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UNIVERSIDAD NACIONAL DE CAJAMARCA

ALUMNO: CHAVARRI VASQUEZ EINER E

CICLO: III

FACULTAD: DERECHO Y CIENCIAS POLITICAS

HISTORIA UNIVERSAL DEL DERECHO

 DERECHO ANTIGUO

El hombre primitivo se desarrollo en tres campos: cuerpo, inteligencia y organización social. De las


primeras dos facetas conservamos pruebas "tangibles" en su mayoría de cómo se desarrollaron, sin
embargo, de la tercera sólo puede hacerse un análisis de modo indirecto, realizándolo por medio de
analogías, observando lo que sucede en los modernos grupos primitivos y
entre animales evolucionados.

Los primeros aspectos jurídicos de la vida primitiva son los referentes a las costumbres
relacionadas con la convivencia sexual y ligadas a ella con la jerarquía dentro del grupo de los que
conviven sedentariamente o que forman parte del mismo grupo nómada. Ya que los homínidos
comienzan su existencia con un prolongado período de ayuda y protección, esto crea una relación
"social" entre la madre y los hijos, surge así alrededor de la madre un grupo social jerarquizado.

La transición hacia la agricultura, esto es, hacia el sedentarismo, obliga al hombre primitivo a formar
comunidades en las que la ayuda mutua permite vencer la resistencia de la naturaleza es así como
surgen las ideas jurídicas de propiedad y posesión. Al paso del tiempo las comunidades primitivas
se convierten en países, y de las luchas de los diversos países surgen esclavos y amos, esto es: la
estratificación social, al mismo tiempo que el "derecho internacional".

Las antiguas aldeas, ahora grandes ciudades se ven obligadas a diversificar su producción para
competir en un mundo primitivamente capitalista, lo que permite una división del trabajo y por tanto
propicia el surgimiento del comercio, y es aquí al fin donde encontramos los
primeros documentos jurídicos, escritos en alfabeto cuneiforme que tratan sobre dichas actividades
lucrativas.
Pero tal vez, lo que realmente marca a la historia del Derecho, es el momento es que se busca
mantener un documento de forma permanente, grabándolo en materiales que resistan con facilidad
el paso de los años.

Es tal vez el código de Hamurabi el más famoso de los que se conoce en la actualidad, sin ser el
primero, ya que los sumerios han dejado huella profunda, aunque escasa, de su sistema de
derecho.

Parecería maravilloso el legado jurídico de este documento, sin embargo, al compararlo con los
pocos documentos de este tipo que se poseen de los sumerios sólo nos demuestra que es un
código mal sistematizado que marca un retroceso en el ejercicio del Derecho, ya que los sumerios
manejaban ya en sus textos la reparación del daño, elemento que desaparece en el código de
Hamurabi.

Y de aquí en adelante podríamos adentrarnos en múltiples comentarios sobre los sistemas legales
que imperaron en el mundo antiguo, podríamos analizar al derecho egipcio, cuya cúspide jurídica
era la cúspide administrativa o al derecho hitita que se maneja por normas aisladas o tal vez al
derecho hebreo, fantástico por la simbiosis que se produce entre su religión y su Ley.

O ¿por qué no? Revisar el derecho de los olmecas, teocrático y donde la mujer no gozaba de
ningún status, o el derecho maya que jugaba a la cuerda floja entre el perdón del ofendido o la ley
del talión, o el rarísimo derecho chichimeca, de triunviratos y residencias matrilocales, o el derecho
azteca, que se alimentó de la sabiduría tolteca y donde la posesión de la tierra, las clases sociales,
y por supuesto la familia, estaban perfectamente regulados. Si no, finalmente hundirnos en el
derecho español híbrido de derecho romano y derecho canónico que se deformo en México porque
tuvo que adaptarse a las costumbres del país.

 HISTORIA DEL DERECHO PERUANO

Sin historia no hay patria. La Nación requiere de la patria y la historia para forjar un Estado
sólido con amor y desprendimiento de sus ciudadanos.

El derecho establece los principios y las normas jurídicas fundamentales para que el Estado-
Nación ofrezca seguridad, bienestar, desarrollo y justicia al pueblo en general. De ahí que el
derecho es cambiante, pero dentro de un marco de estabilidad y seguridad jurídicas,
respetando los derechos adquiridos, máxime los humanos, en los campos civil, político,
económico, social y cultural.

