La Historia Argentina A Partir Del Golpe de Estado de 1943

Trabajo final
de Historia
Argentina
S XX
Alumna: Figueroa, Camila

Docente: Lanza, Ariel
Contexto internacional
A partir de los cambios económicos producidos por la Revolución Industrial, los países
europeos comenzaron con su despliegue imperialista, en la búsqueda desenfrenada de
mercados, materia prima y mano de obra barata, repartiéndose el mundo sin inmutarse y
aumentando la tensión entre ellos mismos, estableciendo lo que luego se identificaría como el
Concierto Europeo del Viejo Mundo. Las economías más avanzadas comenzaron a vivir el
proceso de industrialización que generó tanto un exceso en la producción de bienes
manufactureros como un aumento de la demanda de materias primas necesarias para las
fábricas.
Por otro lado comenzaban a gestarse las primeras asociaciones obreras, a partir de
1848 donde es establecida historiográficamente el surgimiento de “clase” obrera, la Primera
Internacional de Trabajadores producida en Londres en 1864 fue la manifestación
multitudinaria de las ideas socialistas enmarcadas en el Manifiesto Comunista de Karl Marx, en
donde se aunaban los intereses comunistas, socialistas, sindicalistas y anarquistas que
apelaban por el derrocamiento del orden mundial basado en el capitalismo, remplazándolo
con un modelo de producción que lograra el establecimiento de la igualdad social y
económica.
Transcurriendo el tiempo y entrando en el siglo XX los intereses económicos
enfrentados, las pasiones nacionalistas y la expansión imperialista desataron la competencia
entre las grandes potencia europeas, cuya estrategia fue establecer alianzas ante la
agresividad creciente en el contexto europeo, sumado a esto el antiguo conflicto de Francia
con Alemania por los territorios de Alsacia y Lorena limítrofes colaboraron para engendrar
dichas alianzas.
La chispa que desató el primer desastre mundial fue el asesinato del Archiduque de
Austria-Hungría, candidato al trono, por un nacionalista serbio, motivo por el cual el Imperio
Alemán incentivó al Imperio Austrohúngaro a movilizar tropas en contra de
De este modo, comienza la Primer Guerra Mundial en agosto de 1914, en donde se
enfrentaron la Triple Alianza (firmada en 1882 por el Imperio Aleman, Austria-Hungría e Italia,
que en este momento no participa) contra la Triple Entente conformada por Inglaterra, Francia
y Rusia. En total más de setenta millones de hombres se movilizaron en la que se conoce como
la Guerra más grande de todas: La Gran Guerra.
Dentro de uno de los países beligerantes se gesta la revolución social más radical de la
Historia, que abocó los principios socialistas y acabó con la autocracia del Zar Nicolás II: la
Revolución Rusa.
ARGENTINA
En este contexto belicoso y revolucionario, nuestro país se insertó mundialmente

como exportador de materias primas. En el período de 1880-1916, la economía argentina
experimento un crecimiento tal que la llevó desde una posición marginal a convertirse en una
promesa destinada a ocupar en América del Sur lo que EEUU era para América del Norte.
Lógicamente, el motor de crecimiento fue la exportación de materias primas que,
anteriormente basadas en el cuero y lana de ovejas Merino, comenzaron a basarse en la venta
al exterior de Lino, carne congelada y otros cereales.
El tipo de clima de nuestro país y la cantidad de tierras, ganadas en la expansión hacia
las tierras pobladas por población originaria, permitieron la producción de estos bienes de
demanda creciente en el mercado mundial. Luego comenzaron a llegar el segundo factor
importante en un medio productivo: el capital. Llegaron inversiones europeas, sobre todo de
Gran Bretaña, pero a costo de generar bonos del Estado para estimular la inversión. La primera
ola de capitales se dedicó a la implementación de ferrocarriles y mejoras de caminos, puertos y
alumbrados modernizando así el sistema productivo y uniendo las regiones productivas sobre
todo las nuevas colonias agrícolas de Santa Fe. Este boom productivo originado por el sector
exportador creció de forma desigual en la geografía argentina: la región pampeana, de donde
salía el grueso de la producción exportable, fue la que experimento las mayores
transformaciones y cosechó los mayores beneficios. El consumo creció, pero ya no
abasteciéndose mayoritariamente de productos importados sino de la producción local.
Como en el sistema productivo, la sociedad también se transformó. Las nuevas tierras
y fábricas necesitaron mano de obra extra, que llegó de Europa huyendo del concierto de las
potencias centrales industrializadas, que ya no usaron su mano de obra no calificada. La
inmigración llevó a una acelerada urbanización del país, gran parte de los recién llegados se
establecieron directamente en Buenos Aires, la ciudad portuaria o se trasladó a las demás
ciudades del Este argentino. Solo un porcentaje relativamente pequeño buscó y encontró
ocupación en el campo. Ya en 1914 más de la mitad de la población argentina vivía en ciudades
con más de 20.000 habitantes. La masa de los inmigrantes se fue articulando y diferenciando,
afianzándose a una cultura que pronto le dejó de parecer ajena.
Si bien se cree que la intervención del estado fue inexistente, fue este quien promovió
las primeras inversiones, se involucró directamente con la construcción del tendido de redes y
con la institución bancaria, sumado a esto los grandes gravámenes a las importaciones,
protegiendo algunas industrias internas y abasteciendo la administración estatal.
Ese Estado considerado intermedio entre librecambista e interventor, fue reorganizado
con el triunfo de la Nación sobre la provincia de Buenos Aires, hito que a partir de él logró
establecer los 3 poderes que dictaminaba la Constitución de 1853 y reforzó el poder nacional
por sobre el provincial. Además la burocracia que garantizó el funcionamiento de la
administración estuvo conformada por médicos y abogados, priorizando a aquellos egresados
de la universidad de Buenos Aires, y en un régimen conservador, la élite que se consideraba
“notable” era la oligarquía que manejaba las riendas del país, permaneciendo en el poder por
medio de elecciones fraudulentas. Es decir los individuos habilitados para tomar decisiones
fueron aquellos que tenían riqueza, educación y prestigio. Al finalizar el siglo XIX, el grupo
selecto oligárquico y terrateniente siguió ocupando los cargos de gobierno más relevantes
ejerciendo una hegemonía cuyo sostén eran los acuerdos entre diferentes grupos de notables,
garantizados por el fraude electoral y el control de los nombramientos de los gobernantes,
tanto a nivel provincias como en el nacional.
Un claro ejemplo de cómo funcionaba la política de la época fue la elección de Miguel
Juárez Celman el concuñado de Roca, gobernador de la provincia de Córdoba entre 1880 y
1883, senador nacional y candidato presidencial en 1886 fue sostenido por los principales
grupos dirigentes del PAN y la eficacia de la maquinaria electoral (control de las listas de
electores de las listas y de las mesas receptoras de votos, así como el uso de diversos
mecanismos fraudulentos) que le garantizó la elección de los candidatos oficiales y el control
político a la elite.
Ante estas circunstancias políticas, un nuevo partido político se gestó al margen de
esta elite oligárquica: la Unión Cívica, en donde se agruparon representantes de clase media
fusionada con inmigrantes como Aristóbulo del Valle, Manuel Estrada, Leandro Alem y
Bartolomé Mitre. Fue un partido que en un principio aunó los distintos intereses en uno solo,
derrocar a Juárez Celman por medio de una revolución, pero esta fue truncada por el ejército y
reprimida con violencia, hasta tal punto que si bien la acción revolucionaria fracasó, se ganó el
apoyo de la sociedad por la violencia ejercida hacia los civiles que participaron y logró el
objetivo establecido desde un primer punto de partida: la renuncia de Juárez Celman.
Ante la posibilidad de perder en las elecciones por el amplio apoyo que había recibido
la UC por parte de la población, Roca buscó establecer un acuerdo con este nuevo partido
político, logrando la escisión en el mismo. Mitre prefirió acordar pero Alem se opuso
definitivamente formando la Unión Cívica Radical, partido que cayó en la dirigencia de Hipólito
Yrigoyen luego del suicidio de Alem.
Bajo la creciente dependencia económica de Argentina en este período debido al auge
del modelo agroexportador se fue volvió vulnerable ante las alternancias del mercado
mundial.
Lo único que no fue afectado por los profundos cambios ocurridos entre 1880 y 1930,
fue la hegemonía de la élite tradicional. La razón de su ininterrumpida influencia fue que dicha
élite no solo confirió el impulso inicial a la evolución expansiva, sino que también la controló y
supo manejarla para extraer el máximo provecho de ella e incluso esta situación no cambió
cuando esta clase fue desplazada del poder político por la clase media. El cambio de
conducción política no afectó la privilegiada situación económica y social de las antiguas
familias. Ellas siguieron fijando los criterios de status social y las condiciones para ascenso
social.
El desplazamiento antes citado, se produjo por la concesión de elecciones no
fraudulentas otorgada por Roque Sáenz Peña en 1912, que logró la llegada al poder del
dirigente de la UCR a la presidencia luego de años de abstención electoral en 1916, y por 12
años las instituciones democráticas comenzaron a funcionar regularmente. “En términos
políticos sociales, una cuestión clave del período 1912-1930 es la democratización(…) se
produjo, a nivel nacional, una transición de dominación oligárquica a la democrática, proceso
que se interrumpe y trunca, no solo por el golpe militar de septiembre de 1930 sino por los
límites que tiene la propia de democratización política ( por la exclusión de las mujeres y de los
habitantes de los Territorios Nacionales) y por el mismo proceso de transición (toda vez que
formas de dominación oligárquica persisten a niveles provinciales)”1 Si bien la democratización
se logró, no se reforzó. “La oposición a la democracia liberal encuentra su figura más expresiva
1
en Leopoldo Lugones, un renegado del socialismo y un opositor a la reforma electoral de Roque
Sáenz Peña, para quien, según su tristemente célebre proposición de diciembre de 1924, Ha
sonado, otra vez, para el bien del mundo, la hora de la espada” 2 Predica en contra del sufragio
y de los partidos políticos pero apoya las soluciones militares.
La participación de los sectores populares se dio en distintos ámbitos: en los partidos,
en los grandes sindicatos, comienzan a ocupar lugares simbólicos, y debe rescatarse el papel
de socialistas y anarquista, pues ellos estimularon la creación de los gremios.
También es importante ver cómo fueron constituyendo estos sectores populares su
ámbito solidario: el taller, el conventillo, las mutuales, que se convirtieron en las
organizaciones celulares que les permitieron tener participación igualitaria.
Volviendo a la cuestión política, siendo Irigoyen elegido presidente, este implementó
una serie de reformas buscando atender los reclamos de participación política se relacionaron
con las mejoras en algunas condiciones de los distintos sectores sociales, pero las condiciones
de la sociedad ya eran complicadas en el momento del estallido de la Primera Guerra Mundial,
se agravaron luego por las dificultades del comercio exterior y de la retracción de capitales: en
las ciudades se sintió la inflación, el retraso de los salarios reales y la fuerte desocupación.
