Además, debemos tener en cuenta que el arte a diferencia de las demás áreas del conocimiento,

en muchas ocasiones no exige al artista un proceso previo de aprendizaje ordenado y metódico,

algunos simplemente desde muy temprana edad manifiestan una admirable capacidad creativa
con la que pueden desarrollar diferentes formas de arte y van alcanzando su potencial de forma
empírica con la práctica y a través de la exploración de su propia inspiración e imaginación, así
como una técnica característica de su ser. Cuando inician algún proceso de aprendizaje o
autoaprendizaje lo hacen para fortalecer su conocimiento empírico y avanzar en una línea ya
adquirida que les permita afinar o pulir su obra.

En el arte la interpretación del resultado final de cada obra puede ser distinto tanto para su
creador, como para cada uno de los receptores, universalmente se puede comprender de diversas
maneras; mientras que, en otros campos, tales como las ciencias y las matemáticas, el resultado
obtenido de una investigación será único e inmodificable para todos los receptores.

Para concluir, podemos decir que las formas de conocimiento se emplean de manera
radicalmente distinta en las artes y en otras áreas del conocimiento.