En efecto, el derecho romano fue la más alta expresión jurídica de la antigüedad occidental;
mientras que, en el siglo XVI, los pueblos americanos sólo habían logrado un derecho incipiente
o primitivo, mejor aún, un pre derecho. En éste, las normas consuetudinarias se encontraban
mezcladas con costumbres de carácter moral, de organización política, económica y social. Fue,
por ejemplo, el caso de los incas con los mores, al decir del ilustre jurista, historiador y maestro
Juan Vicente Ugarte del Pino.

En este orden de ideas y para su mejor estudio, la historia del derecho peruano ha sido dividida
en: 1) Derecho primitivo; 2) Derecho indiano y 3) Derecho republicano.

EL DERECHO PRIMITIVO

En verdad, no podemos afirmar que en el Estado inca hubo derecho, propiamente dicho. El
Tahuantinsuyo estaba en proceso de extensión, consolidación y perfeccionamiento cuando
recibió el choque de la conquista e imposición de la civilización occidental. Los quechuas
aparecieron más o menos a fines del siglo XIII y fueron dominados en 1532. De un lado, sus
normas de organización política, económica y social estaban mezcladas con costumbres
morales y religiosas; y, de otro lado, ellas no fueron impuestas a rajatabla –como antes se
creía-, porque la expansión incaica no fue producto exclusivo de la conquista, sino,
principalmente, de negociaciones basadas en la reciprocidad, redistribución de excedentes,
enseñanza del cultivo bajo el sistema de la producción vertical, uso racional de los ecosistemas
o microclimas.Y, por último, en base a la reciprocidad, respetaron o incorporaron determinadas
costumbres de las etnias anexadas o aliadas, siempre y cuando no dificultaran la integración del
incario, la misma que aún no habían logrado.

Sin perjuicio de lo anteriormente anotado, podemos afirmar, con propiedad, que el Estado inca
recién estaba generando sus propias normas jurídicas, las mismas que constituían un
prederecho. El fundamento de éste era, justamente, las bases normativas de su expansión,
desarrollo y consolidación. Fundamentos creados por los arquetipos jurídicos: Manco Cápac y
Pachacútec, con formas de trabajo como el ayni, la mita y la minka, la posesión y propiedad
discontinua de la tierra, la autarquía de los ayllus, autoridad y responsabilidad del kuraka, los
mores y tabúes como normativa penal, el servinakuy, etc., todos ellos como mecanismos de
control social, pero de ninguna manera como derecho. En consecuencia, los incas estaban en
camino de tener su derecho, como lo habían logrado, primero, los mesopotámicos y, después,
los romanos. Esto, en virtud de que los pueblos generan su propio derecho.

Son los aportes de John Víctor Murra, Giorgio Alberti, Enrique Mayer, Natham Wachtel,María
Rostworowski de Diez Canseco y Franklin Pease García-Yrigoyen, entre otros.

La afirmación de la existencia del derecho incaico la tomó de los cronistas el primer profesor de
Historia del derecho peruano Román Alzamora, quien escribió un texto de cátedra sobre el
particular (1876). Esos apuntes más alguna literatura más histórica que jurídica fue
sistematizada por Jorge Basadre Grohmann, en 1937, en su libro Historia del Derecho Peruano.
Para entonces, sólo se conocía la historia romántica y occidentalizada del Imperio de los Incas.
Ella fue escrita a partir de las crónicas, como la de Pedro Pizarro, Sarmiento de Gamboa,
Bernabé Cobo, y, principalmente, la del Inca Garcilaso de la Vega y Guamán Poma de Ayala,
entre otros. Y, más aún, constituyeron la fuente fundamental de Basadre y otros historiadores
del derecho peruano que siguieron su escuela.Además, dicho sea de paso, la Historia del
Derecho Peruano fue escrita con un marcado espíritu historicista y etnocentrista jurídicos,
imperantes en la época y, especialmente, adoptados por Basadre durante su estancia en
Alemania, donde triunfante crecía como la espuma el pangermanismo nazi, producto de esas
corrientes.

Algunos historiadores del derecho peruano llaman a este prederecho derecho prehispánico,
para referirse al sistema jurídico aborigen anterior a la conquista española. Esta denominación
fue cuestionada por el jurista, filósofo e historiador Fernando de Trazegnies Granda, quien
cuestionó la existencia del derecho prehispánico. Tituló a su artículo con la interrogante ¿Hay
un Derecho prehispánico? Concluyó afirmando que “el derecho es un producto específico de
una determinada historia: la historia del mundo occidental”. Y agregó que más académico y
científico, sería no hablar de derecho, sino de “formas de regulación social diferentes del
Derecho, pero extraordinariamente efectivas” (Revista Ius et Veritas, Año III, N° 4, Lima, pp. 44-
48). Sea dicho de paso, De Trazegnies es fundador del Instituto Peruano de Historia del
Derecho, entidad diferente a la creada por Ugarte del Pino.

