SEGURIDAD ALIMENTICIA Y FINANCIAMIENTO PARA LA RENTABILIDAD

RURAL A PARTIR DEL BUEN USO DEL RECURSO

SERGIO GUSTAVO HERNANDEZ ARANGO
PROGRAMA DE ECOLOGIA
PRIMER SEMESTRE
La seguridad alimentaria consta de: las personas tengan acceso y disponibilidad
en todo momento de los alimentos necesarios para llevar una vida saludable; las
actividades de financiamiento por parte de empresas y cooperativas se brindan a
las familias del sector rural, para que, a partir de prácticas agrícolas en su terreno,
desarrollen una producción constante y un medio de vida, mientras se fortalece la
rentabilidad ambiental a través de buen uso del terreno y el recurso hídrico.
Es decir, se incentiva a la formalización de sistemas de producción y equipamiento
agrario en el territorio rural, permitiendo la rentabilidad y un flujo continuo de
alimento en todo el territorio. A través de este proceso se fortalece la perspectiva
ecológica del recurso.
Los planes de financiamiento ante todo garantizan la producción a cortos y largos
plazos, para estructurar la producción agrícola, de tal manera que se enfoque en
la preservación del ambiente y actividades amigables con el terreno. Asimismo, el
financiamiento abre espacios de educación, charlas, practicas y talleres de
habilitación para las personas del sector rural con pocos recursos, para que poco
a poco vayan avanzando en el conocimiento y así conformar instituciones para la
inversión en procesos agroecológicos.
El financiamiento de las instituciones parte del buen manejo de los recursos
ambientales, propone un plan de acción en el que el campesinado desarrolle
actividades agrícolas para el restablecimiento de la función ecológica del suelo, el
sustento alimentario y económico.
Las empresas aportan a las familias del campo inversiones, planes de manejo y
proyectos, que buscan la producción de alimento sostenible, logrando un buen
desarrollo y crecimiento del sector rural. Es esperado y observado un
aprovechamiento de los recursos estipulados, propiciando el mantenimiento de las
áreas naturales y brindando una protección a las mismas.
Los proyectos acogidos por el sector rural incrementan los beneficios y soluciones
que se le dan a la falta de producción y alimento en las regiones de dificultad de
acceso en el territorio, este proceso de cultivación y desarrollo de actividades
agrícolas con bases ecológicas propicia la seguridad alimentaria y brinda un
mayor beneficio al sector rural, ya que se dificulta el ingreso de dinero.
La comunidad presenta disgusto ante las actividades forestales por las excesivas
cantidades del recurso que gastan, tanto hídrico como nutrientes del suelo, ante
esto los planes de manejo son implementan por el campesinado, agencias,
consultorías o instituciones ambientales para la regulación de los puntos negativos
y desventajas que provocan las plantaciones forestales en el territorio.
Sobre todo, para contrarrestar estos procesos se desarrolló el Manejo Forestal
Sostenible, con un balance Económico-Social-Ambiental, este brinda certificación
a las empresas y productores forestales, con el compromiso de llevar a cabo
actividades y procesos que no afecten la composición del suelo ni el recurso
hídrico.
Finalmente, la planificación es clave en el momento de establecer prácticas de
producción agrícola, ya que se debe tener en cuenta las normativas y leyes que se
han ligado a la conservación de una distancia prudente de las fluentes hídricas.
Esto propone ciclos productivos y planes que prioricen los valores de conservación
ambiental. La planificación de las áreas rurales y proyectos agrícolas es la clave
para obtener los mejores beneficios de los cultivos respecto al recurso hídrico. Las
plantaciones no afectan el recurso del terreno, con una combinación de distintas
especies y recolección a diferentes temporadas, para favorecer también la
regulación hidrológica y uso adecuado del terreno.