Sei sulla pagina 1di 2

Errores comunes en la práctica de ABP1

Por Sinuhé Navarro Martín, autor en el blog educativo 10 tipos de personas

No planificar de antemano los momentos de evaluación


No podemos llevarnos la evaluación al momento final de entrega de productos. Hay
que evaluar el proceso. Asimismo hay que ​definir cómo evaluar el proceso
además de los productos.

Incluir criterios de evaluación imposibles de evaluar


O no necesariamente imposibles, sino que no sabemos cómo medirlos, verificarlos o
no disponemos de los medios necesarios.

No incluir los criterios de evaluación en el enunciado


Estos deben servir de guía, en la definición del proyecto por parte del profesor y en la
resolución del mismo por parte del alumno. Un proyecto debe nacer de una
necesidad de aprendizaje basada en unos objetivos y unos criterios de evaluación.
Para ello, sugiero el uso de rúbricas que incluyan cada uno de los criterios y una
descripción de sus diferentes niveles de ejecución. El alumno debe saber de
antemano qué objetivos se persiguen para garantizar el éxito del proyecto.

No hacer nuestros proyectos transversales


Aunque el proyecto nazca de las competencias o criterios de evaluación, no podemos
desperdiciar la ocasión de enriquecer esa posibilidad de aprendizaje y motivación.
Dicha transversalidad debe ser evaluada igualmente. Podemos bonificar los
proyectos que transmitan un mensaje social, o que eduquen o ayuden a adquirir
habilidades o competencias (aunque no formen parte del curriculum). Por ejemplo el
uso de las TIC, el trabajo cooperativo, una exposición oral, etc.

Plantear el proyecto en bruto


Hay que dividir el proyecto en diferentes hitos o tareas, independientes y
cronológicamente ordenadas. Y establecer un calendario de ejecución de dichas
tareas. De esta manera los alumnos pueden conocer el estado de ejecución de su
proyecto desde el principio y evitarán que se acumule demasiado trabajo para el
final. Conforme nuestros alumnos vayan aprendiendo a trabajar por proyectos
podemos incluir esta planificación como parte de las tareas del proyecto y evaluarla.
Pero esta es una habilidad que han de aprender poco a poco.

1
Navarro Martín, S. (Junio 2014) “Errores comunes en la práctica del ABP”. recuperado el 7 de
Septiembre de 2015 de
http://www.dieztiposdepersonas.es/errores-comunes-en-la-practica-de-aprendizaje-basado-en-proye
ctos/ 
Plantear proyectos demasiado complejos desde el principio.
Hemos de comprender que abordar un proyecto requiere muchas competencias que
no debemos presuponer adquiridas por nuestro alumnado. Debemos enseñar a
trabajar por proyectos a nuestros alumnos poco a poco, proponiendo proyectos más
cortos y sencillos al principio e ir incrementando la dificultad a lo largo del curso
conforme vayamos comprobando que adquieren las habilidades suficientes para que
el proyecto les suponga un reto abordable.

Plantear nuestros proyectos como trabajos individuales


Una de las características del ABP es que deben plantearse proyectos basados en los
procesos o actividades de la vida real. De esta manera conseguimos motivación e
implicación por parte del alumnado, que no encuentra utilidad a lo que se enseña en
la escuela, cada vez más separada de la realidad. La mayoría de procesos que se
realizan en cualquier profesión o actividad compleja real implica una socialización.
Las habilidades sociales son esenciales para desenvolverse en el mundo real en que
vivimos y hay que enseñarlas y practicarlas.

Potrebbero piacerti anche