recoñat q\c ¡a ¿wai¿l¡zaciót se iL\erta ñhb¡ét en


kt .ultara de la! ñdcin es, ¿yudando a ésta en su cmino hacia 1á lerdad v en la
rarc. d" pu'rtr.¡..on y "nri\Lecimien'o Pcro tuúLlo Ln- !rlJd 'e eñcietr¿ en "'
m".u J nora,le ¡"rp.r. lorms de \ioa dr.cuadl". rccl¿/ando cJdqurercmbio
y confr;nt.ció¡ sobrc l¿ verd¿d del honbre, entonces se vuelve esté¡il v lleva a su
I
51. Toda la actilidád humda de¡e luC dentro de ün¿ crüura y tiene ünu
rec&¡oca rclación co¡ ella. Paa u¡a adecudda fomación de esa cdtura se reouió!é
la pMi, ipa. ion oire.'c Je rodo el nomóre. e c' at @.dol 1 en é d .u .relri ddd,
su i¡telisencia. su conocinieDto del müdo y d€ los demás rómbrcs. A ella dedicn
amb.én .u.¿pacrdal oe turudornjr'io, Je .úntnio Der)onJl. Je.ordaid-o v dr§.
Dorb-.d¡4 púa prodo\er e brén comln. Por e\o ta Drmero I nrs im!;rl]Ó
Labü se M1¿a en cl cotuzón ¡tet honbrc,l el ¡Ddo .omo ére se com!¡;mer a
c!¡strun el propio futuo depe¡de de la concepción que tie¡e de si nismo y de su
destino. Es ¡ este nivel donde rj.re tncú la Lonnibación ¿lp¿cifiLb r .teckba de
la lgle¡id en Íawr tle ld w.dddera .alr¿r¿. Elta p¡oúueve el ;ivel de tos
comportmientos huma¡os que lhvorece¡ la culffa de l¿ paz conÍa los modetos quc
anulm al hombE e¡ ]a masa. ignorm e] pápel de su deativi.lad y libdtad y poáen
la srandeza del hombrc en sus dores pda €l conflicto y pda la e!eÍa. ü rgb§ia
rleva a cabo este seNicio prednando td wrdon sobrc t¿ cr4cjóñ d¿l ndo, q\a
Dio. h" pteno en ta rúo. Je to. ,orr.! paa qLé o h.eu ecuroo y -" niar
pere. o. on.u uabulo. ) ¡,r'J¡""d. ta, ?..1d.1 .'ob,. ta,,,1.,.á, ft
el Hrto 4" Dins \d .a.v1do d rodn. los loúDre. y at m .mo .rempo tos""¡ "uat
ha urJo eóEo
J húré¡dolo. F.potuable. Lr o. d" oro¡ L. salrad. E§.r rLr. no. mb,a coúú0u0.
ñente del compromtuo activó en favor del hetumo y nos presenra 1a exisencia do
una coresponsabilidad que debe abe.d a todos los ¡ombres.
E.," exrtse', i" r o.e ¡imic o.. onlne. @ l¿ propia ram 1 y I I Jql:cr¿ dc
la nd:ón o del E{¿do. .iro que " ciefra o.d nú¿ñenre d roda h orrd;dad. do
nuera que nadie debe considetdse exraño o indiferente a la sueile de otro mióm,
bro de la i"ni|d numm". Fn "faro i¿or oJ"de arm.r q re no c. responsábte Jo
lr .krF dc .r hrmfo,.t cen ¿.o. L! t0.20-¡/. \,lr 15 ,t-¿ói t¿ arenrl ) p.e-
nurosa solicitud h@ia el pójimo en el momento mismo de la Mesi.lad faciliiada
por lo.'reLo. úetuo. de .o nun.ca.. ón. qu"
enm .i- es ru) impoirture pa¿ la bt"qJedd oe to. iú.tr henros de )otu-ró¡
'nc.u,o
bre.
dr los co¡ilictós i¡ter¡@ionales que luedm s;r úa aller¡ativa a la guena. No es
diÍcil afirnd que el insdte pode¡ de los medios de destrucción, &c;ibles inctuso
a las medias y pequeñas potencias. y la conexión cada aez nás estrecha e¡ft los
preblo. de tou, ld ricr". 'qcen mL) a duo o orlchcse I " impo.rote mibr la!
co¡secuenLias Je un Lonn .h
52. Los lonífices Benedicto XV y sus suceso¡es hú visro cla¡ame¡le este
petgro, y yo mismo. con ñdió¡ de la recienre y dmádca guena en e1 go]fo
Per.ico. he r"prridoel m ro. - \ ri( a m.. t" euer":: itJo. núca -.;, ru g' enaiquc
de"tru)e ld ü dr lo. .norenre.. q re "n.eña ¿ m¿ ü ) rrd.od¡.el¿tre-. h vida
de lo. qE mák. qF GF u j deqruna.ecuetddeFrco..'.;oro,rhd."nás
dii¡il la u,t" .o L"'ón de lo¡ m,en o, p.b'cfr". qL" i td pro\o.rdo. q.r como
denr¡ Je.ad1 P.rdo \a .lcgado. tuhlñTh e ienpo m q,e et rrtena dF ta
rene za privada y de la represalia há sido sustit¡¡ido por e] imperio de t¿ ley, asf
túbión 4 uge¡te aho¡a que semejúr¿ prceFso te¡sa lugü en la cómúidad
i¡leDalional. No háy que olvidd tdpoco que en la úíz do ta guer. h¿y, en
genenl, rcales y siayes ruo¡es: injusricias sufridas, ftusraciones de lesitimis ás-
pi¿ciones. miseriá o explotación de grú<l* masas huñmas desesleEdas, 1s cu¿-
les nó ven la posibllidad objetiva de úejord süs condicio¡es por h; vÍas de la pá¿.

