Muy buenos días a todos! Feliz y bendecido sábado!

Soy Redy Portillo,

Anciano de la Iglesia Filadelfia, de Maracaibo, Venezuela; y, en el marco
de un Ayuno Virtual por Venezuela que se realizará este domingo 14 de
junio, he preparado una pequeña serie de devocionales denominado “LA
VERDADERA GLORIA (Parte 1) – UN GENERAL ATRINCHERADO”

Cuyo texto base lo encontramos en Lucas 10:17-20, que dice:

(17) Volvieron los setenta con gozo, diciendo: Señor, aun los demonios
se nos sujetan en tu nombre.
(18) Y les dijo: Yo veía a Satanás caer del cielo como un rayo.
(19) He aquí os doy potestad de hollar serpientes y escorpiones, y
sobre toda fuerza del enemigo, y nada os dañará.
(20) Pero no os regocijéis de que los espíritus se os sujetan, sino
regocijaos de que vuestros nombres están escritos en los cielos.

CONTEXTO: Según Lucas, Jesús ya se encontraba en su último año de

ministerio, y, como el fin del Señor se acercaba, son apresurados los
preparativos para el establecimiento del próximo reino. El Señor realiza el
nombramiento de otros setenta; según algunos eruditos, probablemente con
alusión a los setenta ancianos de Israel sobre quienes descendió el Espíritu en
el desierto (Números 11:24, 25). Lucas menciona esta nueva misión, diferente
de la de los Doce, descrita en el capítulo 9, y fue evidentemente temporal.
Todas las instrucciones están de acuerdo con una misión breve y rápida de
exploración, proyectada para proporcionar una preparación general para los
acontecimientos venideros; mientras que las instrucciones dadas a los Doce,
además de incluir todas las dadas a los Setenta, contemplan efectos mundiales
y permanentes.
Sin embargo, Jesús, al igual que el Padre celestial no hace las cosas a la ligera
sino todo bien calculado y en orden; por ello, antes de enviar a este nuevo
contingente de discípulos a preparar el terreno para que el Salvador siembre la
buena semilla, les capacita para desarrollar esta misión… Lo hace delegando
su autoridad sobre este segundo anillo de discípulos y éstos regresan dando un
parte victorioso. Ante tales noticias, Jesús les indica hacia dónde apuntaban
las implicaciones de esta victoria temprana…

I.- Ese triunfo pequeño que antecede a grandes victorias

Vs.17: (18) Y les dijo: Yo veía a Satanás caer del cielo como un rayo.
- Muchas son las interpretaciones sobre este texto. Sin embargo,
podríamos pensar que ese pequeño e inesperado triunfo, sorprendió a
sus ejecutores y aún, al mismo Satanás.
- Imaginemos el cuadro: El príncipe del mal, acostumbrado a campear, a
dominar y no ser dominado por nadie; acostumbrado a regir pues le fue
entregada; el príncipe de este mundo acostumbrado a gobernar y dirigir
la destrucción de la humanidad, la cual estaba esclavizada a él, de la
cual él era su dueño (por vía del pecado y la muerte); de pronto, se
encuentra que surge un hombre sobre el cual él no tiene ningún poder
de seducción; que no tenía pecado en él, que era absolutamente santo y
no cedía a las tentaciones, pues no tenía la contaminación del pecado en
él; “ese” hombre llamado Jesús, le domina, tiene un conocimiento
formidable de la escritura, tiene una unción espiritual insoportable, y
ninguno de sus subalternos ha podido con él, pues los pone en evidencia
y los saca de los cuerpos donde han habitado por años.
- Pero después de ello, ese hombre intocable, llamado Jesús, le concede
una licencia especial de su poder y autoridad a unos hombres sencillos y
de humilde condición, otros indoctos y sin mayor conocimiento, –
incluso, algunos analfabetas-, pero con determinación y en
representación del reino de los cielos, irrumpen y comienzan también a
golpear con contundencia y estremecer las bases, columnas y dinteles
de su campamento.
- Jesús afirma que él “estaba contemplando a Satanás caer como
relámpago del cielo”; es como si él hubiera afirmado: “Yo os seguía en
vuestra misión, y miraba sus triunfos; mientras os asombrabais de que
se sujetasen a vosotros los demonios en mi nombre, un espectáculo más
grandioso se abría ante mi vista; repentino como un relámpago del
cielo a la tierra: ¡Satanás fue visto cayendo del cielo!”
- Aquellos primeros y débiles triunfos de los Setenta parecen haber
ayudado a Jesús a pronosticar anticipada y vívidamente todo el
resultado final de su misión, sino que lo comprimió en un momento y lo
aceleró con la rapidez del relámpago! En otras palabras, Jesús veía el
triunfo de estos setenta – quienes no habían recibido la llenura del
Espíritu Santo- como algo sintomático de las muchísimas e incontables
victorias sobre Satanás a través del curso de la nueva dispensación,
triunfos logrados a través de la obra de miles de otros creyentes, quienes
luego de Petecostés estarían blindados y respaldados con la presencia
del Espíritu Santo. Jesús estaba viendo lejos hacia el futuro (cf. Mt.
24:14). Vio la derrota final del horrible dragón y de todos sus secuaces.
 - La nota destacada - hablado en el argot del Boxeo- es que el
campeón fue tumbado en la lona en el mismo primer round por el
retador; y, al salir al segundo, el campeón se veía perdido,
desconcertado e inseguro, con las piernas temblando y la guardia baja.
A Satanás se le avecinaba la batalla final y asistía a ella muy diezmado.

