UNICO.- Siguiéndose estas diligencias en virtud de Atestado
nº 263/2018 de la Guardia Civil de León, en el que aparece como investigado D. XXX, como presunto autor responsable de un delito de conducción temeraria en concurso ideal con dos delitos de homicidio por imprudencia grave, y de un delito de conducción bajo la influencia de bebidas alcohólicas, y un delito de omisión del deber de socorro se solicitó por parte del Ministerio Fiscal la prisión provisional de D. XXX, acordándose la celebración de la comparecencia prevista en el artículo 505 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, en la que el Ministerio Fiscal ratificó la solicitud de prisión provisional, y el letrado de la defensa solicitó la libertad provisional del investigado, y este mismo.
RAZONAMIENTOS JURIDICOS
PRIMERO.- Conforme al artículo 502 de la Ley de
Enjuiciamiento Criminal, en la redacción dada por la Ley Orgánica 13/2003 de 24 de octubre, la prisión provisional se adoptará cuando objetivamente sea necesaria, de conformidad con lo establecido en los artículos siguientes, y cuando no existan otras medidas menos gravosas para el derecho a la libertad a través de las cuales puedan alcanzarse los mismos fines que con la prisión provisional.
Se tendrá en cuenta para adoptar la prisión provisional la
repercusión que esta medida pueda tener en el investigado, considerando sus circunstancias y las del hecho objeto de las actuaciones, así como la entidad de la pena que pudiera ser impuesta. SEGUNDO.- Por su parte el artículo 503 de la misma Ley establece como requisitos para acordar la prisión provisional:
1º).- Que conste en la causa la existencia de uno o varios
hechos que presenten caracteres de delito sancionado con pena cuyo máximo sea igual o superior a dos años de prisión, o bien con pena privativa de libertad de duración inferior si el imputado tuviere antecedentes penales no cancelados ni susceptibles de cancelación, derivados de condena por delito doloso.
2º).- Que aparezcan en la causa motivos bastantes para creer
responsable criminalmente del delito a la persona contra quien se haya de dictar el auto de prisión.
3º).- Que mediante la prisión provisional se persiga alguno
de los siguientes fines:
a).- Asegurar la presencia del imputado en el proceso cuando
pueda inferirse racionalmente un riesgo de fuga.
Para valorar la existencia de este peligro se atenderá
conjuntamente a la naturaleza del hecho, a la gravedad de la pena que pudiera imponerse al imputado, a la situación familiar, laboral y económica de éste, así como a la inminencia de la celebración del juicio oral. Procederá acordar por esta causa la prisión provisional de la persona imputada cuando, a la vista de los antecedentes que resulten de las actuaciones, hubieran sido dictadas al menos dos requisitorias para su llamamiento y busca por cualquier órgano judicial en los dos años anteriores. En estos supuestos no será aplicable el límite que respecto de la pena establece el ordinal 1º de este apartado.
b).- Evitar la ocultación, alteración o destrucción de las
fuentes de prueba relevantes para el enjuiciamiento en los casos en que exista un peligro fundado y concreto.
Para valorar la existencia de este peligro se atenderá a la
capacidad del imputado para acceder por sí o a través de terceros a las fuentes de prueba o para influir sobre otros imputados, testigos o peritos o quienes pudieran serlo. c).- Evitar que el imputado pueda actuar contra bienes jurídicos de la víctima, especialmente cuando ésta sea alguna de las personas a las que se refiere el art. 153 del Código Penal. En estos casos, no será aplicable el límite que respecto de la pena establece el ordinal 1º de este apartado.
d).- También podrá acordarse la prisión provisional,
concurriendo los requisitos establecidos en los ordinales 1º y 2º antes vistos, para evitar el riesgo de que el imputado cometa otros hechos delictivos.
Para valorar la existencia de este riesgo se atenderá a las
circunstancias del hecho, así como a la gravedad de los delitos que se pudieran cometer. El límite previsto en el ordinal 1º antes reseñado no será aplicable cuando de los antecedentes del imputado y demás datos o circunstancias que aporte la Policía Judicial o resulten de las actuaciones, pueda racionalmente inferirse que el imputado viene actuando concertadamente con otra u otras personas de forma organizada para la comisión de hechos delictivos o realiza sus actividades delictivas con habitualidad.
TERCERO.- En el supuesto analizado existen indicios de la
comisión por parte del investigado, de dos delitos de homicidio por imprudencia grave, previstos en el artículo 142.1, párrafos 1 y 2, en concurso ideal del artículo 77 del Código Penal, y todo ello en concurso del artículo 382 del Código Penal con un delito de conducción temeraria del artículo del artículo 380.1 y 2 en relación con el artículo 379.2 del Código Penal, cuya pena puede ser de cuatro años de prisión y que excede del límite legal previsto para la adopción de la medida cautelar de prisión provisional, así como de un posible delito de omisión del deber de socorro, previsto en el artículo 195.1 y 3 del Código Penal.
