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Capítulo 1: Cambio.
- Himeko… -
- Sacerdotisa lunar… - La voz hizo eco en cada rincón del lugar, grave y pesada. Chikane
levantó la mirada con hastío hacia el lugar donde la voz se oía con más fuerza y apretó los
puños.
- Déjame volver. Déjame volver, ten piedad por una vez en toda tu eternidad. Ya hemos
cumplido nuestro ciclo. Tienes que dejarme ir y terminar nuestras vidas juntas. -
- Necesito volver a ella. – Contestó nuevamente calmada la joven. Sintiendo que las fuerzas la
abandonaban, se dejó caer de rodillas frente a la figura y sollozó en súplica. - … Por favor… -
Las lágrimas abandonaban sus ojos, bajando por sus mejillas, ya sin fuerza alguna para
detenerlas. Su interlocutor pareció vacilar.
- Para empezar, volverás a tu cuerpo, que aún puede ser utilizado. Pero… Cada vez que el sol
te toque sufrirías de un intenso dolor en tu marca… No lo tolerarás más que unos cuantos
minutos antes de morir… - Levantó el índice y la marca en la espalda alta de Chikane brilló
vivamente. Ella se arqueó hacia atrás soltando un alarido desgarrador. Duró apenas unos
segundos y mermó con lentitud, como si de una quemadura se tratase. Ella se acuclilló en el
suelo, recobrando el aliento.
- Desgraciado… Qué podrías ganar de esto… - Susurró más bien para sí misma, pero el Dios
soltó una carcajada.
No despertó hasta unos pocos minutos después, o lo que ella supuso serían minutos. Apenas
abrió los ojos cuando una fuerte punzada en la espalda la obligó a cerrarlos nuevamente y a
intentar soltar un bufido, pero todo el cuerpo se negó a colaborar y sólo gruñó. Los brazos
que la rodeaban eran cálidos y el aroma que inundaba sus sentidos era inconfundible. Himeko
sollozaba con su cuerpo en brazos, abstraída. En un acto reflejo la empujó con fiereza lejos de
sí y volvió a gruñir débilmente. El dolor se volvía insoportable.
- Chikane.. – Los ojos de la rubia se abrieron de par en par y una deslumbrada sonrisa
comenzó a brotar de sus labios. – Estás… - Se lanzó a sus brazos. Nuevamente, el ardor.
Despertó en el interior del Templo de Kazuki, la luz del pasillo apenas le golpeaba los ojos.
Todas las ventanas se hallaban cerradas. Por la puerta, el angosto halo de luz le permitía
percibir la silueta de Himeko, dormitando en el suelo, a su lado, con la cabeza y las manos
sobre su vientre. Una punzante quemazón en la garganta la desconcertó, notó cómo sus
colmillos se volvían ligeramente más punzantes contra su lengua.
- Pero… ¿qué demo?... – Se llevó la mano a los caninos, un poco más largos y bastante más
filosos. Observó a Himeko, respirando con calma pero con el ceño fruncido, casi podía sentir
que la garganta se le incineraba. Ella abrió un poco los ojos y la observó como quién ve el mar
por primera vez.
- Chikane-chan… - Se acercó a ella, esta vez con más cautela. La respiración de Chikane se
entrecortaba mientras ella se movía, ansiaba saltar sobre ella, había un animal enjaulado en
su interior. – ¿Estás bien?... Te ves un poco… Chik-- Mi amor… estás viva… - La sonrisa en
su rostro se volvió aún más amplia y se arrojó a su cuello, dejando escapar unas cuantas
lágrimas. La otra Sacerdotisa aún no lograba entrar en sí, estaba haciendo uso de todas sus
energías para controlar esa bestia en su interior.
- Debes… alejarte. Tengo mucho que contarte pero… - Sus sentidos la deleitaban, el aroma de
Himeko impregnaba su nariz y prácticamente la hacía salivar. Se acerco a su hombro y
deslizó los labios por encima de la clavícula. Se sentía casi flotando, era hermoso, salvo por el
dolor que apenas se podía tolerar en la garganta y el pecho. Abrió apenas la boca y con suma
cautela mordió el hombro de Himeko, la cual soltó un quejido.
- Pero… ¿Qué…? – Sintió una punzada en el hombro, cerca del cuello. Se separó ligeramente
de Chikane, que mantenía los labios apoyados en una pequeña herida, que dejaba pasar un
hilillo de sangre por la comisura de su boca. Con sumo esfuerzo, se separó, intentando no
pensar en el olor de la sangre. Se alejó aún más, con algo de brusquedad.
- Estoy maldita. – Susurró, pasando el dorso de la mano por su propia boca y observando el
rastro carmesí de la misma con desprecio.
Capítulo 2: Control.
Los ojos de Himeko se entrecerraron en son de duda, al tiempo que le fue imposible no
retroceder levemente. Le costaba comprender la situación y no estaba segura de atreverse a
preguntar, pero no fue necesario, Chikane soltó un prolongado suspiro y se irguió en la cama
antes de comenzar a hablar.
- Cuando morí… - La otra joven dio una especie de respingo de asombro. - …porque así fue…
- añadió. - … se me permitió volver, pero sólo bajo ciertas condiciones... No puedo tocar el
sol… y sólo puedo alimentarme de ti… - Lo último no fue más que un susurro. Himeko había
abierto los ojos de par en par, intentando asimilar las palabras de la apenada Sacerdotisa
lunar.
- Pero eso… Quién… Cómo haremos para… - Las preguntas se ahogaban en su boca antes de
ser concluidas. De repente, toda la seguridad que había tenido tras confesar su amor a
Chikane iba evaporándose, no estaba segura de qué tantos cimientos hubiera como para
empezar a ilusionarse por tenerla junto a ella nuevamente, y sentía que en su interior, el
mundo comenzaba a desmoronarse.
- Comprendo. – Dijo finalmente la joven Kurusugawa, acercándose a ella aún más mientras
corría su kimono de miko a un lado para darle acceso a su propio cuello, la determinación en
su rostro se entreveraba con la seriedad de su decisión.
Chikane la observó absorta por unos cuantos segundos, la osadía de Himeko acababa de
golpearle la cara como una bofetada. Corrió rápidamente el rostro a un lado, asqueada por la
satisfacción que le producía su aroma al paladar.
- Todo por lo que quería regresar eras tú, Himeko. Pero no quería regresar para dañarte, sino
para protegerte, eso es todo lo que deseo en la vida. Imagina cuánto odio la idea de ser tentada
a hacerte esto. Me niego. – La voz de Chikane sonaba rotunda y llena de profundidad a pesar
del intenso deseo que vibraba en lo más profundo de su pecho. Podía sentir la dimensión de
sus caninos aumentando contra su labio superior.
- No me estarías dañando. Considéralo el precio que deseo pagar por tenerte de vuelta
conmigo. – La voz de Himeko continuaba cargada de certeza, e insistió nuevamente
acercándose más a la otra Sacerdotisa.
Chikane podía oir claramente cómo el corazón de Himeko galopaba desbocado, y a pesar de
resistirse sus ojos fueron a parar directo a su palpitante yugular.
- Yo… - balbuceó Chikane. Su compañera puso el índice sobre sus labios, todavía enrojecidos
por la sangre.
- No ha dolido casi nada… ¿Verdad que ha estado bien?... – Las palabras sonaban extinguidas
en su boca, la joven Himemiya podía sentir que el pecho le ardía, pero esta vez no se trataba
de sed de sangre… Se sentía un monstruo. Por un segundo, se había olvidado por completo de
la única persona a la que había amado, y que le había demostrado amarla de igual manera. Se
arrojó hacia atrás con una fiereza inapropiada y se acurrucó en un rincón oscuro de la
habitación. Avergonzada. Atemorizada. Y por sobre todo, aborreciéndose a sí misma como
nunca antes se había aborrecido.
- No voy a dejarte, Chikane-chan… Volveré tan pronto como me permitas hacerlo… Dejaría
toda mi sangre en una vasija por seguir teniéndote aquí conmigo… -
La oji-azul la contempló alejarse, todavía un poco ausente, pero con las palabras haciendo eco
en su cabeza. Se sentía devastada. Himeko no acababa de cerrar la puerta cuando el ruido de
los pasos acelerados de alguien por el pasillo la desconcertaron. El olor de Himeko fue
corroído por otro mucho más fuerte… Olía a madera, tierra y combustible.
Lo que sucedió entonces fue algo que no supo comprender, pues sucedió antes de que llegase a
pensarlo. Se arrojó a la puerta estilo pantalla, derribándola con excesiva facilidad, y saltó
delante de Himeko con la gracia de un felino, interponiéndose entre ella y el nuevo ocupante.
Souma Oogami las observaba a ambas totalmente incrédulo. Estuvo en silencio,
intercambiando miradas entre Chikane y Himeko, el tiempo que le llevó notar la sangre en los
labios de la primera, y en el cuello de la segunda. Entonces, su ceño se frunció y observó
resuelto a su atacante, desenvainando la katana.
- ¡¿Qué le has hecho a Himeko?! – La nombrada dio unos cuantos pasos atrás, adentrándose
en la habitación, entre que la aludida gruñó de la misma manera en que lo hubiera hecho un
animal, cubriendo con su cuerpo la entrada a la habitación. – Hazte a un lado, no tendré
piedad de ti, seas lo que seas ahora… - Las palabras del muchacho provocaron un cambio
radical en la actitud de la miko, parecieron golpear un centro de su mente que le retornó a su
estado de compostura habitual, y se hizo a un lado, sujetándose la cabeza con una mano y
cerrando los ojos con fuerza.
- ¿Qué es esto?... ¿Qué es lo que me está pasando?... Acaso estoy… ¿dejando de ser yo
misma?... –
Souma se apresuró a llevar consigo a Kurusugawa tan lejos como le fue posible. Se detuvieron
a la entrada del Templo. El joven podía sentir la adrenalina recorriendo todo su cuerpo… Se
había quedado deseoso de intrincarse en batalla con esa depravada Himemiya.
La cargó en brazos, recostando el rostro de la chica sobre su propio pecho, y caminó con
cautela hacia el Templo, deteniéndose en su habitación para ingresar y recostarla.
Cubrió a Himeko con unas mantas, acomodando su cabeza sobre la almohada, y tras
asegurarse de que se encontraba durmiendo ya más tranquila, suspiró un poco aliviado. Esa
desgraciada… Cómo se había atrevido… Se sentía culpable, por dejarla sola con esa
maniática. Cerró las manos en un puño, haciendo un esfuerzo inédito por no correr hacia ella
y cortarla en dos pedazos. Sabía que no podía hacerlo, por algún motivo que desconocía,
Kurusugawa le tenía mucho aprecio a aquella salvaje depravada. Él nunca permitiría que ella
se sintiese mal, por mucho que deseara dejarla en trozos, no lo haría, sería un caballero…
No pasaron más que unos segundos antes de que Kazuki se acercara donde Souma,
argumentando que debía ir a ver a Chikane, que estaba inconsciente.
- Himeko está aquí, Himemiya la ha atacado, estaba sangrando y bastante débil, ahora
duerme… - Dijo casi escupiendo las palabras. – La he dejado sola, tenía sangre en la boca, y
me ha estado por atacar, no sé qué demonios le sucede. –
- Ella ha… - La voz de Kazuki se apagó, intentaba averiguar qué sucedía. - ¿Te ha dicho algo?
–
- Sólo que me llevase a Kurusugawa, claro que iba a hacerlo de todas maneras, está
completamente fuera de sí. –
- Iré a ver qué sucede. Tú quédate aquí y cuida de ella. – Señaló a la puerta con la cabeza, y
Souma asintió obedientemente.
Kazuki se alejó por el pasillo hasta el ala opuesta del Templo, donde la otra Sacerdotisa seguía
en un estado casi de shock. Se introdujo en la habitación y caminó lentamente hacia ella, que
lo veía sin prestarle demasiada atención.
- ¿Qué es lo que ha sucedido? – Habló en voz baja, relajada, mientras se sentaba en la cama
que se hallaba al nivel del suelo, frente a ella.
- Conozco lo historia de una mujer, llamada Hannya, que se dice que bebía sangre y estaba
privada del día… era una especie de demonio que murió de celos, y que regresó de la muerte
resentida con un hombre… pero la verdad es que desconozco sobre algo más similar a lo que
me cuentas… debería investigar más, quizás haya alguna forma de solucionar este
problema… No quiero seguir indagando demasiado, porque de seguro estás agotada, ya
hablaremos de lo que ha sucedido mañana, pero… -
- Es la maldición de un Dios, Kazuki… No creo que haya forma de llevar esto adelante… No
debería haber regresado… Lo único provechoso es que he librado a Himeko de cumplir con
este condenado ciclo… - Kazuki alzó las cejas, confundido. – Pero creo que ya es tiempo de
que yo muera. – Soltó finalmente.
- Yo estoy dispuesto a cumplir tu voluntad. – La voz esta vez resonó en la entrada, junto a la
puerta, Souma observaba con repulsión a la abatida joven de larga cabellera negro-azulada.
- Hazlo entonces. – Las palabras estaban cargadas de angustia, y veneno por la persona a
quien debía dirigirlas. Odiaba a Oogami, pero sabía que el cuidaría bien de Himeko si ella no
estaba, y que él realmente podía hacerle el favor de quitarle la vida.
- Silencio, ambos. Souma, ya te he dicho que te quedes donde Kurusugawa, vete ahora. –
Kazuki le dirigió una mirada dura a su hermano, que suspiró antes de dar media vuelta hacia
la habitación nuevamente. – Como dije, Himemiya… Hablaremos nuevamente mañana,
necesitaré saberlo todo, y me serviría el testimonio de la Sacerdotisa del Sol. – Chikane se
encogió en su lugar ante la mención de su compañera. – Ahora descansa, ya va a amanecer. -
Capítulo 3: Confesiones.
A pesar de que no quería, apenas el sol dejó ver sus primeros rayos sobre el horizonte, una
fatiga indescriptible se apoderó de la joven Himemiya, que no tuvo más opción que tumbarse
sobre la improvisada cama en la habitación. Su mente vagabundeó por algunos minutos entre
la culpa de sus nuevas necesidades y los terribles celos que la empezaban a surcar por la
presencia constante de Oogami Souma junto a Himeko. Ya no podría cuidar de ella, de su
Himeko… Justo ahora, que sabía que la amaba, tanto como ella a la chica, no podía acercarse
sin sentir un profundo anhelo por su sangre que – además de asquearla profundamente en sus
momentos de lucidez – cuando era saciado la hacía olvidar incluso de quién era.
¿Cómo podía en este nuevo estado proteger a lo único que le había traído felicidad en la vida?
¿Con qué criterio podía ir por Oogami y reclamarle lo que por derecho le correspondía,
cuando él se encontraba en mejores condiciones de protegerla que ella misma? Sobre todo,
cuando de quién debía ser protegida ahora, era de ella misma.
Con un increíble malestar, y predispuesta a todo un día de pesadillas, se dejó llevar por el
letargo, que parecía ir apagando una a una, como luces en una habitación, sus funciones
cerebrales.
Mientras tanto, unas cuantas habitaciones más al Este, Himeko comenzaba a estirarse en su
cama, abriendo los ojos con pereza e inmediatamente después tratando de ubicarse donde se
hallaba. Incapaz de reconocer el lugar, confundida, buscó en sus memorias lo último que tenía
a mano, y se vio a sí misma perdiendo el conocimiento en los brazos de Souma. Le dolía la
cabeza y se sentía algo débil. Comenzó a incorporarse pero un mareo repentino la obligó a
ceder y tumbarse nuevamente, con un ligero quejido.
- Parece que has despertado… - Dijo con voz suave, ingresando en el lugar.
- ¿Cómo está Chikane-chan? – Él suspiró profundamente, casi con molestia, y se sentó junto a
la chica para contestar tajante.
- Ella duerme. – Frunció el entrecejo de manera inconsciente tratando de poner en claro como
hablaría con Himeko respecto a lo que había estado analizando en las últimas horas. – No voy
a permitirle acercarse a ti de nuevo, ya ha mostrado no merecer la pena desde que se unió a
los Oorochi, y tal parece que ha seguido adelante… Quiero que lo analices, ella no te tiene
ningún aprecio, todo lo que ha hecho hasta el día de ayer, cuando se convirtió en ese demonio
que sea lo que sea te ha mordido, ha sido utilizarte como un escalón hacia sea cual sea su
meta. – Las palabras fueron tajantes y seguras, pero la chica se removió incómoda en primera
instancia y posteriormente dejó entrever una sonrisa amarga que desconcertó al joven.
- Ella no se convirtió a los Oorochi por otra cosa que por protegerme, Oogami-kun… Muchas
cosas sucedieron ayer… Y han tenido una enorme repercusión en mi… Tengo que hablar
contigo respecto a algunas… - Él se acercó y tomó su rostro cuidadosamente, como si de una
pequeña muñeca de porcelana se tratara, entre las manos.
- No es necesario que hables ahora… Comprendo que debes encontrarte todavía confundida y
dolida sobre los recientes acontecimientos, siempre has demostrado que quieres a Himemiya
como a una hermana… - Himeko se separó cabalmente de él y cerró los ojos, negando con la
cabeza, antes de interrumpirle.
- No puede esperar, porque respecto a eso se trata… - Sus hermosos ojos amatistas brillaron
con audacia. Finalmente no había reparos acerca de la certeza de sus sentimientos, y lo último
que deseaba era lastimar más a su amigo. – El amor que siento hacia Chikane… - dijo
dándole cierto énfasis a sus palabras, a lo que él tomó un poco más de distancia, sorprendido.
- … no es para nada fraternal… y sé que puedo dañarte con esto, pero es mejor que sea ahora
y no después… - Sin permitirle terminar, él se levantó y se alejó de ella, negando
rotundamente.
- Oh, no, claro que no… - Los dientes le rechinaban, pero ¿qué demonios le había hecho esa
mujer a su amada Himeko? De seguro la había engatusado con mentiras para continuar
abusando de su ingenuidad, o peor aún, haciendo lo que sea que hacía la noche anterior había
creado algún tipo de hechizo sobre ella… - ¿Qué te hizo para que dijeras esto? Seguro fue
anoche, ¿verdad? Fue para esto que ella te atacó, para ponerte en esa postura. – Las palabras
surgían de sus labios con un rencor que comenzaba a tantearse en el aire, tensando a Himeko
notoriamente.
- N-no… La he amado por siglos… Desde que somos lo que somos, sólo que nuestros
sentimientos se han ido profundizando con el correr del tiempo… Y-yo… Ayer… Asesiné a
Chikane-chan… - Los ojos del chico se abrieron ante la sorpresa. Su mente era un mar de
caos, nada de lo que decía su adorable niña tenía sentido. - … y eso sigue siendo un hecho…
Lamento haberte involucrado en todo esto… lamento haberte hecho creer que sentía algo por
ti… porque en realidad creí sentirlo… pero no es así. Estoy perdida y totalmente enamorada
de Himemiya Chikane, porque así ha sido y así será por siempre… -
- No lo comprendo. Dices que la asesinaste. Dices que creíste amarme, pero en realidad la has
amado a ella por siglos. Y ella está allí, durmiendo porque no puede tocar el sol, y debe vivir
en la noche, atacándote como si fueras una presa y ella algún tipo de felino, que casi salta
sobre mí con una agilidad del infierno. Apenas y pude seguir sus movimientos con la vista.
¿Qué acaso no lo has notado? Ni siquiera parece humana. Y tú dices que seguirás amándola
por siempre. – Para su fastidio, Himeko sólo asintió. – Me voy de aquí, estaré fuera, si me
necesitas sólo llámame. – El chico se alejó y cerró la puerta tras él al salir de la habitación.
Himeko suspiró cansinamente, observando los alrededores de algo de lo que sujetarse para
ponerse de pie. Sería mejor dejar que Oogami-kun lo procesase y digiriese todo. No era
sencillo, y ella bien lo sabía, apenas se estaba ambientando a la idea de amar a una mujer,
cuando tuvo que aceptar que la mujer que amaba, si quería mantenerla a su lado, debería
consumir su sangre y vivir en la noche… Eso sin contar que lo que sea que le había hecho
esto, la había transformado en su esclava. Una fuerte punzada en el pecho la trajo de nuevo a
la realidad, la cicatriz en forma de Sol en su piel ardía como el fuego mismo. Algo estaba mal.
En el ala Oeste, deshecho por dentro, Souma abría de par en par la puerta de la habitación de
Chikane, que había despertado, atosigada por el intensísimo dolor que le causaba la luz del sol
en el rostro. Ella se había escondido en la esquina más alejada, completamente dolorida y a la
vez sufriendo de una sensación iracunda hacia su agresor que a duras penas lograba
controlar.
Entretanto, él soltaba abrasadoras lágrimas mientras le gritaba con vehemencia a esa mujer
un par de verdades.
- ¿Qué no te cansas de ser la causa de sus dolores y agonías? ¿Qué no te das cuenta de que no
puedes darle nada, absolutamente nada? ¿No te das por enterada de que sólo vas a causarle
miseria? –
La voz que clamaba a gritos del chico atrajo a Himeko, que al salir de la habitación, y tras
imaginar lo que estaba sucediendo, caminó trabajosamente hacia el lugar, sujetándose el
pecho que parecía a punto de arder en llamas. Como pudo, y aprovechando su desconcierto,
hizo a un lado al agitado Souma e ingresó en el lugar, cerrando la puerta tras ella. Al regresar
las sombras al recinto, el intenso dolor mermó repentinamente, hasta convertirse en tan sólo
una molestia.
- Casi la matas, y casi me matas a mí con lo que acabas de hacer. Vete ahora, Souma… Ya
luego saldré y si lo necesitas hablaremos. – Habló hacia el exterior.
Las pupilas de Chikane se dilataron al verla allí, con el semblante decidido y encerrándose a sí
misma junto a ella. Ella, que como bien había dicho Oogami, era la causa de sus miserias.
Ella, que en este momento se debatía entre el deseo de abrazarla y nunca soltarla, y
protegerla, y darle tanto amor como tuviera, e incluso más, y el de saltarle encima e hincar los
colmillos en su garganta.
- No pienso irme de aquí y dejarte ahí dentro con ese demonio. – Respondió autoritariamente
el chico.
- Puedes irte. – Dijo Chikane, por primera vez dejando oír su voz. – No voy a hacerle daño. –
Porque ya me he saciado lo suficiente de ella hace apenas unas cuantas horas… La voz en su
cabeza, aunque le molestó, tenía razón.
- ¿Y qué diablos es lo que te hace pensar que tengo la más mínima intención de confiar en ti,
engendro del demonio? – Gruñó desventuradamente.
- Vete, Souma. – Repitió Himeko. – O hablaré con Kazuki sobre lo que acabas de hacer. –
La disyuntiva lo ponía entre la espada y la pared. Temía que si Kazuki se enteraba del suceso,
lo considerara incompetente para proteger a su adorada Himeko, por pasional e impulsivo.
Pero no podía dejarla allí sola… Sopesó las opciones cuidadosamente.
- No será necesario. – Concluyó la joven Sacerdotisa, desviando la mirada hacia la otra, con
un atisbo de sonrisa surcándole los labios. El corazón de Chikane brincó en su interior al
verla. Se veía preciosa. Puedo oír los pasos de Oogami alejarse por el pasillo y detenerse por la
entrada del Templo, a unos metros de allí.
- No… Pero no logro controlar mis impulsos adecuadamente en este momento… - Dijo con el
nerviosismo evidenciándose en su voz, mientras tomaba temblorosamente su mano con la
propia.
La verdad es que el deseo de beber no estaba agobiándola como sí lo había hecho la noche
anterior, simplemente estaba ahí, pero era relativamente fácil dominarlo, aun con el
acentuado aroma de la chica invadiendo su nariz, y la cercanía que la ponía a unos
insoportables centímetros de sus labios.
- Lo harás, lo sé… Con el tiempo… Y no me harás ningún daño que no pueda recuperarse por
sí solo entretanto… - Ella entrelazó los dedos de su mano con los de Chikane, dándole un débil
apretón para infundirle su confianza. – No me molesta que debas hacer lo que has hecho
anoche… Ya me siento perfectamente… ¿Quieres volver a hacerlo?... – Le susurró cuidando
el tono de las palabras, para no hacerla sentir ninguna culpa al respecto.
- No, no lo necesito… - Murmuró un poco dolorida, sabía que si no era ahora, tendría que
hacerlo la próxima noche, o quizás poco después.
- La verdad es que me siento muy cansada… Apenas y puedo mantener los ojos abiertos… -
Confesó ella con algo de pena.
- Vas a preocupar a Oogami… - Susurró, y aunque sus celos se evidenciaron, la verdad es que
no le importó. Una perfecta y celestial risa volvió a brotar de los labios de Himeko.
- Ya hablaré con él… - y se acercó un poco más para rozar ligeramente los labios de Chikane,
que se quedó completamente helada.
Algo había cambiado profundamente en Himeko… Parecía mucho más decidida… Mucho
más adulta… Su confianza se había incrementado notoriamente… Y era bastante
agradable… Pero ella se sentía bastante menos confiada, y eso no lo era tanto… No es que la
situación no lo mereciera, pero la verdad es que ser cauta no tenía nada que ver con vivir con
miedo… Debería trabajar en ello… Ahora que descubría que la potencia de la sed de la noche
anterior no tenía por qué ser cotidiano, podía ver un poco de luz entre tanta oscuridad, una
pequeña esperanza…
- Me inhibe un poco que me observes así, linda… - Murmuró con una pequeña sonrisa y las
mejillas completamente teñidas de carmesí. – Y será mejor que ya vayamos a la cama… -
Ahora fueron las mejillas de Chikane las que se sonrojaron violentamente. Por suerte, la
oscuridad reinante en el lugar le permitió ocultarlo bastante bien.
