Gracias Dios porque nos ha ayudado hasta este momento, es curioso que apenas es la

quinta semana, y algunos ya nos vemos algo cansado, pero no hay mejorar manera de
recobrar fuerzas y animo que, meditando en la palabra de Dios.

Mateo 4:18 – 22.

Todos hemos escuchado acerca de cómo Jesús llamo y capacito a los discípulos, pero en lo
quiero resaltar esta noche es el hecho de que “no dudaron en seguirle”. EL llamado y
respuesta de los discípulos se basó en una relación previa con Jesús. “ese no fue su
primer encuentro y de alguna forma fueron sus experiencias pasadas con Jesús lo que los
llevo a seguirlo.

Dejar las redes “no fue una decisión emocional, ellos habían tenido que esperar esta
ocasión para unirse a Jesús, por eso no dudaron cuando les llamo.

Nosotros de igual forma cuando volteamos a ver el pasado, ver nuestra vida, lo que hemos
pasado, las experiencias que hemos tenido con el Señor. “nos hacen pensar que cada
momento y cada decisión eran parte del maravilloso plan de Dios para tráenos aquí.

Y eso nos llevó a no dudar del llamado y dejamos las redes, dejamos trabajos, familia,
estudios, vidas hechas para seguir al señor.

y aunque todos tenemos nuestra historia, en cada caso, cada testimonio todos
compartimos el deseo de servir a Dios y ser fieles a su llamado.

Hay cosas que pueden hacernos dudar de nuestro llamado, lo hemos visto y es triste como
a veces podemos llegar con todas las ganas y seguros del llamado, y después del desgaste
del cansancio de los problemas y algunos malos resultados pensamos que Dios se
equivocó y que cambio de planes.

Si Dios nos llamó y estamos seguros, debemos creer lo que él nos dice, obedecer y
seguirle.

Cuando yo atendí al llamado del señor, en su momento yo no me sentía adecuado y capaz

para poder hacer la tarea tan difícil a la que Dios me llamaba, pero después me callo el 20
de que la eficacia o suficiencia viene de Dios no viene de mi él es quien nos capacita.
sé que es cansado, pero no lo dicen seguido no somos los primeros ni los últimos en pasar
por esto, lo único que necesitamos para sobreponernos al cansancio. Es recordar cada día
como Dios nos ha ayudado antes.
Piense en algún momento antes de estar aquí en colegio, un momento donde sentían que
no podían por el cansancio mental, físico, espiritual en el trabajo, en la escuela, en algún
problema y recuerden como Dios les ayudo y entonces la fuerza de voluntad creció y les
hizo pensar con Dios puedo hacer esto y más.

Cuando estoy cansado pienso en eso y digo: Puedo con esto y más porque Dios no me
deja, piensen en que, así como Dios te ayudo en una mina, en un aula, en un hospital, en
la obra, en el trabajo, en la escuela, así como te ayudo antes así lo va hacer hoy y nunca lo
va a dejar de hacer.

Por ultimo déjeme decirle que esforzarnos vale la pena porque, nuestra admiración por lo
que hemos estudiado será el motor que nos impulse adorar y servir a Dios.

Es la mejor motivación de la vida el conocer cada vez más a Dios y entender que yo no
merecía lo que ha hecho y ha dado por mí me lleva a servir porque entiendo quién es Dios
y de donde me saco.
Quiero hablemos de eso precisamente de no olvidarnos ningún momento del valor y la
importancia de nuestra preparación.

Cada uno de nosotros ha aceptado el llamado del señor, y todo estamos conscientes de
que Dios primero prepara a las personas para después hacerlos siervos útiles para su obra.

Todos conocemos historias como la de David, Elías, pablo, los mismos discípulos todos
ellos pasaron por proceso difícil donde el señor los praparo aprendieron y fueron
capacitados para servir y hacer la voluntad de Dios.

Pablo dice:

La preparación en la vida de un atleta es fundamental, a quien no se ha conmovido ver

llorar algún deportista después de ganar, porque sabemos que entrenan toda su vida a
veces solo por ese pequeño momento.
Imaginen que están en una pista en los juegos olímpicos, y lo único que piensan antes de
correr es en empezar y terminar bien.

En nuestra vida y caminar con Cristo esa debe ser nuestra mentalidad, pablo fue un
ejemplo de alguien que corrió con paciencia la carrera de su vida.
Recuerdo un video. De alguien que se quedó en el camino.

Si perdemos nuestra fuerza de voluntad vamos a quedarnos a la mitad de la pista.

Podemos perder nuestra fuerza de voluntad cuando olvidamos como Dios nos ha ayudado
antes y como nos ha esforzado.
Hagan memoria de una situación que haya sido difícil en su vida antes de estar aquí en
colegio un momento donde sentían que no podían por el cansancio mental, físico,
espiritual en el trabajo, en la escuela, en algún problema y recuerden como Dios les ayudo
y entonces la fuerza de voluntad creció y les hizo pensar con Dios puedo hacer esto y más.

Cuando estoy cansado pienso en todas las veces que Dios me ayudo a esforzarme y hacer
las cosas que jamás pensé que podía hacer, y que no hubiera podido con mis fuerzas.
Cansado digo: Puedo con esto y más porque Dios no me deja, piensen en que, así como
Dios te ayudo en una mina, en un aula, en un hospital, en la obra, en el trabajo, en la
escuela, así como te ayudo antes así lo va hacer hoy y nunca lo va a dejar de hacer.
Si mantenemos esa confianza no solo nuestra fuerza de voluntad va a mejorar, vamos a
formar un buen carácter y un crecimiento espiritual, ´para ser un ejemplo.