Ello es así por el resultado de las diligencias de
investigación de la Guardia Civil obrantes en el atestado policial, de donde se desprende, sin perjuicio del resultado de las pruebas restantes, que el investigado conducía su vehículo a motor bajo la influencia de bebidas alcohólicas, con tasas de alcohol por litro en aire espirado de 1,26 mg/l y 1,18 mg/l, presentando además síntomas evidentes de encontrarse bajo los efectos del alcohol, y realizando una conducción inadecuada por esta circunstancia, llevando además una velocidad inadecuada, lo que motivó que arrollara a los tres ciclistas que iban circulando por el arcén a la altura del punto kilométrico 293,600 de la carretera N-601 (Adanero-León), sentido León, término municipal de Santa Cristina de Valmadrigal, causando la muerte de dos ellos, por la fuerza y violencia del impacto motivada por la velocidad a la que circulaba el vehículo, e hiriendo levemente a otro de los ciclistas. Asimismo, después de producido el choque, el investigado se bajó de su vehículo, y posteriormente volvió a subirse al mismo, huyendo del lugar en la misma dirección que llevaba, siendo interceptado posteriormente en el kilómetro 311 de la N-601, en el término municipal de Mansilla Mayor.
Por todo ello existen indicios, sin perjuicio de su posterior
valoración en el acto del juicio, de la comisión por parte del hoy investigado, de los hechos denunciados, que deben tener la consideración de graves, no solo por la pena que en su caso pueden llevar consigo, sino por la propia naturaleza y circunstancias de los hechos denunciados, y los bienes jurídicos afectados con los mismos.
Asimismo entendemos que existe una situación de riesgo de que
el investigado pueda sustraerse a la acción de la justicia, teniendo en cuenta para su valoración, la gravedad objetiva de los hechos denunciados, lo que motiva por sí misma la adopción de esta medida cautelar, ante el riesgo de que, en atención a los mismos, pretenda evitar su enjuiciamiento. Asimismo, debe tenerse en cuenta como hecho relevante igualmente, sin perjuicio de lo anteriormente expuesto, que el investigado se encontraba en esta localidad de forma casual, residiendo habitualmente fuera de esta localidad, y sin que conste acreditado, mediante una prueba documental, la situación de arraigo del mismo.
Por lo tanto entendemos que la medida cautelar solicitada por
el Ministerio Fiscal es proporcionada, necesaria y útil, y no sustituible por otra medida mediante la que se obtenga la misma finalidad, y sea menos gravosa para el investigado.
Por consiguiente, estando rodeada la prisión provisional de
exigencias constitucionales como limitación que es del derecho fundamental a la libertad personal del artículo 17 de la Constitución Española, como es la fundamentación de la medida, ponderación de intereses en juego, proporcionalidad y excepcionalidad de la privación de libertad (SS TC 98/2002 de 29 de abril, 8/2002 de 14 de enero, 29/2001 de 29 de enero, 305/2000 de 11 de febrero, 47/2000 de 17 de febrero, 147/2000 de 29 de mayo, etc.), existiendo en este caso, en la ponderación de intereses en juego, datos para que la libertad, como valor supremo en la Constitución Española, haya de ceder ante otros valores que hayan de superponerse, procede decretar la PRISIÓN PROVISIONAL COMUNICADA Y SIN FIANZA por esta causa de D. XXX.
PARTE DISPOSITIVA
SE DECRETA POR ESTA CAUSA LA PRISIÓN PROVISIONAL COMUNICADA
Y SIN FIANZA DE D.XXX.
Fórmese con testimonio de esta resolución pieza separada de
situación personal.
Para llevar a efecto la prisión líbrese el correspondiente
mandamiento por duplicado al CENTRO PENITENCIARIO DE VILLAHIERRO, LEON.
Notifíquese este auto al Ministerio Fiscal, al imputado y a
su defensa Letrada, haciéndoles saber que la resolución no es firme y que contra ella cabe interponer RECURSO DE REFORMA por escrito y firma de Letrado presentado en este Juzgado en el plazo de TRES DÍAS y subsidiario de apelación en el mismo plazo, o sólo de apelación en el plazo de cinco días.
Así lo acuerda, manda y firma el Ilmo. Sr. D. FERNANDO
MORANO SECO, MAGISTRADO del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción único de Sahagún y su partido.- Doy fe.