Las imágenes que habían venido a la cabeza de la chica ante las palabras de la inocente rubia,
no habían sido completamente decorosas, y habían llegado tan rápido y con tan pocos tapujos,
que la habían trastornado por completo… Dejó escapar un respingo ahogado, que esta vez, si
fue percibido por la otra chica.
- Bien, vamos… - La trajo consigo al lecho, recostándose en uno de los lados para dejarle
lugar a la oji-azul, que se recostó junto a ella, bastante pegada a su cuerpo como para notar el
agradable calor que emanaba la dulce niña, y el extasiante aroma a flores y hierba húmeda.
- Gracias por quedarte… por cuidar de mi… y confiar en mi… - Musitó con una sonrisa
aliviada, cerrando los ojos ya que se sentía finalmente incapaz de mantenerlos abiertos. De
nuevo, parecía que su cerebro se apagaba y no encontraría manera de refrenarlo aunque
quisiera.
- No debes agradecerme… Haría mucho más que esto si pudiera… Daría mi vida por ti,
Chikane-chan… - Sintió como besaba su frente mientras su voz se apagaba.
Despertó cómodamente refugiada en los brazos de alguien. Se sentía bien… Era cálido, y un
suave aroma impregnaba su nariz, tenía el dulzor de las flores en el apogeo de la primavera,
justo después de una de esas lluvias cortas que refrescaban el aire y que tanto adoraba sentir
en su piel…
Aún un poco dormida, deslizó la mano a lo largo del abdomen de la persona que allí se
encontraba, hasta su cintura, y hundió el rostro en su cuello, inhalando profusamente.
Poco a poco iba recuperando la consciencia. Himeko había pasado el día a su lado, y al
parecer ya había anochecido nuevamente, y ella seguía allí.
Su dulce y tierna Himeko… No podía concebir algo en el mundo que no daría por ella...
- Ya estás despierta, ¿verdad?... – Murmuró Himeko mientras rozaba con la punta del índice
el trayecto de su columna, deteniéndose sobre su nuca y causándole un intenso escalofrío.
- No aún… - Respondió mientras, sin poder contenerse, depositaba unos cuantos besos a lo
largo y ancho de la piel de su cuello. Notó en el proceso unas débiles marcas justo en la base
del mismo y de manera incontenible sus caninos aumentaron en tamaño un poco.
- ¿Tienes hambre?... – La voz de su hermosa niña sonaba con un temblor que apenas se
percibía, y se reprendió a si misma por no poder mentirle. Definitivamente, las cosas se
pondrían peores si no lo hacía ahora que se sentía perfectamente capaz de controlarse.
- No te preocupes por mí, todo lo que quiero es que no sufras… adelante, hazlo… - Una ligera
sonrisa curvó los labios de la rubia.
- Mmm… Está bien… - También la oji-azul sonreía, lo cual sorprendió a la inocente niña y
futura víctima a su lado. Pero ella no se movió, se mantuvo quieta esperando la punzada de
dolor.
La realidad es que no le gustaba nada esta situación de tener que portarse tan invasiva con
Himeko, pero parecía ser que la situación se sostendría de esta manera a lo largo del tiempo, y
la verdad es que no estaba dispuesta a dejar pasar la posibilidad de estar con ella, por
primera vez quizás en siglos.
Ya que irremediablemente debería morder y beber de Himeko, al menos debía hacer que lo
sufriese tan poco como fuera posible. Quizás y hasta en algún momento llegase a disfrutarlo si
le encontraba una alternativa a la situación ya vivida la noche anterior.
Deslizó los labios con una lentitud exasperante a lo largo de su yugular, disfrutando el
aumento rítmico del golpeteo de la sangre a medida que avanzaba. Intentó no dejarse llevar
por la ansiedad, primero estaba ella, su hermosa y dulce Himeko.
- Esta vez prometo que no será tan horrible… - Susurró al tiempo que se subía
cuidadosamente sobre su cuerpo y apoyaba una rodilla a cada lado de su cadera, quedando a
horcajadas sobre ella.
La rubia tembló bajo su ligero peso, sonrojándose de inmediato y por completo incapaz de
pronunciar palabra. La fría lengua de Chikane rozó el arco de su oreja y se detuvo sobre el
lóbulo de la misma para morderlo con delicadeza. Pudo sentir el aire salir, luego de ser
contenido unos cuantos segundos, por los labios entreabiertos de Himeko.
- ¿Qué sucede, mi amor? - ronroneó sensualmente sobre su oído, rozando con los dedos su
firme y plano abdomen, recorriéndolo hacia arriba con una calma agobiante para la joven
bajo ella.
- N-nada… Sólo que… - Le costaba un enorme esfuerzo encontrar palabras para explicarle el
fuerte calor que comenzaba a invadir todo su cuerpo. Nunca había podido disfrutar de
Chikane de esta manera. Era la primera vez que podía darse el lujo de sentirla tan cerca, tan
angustiosamente cerca, y que el calor de su cuerpo comenzara a hacerle perder la razón y
sentido común, que las suaves y delicadas curvas de su cuerpo quedaran perfectamente
expuestas a sus caricias, y que a su vez cada parte de ella estuviera al alcance de su mano,
para apropiarse de lo que ya sentía que era suyo por derecho.
- Entonces relájate… - la sonrisa en los labios de Chikane se hizo más evidente cuando
finalmente alcanzó uno de sus pechos y lo acarició por encima de la blusa y el bra. El cuerpo
de la rubia se contorsionó un poco ante su contacto, mientras sus manos se dirigían a su
espalda para atraerla más hacia sí.
- Se me está haciendo difícil… - Murmuró con un débil quejido la rubia, entrecerrando los
ojos mientras disfrutaba el tenue roce de los dedos.
Chikane se incorporó apenas para verla a los ojos. Su mirada azul penetró en los amatistas
ojos de su hermosa pareja, que la observaba todavía algo ensimismada en la sensación que le
causaban sus caricias. Le sonrió medio de lado, con la mirada más apasionada que alguna vez
le haya dirigido, y un intenso calor adornó con carmín las mejillas de la rubia.
Incorporándola junto a sí, se sentó sobre sus piernas y la observó con atención. Era perfecta.
Sus manos habían bajado a la altura de su cadera para levantar consigo la blusa de Himeko,
que parecía incapaz de decir nada, totalmente azorada.
- Haré que la próxima vez que tengas que darme a beber tu sangre, lo estés esperando… -
Musitó con un erotismo que estremeció cada centímetro de la piel de la rubia.
Una vez que se hubo deshecho de la blusa, llevo las manos a su espalda hasta el prendedor del
brassiere, acercándose a su hombro para recorrerlo despacio con los labios.
Una vez que se sintió satisfecha con el rostro completamente desencajado que portaba ahora
su pareja, se quitó la prenda íntima y la arrojó con gracia a un lado. Chikane no pudo evitar
observar con deleite infinito el bello torso desnudo de la rubia, que al contrario de la timidez
que hubiera esperado de su parte, parecía disfrutar ampliamente de sus efectos sobre ella.
Sonrío con cierta malicia y prácticamente arrancó la camisa que Chikane traía puesta,
causando un aumento considerable en el sonrojo de sus mejillas. Nunca nadie la había
despojado de su ropa, y menos aún con esa violencia, nunca se hubiera imaginado que sería
así de sexy.
Se hundió en la base de su cuello, lamiendo apenas el trayecto entre el mismo y el borde del
soutien. Chikane reprimió un débil gemido y ella se incorporó un poco para verla a los ojos,
con la mirada cargada de pasión.
- He pasado unas cuantas horas viéndote dormir, reprimiendo los deseos de hacerte esto el día
de hoy… - le dijo con vos ahogada al tiempo que deslizó una mano por dentro de la ropa de la
oji-azul, que todavía no terminaba de comprender lo que sucedía, y acarició su intimidad con
la yema de los dedos.
Un sofocado gemido quedó atrapado en los labios de Himeko, que volvió a besarla por unos
segundos, tomando su boca con ansias y luego buscando su lengua con la propia de la misma
manera.
Chikane aún estaba en shock. No que no lo estuviera disfrutando, estaba fuera de sí, pero la
rubia estaba actuando de una forma en que jamás la hubiera creído capaz. Ella se separó un
poco y se acercó ahora su oído, deteniéndose brevemente para aspirar el perfume de su largo
cabello negro-azulado.
- Ahora, aliméntate… - el sutil ronroneo que salía de sus labios la volvía loca, le encantaba
esta nueva faceta de su dulce ángel. Bueno… En este momento definitivamente no entraba en
esa clasificación.
Pero su idea con todo esto, había sido que ella disfrutara el momento en que tomaría de su
cuerpo lo que se había vuelto su ambrosía, no lo contrario. Así que con un gran esfuerzo por
controlar sus manos, la imitó, deslizando los dedos por entre su ropa interior y llegando
directo a su punto.
La humedad de Himeko le hizo perder lo poco que le quedaba de razón. Ella gimoteó
enardecida, aferrándose a su cuerpo y comenzando a acariciarla con lentitud, disfrutando de
los suaves quejidos que la rubia ahogaba en su cuello.
Estaba volviéndose loca, su hermosa niña gemía casi sobre su oído, acariciándola de la misma
forma en que ella lo estaba haciendo, y sabía que no tardaría mucho en alcanzar el climax. Se
acercó a su cuello y con tanto cuidado como pudo, la mordió para crear un pequeño corte y
bebió lo suficiente para saciar su sed. La sangre llenó sus labios y pareció llegar a sus propias
venas, calentando su cuerpo por entero y colmándola de una cierta paz interna que no se
podía describir.
- No aguantaré mucho más… - Le susurró con la voz cargada de deseo, haciendo que su
excitación alcanzara cumbre y los movimientos, que hasta tanto eran lentos, se apresuraran
aún con cuidado para hacerla llegar al más dulce de los orgasmos, justo a tiempo con ella
misma.
- Dios… - Musitó Chikane tras dejar caer la cabeza en la almohada, agotada y sudorosa.
- Te amo, Himeko… - Soltó con voz extenuada, depositando un beso suave entre sus cabellos.
- Y yo a ti, mi vida… - Contestó de la misma manera la, aún, temblorosa rubia. Cerrando los
ojos para concentrar sus energías en recuperar el ritmo de su respiración.
Los dedos de Chikane paseaban por la parte media de su espalda, mientras la mantenía
estrechada contra sí con el otro brazo. Se encontraba como en un universo paralelo, en el cual
sólo existían ellas dos, ellas y la hermosa calidez de sus cuerpos en contacto.
- Quiero estar así para siempre… - Dijo con voz apagada la niña entre sus brazos.
- Así será mientras tú lo desees, mi amor… - Sonrió ante lo bello que eso se veía en su cabeza.
Una vida al lado de su preciosa Kurusugawa, ¿quién podía ser más dichoso que ella en este
momento?... Dudaba que pudiera existir alguien.
Paseo los dedos enajenada los dedos por las pequeñas marcas que habían quedado, justo en el
mismo lugar que antes.
- ¿Bromeas?... Siento que aún no bajo del cielo… - Murmuró algo apenada quien ahora
jugaba con los dedos sobre su abdomen.
Había vuelto a ser su tímida y sonrojada Himeko.
- Qué bueno… - Sonrió para sí, un poco más satisfecha ahora que podía sobrellevar mejor el
hecho de tener que hacer lo que le tocaba hacer.
Todavía estaba disfrutando del hecho de que Himeko jugueteaba con los dedos sobre ella,
cuando ese asqueroso olor se aproximó rápidamente al lugar.
- Pero quiero quedarme aquí un rato más… - Su frente se arrugó mientras su labio inferior
sobresalía ligeramente en un gesto de capricho.
- No, es por… - La puerta se abrió mientras Chikane sacaba su larga cabellera del interior de
la ropa recién puesta, y Himeko dio un gritito, escondiéndose entre las sábanas. El rostro
fastidiado de Souma apareció para dedicarle la más dura de las miradas a la miko, que la
devolvió con gesto de triunfo, con expresión bastante sosegada.
- ¿Se te ofrece algo, Oogami? – Le preguntó observándolo directo a los ojos, ubicándose frente
a la puerta para impedirle ver siquiera un centímetro de la piel de su hermosa Himeko.
- Si no estás muy seguro de a qué has venido, deberé pedirte que te retires por unos minutos.
En seguida iremos al salón a hablar con Kazuki, haz el favor de avisarle que no tardaremos
en estar allí. Gracias. – Le sonrió ampliamente y cerró la puerta de nuevo en sus narices. Y lo
disfrutó, muchísimo.
El chico al otro lado aún no reaccionaba. Sabía, porque estaba claro, que ambas habían
tenido algo.
No lo permitiría.
Himeko debía haber sido embaucada por las mentiras de este demonio de pelo azulado. No lo
permitiría, no de nuevo. De ahora en adelante debería actuar y ser cuidadoso.
Nos conocemos???
CAPITULO 1
MAHOROBA
mientras iba asia la academia y se encontro con Souma que paro al verla correr
SOUMA-Himeko, veo que llegas tarde te... te podria llevas? si quieres claro u///u (agacho la
cabeza a decircelo
HIMEKO-Me arias un gran favor Souma gracias n.n'
SOUMA-Agarate fuerte!!!
Salio como una bala desde que Himeko se puso el casco, cuando llegaron antes de que Himeko
se fuera corriendo la agarro de la
muñeca
Se giro y empezo a subir las escaleras corriendo mientras Souma observaba su trasero (por no
decir culo)y su melena como se movia con el viento ,estaba locamente enamorado de
ella(supuestamente)y hoy iba hacer el dia que se lo diria el dia que confesaria su
amor(supuestamente).
Cuando llego a clase vio que no habia llegado la profesora asi que Makoto le propuso ir al
asero para hacer tiempo hasta que llegara la profesora y asi poder hablar mas tranquilamente
de lo que arian este fin de semana.
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TOKIO
Como todo los años la famosa Himemiya tendria que aguantar en silencio a sus acosadores ya
que estaban en clase y tosos sus compañeros estaban atentos en los movimientos de la
heredera y pensando que suerte tenerla en su clase para ir a l@s amig@s y contarles que
tenian a la heredera en su clase y presumir.
PROFESOR-Exactamente
Todos se quedaron mirandola y ella con una mano apoyada en su barbilla con los ojos
cerrados desprocupada y complacida por haber aceptado sin equivocarse en ningun resultado
y palabra
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Souma salio corriendo tra Himeko al verla salir de su aula, no queria perder mas tiempo en
declalarle sus sentimientos
SOUMA-Himeko!!!!Himeko!!!
HIMEKO-Mmm Souma que necesitas?
SOUMA-no te acuerdas teniamos que hablar o.o' (se kedo estupecfato al ver que himeko no se
acordaba)
HIMEKO-..Ahh si sobre que se trata?
SOUMA-Quieres ser mi novia?
HIMEKO-Como?...es que lo dijistes muy rapido y no te entendi n.n'
SOUMA-Que si quieres ser mi novia? (esta vez lo dijo mas lentamente y totalmente
sonrojado)
HIMEKO-...Bu..bueno
SOUMA-Eso es un si?...gracias gracias..te are feliz lo prometo (la interumpio y salio
corriendo
CAPITULO 2
Despues que terminaran las clases nose volvieron a ver más durante el dia, ya habia llegado la
hora de irse a casa y Himeko iba caminando a su casa pensativa por lo de Souma ya que no la
dejo terminar no era que no quisiera pero le daba miedo tener una relacion por si terminaran
algun dia y ya no volviera hacer amigos,cuando se quizo dar cuenta llego a su casa.
Siguieron comiendo hasta que llego a los 20m oyeron abrirse la puerta y gritar dirigiendose al
comedor
Subio dejando a todos asombrados,Akemi regaño a Jiro y a Itzuko por los comentarios que
habian hecho, se metio en su habitacion y se fue a bañar para conectarse cuando vio que
Makoto le envio hace una semana una pagina de un chat siempre terminaba de comer y
bañarse y se metia
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TOKIO
Chikane volvio a su casa y ceno ya que sus padres la estaban esperando cuando se retiro con
permiso se fue al baño a tomar su baño relajante para estudia un rato y luego conectarse a ese
chat que entro hace una semana para entretenerse.
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Mientras tanto habia nick que muy pocas veces escribia y lo que mas le llamaba la atención
era esa tal Hime-Chan aunque no sabia porque pero solo se entraba a ese estupido chat
solamente para leerla
Sª_de_Himemiya:COMO!!! NO LO SABES?
S_de_la_Luna:Yo no he dicho que lo sepa todo pero se puede diferenciar que es el amor y que
es la obsecion
CAPITULO 3
La noche paso entre risas y demas pero Himeko vio que la Sacerdotisa_de_la_Luna no volvio
a hablar asi que la saludo en pv para conocerla mejor
Hime-chan:hola cm estas? ^^
S_de_la_Luna:Hola, yo bien y tu ?
S_de_la_Luna:ammmm
Estubieron hablando durante toda la noche conociendose mas hasta lo que les gustaba o lo
que no sus manias, lo que detectaban etc
Le encanto ese gesto que se lo pidiera asi la volvia loca hasta se imaginaba la voz
S_de_la_Luna: De acuerdo pero jurame que atenderas a las clases y no te quedaras dormida
Himeko se quedo pensativa, hablaron hasta que se tuvieran que irse a arreglar para irse a las
clases.
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Ese mismo dia cuando terminaron las clases y se dirigio a su casa caminando por la ciudad le
pidio al chofer que no la llevara queria pasear un rato, cuando llego a su casa bueno mas bien
mansión le pidio a sus padres hablar a solas,su padre la hizo pasar a su despacho y detras de
su padre iba su madre que le preguntaba sobre las clases y las actividades extraescolares.El se
sento en su silla y querida esposa e hija en el sofa que tenia en frente
Se quedo observando a su heredera pero antes que eso su hija, su amada hija mientras la
miraba y se perdia en sus zafiros iguales a los suyos pensativo y abrio un poco la boca para
responderle
Se puso de pie y salio cerrando dejando a sus padres mirandose y diciendose todo lo que
pensaban con tan solo una mirada.
CAPITULO 4
A los 2 dias ya se habian mudado desde entonces Chikane estaba terminando de acomodar su
habitacion y bajo las escaleras, entro en la sala para hablar con su madre
Como bien habia dicho a la tarde se fue a comprar su uniforme,prefirio ir sola asi conoceria el
pueblo, entro en una de las tiendas que encontro y le pregunto a la encargada y le dio dos
tiendas donde solo se podian comprar el uniforme asi que fue buscando y preguntando, hasta
que lo encontro y se dispuso a entrar
Se dirigio a la otra tienda lo mas rapido que pudo por si acaso, cuando la encontro, espero a
que el dependiente le confirmara si les quedaba
DEPENDIENTE-Disculpenos pero no nos quedan, solo de chicos .... quiere que le traigamos
uno?
CHIKANE-Van a tardar en llegar los pedidos?
DEPENDIENTE-Mas o menos un mes
CHIKANE-Un mes?.. que mala suerte tengo
DEPENDIENTE-Entoces se lo traigo señorita?
CHIKANE-Si porfavor que sean 2 uniformes y de chandal 2
Salio de hay mientras pensaba porque no sabia como lo haria en un mes pasarse por un chico
o seria mejor que supieran que era una chica, solo que no quedaba de chicas no sabia estaba
echa un lio.
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Himeko iba con Makoto a el Centro Comercial a comerse unos helados y de compras
MAKOTO-Solo hace una semana que empezaron las clases y parese que vamos por la 2ª
evaluación
HIMEKO-No te quejes Mako-chan
MAKOTO-Pero si es verdad y Ogami?
HIMEKO-Bien es tan romantico y atento
MAKOTO-Yo diria que demasiado
HIMEKO-No seas mala Mako-chan
MAKOTO-Pero sino soy mala sino realista
HIMEKO-No
MAKOTO-Esta cada 2 minutos detras tuya jajaja
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Chikane acaba de llegar a su casa y le pregunto a Otoha-san donde estaba su madre, se dirigio
asia alla
CAPITULO 5
Al dia siguiente como todos los años le tocaba lo mas dificil del dia a dia para ella, sacarla del
mas profundo de los sueños y despertar a Himeko
MAKOTO-Venga Hime-chan no quiero que este año sea como los anteriores y nos
castiguen/le agarro los hombros mientras la movia para que se espabilara/
HIMEKO-.....Ohhh Mako-chan pero si esto..y despierta/dijo sin hacerle mucho caso a Makoto
y currucandose mas en la cama
MAKOTO-Pues levantate si lo estas y arreglate que sino llegaremos tarde
Despues de 2 minutos se levanto de la cama y lo que le habia costado salir de hay, se arreglo
como de constumbre y coloco las cosas para las clases de hoy
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Mientras tanto en casa de Himemiya ya llevaban desde hacia media hora con el pelo de la
heredera
CHIKANE-Auch madre
HIROKO-No te quejes Kaon-chan...Otoha agare aqui seguro que asi aunque corra o alla
viento no se le movera/ estaba muy concentrada con el pelo de su hija/
OTOHA-Ojou-sama y su voz?/decia mientras realizaba las ordenes de Hiroko/
CHIKANE-Eso es facil mi querida Otoha/forzo sus cuerdas vocales poniendo voz grave/
OTOHA-...(esque como no me voy a enamorar si cada dia tiene un motivo para que lo haga)
/se sonrojo mientras pensaba/
HIROKO-Ya...que te parese Otoha?
OTOHA-No creia que quedara tan bien, estoy sorprendida
HIROKO-Corre a ponerte el uniforme, haber como te queda con el.
Habian pasado ya 3 minutos desde que entro a su armario para salir con el uniforme se
quedaron atonitas por el resultado
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Makoto le estaba dando animos a Himeko para que subiera rapidamente las
escaleras,mientras Himeko las maldecia en susurros
Cuando fue a empezar a correr se le resbalo la pierna derecha del escalon, sabia que se iba a
llevar un buen golpe solo pudo ver a lo lejos a Makoto girandose hacia a ella y nombrando su
nombre, asi que cerro sus ojos con fuerza esperando el golpe.
Derepente sintio que alguien la jalaba de su mano derecha, asia si, le agarraba de la cintura y
otra mano la pudo notar en su cabeza protegiendola,cuando abrio los ojos alzo su mirada
para admirar los ojos de color zafiro de su salvador.
HIMEKO-Uh?.. gra..gracias
CHIKANE-Denada...pero ten mas cuidado la proxima vez, quizas no este para ayudarte/cerro
los ojo y sonrio tiernamente/
HIMEKO-Si... lo..lo tendre /se sonrojo como nunca nadie la habia echo sonrojar asi que bajo
su cabeza para que su flequillo le tapara la cara/
Deshicieron el abrazo y Chikane siguio subiendo las escaleras, Makoto bajo haber como
estaba Himeko ya que se quedo observando a quien la salvo de ese golpe. Se dirigieron al aula
mientras tanto hablaban los alumnos entre si, hasta que llegara su profesora.
SANGO-Todos a su sitio hay viene la sensei!!!!/ grito una alumna desde la puerta corriendo a
su asiento
ALUMNOS-Bueno dias senseii!!!!
PROFESORA-Buenos dias, ya se pueden sentar/decia mientras colocaba sus cosas/bueno hoy
a llegado un nuevo alumno
TAKESHI-Quien sera?
HIKARI-Sera chico o chica?
PROFESORA-Pase Himemiya...presentese a sus compañeros.
Todos se quedaron pasmados, su cabello era de color azul noche,su mirada es electrizante, sus
ojos son de color zafiro te dan calma y a la vez te ponia nerviosa su tez blanca como la nieve,
su forma fisica no era muy musculosa pero no debil se le notaba un poco los abdomen.Himeko
lo vio y era el,el mismo que hace unos minutos la habia salvado de ese golpe
CHIKANE-Buenos dias
AKANE-Ya tengo novio para este año
KICHI-Que alto
SHIZUKA-Que guapo ess
SANGO-Estas en forma polvoron
PROFESORA-Silencio/ golpeo la profesora la mesa para que se callaran los alumnos y
dejaran los cometarios/Siga Himemiya
CHIKANE-Soy Himemiya Chikao, acabo de mudarme con mi familia de Tokio, tengo 16
años, soy hija unica../miraba a todos los alumnos pero en quien mas se fijo fue en Himeko que
intentaba no toparse con su mirada/...espero que este año se nos haga ameno y si teneis
cualquier duda o problema espero que os pueda ayudar/ dijo friamente toda su presentacion/
HIMEKO-...(hija unica? querra decir hijo unico no?)...Son cosas mias o se equivoco Mako-
chan?/susurro a Makoto/
MAKOTO-Ohhh as visto que educado,amable y guapo Hime-chan?/susurraba mirandolo
embobada como todas las chicas/
PROFESORA-Gracias Himemiya por tu presentacion,sientate detras de Kurusugawa y
Saotome......Kurusugawa
HIMEKO-Hai?/se levanto derepente/
PROFESORA-Usted enseñara a Himemiya la escuela de acuerdo
HIMEKO-Pe..pero sensei si yo llevo varios años aqui y aun me lio para ir a las clases
ALUMNOS-Jajajaja!!!!
