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CIUDADANO:

JUZGADO DISTRIBUIDOR DE PRIMERA INSTANCIA EN LO CIVIL MERCANTIL


Y TRANSITO DE LA CIRCUNSCRIPCIÓN JUDICIAL DEL ESTADO
ANZOATEGUI.
Su despacho.

Nosotros, Carlos Perfecto, Dainy Medina, Francisco Rojas y Arianny Goita,


Venezolanos, mayores de edad, de este domicilio, titulares de las cedulas de
identidad número, V-12.075.644, V-16.162.160, V-21.080.008, V-28.160.283,
respectivamente, abogados en ejercicio, inscritos en el INSTITUTO DE PREVISIÓN
SOCIAL DEL ABOGADO, bajo los números: 278.612, 187.631, 289.345, 132.196
en su orden, actuando como apoderados judiciales según mandato emitido en la
notaria tercera de Barcelona, Estado Anzoátegui en fecha 19 de octubre de 2020,
para el Demandante, la compañía anónima denominada “GRUPO NUMERO 10”,
cuyo registro de información fiscal es J-432585-0, con domicilio fiscal en Boyaca IV.
Calle 9. Casa 9. Barcelona. Estado Anzoátegui. Inscrita en el registro mercantil
tercero del estado Anzoátegui, bajo el tomo 8-A. Folio 12. Del año 2.000. Su
representante legal y directora de la compañía anónima la ciudadana Marinelba
Guilarte, Venezolana, mayor de edad, titular de la cedula de identidad numero V-
18.073.108. Domiciliada en la residencia santa Eulalia, apto 5. Barcelona. Estado
Anzoátegui. Dicha demanda es por el cobro de Bolívares, emitida por una letra de
cambio con aval. En este acto Demando al ciudadano Jesús Romero, Venezolano,
titular de la cedula V-10.292.138, domiciliado en Pozuelo, Casa 3. Puerto la Cruz,
Estado Anzoátegui. Y como Responsable Solidario al “GRUPO NUMERO 9”, cuyo
domicilio es en pozuelo, casa número 9. Puerto la Cruz. Estado Anzoátegui. Fijamos
como domicilio procesal para todos los efectos legales de la siguiente causa, las
direcciones antes mencionadas o como referencia la sede del tribunal, según lo
dispuesto en el art. 174 del Código de Procedimiento Civil.
Acudimos ante usted respetuosamente ciudadano juez a fin de manifestar lo
siguiente:

CAPITULO I
“DE LOS HECHOS”

Es el caso ciudadano juez yo, Marinelba Guilarte, Venezolana, mayor de edad,


titular de la cedula de identidad número V-18.073.108. Representante legal de la
compañía anónima denominada “GRUPO NUMERO 10”, la cual mantenía por
varios años una relación de prestación de servicios y distribución de productos de
limpieza y enseres del hogar, con el Demandado el ciudadano Jesús Romero,
Venezolano, titular de la cedula V-10.292.138, a quien se le suministraba dichos
servicios y productos, de los cuales el obtenía un lucro. Por dicha relación que
mantenía con la mencionada empresa, se le suministro una determinada cantidad
de mercancía, que se puede evidenciar según factura 5079, de fecha 01 de abril del
año 2.020. De la cual se suscribió una garantía para el pago de dicha factura, una
letra de cambio a favor de la compañía anónima a la cual represento, la cual fue
acordada en moneda extranjera, específicamente en dólares americanos, por la
cantidad de (CINCO MIL) 5.000 dólares americanos, y se constituyó según acuerdo
entre partes un responsable solidario que fuera su avalista, en caso de
incumplimiento del pago para garantizar la acreencia de la letra de cambio suscrita
y aceptada por las partes, sin aviso y sin protesto, en la cual el avalista estaba en
conocimiento a cuenta de quien estaba garantizando, y por ello se expresó la
palabra “bueno por aval” que da Fe como responsable de dicha letra de cambio,
que se realizó en la ciudad de Barcelona en fecha 01 de abril del año 2.020, en la
cual me constituí como librador de la mencionada garantía y cuya fecha de
cancelación de dicha letra se estableció el 01 de junio del año 2.020, donde el
ciudadano Jesús Romero, Venezolano, titular de la cedula V-10.292.138, se
constituyó como librado responsable del pago de la garantía y realiza el
nombramiento como avalista, el cual fue aceptado, al “GRUPO NUMERO 9”.
Ciudadano juez en reiteradas ocasiones después de vencida la letra de cambio, me
dirigí como representante legal de la empresa para hacer efectivo el cobro de lo
adeudado, es decir el pago de la letra de cambio que fue emitida a favor de mi
representado, ó la devolución de la mercancía que le fue suministrada y este
manifestó que ya no la tenía en su poder, porque fue vendida y dicho dinero fue
invertido en su vivienda. Es por ello que acudo una vez agotado todas la vías
amistosas tendientes al pago de la mercancía entregada, y es la razón principal de
acudir a su competente autoridad con el propósito de demandar al ciudadano Jesús
Romero, Venezolano, titular de la cedula V-10.292.138, y a su avalista el “GRUPO
NUMERO 9”.

