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Estudiante: Nicolás Antolínez Parrado

Curso: Historia de Colombia V

Kalmanovitz, Salomón (2017), “De recesiones y auges: Colombia entre 1990 y 2008”,
en “Nueva historia económica de Colombia”, Bogotá, D.C: Taurus. Universidad Jorge
Tadeo Lozano, 325-344.
Salomón Kalmanovitz1 nos presenta en este texto un estudio del comportamiento
económico del país entre los años 1990 y 2008, con relación al comportamiento de la
economía mundial entre las mismas fechas, dejando en claro la aparente incapacidad del
Estado colombiano para aprovechar los periodos de auges económicos desde la apertura al
mercado en los 90, para preparar al país para las futuras recesiones (que terminaron por
ocurrir en los años 1998 y 2008). En esa medida, el texto se comporta como una crítica
directa a las políticas económicas de los gobiernos que desaprovecharon los momentos de
bonanza de la historia reciente; al mismo tiempo, de forma igual de explicita, es una crítica
a las formas de gobierno que se desarrollaron durante el periodo de 1998 al 2008, que sin
importar tendencias ideológicas, Kalmanovitz define como “cesarismo democrático”.
El autor empieza por explicar las causas y el comportamiento de la crisis que estalló en
1998. Esta, nos dice, empezó con la caída en el sistema financiero del sudeste asiático y la
moratoria en el pago de la deuda externa de Rusia, como resultado los mercados de los
países emergentes, proveedores de materias primas, se vieron afectados. Esta se caracterizó
por ser una crisis de las periferias y zonas medias del mundo, los países centrales no se
vieron del mismo modo afectados. En el caso de América Latina, la contracción económica
se sintió de forma fuerte, llegando en algunos casos a alcanzar el 5%, como resultado de la
huida de capitales, que en últimos (como en el caso colombiano) eran los encargados de
palear la deuda.
Una crisis de este estilo pudo de alguna manera favorecer la aparición de regímenes como
los denominados por Kalmanovitz como “cesarismo democrático” como el chavismo en
Venezuela o Correa en Ecuador, ante la ausencia de opciones reales al modelo liberal de

1
Kalmanovitz es un economista y filósofo colombiano. Realizó sus estudios en la Universidad de New
Hampshire y el New School for Social Research de Nueva York. Se ha desempeñado como profesor e
investigador en la Universidad de Harvard, la Universidad de Sussex, la Universidad Nacional de Colombia, la
Universidad de los Andes y la Universidad Jorge Tadeo Lozano; también ha trabajado con el Departamento
Administrativo Nacional de Estadística y la Contraloría General.
desarrollo. Esta crisis, sin embargo, nos dice Kalmanovitz, podía ser previsible. Al
momento de la apertura al mercado mundial, que coincidió con el hallazgo de nuevos pozos
petroleros que atrajeron la inversión e impulsaron la economía, hubo un gran crecimiento
que permitió el endeudamiento del país, sin embargo, más temprano que tarde la economía
empezó a desacelerarse y a presentar caídas sensibles; frente a esto el gobierno colombiano
optó por continuar con políticas prociclicas, que según el autor terminaron por ahondar la
crisis; caso diferente fue el de Chile, que optando por el camino opuesto consiguió usar el
ahorro de la bonanza para las inversiones públicas y pagar deuda, dándose una contracción
menor, llegando incluso a tener la posibilidad de invertir en otros países.
El resultado de la decisión en Colombia fueron grandes despidos, una reducción en la
demanda laboral y la reducción de los salarios reales en sectores de la economía nacional,
la inflación afectó principalmente a los pensionados y los bancos (tanto públicos como
privados) fueron salvados por el Estado. La salida tortuosa de la crisis se dio finalmente en
el 2002, al tiempo que el país afrontaba un recrudecimiento de la violencia, se refinanció la
deuda con el FMI, se optó por la reducción del gasto público y hubo un aumento en la
demanda de materias primas por parte de los países del sudeste asiático. Esto se vio
favorecido por el ascenso del Álvaro Uribe al poder, pues su discurso de confrontación
directa con los grupos armados recuperó parte de la confianza en las inversiones en el país,
al tiempo que la mejoría en los aspectos de seguridad facilitó el ahorro y las inversiones
nacionales.
Esta nueva bonanza, sin embargo, siguió siendo utilizada como hasta ahora, se regresó el
dinero a los inversores privados por medio de exenciones y liberalización, al tiempo que el
aumento del gasto público con fines políticos y de seguridad seguía creciendo, llegando a
representar hasta un 10% del PIB. Al final de la era Uribe ya estaba gestándose una nueva
recesión, empeorada por la inflación y las privatizaciones de empresas públicas. Cuando a
finales de 2007 y comienzos de 2008 empezó a darse la recesión en EEUU, que como en
1929 iba a afectar a todo el mundo, incluyendo los países del centro mundial, el panorama
no podía ser muy diferente para Colombia, que no tenía a quién vender materias primas en
el exterior, ni tampoco cómo financiar el mercado interno
El trabajo de Salomón Kalmanovitz es bastante ilustrativo sobre el comportamiento
económico del país en la historia reciente. Es puntual en las políticas que han impedido un
crecimiento sostenido y confiable, y en últimas cumple su papel crítico al advertir sobre las
consecuencias negativas de tener regímenes políticos semidictatoriales, cualquiera sea su
ideología, que no sepan manejar los tiempos de bonanza con previsión a las épocas de
recesión. Podría, tal vez, incluso pensarse que es un llamada del autor a pensar nuevos
modelos de desarrollo, que a diferencia del liberal, contemplen alternativas a las crisis
cíclicas del capitalismo.

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