CHIKANE-..(Asi que ella es Himeko no esperabaque fuera tan bella ni que fuera ella a la que
salve de la caida nunca me lo huebiera imaginado)
PROFESORA-Kurusugawa deja de poner escusas ademas asi vas a prendiendo donde esta
cada parte..Himemiya ya puede tomar asiento
HIMEKO-...Haii /agacho la cabeza no muy convencida/
CHIKANE-Hola Himeko/lo dijo en un tono solo para que Himeko le escuchara/
Himeko no se lo podia creer nadie habia nombrado su nombre como para que ella supiera
como se llamaba se giro pa verla y se volvio a girar para delante atonita abrio los ojos
sorprendida
Ya era la hora del recreo cuando se fue a levantar Chikane y todos corrieron a su mesa para
empezar los interrogatorios
CAPITULO 6
Ya era la hora del recreo cuando se fue a levantar Chikane y todos corrieron a su mesa para
empezar los interrogatorios
Chikane estaba callada solo oyendo las discuciones y propuestas de sus compañeros, tenia el
consuelo que mañana no pasaria por esto sino que ya le tendrian respeto cuando buscaran o
hablaran de ella con su apellido, sus familias, amigos vieran las noticias etc
Se dirigio hacia el un poco timida ya que aun seguian sus compañeros haciendole preguntas
HIMEKO-Ho..ola Himemiya
CHIKANE-Hola Kurusugawa (porfavor invitame a almozar contigo y sacame de aqui cuanto
antes) /con la mirada le intentaba decir que lo sacara de aqui/
HIMEKO-Nos tenemos que ir ya a almorzar para que nos de tiempo de enseñarte la escuela,
vamos
CHIKANE-De acuerdo, hasta luego es un placer que me alla tocado en esta clase
Se levanto lo mas rapido que pudo y salieron por la puerta, todos se asomaron a la puerta
para verlos caminar
Ninguna de las dos hablaron durante todo el camino hasta llegar donde siempre se sentaba
Himeko y Makoto con los demas a almorzar. El lugar tenia cesped y alguna que otra flor,
desde hay se podia ver las canchas de futbol,baloncesto,tennis y la de atletismo ademas de la
cafeteria.Lo tenian bien situado para ver a los chicos y los cotilleos
FLASHBACK
FIN FLASHBACK
CAPITULO 7
Himeko estaba ida en sus pensamientos cuando se fijo que Chikane la estaba mirando aparto
su mirada
NAOMI-Hayy Mako no me hagas eso que me cuesta peinarme/ decia mientras se peinaba con
las manos/
SANGO-Y Ogami? Himeko.
NAOMI-Para que preguntas si luego aparece/ dijo poniendo cara de depresiva/
YUMI-Hablando del rey de Roma
MAKOTO-Parese que tiene un radar para indicarle cuando hablamos de el
HIMEKO-No le trateis asi /dijo haciendo pucheritos/
SOUMA-Que hablan de mi?/dijo curioso y haciendose el machito delante de Chikao/
NAOMI-Que va Ogami...hablabamos de Chikao /sabia k eso le iba a doler en su orgullo/
SOUMA-Que raro entonces que no hablen de mi /se rasco la barbilla/
SANGO-Mira que eres presumido no como Himemiya
Souma la agarro de la cintura y le comio la boca dejandole a Himeko toda llena de babas, se
notaba que ella no tenia el mismo entusiamos de besarlo
Ninguna hablaba y Himeko se empezaba a poner nerviosa, pasó un buen rato antes de que
alguna de las dos dijese alguna palabra, simplemente caminaban una al lado de la otra como
si cada una estuviera en su propio mundo… el viento soplaba de vez en cuando como
queriendo entablar una conversación con las dos mientras escuchaban a los jovenes jugar o
hablar...hasta que la mas mayor se atrevio a hablar
capitulo 1: recuerdos
Flash backk
_sabes que no¿- le dije muy decidida
_por que no kieres?-pregunto
_ni que fuera algo urgente tambien puede ser un gasto muy grande
_miralo de este modo , estaremos juntitas si vives en ese apartamento- me tomo por los brazos
con esa carita tan linda que no podia negarme
_bueno. Eso no lose -le dije bajando el rostro para que no me persuadiera tan facil
_bueno no te me puedes negar porque ya lo compre , y sino lo Agarras se pierde el dinero –me
miro ssupicas
_lo compraste en erio??-hable estupefacta
_aja y no tienes derecho ha hablar aquí la que manDa soy yo –me dijo poniendo su dedo
indice en mis labios- te vienes conmigo – me tomo por la mano y me saco
_y mis cosas?
_eso lo mando a buscar y ademas te comprare mas cosas por eso ni te mortifiques-pico su ojo
_ah¡¡- me puse corada por su comentario , luego me suvio a su auto , camioneta negra
polarizada muy elegante y fina , propia de alguien con dinero y clase
Fuimos camno a mi nuevo hogar
Fin del flash back
Recorde sentada en la vetana de la mansión que estaba en Tokio al final ni termine usando
mucho el apartamento aunque chikane chan me habia pedido antes vivir con ella no kise por
lo de su padre el se encontraba viviendo con ella en ese tiempo según ella no le importaba pero
a mi si me incomodaba terriblemente , su padre mi suegro ademas es un señor tan culto que
trabaja en sus empresas ,personalmente el es estricto me tengo esa idea , luego se termino
viviend0 a new york por asuntos de negocios y dejo a mi chikane chan que es su hija ,
heredera a cargo en todo japon , es raro al ver a chiiknae quien solo tiene pocos años pero
cuan0 fue niña siempre estuvo al tanto por eso no represento ningun problema para la
compañía por el contrario. Obviamente me volvia a pedir quee nos fueramos juntas pero
luego insisto que no entonces pareceria que esperaba a que su padre y eso se fuera para vivir
juntas , pasaron asi unos meses largos hasta que por fin accedi
Toke unas teclas del piAno viend0 lo que me rodeabA la casa tan espectacular , inmensa
parecida al la que estaba en la aldea como años atrás compartia techo con mi principe , claro
esta ves es muy diferent3 me ha habia vuelto0 la sra de l casa , himeko himemiya su esposa
Flasbak
Se habian acabad0 las clases en la escuela de artes y mis compañer0s y yo caminabamos a la
estacion , casi todas las noches solo los seguia hasta que vinieran a recogerme _como estuvo el
examen?-pregunte a yamato kuN
_bien aunque al principo algo difícil –dijo
_te parece?- a mi no me fue tan bien-aseguro asusa chan
_ah-al final esta es una jornada normal a parte de los examenes entonces caminabamos
comun como ya es costumbre no paso mucho cuando llego esa camioneta negra
}_ch¡kane chan?- me extrañe al verla me habia dicho que no vendria a recojerme
_ya vinieron a recoger a himeko , que envidia _dijo mi amiga de clases
_dijiste qu vendrias con nosotros ,- me dijo yamato kun
_la verdad no pense que ella vendria
_ay no seas modesta tienes suerte que seas la novia de alguien asi-me sigui molestando asusa
al ponerme la mano en el hombro , su comentario me sonrojo y eso tambien me acostumbre
,sser la novia de la hija de un millonario y cada ves que la veian pasaba lo mismo
_buenas noches – se dirigo con una sonrisa acercandose
_chikane chan tu.- le dedique una mirada de amor como susp¡¡rand0 por verla , pensand0 en
que tenia que aguanterm3 hasta la noche siguiente
_himemiya san –hablaron los don en coro , como nerviosos
_bien , nos vamos?- me mir0
_ok pero no tenias cosas que hacer en la oficina hasta tarde , me hablaste que no llegarias –le
dijee extrañadA
_eso lose ,pero vi la hora y pense que es muy tarde para que estes sola por un autobús por ahí,
solo organize las prioridad3s –contesto con normalidad
_ok-le dije , agachand0 la cabeza al penar que yo soy su prioridad,,no, 1
_y si ustedes kieren venir esta bien- se dirigi a mis amigos +
_hi¿¿¿- hablo asusa
_bien si no es molestia-dijo yamato kunn
Uya en el auto me ubique adelante , coversamos de cosas triviales en el cam¡no a casa de cada
uno de ellos para por fin ir a mi apartamento
_chikane can ,es que no es necesario que vinieras –le dije apenadA , cuand0 el auto estubo
parqueado estabamos en el aun, afuera del edifico que tenia mi apartamento
_el trabajo no es tan importante como tu –me confeso agarrandome la man0
_esta bi..en no te discutire..-la vi con sonrojos en m¡¡s cachetes
_ok , cuidatte by- me dijo por ultimo al parecer eso
_y no m vas a acompañar – le pregunte ya que vin00 eso pensaba
_mejor no sierto-me dijo normalita
_esta bien.- le hable triste , le bese para despedirme como siempre
_cuidatte-me dijo
_hasta mañana-me iba a salir, cuando senti que que agarroo ella por el brazo jalandome para
luego besarm33 , la tome por las mejillas para afianzar la pasion , en un beso mas humed0 ,
masajeando las lenguas , sintiend0 su respiración y su aliento tan dulce , le bajam0 al beso
separandon0s unos milimetr0 , termino jaland0 mi labio ¡nfer¡or casi chupand0l0 eso si con
cuidad0 es muy delicadA hasta para besar –ahora te pudes ir himek0-me dijo tocand0 nustros
lavios
_matta ashita-le dije por ultimo saliend0 embelesada del auto por semejante beso tan lind0 y
apasionad0 camin3 hasta la entrada mientras estaba tocandome los lavios con la punta de mis
ded0s
continuara
Ella siempre protegiéndome , cuando llegu3 a esta casa me sent¡ como princesa en su palacio
todo lo que cualkier persona deseariaa como la servidumbre , cantidades de ropa Y
ZAPATOS aunke la verdad ten¡a todo y mas pero menos una cosa importante la compañía de
la persona que amo y adoro , chikane pasaba todo el dia en su trabajo y yo no tenia otra cosa
que hacer mas que esperarla estaba fuera del estudia por uns vacaciones y me tocaba a
aguantarme hasta bien entrada la noche muchas veces me dormia esperandola y la veia solo
en la madrugada al despertarme , a penas y los domingos me dedicaba completos y los
sabados
_chikane chan – musite , apalstand0 mi barbilla en la mesa -¿ cuand0 llegas?m – me dije a mi
pasaron unos 15 segundos cuando oi ese sonido de motor e un carro , y me pare rapidamente
en un santiamen llegue hasta la puerta , sali y al hacerlo vi esa figura hacia la mansion por el
jardin , chikane traia un abrigo y guantes ademas un portafoleos
_ola princesa-escuche teniendola a unos metros de distanncia
_chi..chikane –me lanse a su cuerpo y rodeandole por el cuello dand0le besos por las mejillas
las cuales estaban rosadas y haciendo ese contraste con su piel blakisima y sus ojos tan azules
que ,me miraban con serendidad y sus labios rojos delgad0s como trazados por algun gran
escultor haciendo el irresistible de darles un beso el cual fue dulce y calido como su lengua
percatandome del frio tome sus brazos para que me tomara a mi tambien.—chikane ch
abrazame-le reproche tiernamente , poniendo sus man0s contra su pecho
_te abraso-me dijo obedeciendo –entremos –musito , la tome por su brazo entrando en la casa
_estas cansada?-e pregunte en la mesa
_algo –contest0 tomandose una copa de vino0
_que harem0s mañana?-le dije- es domingo
_nada en especial tengo asuntos que hacer
_chikane es domingo , recuerdas que es el unico que te la pasas
_gomenasai-me dijo como si nada en el mund0 pasara
_eso es todo?- le reclame enojada la paso esperandote y el domingo –le dije acentuando esa
parte- me lo niegas
_ya te adeverti que es inaplazable –me miro-puedes hacer o que sea no te niego que ahgas eso
_es que kiero pasarla contigo chikane cha
_mañana,, gomena pero es imposible
_ok, como k¡eras-me fui con rabia del comed0r y me entre en la abitacion y me puse mi
pijama para dormir mas lueg0 chikane chan entro e hiso mas o men0s lo mismo0 , me puse
indiferente y eso le molestaba solo me acoste . hiso otraves so mismo para rapidamente sentir
sus labios en mi cuello
, apartando un poco mis mechones , enseguida me le kite para no hacersela tan facil asi como
si nada
_sabes me encanta que te pongas asi ,,, dificil jeje- me dijo con picarida besandome en los
labios
_que kieres?
_es que tengo frio- me dijo como si fuera niña –regalame tu calor un pokito
se me puso encima , tratr0 de besarme como si nada pero aprte mi cara
_vaya que no pasas solo una nochee sin eso –le dije- tenem0s que hacerlo siempre
_bueno. mas o men0s –me hablo mientras me kitaba el camison
_como eres de sinica- le impedi que me tocara los sen0s
_cre0 que mejor no lo intentas –me kito los brazos del medi00 como si nada le importara
_me vas a forzar-pregunte
_esos son otros t¡empos –me dijo
_y como olvidarlos…-le hable sarcasticamenteee.- y es que no fue una ni dos veces las que lo
hiciste , y esque sabes ya ni se me la cuenta
_eso paso y supong0 que no tengo que hacer fuerza , en otras palabras te toca , se que te
encanta que lo haga , y eres mia .es como tu obligacion
:_te gusta esa palabra- le conteste resignadaa por eso
_me gusta si, pero tu mas –beso mis labios con pasion y me lug0 ahí mismo bajo hasta mis
sen0s, se me escapan los gemid0 por su lengua , apoderandose de ellos , otra ves tomo mis
lavio hasta que casi me deja sin aliento succionando hasta lo mas recondit0 al hacerlo dejo
hilos de saliva entre nuestr0s labios deseosos de mas
_sabes tan bien-me dijo besandome mi cuello otraves suyo, intentando separar mis deviles
piernas las cuales ella desunio enseguida
_chikane mala-le dije , note que se emocionaba por eso me relaje como sea que fuere ella me
tomaria y lograria su interes y saciar su sed a las buenas o a las malas , lo supe por la
experienc¡a y sino queria pasarla mal mejor me dejaba tocar
_mejor – me dijo bajandome por el vientre con esa lengua , besando esa parte tan sensible
ahh,. Hable exitada ya y sin pensran en eso le baje la cabeza presionandola , kitandome la
braguitas , introdujo su lengua hasta alla , aprisione su cabeza entre mis piernas por la
exitacion , para salir de mi los flu¡dos que tanto le gusta probar , se kito y me beso y luego sin
darme cuenta me metio ls dedos –oye auch-le dije por el breve roce que me molesto – ten
cuidado-le suplique _perdon-me miro , mientras me masajeaba el clitoris con sus dedos ,
también hice lo mismo con ella queria tocarla con la mismas libertad que conmigo , y no paso
cuand0 me vine – yo te amo- le dije abrasandome a ella ya no tenia interes en las cosas ni en
ese mod0 de tenerme simplemente deseabaa qu chikane la pasara cerca mio y que no buscara
en otra parte esto , se recosto entre mi pecho la tome por la espalda , la cabesa para a
ferrarme a su cuerpo y no dejarla ir
el sol se asomo por las amplias ventana
_chikane chan?- llame despertandome y ver que se habia id0 como ya me acostumbre lo unico
es que esta ves no me levante , y nisikir pudee besarla antes de que se fuera , desayune y me
sente en el estudio , escuche el timbre y sali se traba dee un chico con un ramo de flores
_himeko himmiyaa –pregunto
_aja con ella –le hable
_esto es para usted me dijo. Entregando -gracias- le conteste y cerre la puerta , seguro es
chikane chan por lo de ho0y , esta es su forma tipica ya .pasaron minutos aburrida cuando me
acorde que como hoy es domingo seguro mako mi amiga estaria librre por esa razoncita la
llaamee para verla
_hey himeko¡¡
_hey mako-la salude con abrazo y tod00
_sentemonos que vengo cansada, porque no tengo chofer,- lo hablo con risa por mi
_ok –tomamos asiento
_como te ha ido ne – me hablo-himeko- e miro- perdon himemiya Saamaa - se hecho a reir
__ pero hablame sobre ti primero
_sabes que trabajo y vengo muerta , eso.. s tod0 cuentame de tii. Hace rato que no hablam0s
como se mandaa
_que kieres saber?
_como te va como te has sentid0¡?
_ya viv0 en la mansion _y eso es todo?- dijo con duda
_tu sabes que eso no me importa en absolut0, lo que dese0 … kiero que ella me dedique
tiempo y preste mas a tenci0n
_tengo curio por esto…como te trata miya sama?
_lo preguntas…
_miya sama por lo menos en la escuela era tan distante y seria , parecia que no le importaba
nadie en especia, kisiera saber mas dee ella , la unica que creo que a conoce es himeko
_bien.. veras me traata y cuida muy bien – lo dije mirando al cielo sabiend0 que algunas vecds
es cierto , otras veces me entristecia su comportamiento ese que le encantaba tomar provecho
de mi cuerpo , recordand cada una de las veces que ella me forsaba bueno no solo por la
fuerza mas bien tenia miedo qu ella me dejara , es que mis veces con chikane han sid0 algo
extrañas cuando solo estaba como su novia , me llevaba a su casa y me hacia tod0 lo que ella
deseaba y pretendío muchas veces me asustaba se parecia a la ves que me lo hiso con lo del
oroch¡ eso solo cuand00 me ponia algo desobediente y si mako chan supiera kizas ni lo
imaginaba con esas cosa de la seriedad de chikane que es cierta pero en algo solo la conocia yo
y ninguna mas , por esa razon no dije mas– me proteje y da todo lo que deseo ,con ella me
siennto la mujer mas dichosa – le dije con seguridad resaltand0 sus inumerables visrtudes ,-
chikane es muy linda conimg0 mako- le dije con sonrisa en mi cara
_eso tiene que ser amor- se rio
_la amo por supuesto –lo afirme con toda la behemencia
_es que se nota
_chikane…-intente
_es tan perfecta lose – me interrumpe y si tenia razon en casi tod0 lo es chikane es deamsiad0
perfecta , auqneu solo yo conosco a esa chikan humana y qe erra como la gente porque ella
incluso me te esas pata
_hablame de oogami kun- le propuse para no pensar en ella (chikane)
_la verdad es que el pobre souma desde que te fuiste y te casaste no ha hecho otra cosa que
entristecerse, pero trabaja en revistas como escritor le va bien en eso
_es lastima que el piensa en mi , nunca le di tantas esperanzas
el resto de la tarde pasamos asi para luego ir a casa
_como te fue en tu dia?- le hable a chikane kien llegaba
_:bien –contesto con sonrisa
_que bien –le dije al abrazarla y besarla
_y a la princesa como le fue?
_bien , me dejaste tempran0- le hace pucheros
_saotome san? Te viste con ella?
_hi , acordamos pasar otro dia, mañana es festivo suponogo que esta ves si qu vienes
_llama a saotome san , mañana tampoco podre
_ya no me .. extraña-le dije al enfadarme
_ay no te pongas en ese plancito
_bien. – fugasmente paso una semana y llego e domingo otraves y volvia a negarse , es que
andaba trabajand0 pense
acordee con mako cha para vernos , esta ves ibamos al parque
_ola – escuche a mi amiga , sentada en la banca del dicho lugar , me sorprende al verla con un
chico que ya conocia – souma ¿- pregunte sorprendida
_ola kurusuwawa – levanto a saludar
_caminamos –propuus0 ella , lo hicimos recoorriend0 la zona y hablábamos dee trabajo y
cosas
como si nada souma san se fue apartando del lugar para dejarme a solas con mi amiga
_cuentame comote va con miya sama- pregunto ella con tristeza, haciend0 que me asustara en
el fond0
_la verdad muy bien pero trabaja y eso es lo unic0
_himekoo- me m¡ro0- nunc pense que tu fueras tan abnegada
_y eso?
_mirate no le ves defecto a miya sama lo que ella te haga este bien- por momentos pense que
sabia algo sobre esto- la amas pero kiero que te fijes en esto
_ok- esperamos como cinco minut0s hasta que vi la silueta acercandose a esta parte del lugar
supe que es chikane chan es ella pero cera se colgaba alguien de su brazo, es chica no llegaron
hasta mi por eso no me vieron , se doblaron por el anden hasta llegar al restaurante de ese
parque . las vimos y seguimos , viendo que tomaba su braso con tanta confiansa me dio un
dolor entre mi pecho , me sentia mal , mis lágrimas estaban a punto de salir , la chica es como
dee mi altura y tenia el cabello largo castaño y sus ojos son miel eso alcance a observar desde
detrás del árbol en que estabamos viend0 , ellas se acomodaron para pedir alg00
_tienen varios d¡as e este plan – hablo
_y como lo sabes- hable llorand0 , pensabalo peor
_las vea desde hace eso por supuesto no keria contarte hasta saber y asegurarme que no se
trataban de simples negocios como te hubiera hech0 pensar miya sama y si tu la pones sobre
este avis00… te diria eso , esto para mi.. es muy extraño
_tienen algo?
_eso no podría confirmarlo como si nada tampoco he visto besos como se supone que es malo,
aunque esas confianzas …
_tengo que saberlo- me iba a dirigir a chikane para reclamarle
_himek¡¡- me tomo mako para detenerme
_mejor no, tienes que asegurarte ,
_oogami san?, para que vino- le pregunte
_la verdad el fue kien me lo dijo . el pasaba aqki todass las tardes para escribir , casualmente
la vio y me conto , keria lo supieras hasta que tuvieramos algo que pudiera molestar su
relacion y eso me lo parece .te lo digo para que lo indagues por ti . es qe es raro que estand0
cont¡go0 …
_chikane..ch..-solte a llorar con la manos a la cara –esto no puede pasar- me puse muy mal al
verlo
_tienes que controlarte-me agarroo
_kien es ella?- pregunte cambiend0 de tono triste a enojo –contesta- kien me robaba el cariño
de chikane
_te dire estos dias encontré que ella es modelo se llama momomi(la misma dee straberry
panic)y tal parece qe vive cerca por aca , tienen campaña con la compañía de miya sama y
llevan como semana y media en esto
_eso media semana?-llore al verla a chikane re¡r tan amistosamente como con lo hace con
nadie , solo estand0 con ella . no resisti y me fui del lugar
Capítulo 1 INICIOS
19 DE SEPTIEMBRE 1:55 AM
Falta menos de un mes para m8i cumpleaños… se que debería estar feliz, he esperado mucho
para cumplir 16 años, y ahora que estoy tan cerca la verdad no se qué pensar; no tengo a mis
padres, y aunque eso ya casi nunca me afecta por algún motivo me causa mucha nostalgia no
tenerlos cerca al llegar ese día tan importante para mí.
Pero hay algo más que me preocupa; de4sde hace unos días no puedo dormir en las noches, y
tengo sueños muy extraños con una chica que se encuentra en un santuario ubicado sobre la
luna, aunque nunca he podido ver su rostro por alguna razón siento que la conozco… bueno
supongo que es algo tonto preocuparse por un sueño…
Creo que intentare descansar un poco pues en unas horas tengo que ir al instituto y no quiero
dormirme en clases. Aun no entiendo por qué siento este vacío en mi corazón, es como si me
faltara algo, como si me faltara…
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¡HIMEKO!... HI-ME-KO…
El silencio de la habitación fue interrumpido por una voz que gritaba con mucho afán y
fogosidad el nombre de la rubia; quien despertó algo asustada y de un movimiento brusco
salto de su cama cayendo de inmediato al suelo…
-mako-chan… siempre haces lo mismo- dijo la rubia poniendo un puchero mientras se
sentaba y sobaba su cabeza.
-Himeko apresúrate, ayer dijiste que no llegarías tarde otra vez, y mira solo te levantaste 16
segundos antes… acaso quieres que el maestro katsuki te sermonee de nuevo? – sobrepuso la
peliroja con una sonrisa irónica dibujada en su rostro.
-// mako-chan es tan atlética y vigorosa, algún día quisiera tener la mitad de la energía que
ella posee//- pensaba la rubia mientras se ponía su uniforme para al fin ir al instituto.
Las dos chicas salieron a toda prisa de la habitación; corrieron por un largo rato, pero en un
momento la rubia tropezó y cayó contra el pavimento, la peliroja sonrió, la ayudo a levantar y
le hizo una seña para que continuaran con su camino.
-¡espera mako-chan! No soy tan rápida como tú y estas escaleras me están cansando…
¡ESPERA! decía la rubia tratando de alcanzar a su amiga.
-vamos Himeko o llegaremos tarde, además tienes suerte de vivir en la entrada del instituto,
algunos estudiantes deben caminar desde sus casas y subir muchos más escalones, ¡no seas
perezosa y corre!
En el salón de clases Himeko se distraía mirando por la venta, a lo lejos se lograba ver una
gran mansión. -//por alguna razón siento que ya he estado allí… es como si…//- pensaba justo
cuando sonó la campana, todos los estudiantes salían del salón a buscar un buen lugar para
comer sus bentos…
La rubia caminaba por los pasillos algo distraída, internándose en su mente, en sus
pensamientos, hasta que… sus ojos amatistas se centraron en un lugar, el jardín de rosas que
se encontraba en uno de los rincones del instituto; aunque conocía muchas flores lindas…
jamás en su vida había visto algo tan hermoso… o sí?
Después de contemplarlo por unos momentos decidió buscar una entrada, luego de rodear
varias veces el perímetro del lugar encontró un arbusto que daba directo al centro del jardín
donde se encontraba un gran árbol. Himeko se situó bajo el para dejar volar sus
pensamientos, era la primera vez que sentía miles de sensaciones encontradas por un
momento se sintió plena en aquel lugar, se sintió feliz de estar allí pues sabía que en aquel sitio
había estado todo lo que ella una vez había amado; pero luego se sintió triste. Pues se dio
cuenta de que nunca había amado y aun no sabía cómo hacerlo….