El otro suceso que influyó en las clases trabajadoras tensionadas por el contexto que
les tocó vivir fueron las explosiones revolucionarias que se propagaron luego del triunfo de la
Primera Revolución Comunista de la Historia: la rusa. La impresión de que la Revolución
mundial era inminente operó en cierta medida como ejemplo para los trabajadores, pero
mucho más lo hizo como revulsivo para las clases propietarias. Las huelgas comenzaron a
multiplicarse en las ciudades a lo largo de 1917 y 1918, impulsada sobre todo por los grandes
gremios del transporte, la Federación Obrera Marítima y la Federación Obrera Ferrocarrilera,
apoyados por el sindicato de la FORA. Un hecho que aumentó la intensidad de las tensiones
fue la Semana Trágica: en huelga a un establecimiento metalúrgico reprimió violentamente la
Policía, hubo muertos de ambas partes y la violencia se generalizó entrando el Ejército a
reprimir. Luego de esta experiencia, el gobierno radical debió abandonar sus métodos
reformistas e institucionales para retomar los métodos represivos, presionado por los sectores
altos propietarios y por la Liga Patriótica que aunaba a los sectores temerosos de las
revoluciones sociales de las que escuchaban hablar: patronal, clubes de élites, círculos
militares y representantes de empresas extranjeras. “La aparición y prácticas de la Liga
Patriótica inauguran en una línea de acción de violencia paraestatal que se prolongará larga y
cruelmente en la sociedad argentina.”3
La Liga aportó los motivos del orden y la patria y todos los sectores conservadores
llegaron a un mensaje en común además del de “la hora de la espada”: se rechazó la
movilización social y se promovió la crítica la democracia liberal.
Luego de Yrigoyen, en 1922 es elegido Marcelino Torcuato de Alvear, ya que la
derecha estuvo dispuesta a impedir la reelección de este por ver encarnados en él todos los
males de la democracia: ya lo representaban como el agitador social, como el caudillo
autoritario o simplemente como la expresión de la chusma tosca e incompetente. Alvear
garantizó los intereses de la Liga Patriótica, pero en 1926 la vuelta de Yrigoyen fue inminente,
ganó las elecciones con el 60 % de los votos.
2
Ansaldi, Waldo La trunca transición del régimen oligárquico al régimen democrático Pág. 54
3
Ansaldi, Waldo La trunca transición del régimen oligárquico al régimen democrático Pág: 33
El mundo financiero sucumbió junto con la caída de la Bolsa de Wall Street en New
York, entrando todos los países en crisis económica, situación poco paliativa para Yrigoyen, al
que además se le sumó su avanzada edad y la oposición antipersonalista que intentaba
boicotear su gobierno. Junto con la inflación, los despidos y las reducciones de sueldos ya se
discutió como terminar con el gobierno. La decisión fue por medio de un golpe, casi sin
resistencias el 6 de septiembre de 1930 asumiendo al poder José Félix Uriburu y en 1932
tomando el poder Agustín P. Justo quien se presentó a las elecciones como acción intermedia
entre la dictadura de Uriburu, y el extremismo subversivo de Alvear. “El poder de adhesión de
los grandes generales que tenía Justo, hicieron que a Irigoyen le organicen un “planteo militar”
de esos cuadros superiores del ejército que exigió retorno a la normalidad institucional, bajo la
amenaza de un levantamiento que Uriburu solo pudo contener sacrificando sus proyectos más
ambiciosos y convocando a elecciones presidenciales.” 4Gana las elecciones Justo, con
mecanismos como el caudillismo, mientras los radicales pasaron a la abstención electoral.
Justo pudo controlar la política desde su coalición: la Concordancia, en donde se unieron
conservadores, antipersonalistas y socialistas. Una alternativa a esta unión de partidos es el
Partido Demócrata Progresista, liderado por Lisandro de La Torre. Con ideas no muy claras, era
antiuriburista, liberal y más acercado a la izquierda. “Este partido apenas pudo sobrevivir como
minoría electoral. Solo los esporádicos y siempre frustrados intentos de reunir a la oposición en
un Frente Popular lograron sacar momentáneamente al partido de esa agonía, que será
brutalmente confirmada a comienzo de 1939, cuando De la Torre, en diálogo con Alem, elija el
camino del suicidio”5
1930 es la fecha en que comienza en Argentina el ciclo militar, caracterizado por la
intervención de la Fuerza Militar en la política. 6 Además, José Luis Romero llama a esta época
“La Restauración Conservadora”
“Por la crisis y la depresión que existían la movilización social era escasa, comparado
con otras épocas, y el sindicalismo, poco identificado con las instituciones democráticas,
hicieron poco por defenderla” 7En ese mismo año se creó la Confederación General del Trabajo
uniendo a grupos socialistas y sindicalistas hasta entonces separados.
El gobierno de P. Justo a través de su ministro Federico Pinedo intervino en la
economía: creo las juntas reguladoras destinadas a favorecer la producción pero orientadas en
beneficio de los grandes productores agropecuarios la intervención del estado se limitaba a
resguardar con fondos públicos los intereses privados de los grandes grupos económicos, este
manejo discrecional del presupuesto del gobierno fomentó la corrupción y los negociados,
entre ellos el de las carnes, denunciados por Lisandro de la Torre. A grandes rasgos, su modelo
económico apuntaba a una creciente intervención del Estado y a un cierre progresivo de la
economía. Pese a sus éxitos en lo económico, el régimen presidido por Justo fue visto como
ilegítimo: fraudulento, corrupto y ajeno a los intereses nacionales.
“En 1937, el presidente Justo pudo imponer a sus partidarios la candidatura
presidencial de Roberta M. Ortíz, de origen radical antipersonalista como él, pero debió
aceptar en la vicepresidencia a un representante de los grupos conservadores más
4
Macor, Darío Partidos, coaliciones y sistemas de poder Pág. 56
5
Macor, Darío Partidos, coaliciones y sistemas de poder Pág. 81
6
Idea tomada de Quiroga, Hugo.
7
Romero, José Luis. Breve historia contemporánea de la Argentina. Pág. 67
tradicionales: el catamarqueño Ramón S. Castillo” 8 La enfermedad del presidente Ortíz lo
obligó a delegar el mando a Castillo en 1940.
Este, toma a Federico Pinedo como ministro de Hacienda quién ideó “su Plan de
Reactivación Económica, donde proponía como salida a las dificultades creada por la Guerra,
insistir en la compra de las cosechas por parte del estado, para sostener su precio, y a la vez
estimular la construcción pública y privada, capaz de movilizar muchas otras actividades; sobre
todo, remarcaba la importancia de estimular la industria”9
El fracaso del Plan Pinedo, no fue económico, sino político como dice LLach, pues la
Cámara de Diputados no lo trató.
La Historia Argentina a partir del golpe de Estado de
1943
CONTEXTO INTERNACIONAL:
El mundo había sufrido ya una terrible Guerra Mundial 1914, se había materializado
el fantasma comunista en la Revolución Rusa de 1917, una crisis económica mundial se
originó a partir de la caída de la Bolsa de valores de Wall Street en New York en 1929 y
además en 1936 la Guerra Civil Española pre-cursaba lo que luego fue la Segunda Guerra
Mundial en 1939, por la conexión que a partir de ella se produjo entre los grandes líderes de
los regímenes totalitarios antidemocráticos caracterizados como fascismo y nazismo que
iniciaron el segundo conflicto bélico más deshumano y desastroso de la Historia.
“EL panorama cambión sustancialmente en la segunda mitad de 1941. En junio Hitler
invadió la URSS y en diciembre los japoneses atacaron a los norteamericanos; EEUU entro en
la guerra y procuró forzar a los países americanos a acompañarlo 10“
Estos sucesos alteraron los términos de intercambio y promovieron la creación de
nuevas medidas económicas para paliar la escasez de divisas y la crisis social que esta
desataba en los países productores de materias primas que ya no podían introducir sus
productos en el mercado mundial por el auge del proteccionismo del que hicieron bandera
los países europeos compradores y por consiguiente los malestares sociales que ello
originaba, posible tierra fértil de la semilla comunista.
Mientras tanto en Argentina…
El gobierno de Castillo no necesitaba simpatizar con los nazis para aferrarse a la

neutralidad, pero ante el nuevo giro de mirada sobre la neutralidad con la entrada de EEUU a
la guerra, Castillo se aferró a los militares, contribuyendo con su debilitamiento, surgiendo así
intenciones golpistas.
El golpe de Estado realizado el 4 de junio de 1943 por el Grupo de Oficiales Unidos
(GOU) que destituyó a Ramón Castillo inauguró un nuevo ciclo político que generó grandes
transformaciones en las vidas argentinas.
Los antecedentes históricos de este segundo Golpe pueden analizarse a través de las
varias crisis que estableció Peter Waldmann11 consideradas a partir del crecimiento “hacia
afuera” que promovieron la generación del 80 y los sectores altos terratenientes, para los
8
Romero, José Luis. Breve historia contemporánea de la Argentina. Pág.86
9
10
11
Waldmann, Peter El Peronismo 1943-1955
cuales la inserción de Argentina en el mercado mundial como productor de materias primas
agrícolas generaba grandes lucros, tendiendo así los hilos para manejar el poder político y
por ende, el económico, asegurándose la permanencia en el gobierno a través de mecanismo
fraudulentos en las elecciones..
Se inaugura así una crisis nacional debido a que “Las peligrosas implicancias de la
evolución expansiva producida a partir de 1880 solo se pusieron de manifiesto con toda
claridad cuando el sistema económico y social de ella surgido fue sometido a su primera
prueba. EL primer acontecimiento decisivo en este sentido fue, sin duda, la crisis económica
mundial de 1930, que tuvo como consecuencia el rechazo mundial de los principios de libre
comercio y un reflorecimiento general de las tendencias proteccionistas”12
Este suceso promovió el crecimiento hacia adentro y profundos cambios
demográficos, debido a las migraciones internas hacia los centros urbanos que comenzaban
con la industria liviana, formándose así nuevos barrios de trabajadores que pronto formaran
el tercer sector social, después de la clase alta y media, que buscaórá una participación en las
decisiones políticas y sociales en un país que ya estaba inundado en una inseguridad político-
institucional que se inició con el Golpe de Estado de 1930 a Hipólito Yrigoyen por Félix
Uriburu.
Estos acontecimientos generaron un cuestionamiento a la identidad nacional,
provocando una crisis en la misma que tuvo como resultado la pérdida del prestigio de la
clase alta por las dudas que despertóhacia su conducción del país, dejándosela de considerar
por ello como clase dirigente, y ahora enemiga de las demás clases, tomando el título que
aún perdura en la actualidad: oligarquía.
Otra crisis de la que hace mención el autor es la de dependencia, situación creada
por el contexto internacional en que Argentina entróaba como productora de materias
primas, haciendo que quede bajo las condiciones impuestas de potencias industriales como
lo era Gran Bretaña que atentandoba contra los productores locales. Un claro ejemplo de
este caso es el pacto Roca-Runciman, donde el vicepresidente mismo aclaró que la Argentina
era una colonia económica de Inglaterra, la cual solo se comprometía a comprar carne siempre
y cuando fueran más baratos que otros productores, mientras que Argentina bajó los
impuestos a servicios ingleses, y se le otorgó el monopolio del transporte de la Ciudad de
Buenos Aires.
