Documenti di Didattica
Documenti di Professioni
Documenti di Cultura
En ambos lados del debate, el juicio de O.J. Simpson se sostiene como el modelo para
determinar si las cámaras deben ser permitidas en las cortes de los Estados Unidos. Los
críticos de las cámaras en la sala del tribunal insisten en que los abogados defensores, los
fiscales e incluso el juez del caso Simpson se vieron envueltos en la publicidad que suscitó
en la televisión el juicio de tal celebridad. La cámara siempre alerta grabó
cada uno de ellos mostrando tiempos a una audiencia mucho más grande que el jurado.
Los críticos también sostienen que los medios de comunicación no están interesados en
educar al público sobre el sistema de justicia, sino sólo en explorar a las personas para
obtener ganancias comerciales.
Las personas que están a favor de las cámaras en la sala del tribunal sostienen que la
difusión de los juicios ayuda a los espectadores a comprender el funcionamiento de los
tribunales y el proceso judicial. Además, el uso de cámaras es un medio eficaz para hacer
más públicos lo que se supone que son los procedimientos públicos.
¿La televisión de los juicios penales ayuda o dificulta la misión de los tribunales, es decir,
proporcionar un juicio justo a los acusados? ¿Interfiere la televisión de los casos judiciales
con el funcionamiento del proceso judicial? Nunca se han dado respuestas indiscutibles a
estas preguntas. Pero una cosa es segura, las cámaras en la sala del tribunal abren una de
las ramas más misteriosas y menos comprendidas del gobierno de los Estados Unidos: El
derecho constitucional a un juicio por pares.