23 DE SEPTIEMBRE 7:30 PM
Hace varios días no escribo, y es que en verdad no he tenido tiempo ni ánimo para hacerlo;
últimamente no me estoy sintiendo del todo bien, en el instituto me distraigo mucho y cuando
estoy en mi habitación siento un gran impulso por observar mi álbum de fotografías, aunque
en los últimos días no he podido tomar ninguna.
Hace solo unos momentos pasaba las páginas de mi álbum y llegue a una en la que solo hay
fotos mías, por un instante una sonrisa se dibujo en mi rostro, pero luego mi ojos amatistas
empezaron a llenarse de lagrimas que se fueron deslizando suavemente por mejillas, para
luego caer en aquella pagina que por alguna razón me causa tanta tristeza, y es que siento que
me sigue faltando aquello tan importante…
Solo hay un momento en el que me siento casi plena, cuando por fin logro conciliar el sueño y
veo aquella chica de cabello largo azulado, aun no he podido ver su rostro pues siempre trae
puesta una máscara, pero sus ojos son tan hermosos como un par se zafiros en ellos se refleja
la serenidad y paz del océano..
24 DE SEPTIEMBRE 1:15 PM
En quince minutos debo reunirme con yumi-chan, pues me va a ayudar con algunos deberes
que tengo atrasados; ella es una chica muy divertida e interesante, tiene casi la misma edad
que yo y en algunas ocasiones platicamos acerca de las cosas que tenemos en común. Bueno
creo que me tengo que ir después continuare escribiendo.
25 DE SEPTIEMBRE 2:00 AM
Hasta hace unos momentos termine mis deberes junto a yumi-chan, es una linda chica, me cae
muy bien, es hermosa ay carismática; siempre he amado su cabello, tan largo y negro, una vez
lo tuve así, pero cometí el error infantil de cortarlo.
Faltan tan solo cinco días para mi cumpleaños, y me siento tan sola, aunque mako-chan
siempre ha estado conmigo, ahora siento la ausencia de algo; Oogami-kun sigue de viaje con
su hermano, y al parecer tardara mucho en regresar, sabes? En un momento llegue a sentir
cosas muy fuertes por él, pero creo que solo fue un enamoramiento infantil, nunca he sabido
cómo se siente ser amada de verdad y por alguna razón siento que eso es lo que…
Tratare de conciliar el sueño, quiero volver a ver a aquella chica; tal vez descubra que es lo
que me está pasando.
30 DE SEPTIEMBRE 4:15 AM
Los últimos días han sido muy complicados, los deberes en el instituto se han multiplicado y
sigo sin poder dormir bien en las noches. Hace unos minutos desperté, volví a soñar con ella,
pero esta vez fue distinta a las demás, esta vez ella pronuncio unas palabras: “nos veremos
pronto Himeko”, fue la voz más dulce que alguna vez pude escuchar, tan llena de pureza y
serenidad que solo podría pertenecer a una princesa… “la princesa de la luna”
Aun no entiendo por qué sigo teniendo estos sueños, pero a decir verdad me agradan mucho;
durante todo el día solo anhelo la caída del sol únicamente para verla de nuevo; siento como si
ya nos conociéramos, como si en algún momento hubiese sido lo único realmente importante
en mi vida…pero creo que estoy siendo demasiado paranoica por un tonto sueño.
Esta noche hay una hermosa luna, así que aprovechare el tiempo que me queda antes del
amanecer para tomarle algunas fotografías.
01 DE OCTUBRE 6:30 AM
Al fin llego el día que tanto esperaba, pero aun así no estoy del todo feliz, me sigue faltando
algo…
Mako-chan me despertó muy temprano para que por una vez llegara a tiempo al instituto.
Anoche volví a soñar con aquella chica; en algún momento en el sueño se acerco quitándose
aquella mascara que ocultaba su rostro y que solo dejaba ver sus ojos zafiro. Era la chica más
bella que alguna vez hubiese podido ver, su cabello brillaba a la luz de la luna, sus ojos…
mirarlos es como mirar el gran océano lleno de pureza, y su piel, tan tersa como la misma
nieve. No podría describir con palabras su inmensa belleza, pero por alguna razón sé que
alguna vez pude disfrutar de ella.
Ahora ya no me siento tan triste como antes, pues por fin entendí lo que me ha estado
faltando, y algo me dice que pronto lo encontrare. Al fin entendí que lo que me ha faltado
todo este tiempo es… AMOR
CONTINUARA…
Capítulo 2
LA NUEVA ESTUDIANTE
La rubia dejo de escribir para proseguir a tomar un baño y luego vestirse con su uniforme…
Después de recibir múltiples abrazos y felicitaciones por parte de su amiga Makoto; Himeko
decidió ir sola al instituto, ya que tenía muchas cosas en que pensar y no quería incomodar a
Mako con su falta de atención.
Cuando al fin llego al instituto era demasiado temprano como para que alguien estuviese allí,
así que quiso recorrer algunos lugares que hacía ya mucho tiempo no visitaba. Mientras
caminaba por los pasillos inmersa en sus pensamientos noto que un sonido provenía del piso
siguiente, más exactamente de la sala de música; lo único que pudo hacer su cuerpo casi
mecánicamente fue seguir aquellas melodiosas notas que la cautivaron…
Al verse parada frente a la sala de donde provenían aquellas maravillosas notas, su mano
automáticamente abrió la puerta que la separaba de la melodía. En el preciso instante en que
Himeko entro en el recinto noto la presencia de la persona que interpretaba aquella canción
en el piano… cuando la otra chica sintió que alguien más se encontraba en la habitación paro
de interpretar la melodía y giro un poco su cabeza aun con los ojos cerrados para saber quién
era la persona que se atrevía a interrumpirla…
La rubia, al ver como la pianista detenía su interpretación se sintió algo avergonzada y más
aun cuando aquella chica se levantaba de su ligar y lentamente abría sus ojos para luego
observarla fijamente… himeko olvido su antigua vergüenza y quedo totalmente inmóvil al ver
que aquellos ojos que la observaban ahora, eran los mismos con los que tanto había soñado.
Era ella, la chica de la luna, estaba parada justo en frente de la rubia viéndola directo a los
ojos, era tan hermosa como en sus sueños, su cabello, sus labios, su piel, todo, todo era tal y
como lo había soñado.
La peli azul estaba mirando aquellos ojos amatistas casi tan hipnotizada como la rubia, en
aquellos ojos violetas se reflejaba tanta inocencia que sin querer en el inexpresivo rostro de la
pianista se dibujo una sonrisa que término por despertarla de su corto trance…
-se te ofrece algo?- pregunto la pianista muy gentilmente.
-esto… yo solo… ahh- decía la rubia un mirando aquel par de zafiros.
La peli azul rio divertidamente haciendo que las mejillas de himeko se tronaran de un rosa
algo notorio.
-solo pasaba por aquí, y oí que alguien tocaba el piano, así que quise pasar a ver, perdona si te
incomode-
-entiendo- con un tono algo frio-
-no te preocupes ya me vo…- fue interrumpida
-NO- …- no me molesta para nada, si quieres podría tocar para ti-
-en serio?- pregunto con un brillo de ilusión en sus ojos.
-// podría tocar para ti siempre si me lo pidieras//- pensaba la pianista mientras asentía
levemente.
En aquel momento sonó la campana para dar inicio a las clases haciendo que las chicas
reaccionaran.
-me encantaría que tocaras para mí- dijo la rubia dando unos pasos hacia atrás sin dejar de
mirar a la de ojos zafiro.
-creo que será en otra ocasión- con algo de decepción en su voz
-si… claro – continua la rubia con desanimo.
-adiós – dicen ambas al unisonó, y himeko sale corriendo del lugar algo triste por no haber
podido contar en compañía de aquella hermosa chica.
-//olvide preguntarle su nombre//- piensan ambas algunos segundos después de su primer y
casual encuentro.
Himeko se movía deprisa pero algo torpe por entre la multitud de estudiantes que entraban a
sus respectivos salones para dar inicio a sus clases, corría tanto como podía, pero aun así su
mente no le permitía olvidar aquella voz, aquella cabellera, pero más que nada aquel par de
zafiros que la hipnotizaron con tan solo una mirada.
Cuando se dio cuenta ya se encontraba frente a su salón de clases, la rubia entro
cuidadosamente esperando un sermón de parte del profesor que allí se encontraba; pero en
lugar de ello fue recibida con una amable sonrisa de parte de aquel hombre.
-buenos días kurusugawa-san es un placer tenerla con nosotros- dijo algo irónico el maestro.
-lo siento maksumoto- sensei… es que… esto- no sabía que decir, estaba perpleja y algo
apenada.
-no se moleste en explicar señorita, solo pase y siéntese- responde el hombre amablemente
mientras señala con una mano el respectivo puesto de himeko.
-hi- dirigiéndose hacia su lugar cerca a la ventana.
Como todos los días, la rubia se encontraba totalmente embelesada observando a través del
cristal. A simple vista parecía como si estuviese concentrada observando aquella mansión que
tanta curiosidad le causaba; y de hecho lo hacía, observaba entretenida aquella edificación,
pero sus pensamientos volaban y se centraban en algo mas, o mejor en alguien más…
-// esa chica es… hermosa; parece una princesa, mi princesa lunar… ¡como puedo estar
pensando esto?// se regaña mentalmente algo sonrojada.
- buenos días katsuki, me permites unas palabras para con tus alumnos- una voz femenina
interrumpe los pensamientos de la rubia. Aunque pronto vuelve a adentrarse en los mismo, ya
que le resta importancia a lo que esta mujer pueda decir.
- buenos días mitsuki-san; claro que si, por favor continúe- responde el hombre con una
sonrisa dibujada en su rostro.
-antes de dar comienzo a sus clases quisiera anuncia algo muy importante…-
Para una rubia distraída no había mundo ni realidad fuera de sus pensamientos; solo podía
concentrarse en aquellos pocos segundos que paso con la peli azul.
-como pude ser tan torpe como para no preguntarle su nombre- se reprendía a sí misma en un
tono muy bajo.
- sin mas preámbulos les presento a la nueva estudiante del instituto ototachibana, la señorita
miya-sama.
La nombrada se hizo presente en el salón con pasos decididos y elegantes; todos quedaron
maravillados con su magnificencia, era hermosa, más que eso… ¡bellísima!... trataron de decir
algo pero nadie pudo articular palabra, nadie, hasta el profesor estaba paralizado con aquella
bella chica que más bien parecía una diosa… todos excepto una rubia distraída que aun
observaba a través de la ventana.
-buenos días soy himemiya chikane- pronuncio una dulce voz que saco bruscamente a todos
los presentes de sus pensamientos, incluso a una absorta rubia que giro casi instantáneamente
en busca de la dueña de aquella voz…
Himeko dejo de pensar, su mente quedo en blanco cuando vio de donde provenía esa voz, al
igual que la peli azul cuando vio aquellos ojos amatistas que la miraban fijamente.
La rubia se perdió en aquel profundo océano que reflejaban los ojos de la otra chica, mientras
que a la dueña de aquellos zafiros se le aceleraba el corazón como nunca antes…
-miya-sama- dijo el profesor algo asombrado aun –puede tomar asiento cerca de la señorita
kurusugawa-
La chica solo asintió cambiando su mirada de intriga a una de frialdad… todos los estudiantes
la observaban con curiosidad y admiración mientras esta tomaba asiento junto a la rubia,
quien aun se encontraba en aquel estado hipnótico en el que entro cuando volvió a ver los ojos
de la peli azul.
Así continuo todo el resto de la mañana, una chica que lograba mirar de reojo a la rubia
mientras todos la veían directamente, y la otra aun perdida en sus recuerdos mirando cada
vez que le era posible a la dueña de aquellos bellos zafiros.
Cuando al fin llego la hora del almuerzo, la peli azul se levanto de su lugar buscando
acercarse a la rubia, mientras que esta la miraba con una sonrisa algo tonta en su rostro.
Cuando estaba a punto de hablar, todos los alumnos la rodearon acosándola con preguntas, y
pidiéndole que los acompañara a almorzar.
-¡no quiero almorzar con nadie!- dijo la peli azul borrando la sonrisa de su rostro sin dejar su
mirada de fría serenidad. –disculpen, pero tengo cosas que hacer- concluyo la chica mientras
se daba la vuelta acomodando un mechón de su cabello, y finalmente saliendo del lugar.
Aquellas palabras dejaron a la rubia algo cabizbaja, ya que esta quería compartir un poco
con himemiya. -//al parecer a ella no le interesa hablar conmigo//-se dijo a si misma saliendo
lentamente del salón.
Después de caminar unos minutos, la chica llego a su lugar secreto, el sitio donde sentía esa
infinita paz. No lo pensó mucho y decidió entrar para llevarse una gran sorpresa…
-gomen… no sabía que estabas aquí- dijo algo asombrada por la presencia de la peli azul en
aquel sitio.
-no tienes porque- contesto inmediatamente –solo buscaba un lugar tranquilo para comer y
pues…- su voz se extinguió al ver aquellos ojos que la miraban directamente.
-emm… etto… soy kurusugawa himeko, es un gusto- dijo la rubia sonriendo y extendiendo su
mano dulcemente.
-himemiya chikane, el gusto es mío- correspondiendo al gesto de himeko.
-¡CHIKANE-CHAN!- dijo muy efusivamente mientras miraba tiernamente a la otra chica.
-chi… ka… ne… -chan- se sorprendió mucho, nunca nadie había tenido el descaro de llamarle
así, pero no le molestaba, ya que era la rubia la que lo hacía.
-lo lamento miya-sama; es solo que… gomen- bajando la mirada con un leve sonrojo es sus
mejillas.
-no te preocupes kurusugawa-san, puedes llamarme así si quieres-respondió con una sonrisa
tomando el rostro de himeko entre sus manos haciendo que esta la mirase… el sonrojo de la
rubia se intensifico y volvió a verse hipnotizada por aquel mirar.
-ok… chikane-chan, pero… con una condición-
-Que condición?- pregunto chikane algo confusa, nunca nadie le había puesto cuna condición.
-que me llames por mi nombre… que me llames himeko-
-himeko…- fue lo único que su bica pudo articular.
-Si, himeko- tomo las manos de chikane, para sentarse cerca del árbol.- quieres que comamos
juntas?- con un brillo de ilusión en sus ojos.
-si… claro, me encantaría- una sonrisa se dibujo en su rostro.
Chikane ofreció algo de té a himeko para luego empezar a conversar acerca de las múltiples
cosas que tenían en común, las risas y comentarios no cesaban, incluso después de que sonara
la campana para las clases de la tarde, seguían riendo despreocupadas hasta llegar a su salón;
allí se encontraron con docenas de ojos que miraban a himeko con envidia y reproche por
estar al lado de chikane; esta solo halo a himeko hacia sí y la llevo hasta su lugar.
Las clases terminaban con una himeko perdida en su imaginación, aun llevándose las miradas
y comentarios envidiosos de los demás. Y con una chikane que le dedicaba una sonrisa a la
rubia cada vez que esta la miraba nerviosa.
La jornada había concluida y dos chicas caminaban despreocupadamente hasta que…
-¡himeko!- grito una peli roja mientras se arrojaba sobre la rubia dándole abrazos y besos en
las mejillas.
-mako-chan, quisieras parar por favor…- algo avergonzada por el comportamiento de su
amiga.
-himeko, pero es tu cumpleaños y yo te quiero tanto…- hacia un puchero mientras miraba a
himeko volviéndose a lanzar sobre ella.
Al ver esta escena chikane se sorprendió muchísimo, no solo porque era el cumpleaños de
himeko y esta no se lo había dicho; sino porque también era el suyo.
La peli azul se sintió algo incomoda, pero más que eso se molesto un poco pues himeko la
había ignorado casi por completo; lo único que pudo hacer fue arrojar una mirada arrogante
a la peli roja (que ni siquiera lo noto), y darse vuelta para luego empezar a caminar hacia la
salida.
-mako-chan ya basta yo… solo…- sus palabras se interrumpieron con la imagen de su
princesa azulada marchándose del lugar. Sin decir nada a su amiga, salió corriendo de allí
queriendo alcanzar a una apresurada chikane que ya llegaba a un auto que la esperaba fuera
del instituto.
-chikane-chan… espera por favor- decía una agitada himeko mientras recostaba su cuerpo
sobre un muro.
-eh? Himeko. Qué pasa? Pensé que estabas con tu…- una presión inaguantable en su pecho le
impidió continuar con la frase -//novia?// pensó algo aturdida.
-gomen… chikane-chan, es que mako es algo impulsiva; pero no quería que te fueras asi, no
sin antes despedirme de ti…- se acerco depositando un pequeño beso en la mejilla de chikane,
quien se sonrojo de inmediato, pero lo supo disimular muy bien.
-cla…ro, no te preocupes- dijo algo nerviosa, nunca nadie había causado tal efecto en ella
-//que me pasa con himeko, acaso ella// ver a himeko darse vuelta la saco bruscamente de sus
pensamientos. –Himeko espera- volvió a hablar algo nerviosa-
-que pasa chikane- chan?- pregunto algo nerviosa pues creía que chikane la reprocharía por
lo que acababa de hacer; pero la peli azul solo buscaba algo en su mochila.
-es para ti…- dijo al encontrar lo que buscaba.
Amh- un poco confundida himeko observaba como chikane abría una pequeña caja y de allí
sacaba una cadena hecha de plata con un pequeño dije en forma de luna.
-es para ti himeko- se acerco con una sonrisa dibujada en su rostro, poniéndose tras himeko
para colocar la cadena en su lugar. Cuando estuvo abrochando dicha joya sintió el contacto
con aquel delicado cuello y el delicioso aroma que de este emanaba; se acerco un poco mas e
inconscientemente deposito un beso en el cuello de himeko para luego ir a su oído y decir lo
único que su mente pudo maquinar… -feliz cumpleaños himeko…-
Ante aquel contacto la rubia se estremeció, y aun mas al oír lo que chikane susurraba en su
oído… -chikane…-chan…-
La peli azul solo camino hacia su auto que aun la esperaba y subió en el asiento trasero. Tan
pronto como se hubo cerrado la puerta, el auto emprendió su marcha, dejando a una rubia
muy confundida viendo como este se desvanecía en el horizonte.
CONTINUARA….
Acaso solo pretender-knm
Cap 01
“Tu madre y yo estamos hablando en serio! Si no te has casado antes de los 25…no te dejare
hacerte cargo de la empresa” –
“Maldita sea! Pero si aun tengo dos años mas para hacer eso padre!” –
“Shizuma…yo quisiera tener nietos y tu padre quiere estar tranquilo al saber que podrá
heredar su empresa en el futuro!”-
“No quiero excusas! Tu deberías casarte antes que tu hermana por dios Shizuma!”-
“Si quieres puedo sugerirte algún hombre decente con el cual podrías casarte” – comento su
madre, mientras Miyuki trataba de guardar la compostura mientras escuchaba la
conversación
“Si!” – su madre rió en señal de triunfo, - “ Shizuma…sabes perfectamente que hoy en día es
legal poder contraer nupcias con alguien del mismo sexo”-
“Pero ustedes quieren nietos!” – señaló con una sonrisa – “ Aunque me case, no podrán hacer
que tenga nietos” –
Su padre respondió – “ Soy el hombre mas millonario en esta ciudad...y durante mis años de
estudiante tuve varios amigos científicos y biogeneticos, seguramente podremos hacer algo al
respecto…si no..siempre esta la opción de adoptar.”
“Oh claro que si Shizuma, te hemos dicho que hablamos enserio o preferirías que cancelemos
todas tus cuentas de crédito?”-
“NO SE ATREVERIAN!! Por dios! Acaso han perdido la cabeza o que padres!” –
Y así el patriarca de la familia Hanazono se levanto al igual que su esposa, dejándola sola con
su hermana.
“Shizuma..”-
“Que..ahora que..”-
“Que!!??” –
***
Y así terminaba la tarde de aquella joven…quien decidió desahogar sus penas en un cercano
bar.
Sentada sola en la barra, movía su vaso el cual contenía whiskey. Cerca de donde ella se
encontraba, había un grupo de personas el cual se veía que la estaban pasando en grande.
Shizuma se molesto por ese simple hecho.
El grupo de personas de pronto soltó varias risas y Shizuma volteo a verlos con una fría
mirada. Sin duda envidiaba que la estuvieran pasando mejor que ella. Ya que dudaba que
ninguna de esas personas tuviera a una hermana menor que estuviera embarazada – juro que
matare a Ryo la próxima vez que lo vea – Ryo Kazuma el prometido de Miyuki. Y también
dudaba que alguno de sus padres estuviera obligándolos a casarse o amenazándola con
quitarle las cuentas de crédito. Si.. la vida no era lo mejor en este momento para la
primogénita de los Hanazono.
“Aoi-san” – llamo la persona que atendía el bar mientras ponía el vaso de whiskey de
Shizuma frente a ella.
Una pelirroja quien resultó responder al nombre de Aoi se acerco a la barra, situándose junto
a Shizuma.
“Gracias Asuka-san”
“Le aseguro Aoi-san que disfrutara del pedido…mis cocineros pusieron empeño al saber que
era para usted”-
Shizuma resoplo y al darse cuenta tosió un poco para ocultar que lo había hecho, antes de
voltear a ver a Asuka-san, seguro era el efecto del alcohol.
“Perdone” – aguantándose las ganas de reír – “es solo que creo que ya he tomado lo
suficiente” – volteando a ver su vaso, el cual ya estaba vació nuevamente.
“Mas?” – pregunto Asuka-san, quien ya tenia la botella en manos, al ver que Shizuma asintió,
sirvió un poco mas.
“Usted viene a un bar” – continuo Shizuma, mirando a la joven la cual había decidido
ridiculizar en ese momento – “ y ordena unos pastelillos para llevar?”
Shizuma escucho una risa como respuesta, la pelirroja volteo a ver a aquella hermosa mujer
dándole una sonrisa, causando un leve sonrojo a Shizuma. Si estaba un poco ebria..si eso era.
“Si en verdad creo que es un poco gracioso. Pero estarías sorprendida si yo te dijera que estos
pastelillos que hacen aquí son los mejores de la ciudad?” –
Shizuma sonrió, tomando su vaso nuevamente para darle un trago – “igual que el whiskey”-
“Si no te importa preguntarte” – sintiendo cierta curiosidad – “que hace una chica como tu
ahogándose en whiskey tan temprano?” –
Dando un leve resoplo nuevamente, Shizuma agrego – “ mm eso no es del todo una respuesta”
–
“Dime Aoi-san” – mientras jugaba con los hielos de su bebida- “tus padres alguna vez te han
obligado o presionado para hacer algo?”
“Oh..lo siento” – al ver que la otra joven decía que no había problema continuo – “Mis padres
me dijeron hoy que si no me comprometía antes de una reunión familiar, atrasarían la boda
de mi hermana y posiblemente cancelar mis cuentas de crédito” –
La joven de cabellos plateados suspiro – “ Como le hago para conseguir a alguien? Y sin
mencionar que mi hermana esta embarazada y realmente no puede atrasar esa boda..y
amenazarme con quitarme mi dinero! Mis padres realmente han perdido la razón! Y su
excusa es que quieren nietos, herederos! Por todos los cielos! Porque! Si de todos modos
tendrán nietos ya que mi hermana esta esperando uno!”-
Nagisa no podía evitar soltar una leve risa ante tal confesión, realmente la manera en que lo
decía bajo la influencia del alcohol era bastante gracioso.
Nagisa tomo su cambio y su pedido, completo – “ Hanazono-san, espero que encuentre pronto
a esa persona” –
De pronto Shizuma se levanto de pronto al ver que Nagisa se daba la media vuelta para irse –
“espera!…y eso como lo voy a hacer?” –
“Yo?” –
Shizuma asintió rápidamente y tomo su mano para que ella pudiera sentarse en la barra junto
con ella.
“Tu puedes pretender que estas comprometida conmigo hasta que mi hermana se case!” –
“Mira…yo te pagare por esto y juro que será estrictamente profesional!” – tratando de no
espantar a aquella joven.
Después de un suspiro – “Descuida, mis padres saben que no tengo preferencia hacia los
hombres, así que eso no es problema. Tu no tienes un novio o algo por el estilo?” –
Nagisa rió levemente, realmente esa joven era algo totalmente diferente. – “ no, actualmente
soy soltera” – viendo la cara de alivio de Shizuma.
“Muchas gracias!” –
Y así, Shizuma pidió el numero telefónico de la pelirroja para llamarla al día siguiente, antes
de dejar el bar ya un poco mas tranquila.
Continuara….
Cap 2
Antes de la conversación del día anterior su vida no podía ir mejor…jamás pensó que llegar a
tener todas esas responsabilidades en la familia la llevarían a este menudo dilema en el que se
encontraba…pero cierto…ayer una joven, si una joven bastante peculiar que iba a un bar por
pastelillos?…si exacto…no muy normal de imaginar…pero había sido un golpe de suerte que
ella hubiese accedido a ayudarla con esta pequeña farsa. Una farsa estrictamente profesional
y que duraría hasta que a sus padres se les pasara aquella tonta euforia del matrimonio. Sin
duda la joven de cabellos plateados no se consideraba una persona que pudiera llevar una
relación del todo formal, si ... ella amaba su libertad…en la cual tenia uno que otro
‘encuentro’, pero ninguno lo suficientemente trascendental como para quedarse con mas de
una persona a la vez y por mucho tiempo…..