“Como ya se habló anteriormente el “programa de reactivación de la economía
nacional” de 1940 (Plan Pinedo) fue pensado como medio paliativo ante el problema
fundamental de los excedentes invendibles de los productos agrarios, pensándose entonces en
la venta al exterior de nuevos productos industriales producidos en el país “El Plan se origina
en una situación de emergencia: la Segunda Guerra y sus consecuencias sobre la economía
argentina. Como tal, debe dar respuestas inmediatas a los problemas que tal situación
planteaban en el sector externo, en el nivel de actividad económica, en el marco institucional
en el nivel de precios13. “Pero dicho plan fracasó luego de una serie de discusiones y análisis
sobre los beneficios que el mismo traería solamente a los sectores altos. Aun así, luego de
fracasar, la política de promoción de la industria no desapareció con el Plan, ni tampoco
esperó para reanudarse la llegada del golpe del 4 de junio de 1943. Entre 1940 y 1943 se
adoptaron un sinnúmero de medidas industrialista, dando alguna marcha al mercado-
internismo luego retomado por la doctrina peronista.
.
12
Waldmann, Peter El Peronismo 1943-1955 Pág.18-19
13
Llach, Juan Jose EL PLAN PINEDO DE 1940 Pág.519
Por todo lo citado anteriormente, Argentina vivióe una crisis de distribución que afectaó
sobre todo a los sectores populares sobren los que recayeronía las pérdidas de la recesión
económica y eran, además explotados, discriminados y no podían participar en la política,
pues “el lapso comprendido entre 1930 y 1943 está clasificado como el > retroceso artificial
a un sistema de participación limitada>”14 sumado a esto la mala representación de los
conductores políticos que siempre velaron por sus intereses y beneficios primordialmente
pues , lo cual es por ello también considerada una crisis que afectaba sobre todo a la clase
trabajadora pues en esos momentos anteriores al golpe de 1943 ”la economía industrial se
expandió rápidamente, pero la clase trabajadora no fue beneficiada por ese proceso(…) los
salarios reales en general declinaron al rezagarse detrás de la inflación. Frente a la represión
concertada por los empleadores y el Estado, los obreros poco podían hacer para mejorar los
salarios y las condiciones de trabajo. Le legislación laboral y social era escasa y su
cumplimiento obligatorio se imponía solo esporádicamente (…) el movimiento laboral
existente antes del golpe militar de 1943 estaba dividido y era débil”15
Los principios de la sindicalización debían basarse en una unidad de actividad
económica, debiendo existir el Ministerio de Trabajo para que le diera el reconocimiento a
un sindicato para que pudiera negociar con empleadores. Sin duda, ya se puede hablar de
actores sociales con conciencia de clase, a diferencia de la historiografía revisionista que no
los tuvo en cuenta como tales, sino como masas amorfas esperando la demagogia de un líder.
.
Finalmente la conjunción de todas estas crisis afectaron al núcleo político,
provocando una crisis de legitimidad política, sumado a escándalos públicos varios,
asesinatos, torturas de los opositores y la entrada en escena de las fuerzas armadas que
contenían en sí ambiciones de poder, fueron suficientes para caracterizar a este período
como la Década Infame. Esta década “fue experimentada por muchos trabajadores como un
tiempo de frustración y humillación profundas, sentidas colectivas e individualmente.”16
Establecido el panorama crítico en el que se encontraba el país antes del
golpe del 4 de junio de 1943, se puede analizar los procesos que se desataron a partir
del mismo con la segunda entrada de las fuerzas armadas al poder político, que
terminó con la Restauración Conservadora iniciada en 1930. Aun así, el golpe fue
rodeado de confusión política, pues la “renuncia de Arturo Rawson y su reemplazo
por el general Pedro Ramírez, ministro de guerra del depuesto gobierno
constitucional.”17demostraba que no había un lineamiento fijo y establecido con
amplia solidez.
Antes del Golpe, Llos motivos que llevaron a la destitución de la conducción política
de Castillo fue el contexto internacional antes mencionado ( Segunda Guerra Mundial y
entrada de Estados Unidos a la misma, lo cual marcaba la ruptura de neutralidad y la nueva
cruzada de la democracia contra los regímenes totalitarios, invitando a los países americanos
a acompañarlo) que al cambiar rotundamente la concepción de neutralidad, viéndola ahora
como apoyo a los regímenes nazi-fascistas pusieron a en su contra a los amplios sectores
aliadófilos de la sociedad sumada a la mala elección de su candidato político, un gran
hacendado conservador y partidario del fraude. Ambas cuestiones lograron reunir el rechazo
hacia Castillo en las Fuerzas Armadas, gestándose una revolución dentro de la revolución ya
iniciada en 1930. Como ya fue mencionado, el Grupo de Oficiales Unidos que la llevó a cabo
eran jóvenes oficiales partidarios de un neutralismo intransigente, buscando la oportunidad
14
Waldmann, Peter El Peronismo 1943-1955 Pág.30
15
James, Daniel Resistencia e Integración. El Peronismo y la clase trabajadora argentina 1943-1976
Pág.21
16
Op. Cit. Pág. 41
17
Torres, Juan Carlos. Introducción a los años peronistas. Pág.14
de “reorganizar las bases institucionales del país a fin de ponerlo de abrigo de la corrupción
de los políticos y de la amenaza comunista.”18 Se vuelve a la idea de la cruz y de la espada, en
una Argentina laica y liberal.
Ante la comparación de este experimento militar con un régimen fascista,

Ramírez bajoante la presión de EEUU rompe relaciones con el Eje, provocando su
desplazamiento a favor de Edelmiro Farrell, y una puja entre los miembros del GOU que logró
la emergencia del hombre fuerte de la revolución: el coronel Juan Domingo Perón.
Haciendo una breve síntesis de su vida, Perón había llegado a los 49 años, graduado
del colegio Militar, siendo instructor militar, capitán instructor de perfeccionamiento, amigado
de Justo en 1930 siendo removido por Uriburu a la Escuela de Guerra como titular de la
cátedra de Historia militar, en donde ganó experiencia que luego lo ayudarían en su carrera
política: hablar en público, expresar ideas con coherencia, interesar y mantener la atención de
la audiencia. Luego fue ayudante de campo de ministros de Guerra, actúo como espía en Chile
y se instruyó en Italia de Mussolini en las tácticas del ejército de montaña luego de la muerte
de su primera esposa.
Antes de 1943 se encontraba en Mendoza instruyendo tropas de montaña, hasta que
Edelmiro Farrell intervino y lo trajo consigo a conspirar la revolución. Perón ofreció a la
revolución un programa social, económico y la apertura hacia grupos estratégicos de la
sociedad. En 1944, acumulando los cargos de vicepresidente, ministro de Guerra y Secretario
de Trabajo se convirtió en el jefe virtual de la revolución. 19
En el contexto de posguerra, luego de haber entrado en ella con EEUU para romper
con su aislamiento diplomático, apoyado por la Iglesia y los militares, ideó un programa
industrialista sostenido por el Estado y orientado a preservar las fuentes de empleo, tratando
de evitar así que prenda la semilla comunista, cediendo a los sectores trabajadores una serie
de concesiones: negociación colectiva con empresarios y sindicatos. No tuvo en cuenta que los
empresarios no estaban atemorizados de una revolución social, y se sumaron a los sectores
opositores para imponer la rendición condicional del General.
En estos momentos reaccionaron los sindicatos, movilizándose en defensa de las
reformas laborales obtenidas a su favor. El 9 de octubre la poderosa guarnición de Campo de
Mayo impulsada por la oposición democrática impuso a Perón la renuncia a todos sus cargos y
enviado a prisión en la Isla Martín García, resultado del recelo que había ganado su ascenso
político. Los trabajadores se movilizaron el 16 de octubre reclamando la libertad de Perón,
logrando su objetivo y apareciendo el general el 17 de octubre por el balcón de la Casa de
Gobierno, dando inicio así al movimiento peronista.
Ante las elecciones llamadas el 24 de febrero, el ejército veía a Perón como el salvador
del prestigio castrense, la Iglesia como el hombre que había perseguido a los comunistas y
establecido la enseñanza religiosa, y además, fortalecido por lo acontecido el 17 de octubre,
los dirigente sindicales tomaron la iniciativa y crearon un partido político propio, el Partido
Laborista 20sumado a una escisión de la UCR: la UCR-Junta Renovadora, creada por Perón. La
oposición se unió bajo la Unión Democrática compuesta por la UCR, el Partido Socialista, el
Partido Demócrata Progresista y ahora el Comunista.
Perón se alió de las consignas Justicia Social y Nacionalismo, este último impregnado
en la época por la injerencia del embajador norteamericano: Spruille Braden, abogando así por
la disyuntiva: “¡Braden o Perón!”
18
Torres, Juan Carlos. Introducción a los años peronistas. Pág. 17
19
Torres, Juan Carlos. Introducción a los años peronistas. Pág.24
20
Como es de calcular, “en las grandes concentraciones urbanas el electorado obrero
volcó en masa a favor de Perón, mientras que la oposición recogió votos en las clases medias y
altas”21
El personalismo creado en torno a su figura lo hicieron “ocupar, naturalmente, la
posición intransferible de conductor político y de enunciador e intérprete autorizado de las
iniciativas e ideas del movimiento que se reconocía en su nombre.” 22
El modelo peronista “contenía el plan de liberar al Estado, en general, de su estrecha
ligazón con los factores sociales de poder e instalarlo en punto de intersección de la relaciones
entre los grupos sociales (…) entre los procesos políticos de acción y estructura que debían
producir tal cambio, merecen destacarse cuatro: el compromiso de solidaridad, la idea de líder,
el principio de organización y de representación 23”
Sus fuentes de poder fueron las reservas de apoyo y lealtad que le brindaron las
diferentes agrupaciones económicas, sociales y políticas, sumado a la legitimad ganada por él
mismo en los sectores más bajos de la sociedad nunca antes tenidos en cuenta además del ya
citado contexto económico favorable. Su doctrina peronista es el resultado de un intento de
desapegarse de los modelos fascistas y comunistas, creando la doctrina justicialista y social. Es
necesario aclarar en este punto que a pesar de alguna represalia a opositores, el régimen
peronista no fue terrorista ni represivo. El último bastión de su influencia fue su gran carisma y
atractivo personal. “El liderazgo carismático notoriamente de Perón se definió por sus rasgos
plebiscitarios, esto es, por la relación directa entre el líder y las masas, con la secundarización
de las mediaciones institucionales. Los actos masivos celebrados en la Plaza de Mayo,
centrados en el vínculo dinámico pero jerárquico entre el balcón y la plaza, entre el líder que
habla desde arriba a una masa que responde e interpela desde abajo, son las representaci ón
espacial y escenográfica de ese vínculo.24 Pero eh aquí que el gobierno consensuado por la
mayoría no dejó de apelar a la coerción, violando las libertades cívicas de los opositores
mediante la censura, la obligación de adhesión política de los funcionarios públicos, el control
de los medios de difusión y aun el encarcelamiento de opositores, 25 mostrando la cara ambigua
del peronismo en dos escenarios superpuestos y simultáneos: la violación de los derechos
políticos de los opositores y la ampliación de los derechos sociales de los trabajadores.
