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A ctualmente nos encontramos en una pandemia, donde

N o debemos tener contacto físico con la gente

D el exterior porque podríamos adquirir un posible contagio. Esto es lo

R ecomendado por el ministerio de salud, para así

E vitar una tragedia que no solo afecta a la población colombiana,

S ino también a nuestros seres queridos.

F acilmente esta situación, también impacta de manera directa en la

E conomía del país, ya que pocas son las personas que

L aboran, por esto nos encontramos a vísperas de entrar en una depresión económica llena de

I ncertidumbres para los ciudadanos. En estas circunstancias se deben ejecutar

P lanes de contingencia que resulten eficaces y

E ficientes para mitigar el impacto de esta crisis.

M uchas son las indicaciones que brindan para evitar los efectos de la pandemia, pero

O bviamente siempre existen falencias, por lo que es una situación en la que todos somos

R esponsables y participes. Claramente debemos obedecer y

A catar las medidas establecidas por el gobierno, para no

L legar a situaciones deprobables, tanto en nuestra salud como en la

E conomía del país, y para ello debemos esforzarnos

S ignificativamente para salir juntos de esta situación.


Los problemas contables de las sociedades cooperativas

Carlos Gómez Salas

El Reglamento de Cooperativas abre su articulado conceptuando a éstas como « ... aquella


sociedad que ... realiza en régimen de empresa en común, cualquier actividad económico-
social para la actuación y equitativa ayuda entre sus miembros y al servicio de éstos y de la
comunidad». El propio reglamento indica ya de partida, que la Cooperativa es una Sociedad,
pero eso sí, es una sociedad un tanto especial, en la que concurren características propias de
las sociedades mercantiles, y características propias de los núcleos societarios sociales. Así por
ejemplo, si, al igual ·que las sociedades mercantiles, su objeto es el desarrollo de una actividad
económica, su fin es radicalmente distinto, ya que, en contra de la consecución de un
beneficio, lo que pretende es la «ayuda de sus miembros».

Por otro lado, su consideración como sociedad mercantil, no parece del todo evidente, si por
tal entendemos aquella en la que concurren las características de: a) Asociación voluntaria de
personas, b) Contribución de estas personas a la formación o constitución de un fondo
patrimonial, e) Unión de los socios para colaborar en la explotación de una empresa y d)
Animo de obtener un beneficio individual, participando en el reparto de las ganancias
obtenidas. La sociedad cooperativa nunca participará de la última característica, que es el
ánimo de obtener un beneficio -tal vez, la más importante de las que coinciden en las
sociedades mercantiles- ya que por definición, las cooperativas, no practican la economía de
lucro, aunque realizan actividad económica.

"El beneficio que se puede alcanzar en la cooperativa, no es un beneficio de empresa, sino de


los socios; y, éste les revierte en parte, por medio de los retornos, y, en parte, sirve para la
prestación de servicios sociales a los mismos. Los dividendos, retribución al capital en las
sociedades mercantiles, no son equiparables a los retornos de las cooperativas, ya que, la
distribución de estos últimos, no se hace en función de la aportación al capital social, sino de
las operaciones o actividades prestadas por los socios.

La sociedad cooperativa es, entonces, una sociedad que participa del objeto de las mercantiles
y de la mayoría de sus características pero, es también un modo especial de desarrollar una
actividad económica; es decir, es una empresa -de la que es titular y cuya organización está
dirigida a fines netamente económicos- y, como tal, en la misma se combinan los factores de
producción, capital y trabajo, para la obtención de bienes y servicios, bajo una determinada
tecnología, pero en la que prevalece el factor trabajo; el factor humano sobre el resto de los
factores. La Cooperativa es ante todo una sociedad de personas.

Resumiendo, la cooperativa es una sociedad cuasi-mercantil y, es una empresa en la que se


combinan los factores de producción y se soporta el riesgo, propio de toda actividad
económica, en una economía de mercado. Pero, es además, una sociedad en que, el modo de
actividad, se identifica con la prestación de servicios sociales y, donde, la ayuda mutua, es un
rasgo esencial.

PREGUNTA ÚNICA DE COMUNICACIÓN ESCRITA

A su juicio cuales serían las formas o métodos necesarios para que una sociedad en
cooperativas puedan convertirse en una empresa sostenible a través de las finanzas
contables? Qué elementos usarías para justificar o no el factor de producción basado en la
prestación de servicios sociales? Sería rentable una sociedad de este tipo?
Las cooperativas, o como bien se conocen, “empresa de personas”, son en la actualidad una
opción para emprender, pero con la finalidad de brindar ayudas. Para que una empresa de
esta modalidad pueda convertirse en una empresa sostenible debe de enfocarse en su punto
principal, el factor trabajo.

Ciertamente, la mayoría de las empresas no se preocupan mucho por el factor trabajo como lo
hacen las cooperativas, sino por el factor de capital.

Estas sociedades, claramente son una fuente para obtener ganancias, pero ese aspecto no es
primordial para este tipo de negocios. En este tipo de empresas lo primordial es la prestación
de servicios sociales, y es el factor de producción de las mismas, y el propósito de estas, es
ofrecer ayudas a la sociedad, ayudas mutuas, y esto es lo justifica al factor de producción de
estas.

Los negocios mercantiles hoy en día, se preocupan principalmente por obtener alguna
ganancia económica, mientras que esta forma de negocios, busca un beneficio de personas,
por lo que generaría, no solo el prestigio y una buena imagen, sino también la captación de
ingresos, por tanto, haría rentable a este modelo de negocios.

Estas empresas, de cierta forma son rentables, no solo por la prestación de servicios sociales o
por la búsqueda de beneficios de socios, sino también para el sector en que laboran, la
ubicación y la comunidad a la que ofrecen su ayuda.

Para concluir, las cooperativas son una muy buena opción de emprender un negocio, a pesar
de que su fin no es el de percibir ingresos, necesitan de estos para subsistir, sin embargo, por
los servicios y ayudas que ofrecen, pueden mantenerse en el mercado laboral, así,
convirtiéndose en empresas sostenibles.

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