Durante la mañana, evadió a todos sus familiares a la hora del desayuno…y antes de salir a
trabajar…se vio nuevamente en su habitación recogiendo sus cosas personales. Durante un
momento se dirigió al espejo para observar la cara de seriedad que no había podido quitar
desde que se levanto. Con un pesado suspiro aprovecho para contactar a cierta joven. Así que
de este modo, tomo su celular y marco el numero telefónico que se encontraba en un pedazo
de papel que tenia una linda caligrafía en el.
“Aoi-san”-
“Si?”-
“Em..es Shizuma Hanazono…la persona de el día de ayer..en el bar”-
“Para nada…estaré libre después de las cuatro” – y después de una breve despedida…
cortaron la comunicación.
***
De este modo Shizuma se encontraba dentro de su lujoso Lamborghini esa misma tarde,
realmente el motivo de la ‘cita’ del día de hoy era básicamente hacer algunas compras para
dicha reunión, en la cual presentaría a su nueva prometida.
Estaciono su auto y comenzó a caminar para detenerse frente a un café, en donde ambas
jóvenes habían planeado encontrarse. Shizuma comprendía que Nagisa aun no podía confiar
en ella tan rápidamente y es por eso que la pelirroja se había negado ser recogida por
Shizuma en su trabajo.
Una vez dentro del café, Shizuma reconoció de inmediato a aquella joven pelirroja que se
encontraba sentada un una mesa para dos, tomando un café y resolviendo unos crucigramas
en una revista.
Notando ese sonrojo, el cual a Shizuma le pareció sumamente adorable, continuo - “Lista
para irnos?” –
Una vez en el inmenso centro comercial, Nagisa se encontraba dándole su opinión a Shizuma
sobre lo que debería usar.
Nagisa asintió..mientras observaba las cosas que ella misma había seleccionado para lucir
aquel día.
Al salir de la tienda junto con Shizuma, quien cargaba las compras de ambas jóvenes, que se
encontraban en diversas bolsas, decido dejarlas rápidamente en su auto para así dirigirse a la
joyería y elegir el anillo que ambas portarían. Mientras tanto, la pelirroja pregunto con
curiosidad.
“Oh.. y que compañía es?, bueno si no le importa que pregunte?” – Sin duda Nagisa podía
darse cuenta que Shizuma era alguien de dinero, ya que durante las compras la joven de
cabellos plateados pago por todas las cosas que Nagisa había elegido para ella misma y
considerando el tipo de automóvil que manejaba…sin duda no cualquiera tiene estacionado
uno de esos fuera de su casa.
“Si…” –
Una vez que se encontraban casi enfrente de la joyería Shizuma continuo – “ y usted?” –
De este modo ambas entraron a la tienda, mientras sonaba un pequeño timbre alertando al
vendedor que había clientes dentro de la joyería. En eso Shizuma se acerco a los mostradores
y comenzó a verlos, preguntándose porque todos eran muy similares.
Shizuma vio el precio, frunciendo el ceño – “no te preocupes por el precio Aoi-san, escoge
unos que realmente te gusten…si mis padres se enteran que no puedo comprarle algo lindo a
mi prometida seguro…no volveré a ver la luz del día…” –
Con una leve risa por ese ultimo comentario, Nagisa camino hacia el otro extremo del
aparador y sus ojos capturaron la atención de un lindo anillo que lucia un diamante cortado
triangularmente.
Al notar la expresión de la joven pelirroja, Shizuma se acerco hacia donde ella se encontraba
y llamo al vendedor. Después de pensarlo unos momentos, ambas finalmente se decidieron por
ese par de anillos. Con eso Shizuma estuvo contenta de que las compras habían sido un éxito y
que tenia otra cosa menos de que preocuparse.
“Te llevare a casa…” – ofreció Shizuma de manera amable haciendo sonrojar a la otra joven,
quien accedió a la oferta. Después de todo, Shizuma no parecía que fuese una amenaza o
alguien con malas intenciones después de todo.
Al llegar, Shizuma le ayudo a Nagisa con la cantidad de bolsas de las previas adquisiciones,
para irse pronto a su casa y descansar, después de todo las compras siempre suelen ser
agotadoras.
“Oh..casi lo olvido..” – volteando a verla – “ ten” – sacando una pequeña caja negra donde se
encontraba el anillo de Nagisa.
Nagisa dio una pequeña risa nerviosa, mientras la palabra ‘comprometidas’ hacia eco en u
mente. – “Esta bien, buenas noches Shizuma” –
***
Aoi Nagisa se sentía ligeramente cansada. Al día siguiente se encontraba sentada con sus
amigas celebrando el cumpleaños de Chikaru, queriendo que la celebración no terminara al
saber que al llegar a casa…tenia que hacer cosas de su trabajo.
Escuchando las divertidas anécdotas de sus amigas, ella continuo bebiendo su vino como si
este fuese agua y decidió contar su propia anécdota. Nagisa contó que un día mientras se
encontraba en una tienda de lencería, uno de los clientes que se encontraba ahí, había
comprado accidentalmente la talla incorrecta del sujetador de su esposa, haciendo que ella lo
golpeara…si exactamente 'ahí'....en frente de todas las personas de la tienda. Definitivamente
Nagisa creyó que después de santo golpe…jamás podrían tener familia…si muy probable. Sus
amigas rieron al imaginar aquella escena, tanto que tuvieron que doblarse del dolor que
produce el humor. Pero si..bajo la influencia del alcohol todo es doblemente mas gracioso…
sin duda.
Después de retomar el aire, sus amigas empezaron a contar sobre sus líos amorosos, los cuales
Nagisa prefirió mantener su boca cerrada, ya que si contaba su situación actual..sin duda la
tirarían de loca..después de todo era una situación poco común. Seguramente seria la burla
del día ya que sus amigas sabían perfectamente que a Nagisa no le interesaban del todo los líos
amorosos, ya que nunca le había gustado estar con alguien ‘realmente’. Ella siembre había
estado completamente sola, huérfana desde los 14, pero casi no recordando a sus padres
porque siempre se encontraban viajando de un lado al otro. Entonces, ella básicamente siguió
su vida de la misma forma, incluso después de la muerte de sus padres, los cuales le heredaron
las franquicias de aquella florería…sin duda un buen negocio para poder vivir el resto de su
vida, ya que esa tienda siempre surtía pedidos para eventos de suma categoría.
Todo era muy monótono hasta que un día, mientras esperaba por sus pastelillos preferidos en
un bar de la ciudad, escucho graciosos resoplidos hechos por una hermosa mujer, quien
trataba de olvidar sus penas con wiskey, al mismo tiempo que trataba de ridiculizarla por
estar en un bar ordenando pastelillos. Shizuma Hanazono era su nombre; Nagisa simplemente
se sintió naturalmente interesada en tan elocuente personalidad, que fue resaltada en una
corta pero graciosa conversación, donde ella había aceptado, así sin mas, ser su prometida,
bueno al menos pretender que lo era.
Haciendo una pequeña memoria hacia ya algunos años atrás, cuando la única persona con la
que ella había tenido una relación le pidió matrimonio. Cuando su pareja de aquel entonces se
lo propuso, ella estuvo petrificada ante tal confesión, ya que pues aquella relación no era del
todo seria y sin embargo su pareja se atrevió a preguntarle tal cosa! Por supuesto ella declino
inmediatamente la propuesta. Pero la historia no termino ahí, ya que muchas personas
siempre estaban detrás de ella…cosa que Nagisa se preguntaba, porque todo el mundo quería
estar tras ella tan insistentemente?
Entonces cuando Shizuma, con aquellos profundos y hermosos ojos llenos de desesperación, le
pidió su ayuda, bajo la condición que seria estrictamente profesional, Nagisa se conmovió y
accedió a ayudar a la primera persona que realmente no quería pasar solo una noche con ella
a como diera lugar. Nagisa encontró este hecho algo noble y bastante adorable, considerando
que la pelirroja tenia cierta debilidad hacia lo adorable….De este modo, al considerar que
esta situación la llevaría a romper la rutina de su vida; el hermoso anillo que le había
regalado Shizuma alejaría proposiciones de otras personas y lo mejor de todo…compartiría
algún tiempo con aquella hermosa mujer. Sin duda, Shizuma era algo totalmente diferente..la
idea de ayudarla no sonaba tan mal si lo pensaba de esa manera.
***
“No quiero ofenderte pero te ves absolutamente hermosa esta noche….” – haciendo sonrojar
a Nagisa, la cual lo tomo como un cumplido.
Minutos después ambas jóvenes se encontraban dentro del auto, camino a la casa de Shizuma,
donde seria la reunión. Mientras tanto Shizuma siguió la conversación.
“Claro…estoy segura” – esquivando un auto – “ Mis padres son algo radicales, pero estoy
segura que les caerás muy bien….el prometido de mi hermana es un gran tonto, cabeza
hueca…entonces solo ignóralo…por tu salud mental, debes confiar en mi...” – haciendo una
leve pausa mientras pensaba en algo - “ mmm….también creo que deberías se cautelosa con
mi prima Tamao…seguramente le vas a gustar mucho…y me querrá dejar sin prometida…”
– ambas riendo ante el comentario – “ sin duda tengo una familia muy extraña..” –
Shizuma dio una vuelta y se estaciono fuera de su magistral casa, la cual estaba totalmente
iluminada. Dando un profundo respiro, tomo la mano de Nagisa, la que pudo notar su
nerviosismo, por primera vez.
“En cuanto a mi…creo que debes saber algunos datos…pronto tendré 23, hablo francés, me
encanta la cocina italiana, mi pasatiempo es tocar el piano, soy vicepresidente de Sony, y me
encantan las flores..”-
Nagisa rió y continuo – “ Muy bien Shizuma…entonces si alguien te pregunta, tengo casi 21,
tengo una debilidad por los postres y trabajo en tu tienda favorita…” –
Miyuki vio entrar a su hermana mayor, dejando escapar un suspiro en señal de alivio, ya que
Shizuma había logrado encontrar a alguien para aquel día. La madre de Shizuma también
miro hacia la puerta, mientras sonreía ampliamente, dirigiéndose hacia ellas.
“Shizuma” – su madre dijo al darle un breve beso en su mejilla – “ quien es esta linda
señorita?” –
Nagisa se sonrojo y dejo que Shizuma hablara – “ Em..ella es Aoi Nagisa.., Nagisa ella es mi
madre Hanazono Mutsumi…” –
La madre de Shizuma no podía creer que suerte tenia el día de hoy. Su hija mayor había
hecho una gran elección al encontrar a una chica con tan buenos modales! Sin mencionar que
ella llevaba un tradicional Kimono y que se veía mejor que las otras mujeres que se
encontraban en la reunión, quienes lucían vestidos que dejaban mucho que pensar.
Nagisa por supuesto no tenia una familia, entonces aquella bienvenida hizo sentir cierta
calidez en su corazón. Por un momento olvido que Shizuma le pagaba por estar ahí y sonrió
genuinamente.
“Gracias Mutsumi-san!” –
***
Shizuma miro a través del salón y vio a Nagisa platicar felizmente con su madre. No pudo
recordar cuando fue que vio a su madre con tanta alegría.
“Creo que ya has comido suficientes” – al ver que Miyuki había comido ya media caja.
Reclamando – “Tengo muchos antojos hermana…y ahora solo quiero comer chocolate…” –
quitándole rápidamente la caja de chocolates.
“Em..no es nada padre….veras Miyuki esta muy ansiosa por lo de la boda es todo…” – dijo
Shizuma volteando a ver a su hermana diciéndole con la mirada – me debes una por salvarte
la vida una vez mas –
“Vaya Shizuma…debo admitir que tienes una prometida muy bella…un placer en conocerte
hija…” – saludando a Nagisa quien correspondió al saludo y sintiéndose extremadamente
feliz de que alguien le hubiera dicho aquella ultima palabra.
En cuestión de minutos la madre de Shizuma se reunió con ellos para seguir conociendo mas a
la futura integrante de la familia.
Los ojos del patriarca de la familia se abrieron con sorpresa – “ un bar…una mujer tan linda
como tu que haría en un lugar así?” –
“En ese bar en particular hornean los mejores pastelillos de la ciudad” – bebiendo su
champagne –
“Entonces como fue que conociste a mi hermana?” – pregunto Miyuki al querer saber las
elocuencias de su hermana mayor.
En ese momento la atención estaba sobre ella y sabrían que si decía algo que fuera falso lo
sabrían, entonces decidió continuar con la verdad – “Shizuma estaba bebiendo en la barra,
mientras yo esperaba mi orden” – sonriendo inevitablemente al recordar el momento. –
“De ahí, nos quedamos platicando y creo que le agrade cuando mencione que trabajaba en su
tienda favorita de flores..” –
“Oh que bien…me alegra…y dime Nagisa-chan que hay de tus padres?” –
“En verdad no tengo padres, murieron hace unos años” – sonando un poco triste.
“Oh linda…lo siento pero sabes…ahora ya tienes unos padres y una nueva familia…todos
nosotros..” –
Momentos mas tarde, Nagisa estaba tratando de encontrar a la joven de ojos verdes entre
tanta gente, ya que sin saber como había desaparecido del lugar donde ella se encontraba
hablando con sus padres. En eso, la madre de Shizuma noto el brillo proveniente de los ojos
de Nagisa y esa fue la señal para aprobar ese matrimonio.
“Muchas gracias a todos por venir esta noche, como todos ustedes saben, la boda esta a una
semana" - anuncio señor Hanazono al ver reunidos a los invitados en la mesa.
“Yo solo puedo desearle lo mejor a mi pequeña hija…espero que seas muy feliz” – brindando
y haciendo sonar el cristal de las copas.
Shizuma sintió nervios al ver como todos la voltearon a ver al instante, haciéndose aparecer
tras unos momentos de ausencia. En eso, la comida empezó a ser servida, la cual se veía
bastante apetitosa.
Shizuma sonrió al ver el fuerte sonrojo de Nagisa, diciendo la primer cosa que le vino a la
mente – “ que no vez…ella es muy hermosa…” –
Antes de que Tamao pudiera intentar dejarla sin prometida, Shizuma se levanto y tomo la
mano de Nagisa, alejándola de tanto acoso familiar.
La madre de Shizuma las había seguido, tal vez si…espiando un poco, ya que sin duda era
increíble como su hija había podido conseguir a una prometida en tan poco tiempo.
Nagisa estuvo en un shock momentáneo al ver que el rostro de Shizuma se acercaba al de ella,
viendo aquellos apetitosos y delineados labios muy cerca de los suyos, pero que al final se
dirigieron a su oído para decirle en secreto – “ creo que mi madre esta viéndonos..” –
Nerviosa, Nagisa vio discretamente que era cierto, moviéndose ligeramente…pensando que
Shizuma trataría de besarla…cosa que era perfectamente normal…ya que estaban
‘comprometidas’. Shizuma, al ver los hermosos rasgos de Nagisa, sintió unas ganas
desperadas por besarla en ese momento, si…sus labios comenzaban a rozarse cuando
escucharon a alguien toser de lejos.
Ante esto, Nagisa comenzó a reír ante la cara de Shizuma, quien se veía molesta por la
interrupción de su madre. – “ Shizuma…acaso tu madre sabe que tu hermana esta
embarazada?” –
“Ahora entiendes mi problema…es por eso que esa boda tiene que ser ya!…mis padres son
algo tradicionales en ese sentido…de hecho su matrimonio fue arreglado…entonces te
imaginaras que mis padres piensan que mi hermana y su prometido no han ido mas allá que
de tomarse las manos…” – riendo ambas al final, por el sarcasmo de Shizuma.
***
“Espera!” – deteniendo a la pelirroja quien había salido ya del auto – “ solo quería
agradecerte…realmente nunca había visto a mi familia tan feliz y mi hermana podrá casarse
antes que su problema se sepa…y todo gracias a ti”-
Sin duda Nagisa nunca había escuchado palabras tan sinceras…- “No hay problema
Shizuma…me encanto conocer a tu familia…realmente no puedo esperar a verlos
nuevamente la próxima vez antes de la boda….y en especial me alegra mucho haberte
conocido a ti” –
“Hasta pronto..” –
Y antes de que nuestra pelirroja cayera profundamente dormida esa noche, pensó en aquellos
hermosos ojos que tuvo tan cerca de los suyos por un momento…sintiendo una ráfaga de
calidez viajando por todo su cuerpo. Se sentía muy bien ayudar a alguien…tan bien..que no
pudo recordar desde hace cuanto tiempo…había dejado de pretender y pensar por un
momento que era algo totalmente real…
Cap 03
Ambas con dinero…una mas que la otra…pero compartiendo un gran vacío…Shizuma era
impaciente, Nagisa mantenía su temple…Definitivamente, eran blanco y negro…una
interesante combinación…donde tendrían la oportunidad de compartir y tener los mismos
intereses, aunque en un principio pudieran dudarlo.
***
El sábado muy temprano, nuestra pelirroja se encontraba secándose el cabello con una toalla
dentro de su cuarto de baño. Al instante, corrió hacia su buró para alcanzar y detener el
sonido de su celular contestando la llamada.
“Solo quería decirte que pasare por ti hasta el medio día, creo que me trataran de mantener
ocupada durante la mañana.” – mientras sonidos se alcanzaban a escuchar de personas que
estaban acomodando numerosos objetos.
Si era sábado, el tan inesperado día de la famosa boda, había llegado!....única razón que
Nagisa tuvo para levantarse a las 7 de la mañana en un fin de semana…y no solo ella…
Shizuma también sonaba bastante cansada por el teléfono.
“Pues yo estaré lista en un momento…si quieres puedo ir y ayudar con los preparativos de la
boda…” –
“ No…mi madre seguro me dará todo un sermón si no voy y te recojo. Solo dame unos
minutos.” –
Tal como lo prometió, pasaron unos cuantos minutos cuando escucho el timbre. De este modo,
salio al encuentro con Shizuma, quien vestía de una manera casual, ya que la boda seria hasta
las dos de la tarde…entonces habría el suficiente tiempo para cambiarse mas adelante.
“Oh Nagisa…creo que tendrás que dejar por ahora tu maleta…no va a caber” – mientras un
par de ojos verdes veían aquel bultoso objeto.
Nagisa la miro confundida, pero simplemente asintió, sin duda Shizuma se veía muy cansada
esa mañana. Una vez fuera de la casa..Nagisa entendió porque no podían llevar esa maleta.
“No acostumbro a ir en esta cosa…pero como Miyuki quería usar mi auto para la boda,
porque el de ella esta en el mecánico…entonces estaré condenada a esta motocicleta por el
momento…” –
“Esta fresca la mañana, no crees?” – mientras se subía a la moto y le daba un casco a Nagisa.
“Pero te va a dar frió, puedo regresar por una rápido..” – ya que Shizuma traía una blusa sin
mangas.
“No te molestes, serán solo unos minutos, yo estaré mas que bien” –
“Estoy acostumbrada al frió…ven vámonos antes de que mi madre mande toda una brigada
en nuestra búsqueda” –
Ya en camino, Nagisa siguió las instrucciones de Shizuma de sujetarse fuerte de ella. Así que
la pelirroja rodeo la cintura de la otra joven antes de que el motor se pusiera en marcha. En
15 minutos, ambas se encontraban en uno de los hoteles mas lujosos de Tokio, mientras
escuchaban a la madre de Shizuma regañando a otros familiares que estaban acomodando
mal unas cosas. Sin duda Nagisa estaba sorprendida al ver lo eficaz que era esa familia. Ya
que Tamao se encontraba alineando unas sillas en el salón y el señor Hanazono se encontraba
supervisando al personal….
“Vaya Shizuma! Hasta que por fin apareces…” – apunto de regañarla hasta que vio a Nagisa
detrás de ella.
“Oh Nagisa-chan…” – sonando automáticamente mas amable, con un sorpresivo brillo en sus
ojos.
“Nagisa ofreció su ayuda madre…” – sonando enojada al ver que su madre estuvo a punto de
sermonearla, mientras Nagisa se ajustaba la chamarra que tenia puesta al sentir el intenso
aire acondicionado del lugar.
***
“Por dios…esos arreglos no van acorde a la decoración!” – dijo la madre de Shizuma bastante
enojada, al ver como unos ayudantes del hotel ponían unos arreglos florales en la mesa
principal para los recién casados.
“Lo siento pero…esto fue lo que se nos dijo poner…” – aclaro un empleado.
“Y ahora donde podemos conseguir un arreglo decente…a estas horas…” – dijo la madre de
Shizuma.
“Eh Nagisa…no podemos usar algunos de los que tienes?…me habías comentado que tenias
unos en tu casa…” – volteándola a ver.
Sorprendida – “Bueno no es que no quiera…solo que aun no están del todo listos…le faltan
unos detalles todavía..” –
“Pero seguro estarán mejor que ‘eso’ tan feo que esta ahí….” – contesto Shizuma
encogiéndose de hombros, después de señalar tan terrible arreglo.
***
De vuelta en la casa de Nagisa, ambas entraron y la pelirroja le dio a elegir a Shizuma los
arreglos que se encontraban en ese momento en su casa. Después de decir cual llevarían
Nagisa sugirió.
“Shizuma, pienso que nos podemos ir juntas, puedes dejar la moto aquí.” –
Nagisa, quien se encontraba haciendo unos ajustes necesarios al arreglo de flores, se detuvo
para voltear a ver a Shizuma frunciendo el ceño.
“Nada…” –
De pronto hubo silencio..Nagisa tomo el arreglo y se hizo un lado para que Shizuma tomara
su maleta.
“Lo hiciste…pareces que estas molesta” – dijo al tomar la maleta del suelo.
Cada quien con sus respectivas cosas…ambas caminaron hacia la salida. La joven de cabellos
plateados empezaba a sentirse algo impaciente.
“Estas molesta” –
Entonces se dirigieron al auto de Nagisa y Shizuma guardaba las cosas en la cajuela mientras
volteaba a ver la motocicleta.
“Acaso estas molesta por eso?” – tratando de seguir a Nagisa, quien camino hacia la puerta de
su auto.
“Ya te dije que no estoy enojada…cuantas veces tengo que repetirlo” – viéndola de frente.
“Mmm…creo que lo mejor es que nos veamos en el hotel…” – abriendo la puerta de su auto –
“ así puedes ir nuevamente en ese vehículo tan irresponsable....” –
“No espera…como que irresponsable….aquí no hay otra cosa mas irresponsable que tu
manera de manejar!” – dijo defendiéndose.
Sentándose dentro de su auto, con una sonrisa malévola – “ Oh..entonces dime mi querida
Shizuma…según tu, que tiene de malo mi manera de manejar…?” –
Pensando – “mmm…que me dices cuando fuimos a comer el jueves…te pasaste la luz roja..” –
“Todavía estaba la preventiva…si mal no recuerdo” – aclaro.
“Pues con mas razón…preventiva significa ir MAS despacio” – recalcando esta ultima
palabra.
De pronto, Nagisa cerro la puerta y Shizuma escucho el motor encenderse, para ver como la
pelirroja se despedía de ella moviendo su mano, antes de empezar a alejarse.
Después de esta escena…quien se atrevería a creer que solo estaban pretendiendo ser una
pareja…?
***
Después de que todos los preparativos estuvieron listos y todos los familiares, amigos e
invitados habían terminado de arreglarse. La ceremonia finalmente sucedió, resultando ser
genuinamente hermosa. Shizuma pensaba que Ryo, el ahora esposo de Miyuki encontraría la
forma de empeorar las cosas…si…sin duda como lo decía ella…podía llegar a ser un muy
tonto algunas veces; pero afortunadamente todo estaba saliendo en orden…incluso cuando
tuvo que bailar con Miyuki…Ryo tuvo la decencia de no arruinar aquel mágico momento.
Desde una mesa, Shizuma veía lo sonriente que estaba su hermana menor al perderse en la
mirada de aquel cabeza hueca mientras bailaban una balada, sin duda la joven de cabellos
plateados no pudo evitar sentirse algo nostálgica. El día en que Ryo se llevaría para siempre a
su ‘inocente’ hermana finalmente había llegado. Sin embargo, Shizuma aun tenia unas ganas
tremendas de golpearlo por dejar a Miyuki embarazada tan pronto…pero al ver la mirada de
profundo amor en los ojos de aquel hombre, considero desistir de aquel salvaje pensamiento.
Ella siempre supo que el amaba a su hermana, a pesar que desde pequeños, Ryo hubiera sido
como la piedra del zapato de Miyuki…pero que va….el tiempo se fue tan rápido..y ahora su
hermana se iría de casa para vivir con el y empezar una nueva vida…si…Shizuma estaba algo
triste, después de todo.
Después del baile de la nueva pareja de recién casados, caminaron alrededor del salón
sonrientes y saludando a los invitados, agradeciéndoles su presencia e invitándolos a que se
divirtieran un poco en la pista de baile. En eso, Shizuma vio a su madre, quien se encontraba
bailando, que era apretada intencionalmente entre dos jóvenes, quienes no se daban cuenta
que la estaban prácticamente aplastando. De golpe, Shizuma retiro sus ojos de tal espectáculo,
dejando su bebida en la mesa. Con fastidio, decidió buscar a Nagisa, la cual se encontraba
platicando alegremente con Miyuki y Ryo, quienes estaban riéndose ante una broma hecha
por el. Entonces, Shizuma se acerco curiosamente hacia ellos, los cuales se callaron
rotundamente al verla aparecer junto a ellos.
La joven de cabellos plateados volteo a ver a Ryo con una mirada amenazante, tal que puso al
nuevo esposo algo nervioso.