Apunta a:
II.- Un decreto firme que garantiza una victoria total
Vs. 19: He aquí os doy potestad de hollar serpientes y escorpiones, y sobre
toda fuerza del enemigo, y nada os dañará.

El Señor está ratificando que él está haciendo una concesión legal de

autoridad que tiene tres aspectos importantes:
1) Vigencia permanente, (“os doy potestad de hollar”, tiempo
presente)
 En otras palabras, cumplirá la promesa de Gn. 3:15.
 No Satanás sino Dios es el vencedor.
 Sometido a Dios, como vencedor, el creyente tiene la
potestad de hollar (pisar, aplastar, humillar y abatir) al
enemigo.
 En cierto sentido puede decirse que Dios está
continuamente aplastando a Satanás, por medio de su
iglesia. La victoria lograda en el Calvario fue por demás
decisiva. No cabe duda, de que el pasaje que nos ocupa
hace referencia a la victoria final, escatológica, de Dios
sobre Satanás, una victoria consumada en la cruz y que
está en trámite para consumarse cuando Cristo regrese con
gloria (2 Ts. 2:8).

2) Alcance (“serpientes, escorpiones y toda fuerza –poder- del

enemigo”)
Algunos estudiosos tratan darle un sentido “figurado” o
simbólico a las palabras de Jesús. Sin embargo, al revisar la
Biblia encontramos que si en otros lugares se llama a Satanás
“dragón” y “serpiente antigua” (Ap. 12:9; 20:2), ¿por qué ha
de considerarse extraño si también aquí en Luc.10:19 al dominio
del príncipe del mal se llama la de serpientes y escorpiones? ¿No
es la intención de Satanás la de envenenar las mentes de los
hombres e impartir el aguijón de la muerte a todos los que se le
oponen?
 3) Promesa trascendente en el tiempo (“nada os dañará”)
- Dañar: maltratar, agraviar o hacer daño a una persona; hacer
injusticia
- Efesios 6:13 dice: “Por tanto, tomad toda la armadura de Dios,
para que podáis resistir en el día malo, y habiendo acabado
todo estar firmes”. OJO: Aquí la palabra resistir no significa
“soportar” sino que implica “‘poner un ejército en formación de
batalla en contra de’, ‘enfrentarse’, ‘oponerse’”.
- Si el creyente está sometido a Dios tiene la victoria asegurada;
Santiago (4:7) dice: “someteos (voz de orden militar, implica
obedecer) pues a Dios, resistid (Idem a Efesios) al diablo y él
huirá de vosotros”.

