Documenti di Didattica
Documenti di Professioni
Documenti di Cultura
P a g e 1 | 10
1. Hemos nacido de nuevo y hemos recibido vida eterna
(versículos 1 y 5).
Nosotros que estábamos muertos por nuestro pecado, hemos recibido
vida por el milagro del nuevo nacimiento (Juan 3:3 y 5).
P a g e 2 | 10
4. Hemos sido reconciliados y ahora estamos en paz con
Dios (versículos 14 – 17).
Nosotros, que éramos enemigos, hemos sido reconciliados con Dios por el
derramamiento de sangre de nuestro Señor Jesucristo.
Es una bendita verdad que a través de Cristo todas las barreras raciales y
sociales han sido derribadas, pero la mayor barrera de todas es la que
existía entre nosotros y Dios y que ha sido completamente barrida en la
Persona y por la obra completada del Señor Jesús.
Medite sobre las palabras del versículo 14: “Él es nuestra paz”, y compare
con Romanos 5:1..
P a g e 3 | 10
El Señor Jesús es el fundamento de la Iglesia (1Corintios 3:11), pero Pablo
nos dice aquí que los apóstoles y los profetas del Nuevo Testamento son
miembros fundamentales, porque por medio de su ministerio fue como la
Iglesia fue “bien coordinada” y comenzó a crecer como “un templo santo
en el Señor” (versículo 21).
Pronto el templo de Dios estará completo. Entonces será el final del día de
la gracia y seremos arrebatados a su presencia para estar para siempre
con el Señor (1Tesalonicenses 4:15-17).
P a g e 4 | 10
Prédica - Un Pueblo de Paz - Efesios 2:11-22
Introducción
La historia de la humanidad es una historia de conflictos. Guerras, violencia,
discriminación de todo tipo. Parece que los seres humanos somos especialistas en
hacer enemistades con otras personas.
Hoy vamos a hablar sobre este tema en base a un pasaje en la epístola a los
Efesios.
1.- Un mundo en conflicto
Pablo llama “gentiles de nacimiento” a las naciones que no eran parte del pueblo
de Israel. La historia de Israel con las naciones gentiles era una historia de
enemistad. Los Israelitas se sentían el único pueblo amado por Dios, heredero de
las promesas de Dios, eso les llevaba muchas veces a discriminar a las naciones
gentiles. La circuncisión es un ejemplo de discriminación. Al usar el término
“incircuncisos” para referirse a los extranjeros.
En el templo de Jerusalén existía el patio de los gentiles que estaba dividido del
lugar para los judíos con un muro en donde estaba una inscripción que decía
“cualquier gentil que pase este muro será sentenciado a muerte”
Por otro lado, no solo eran los judíos quienes discriminaban a otros pueblos,
también los gentiles, especialmente los griegos. Ellos en cambio se sentían los
más cultos por el idioma. A otros pueblos los llamaban bárbaros, una forma de
decirles ignorantes.
P a g e 5 | 10
En fin, los seres humanos somos buenos para ponernos barreras y para
enemistarnos. En nuestro tiempo hay divisiones, raciales, culturales, sociales,
económicas, divisiones ideológicas, Etc.
En nuestro país se ha vivido bastante división en los últimos tiempos por causa de
la política. Muchas veces estas divisiones generan violencia. Y las divisiones llegan
a tal punto que Incluso muchas veces hay violencia solamente por apoyar a algún
equipo de fútbol.
En definitiva, parece que en nuestro mundo los conflictos son inevitables. Pero, el
problema es que muchas veces dentro de la Iglesia se puede experimentar el
mismo tipo de conflictos. También puede haber discriminación, racial, cultural,
económica, ideológica. Etc.
El punto es que Dios nos diseñó a cada uno de nosotros diferentes, diferente
manera de pensar, diferente color de piel, nos hizo nacer en diferentes lugares
con diferente cultura. El problema no es que seamos diferentes. La pregunta que
debemos hacernos es: ¿Cómo vivir en unidad a pesar de nuestras diferencias?
P a g e 6 | 10
2.1.- Un amor que derriba barreras
Pablo enseña que por medio del sacrificio de Jesús el acerca a estos dos pueblos y
forma un solo pueblo. Dice que mediante su sacrificio derribó el muro de
enemistad haciendo referencia al muro del templo.
Lo que Pablo está mostrando es que en la Iglesia de Dios deben derribarse todas
estas barreras de enemistad. De los dos pueblos hizo una nueva humanidad, al
estar en la Iglesia somos una nueva humanidad de paz. Somos creados
nuevamente. Ellos ya no eran judíos o gentiles, sino cristianos. La misma idea la
encontramos en Gálatas.
Dice Pablo que Jesús proclamó la paz a los que estaban lejos y a los que estaban
cerca, es decir a Judíos y Gentiles, porque Jesús murió tanto por los unos como
por los otros. Jesús murió por todos y cuando tengamos un conflicto con algún
hermano en la Iglesia recordemos que es alguien por quien también Cristo murió,
y quienes somos nosotros para ofender, o insultarlo por nuestras diferencias.
En nuestro país en tiempos de campañas políticas es muy común los insultos y las
ofensas. Muchas veces las redes sociales se llenan de insultos, y muchas veces de
cristianos. No es el problema tener un partido político, o una ideología, el
problema es que muchas veces por apoyar nuestra posición recurrimos al insulto
a los que piensan diferente, Y no nos damos cuenta que podemos estar
insultando u ofendiendo a hermanos en Cristo que piensan diferente.
Recordemos siempre que hay algo más grande que nos une, algo que es más
grande que nuestras diferencias, el amor de Dios demostrado en Cristo Jesús.
P a g e 9 | 10
recibió de parte de los que ya son miembros de la Iglesia. Es decir, el amor, la
unidad que nosotros tengamos es fundamental en el crecimiento de la Iglesia.
Solo mediante el amor de Dios en nosotros es que podemos ser sal y luz en el
mundo
Muchas veces podemos hablarle a la gente del amor de Dios o de los valores del
Reino de Dios, pero muchas veces nuestras Palabras tal vez no tengan valor si la
gente no puede ver en nosotros que vivimos los valores del Reino de Dios.
Sólo al mirar nuestro amor la gente querrá ser parte de nosotros Jesús decía: “en
esto conocerán que son mis discípulos, si se aman los unos a los otros”
Conclusión
En el mundo los conflictos van a ser inevitables. Pero existe una alternativa al
conflicto, una alternativa a la violencia, y esa alternativa es Jesús. Solo él puede
ser nuestra paz y reconciliación.
El ser humano por lo general crea barreras, enemistades y divisiones. Pero al estar
en Cristo podemos ser parte de una nueva humanidad, en donde las barreras son
derribadas, donde lo que nos une es el amor de Jesús expresado en la cruz del
calvario. Y en donde tenemos el propósito de seguir edificando este pueblo de paz,
con Cristo como el centro de todo.
P a g e 10 | 10