“Si tu llegas a lastimarla o despreciarla…juro que te acabare con mis propias manos y te
arrepentirás de haber nacido…así que cuídala mucho…te la encargo..” –
Impactados por sus serias y agolpadas palabras, Shizuma sonrió de repente y continuo –
“y..claro..olvide decir…felicidades..” –
Miyuki volteo hacia su hermana abrazándola y dándole un breve beso en la mejilla diciéndole
un gracias cerca de su oído. Shizuma también devolvió el abrazo cariñosamente, dejando un
beso en la frente de Miyuki.
Miyuki asintió con la cabeza, pensando en lo diferente que seria su vida de ahora en adelante.
Al ver aquella escena, Ryo se acerco mas hacia ellas para decirle a Shizuma – “No te
preocupes por Miyuki…yo haré todo lo necesario para que ella siempre este feliz y la
protegeré por siempre…” -
Shizuma cerro sus ojos, suspirando al romper el abrazo y dejar a Miyuki, quien se limpio las
lagrimas de sus mejillas, para tomar el brazo de su esposo y continuar visitando las otras
mesas del salón.
Nagisa se levanto de su asintió y toco el hombro de Shizuma, dándole una tierna sonrisa. –
“Estas bien?” –
Tomando su mano y haciéndole ojitos dijo – “ Oh..quien diría que Shizuma podía ser tan…
tierna…” –
Nagisa rió levemente y deposito un beso en la suave mejilla de Shizuma, mientras trataba de
llevarla hacia la pista de baile. – “Vaya….Shizuma si que es un estuche de monerías esta
noche…me pregunto si sabes bailar también?” –
“Vaya…realmente lo sabes hacer muy bien Shizuma..” – diciendo estas palabras cerca del
oído la otra joven, descansando su barbilla en el hombro de la otra joven.
Haciendo un leve puchero – “Lo haces sonar como si nunca hubiera bailado antes…” –
“Lo que es increíble aquí…es que puedas bailar con semejantes tacones..” – dijo al
recordarlos brevemente.
En eso, Shizuma se distrajo levemente al ver que su madre la estaba saludando desde lejos,
agitando su mano en el aire…oh…podríamos considerarlo como… el estado de embriagues
haciendo efecto en su madre.
“Ouch!” – haciendo voltear a Shizuma de pronto – “debes fijarte hacia donde nos estamos
moviendo…” – riendo levemente.
“Duele cierto…” – haciendo una pequeña pausa – “pero tu decías que…era imposible que yo
pudiera bailar con estos tacones....solo estaba demostrando que estabas en lo correcto.…” –
riendo inevitablemente.
“Eso no es justo Nagisa…yo jamás dije que no pudieras bailar con ellos…solo dije que me
parecía impresionante que lo hicieras…” -
En eso la pelirroja, deslizo su mano hasta el cuello de Shizuma para verla a los ojos..
***
El reloj siguió su curso…y las personas comenzaron a irse…hasta que solo quedo la familia
reunida en una mesa…terminando con un par de bebidas.
“Nooo aun no se pueden ir…íbamos a platicar sobre los recuerdos de mis dos hijas…lo
adorables que eran de pequeñas…vamos Nagisa-chan…no quieres saber que hacia Shizuma
cuando era una niña?” –
“Esa es mi futura nuera…aparte dudo mucho que Shizuma quiera contarte lo del misterio de
las toallas de baño…” – viéndola traviesamente.
“Pues veras Nagisa-chan…todo comenzó cuando Shizuma solo tenia seis años….varias
personas que ayudan en la casa…me notificaron que muchas toallas del baño
desaparecían….claro al escuchar esto me pareció de lo mas raro…quien querría un simple
trapo como ese?” – viendo culpablemente a Shizuma, quien de inmediato movió su mirada
hacia otro lugar. – “ Entonces un día…una de nuestras sirvientas salio a tirar la basura…y se
dio cuenta que en aquel bote…se encontraban las toallas…si algo sucias…pero pues ahí
estaban…como podrían llegar ahí, me pregunte?….Para no hacerte el cuento aun mas
largo…un día Shizuma venia llegando de la escuela…toda energética como siempre…pero lo
extraño es que ella caminaba de puntitas…porque estaban lavando la banqueta de la entrada
de la casa y estaba toda mojada…entonces cautelosamente caminaba de puntitas hasta llegar
a la casa y después perderse. Un buen día la seguimos…y no sabes lo que hacia esta niña de
los mil diablos…según ella…limpiaba la suelas de sus zapatos…porque no quería que se le
ensuciaran con el piso mojado….tirando las toallas sucias a la basura…” –
Una risa en unísono se hizo presente en todos los familiares al recordar o imaginar esta
escena…Shizuma queriendo que la tragara la tierra por supuesto.
“Jajaja…ah Shizuma sin duda eres súper tierna!!” – dijo Nagisa finalmente entre risas…
aguantándose del dolor.
“Hay… hija..” – riendo eufóricamente – “que cosas nos hacías vivir…eras quien eras…
aunque no se de donde sacabas esas ideas…tu siempre tan..cautelosa” –
“No tengo que contestar eso!!! Además Nagisa…nos vamos ya escuchamos bastante…” –
muerta de la vergüenza.
***
El taxi no tardo en llegar y ambas pudieron llegar sanas y salvas a casa de Nagisa en corto
tiempo. Una vez dentro, Shizuma pidió por un urgente vaso de agua, mientras lo tomaba…la
pelirroja se quito sus aretes, collares dejándolos en su habitación…y prendiendo algunas
luces.
“Bueno Nagisa..como siempre gracias por todo…pero creo que ya es hora de irme…”- dando
un bostezo.
“mmm Shizuma…son casi las cuatro de la mañana….yo pienso que mejor deberías
quedarte..me sentiría un poco mas tranquila” –
“Tu te quedas aquí esta noche…no se hable mas…si no..que tal que te pasa algo y no…” –
tomándola de la mano evitando que saliera.
“Quieres que te preste algo para dormir?” – una vez cerca de su habitación.
“Eh..espera” – Shizuma reía…mientras sujetaba las manos de la otra joven para defenderse.
“No lo haré” – dijo de manera infantil…sin saber que su cabello le daba cierto cosquilleo al
rostro de Shizuma.
Shizuma rió..y ambas rodaron por la cama, tirando la almohada pro un lado, contemplando
la sonrisa de Nagisa con aquellos ojos verdes.
“a???” –
“Cosquillas” –
“Q-que” –
Nagisa fue interrumpida y sustituyó sus palabras para poder reírse ante un voraz ataque de
cosquillas.
En eso Shizuma sintió un buen golpe al terminar con Nagisa en el suelo, sin parar de reír. La
pelirroja se movió inconscientemente para quedar muy cerca del rostro de su ‘prometida’.
El beso se consumo, por la necesidad de tomar aire nuevamente, sus ojos aun perdidos en una
sensación que palabras no podían explicar. Nagisa, descanso su cabeza en el hombro de la
otra joven al sentirse nuevamente dentro de un protector abrazo.
“Flores…” – dijo Shizuma, dejando breves besos en aquella pelirroja cabellera en un suspiro.
“Flores?” – pregunto curiosa, levantando su cabeza para ver a Shizuma a los ojos.-
Nagisa respondió besando su mejilla, para después volver a sus adictivos labios. Ambas
compartían un frenético beso, el cual fue detenido, cuando Shizuma movió sus labios al cuello
de Nagisa…dando breves pero sutiles mordiscos.
“Pero que es lo que estamos haciendo?” – preguntó Nagisa en un tono muy suave, sintiendo la
mano de Shizuma entrelazarse a la suya.
“Emm…yo no lo se…” –
En respuesta, ella tomo de la mano de la otra joven que descansaba en su abdomen para
tomarla de igual modo, dejándola en el mismo sitio.
Soltando el agarre de sus manos, ambas se levantaron del suelo, Nagisa ayudándole a
Shizuma a incorporarse de igual manera.
“Shizuma?” – expectante.
“No quiero que te vayas…que al final me dejes…” – repitió, tomando todo el aire que pudo –
“ Quiero que esto sea real ahora…bueno me refiero a nuestro compromiso” –
“Por favor…” viéndola de manera determinante - “ no me haría nada mas feliz que aceptaras
el compromiso…que te cases conmigo Nagisa” –
Sintiendo un poco de pánico, Shizuma dejo de acariciar la mano de la joven con su dedo
pulgar.
Shizuma asintió con una sonrisa – “ Si creo que tienes razón, perdona…” – bostezando – “
entonces vamos a dormir que te parece?” –
Una vez en su cama…ambas se vieron nuevamente, antes de que sus labios fueran reclamados
una vez mas…en una eufórica batalla que ninguna estaba dispuesta a perder, elevando
aquella intensidad eléctrica producida al contacto de sus labios, elevando dicha intensidad
cada vez mas…Olvidando aquella ‘calma’ que el corazón no podía entender…
Continuara…..
Cap 04
La paciencia las torturaba a cada instante, tanto que la distancia de sus labios fue separada
una vez mas, cuando Shizuma depositaba ligeros besos en el cuello de Nagisa, quien sintió sus
mejillas arder. Siguiendo su desesperado recorrido, Shizuma beso los hombros expuestos de la
pelirroja, haciéndola sonrojarse al máximo, antes de volver a su cuello con un poco mas de
intensidad. Nagisa sentía que la temperatura de su cuerpo incrementaba…quemaba, mientras
un pequeño gemido se escapaba de su boca, haciendo que la otra joven sonriera en señal de
satisfacción. Terminando con su objetivo, un par de ojos verdes se detuvieron un momento
para observar a Nagisa, sintiendo como su respiración se hacia mas pesada a cada momento.
Sin esperar un segundo mas, Shizuma acerco su rostro al de la otra joven para satisfacer su
nueva adicción que le provocaban aquellos dulces labios, reclamándolos una vez mas en un
impulso lleno de pasión. Cerrando sus ojos, Nagisa correspondió de la misma manera,
haciendo caso a lo que su corazón le dictase en aquel momento. Entregándose en un abrazo,
ambas profundizaron aquel beso, el cual animo a Shizuma a explorar la espalda de su
‘prometida’ para comenzar a quitarle aquella estorbosa pijama, que termino volando hacia el
suelo…dejando a Nagisa luciendo su juego de lencería.
De pronto, Nagisa dejo de besar a Shizuma para verla…levando sus manos a la blusa de ella
para comenzar a desabotonarla, sin quitar su mirada de aquellos ojos verdes. Al terminar,
hizo lo mismo con la falda que ella traía…prendas que cayeron en algún sitio de la recamara.
Una vez quedando con la misma cantidad de ropa que Nagisa, Shizuma se recostó
cuidadosamente sobre ella, aprovechando nuevamente aquella cercanía....Nagisa tomo las
mejillas de la joven de cabellos plateados para robar esos labios nuevamente. Dejándose
llevar..las manos de Shizuma comenzaron a recorrer aquel fino cuerpo, provocando que otro
leve gemido escapara entre besos de la boca de Nagisa.
Shizuma rompió el beso mientras quitaba la prenda superior del cuerpo de Nagisa,
lanzándolo nuevamente, para comenzar a depositar un camino de leves besos desde su cuello
hasta sus pechos. Sus manos también comenzaron a cobrar vida..de igual manera…dando
ligeras caricias, las cuales comenzaban a estimular a Nagisa..cuyos gemidos se iban
intensificando en volumen. Después de un momento, Shizuma bajo al vientre de la pelirroja…
quien podía sentir el aire caliente de la respiración de Shizuma..haciendo sentir una ráfaga
por todo su cuerpo. Los latidos de su corazón incrementaron al sentir en cada lado de su
cintura las manos de Shizuma, las cuales comenzaron a deslizar aquella ultima prenda…de
una manera gentil..como si fuera una caricia. Colocándose entre sus piernas, Shizuma
comenzó a depositar leves besos en la entrepierna de la pelirroja hasta llegar a su intimidad,
la cual beso suavemente haciendo que Nagisa no pudiera dejar de gemir ni por un momento.
Ella, quien seguía haciendo su cometido, escucho a Nagisa decir que no se detuviera…
haciendo que incrementara su ritmo cada vez mas. Al sentir que el otro cuerpo se comenzaba
a tensar, se alejo un poco para introducir uno de sus dedos en la intimidad de la pelirroja…
esperando a que cediera un poco mas, para introducir un segundo mas.
Dando un suspiro, Shizuma se recostó en la cama tratando de recostarse junto a Nagisa, quien
puso sus manos alrededor de la cintura de esta acercándola. Sorprendida, Shizuma dejo que
sus labios sonrieran, antes de que Nagisa se colocara sobre ella para besarla de nuevo.
Sin esperárselo, Nagisa retiro la ropa interior de Shizuma, dejándola caer al suelo…besando
cada parte de piel que quedaba expuesta..tratando de estimular a su ‘prometida’, quien se
mordía el labio inferior para no dejar escapar un gemido…con todas esas sensaciones que
sentía en aquel momento. Deshaciéndose de tan estorbosas ropas…Nagisa pudo notar el
estado de excitación de Shizuma…por lo que sus manos no dejaron de explorar tan
exuberante cuerpo…hasta llegar a aquel ansiado lugar…que empezó a tocar al principio
tímidamente…hasta finalmente pudo introducir sus dedos suavemente. Al incrementar el
ritmo..Shizuma gimió incontrolablemente…provocando cierta satisfacción en Nagisa. De este
modo…ella continuo complaciéndola hasta que llego al punto culminante…liberando toda esa
embriagues alojada en su cuerpo. Exhausta…Nagisa se recostó junto a Shizuma..quien la
abrazo por la cintura antes de besarla tiernamente…no pudiendo satisfacer su necesidad de
estar besando aquellos labios continuamente durante aquella noche…hasta que ninguna
pudiera sostenerse despierta…para caer en un profundo sueño..donde seguramente…se
volverían a encontrar…
***
La primera vez que Nagisa había intentado salir con alguien había sido durante la
preparatoria, se trataba de un chico bastante popular, el cual solamente jugo con ella
haciéndola sentirse lastimada y usada de algún modo para incrementar su fama. Durante la
universidad, una chica de su clase la había utilizado para darle celos a su ex pareja…
nuevamente siendo solo un objeto de satisfacción para terceros. Pero la relación mas confusa
que pudo haber tenido fue con su reciente ex, Yumi….quienes tenían una relación ‘estable’ en
un principio, pero con el tiempo se dio cuenta que Yumi era un ser algo materialista y
superficial…así que realmente nunca había podido valorar a Nagisa en esencia.
Sorpresivamente esa chica había sido la primera en declarársele para iniciar una relación
matrimonial, con el fin de satisfacer sus necesidades económicas…Al final, que había sido
Nagisa para todas esas personas…acaso un simple objeto material? Después de todo…con el
pasar de los días se dio cuenta que aquella relación con Yumi se volvió algo forzada…porque
casarse bajo esas circunstancias? Comparando sus días con Shizuma, Nagisa no negaba que
había ocasiones en que ella le provocaba uno que otro enojo, pero aunque así fuera, adoraba
mil veces su compañía..su ‘relación’.
Cuando se conocieron, Nagisa jamás tuvo que mostrarle a Shizuma su expediente de datos
generales ni económicos…ni siquiera Shizuma mostró un inmenso interés en saberlo a detalle.
A pesar de que en un principio Shizuma había utilizado a Nagisa para que Miyuki se casara,
la joven de cabellos plateados nunca dejo de agradecerle por ello y reconocer su ayuda. Por
ende, Nagisa había sido utilizada de una manera diferente…definitivamente se sentía
valorada como persona y sabia que significaba algo mas que un simple objeto para Shizuma.
Siendo huérfana tan joven, tuvo que enfrentar muchas veces problemas con su inseguridad y
cobardía…tratando de ser fuerte cuando las personas solo lograban lastimarla…pero
ahora..sin esperarlo, gano el cariño de la familia de Shizuma, quien también le brindo una
linda amistad en un principio. Dado por hecho lo especial que fue solo pretender, Nagisa se
encontraba en este preciso momento en los brazos de alguien por primera vez, pensando en
pasar el resto de sus días con Shizuma y sentirse completamente feliz, pudiendo ser ella
misma…como nunca antes lo había podido ser.
Cubriendo sus cuerpos con las sabanas escuchó otro murmullo de Nagisa…quien abría sus
ojos al dar un leve bostezo. Sin duda, Shizuma nunca había visto a alguien despertarse de una
manera tan tierna…adorable…tan..linda…
“Nagisa..” – dijo aun con una sonrisa en su rostro, mirando una cara confusa de la pelirroja,
quien al poco tiempo recordó todo lo sucedido…transmitiéndolo con su adorable expresión en
su rostro.
“S-Shizuma” – sonrojándose; haciendo que Shizuma quisiera verla de ese modo todos las
mañanas…y eso que se conocían hace cuanto…unos días?
“E-Este..buenos días..” – volteando a ver a otro sitio…cuando percibió la desnudez de la otra
joven, quien se había sentado ya sobre la cama…haciendo que la sabana..no la cubrirse
totalmente.
Muchas veces en muchos de sus otros ‘encuentros’ odiaba que sus amantes se le quedaran
viendo en exceso..pero ahora no le molestaba en lo absoluto…quería que realmente Nagisa se
sintiera atraída por ella…
“Sabes…te ves tan linda cuando te sonrojas…mas cuando tu mirada ya regreso a lo que
estabas observando…” –
Momentos mas tarde…Nagisa salio de tomar una breve ducha…no encontrando a Shizuma
en la cama…haciendo que su corazón se detuviera de momento…acaso jugaron con ella otra
vez?…esto era incomparable a otras ocasiones…fue especial…la primera vez en entregarse a
alguien completamente…y antes de que sus lagrimas salieran incontrolablemente…la puerta
de la habitación…se abrió…viendo que Shizuma traía el desayuno para ambas…
Nagisa se sonrojo…nunca nadie la había tratado así…esto la hacia sentirse alguien especial.
“Dime Nagisa…” – después de comer un poco de fruta y ver su reloj “ – Emm son las dos de
la tarde…que quieres hacer?” –
“Lo que tu quieras…por mi estará mas que bien..” – comiendo de igual manera…nunca antes
había pensado que desayunar fuera algo tan…maravilloso.
Dejando el plato ya vació por un lado – “ Por nuestro bien..será mejor evadir a mi madre por
un tiempo…probablemente estará buscando al primer postor que caiga en sus redes para que
le ayude a recoger el desastre ‘pre-nupcial’ que se quedo en la casa…” –
Nagisa rió al igual que ella, mientras sus manos se entrelazaban sobre la cama.
***
Poniendo mas emoción y adrenalina en sus vidas…Shizuma coloco su dedo índice en sus
labios en señal de silencio, mientras ambas subían la escalera de su casa…hasta llegar a la
habitación de Shizuma. Nagisa nunca había visto la habitación de la otra joven…pero sin
duda le encanto el gusto que tenia.
- Oh pero que buen gusto tiene…aunque…cuando vivamos juntas me gustaría poner mas
flores de otros colores…MOMENTO…en que estoy pensando – al distraerse mientras
Shizuma sacaba una maleta para guardar algo de ropa en ella.
Nagisa doblo toda su ropa…al ver que Shizuma en su desesperación la estaba metiendo toda
hecha bolas…terminando rápidamente…cerraron la maleta y salieron con mucha discreción
de la habitación, sintiéndose como un par de niñas chiquitas apunto de cometer una
travesura.
“Pero donde estará la histérica de mi hija?….que aparte de todo me salio vaga, dios pero que
conducta y manera de portaste con su única madre…Shizuma en verdad tu no cambias…”-
“Siempre hace lo mismo cada que hay una boda de un familiar…” – dijo Tamao susurrando.
“Tienes razón…” – dijo el padre de Shizuma – “ entonces…creo que no la veremos por aquí
en una semana o algo así…” – cruzándose de brazos.
Shizuma y Nagisa rieron levemente, antes de escaparse por otro pasillo…corriendo al primer
auto que tuvieron enfrente. Una vez dentro, Shizuma lo encendió…tocando el claxon lo mas
fuerte que pudo…diciendo adiós con su mano desde la ventana…mientras su prima y padres
comenzaron a gritar fuertemente por la ventana.
“Bendita suerte que tiene!” – gruño Tamao –“ yo también quería escapar de mi tía y de la
limpieza” – murmuró..
“Si de hecho es bastante lindo…solo porque Nagisa-chan estaba con ella, perdono a
Shizuma..” –
“Si tío?” –
“Que!!!..pero que manía tiene de salirse con la suya!!…esta vez si me las pagaras!” – haciendo
un puchero mientras la señora Hanazono la llevo al salón para empezar con la limpieza.
***
Nagisa entrelazo su mano con la de ella, y explico – “ Me dijiste que yo te recordaba a las
flores…entonces tu me recuerdas a la música…” –
Nagisa sonrió para que segundos mas tarde…besara suavemente a Shizuma por unos
momentos…al romper el beso continuo – “ porque cada movimiento tuyo…acelera el ritmo de
mi corazón, por cada sonrisa…me trasladas en un trance, con tus palabras..me haces
suspirar… con tu presencia…marcas el compás de mi vida…con alegría y armonía, tus labios
son adictivos…como una melodía y por ultimo tus ojos..mis favoritos…que transmiten
honestos sentimientos…como la letra de una canción…” -
Shizuma no pudo resistir en besar a Nagisa en ese momento, tras escuchar aquella
descripción…la que estaba entrando en un trance era ella, sin dudarlo. Las envolturas de
comida cayeron en algún lugar del auto…cuando Shizuma se acerco mas hacia ella..para
tratar de tomarla por la cintura…emigrando una de sus manos por debajo de la blusa de
Nagisa. Después de dejar un camino de besos por su cuello…Shizuma se detuvo…viéndola de
frente…con ojos llenos de deseo y un aire de celos.
Shizuma no podía creer lo que estaba escuchando….haciendo una batalla mental en sus
pensamientos…la cual fue interrumpida…cuando Nagisa volvió a robar aquellos labios una
vez mas.
***
“Shizuma…vas muy lento…” – mientras observaba el panorama, ajustando sus lentes de sol.
“Oye…” – dijo frunciendo el seño – “ este bote tiene dos pares de remos….y veo uno de ellos
muy quitecito..junto a una hermosa señorita…” –
Nagisa levanto sus lentes ligeramente y acerco un poco de comida restante…para alimentar a
algunos patitos.
Formando una perfecta ‘O’ con su boca – “ pero ve nada mas…el brazo no te duele al lanzar
comida para alimentar a esos patos..” –
“---“ – Silencio.
Nagisa puso una cara triste..fingiendo que estaría a punto de llorar – “ Shizuma quiere que
me lastime no es cierto?” –
De repente…los remos detuvieron su curso…y levanto los lentes para ver que sucedía…
encontrando a Shizuma viéndola sospechosamente, haciéndola sentir nerviosa.
“Shizuma?” –
Esta se acerco hacia ella para dar un recorrido por su cuello con su dedo índice, un toque
sumamente suave y antes de que pudiera pensarlo…se encontraba gritando antes de que su
cuerpo tocara el agua fría…ganando compostura dentro del agua…volteo a ver a Shizuma
quien reía frenéticamente…mientras la señalaba desde el bote.
“Shizuma!” –
“Perdona Nagisa…es que te veías tan…que tuve que encontrar una manera de enfriarte un
poco…” –
Esa sonrisa traviesa la hizo sonrojarse, a pesar de lo fría que estaba el agua…haciendo que
Shizuma no pudiera negarse mas que se había enamorado perdidamente de su ‘prometida’
“A ver…con cuidado que no quiero lastimar ese brazo que te duele tanto…” – tomando su
mano.
Saliendo a la superficie…Shizuma tallo sus hermoso ojos…tras tomar una bocanada de aire…
“N-Nagisa..” –
“Si..dime..?” – aventándole agua a Shizuma sin dale tiempo a que pudiera decir palabra
alguna..
“Ahora si..espero que puedas alcanzarme…veras que puedo remar mas rápido que tu..” –
***
“Vaya….esto si que esta como para una telenovela…en tu casa…en el asiento trasero del auto
de mi prima…en un bote…en la banca del parque…” –
“Veras…es solo una lista de los lugares en que tu y yo hemos hecho..'esto' y 'aquello'..” –
“S-Shizuma!” –
Ella rió..antes de pedir una mesa para dos en el bar….En cuanto se les dijo que tendrían que
esperar mas de 15 minutos…
Continuara…..
Cap 05
Al no encontrar respuesta, se acerco un poco mas al otro bello cuerpo que seguía perdido en
un profundo sueño. Contemplando la tranquilidad que expresaba aquel rostro, se inclinó
hacia el cuidadosamente, para dejar cortos besos en una tersa mejilla…
“Shizuma…” – dándole otro beso, para decir suavemente cerca de su oído – “ despierta…
dijiste que se te haría tarde..” –
“mmm…” – entrelazando una de sus manos con la de Nagisa, quien la abrazaba por la
espalda.
Abriendo lentamente sus preciosos ojos verdes…volteó a ver el despertador que se encontraba
en el buró…para caer en cuenta que Nagisa la había despertado media hora antes de lo
esperado.
“Nagisa..” – dándose la vuelta para quedar frente a ella – “porque me despiertas tan
temprano?….” – besando sus labios levemente – “ en particular, esta noche me dejaste peor
que a una muñeca de trapo.." -
Abrazándola – “ Eso no justifica que me despertaras mas temprano, además, aunque regrese
a mi casa...no te escaparas de ser una víctima de esta profesional secuestradora...mi hermosa
Nagisa.." -
“Sabes eso me asusta…" - viéndola de frente con preocupación - " no me digas que también
existe una lista de tus victimas…” –
“Shizuma..” – alcanzó a decir entre besos – “ entonces, no estas molesta porque te haya
despertado antes?” –
“Para nada…veo que estamos algo ansiosas esta mañana…” – pronunció antes de que
volvieran a amarse una vez mas…en ese día.