Frente a esta afirmación, el no menos ilustre historiador y jurista Jorge Basadre Ayulo le
contestó que:“De ser así, entonces, no se habría registrado en la historia de la humanidad el
derecho gestado en el mundo no occidental, como es el caso, por ejemplo, del pueblo
mesopotámico con su código de Hammurabi”.

EL DERECHO INDIANO

El derecho indiano o de Indias tomó esta denominación como consecuencia de la creencia


original de que Cristóbal Colón había llegado a las Indias Occidentales. No hubo idea alguna de
que había descubierto un nuevo continente como se comprobaría más tarde, otorgándosele el
nombre de América. En consecuencia, el homenaje se le rindió al cartógrafo italiano Américo
Vespucio, mientras que Colón sufrió las injusticias del rey católico Fernando VII, quien fue
demandado por el hijo del almirante a la muerte de su padre en 1506. Después de muchos años
de litigio, el nieto –Luis Colón–, ganó el proceso arbitral en 1536 y le fueron restituidos todos los
derechos otorgados en el “contrato” conocido como la Capitulación de Santa Fe de 1492.

¿Qué es el derecho indiano? Es la suma del derecho castellano (derecho del pueblo
conquistador) con las instituciones y costumbres indígenas que no se opusieran o estuvieran en
contradicción con la religión cristiano-católica, contra las costumbres castellanas y, máxime,
contra el sistema jurídico peninsular. Esta conjunción gestó un nuevo derecho que fue
bautizado con el nombre de Derecho Indiano.

En efecto, por ejemplo, la mita –sistema económico y social de trabajo del Tahuantinsuyu– fue
inmediatamente absorbido por los conquistadores porque además de lo apuntado convenía
sobremanera al pujante Imperio Español. Contrariamente, se prohibió y castigó el servinacuy
por contravenir a la moral y a las costumbres occidentales y, principalmente, a la religión
cristiana que había instituido el matrimonio formal como la única vía digna y ejemplar de la
unión de un hombre y una mujer. La relación extramatrimonial de prueba de los pueblos
indígenas fue considerada inmoral por los hispanos.

El derecho indiano ha sido harto tratado por notables historiadores y juristas tanto nacionales
como extranjeros. En cuanto a los primeros, sin duda alguna, reviste especial importancia el
trabajo de Basadre. Su magistral obra Los fundamentos de la Historia del Derecho (Lima, 1967),
según Lewis Hanke “el derecho indiano lo trata en forma completa y equilibrada”. Este valioso
aporte ha sido ampliado, desarrollado y sistematizado por su heredero, Jorge Basadre Ayulo,
quien también ha escrito su Historia del Derecho Peruano, en tres tomos y que ya cuenta con
varias ediciones.

De igual manera los maestros y juristas Víctor Manuel Maúrtua, quien escribió Antecedentes de
la Recopilación de Yndias (Madrid, 1906). Juan Vicente Ugarte del Pino, Guillermo Lohmann
Villena, Eduardo Rada Jordán, José Tamayo Herrera y los historiadores Rubén Vargas Ugarte y
Héctor López Martínez, entre otros.

Entre los extranjeros están Antonio Muro Orejón, Alfonso García Gallo, Niceto Alcalá Zamora y
Rafael Altamira; Víctor Tau Anzoátegui, Ricardo Levene y Ricardo Zorraquin Becú; Hanke Lewis
y Ernesto Shafer, entre otros.

EL DERECHO REPUBLICANO

La historia de este derecho va de la mano con los anales de la República. Esto es, desde las
primeras normas dictadas por el general José de San Martín Matorras, lo que constituye el
derecho intermedio o de transición en la ruptura entre la colonia y la independencia, al decir del
abogado René Ortiz Caballero. Asimismo, la primera Constitución de 1823 y las que siguieron
hasta la vigente de 1993. También es la labor codificadora y los diversos códigos aprobados,
así como las leyes y otras normas que, en conjunto, constituyen el ordenamiento jurídico de la
nación, tanto el derogado como el vigente.

Esta normativa ha implantado, modificado y cambiado sistemas e instituciones jurídicas, que


han tenido especial y fundamental relevancia en los actores políticos, económicos y sociales de
la república. Obviamente, no se trata de hacer un catálogo o relación cronológica del
ordenamiento jurídico a partir de la independencia.
La historia del derecho peruano republicano debe precisar, en lo general, la historia, desarrollo y
desempeño de las instituciones jurídicas, producto de la democracia y del sistema
republicano.Así como también sus problemas, causas y consecuencias en la búsqueda y
administración de la justicia y en la consecución del progreso y desarrollo nacionales. Es decir,
una historia social del derecho.
 FUENTES

Fuentes de conocimiento en sentido estricto (indirecto). Documentos: Están en los archivos. El


historiador cataloga toda la documentación; así aparecen los catálogos documentales.
Formularios: Son modelos de elaboración de documentos jurídicos. Libros de registro: La
documentación está expedida por la institución que da fe de la autenticidad del documento. Otro
tipo de fuentes: Manuales de historia, crónicas de las guerras, literatura en general (novelas).