CAPITULO II
“DEL FUNDAMENTO DE DERECHO”

Siendo yo, el librador de la letra de cambio que fue suscrita con el librado identificado
ut-supra, razón por la cual estoy en la facultad de ejercer mi derecho a que se me
cumpla la garantía que fue suscrita en la letra de cambio como lo establece el art.
1.264 del código civil: “las obligaciones deben cumplirse exactamente como han
sido contraídas…” por tal motivo en lo dispuesto en esta norma incumplió en lo
convenido en dicha letra de cambio al no ejecutar lo que por ley estaba obligado a
cumplir y es por ello que dicho incumplimiento genera una sanción y me confiere la
exigibilidad de lo adeudado por esta vía judicial. Por otro lado el art. 124 del Código
de Comercio establece: “Las obligaciones mercantiles y su liberación se prueban…”
es decir que por medio de la factura número 5079 y la posesión de la letra de cambio
a mi favor, son suficientes medios de prueba para hacerme titular de ese derecho.
Art. 438 de código de comercio nos establece: “el pago de una letra de cambio
puede ser garantizado por medio de un aval…” es por ello que cuando fue
expresado bueno por aval y aceptado como garante ya se constituye como
responsable solidario. Art. 440 del código de comercio, nos hace referencia que el
avalista se obliga de la misma manera que aquel por el cual se ha constituido
garante. Y por último cito el art. 26 de la Constitución nacional que me da el derecho
de acudir a los órganos que administran justicia para hacer valer mis derechos e
intereses.

CAPITULO III
“PETITORIO”

Por todo lo antes expuesto y con fundamento, acudo a los fines de solicitar nos sea
declarado con lugar la demanda y en consecuencia se nos acuerde:
PRIMERO: Que se declare el pago de la letra de cambio por el monto suscrito por
las partes, en moneda extranjera, específicamente norteamericana, convertida a la
moneda de curso legal, y según la tasa oficial del banco central de Venezuela para
el momento de la demanda es decir, que los (CINCO MIL) 5.000 dólares americanos
establecidos en dicha letra de cambio con una tasa actual de (CUATROCIENTOS
CINCUENTA MIL) 450.000 Bolívares por dólar, daría un total de (DOS MILLARDOS
DOSCIENTOS CINCUENTA MIL MILLONES) 2.250.000.000,00 bolívares y en eso
fundamento mi acción propuesta.
SEGUNDO: Que se declare el pago por los intereses moratorios del 5% por cada
mes que ha transcurrido sin el pago de dicha letra de cambio, es decir
(DOSCIENTOS CINCUENTA) 250 dólares mensuales, por un total de 4 meses
hasta la presente fecha, dando un total de (UN MIL) 1.000 dólares en intereses
moratorios y al cambio de la tasa oficial del banco central de Venezuela, para un
total de (CUATROCIENTOS CINCUENTA MIL MILLONES) 450.000.000,00
Bolívares.
TERCERO: Asimismo solicito se me haga el reconocimiento de los gastos
realizados en el proceso y las costas procesales.
CAPITULO IV
“DE LAS MEDIDAS CAUTELARES”

De lo antes expuesto en dicha demanda solicito ante este tribunal, se me acuerde


la realización de las medidas preventivas, establecidas en el Código de
Procedimiento Civil, en su art. 588 las medidas nominadas como son: el embargo
de bienes muebles del demandado y su garante, por el monto equivalente al doble
de la suma demandada y la prohibición de enajenar y gravar bienes inmuebles de
los antes mencionados. También solicito a esta máxima autoridad que me sea
acordada una medida innominada como es la prohibición de movilización de la
cuenta bancaria, que los demandados tengan en alguna entidad financiera.
Según lo establecido en el art. 585 del Código de Procedimiento Civil, el derecho
que se está exigiendo se ve evidenciado por el incumplimiento de dicha garantía y
con las pruebas fehacientes y con el derecho deducido. Cabe resaltar que al no
decretarse dichas medidas solicitadas, estaría en riesgo el garantizar las resultas
del proceso, ya como lo establece nuestra carta magna en su art. 257 que el proceso
va a constituir un fundamento para la realización de la justicia y la cual no se puede
sacrificar la justicia por omisión de formalidades no esenciales.

CAPITULO V
“DE LA CUANTIA”

La presente demanda fue estimada según la tasa oficial del banco central de
Venezuela para el momento de la demanda es decir, que los 5.000 dólares
establecidos en dicha letra de cambio con una tasa actual de 450.000 Bolívares por
dólar, daría un total de 2.250.000.000,00 bolívares más los intereses moratorios y
al cambio de la tasa oficial del banco central de Venezuela, para un total de
450.000.000,00 Bolívares, lo que equivale a 1.800.000 unidades tributarias según
lo dispuesto en el art.38 del Código de Procedimiento civil.
CAPITULO VI
“DEL DOMICILIO PROCESAL”

Según lo previsto en el art. 174 del Código de Procedimiento Civil, concatenado con
el ordinal 9 del art. 340. Ejusden, constituyo como domicilio procesal la sede del
tribunal.

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