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Laura Alejandra Prieto Muñoz

Cód.: 20171160015
Movimientos sociales

Movimientos sociales y acción participativa

El interés por los movimientos sociales desde el punto de vista sociológico y


político siempre ha estado fundamentado a partir del balance crítico que moviliza
colectividades enteras; sin embargo desde el margen ético de este fenómeno no
suele tenerse en cuenta los intereses que repercuten en la comunidad a nivel
internacional y central. El siguiente escrito busca establecer una definición de
movimiento social a partir del texto “movimiento social y poder político” de
Orlando Fals Borda y explicar cual es el papel de los movimientos en la
consolidación de la democracia.

En términos generales y teóricos los movimientos sociales según Orlando Fals


Borda:

“Los movimientos sociales tienen la función de protesta,


alimentan la esperanza y construyen un nuevo orden equitativo y
próspero con paz y justicia para enmendar contradicciones éticas
de la democracia burguesa”

Es decir los movimientos son vistos como fenómenos colectivos propuestos a


generar cambios en la sociedad. En América Latina surgen en contra del
autoritarismo y las intervenciones externas regidas por el desarrollo económico
de países del primer mundo, las políticas tecnocráticas generan explotación y
desbalances económicos haciendo que las clases sociales que tienen ingresos los
aumenten y por el contrario las personas con menos medios perpetúen su nivel
económico; todos estos procesos económicos repercuten también en el ámbito
sociocultural de la población la explotación, el hambre, miseria e ignorancia son
solo el equivalente de la desigualdad social impuesta por las masas. La
articulación de los movimientos sociales se cimienta por la independencia de
partidos políticos lo que los hace una opción diferente de acción participativa,
debido a que sus intereses son particulares se movilizan en grupos sociales que
se establecen en la defensa de sus intereses. Así, sin importar la organización
formal, dentro de un movimiento social es muy importante la conciencia de
grupo, es decir, el sentimiento de pertenecer a él y de ser responsable con sus
otros miembros.

Las diferentes transformaciones sociales han representado reformas


institucionales implementadas por los movimientos sociales, buscando
responder a la crisis de la democracia hacia los años 90. La democracia es el
debate actual y busca nuevos caminos para su consolidación en respuesta al
surgimiento real o potencial de una preferencia por el autoritarismo. Al ser un
régimen político idealista, sufre una fuerte desilusión por parte de la comunidad
y es así como surgen los movimientos sociales, como fenómeno del contrapoder
a las políticas de estado desarrollista y tecnocrático que legitiman la
desigualdad.

Es así como la democracia tiende a ser evaluada por actores sociales según dos
medidas: eficiencia y equidad. La frágil eficiencia de la democracia en resolver
las desigualdades económicas y los problemas sociales de las que se deriva
propicia la consolidación de actores entorno a la toma de decisiones propias y a
la ordenación de jerarquías en contra de la corrupción y escasez para una
redistribución equitativa de los derechos humanos primordiales.

La evolución de los movimientos sociales insisten en la igualdad, equidad y


justicia entre algunos elementos éticos por medio de los cuales se ilustra el
compromiso ciudadano garante de derechos y la acción participativa que va
mucho más allá del proceso de voto democrático.
Por este motivo los movimientos sociales resultan ser una resolución a los
problemas agudos de pobreza e inequidad en la sociedad ya que su cultura
pluralista y cívica emerge a través de la movilización autentica y el
planteamiento ético, autónomo y humanista.

Bibliografía
Fals, Borda Orlando movimiento social y poder político” Revista UN, 1989,
COLOMBIA.

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