Culturalmente se evidencia que existieron manifestaciones culturales que o bien
fueron reprimidas por el estado, o bien llegaron a ser promovida por éste, preservándose
zonas donde intelectuales opositores hallaron un espacio para continuar con su arte. El cine
fue uno de los bastiones culturales que sufrieron censura, hubo films que expresaban logros
peronistas, así como también había otros que mostraban problemáticas sociales con denuncia
más amplia, como Las aguas bajan turbias (Hugo del Carril.1952) Escritores e intelectuales que
formaron las revistas Centro o Contorno denuncian además en la segunda etapa peronista,
que el aire social está marcado por la mediocridad en la vida cultural en general y en la
universidad peronista en particular: la enseñanza es deficiente, hay incapacidad intelectual o
ética y el libre intercambio de ideas está bloqueado. Hubo escritores que apelaron a las ideas
de compromiso, denuncia (Arlt y Cortázar) y corporalista o materialista.
LosSus pilares del peronismo fueron el Partido Peronista, la CGT y las fuerzas armadas.
“Estos fueron los años de expansión y modernización de las Fuerzas Armadas, con el aumento
del presupuesto militar que llevó a la Argentina al primer lugar en el ranking de los gastos en
defensa de América Latina.”26 “En 1947 se dictó una ley importantísima Ley 12987, por la cual
se confiaba la ejecución del primer plan argentino de producción de hierro y acero a una
21
Op. Cit. Pág. 38
22
Torres, Juan Carlos. Introducción a los años peronistas. Pág. 40Op. Cit. Pág 40
23
Waldmann, Peter El Peronismo 1943-1955 Pág. 52
24
Teran, Óscar Historia de las ideas en la Argentina. Pág. 260
25
OP. Cit.
26
Óp. Cit. Pág. 41
repartición militar: la Dirección General de Fabricaciones Militares” 27 Además, coincidía con los
oficiales en cuanto al nacionalismo, el anticomunismo y la industrialización que fueron los
principios generales del gobierno de Perón, dando al gobierno un tinte militarista ante la
convicción de que la potencia defensiva aumenta si todos los ciudadanos tienen iguales
principios y creencias..
Las primeras medidas para reforzar el régimen fue intervenir las instituciones con
mecanismos de control burocrático y represivo: Juzgó a la Corte Suprema, depuró las
universidades, clausuró periódicos de la oposición, y buscó una reaproximación a EEUU y
propuso su tercera posición en el plano de la política internacional. Esas fueron sus medidas de
control político: subordinación, depuración y ajuste del sistema político.
Económicamente, Argentina se encontró en buena posición en el mundo de posguerra:
libre de deuda externa, reservas de divisas, gran demanda y altos precios para sus
exportaciones de alimentos y una industria en crecimiento. Es por ello que pudo lograr un
intervencionismo estatal, desarrollar la justicia social, sustituir las importaciones. “La
intervención del estado se cumplió a través de los Planes Quinquenales. El primer Plan abarcó
el período comprendido entre 1947 y 1951; el Segundo plan, que entró en vigor a comienzos de
1953, debía prolongarse hasta 1957.”28 El primero fue demasiado ambicioso y sin objetivos
priorizados, con demasiados proyectos independientes entre sí y vinculados con ámbitos muy
diversos; el segundo fue presentado como un único proyecto, con mejoras que demuestran la
maduración del régimen, pero la coyuntura económica no era la óptima. “Dejando de lado
determinadas debilidades técnicas, los planes quinquenales figuran entre los logros más
importantes del régimen.” 29
“Se reconocen 3 áreas sobre las cuales concentró el gobierno sus medidas contra la
crisis de dependencia: intensificó el control estatal sobre las transacciones económicas y
financieras de todo tipo, canceló toda la deuda exterior, compró a las compañías extranjeras
algunas empresas muy importantes del sector privado de servicios y declaró propiedad del
Estado todas las riquezas del subsuelos; finalmente, dictó varias leyes de protección y estímulo
a la industria nacional.”30 Por ejemplo creó la Secretaria de Industria y Comercio, confió a un
banco los empréstitos de largo plazo a las empresas industriales y dictó leyes contra la
competencia extranjera.
Una medida de su ministro de economía, Miguel Miranda, un industrial de reciente
fortuna, fue la creación del Instituto Argentino para la Promoción del Intercambio (IAPI)
además de estar a la cabeza del Banco Central nacionalizado. Una forma de hacer ímpetu en su
programa nacionalista e industrial, fue la adopción de nuevos conceptos como “cipayo” o
“Vende Patria” para designar a aquellos que deseaban mantener a la Argentina dentro de la
órbita económica de los EEUU y Gran Bretaña.
Es destacable aclarar que las políticas impulsadas por el gobierno peronista solo fueron
posibles gracias a la coyuntura favorable que ya no volverían a repetirse.
A los beneficios otorgados como el aguinaldo anual, las vacaciones pagas, a inclusión
de los asalariados de la industria y el comercio en el sistema jubilatorio, las indemnizaciones
por despido y por accidente de trabajo se le suman los demás cambios en el nivel de vida de
los trabajadores mediante las políticas de un incipiente Estado Benefactor: congelamiento de
alquileres, fijación de salarios mínimos, el establecimiento de precios máximos a los artículos
de consumo popular, los créditos y los planes de vivienda, mejoras en la oferta de salud
pública, los programas de turismo social, construcción de escuelas y colegios y la organización
del sistema de seguridad social. 31
27
28
29
Op. Cit. Pág, 83
30
Op. Cit. Pág. 90
31
Torres, Juan Carlos. Introducción a los años peronistas. Pág. 48-49.
La gran diferencia con otros movimientos políticos que también se habían preocupado
por las necesidades de la clase trabajadora y habían ofrecido soluciones fueron las facultades
del líder para generar más confianza en los trabajadores, los reconocía como clase y como
fuerza social con reconocimiento en la vida política de la nación. “Esto se hizo patente sobre
todo en la afirmación, por parte de Perón, de que los trabajadores tenían derecho a interesarse
por el desarrollo económico de la nación y a contribuir a determinarlo.”32 ElL impacto político
de su discurso sobre los trabajadores fue posible gracias a su credibilidad: “ la clase
trabajadora recibía un papel implícitamente superior en esa totalidad y con frecuencia se la
erigía en depositaria de los valores nacionales. EL “pueblo” muchas veces se transformaba en
el “pueblo trabajador”, de modo que “el pueblo”, “la nación” y “los trabajadores” eran
intercambiables entre sí.” 33
“La glorificación de los estilos de vida y hábitos populares involucró un estilo y un
idioma político bien a tono con los sentimientos populares 34.” Además, los términos utilizados
por el peronismo fueron la re-significación de los mismos antes usados peyorativamente, como
lo fue el término “descamisado” el cual fue transformado en afirmación de valor de la clase
trabajadora, y su ingreso a los ámbitos públicos como la plaza desinflaron la “ seguridad que la
élite tenía de sí misma. También representó una recuperación del orgullo y la autoestima de la
clase trabajadora.35” Perón tenía la capacidad de decir lo que las clases populares quería oír,
además de ellos mismos cambiaron su concepción de sí mismos, comparándola con la de la
Década Infame, en la cual se sentían desprotegidos y discriminados, y ahora eran “machos”36
En escena aparece Evita, y la lealtad hacia Perón se hizo extensiva hacia ella. Fue la
intermediaria entre el líder y las masas, distribuyó premios y castigos a los dirigentes sindicales
para introducirlos en el nuevo régimen. “Se considera que la influencia de Eva Duarte de Perón
fue mayor aún que la de su marido (…) era adorada como una santa por muchos integrantes
de la clase más baja37.”Ella creó una organización semi-estatal a disposición de grupos y
personas de ingresos bajos, la Fundación Eva Perón que “disponía de considerable capital y
financiaba proyectos sociales de la más diversa naturaleza, desde hospitales, escuelas, colonias
infantiles y de vacaciones, hasta ayuda en el caso de catástrofes y campañas contra
enfermedades epidémicas38”
Ante la renuncia histórica a la vicepresidencia por parte de Eva, se pudo visualizar los
sectores empresariales y de una facción del ejército que estaban conspirando en su contra
debido al aborrecimiento que hacia ella sentían debido a sus orígenes..
“En los comicios de noviembre Perón con la compañía de Quijano, por segunda vez,
alcanzó una aplastante victoria.” Dato importante es la incorporación del voto femenino que
superó a grandes pasos el masculino.
Así se da comienzo a la segunda presidencia de Perón, en la cual se comienza el
proceso conocido como peronización de las instituciones. Se consagró al Peronismo como el
único movimiento nacional y “eliminó todo vestigio de pluralismo en la vida política: las otras
expresiones partidarias fueron relegadas a una existencia casi clandestina, la afiliación al
partido oficial pasó a ser requisito para el desempeño de cargos en la administración. Las
imágenes de Perón y Eva se multiplicaron en los libros de lectura de la escuela primaria y en los
32
Pág.33
33
Óp. Cit. Pág. 36
34
Óp. Cit. Pág. 37
35
Pág.50
36
Tomado de una entrevista a un trabajador en la década 1940-1950.
37
38
sitios más diversos del espacio público. “39 Para establecer la paz, Perón ideó un instrumento
que lograra neutralizar los efectos desestabilizadores de la lucha de clases: la “Comunidad
Organizada” en la cual los diversos grupos de interés, previamente organizados, pudiesen
dirimir sus diferencias con la supervisión del Estado. “ A la CGT se agregó la Confederación
General Económica, la nueva asociación de empresarios, y después la Confederación General
de Profesionales, la Confederación General Universitaria y la Unión de Estudiantes de
Secundaria.
En esta segunda presidencia se aprecia un cambio de rumbo retrógrado, un retroceso
en sus principios. En primer lugar, el acercamiento a EEUU, antes tildada de potencia
imperialista, en 1953 se dictó una ley destinada a atraer a inversores extranjeros, e incluso un
contrato con una firma norteamericana petrolera a la cual le confiaba la explotación del
petróleo argentino. Todas estas medidas demostraron el proceso de retirada del Estado y el
estímulo de nuevo a una rehabilitación de la economía libre de mercado, tan denostada en los
comienzo del régimen. “La tendencia neoliberal se puso de manifiesta en la actitud del
gobierno respecto a los trabajadores. Cada vez era menor el apoyo brindado a estos en los
acuerdos tarifarios o en los conflictos de derecho laboral 40.”