Aquí estamos para formar, nuestro carácter antes que nuestro ministerio.
Porque si aquí no aprendemos a formar un carácter a tener buenos hábitos de estudio,
haya afuera difícil mente, nuestro ministerio va hacer de provecho.

Si lo vemos así 4 años son poco tiempo, son una pequeña parte de nuestra preparación es
apenas el comienzo de nuestra vida de servicio. Pero estos 4 años son la base sobre la
cual vamos a construir una vida de estudio, de compromiso dedicación y de gran sacrificio,
pero será un gran privilegio y una gran bendición servir a Dios con nuestra vida.

Así que ánimo, Cada tarea, cada libro cada ensayo, cada desvelada hambreada es
necesaria en nuestra preparación.

Ya aceptamos el llamado hay que aceptar lo que viene con él. la responsabilidad y el
cansancio.

Tenemos que estar a la altura piensen que almas, personas dependen de esto quien va
llevarles el evangelio si no somos nosotros.

No somos los primeros ni los últimos que nos vamos cansar, todos pasaron por esto.

Pablo nos da una ilustración una imagen con la que debemos identificarnos un atleta , que
entrena duro, que practica tiene un entrenamiento duro.

Que es lo que nos mantiene en la carrera

Recuerda quien eres para no darte por vencido eres un atleta.

Estoy muy agradecido con Dios porque nos ha ayudado hasta este momento yo creo que
todos lo estamos ya prácticamente termino el año, ha sido un gran año vamos acerrar con
fuerza, va hacer una semana algo pesada sé que algunos ya estamos algo cansados, pero
no hay mejorar manera de recobrar fuerzas y animo que, meditando en la palabra de Dios
para así poder valorar, agradecer y disfrutar de cada año cada semestre de nuestra
formación.

Quiero hablemos de eso precisamente de no olvidarnos ningún momento del valor y la

importancia de nuestra preparación.

Cada uno de nosotros ha aceptado el llamado del señor, y todo estamos conscientes de
que Dios primero prepara a las personas para después hacerlos siervos útiles para su obra.

Todos conocemos historias como la de David, Elías, pablo, los mismos discípulos todos
ellos pasaron por proceso difícil donde aprendieron y fueron capacitados para servir y
hacer la voluntad de Dios.

Pablo dice:

La preparación en la vida de un atleta es fundamental, a quien no se ha conmovido ver

llorar algún deportista después de ganar, porque sabemos que entrenan toda su vida a
veces solo por ese pequeño momento.
Imaginen que están en una pista en los juegos olímpicos, y lo único que piensan antes de
correr es en empezar y terminar bien.

En nuestra vida y caminar con Cristo esa debe ser nuestra mentalidad, pablo fue un
ejemplo de alguien que corrió con paciencia la carrera de su vida.
Recuerdo un video. De alguien que se quedó en el camino.

Si perdemos nuestra fuerza de voluntad vamos a quedarnos a la mitad de la pista.

Podemos perder nuestra fuerza de voluntad cuando olvidamos como Dios nos ha ayudado
antes y como nos ha esforzado.
Hagan memoria de una situación que haya sido difícil en su vida antes de estar aquí en
colegio un momento donde sentían que no podían por el cansancio mental, físico,
espiritual en el trabajo, en la escuela, en algún problema y recuerden como Dios les ayudo
y entonces la fuerza de voluntad creció y les hizo pensar con Dios puedo hacer esto y más.

Cuando estoy cansado pienso en todas las veces que Dios me ayudo a esforzarme y hacer
las cosas que jamás pensé que podía hacer, y que no hubiera podido con mis fuerzas.

Cansado digo: Puedo con esto y más porque Dios no me deja, piensen en que, así como
Dios te ayudo en una mina, en un aula, en un hospital, en la obra, en el trabajo, en la
escuela, así como te ayudo antes así lo va hacer hoy y nunca lo va a dejar de hacer.
Si mantenemos esa confianza no solo nuestra fuerza de voluntad va a mejorar, vamos a
formar un buen carácter y un crecimiento espiritual, ´para ser un ejemplo.

Aquí estamos para formar, nuestro carácter antes que nuestro ministerio.
Porque si aquí no aprendemos a formar un carácter a tener buenos hábitos de estudio,
haya afuera difícil mente, nuestro ministerio va hacer de provecho.

Si lo vemos así 4 años son poco tiempo, son una pequeña parte de nuestra preparación es
apenas el comienzo de nuestra vida de servicio. Pero estos 4 años son la base sobre la
cual vamos a construir una vida de estudio, de compromiso dedicación y de gran sacrificio,
pero será un gran privilegio y una gran bendición servir a Dios con nuestra vida.

Así que ánimo, Cada tarea, cada libro cada ensayo, cada desvelada hambreada es
necesaria en nuestra preparación.

Ya aceptamos el llamado hay que aceptar lo que viene con él. la responsabilidad y el
cansancio.

Tenemos que estar a la altura piensen que almas, personas dependen de esto quien va
llevarles el evangelio si no somos nosotros.

No somos los primeros ni los últimos que nos vamos cansar, todos pasaron por esto.