En el proceso de Divorcio por causal de hecho, el demandado Miguel Rivera
Mamani, interpuso el recurso de casación, emitida por la Sala Transitoria de la Corte Superior de Justicia de Tacna, que declaro fundada la demanda, en consecuencia, la disolución del matrimonio civil, fenecido el Régimen Patrimonial de Sociedad de Gananciales e improcedente el extremo respecto a la pensión alimenticia a favor de la demandante, infundados los extremos de perdida de Gananciales e Indemnización por Daños y Perjuicios.
En los antecedentes podemos observar que la demanda de Paulina Clares de
Rivera contra Miguel Rivera Mamani presentando los fundamentos en los que se explica que el demandante la arrojo del inmueble donde vivía, inmueble en el que ahora el demandado vive con su amante, la demandante explica que su ingreso a su vivienda le es impedido por que el demandado cambió las chapas del inmueble ocasionando que la Demandante tenga que vivir lejos, esto sumado a una falta de aporte económico para que la Demandante que cuenta con 70 años pueda cubrir sus necesidades alimentarias, ya que se encuentra delicada de salud. Con todos estos fundamentos la Demandante exige que se le indemnice los daños que ocasiono su matrimonio y los maltratos de los que fue expuesta
Contestación de la Demanda:
El demandado contesto la demanda negándola en sus extremos argumentando
que se hizo un inventario de bienes ante un notario público, en la que adquirieron dos bienes qué, al separarse por mutuo acuerdo, se dividieron los inmuebles, el demandado se enteró que la demandante donó el inmueble a su hija Fresia Carmen Rivera Clares, esto sumado a que afirma que la Demandante tiene una pensión judicial de alimentos de ciento treinta soles mensuales
Sentencia de Primera instancia:
Se llega a la conclusión que efectivamente ambos cónyuges se hallan
separados desde el año dos mil trece, en la que se le interpuso la demanda por alimentos a Miguel Rivera Mamani, por lo que se cumple con el primer requisito, por tanto se tiene que la separación de hecho ha excedido el plazo legal requerido, con esto se llega a la conclusión que existe un desamparado económico, que no se tiene certeza de la existencia de un cónyuge más perjudicado, por tanto la indemnización solicitada no resulta amparable.
Resolución de Segunda instancia:
Respecto a la existencia de un cónyuge más perjudicado, la parte demandante no ha probado su pretensión, caso contrario a las declaraciones de sus hijas de la Demandante.
Susana, Julia, Carla Rivera Clares se refieren a la conducta de su madre como,
agresiva y con problema psiquiátricos, celos enfermizos, incluso que amenazó al demandado con echarle gasolina y quemarlo, esto genera que la demandante no tenga condición de cónyuge más perjudicado
Recurso de Casación:
El veintitrés de diciembre de dos mil quince, el demandado interpuso el recurso
de casación, siendo declarado procedente, en el que sostiene aue los dos bienes fueron adquiridos durante el matrimonio y que los medios probatorios acreditan dicha situación
Fundado:
El recurso de casación interpuesto por el demandado, casaron la resolución
impugnada en consecuencia, nula la sentencia emitida por la Sala Civil Transitoria de la Corte Superior de Justicia de Tacna.
Critica:
En mi opinión, la actitud de la demandante y sus constantes contradicciones,
dieron como resultado que la sentencia resultara a favor del Demandado que, en todo momento estuvo negando y contra argumentando todos los fundamentos de la demanda que se le imponía, como la reparación por daños y perjuicios, la supuesta inexistencia de una pensión de alimentos, esto generando una completa exposición a todos los argumentos erróneos que daba a conocer la demandante.