Mientras tanto, en las fuerzas armadas la doctrina justicialista generaba malestar, ya
que compartían la ansiedad e intolerancia hacia la apertura de las masas obreras en la política,
además del culto a la persona del General que generaba rechazo de la parte del anti
peronismo que reaccionó en lo social y en lo cultural también con pequeños gestos de
rebeldía. “Uno de los primeros síntomas del enfriamiento de relaciones entre el gobierno y las
fuerzas armadas fue el golpe del general B. Menéndez, en Septiembre de 1951”41aunque
frustrado antes de disparar algún tiro, demostró el descontento creciente en las fuerzas
armadas por el estancamiento de la economía que frenó la compra y producción de
armamentos y por el freno de los aumentos de sueldos militares.
Al tiempo que el país se deslizaba hacia la polarización política y social, el 26 de julio de
1952 muere Evita, víctima de cáncer.
Volviendo a la economía argentina, la bonanza exterior se acababa, por lo tanto Perón
apostó a dos cuestiones: especuló con el estallido de una Tercera Guerra Mundial y la segunda
fue participar en Plan Marshall. Estalló la crisis externa, dificultando la importación de
maquinaria e insumos para la industria aumentando la inflación y complicando la estabilidad
social tan ansiosamente buscada.
Para recaer en síntesis de la Segunda presidencia de Perón, este último tropezó con las
ideas y creencias que el mismo contribuyera a arraigar, así mismo entró en colisión con
intereses que eran centrales para su sustentación política, ya que enfrentó a la Iglesia
anulando sus funciones educativas, sancionando las leyes de divorcio y permitiendo la
apertura de prostíbulos. El viraje político comenzó en 1950, cuando desde la conducción se
reforzó el proceso de sometimiento al régimen En los primeros meses de 1955 se anunció la
futura reforma de la constitución para decidir la separación de la Iglesia y del Estado. De esta
forma, dividió sus apoyos en las Fuerzas Armadas y puso en marcha la conspiración militar.
Radicales, comunistas y socialistas marcharon clamando por Cristo Rey, realizando una
procesión, las cuales que estaban prohibidas.
“A la protesta civil le siguió el 16 de junio un atentado en gran escala contra la vida de
Perón;(...) Un sector de la Marina y la Fuerza Aérea se alzó en rebeldía, bombardeando y
ametrallando la Casa de Gobierno y sus alrededores. Advertido a tiempo, Perón encontró un
refugio seguro y salió ileso. Los grupos de trabajadores que acudieron a la Plaza de Mayo para
apoyar a su líder y los transeúntes que se encontraban allí no tuvieron la misma suerte; entre
ellos se contaron unos 300 muertos y 600 heridos. Esa noche, sofocado el movimiento
39
Torres, Juan Carlos. Introducción a los años peronistas. Op. Cit. Pág.56-57
40
41
insurgente, ardieron las principales iglesias del centro de la ciudad, luego de ser saqueadas por
fuerzas de choque peronistas, exhibiendo sin atenuantes la extrema radicalización del
conflicto”42
Finalmente luego de fracasada la tentativa de pacificación de Perón, les declara la
guerra diciendo desde el Balcón: que” Cuando uno de los nuestros caiga caerán cinco de ellos.
Desde hoy comienza para todos nosotros una vigilia en armas” 43
Esta última sentencia terminó de convencer a los militares de que debían destituirlo,
ocasionándose así el golpe del 16 de septiembre de 1955, a partir del cual Perón inicia un
largo viaje al exilio, por un total de 17 años.
Al finalizar esta etapa en la vida argentina, quedaron los restos de los procesos
desencadenados a partir de 1943, y las distintas visiones que de estos se conjugaron: algunos
lo vieron al régimen peronista como un “fenómeno artificial promovido por la demagogia de
un líder, ejercida sobre masas ingenuas o ignorantes, y que por ende desaparecería cuando
esas mismas masas despierten del engaño.”44 Otra forma de ver al peronismo fue la analogía a
la “guerra perdida, pues indicaba que Argentina era una sociedad peligrosamente escindida
que albergaba en sus entrañas una guerra civil larvada, pronta a estallar a menos que se
adoptara una política que forjase la unidad compacta de toda la nación “crispada y
resentida”45.
CONTEXTO INTERNACIONAL
La nueva etapa tiene de fondo internacional la conformación del mundo bipolar y las
primeras fases de la Guerra Fría, con los recuerdos imborrables del nazi-fascismo y de las
bombas nucleares estadounidenses ordenadas por el presidente Truman que borraron del
mapa a Nagasaki e Hiroshima en 1945, marcando un nuevo rumbo en el siglo XX. Comenzaron
los procesos de descolonización fruto del imperialismo ejercido a fines del siglo anterior, y
nació el Tercer mundo (hoy es distinto el concepto) o el movimiento de los No Alineados.
En Argentina…
El año de 1955 estuvo marcado por la caída del segundo mandato peronista,
ocasionado por el bombardeo a la Plaza de Mayo de la mano de la aviación naval y el golpe de
Estado en manos de la Revolución Libertadora, tomando ese título por asignarse a sí misma la
tarea de liberar a la nación Argentina del tirano que desde 1946 había gobernado con amplias
concesiones al sector trabajador y restringiendo beneficios de la clase alta. La Revolución
Libertadora encontró al país dividido en dos: peronistas y antiperonistas. Este golpe fue el
único aceptado por el país, ya que la situación era intolerable. El Gral. Perón se residió en
Asunción, luego en Panamá y finalmente en Venezuela para luego irse a Madrid.
Se abrió en ese año una nueva etapa, una etapa de semidemocrática, pues se
proscribió el peronismo, y los actores políticos solo pudieron bloquear los proyectos de sus
adversarios ya que eran incapaces de llevar adelante el propio porque nadie se ganaba el voto
de la población peronista a la misma ves que conservaba el gobierno sin el apoyo del ejército
que proscribía al peronismo. Eduardo Lonardi, quien se sublevo en Córdoba, fue el nuevo
presidente, con un fuerte clericalismo y nacionalismo que creía en la vieja alianza de 1943
donde militares nacionalistas y dirigentes sindicales, esta vez sin Perón, podría evitar su propio
aislamiento y el de quienes no querían dar vuelo a los partidos políticos tradicionales
“Los civiles y militares que participaron del derrocamiento de Juan Domingo Perón en
septiembre de 1955 y pretendieron que ese acto fuese el inicio de una “revolución libertadora”
estaban divididos en dos sectores. Por un lado, los nacionalistas y católicos que rodeaban al
42
43
Op. Cita. Pág. 72
44
Teran, Óscar Historia de las ideas en la Argentina. Pág.271
45
Óp. Cit.
primer jefe revolucionario, el general Eduardo Lonardi, entendían que los conflictos que habían
debilitado al régimen depuesto hasta volverlo insostenible se debían principalmente a los vicios
y errores de su líder e inspirador, sobre todo aquellos que lo habían enfrentado a la iglesia
católica hasta el extremo de provocar su excomunión(…) Estos sectores estaban convencidos
de que, una vez desplazado Perón, podría preservarse lo que había de rescatable en el orden
que él había creado, que no era poco. Por otro lado estaban aquellos que, animados por ideas
liberales y republicanas, consideraban que el peronismo había dado origen a un estado
autoritario, corporativo y corrupto, que, al igual que los aparatos sindicales y clientelares,
debía ser eliminado. No se trataba simplemente de cortar la cabeza, sino de desarmar todo el
sistema de poder para que el país volviera a la normalidad, identificada con la vigencia de la
Constitución de 1853. Este segundo sector – que tenía más seguidores entre los demás partidos
políticos y los empresarios– logró desplazar a Lonardi de la presidencia de la nación en
noviembre, sólo dos meses después del golpe, y colocó en su lugar al general Pedro Eugenio
Aramburu, prototipo de lo que Perón llamaba “la contra” o los “gorilas”.”46 Cuestiones a tener
en cuenta es la búsqueda de la igualdad por aquellos sectores que habían sido atendidos
durante el gobierno peronista, y que ahora habían quedado movilizados, sumado a que la crisis
de legitimidad política crecía ante la poca adhesión que el gobierno militar tenía socialmente
desde la masa popular.
La sociedad quedó dividida como bien lo demuestra el siguiente párrafo de Ernesto
Sábato:” Aquella noche de septiembre de 1955, mientras los doctores, hacendados y escritores
festejábamos ruidosamente en la sala la caída del tirano, en un rincón de la antecocina vi cómo
las dos indias que allí trabajaban tenían los ojos empapados de lágrimas. Y aunque en todos
aquellos años yo había meditado en la trágica dualidad que escindía al pueblo argentino, en
ese momento se me apareció en su forma más conmovedora” 47
Cuando asumió el general Pedro Eugenio Aramburu, se mantuvo la permanencia de
Isaac Rojas en la vicepresidencia. Sus prerrequisitos fueron la reeducación de las masas,
aunque combinó medidas de persuasión y represión. “Intervino la CGT, disolvió el partido
peronista, inhabilitó a sus integrantes para obtener empleos en la administración pública y
proscribió de la representación gremial a quienes habían ocupado cargos sindicales a partir de
1952.”48
El General Perón y sus seguidores, aún con la esperanza de poder volver, trató de
organizar una rápida contraofensiva dirigida desde Asunción del Paraguay llamando a una
insurrección del pueblo. La única que pudo realizarse fue la del General Juan José Valle en
1956, pero el gobierno ejerció la represión fuertemente con la ley marcial, fusilando a los
militares, civiles y obreros no vinculados de modo directo. Este último hecho pasó a la historia
como “Operación Masacre” y develó la nueva dimensión del siglo XX en Argentina: la pena de
muerte por razones políticas.