Fuentes de creación del derecho (directo) Las fuentes se conocen a través de:

La Ley: No hay otra fuente del derecho propiamente dicha que la legislativa. Es fuente de
derecho primaria. Se da en sistemas jurídicos más elaborados. En el derecho positivo (actual),
la ley es la que emana del poder legislativo, es categoría en sentido estricto, abarca a todos los
actos que emanan de forma indirecta o directamente de la voluntad soberana de la nación. Esta
última definición es porque a lo largo de la historia estos conceptos han variado, ya que, la ley
es un conjunto de reglas del derecho relativamente generales (para todos) y permanentes en el
tiempo que habitualmente están escritas y que normalmente han sido impuestas por aquel o
aquellos que gobiernan un pueblo. El termino Ley difiere en el tiempo.

La Costumbre: Es fuente primaria, fuente formal que domina aquellos sistemas jurídicos más
arcaicos. Es un conjunto de usos de orden jurídico que a lo largo del tiempo han adquirido
fuerza obligatoria en un grupo social, porque se ha ido repitiendo esa costumbre en actos
pacíficos de forma incuestionada, en un lapsus de tiempo largo.
La jurisprudencia: No es auténtica fuente de derecho, son autoridades del derecho, son fuentes
de carácter subsidiario, esto es, cuando no hay Ley.

 HISTOROGRAFIA

El nacimiento de la Historia del Derecho como disciplina científica es relativamente reciente y tuvo lugar
a lo largo del s.XIX ligado, principalmente, a los movimientos codificadores y nacionalistas. No es
imaginable el cultivo de la Historia del Derecho sin una previa sensibilidad histórica, sin la convicción de
que el Derecho es cambiante a través del tiempo y sin el dominio de ciertas técnicas instrumentales
necesarias para la interpretación de los documentos que nos transmiten el pasado.
Asimismo será en estas fechas cuando se obtengan importantes adelantes en las ciencias auxiliares y
en los instrumentos básicos para la investigación de la Historia. Entre otros, la Paleografía o la
Numismática. No obstante, esto no significa que antes de la etapa decimonónica no hubiera trabajos y
estudiosos que pudiéramos encuadrar dentro de la Historia del Derecho. Hay que tener en cuenta que
el humanismo renacentista de los siglos XV y XVI despertará el interés por la Historia, la denominada
sensibilidad histórica, esto es “el interés por conocer cómo fueron sociedades ya desaparecidas. Los
antecedentes más remotos del actual Historia del Derecho los ubicamos en el s.XVI en las obras de
Lorenzo de Padilla y Francisco de Espinosa. El primero, cronista de Carlos V, escribió una obra titulada
Leyes y fueros de España y anotaciones sobre ellos que es un trabajo de investigación basado en el
estudio de la legislación castellana de la época, añadiéndole pequeñas notas, esta obra carece de
valor científico debido a que es una mera enumeración de leyes, pero es la primera manifestación de
un trabajo de carácter técnico-jurídico.

A finales del s. XIX, con la llegada del constitucionalismo y el liberalismo, se vive a nivel jurídico una
importante polémica jurídico-doctrinal en Europa entre aquellos autores que consideran que debe
generalizarse la codificación creando códigos ex-novo y aquellos otros que están en contra de esta
técnica y consideran que debe tenerse en cuenta el Derecho histórico. Esta polémica se inicia en
Alemania donde la postura a favor de la codificación se enfrenta a la postura histórica defendida por
Federico Carlos de Savigny que entiende que el Derecho no es más que el fruto de los usos y
costumbres de un país y, por tanto, rechaza el proceso codificador. Para él lo importante es conocer los
orígenes de nuestro Derecho para entender el Derecho actual.

 REFERENCIAS
 Eduardo García Máynez “Introducción al estudio del derecho”. Editorial Porrúa.

 Javier Vargas "Historia del Derecho Peruano".


 Jorge Basadre "Historia del Derecho Peruano".
 Aníbal Torres Vásquez “Introducción al derecho".
 http://www.unifr.ch/derechopenal/articulos/pdf/HurtadoPozo2.pdf

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