***
“Shizuma! Hasta cuando vas a dejar de ser tan desordenada!…mirada nada mas…dejo la
habitación un segundo y toda tu ropa que ya ha había dejado lista en tu maleta, esta regada
por todas partes!!” – dijo la pelirroja al agacharse a recogerla, con un tono lleno de
desesperación, bastante justificable..
“Oh…” – sacándolo del fondo de un montón de ropa – “aquí esta…deja mandar un mensaje
de que estoy en camino…cielos! Voy tarde a la junta!!” – exclamó
Tecleando el mensaje – “ Claro que tienes toda la culpa..tu eras la que me decía que no me
detuviera….” –
Una vez que el mensaje se envió, Shizuma guardo su celular en una bolsa de su traje sastre,
para ver alcanzar a ver la reacción de la pelirroja - “Deja de hacer esas caritas…que si no…tu
tampoco vas a llegar a tu trabajo en todo el día..” – dándole un fugaz beso en la mejilla, antes
de cerrar la maleta. – “Mira que has estado llegando tarde todos estos días…” –
Segundos mas tarde…ambas salieron de la casa para despedirse, antes de dirigirse a sus
respectivos trabajos.
“Me encantaría mi hermosa Nagisa, pero en verdad tengo que devolver este auto a su
dueña…además, quiero llegar viva a la oficina” – diciendo lo último en tono sarcástico.
“Acaso estas insinuando otra vez, que mi manera de manejar es irresponsable?” – cruzándose
de brazos, quitando su mirada de aquel par de ojos verdes
“Oye…a dónde crees que vas?” – preguntó al ver que la pelirroja se alejaba de ella para
dirigirse a su auto.
“Pues a mi trabajo…ahora las dos vamos muy tarde…” – abriendo su puerta.
“Te vas a ir y no te vas a despedir de mi?” – deteniendo la puerta del auto para que Nagisa no
pudiera abrirla, manteniendo una expresión triste.
“Pues no estaría mal no hacerlo…como castigo por tu insinua- ” – fue lo ultimo que alcanzo a
decir, antes que Shizuma la tomara de nuevo en sus brazos para besarla por unos minutos.
Ante tales sinceras palabras llena de preocupación y ternura…Nagisa solo pudo darle un
fugaz beso en los labios como señal de acuerdo. De este modo, subió al auto…para alejarse
finalmente de su casa y comenzar su día laboral, increíblemente tarde.
***
Una vez dejando el auto de Tamao en el estacionamiento, subió por el ascensor para llegar lo
mas pronto posible a la sala de juntas, donde se encontraban ya reunidos varios socios y su
por supuesto su padre, el presidente de la compañía. En su transcurso, Shizuma trato de
ignorar como siempre todas las miradas que eran lazadas hacia ella, cada vez que caminaba
por diversos lugares de aquel edificio. Le era bastante molesto ser el centro de atención de
millares de ojos lujuriosos, los cuales nunca perdían oportunidad de observar tan exuberante
belleza. En un principio, no resultaba tan molesto...al contrario, era entretenido jugar con las
personas de ese modo, el ser coqueta en toda la expresión de la palabra....era su mayor
característica como toda casanova, cuyo pasatiempo consistía en no perder ninguna
oportunidad de salir y divertirse con alguna que otra chica que le siguiera el juego...gozando
de aquella libertad que tanto adoraba.
Manteniendo esta vida tan libertina, Shizuma había logrado tener muchas citas con diversas
chicas de familias adineradas, las cuales eran solo un pasatiempo a cumplir, cuando el día
laboral se volvía demasiado aburrido o con mucha tensión. Sin embargo, Shizuma sabía que
en su interior, se encontraba vacía de algún modo....pero eso importaba? Era realmente
indispensable llenar ese abismo, cuando era mas entretenido tener a quien quisiera, a su total
disposición? Ver a Miyuki y al tonto de su ahora esposo tan enamorados, le parecía
ridículo...totalmente infantil...la aventura era algo mas atractivo para su personalidad, la cual
era algo compleja. A pesar de que nunca había experimentado la soledad, al tener una loca
familia y varias amantes; no existía manera de que entendiera el concepto de soledad. Por esta
razón, sabía que el riesgo de enamorarse, caía en la paradoja de experimentar el abandono en
algún momento...el vacío de algo totalmente irremplazable, algo que la llenaría de dolor. Así
que mantenía firme la filosofía de, quien lo tiene todo...sólo puede tener miedo a una cosa...a
la perdida. Consecuentemente, ella no estaba interesada en esas cosas...para que preocuparse
por eso? es mejor pretender que la satisfacción de estar con alguien es pasajera...y no
duradera. Después de todo...con todo el trabajo que tenía...tendría cabeza para pensar en algo
tan complicado, como lo es el amor?
Finalmente abriendo la puerta con total discreción, se dirigió a su asiento dentro de aquella
extensa mesa, el cual se encontraba junto al de su padre, quien al verla entrar, solo dio una
media sonrisa. Durante toda la junta, no pudo sentirse mas distraída porque el planeta tierra
no era plano...Todas aquellas explicaciones y datos superfluos de la conferencia le eran
totalmente irrelevantes en el aquel momento. Siendo la vicepresidenta de su futura empresa,
debería mostrar mas interés cuando todos los negociantes se juntaban, pero esta ocasión, su
mente se fue de pinta, como lo haría una estudiante en un día espontáneo de su vida. Pero
porqué? Claro, esto era mal de amor? Que susto...estaba pensando sobre amor?!
Momento...que no se había jurado eliminar esa palabra se su vocabulario y excluirla de su
vida? Al parecer..la tierra era plana por un momento...Shizuma estaba reconociendo que
realmente sentía una profunda atracción hacia cierta pelirroja, fuera de lo puramente físico.
Le importaba su estado de ánimo, su bienestar...todo lo que tuviera que ver con ella...se había
vuelto importante...en el transcurso que su nueva relación comenzaba a florecer. Tanto, que
afirmó que no soportaría ver a alguien mas en su lugar...no estaba dispuesta a compartir a
Nagisa con nadie. Sus miradas, gestos, besos, abrazos, su alma, su cuerpo....ella lo quería
exclusivamente para si misma...egoísta? Para nada...es solo que por primera vez...supo
encontrar cierto valor en una persona...quien la cautivo desde un inicio..su ternura..sus toques
de inocencia...era algo que era totalmente nuevo encontrar en una persona, simplemente era
lo mejor y estaba dispuesta a hacer todo...por seguir con ella...aunque significara dejar su
libertinaje...el cual...sorpresivamente ya no le era tan atractivo...teniendo a Nagisa...que mas
podía pedir.
La junta terminó, cuando todos los pendientes fueron acordados y se despidió de todos los
presentes, incluyendo a su padre, para dirigirse a su oficina.
"Bienvenida Hanazono-san, espero que su viaje de negocios haya sido bastante exitoso" -
saludo la secretaria de esta.
"Gracias, Shiro-san...hay algún pendiente urgente que tenga que atender en este momento?"-
abriendo la puerta de su oficina.
"Los pendientes se han quedado en su escritorio, al igual que recados de personas que la
estuvieron buscando esta semana...dígame, necesita algo en este momento?"-
"Gracias" - y de este modo ingreso a su oficina, la cual no había visto desde hace una linda
semana, la cual dedicó solamente a su adorada Nagisa.
***
Mientras tanto, Nagisa se encontraba revisando el inventario de varios pedidos que se habían
realizado hace unos días, para poder hacer unos cuantos mas. De pronto, su asistente dejó de
hacer lo que estaba haciendo para contestar el teléfono.
"Este si...es para ti Nagisa-san.." - cubriendo la bocina del teléfono con una de sus manos -
"Es un cliente?" -
"Si? Dilo? sabes que nos tenemos confianza....no solo eres mi asistente...somos amigas no?" -
"Si?" -
"Esto.." - comenzado a buscar su móvil por todos sitios recordando dónde lo había dejado -
"Sabes? creo que con tanto desorden que hiciste en mi habitación...lo deje por ahí, porque no
lo encuentro por ningún sitio.."-
"Para nada...lo puedes hacer...solo que te diré mi número de extensión, para que así sea yo
quien te conteste...." - haciendo un leve puchero.
Roja - "Pues que esperabas...no me gusta que alguien mas suspire cuando te escuche..." -
suspirando.
"Shizuma!" - sonrojándose
"Y yo a ti..." -
Silencio momentáneo...
"Eso yo quisiera pero tengo que ver a Chikaru...voy a llevarle unos arreglos que me
pidió...pero te marco cuando me desocupe.." -
"Lo haré y por favor...no comas cosas en la calle...se que es tu costumbre...pero no quiero que
te enfermes, me has entendido?" -
***
El día laboral por fin se acercaba a su termino y Shizuma se encontraba hablando con su
secretaria sobre unos cambios de su agenda para el lunes.
"Disculpen mi intromisión" - dijo una voz masculina, haciendo que ambas jóvenes voltearan.
"Solo te quería decir que ya me voy para la casa...quieres venir conmigo o aún te vas a quedar
haciendo cosas?" -
"Quiero terminar esto si no te molesta Padre...el lunes quiero salir mas temprano.." -
"Bueno...te lo pierdes...yo que te compraría un helado en el camino.." - riendo
"Padre! pero si ya no tengo seis años! como dices esas cosas!" - apenada
"Que ya se te olvido...la vez que te compre un helado y al querer darme a probar...se te cayó
todo en tu blusa favorita...creo que esa fue la vez que te vi llorar tanto" - finalizando con una
risa incontenible por aquellas memorias, risa que contagió a la secretaria de Shizuma.
"Parece que tu y mi madre les encanta avergonzarme!!, vaya pasatiempo que tienen" -
cruzándose de brazos.
"Jajaja....es que hija...realmente siempre te pasaba o hacías cada cosa que bueno...tendre que
contarle esto a Nagisa-san...segurlo lo apreciará!" -
"Ni en tus sueños mas siniestros te dejaría que volvieran a hacer eso!" -
"Padre...."-
"Bueno esta bien...dejaré que termines...aunque si fuera tu...aprovechaba esta oferta que te
estoy haciendo....en fin nos vemos mas al rato..." -
***
Finalmente terminando con todos sus pendientes, Shizuma apago su computadora y ordeno su
escritorio para encontrarlo despejado en el tan odiado lunes. De este modo, tomo las pocas
pertenencias que tenía consigo y se dispuso a dirigirse al estacionamiento, para llevarse una
no muy agradable sorpresa.
- Ahora si que estoy en un lío rotundo...o estoy lo suficientemente dormida o ciega...dónde esta
el auto de Tamao?! - pensó al voltear a todo sitio del estacionamiento, hasta que vio a uno de
las personas de seguridad del estacionamiento.
"Disculpe, el auto que deje estacionado en mi lote no esta, como permitió que alguien pudiera
robarlo!, que no esta usted para eso?" - dijo bastante enojada.
Mas enojada - "Pues la próxima vez, espero que me avise todo lo que sucede, le quedo
claro...si no, tomare otras medidas que no le gustaran" - exclamó antes de salir
completamente del estacionamiento para empezar a caminar por la calle.
- Así que por eso querías que aceptara tu oferta, no es así Padre?...vaya...si que se esmeran en
arruinarme el día y para colmo todo el dinero que traía estaba en mi maleta...la cual esta
dentro del auto...ahora no podré pedir un Taxi...mi Padre seguro no vendrá por mi y Nagisa
anda en quien sabe dios donde...pero que desastre!!- pensaba al caminar rápidamente por las
calles, después de todo su casa no estaba tan retirada, así que Shizuma optó por seguir
caminando resignadamente.
- Y para colmo esta empezando a llover...maldita sea...Tamao juró que me vengare, por ni
siquiera decirme!!! - sintiendo como poco a poco la lluvia la iba mojando.
Empapada, abrió finalmente la puerta de su casa buscando a Tamao por todas partes, la cual
permanecía desaparecida. Pesadamente suspiro al encontrarse a su madre que salía de la
cocina.
"Shizuma!! por todos los cielos, mira nada mas como vienes.." - corriendo para traer una
toalla del closet.
"Se lo puedes agradecer a Tamao...que por cierto dónde esta?" - dando una mirada llena de
furia.
"No lo se...no la he visto desde hace unas horas" - poniendo la toalla sobre Shizuma, quien
comenzó a secarse.
"Aun asi...me da gusto verte de vuelta...aunque hija.." - viéndola extrañamente - "Noto que
estas mas delgada...veo que te has puesto a hacer ejercicio..." -
"Si, antes que dejaras de hacer ejercicio todos los días en el gimnasio, siempre te veía mas
delgada..justo como te veo ahora...pero"- haciendo una pausa - " me gusta que lo hayas
retomado...mira que no quiero que Nagisa-chan, tenga una prometida toda flácida...así que es
bueno que ejercites de vez en cuando, porque con cada cosa que te gusta comer en la calle..." -
riendo - "pero no abuses...no quiero que te me vayas a desaparecer...así que no seas tan
efusiva y tómatelo con calma.." -
"Claro.." - haciendo una mirada sospechosa - asi que "ejercicio"...suena bastante tentador.. -
pensó, antes de que el timbre de la casa sonara.
La madre de Shizuma, abrió rápidamente la puerta, dejando ver a una hermosa mujer de
cabellos negros y ojos color bien, que por su vestimenta, se percibía que venía de una familia
de mucho dinero.
"A mi hija?" - volteando hacia la sala - "Shizuma, hay una joven que te busca..atiendela en lo
que voy a ver si tu padre termino de hablar por teléfono.." -
"Veo que aun me recuerdas....vaya eso me llena de orgullo...yo también te extrañe Shizuma..."
- diciendo seductoramente
"Pues yo no...así que vete de aquí...no se porque vienes y te apareces donde no te llaman" -
dijo en un tono lleno de frialdad.
En eso Mao observo el anillo que estaba en el dedo anular de Shizuma - " Vaya vaya...no me
digas que la gran Shizuma se ha enamorado y va a casarse...es por eso que no me quieres ver
mas?" -
"Eso a ti no te importa...no tengo porque darte ninguna explicación....así que márchate antes
de pierda la paciencia!" - golpeando la puerta de su casa...en señal de enojo.
"Esta bien me iré, te estaré esperando cuando la persona con la que según te casaras...te
abandone cuando sepa lo que realmente eres...así que...llámame cuando eso suceda.." - dando
la media vuelta para irse de aquel lugar.
Ante esa respuesta Shizuma se quedó en total shock, acaso Nagisa la dejaría si se enterara de
que era conocida como una casanova en serie? La intriga y el miedo se fueron apoderando de
su mente ante esta horrible idea...antes de recostarse en el sillón...y perder el conocimiento
repentinamente.
"Hija!!!" - gritó al verla en el sillón, sin conocimiento - " Por dios! estas ardiendo...tengo que
bajarte la fiebre ya!" - corriendo para traer algo con que despertarla.
Ante esto, Shizuma solo permaneció al cuidado de su madre...sin saber que esperar...cuándo
tuviera que hablar con Nagisa...de los errores de su pasado.
Cap 06
Esa misma tarde, Nagisa se encontraba en medio del transito provocado por tan fuerte lluvia,
con destino a su hogar. Como le había comentado horas antes a Shizuma, ella vería a una
antigua amiga, Chikaru, para darle unos arreglos florales que había encargado de manera
especial. Ambas amigas se conocieron durante la época escolar, en la cual, Nagisa le había
tocado vivir y llevarse un sin número de desagradables eventos. Con su apoyo, Chikaru
pronto se convirtió en una de sus mejores amigas, ganándose la confianza de esta pelirroja.
Llegando finalmente a casa, Nagisa bajo cuidadosamente los arreglos florales, cubriéndolos
levemente para que la lluvia no los arruinase. Una vez esperando unos momentos en la sala,
Chikaru llegaba finalmente para recoger el encargo, no sin antes platicar un poco y tomar
alguna bebida caliente para ganar calor, después de tan intempestivo clima.
"Gracias por el te y las flores, sin duda se verán hermosas en aquel evento que estoy
organizando en la escuela" - dijo sonriente al recibir la taza de te.
"No es nada, me alegra que tu nuevo trabajo como directora en esa escuela te este gustando
tanto.." - aclaro la pelirroja, al sentarse del lado opuesto.
Nagisa hizo una pausa para contestar, al recordar todo el tiempo que había compartido con
Shizuma durante estos últimos días. Chikaru al notar la cara soñadora de su amiga y
aprovechando su breve silencio, se percató de un brillo proveniente del dedo anular de la
pelirroja.
"Nagisa-chan!" - exclamó - "Ya veo porque has estado ocupada....a ver dime...de que me
perdí....ese anillo debe explicar algunas cosas" - viéndola pícaramente.
Regresando al mundo real, los ojos de Nagisa se posaron en tan bello anillo de inmediato,
para dar un suspiro.
Riendo - "No! para nada, como crees eso...se que ella y yo duramos mucho tiempo, pero..." -
no pudo continuar, al ser interrumpida.
"No me digas que estas comprometida con alguien mas!, que guardadito te lo tenias! porque
no me habías comentado nada?" -
"Entonces significa que no tienes mucho tiempo de conocer a esta persona...vaya...no lo puedo
yo creer, alguien que esta contigo por años lo rechazas, pero ahora a esta dicha persona solo la
conoces y le dices que si?" - comento Chikaru tratando de comprender esa lógica.
"Realmente me dejas sin palabras....espero nos presentes antes de que se casen...me imagino
que la boda será pronto" - mencionó entusiasmada, al imaginarse aquella escena.
"Aun no hemos discutido cuando será, pero claro que te presentare a Shizuma..." -
levantándose del sillón para poder ir a poner mas agua para el te, sin antes sonreírle.
"Interesante nombre....me recuerda a la empresaria de la compañía de Sony....sus campañas
publicitarias...realmente son muy buenas..." - aclaró al recordar los anuncios de los productos
electrónicos, que en si, dicha empresaria hacía uso de su magistral belleza para comerciales y
anuncios públicos.
"Si verdad..." - afirmó sin confesarle de inmediato la verdad...decidió que era mejor guardar
ese secreto por ahora, queriendo que cuando ambas se conocieran, Chikaru pudiera llevarse
una sorpresa.
"Chikaru...puedes contestar por favor?" - gritó ella desde la cocina, mientas se escuchaba
como cerraba las puertas de la alacena.
"Si?.." - haciendo una pausa - "No..no soy Nagisa...esto...un momento..." - caminando hacia la
cocina con el teléfono en la mano, haciendo una expresión facial algo extraña.
"Quién es?...." -
"No le entendí, era una voz algo patosa y gangosa a la vez...como la del pato Donald, dónde
solo Mickey Mouse era el único que comprendía lo que en verdad quería decir" -
Riendo, Nagisa tomo la bocina para poder contestar sin antes pensar - Vaya...hoy ha sido el
día de "identifícame por mi voz" -
"Shizuma!!...pero que tienes que te paso?!" - grito al llevarse la sorpresa del estado de su voz.
"Hay dios...que no fui clara contigo en que te cuidaras?...realmente te escuchas muy mal...en
cuanto termine aquí, iré a verte.." - dijo preocupada.
"No te preocupes por mi...lo mejor es que mejor vengas mañana...no te quiero contagiar.." -
"Mi hermosa Nagisa...no seas necia, no me hagas discutir contigo en este estado tan
decadente.." - tosiendo.
"La única necia aquí eres tu...si me dejaras ir a verte..no tendríamos porque estar discutiendo
en primer lugar..." - haciendo un leve puchero, provocando que Chikaru se riera.
"Yo no soy necia..y no me muestres tu lado terco...por favor ven mañana...que realmente
quiero estar contigo sin estar bajo los efectos del medicamento que acabo de tomar...no quiero
que seas testigo de los efectos que estas cosas provocan en mi..." -
"Que efectos ni que nada, no creo que te pongan a divagar ni a tener alucinaciones
extrañas...así que yo no corro ningún riesgo.." -
"Yo no estaría tan segura de ello...pero...solo por hoy hazme caso...ven mañana..estaré mejor
ya lo verás.." - diciendo ya sin voz
"Ah no puedo contigo...pero esta bien, mañana iré y no pienso salir de ahi..." -
Riendo - "Bueno..entonces te dejo y cuídate por favor...descansa mucho que te veré mañana."
-
"Como un matrimonio?" - riendo - "No como crees...y si puedo estar con una persona con esa
voz....porque se que no es permanente.." - sonriendo.
"Menos mal...pero de algo que si veo que es permanente...es que te veo muy enamorada amiga
mía.." -
Nagisa suspiro ante eso, realmente lo estaba? Una gran parte de su corazón le podía indicar
que si, realmente no verla hasta el día siguiente era frustrante, desesperante...como es que
podía extrañarla tanto? Bueno después de compartir tanto tiempo juntas, era de lo mas
natural que así fuese, pero no le quedaría de otra...tendría que esperar hasta mañana.
Las horas transcurrieron y Chikaru dejó a Nagisa sola finalmente. El resto de la noche, fue
sin duda bastante aburrida y solitaria para ella. Ahora podía recordar lo vacía que estaba su
vida antes de que Shizuma apareciera en ella. Realmente por mucho que a Nagisa le gustara
su soledad hasta cierto punto, ahora comprendía que era lo mas insoportable en el mundo; de
algo que podía estar segura es que nadie puede permanecer como una isla para siempre. De
este modo, una vez vencida por el cansancio, decidió ir a su habitación y prender el televisor
para poder entretenerse con alguna serie. Cuando las mejores programaciones habían
terminado, Nagisa se recostó sobre su cama intentando dormir. Al principio, no podía
consolar el sueño....no era que sufriera de insomnio, pero ahora ella no podía acurrucarse en
el cálido abrazo de Shizuma, ni escuchar su tranquila respiración junto a la suya. Entonces,
buscando la manera de sentir de alguna forma su presencia, Nagisa abrazo la almohada que
era de Shizuma , la cual aun conservaba un poco de la esencia de su dulce perfume...tratando
de que aquel olor...le hiciera sentir que estaba con ella....
***
Al día siguiente, Nagisa ordenó su casa antes de salir en busca de Shizuma. A quién quería
engañar, los minutos que transcurrían se le hacían siglos y cada luz roja de semáforo, una
curva de 360 grados que la hacía retrasarse mas. Sin embargo, finalmente lo logró, ahora ella
se encontraba frente a la enorme casa de la familia Hanazono, llamando a la puerta para que
le permitieran el paso.
Al parecer, los padres de Shizuma no se encontraban en ese instante, pero una de las personas
que trabajaba en la casa, le autorizo el paso, para después dirigirse a la habitación de
Shizuma. Abriendo la puerta de aquella espaciosa habitación, la pelirroja notó un cuerpo que
dormía ahí tranquilamente. Sus ojos, llenándose de ternura, la observaron detenidamente por
unos momentos antes de acercarse a la cama dónde ella descansaba. Una vez estando cerca,
Nagisa removió un par de cabellos plateados de aquel hermoso rostro cariñosamente,
sentándose en una orilla de la cama.
- Ahm...pero que tierna e inofensiva te ves cuando duermes, sin duda eso me faltó ver en el
momento que desperté esta mañana....ah Shizuma...porqué me haces esto? cómo le has hecho
para que yo te llegue a...- sus pensamientos fueron interrumpidos al escuchar unas palabras....
"Pero que agradable sorpresa" - bostezando levemente - "Mi hermosa Nagisa esta aquí
conmigo..." - levantándose un poco para sentarse sobre su cama y acercarse a ella.
"Ves....tuve razón, hoy estaría mucho mejor..." - estrechando mas ese abrazo antes de que un
poco de silencio reinara en la habitación.
En esos instantes, Shizuma pensaba en el sueño que había tenido....eso la hacía reflexionar en
el momento y manera de contarle un poco de su pasado, definitivamente era la mejor solución
antes de que un desastre pudiera suceder y las cosas se pudieran mal interpretar....solo que
Shizuma no encontraba las mejores palabras con las que ella pudiese expresarse.
A su vez, Nagisa pensaba sobre otro asunto totalmente distinto y ese era la cuestión de su
compromiso con Shizuma. El día anterior, ella le había declarado abiertamente a Chikaru
que en realidad estaba comprometida, cuando en si no lo estaba...pero..sería que ella podía
darle una respuesta en este momento?....una palabra afirmativa?....
El silenció termino muy pronto, cuando Nagisa se decidió ver aquel par de ojos verdosos de
frente....pero ninguna palabra salió, mas sin en cambio, mostró sus intenciones de besar
aquellos apetitosos labios, los cuales no había podido reclamar desde hace tiempo..
"Oh..eso no suena nada mal..." - diciendo antes de sellar aquel espacio existente, tomando el
rostro de Nagisa con ambas manos, para poder profundizar aquel suave y delicado beso...el
cual se tornaba cada vez mas intenso...pero en ese momento...la conciencia de ambas empezó a
sonar en sus mentes...queriendo aclarar ciertas cosas antes de que otra cosa pudiera suceder.
"Nagisa"
"Mejor tu...creo que se me olvidó que era lo que en verdad quería decir..." - mintiendo.
Viéndola sospechosamente - " Ehm..bueno esta bien...eh.." - queriendo ordenar sus palabras y
sin tener éxito...- " Nagisa yo...ehm...verás.." - dudando - " hay una fiesta importante en la
compañía en unos días, quieres venir conmigo?" - diciendo el primer disparate que le vino a
la cabeza - ah pero que tonta...no me siento segura de explicar esto ahora.....- pensó.