Viendo que la supervivencia del peronismo no era posible en los alzamientos, Perón
recurre a los “sindicatos y grupos militantes que se venían organizando desde su
derrocamiento. Así, se consolidaron liderazgos de Augusto Vandor en metalúrgicos, Andrés
Framini en textiles, José Alonzo en vestidos y Amado Olmos en sanidad.” 49Así dieron origen a
las 62 Organizaciones. “Las bases sindicales también nutrieron a los grupos de la Resistencia
que, entre fines de 1956 y 1957 y en forma muy dispersa y desorganizada, realizaron infinidad
de actos de sabotaje, colocaron bombas caseras (“caños”) en lugares públicos o empresas, y
expresaron su rechazo a la proscripción pintando leyendas en las paredes de los barrios
populares y distribuyendo volantes y periódicos que llamaban a mantener viva la lealtad a
Perón.”50
46
Novaro, Marcos Historia de la Argentina 1955-2010. Pág.13-14
47
Sábato, Ernesto El otro rostro del peronismo, Buenos Aires, sin editorial, 1956
48
Tcach, César Golpes, proscripciones y partidos políticos Pág.24
49
Novaro, Marcos Historia de la Argentina 1955-2010. Pág. 27
50
“Cuando sus llamados a la insurrección fracasaron, Perón cambió una vez más de
táctica. Por un lado, trató de reconciliarse con la jerarquía católica (…) lo mismo intentó con el
Ejército y los empresarios, presentándose una vez más como la mejor barrera contra el peligro
de la guerra social. Por otro lado, dio su aval a algunos partidos neoperonistas que buscaron
sortear la proscripción y participar de las elecciones previstas para 1957 y 1958. Ex
gobernadores y figuras con prestigio local que, al igual que los sindicalistas, tenían interés en
gestar un “peronismo sin Perón” organizaron fuerzas que formalmente respetaban la
prohibición de adherir a la doctrina y la persona del ex presidente.”51
Otra maniobra dirigida a aprovechar el apoyo de los sectores peronistas impedidas de
votarlo, fue intercambiar sus votos con Frondizi, elegido presidente del Comité Nacional, que
propone una candidatura con los miembros más representativos del movimiento Intransigente
y Renovación. Se aprueba la fórmula Frondizi-Gómez estableciendo la UCRI con la idea clara de
un acercamiento al sector peronista contra la UCRP donde se encontraba Balbín con un
profundo resentimiento hacia el mismo sector. Frondizi optó por acercarse a las expectativas
de los votantes peronistas. En febrero de 1958, Perón anunció desde una conferencia de
prensa realizada desde Santo Domingo su respaldo a la candidatura presidencial de Frondizi. A
cambio de ello, “Frondizi se comprometía a poner en práctica una amplia amnistía, reconocer
legalmente al justicialismo y eliminar las trabas a la consolidación de la CGT”52
“El pacto con Perón aseguró el triunfo de Frondizi. Pero lo obligaría a cumplir, desde la
presidencia, algunas de las promesas que había hecho a cambio. Y tendría que hacerlo sin
dañar su prestigio entre los no peronistas, civiles y militares, cuyo concurso necesitaría para
sostenerse en el poder.”53
“Cuando asumió la presidencia, en mayo de 1858, tenía 49 años (…) su acción se inspiraba en
el clima de época: los dos grandes proyectos desarrollistas de América del Sur, el suyo y el del
presidente brasileño Kubitschek, eran respuestas que se vinculaban al agotamiento de las
experiencias populistas sustentadas en el Estado.”54
En el nuevo contexto internacional, marcado por el patrón dólar y la liberalización
económica- en 1956 la Argentina había adherido al FMI y al Banco Mundial- la teoría
desarrollista suponía la necesidad de conciliar políticas de expansión industrial a través de una
capitalización originada en recursos externos con la vigencia de prácticas electorales e
instituciones típicas de la democracia representativa, además de una integración del
proletariado y sus sindicatos. La primeras medidas: anuló el decretó que prohibía los símbolos
peronistas, concedió aumento salarial y confirmó el poderío de la CGT.
Para la Revolución Libertadora, Frondizi había roto el hilo de la misma, solo en las
medidas universitarias, fue cómplice de la Iglesia Católica y trato de reglamentar el
funcionamiento de universidades privadas, a contra del movimiento estudiantil.
En lo económico, para iniciar el plan desarrollista, el presidente atrajo a los capitales
extranjeros, sobre todo abriendo las puertas a la exploración y explotación de los yacimientos
petrolíferos, aunque estas medidas fueron excesivamente favorables a los inversores.
En lo cultural se respiraba junto con el desarrollismos, el modernismo implantado por
las élites, que se expresó sobre todo en las universidades. Las nuevas lecturas llegaron con
Marx, Freud, las corrientes del existencialismo que se diseminaron entre los grupos
intelectuales.
Las traiciones de Frondizi al espíritu de la Revolución Libertadora, a la Reforma
Universitaria y a la Soberanía Nacional, y luego la instauración de un duro plan económico
hicieron renunciar a las figuras que mantenían la relación del gobierno con el sector peronista:
Frigerio y Blejer. Al excluir al justicialismo de las elecciones, la ruptura fue un hecho
51
52
Tcach, César Golpes, proscripciones y partidos políticos Pág.28
53
Novaro, Marcos Historia de la Argentina 1955-2010. Pág.37
54
Tcach, César Golpes, proscripciones y partidos políticos Pág. 30
irreversible y en junio de 1959, Perón denunció que Frondizi había traicionado el pacto pre-
electoral.
El recrudecimiento de la huelgas y el sabotaje como instrumento de resistencia obrera
tuvieron como contrapartida una participación cada vez más franca de las Fuerzas Armadas en
la represión. Surge el plan CONINTES (Conmoción Interna del Estado) que le da la facultad al
ejército de arrestar a gremialistas, lo cual permitió encarcelamiento de millares de personas,
acusadas de ser izquierdistas o pertenecer a la resistencia peronista.
Desde una visión bélica contra el “tirano Prófugo” y sus seguidores, fue implantado
una fórmula de represión militar: el planteo. Frondizi tuvo 32 planteos, los cuales se debatían
entre la legalidad y la anti-integración, y finalmente fue obligado a romper relaciones con
Cuba. En 1962, la campaña electoral fue ampliamente ganada por el peronismo y Frondizi fue
obligado por los militares a renunciar, apresado y recluido a la Isla Martín García. A partir de
este episodio, la vida política sigue debatiéndose sobre la cuestión peronista: “ Así, la caída de
Frondizi y la puja que desató en las fuerzas no solo expresaba los disensos; también
manifestaban un nuevo y peculiar consenso sobre lo que era necesario hacer: una auténtica
revolución que cambiara de raíz a los actores, sus lineamientos y sus comportamientos(…) se
habían formado dos bandos: por un lado los llamados “azules”, que apostaban a una salida
electoral que intentara por nuevas vías la integración de los peronistas(…) por el otro lado, los
“colorados” que controlaban la Armada pero eran minoría en el Ejército, estaban convencidos
de que había que excluir definitivamente a los peronistas, como así mismo a todos los partidos
que estuvieran tentados a negociar con ellos.”55
En el lugar de Frondizi asumió en su lugar José María Guido quien anuló las elecciones
de marzo y dispuso el envío de interventores federales a las provincias. Renovó la Argentina
tradicional, liberal en lo económico conservadora en lo político y reaccionaria en lo cultural.
Las reformas económicas golpearon al sector industrial y casi al final de su mandato, Guido
nombró a Martínez de Hoz como ministro de economía. Estableció también un nuevo estatuto
político en donde los partidos eran declarados en estado de asamblea, y prohibió la alusión a
la “lucha de clases”, junto con la propaganda peronista. La impunidad fue el común
denominador, sobre todo contra la comunidad judía.
Llegando al año 1963, “se empleó la primera vez en la historia electoral argentina el
sistema de representación proporcional en los comicios presidenciales. Arturo Illia obtuvo cerca
del 25% de los sufragios”56 Sus medidas fueron las siguientes: anulación de los contratos
petroleros firmados con empresas extranjeras realizados por Frondizi, congelamiento de
precios de medicamentos, intervención en precios de canasta familiar, mayor presupuesto en
educación, salud y quiso modificar la Ley de Asociaciones Profesionales para romper el
monopolio peronista en los sindicatos. En respuesta a ello que no estuvo ni cerca de contentar
a la CGT, miles de trabajadores tomaron fábricas e hicieron huelgas. Además, desde el
enfrentamiento entre “azules y colorados” había tomado fuerza el General Juan Carlos
Onganía, cuyo poder en ejército seguía creciendo, siendo imposible de frenar por el
presidente, ya que aquel soldado “azul” ganaba prestigio dentro del Ejército, que a partir del
nuevo contexto internacional del triunfo de una revolución socialista en el continente (Cuba) y
debido a ello el afianzamiento de la doctrina de seguridad nacional impulsada por EEUU, en
donde se buscaba eliminar el “enemigo interno” ganó importancia.
Mientras tanto, surgieron los conflictos facciosos dentro del movimiento peronista:
“Perón intento diluir el poder de Vandor a través de distintas iniciativas, como la creación de
una Junta Coordinadora Nacional, y finalmente envió al país a su esposa, María Estela
Martínez, con la finalidad de reorganizar el movimiento. Con su beneplácito, José Alonso
rompió con Vandor y creó las 62 Organizaciones de Pie Junto a Perón.”57
55
Novaro, Marcos Historia de la Argentina 1955-2010. Pág 61.
56
Tcach, César Golpes, proscripciones y partidos políticos Pág.43-44.
57
Tcach, César Golpes, proscripciones y partidos políticos Pág. 48
Esta situación tensa termina con otro golpe militar en el año 66, que derrocó a Illia. Los
comandantes de las tres Fuerzas Armadas destituyeron al presidente, al Parlamento, a la
Corte Suprema de Justicia y disolvieron todos los partidos políticos. Asumió la presidencia Juan
Carlos Onganía, y en “los días siguientes fue claro que el golpe contó con la aceptación de gran
parte de la población y de casi todas las organizaciones de la sociedad ” como las 58
organizaciones burguesas a al igual que la prensa e incluso el peronismo y el mismísimo

General Perón, pues aparentemente el golpe solo era contra un gobierno ineficaz, lento e
irrepresentativo.
“Desde 1955 el régimen político argentino no había logrado digerir la fuerza electoral
del peronismo. La posibilidad de que el movimiento ganara elecciones, aunque no fueran
presidenciales, conducían a un golpe, como la había demostrado la caída de Frondizi en 1962.
Por otro lado, la proscripción del peronismo, con su enorme arrastre en el sector popular,
corroía la legitimación de las instituciones estatales y de su vacilante dominación” 59
“Con una naturalidad acorde con la creencia de estar poniendo las cosas en su lugar,
los militares anunciaron el comienzo de una nueva etapa completamente nueva en la vida del
país, a la que llamaron “Revolución Argentina” . 60
Como cuenta O´Donnell, habías distintas corrientes vigentes dentro de las Fuerzas, a
pesar de que cedieron todos los poderes a Onganía, estas corrientes nunca se apagaron:
profesionalistas, paternalistas, nacionalistas y liberales autoritarios.
Onganía planteó el reordenamiento de la sociedad y de las instituciones en tres tramos
o ”“tres tiempos”, uno en el que el énfasis recaería sobre los económico y el ordenamiento,
otro posterior en el que el tema principal sería lo social, apuntando a la justicia distributiva y
en que se daría impulso a transformaciones estructurales posibilitadas por el ordenamiento
previo y otro, final, en el que el énfasis recaería sobre lo político, articulado por un nuevo
estado y por las organizaciones auténticamente representativas de la comunidad”61
Las medidas adoptadas fueron las siguientes: se redujo personal administrativo público
y de empresas estatales, se congelaron los salarios, se intervinieron los ingenios tucumanos,
aportó sostenimiento a la empresa privada, procedió a la represión en las universidades, la
asfixia cultural logró la fuga de cerebros, ocupando su lugar los sectores conservadores y
clericales. En el Ministerio de economía asumió Adalbert Krieger Vasena, “pero las
incongruencias de la política económica habían tenido la virtud de dejar descontentos a todos.
Y, además, la evidencia que los planes de “racionalización” seguirían adelante, agregada a la
ley de arbitraje obligatorio, hicieron pasar a la oposición al sector “62 Organizaciones de Pie””62
Con la asunción de Vasena como ministro de economía, los liberales adquirieron el
control del aparato económico, gestando así sus propios beneficios oligárquicos.
