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 En relación a la deducción de gastos en las rentas de Tercera Categoría por un servicio

de Auditoria Financiera del ejercicio 2015, realizado en favor de la empresa AUDITADA


S.A. al respecto, se sabe lo siguiente:
 El servicio de auditoría financiera se inició en el 2016.
 A mediados del 2016 se facturo y pagó el 50% de la operación; el otro 50 % se
facturó y pago en julio de 2017.
Teniendo en cuenta lo señalado, se consulta lo siguiente:

1. ¿En qué ejercicio se debe reconocer el gasto?


 ANÁLISIS:
1. Al respecto, es conveniente citar lo señalado en la Resolución del Tribunal Fiscal
N° 18763-1-2011, que señala:
El servicio de auditoria se podrá deducir cuando sus resultados puedan ser consumidos o
utilizados, en el ejercicio en que el mismo se termine de prestar.

2. Por otro lado, la conclusión del Informe N° 005-2017/SUNAT, señala lo siguiente:


Son deducibles los gastos conocidos y devengados en el ejercicio de que se trate, aun
cuando los comprobantes de pago que los sustentan fueron emitidos y/o entregados
después del cierre del ejercicio, pero hasta la fecha de presentación de la correspondiente
declaración jurada anual de dicho impuesto que los incluye.

3. De la lectura del Informe de SUNAT se tiene que el gasto de auditoría tributaria


culminado en el ejercicio 2016, se podría haber reconocido en el ejercicio 2016
siempre que el comprobante se hubiera emitido antes del vencimiento de la
Declaración Jurada Anual del 2016.
4. Sin embargo, como el comprobante de pago se emitió en julio de 2017, se debe
reconocer en el ejercicio de 2017, siempre que hubiera sido provisionado en el 2016.
5. Sin embargo, habida cuenta que no se ha provisionado en el ejercicio 2016; se
tendría que contractualmente (devengado jurídico) establecer que el servicio de
auditoría financiera se entregará en el 2017, y el informe final o el resultado de la
auditoria debe emitirse en el 2017 a fin de que se reconozca el gasto en el 2017; de
esta manera se seguirá el criterio establecido por el Tribunal Fiscal en la Resolución
N° 18763-1-2011.
CONCLUSIÓN:
Para reconocer el gasto en el ejercicio 2017, se tendría que contractualmente (devengado
jurídico) establecer que el servicio de auditoría financiera se entregará en el 2017, y el
informe final o el resultado de la auditoria debe emitirse en el 2017 a fin de que se
reconozca el gasto en el 2017; de esta manera se seguirá el criterio establecido por el
Tribunal Fiscal en la Resolución N° 18763-1-2011.
La empresa Prisma S.A. se dedica a la fabricación y venta licor de café, tiene
doce años en el mercado y es relativamente conocida en Lima y provincias.
Con fecha 29-08-2020 recibe una comunicación del sr. Fortunato Carozzi
(millonario ciudadano italiano) que tiene la intención de adquirir el 40% de las
acciones de la empresa. Para esto el Sr. Carozzi solicita los Estados
Financieros cerrados al 31-12-2019 pero que estén auditados por una sociedad
de su elección. Indica que la encargada de hacer la auditoria será BBO
Consultores S.A.C. y que luego de analizar esa información enviará su
propuesta formal indicando el precio ofertado.

La empresa Prisma S.A. toma contacto con BBO Consultores para que realicen
la auditoria, por dicho servicio cancela el importe de S/ 20,000 (más IGV).

Respecto de esta pago por la auditoria ¿Es gasto deducible para la empresa
Prisma?. Si tiene que asumir alguna situación para su análisis, consígnelo por
escrito en su examen. Sustentar su respuesta con argumentos y la base legal
respectiva.

IMPUESTO A LA RENTA
Devengado en los servicios de auditoría
RTF Nº 11362-1-2011 / 05.07.2011
El contribuyente sostiene que los gastos de auditoría se devengaron en el ejercicio 2003 y
por lo tanto deben aceptarse como gasto deducible de dicho ejercicio, pues si bien con la
emisión del dictamen de auditoría se cumple con la finalidad del servicio, ello no genera la
obligación del pago de la contraprestación, pues esta obligación nació con la celebración del
contrato. Agrega que la obligación de pago no está sujeta a la obtención de los beneficios
del servicio sino que se genera con la suscripción del contrato, lo cual se produjo en el año
2003.
La Administración Tributaria señala que para determinar la oportunidad de su deducción
resulta indispensable establecer la oportunidad de su utilización o provecho, ello porque de
conformidad con el inciso a) del artículo 57° de la Ley del Impuesto a la Renta estos se
imputan en el ejercicio en el que se devengan.
El Tribunal Fiscal indica que los servicios de auditoría, de acuerdo a su naturaleza, se
encuentran supeditados a un resultado, el mismo que se verificará cuando se presente el
informe correspondiente al trabajo de auditoría realizado, el que, a su vez, permitirá a la
empresa cumplir con diversas finalidades.
Agrega que si bien el servicio de auditoría de los estados financieros del ejercicio 2003 se
habría iniciado en dicho año, el referido servicio, dada su naturaleza, solo pudo ser
culminado luego del cierre del ejercicio 2003, esto es, por lo menos, en el ejercicio 2004, por
lo que recién en este último ejercicio el contribuyente podía emplearlo para sus fines, de ser
el caso.
En tal sentido, concluye que en aplicación del principio del Devengado, no procedía su
deducción en el 2003, en consecuencia, corresponde confirmar el reparo por gastos de
auditoría no devengados.

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