"Bien...puedes invitar a quien tu quieras...pero solo tu irás conmigo..." - dijo para después
pensar - creo que lo tengo que pensar un poco mas, por ahora voy a pretender que todo sigue
igual...simplemente no puedo hacerlo...vaya dilema -
"Yo..." - viendo el buró de Shizuma que tenía muchísimos medicamentos - "has tomado todo
eso?" -
Una guerra desenfrenada comenzó al instante en sus bocas y en su corazón. El estorbo tan
grande de sus ropas desaparecía con la necesidad de tocar mas allá que el alma...alma dónde
los engaños y apariencias solo eran mas que unas máscaras, que eran removidas a la vez por
una segunda naturaleza, la seguridad de aquel amor que no era pronunciado por las palabras,
pero si con el tacto...con la respiración...con el corazón. Ambas se tocaban con la mirada, con
el deseo de tocar mas allá que la misma piel y conquistar los pensamientos, dejando en claro
que las desinhibiciones traspasaron toda inhibición con cada toque y caricia entregada. Dos
finos cuerpos entrelazados, mas nunca en reposo, seguían el ritmo que marcaba su corazón,
con el aire agolpado en sus pulmones dejando escapar frases entrecortadas, reflejando el
placer otorgado. Y así el teorema escurridizo en ambas amantes, se vio consumado, liberando
el cilicio de aquella pasión.
Rendidas después de amarse aquella tarde, ambas contemplaban el sonriente rostro de cada
una, mientras su respiración volvía en si...sin embargo, aquel momento tan tranquilo, se vio
interrumpido, cuando escucharon un claxon proveniente del garage de la casa de Shizuma.
Sabiendo que eran los señores Hanazono, Nagisa se dirigió al baño a toda velocidad para
arreglarse, al igual de Shizuma, pretendiendo que lo vivido hace unos momentos, solo fue una
fantasía existente de sus incontenibles sueños.
Minutos mas tarde, se podía escuchar el caminar por las grandes escaleras de dicha
casa...pasos que se aproximaban a la habitación de Shizuma.
Tocando la puerta - "Shizuma, voy a entrar" - dijo su madre, a su vez que Shizuma se
recostaba rápidamente en su cama y Nagisa se sentaba nuevamente en la orilla de esta.
"Oh pero si estas con Nagisa-chan!, un gusto verte hija, que bueno que has venido ha visitar a
mi Shizuma" - acercándose a ella para darle un abrazo.
"Ah..es que te veo toda ruborizada..." - tocándole la frente - "pero parece que la temperatura
ya te ha bajado" - al decir esto, Nagisa solo trataba de contener la risa, al ver la cara de
pánico de Shizuma al escuchar cierto comentario.
"Si..creo que ya se me quito, creo que es solo porque no he abierto las ventanas y pues siento
que hace mucho calor" - tratando de sonar convincente.
"Eso veo...porque Nagisa-chan esta igual que tu..." - viéndola - "Creo que lo mejor será que
las abra yo misma..." - dicho así, removió las cortinas para que el aire empezara a correr y
refrescar la "atmósfera" en dicha habitación.
En ese instante, Tamao hizo finalmente su aparición, llevando una pequeña caja en sus
manos.
"Vaya..al fin apareció la culpable de todos mis males" - dijo Shizuma al cruzarse de brazos.
"Vamos, no tuve la culpa de que no te avisaran, aparte imagina como me sentí yo, al no tener
mi auto por una semana!! no es nada comparado con lo que te paso" - defendiéndose.
"Ya no discutan!, siempre andan comportándose como un par de adolescentes ustedes dos, a
ver si ya van aprendiendo a llevarse mejor.." - sentenció la señora Hanazono.
"Pides milagros madre....y ni creas Tamao que quiero tus mugres chocolates.." - al ver la caja
que traía en la mano.
"Pero esta vez no son de mugre...son comprados...no son hechos por mi, que no ves que están
sellados?" - acercándose para que los viera.
"Oh..como esta eso? Shizuma? acaso has comido chocolates de mugre?" - preguntó una
sorprendida pelirroja.
"Lo que pasa Nagisa-chan, es que cuando ellas eran aun muy jóvenes, como por ahí de 7 a 5
años de edad, Shizuma se había enfermado igual de feo que esta ocasión, la verdad conociendo
a mi hija, es muy raro que se enferme; entonces, estando pequeñas, Tamao había comprado
unos chocolates, pero no se porque razón los quiso espolvorear como unos que ella había visto
en la tienda...solo no se que cosas utilizo para hacer su cometido...el chiste es que Shizuma los
comió y a su vez, agoto todas las botellas de enjuague bucal del condado..." - explicó la madre
de Shizuma, haciendo que la pelirroja riera al escuchar tal experiencia.
"Sin duda Nagisa-chan es tan linda..." - dijo Tamao con una cara soñadora.
"La verdad querida prima...y bien, ya que tu no los quieres...se los daré a Nagisa-chan" -
Nagisa los aceptó y le regalo una sonrisa, haciendo sonrojar a Tamao y enfurecer a Shizuma,
sin embargo dicha escena se vio interrumpida por la señora Hanazono.
"Por cierto Shizuma, ahora que llegamos, te llego una carta por correo.." - buscando la carta
en su bolso.
"Ah ya veo...bueno entonces ahí la tienes para que la veas..." - viendo como Shizuma
guardaba la carta en un cajón, para luego poner una de sus manos en la pierna de Nagisa,
acariciándola levemente.
"Recuerda..nada propasarte con Nagisa-chan antes del matrimonio..." - haciendo que ambas
se sonrojaran, claro, culpables si eran! - "Así que porqué no, nos acompañas a la cocina
Nagisa-chan..dejemos a mi hija descansar....hoy hemos traído muchos postres muy buenos..."
-
"Vaya...me siento inferior a los postres..." - mencionó Shizuma en voz baja, haciendo un leve
puchero.
Al ver tan tierna cara, Nagisa regreso a su lado, para inclinarse levemente y decirle cerca de
su oído para que nadie mas pudiera escuchar - "pero si tu eres mi postre favorito" - y de este
modo le dio un fugaz beso.
Tamao aprovecho la ocasión para jalar a Nagisa y tomarla del brazo para salir de la
habitación, disfrutando la cara de enojo que hacia Shizuma...
Nagisa feliz y Shizuma mas molesta que nada, no le quedo otra, mas que aplicar la regla de la
resignación, con esos familiares y prometida...siempre había algo que perder. Momentos mas
tarde, la joven de cabellos plateados solo podía escuchar las risas provenientes de la planta
baja. Si, seguro eran fotos bastante graciosas de los años mozos de ella...pero que mas
daba...ahora que estaba sola...tenía la oportunidad de checar cierta carta.
- Vaya, esto si que me ha tomado por sorpresa..creí que ya lo habíamos aclarado todo...no me
imagino que es esto que me mando...- pensó al abrir cuidadosamente aquel sobre.
***
El transcurso de los días habían pasado sumamente rápido. Pronto, Shizuma se recupero de
su resfriado y continuo secuestrando a Nagisa o escapándose de su casa para irse con ella, solo
tácticas inteligentes que ella tramaba en tiempos de ocio. Finalmente el día de la fiesta de la
compañía había llegado y Nagisa aprovecho de invitar a Chikaru, para que así pudiese
conocer a su "prometida". Una vez en dicho lugar, el cual era sumamente lujoso, con la mejor
música y servicio de primera, Nagisa y Shizuma se encontraban platicando con varias
personas importantes. Sin esperarlo, una persona tocó el hombro de Shizuma desde atrás
para que así llamar su atención.
"Ah pues se te olvida que muchos de los socios que invitaste son parientes míos y bueno solo
estoy visitando y saludándote por supuesto" - acercándose para abrazarla, dejando a Shizuma
estática y a Nagisa sin entender a que venía eso.
"Dime y no nos vas a presentar? quiero yo creer que ella es...." - viéndola de ninguna manera
en especial - "tu prometida cierto?" -
"Así es...ella es Nagisa, y ella es Mao...." - ambas saludándose sin mucho entusiasmo
"Un gusto..." - dijo Mao sarcástica, pero Nagisa solo le siguió el juego. - "Ah Shizuma, por
cierto necesito que me acompañes, hay un socio que quiere conocerte..." -
"Mmm esta bien.." - y así se acercó a Nagisa, para darle un fugaz beso y decirle que la
esperase para poder conocer a su amiga.
Minutos mas tarde, Nagisa recibió un mensaje de texto a su celular de parte de Chikaru,
diciéndole que la vería en la entrada para que la dejasen pasar. En su camino, la pelirroja
caminaba sin ninguna prisa, admirando todo aquel iluminado lugar y los diferentes adornos
que lo decoraban. Sin embargo, ella se detuvo de pronto....al ver una escena que jamás se
hubiera imaginado ver en su vida y menos en aquella noche.
Cap. 07
"Na-gi-sa!" - repitió - "Por dios, reacciona!" - tomándola de su brazo para atraer su atención.
"Mmm..." - no convencida - "si tu lo dices.... esta bien, mira espero que no te moleste, pero he
traído a una amiga mía, como se que tu estarías ocupada con la personita que me presentaras,
pues al menos traje algo de compañía" - sonriendo.
Nagisa entonces desvió su mirada para ver a la otra chica que venia junto con Chikaru, una
joven bella y al parecer con un temple amigable... De este modo, la pelirroja trato de sacar su
mejor sonrisa para conocerla.
"Sachiko.. te presento a una de mis mejores amigas.. ella es Aoi Nagisa" - mirando a la joven
de cabellos negros, quien extendió su mano hacia la pelirroja -
"El gusto es mío...y puedes decirme Nagisa solamente" - la otra joven asintió y terminaron el
saludo.
"Ahora si Nagisa, llévanos donde se encuentran los altos mandos empresariales.. recuerda que
tienes que presentarme a alguien eh.." - guiñando un ojo.
"Claro.. síganme" - y así las tres jóvenes se adentraron en aquel lugar.. mientras una
pelirroja no sabía como afrontar la siguiente situación.
***
Shizuma caminaba tranquilamente hacia donde todos los demás empresarios estaban
reunidos. Sin notar como el murmullo de las personas desaparecía poco a poco, hasta solo
escuchar la voz de su conciencia. Después de todo, que debía hacer? Hace unos momentos ella
había cometido un error.. pero que es un error? es sentir culpa?, miedo?, confusión? enojo?..
pueden ser muchas cosas.. pero como afrontarlo? En el pasado, una persona como ella jamás
tenía que verse en una posición de rendirle explicaciones a nadie..para la joven empresaria,
las explicaciones tenían algún uso o importancia?.. su mente decía un rotundo no.. siempre las
cosas se habían hecho a su manera. Pero ahora las cosas han cambiado, ella había cambiado..
o al menos eso quería creer. Así que como proceder? justificándose? Ese dilema continuaba
dándole vueltas en su cabeza.. hasta que considero la posibilidad de dejarlo pasar, después de
todo, era solo un ligero error, un impulso fuera de los limites de la razón. Además, ni quien
tuviera que enterarse, las cosas con aquella otra chica se habían medio arreglado y sabía que
no volvería a repetirse. Aliviada por pensar que por fin había encontrado una solución,
continuó su camino mas relajada pensando que, después de todo, todos cometen errores, la
perfección no existe. Por lo tanto, Shizuma decidió jugarsela y decidiendo no comentar nada a
nadie.
Los murmullos y la suave música volvieron a sus oídos, al aproximarse a las mesas reservadas
para ellla y los demás empresarios. Respiró profundamente y sus ojos verdes encontraron a su
Nagisa, quien venía en compañía de otras dos jóvenes.
"No no no!" - dijo Chikaru - "No me digas que... " - viendo que Shizuma les hacia una seña
con la mano para que se acercaran.
"Uy Nagisa! pero si ya sabía que no perdías el tiempo, pero esto es cabal!" - apresurando el
paso para encontrarse con la joven de cabellos plateados.
"Así que tu eres la famosa Chikaru, Nagisa me ha platicado mucho de ti, un gusto el
conocerte" - saludo Shizuma.
Apenada - "gracias, y mira, ella es mi amiga Sachiko" - quien también saludo a Shizuma
"Un gusto conocerlas a las dos, espero que disfruten de la fiesta, si necesitan algo solo
díganme y las atenderán enseguida" - dijo caminando hacia Nagisa, quien permaneció
tranquila. - "Que tienes mi Nagisa? quieres algo de tomar?" -
"No, gracias estoy bien.." - tratando de sonar lo mas normal que podía.. -
Los minutos continuaron de manera incomoda, Nagisa permaneció junto a sus amigas,
mientras ocasionalmente veía de reojo a Shizuma, quien se encontraba muy demandada en
esos momentos.. La pelirroja sabía lo importante que esa reunión era para ella, así que
decidió no meterse en lo absoluto. Ella permanecía ajena a la conversación de Chikaru y
Sachiko, no podía creer que sin querer, ella había vuelto a caer. Siempre huyendo de las
decepciones, de los engaños.. y cuando pensó tenerlo todo.. simplemente no lo fue así. Qué
puede uno esperar de alguien? una honesta explicación? un pretexto? un lo siento? Sabía bien
que no debía adelantar ninguna conclusión a los hechos, pero el ver a Shizuma tan tranquila,
tan normal.. como si nada pasara.. la hacía pensar que tal vez, aquello que presenció, había
pasado antes y ella se lo ha estado ocultando todo este tiempo. Que era lo que quería Shizuma
de ella entonces? solo una mejor actuación para que sus padres no sospecharan nada y así
poder heredar el negocio familiar? Mil y un dudas pasaron por su mente.. esos pensamientos
que pasan una y otra vez.. que interrumpen una tranquilidad.. que nos cambian.
"Hanazono-sama.. perdone por interrumpir, pero han llegado las siguientes notificaciones..."
- dijo una de las asistentes de la empresa mientras le entregaba algunos documentos
importantes.
"Ni por un rato te dejan tranquila, verdad Shizuma?" - preguntó una voz a lo lejos..
desconcertando a la joven empresaria.
"Nada, solo quería saludar por acá nuevamente..." - volteando a ver de una manera especial a
Nagisa, quién capto la verdadera intención de Mao.
"Bueno, pues ve y saluda a quién tengas que saludar.. tengo que revisar con mi asistente estos
papeles, son algo urgentes..." - volviendo su mirada a los documentos.
"Así que Hanazono-sama.. esta es la ultima lista del Presupuesto de Ventas Diarias al
Mayoreo.." - señalando el papel.
"Con que bajas en el P.V.D.M.... vaya siempre esta en decadencia en esta época.. creo que
tendremos que consultarlo con los Consejeros de Comercio Mayoritario para saber su
opinión.. antes de poder firmar nada.." -
"Bien entonces organizare una junta emergente con los miembros del C.C.M.... para así
cerrar el Boletín Anual y Semestral" -
"Excelente, porque urge el cierre del B.A.S... y espero que salga con ventas impresionantes
este año" - siguió comentando animadamente..
"Bien, bien.. ya no presiones mas a Shizuma con esto.. es mejor dejar que disfrute la fiesta no
lo cree?" - haciendo que la asistente diera una reverencia y se alejara del lugar..para
aprovechar la cercanía que tenía en esos instantes con la joven de cabellos plateados.
Por otro lado... Nagisa observaba esa escena.. sintiéndose cada vez peor... cuando Sachiko lo
notó trato de distraer un poco a Nagisa... intentando conocerla mas y llevar una platica amena
en lo que la fiesta se daba por concluida. Shizuma, por supuesto, percibió todos esos detalles..
el ver como Nagisa se portaba tan amable y amigable con la otra chica... la llenaba de.. celos..
si, pero decidió controlarlos un poco... después de todo.. era amiga de Chikaru, no tendría
nada que ver o si? Ella esperaba que no.. lo importante en ese momento era desaparecer a
Mao de ahí antes de que pudiera hacer alguna otra tontería... y arruinar toda la finta que ella
ya estaba tramando en su mente.
Al termino de la incomoda fiesta, Shizuma despidió a todos los que tenía cerca y se acerco
donde estaba Nagisa con sus amigas.
"Bien, si que ha sido un buen momento pero creo que debemos irnos.." - mirando su lujoso
reloj- "Recuerda mi Nagisa que mañana tienes que viajar" -
"Que!" - sorprendida - "a dónde vas Nagisa, porque no me habías dicho?" - preguntó
Chikaru
"Pues es solo un viaje de negocios de mi florería... iré a Estados Unidos por unos días" -
"Wow! eso es increíble! por todo lo que me has contado Nagisa, se que todo ira excelente!" -
comento Sachiko animadamente, sin notar la mirada severa de Shizuma.
Sonriendo - "Muchas gracias! se que así será" - Levantándose de su asiento para acercarse a
Shizuma, quien buscaba el ticket del valet parking entre sus cosas.
"Pues buenas noches y que tengas un buen viaje amiga mía! espero vernos cuando estés de
vuelta" - poniéndose de pie también - " ha sido un gusto Shizuma" -
"Igualmente, que pasen buenas noches.. " - y así, tomo la mano de Nagisa para salir.
Juntas, caminaron hacía donde el auto de la joven empresaria llegaría, todo el trayecto en
silencio.. nadie decía nada. Una vez ya en camino a la casa de Nagisa, Shizuma decidió hablar.
"Has estado muy callada mi Nagisa, segura que estás bien?" - mirándola de reojo, mientras
manejaba.
"Pero con la tal Sachiko, ahí si tenías muchas ganas de hablar no?!" - alzando un poco mas su
tono de voz, recordando lo amistosa actitud que había tenido la pelirroja durante la fiesta
hacía Sachiko, hizo que explotara.
Explotando del mismo modo - "No me vengas con esas cosas Shizuma! deja de reclamarme
por algo que no tiene la menor importancia!" - cruzando sus brazos.
"Cómo se te ocurre pensar que no tiene importancia! Crees que no me doy cuenta! Esa tipa
no te dejaba en paz! y tú muy tranquila!" - golpeando el volante.
"Shizuma por favor... no discutiré contigo de esto, porque no tiene ningún sentido!" - fue lo
último que dijo, antes de salir del auto, azotando la puerta, para caminar hacia la puerta de
su casa.
"Increíble.. no se que demonios pasa!" - bajando el cristal de la puerta del auto - "Dime
porque! porque te vas así!" -
Pensando mientras manejaba de regreso a su casa - Que actitud del mal... porque no me dice
que pasa.. que se lo pregunte a mi conciencia que va! No puede ser que ella sepa lo que paso..
es imposible.. aah ya se le pasara.. y aunque no quiera la buscare mañana! no me puede dejar
así! -
***
A la mañana siguiente, Shizuma se fue muy temprano al aeropuerto para poder encontrarse
una vez mas con Nagisa, antes de que se fuera a su viaje de negocios. Busco y busco, pero no la
encontraba entre tantas personas que se preparaban para documentar sus pertenencias.. la
desesperación la estaba matando.. hasta que por fin, la vio cerca de la sala que la llevaría a
abordar su avión.
"Te dije que no me buscaras.. no quiero que se arme toda una escena públicamente.." - dijo
Nagisa muy seria.
"Me quieres decir que pasa.. no puedo dejarte ir sin que me digas que es lo que pasa contigo"
- dijo algo agitada después de tanto correr.
"Shizuma.. no puedo creerlo.. como me dices eso.. crees que soy tonta!" - casi gritando,
tratando de que sus lagrimas no salieran mas - "Crees que tienes derecho de venir y pedirme
explicaciones cuando la que me debe una eres tu?" - haciendo una leve pausa - "Pero claro..
no tendrías porque darme alguna verdad? si después de todo..que soy yo para ti?.. solo
alguien que te ayuda en una farsa para que heredes los bienes familiares no?.. así que
olvídalo... seguramente a tus.. no se cuantas mas mujeres que tienes por ahí, no les das
ninguna explicación!" -
"Nagisa por favor, no pienses eso! sabes muy bien que no es cierto!" - acercándose a ella.
"Entonces que me dices de ayer!" - apartándola - " ayer que estabas con la tal Mao y no se
que otra tipa.. que era.. eh. dime!!" -
"Tal vez no.. pero ayer tuviste mucho tiempo para decirme.. cuando estuvimos a solas..
pudiste decir algo lo que sea.." - limpiando sus lagrimas - " si yo no hubiera presenciado eso..
veo que ni siquiera me lo ibas a decir.. que seguirías como sin nada y yo de tonta.. confiando
en ti.." -
"Creo que.. necesito pensar mejor las cosas.. y creo que tu también deberías.." - tomando sus
cosas - "me hará bien el viaje.. nos vemos después Shizuma" - dándole la espalda para tomar
su vuelo.
Una derrotada Shizuma iba camino a casa, todas las palabras que había escuchado en
aquellos momentos, no desaparecían de su mente. En el fondo, sabía bien que Nagisa tenía
toda la razón y que ante tal error ninguna justificación podría enmendar aquel daño. Pero
como arreglar las cosas ahora? como ganar su confianza de nuevo? si ella había caído ante la
tentación de estar con otras mujeres aquella noche. Todo había sido tan fácil y tan rápido, le
asustaba que sus impulsos fueran mas rápidos que su propia razón. Pero a su vez, si quería
tener a Nagisa a su lado por el resto de sus días, sabía que tenía que hacer un mejor esfuerzo y
ella estaba dispuesta a hacerlo.
Ya en casa de sus padres, la joven empresaria entro de muy mala gana al salón donde su
madre disfrutaba de una taza de té.
"Bienvenida a casa Shizuma" - viendo que su hija, siguió su camino sin voltear a verla. -
"Hija! que no piensas saludar a tu madre? ven, y toma un poco de té conmigo" -
"Ahora no madre.." -
"Como de que no, de por si ya pasas poco tiempo aquí en la casa y ahora que tu hermana no
vive aquí me siento muy sola, anda ven, que te lo pide tu madre" -
Cerrando los ojos, acepto la propuesta de su madre y se sentó frente a ella para compartir
aquella bebida caliente.
"Si...." - tratando de no dar mas explicaciones sobre su pelea, o si no, sabía que su madre la
mataría ahí mismo.
En eso, solo se escucha que alguien corre rápidamente hacia el salón, quebrantando la
tranquilidad que se sentía en aquel instante.
"Shizumaaaaaaa!!!" - gritó
"Shizumaaa!!" - insistió
"Teléfono..." -
"Demonios y ahora que.."- dijo levantándose del sillón para tomar la llamada a solas - "Si,
diga?" -
"Shizuma.. cuanto tiempo.." - contestó por el otro lado de la bocina una suave y conocida voz.
"perdona, es que me sorprende tu llamada, es todo.. " - viendo por todos lados, asegurándose
de estar completamente sola -
"no debería, en la carta que mande, te dije que te hablaría.. porque tenemos un ligero
problema.." -
"cierto, pero la próxima vez, habla a mi celular... no hables a mi casa por favor.." - hablando
en un tono de voz muy bajo -
"pues si lo tuviera lo haría..pero bueno, ahorita me lo das, realmente tenemos que hablar..." -
El tono de Kaori, llenaba a Shizuma de temor, no sabía que era eso tan importante que tenían
que hablar, porque lo de ellas ya había quedado en el pasado y sabía que Kaori no era como
las otras chicas. Así que esto realmente la llenaba de angustia.. pero con mucha paciencia,
Shizuma escucho lo que Kaori tuvo que decir...
"Queeeeeeeeeeeeee!!!" - gritó Shizuma, quien resistió al infarto que pudo provocarle aquella
noticia.
"Ah, Shizuma.. me has dejado totalmente sorda..." - dijo regresando la bocina a su oreja -
"Shizuma.. Shizuma...contesta!" -
"...por la gran....esto no puede ser obra del gran rey.." - intentando reaccionar -
"mira.. haremos esto.. te daré un tiempo para que pienses como proceder, ahora.. cuando
estés tranquila, lo hablamos, ya te he dado mi número... " -
Y así, lograron despedirse...para poder arreglar este otro nuevo problema, mas tarde.
***
En otra ciudad en Estados Unidos, Nagisa había terminado las negociaciones de su florería y
todo había salido como ella lo planeo. La suerte en el aspecto laboral iba de maravilla, así que
decidió relajarse un poco e ir a tomar algo en el bar del hotel. Afortunadamente, el ambiente
estaba muy tranquilo con suave música en vivo en aquel sitio. Decidida, tomo asiento en la
barra, donde solo se encontraba una mujer, mas o menos de su edad y misma complexión, de
cabello oscuro. Sin importarle, se sentó cerca de ella y llamo al bartender.
"Lo mas fuerte que tenga por favor.." - decía mientras recordaba la conversación que tuvo
con Shizuma en el aeropuerto -
"Debes tener cuidado con lo que tomas" - dijo la otra mujer - "luego suele ser peligroso.." -
"Lo se... pero esta vez, creo que lo necesito" - aclaro Nagisa suspirando.
"Problemas con tu pareja cierto?" - preguntó al ver el hermoso anillo en el dedo anular de la
pelirroja -
"Si...." -
"Entiendo, pero aun así, con cuidado vale.. yo por no tener cuidado una vez.. he cometido un
gran error.." - bajando la mirada -
En eso..el bartender apareció con la bebida servida para la pelirroja y un pequeño papel..
"Gracias" - dijo Nagisa, al recibir su bebida, viendo como aquel joven, se dirigía hacia Kaori
para entregarle aquel papel que levaba en su mano derecha -
Continuara........