¿Y DEL VALOR AL PRECIO DE UN ÁRBOL?

Dalia Ortega Martínez.

Maestrante en Didáctica de la Ciencias Naturales.
Universidad de Córdoba.

En alguna ocasión escuche una tesis llamativa que dice que los recursos naturales son muy
valiosos, aunque su precio sea bajo; un ejemplo “El agua puede tener un bajo costo, pero
es vital para la vida”. Podemos asumir un valor similar cuando hablamos de los árboles,
frente a un precio por su conservación relativamente bajo en el mercado relacionado con la
poca compresión de las múltiples funciones, servicios y dependencia que tenemos para
vivir hacia los bosques.

Y Porque nuestros árboles son valiosos?. No se puede dudar que los arboles ya sea como
bosques, pequeños o solos…son valiosos, nos brindan sombra, belleza, ayudan a regular el
clima, frutos, aire limpio; asi bien en la ciudad, en el campo o en la selva, brindan servicios
ecosistémico, estéticos, biodiversidad, biofísicos (regulación de temperatura y emisión de
gases), son los proveedores de energía en las redes tróficas, evitan y/o mitigan fenómenos
climático, en fin son vitales, no hay posibilidades de vida para nosotros sin ellos.

Según Del-Campo, 2015, la perdida de los bosque es decir la deforestación consiste en la

destrucción de la superficie forestal principalmente provocada por la acción humana a
causa de: la demanda de madera, la necesidad de nuevas zonas de cultivo pastos y la
constante presión que existe sobre la superficie forestal del Planeta, esto tiene efectos muy
serios y de gran alcance para los seres humanos y el ambiente.

Los mejores estudios indican que la deforestación tiene un impacto negativo sobre el clima
y los ecosistemas: produce menor energía disponible para la biosfera, menor
evapotranspiración, mayor temperatura, menores lluvias, menor escorrentía y con valores
extremos más desfavorables. (Poveda & Mesa, 1995)

Entonces tenemos de un lado el bosque del cual nos servimos y dependemos para vivir,
pero no nos basta con los servicios que nos brinda el bosque, para valorarlos y
conservarlos, sino que cada vez demandamos más de la naturaleza en especial de los
bosques, de los árboles, parece que a nuestro progreso devorara nuestra naturaleza, nuestros
bosques, sin tener en cuenta los efectos y costos de ese impacto en el clima, ecosistemas,
lluvias, etc.

Profundizando en los efectos sobre la temperatura de la deforestación, a medida que se

reduce la cubierta vegetal del planeta, la temperatura superficial de la Tierra va en aumento.
La serie de procesos que hay tras el cambio climático se expresa en un calentamiento global
del planeta. El mecanismo más estudiado y señalado es el que conecta las emisiones de
gases de efecto invernadero con el aumento de la temperatura. Hasta ahora, se veía a los
árboles como cazadores de CO2, que necesitan para vivir. Cada árbol menos, era más
CO2 en la atmósfera. Pero hay otro mecanismo menos estudiado que también ayuda a
enfriar la superficie y es la evapotranspiración vegetal que, como la sudoración en los
humanos, ayuda a reducir el calor.(Criado, 2018)

Además de la evapotranspiración, de los varios mecanismos biofísicos que afectan a la

interacción entre tipo de cubierta vegetal y el clima local, el más importante es el efecto
albedo. Se trata de la capacidad que tiene una superficie de reflejar más o menos radiación
solar, es decir, devolver más o menos calor al espacio. La nieve, por ejemplo, tendría un
albedo muy elevado, cercano al 90% de la radiación incidente, mientras que un bosque
rondaría entre el 8% y el 10%. (Criado, 2018).

Para frenar estos efectos sobre la naturaleza se han diseñado diversas estrategias, desde
educativas como la serie de documentales presentados por Leonardo Di Caprio, Antes de
que sea tarde, hasta la creación de políticas internacionales relacionadas con los convenios
como el de Kioto, firmados por las naciones y que buscan cumplir con los acuerdos
pactados, usando incentivos económicos; pero a pesar de esto la deforestación sigue
creciendo.

Uno de estos incentivos es el pago por emisiones de CO2, Estados Unidos posterior al
Protocolo de Kioto define que disminuir progresivamente un 8% las emisiones de gases
CO2, para alcanzar este objetivo deciden pagar derechos de manteniendo a bosques en
otros países como Colombia, como trampas de captura de CO2.

En Colombia el impuesto nacional al carbono se debe pagar desde el 1 de enero de 2017 y

tiene un valor para este año de 15.000 pesos por cada tonelada de CO2 generada por la
quema de los combustibles. El gas natural también está gravado, pero solo para su uso en
la industria de la refinación de hidrocarburos y la petroquímica. Estas tarifas se ajustarán
cada año de acuerdo con la inflación del año anterior (“Asi funciona el Impuesto Nacional
al Carbono,” 2017).

Sin embargo la efectividad de esta estrategia es nula, cada vez hay más deforestación,
entonces cabe preguntarse ¿Por qué las políticas, no tiene un significativo impacto frente a
la deforestación? ¿Cuál es la responsabilidad de las multinacionales en nuestro país la
disminución del bosque y la expansión de la frontera agrícola? ¿Cómo a afectado la
ilegalidad, la deforestación? ¿Cómo ha afectado el conflicto armado, la conservación de los
bosques?.

Algunas respuestas las podemos hallar relacionando los modelos económicos de

deforestación en este el costo de oportunidad de la tierra determina el uso que se le dará.
(Garcia, 2011). Por ejemplo, a medida que aumenta el tamaño de los centros poblacionales
y su demanda por alimentos, aumenta el costo de oportunidad de los bosques cercanos. Es
más rentable transformarlos para llevar a cabo actividades agrícolas o ganaderas para
provisión familiar, incluso para surtir a las transnacionales, como el caso de la siembra de
palma africana, que mantenerlos en pie

Concluyendo, a pesar de las medidas de gravar por contaminación a las empresas

productoras de gases, que redunda en la protección de los bosques, parece que ese valor
sigue siendo insignificantes para aquellos dedicados a extender la frontera agrícola o
urbana, por necesidad social o empresarial y muchos citadinos consideran que es más
valioso el espacio que ocupa el árbol que el mismo, por lo cual cada vez observamos más
cemento y menos árboles, paradójicamente todos buscamos abrigo, techo, sombra debajo
de un fresco árbol. Entonces el árbol, el bosque si es vital para sostener la vida y el
equilibrio en nuestro planeta, tiene un alto valor, se puede considerar invaluable,
lastimosamente el precio que se ofrece por su conservación sigue siendo inferior al que las
empresas ofrecen por su sobreexplotación o destrucción.

Bibliografía

Asi funciona el Impuesto Nacional al Carbono. (2017). Semana Sostenible.

Criado, A. (2018). La deforestación aumenta el impacto de la radiación solar en la
superficie terrestre. El Pais, p. 1.
Garcia, H. (2011). Deforestación en Colombia: Retos y perspectivas. Retrieved from
https://www.repository.fedesarrollo.org.co/bitstream/handle/11445/337/KAS
SOPLA_Deforestacion en Colombia retos y perspectivas.pdf?
sequence=2&isAllowed=y
Poveda, G., & Mesa, O. J. (1995). EFECTOS HIDROLOGICOS DE LA
DEFORESTACION. Http://Www.Revistas.Unal.Edu.Co/Index.Php/Energetica, 91–
101. Retrieved from http://bdigital.unal.edu.co/53202/1/Energetica 1995 No. 16-
91.pdf