_
Por es. el otrc nombre de la paz es el desdollo. Igual qüe existe la Espo¡,
sabllidod cóktiva
de evil¿r la guem. exisle tmbiéD la lesponsbilidad colectiia de
promover el desurcllo. Y 6í cómo a nivcl inteho es posibte y obtig¿do construi.
ro Pomrca 661

una eco¡omia social que onente el luncionmie¡io del mercado hacia el bie¡ co_
ñ1. del ñhño modo son ¡ecesdias hbién interyenciones adecuád4 a niveL
i¡rmacio¡al Por esto hace fdld n |tuh e!Íuqza de canprensión tec¡Ptoca, de
Lónoc¡ñieñto !se sibiLinción ¡1e las cakciencias. He ahi la deseada cul¡uÉ que
hace ame¡1ar la co¡fieza en las pole¡cialidades humdas del pobre y. por tmlo,
en su capacidad de mejorú 1a ProPia codición medidLe el üaba.io y contribuü
posilivame¡te al bienest¡r eco¡ómico. Si¡ embargo, púa logrü eslo el Pohe
individuo o neión- neesita que se ]e ofrezcm condiciones realme¡ie 4eqüi_
bles. Crea tales condiciónes es e1debe¡ de una conce adón hükl¡dl para el.l¿'
sa,¿/lr, que iñplica adeúás el sa.rificio de las posiciones ventajosas en eanancias
y poder. de ls que se beneficim las úonomías nás desúol1adas.
Esto puede coúportú iñporlotes cmbios eD los esiilos de virta.onsolidados,
con el fin de linillr el despilfúo de los recusós mbie¡lales y hummos. pemi
riondo asi a todos los pueblos y honbEs de 1a dem el loserlos on medida sufi
ciente. A estó hay que anadi¡ la valomcióD de ios nuevos bieoes mateliales y espi
rnudes, fruto del trabajo y de la cu11urá de los pueblos hoy maEi¡ados, Pú¿ oblend
así e1 eúiquecimiento hummo seneral de 1a fmilia de l4 ¡aciones

Potrebbero piacerti anche