Con respecto a los sectores que resistían y esperaban la vuelta del General, se gestaron
nuevas organizaciones con ambiciones socialistas: nace la oposición sindicalista: la CGT de los
Argentinos, influenciados por la muerte mística del Che. El Cordobazo es un claro ejemplo de
oposición a la violencia reaccionaria de los explotadores y de la dictadura la violencia
revolucionaria y libertadora de los explotados.
“Se desató una revuelta aún más intensa en Córdoba: miles de estudiantes y
trabajadores encabezados por Agustín Tosco, de Luz y Fuerza, y René Salamanca, miembro
sindical de varias automotrices de la ciudad, con el apoyo activo de los vecinos, incluso de
barrios acomodados, ocuparon las calles, levantaron barricadas e hicieron huir a la policía.
Actuaron movido tanto por la solidaridad con pares del litoral como por las demandas
específicas desatendidas y el generalizado rechazo a hacia las autoridades locales…(…) el
58
O´Donnell. Guillermo El Estado Burocrático Autoritario Triunfos, derrotas y crisis Pág. 65
59
O´Donnell. Guillermo El Estado Burocrático Autoritario Triunfos, derrotas y crisis Pág.70
60
Novaro, Marcos Historia de la Argentina 1955-2010. Pág
61
O´Donnell. Guillermo El Estado Burocrático Autoritario Triunfos, derrotas y crisis Pág. 95
62
O´Donnell. Guillermo El Estado Burocrático Autoritario Triunfos, derrotas y crisis Pág. 112-113
Ejército tardó dos días en restablecer el orden, y dejó a su paso 14 muertos e imágenes que
revelaban una sociedad en ebullición y la fragilidad del poder gubernamental”
Luego del Cordobazo, Onganía quedó desprestigiado por su ineficacia para accionar y
por las críticas a la represión desatada y mal administrada. La movilización cordobesa puso en
evidencia que el consenso inicial había dejado de existir y que ningún sector relevante apoyaba
al gobierno. Mientras su poder decrecía, una nueva conmoción debió suceder para que
finalmente Onganía fuera desplazado por Livingston. “Esa conmoción provino de un grupo de
guerrilleros recién creado, Montoneros, con el secuestro del ex presidente Aramburu el 29 de
mayo de 197063” suceso que puso aún más en evidencia la ineficacia de las medidas de
represión, al no poder detener a quienes habían dejado el cuerpo sin vida de Aramburu.
“Este hecho tuvo u impacto profundo sobre la vida del país, que se intern ó a partir de
entonces en un clima abiertamente dominado por la violencia política (…) ya no se trataba de
la violencia dispersa y acotada de la Resistencia (…) sino de su uso planificado contra la vida de
los “enemigos”. El de Aramburu no fue el único caso: en junio de 1969 Vandor hab ía sido
baleado (…) y en agosto de 1970 Alonso correría igual suerte(…)En aquella época operaban ya
activamente el Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP) y las Fuerzas Armadas Revolucionarias
(FAR);pero la organización más exitosa sería sin duda Montoneros, que pronto absorbió a las
FAR.64
Luego de estos actos, la situación era irrevocable, y dentro del ejército se encabezó
una conspiración al mando del Gral. Lanusse, para destituir a Onganía. Así pues, la Junta de
Comandantes controlada por él, designó a Marcelo Levington como presidente de la Nación, a
cambio de que este consulte cuestiones importantes con la Junta. En términos económicos,
buscó promover la industrialización, ante las multinacionales en retirada que vinieron con
Frondizi.
Su jugada política es más reprochable: siguió los pasos de Onganía e insistió en la
“apertura política” y “exigió a Perón un renunciamiento: la promesa de que no aspiraría a la
presidencia como condición para su regreso al país. Lo único que consiguió fue convencer al
radicalismo de que no habría forma de acordar con los militares y que por lo tanto era preciso
hacerlo con Perón. Así nació en noviembre de 1970 la hora del Pueblo (…) más que a este
instrumento, Perón apostaba ahora a la movilización y a la protesta, incluido el ejercicio de
varias formas de violencia. De allí su abierto respaldo a Montoneros.”65
Finalmente, otra protesta masiva en Córdoba, esta vez llamada “viborazo” (porque ve
al marxismo como una víbora) que consistió en el levantamiento obrero y popular fue la que
echó por tierra este segundo gobierno de la Revolución Argentina pues contó con una
presencia importante de guerrilleros. “Lo que quedaba de la Revolución Argentina sería un
duelo entre Perón y Lanusse, con el telón de fondo de una revolución popular en ciernes.”66
Agustín Lanusse propone el Gran Acuerdo Nacional en el que intentaba introducir a la
Hora del Pueblo, donde también se contaba a Perón, además de las diversas fuerzas armadas,
políticas y sociales, con la aceptación de parte de todos de un programa antisubversivo, la
inclusión de las FFAA en el esquema institucional y un acuerdo a la candidatura presidencial.
Si bien Alfonsín ya estaba rondando en las elecciones, la apertura del peronismo
rompía con los esquemas, sobre todo siendo apoyado por la Juventud Peronista y Montoneros
al proponerlo como candidato para la patria. Perón alentó en 1971 y 1972 a las organizaciones
armadas peronistas a organizarse en formaciones especiales y creó grupos políticos
moderados. Luego de los asesinatos de los dirigentes de ERP y Montoneros (Santucho y Vaca
Narvaja) los grupos armados se movilizan aún más, por otro lado, Perón resolvió designar
como candidato a Héctor J. Cámpora quien era apoyado por los grupos juveniles, preparando
63
Novaro, Marcos Historia de la Argentina 1955-2010 Pág. 105
64
65
Novaro, Marcos Historia de la Argentina 1955-2010 Pág.110
66
así el camino para su regreso al gobierno, pues ya había vuelto al país el 17 de noviembre de
1972, quedando impedido de postularse a la presidencia por la ley impuesta de convocación a
elecciones que permitía postularse a todo aquel que residiera en el país desde agosto de 1972.
Ganó la fórmula Cámpora-Solano Lima, aceptada por Lanusse, mientras que Perón
vuelvió a Europa, sabiendo que su vuelta al gobierno argentino era un hecho.
En junio de 1973, regresa al país, y Cámpora y su vicepresidente renuncian, para que
Perón se postule a las elecciones llamadas en septiembre, junto a su esposa María Estela
Martínez de Perón.
Logrando la presidencia con el 62% de los votos, la situación a la que se enfrentó lo
hizo cambiar de aliados, y su hombre de mayor confianza, López Rega dirigió la Alianza
Anticomunista Argentina (triple A) que se dedicó a la represión y asesinato de casi un millar de
militantes de izquierda y miembros de Montoneros.
La ruptura era inevitable, y se produjo el día del Trabajador de 1974 en Plaza de Mayo,
donde la consiga de las banderas y coro Montoneros gritaban: ¿Qué pasa General, que está
lleno de gorilas el gobierno popular? Perón reaccionó repudiando a esos “estúpidos que
gritan”.
A los dos meses siguientes, el 1 de julio de 1974, el General muere, dejando un vacío
de poder, pérdida del control de la economía y el choque de las fuerzas en pugna.
“Isabel, su sucesora, carecía de las capacidades mínimas para enfrentar estos
problemas, aunque de todos modos obtuvo cierto respaldo de la dirigencia política y sindical
peronista, carente de una mejor alternativa y aterrorizada por las cercanías del abismo 67”.
Siendo esas las circunstancias, la presidenta inspirada por López Rega, recurrió a las
FFAA contra los subversivos, dando comienzo a la circulación de las listas de los condenados a
muerte por la Triple A.
Ante un mal manejo con la CGT, la Plaza de Mayo llena de obreros, la presidente pide
licencia, con lo cual se gesta entre el gobierno provisional la posibilidad de un gobierno cívico
militar para que puedan prepararse elecciones. “Pero las probabilidades de encontrar una
salida institucional no eran muchas (…) la espiral de descomposición de la autoridad
gubernamental ya era incontenible”68
Llegado a marzo de 1976, el déficit pública era mayor, aumentó el desempleo, el país
estaba casi sin reservas y el uso de la fuerzas había escapado de su control: centenares de
muertos, cadáveres acribillados, se encontraban en la periferia de las ciudades. Con las cosas
así, los militares esperaron el pedido de la sociedad que ya los había expulsado del gobierno
tres años antes, a que los llamaran a poner las cosas en orden. “El golpe tenía las puertas
abiertas. Una parte de la opinión pública esperó deseosa la intervención y la otra, mayoritaria,
resignada69” Consumado el golpe, este se autodenomina Proceso de Reorganización Nacional
cuya “función originaria era fundar un sistema político estable” al mando del General Jorge
Rafael Videla, quien establece este objetivo a largo plazo, mientras que en la inmediatez, el
ministro de economía José Alfredo Martínez de Hoz anunció un programa económico
destinado a la apertura de la economía y a la subvención del Estado. “Al mismo tiempo, se
organizó un plan altamente represivo para eliminar las organizaciones guerrilleras y las voces
de protesta, y modificar el comportamiento de los actores políticos y gremiales 70.”
Tanto este golpe como el de 1966, son distintos al resto por su característica de rol
protagónico en la restructuración del Estado y la sociedad, en cambios, los golpe de 1930 a
1962 son considerados clásicos por interrumpen con un interinato castrense la vida
institucional del país con la intención de poner orden en la cosa pública.
67
68
Op. Cit.
69
Quiroga, Hugo El tiempo del proceso
70
“La flamante Junta Militar, integrada por el general Jorge Videla, el almirante Eduardo
Massera y el brigadier Orlando Agosti, resolvió declarar caducos los mandatos constitucionales
del presidente y de los gobernadores, disolver el Congreso Nacional, las Legislaturas
provinciales, remover a los miembros de la Corte Suprema, suspender la actividad política de
los partidos y la actividad gremial de los trabajadores, empresarios y profesionales 71.”
Coparticiparon las tres armas, teniendo preponderancia el Ejército y recayendo la
Presidencia de la Nación y la de la Junta Militar en la misma persona: Videla.
Sus objetivos propuestos por este Proceso fueron: sus principales objetivos: 1)
restitución de los valores esenciales del Estado; 2) erradicación de la subversión; 3) promoción
del desarrollo económico; 4) posterior instauración de una democracia republicana.
En una breve síntesis de las presidencias de facto, se delinean las características de la
primera, la de Videla: fue la presidencia más larga del proceso, duró 5 años y tuvo 3
propuestas políticas, entre ellas la conformación de un partido político nacional y una
económica, la de Martínez de Hoz, que fue la única que se llevó a cabo con coherencia. Criticó
a los partidos políticos, y he intentó dar origen a otro modelo constitucional, en donde el
Ejército fuera una tutoría política. En lo económico, el único plan propuesto destruyó la
industria argentina y otros sectores productivos por la apertura de la econom ía, la paridad
cambiaria y la política arancelaria.
