María Tricio Gómez

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Introducción
El término de inteligencia colectiva puede ponerse a discusión sobre si llamar así o
no, al proceso de compartir información y opiniones en la web, en recibir extractos
de realidad que pueden ser procesados una y otra vez, pero no conservar las
propiedades de lo que puede ser la inteligencia.
En el cuento de Howard Fast (s.f.), el mundo se asombraba de cómo un humano
podría haber crecido entre lobos, y en resumen se reconoce como un niño-lobo al
fin que resulta más inteligente que ellos como humano, pero menos inteligente aún
en la manada. Esta metáfora lleva a Keim, B. (2011 may 1pensar en la
inteligencia humana como un aspecto lineal que aún no puede concordar con la
fragmentación de internet. Aunque para muchos la inteligencia colectiva tiene
amplios beneficios, Barabasi, (s.f.), también señala dicha fragmentación del
contenido como fuerza y debilidad al mismo tiempo. Desde el concepto mismo de
inteligencia existe la característica de construcción y resolución en la vida
cotidiana, una persona inteligente no es aquella que acumula datos al
memorizarlos como una máquina, sino quien logra hacer de los datos
conocimiento aplicable por el cual forma un criterio para vivir y resolver las
situaciones de su ámbito, como ser social. En sentido amplio esto se aspiraría a la
sociedad conectada, pero no es así, el hecho de que pueda haber enormes
cantidades de información, en las que además estén presenten tratados de suma
valía, opiniones de expertos, contenidos digitalizados de las grandes obras, etc.,
no garantiza dicho conocimiento.
Quizá lo que está fallando no es el canal sino el receptor, que es el ser humano.
Como canal, internet es fantástico, pero de acuerdo a su estructura y como
comenta Barabasi (s.f.), esto no garantiza al bidireccionalidad, es decir, un vínculo
lleva a otro y a otro, pero no hay nunca una especie de intercambio. De los
millones de páginas web que señala, tampoco guardan un acceso democrático,
resulta que todo lo que pensamos es democracia en la red, en realidad está
organizado de un modo económico y por unas cuantas compañías, Google,
Microsoft, YouTube, son gigantes que dominan la red y que no son representantes
de valores democráticos en cuanto a los intereses que los sustentan.
Por otro lado, desde un punto de vista personal cuando un nodo actúa
colectivamente, no puede hablarse de inteligencia colectiva por la cual se incida
positivamente (de modo inteligente), en el contexto social, ni en el virtual por
cierto. En algunos casos ha servido para dotar de poder a los ciudadanos, eso es
innegable, como en los movimientos de denuncia y organización para llevar a
cabo un acto en forma virtual o en forma física. Sin embargo, eso por sí mismo no
garantiza como reitero, la inteligencia, porque los vándalos se pueden bien
organizar en el movimiento “me salto”, el torniquete del metro, lo cual sucedió el
año pasado.
En esencia, lo que estamos viendo en internet es un espejismo de inteligencia,
porque si bien existen nodos, o espacios en los que esta se fomenta de manera
formal, como en las instituciones educativas, los grupos de discusión, etc., cuando
sólo se está tomando su contenido como un producto desechable, sin la reflexión
humana, entonces se vuelve algo sin sentido para el desarrollo. Ahora hay una
interacción fragmentada y breve (Keim, 2011 may 16)
Las sociedades del conocimiento ese un término muy ambicioso si se contrasta
con el avance que puede tener una sociedad que no cuestiona lo que otro dice,
que no indaga, no se informa de manera multidisciplinaria y en cambio acepta a la
colectividad como su guía sin identificar que la otra parte, los otros nodos con los
que conviven, quizá están esperando también recibir luz para conocer un
fenómeno.

Conclusión
Albert Barabasi habla de una red fragmentada en nodos, otros autores hablan de
cómo los productos virtuales guardan la característica de la inmediatez, pero si
bien pueden formar una clase de inteligencia colectiva, esta sólo puede operar
cuando esta sirve para formar un criterio fundamentado de la realidad y no basada
en la recepción de pensamientos fugaces, opiniones, y formas de vida que no se
cuestionan y se aceptan sin más porque lo único que necesitan para existir es
poder llegar al receptor a través de un medio que por sí mismo está siendo
legitimado sin cuestionar la validez e intención de sus contenidos.

Referencias
Fast, H. (n.d.). The First Men. Truseel.com. Retrieved from:
http://www.trussel.com/hf/firstmen.htm
Barabasi, A. L. (n.d.). The fragmented Web. The Twelfth Link. Retrieved from:
https://blackboard.uia.mx/bbcswebdav/pid-1552832-dt-content-rid-
2504947_1/courses/C21733C12015/Linked%20fragmented%20web.pdf
Keim, B. (2011 may 16). Sharing Information Corrupts Wisdom of Crowds. Wired
Science. Retrieved from: https://blackboard.uia.mx/bbcswebdav/pid-1552834-dt-
content-rid-2504950_1/courses/C21733C12015/wired%20crowd%20wisdom.pdf
CrudoCrudo. (Post). (2012, may 08). RiP!- A remix Manifesto YouTube. Retrieved
from: https://www.youtube.com/watch?v=Q-I5m3Sl_Gk&spfreload=10