- EN CONCLUSIÓN: Esta campaña victoriosa de los setenta

podríamos compararla como el llamado Día “D” que le dio un giro
a la 2da Guerra Mundial, cuando en un brusco cambio de estrategia,
160 mil tropas aliadas, encabezadas por EEUU y Gran Bretaña,
cruzaron el canal de la Mancha, entre España e Inglaterra,
desembarcaron inesperadamente en las costas de Normandia (Francia),
y con ello se inició la reconquista de París y de allí al resto de la parte
occidental de Europa. Ese fue el punto de inflexión de la guerra donde
los aliados poco a poco fueron cercando el ejército nazi hasta
atrincherar a Hitler en su búnker donde fue encontrado envenenado
junto a sus secuaces. La mayoría de los expertos militares, cuando se
dieron cuenta del éxito impecable de la operación comenzaron a ver
factible que el fin del terror nazi se acercaba.
- El exitoso regreso de los setenta le permitió visualizar a Jesús que el
cuartel general de Satanás está asediado, y el Reino de Dios viene de
camino. Puede querer decir que Jesús sabía que Satanás y todos sus
poderes habían recibido el golpe de muerte, lo dejaban desconcertado
cual General Atrincherado en su fuerte; quien luego recibiría el
golpe de gracia al producirse la conquista definitiva, en la cruz.

Gloria sea al nombre de Dios!

Querido amigo que me escuchaste, regálame 2 minutos para decirte algo muy
importante: La Biblia nos enseña que Dios NOS ama y tiene un plan
maravilloso para TODA la humanidad; sin embargo, TODOS somos
pecadores y, ese pecado nos separa de Dios. Ante esta situación, Dios proveyó
a su Hijo Jesucristo quien estuvo en esta tierra y caminó entre nosotros, siendo
sacrificado en una cruz por nuestros pecados y los de todo el mundo, para
garantizar nuestro perdón y otorgarnos salvación. Pero esa Salvación sólo se
hace efectiva cuando invitas a Jesús a entrar en tu corazón. No te estoy
hablando de una religión sino de establecer una RELACIÓN PERSONAL con
el Dios vivo. Por ello, si quieres recibir a Jesucristo como Salvador y como
Señor de tu vida, repite conmigo esta oración: Padre celestial, gracias por
tu amor, gracias porque enviaste a tu hijo Jesús a morir por mi en una cruz;
HOY me arrepiento de todos mis pecados y quiero que me perdones; deseo
recibir a tu hijo Jesucristo en mi corazón como Señor y Salvador. Yo creo que
él murió pero resucitó de entre los muertos y viene otra vez. Hoy te recibo por
padre, recíbeme tú por hijo. En el nombre de Jesucristo, tu hijo amado…
Amén!

También quisiera orar por ti amado hermano; SI A LO MEJOR ESTÁS

DEBILITADO EN LA FE, TEMEROSO, CON DUDAS E
INCERTIDUMBRES, TE INVITO A QUE NOS PONGAMOS EN MANOS
DE DIOS Y BUSQUEMOS SU ROSTRO EN ORACIÓN, para que nos cubra
con su manto y nos preserve de todo mal, tak como Él lo ha prometido:
Padre Celestial, gracias por esta palabra hermosa que hemos recibido en esta
oportunidad. Gracias porque…
- Nos amas y estas dispuesto, a sustentarnos y protegernos
- Ayúdanos a conducirnos
- sabiamente y en respeto reverencial mientras estamos en esta tierra
- Guárdanos de caer o de debilitarnos en la fe, y si caemos, levantanos
- Danos sabiduría para tomar decisiones correctas
- Guárdanos de todo mal y del malo.
En el nombre de Jesús, Amén!

APRECIADO AMIGO O HERMANO… Si tienes alguna inquietud, o un

motivo de oración, escríbeme a mi correo redyportillo@gmail.com y con
gusto te responderé o estaré orando por ti… Dios te bendiga!