La idea de restablecer el orden, conllevaba en si eliminar aquella parte de la sociedad
que contenía conflictos, o usando las metáforas de enfermedad, tumor, extirpación, cirugía
mayor, para dirigirse a los grupos subversivos.
“La dominación autoritaria puso en marcha un sistema represivo, nunca antes
conocido en la Argentina, basado en la intimidación, la tortura, la muerte y la desaparición de
personas,”72
“La planificación general y supervisión táctica estuvieron en manos de los más altos
niveles de conducción castrense (…) Las órdenes bajaban, por la cadena de mandos, hasta los
encargados de la ejecución, los Grupos de Tareas- integrados principalmente por oficiales
jóvenes, con algunos suboficiales, policías y civiles, que también tenían una organización
específica”73 Los que sobrevivían a la tortura iniciaban una detención prolongada en alguno de
los trescientos cuarenta centros clandestinos de detención, donde la mayoría terminaba
siendo “trasladado” es decir, ejecutados clandestinamente. Se trató en su mayoría de jóvenes
de entre 15 y 35 años. “El sistema de detención-desaparición respondió al siniestro objetivo de
someter al individuo al mayor aislamiento y soledad, con la intención de desconectarlo de la
vida pública y la vida privada, para facilitar la rapidez de las investigaciones. En su desamparo,
el detenido-desaparecido, privado de toda protección legal y de defensa, fue sometido al
dominio total de sus captores (siendo torturado, forzado a colaborar, asesinado), sin que se
recabaran noticias de su persona. La violación sistemática de los derechos humanos durante el
régimen militar, con su secuela de dolor y sentimiento de injusticia para tantas familias
argentinas que aún reclaman por 30.000 desaparecidos, degradó el ejercicio del poder político,
al mismo tiempo que humilló a una sociedad en la cual ciertos miembros se transformaron en
perseguidores de otros”74
“En el ámbito cultural, el "shock autoritario" desencadenado por el golpe de estado
liderado por el general Onganía tuvo severas consecuencias. Imbuido de una mirada
autoritaria incapaz de discriminar entre el modernismo experimentalista y las actitudes
políticas expresamente orientadas al cambio revolucionario, el régimen gobernante terminó
por unificar las "almas" Lennon y Guevara de los años 60 (tal como las caracterizamos en la
lección anterior). De modo que, para combatir a esta última, el régimen gobernante consideró
71
72
73
Romero, Luis Alberto Breve Historia Contemporánea de la Argentina 1916-2010 Pág.159
74
necesario desplegar campañas contra el pelo largo, los músicos de rock, el uso de la minifalda,
así como también secuestrar libros, censurar y prohibir películas como El silencio de Ingmar
Bergman o Blow-up de Michelangelo Antonioni, allanar editoriales (y hoteles por horas). Es
muy conocido el efecto destructivo que, respecto de la Universidad, implicó la intervención
autoritaria emblematizada en la llamada "noche de los bastones largos" la cual produjo un
extraordinario drenaje de docentes e investigadores.”75
“El gobierno militar nunca logró despertar ni entusiasmo ni adhesión explícita en el
conjunto de la sociedad, pese a que lo intentó. A mediados de 1978, cuando se celebró el
campeonato mundial de fútbol, las máximas jerarquías asistieron a los estadios donde la
Argentina obtuvo el título”76(…) pero solo ganó la pasividad de la sociedad.
Entre 1976 y 1978, fue el período en que la represión fue más fuerte, y se produjo casi
un silenciamiento general de la sociedad, pero en un contexto así de “desolado nació el
movimiento por los derechos humanos, encarnado en la figura de sus militantes. La consigna
"aparición con vida" voceada por las Madres de Plaza de Mayo, junto a los otros organismos,
creó un espacio político delimitado por el campo de los derechos humanos. En adelante, el
lugar de los derechos humanos coincidirá con el espacio público político.” 77
El último año de Videla finalizó en marzo de 1881, año en el cual la crisis del régimen
autoritario comenzó a consolidarse, siendo reemplazado por Roberto Viola, quien antes de
asumir ya tenía un golpe desde los grupos opositores. Este presidente de facto tuvo una
marcada tuvo una marcada tendencia aperturista en lo político y un gran cambio en lo
económico: “Se señaló lo que el nuevo gobierno entendía que eran los cuatro grandes
problemas de la economía argentina: 1) la alta inflación; 2) el atraso cambiarlo; 3) la falta de
rentabilidad empresarial; 4) el mínimo crecimiento. La apertura de Viola implicó un marcado
distanciamiento del plan de Martínez de Hoz, que al poco tiempo se detendría, como
consecuencia de las presiones nacionales e internacionales que recibió el ministro de
Economía, Lorenzo Sigaut.”78
En la sociedad había un ambiente de distención, comienzan los reclamos y
manifestaciones sociales, una sociedad que comenzaba a tener respeto así misma después de
años de autoritarismo. La enfermedad del presidente se produjo en un ambiente sobrecargado
de suposiciones y cálculos políticos que llevaron al general Viola a ceder interinamente el
mando al ministro del Interior, general Liendo, mientras los sectores más duros de las Fuerzas,
preparaban la elección de Leopoldo Fortunato Galtieri.
Con el retorno de la ortodoxia económica liberal, el gobierno de Galtieri retrotrajo las
cosas a la situación anterior a la asunción del ex presidente Viola. Asumió en un momento
complicado, donde el gobierno militar perdía prestigio y en la peor coyuntura económica del
país, con lo cual debía buscar un suceso que le elevara la imagen de las FFAA y que sirviera
como distracción de la crisis económica en la que se hundía el país: La Guerra de Malvinas,
usada como medio de conferir legitimidad a la crisis del régimen.
“En los cien días transcurridos entre el 22 de diciembre de 1981 y el 2 de abril de 1982
el proyecto político de Galtieri se asentó en un trípode basado, en primer lugar, en la promesa
de confección de un estatuto que regiría el funcionamiento de las agrupaciones políticas y la
preparación de un cronograma político; en segundo término, trató de crear un partido político
oficial y, por último, intentó restaurar la economía liberal.” 79
Pero la aventura del Atlántico, y la negación de EEUU que eligió apoyar a Inglaterra le
salió muy caro al régimen militar, luego de la rendición anunciada por Galtieri, este mismo fue
desalojado del poder.
75
Teran, Óscar Historia de las ideas en la Argentina. Pág. 284
76
Romero, Luis Alberto Breve Historia Contemporánea de la Argentina 1916-2010 Pág.161
77
78
Op. Cit
79
Op.Cit.
“El país, por primera vez, había perdido una guerra y se encontraba, pese a la
solidaridad demostrada por Latinoamérica, aislado internacionalmente. La sociedad no ocultó
su frustración y el descontento por el fracaso militar; así, el tercer gobierno del proceso militar
terminaba seis meses después de su comienzo agitado, dando lugar a la crisis institucional más
grave del Estado autoritario. Se inauguraba, de tal forma, una situación de acefalía
institucional que derivaría en la disolución del triunvirato gobernante” 80 Así, tras 5 días de
conmoción política, queda a la cabeza Reynaldo Bignone, encargado de realizar la transición a
la democracia y fijar el fín del Proceso.
A la apertura de elecciones democráticas, salió beneficiado Raúl Alfonsín, candidato de
UCR “El acto electoral del 30 de octubre tuvo un doble significado: por un lado, clausuró el
régimen autoritario de 1976 y cerró el sistema de alternancia de poder entre civiles y militares
y, por otro, quebró la hegemonía electoral de cuatro décadas del peronismo.” 81
Como bien ha señalado Natalio Botana, a partir del golpe de 1930 la legitimidad
democrática se constituyó en el problema permanente de la Argentina contemporánea. Es
decir, desde 1916 que la democracia no pudo consolidar un poder legítimo y una cultura
política que la sostuviese.
El 30 de octubre de 1983 tuvieron lugar las "elecciones fundacionales " que abrieron
paso a una nueva etapa en la vida democrática. El triunfo electoral del radicalismo con la
fórmula Raúl Alfonsín-Víctor Martínez, que obtuvo casi el 52% de los votos, planteó la
posibilidad de una vuelta de página en la accidentada historia política argentina y el inicio de
un renovado liderazgo social. El nuevo presidente asumió el 10 de diciembre de 1983 y
convocó a la población a una concentración en la Plaza de Mayo. Las medidas que tomó fueron
las siguientes: “el juicio a las juntas militares; la labor de la CONADEP (Comisión Nacional sobre
la Desaparición de Personas), que fue sin duda el espacio de la sociedad civil; el tratado de paz
con Chile sustentado por un plebiscito; la implementación de un programa económico
heterodoxo conocido como Plan Austral, que suscitó inmediatamente un amplio apoyo de la
sociedad; el Congreso Pedagógico Nacional, que promovió un debate horizontal en el sistema
educativo, con la participación de diversos sectores, sobre la futura ley de educación, y la
sociedad, que se abroqueló en las instituciones de la democracia ante la rebeldía militar de
1987 y 1988 manifestándose masivamente en las plazas públicas de todo el país en defensa de
la democracia.”82
Finalizado el recorrido histórico de nuestra Argentina, siempre insertada en una
Historia mundial en la cual cobran sentido ambas partes, porque no existiría sin la otra, estoy
en condiciones de evaluar los siguientes puntos.
- Sin duda, la conformación del Estado Argentino y su propuesta de captación de
mano de obra europea fue un proceso fundamental para que se gestara esa clase
media que va a pedir representación y participación, formando un partido político
que tendrá grandes intervenciones incluso en nuestra actualidad: la UCR
- No es necesario advertir, que todo el proceso gestado hasta 1943 llevaron al
ascenso de la persona que más influencia tuvo en la política y en las vidas de los
trabajadores argentinos, y fue quien hasta su muerte en 1973 influenció
ampliamente en los movimientos políticos y las decisiones, dividiendo a la
sociedad entre quienes lo apoyaban y esperaban, y entre quienes esperaban que
jamás volviese.
- Otra cuestión a retomar es la serie de golpes militares que ingresaron a dicho
sector en las cuestiones políticas desde 1930, habiendo poco interines de
democracia y semidemocracia.
80
81
82
- La otra cuestión, de la que siempre nos olvidamos resaltar son los intereses y
necesidades de las personas, cuestiones por las que se animaron a reunirse,
movilizarse, luchar, armar partidos, sindicatos, negociar o resistir.
- Y por último, la violencia política ejercida institucionalmente o no, sobre población
civil, que imbuidos o no de ideas de izquierda, no era realmente necesaria
emplearla para eliminarlos de la sociedad.

La Historia Argentina A Partir Del Golpe de Estado de 1943

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Trabajo final

Alumna: Figueroa, Camila

En este contexto belicoso y revolucionario, nuestro país se insertó mundialmente

El gobierno de Castillo no necesitaba simpatizar con los nazis para aferrarse a la

Ante la comparación de este experimento militar con un régimen fascista,

organizaciones burguesas a al igual que la prensa e incluso el peronismo y el mismísimo

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