Bases teóricas

Marco histórico
El avance de la historia ha podido modificar el significado del liderazgo, en función
al desarrollo del ser humano. Inicialmente se entendía que el líder era enviado de los
dioses, quienes estaban encomendadas para guiar mediante su conducta, asimismo
los semidioses tenían la función de revelar y trasmitir a la colectividad.
La imagen del líder fue conocida hace milenios, donde presenta la fuerza y la
influencia en el desarrollo de la sociedad, como demuestra la historia, de los grandes
líderes como Jesucristo, Nelson Mandela o Marthin Luther King, es donde ahí surge
la reflexión de los líderes, si ellos nacen o se hacen, en consecuencia el líder puede
heredar o puede ser aprendido, un buen líder efectivo encamina el comportamiento
de una organización. (Amaya, 1996).

Según Culligan (1986), durante el avance de la historia, el liderazgo fue clasificado de la

siguiente manera:
a. Edad del liderazgo de conquista: durante este periodo el principal objetivo es la
conquista, donde las personas se acogen a los jefes omnipotentes, déspotas y dominantes,
y quienes se comprometían la seguridad, por su lealtad e impuesto.
b. Edad de liderazgo comercial: en este periodo la seguridad ya no tiene la relevancia del
liderazgo; por el contrario surge la era industrial, en consecuencia a ello la gente busca a
aquellos que pudieran indicarles como se puede mejorar la calidad de vida.

c. Edad de liderazgo de organización: en este periodo la calidad de vida mejoró

considerablemente, y habían muchas posibilidades de alcanzar; y es así la gente empieza
a buscar un lugar donde pertenecer, en consecuencia a ello el liderazgo ya viene a ser la
capacidad de organizarse en un contexto determinado.

d. Edad de liderazgo de innovación: el desarrollo del ser humano va juntamente con

la creatividad, y así va renovando conocimientos y habilidades, donde los líderes tienen la
mayor facilidad de superar las dificultades, que se presentan dentro de la organización. Los
avances científicos y capacidades sirven para crear nuevas ideas y resultados en relación a
los objetivos. Las industrias con liderazgo innovador han tenido colaboradores creativos.
e. Edad del liderazgo de la información: es un momento donde la tecnología avanza
aceleradamente, y también se crea nuevas necesidades, y es donde se necesita líderes
modernos, que procesen e interpreten la información inteligentemente, para su aplicación
en la forma más moderna y con creatividad.

f. Liderazgo en la ¨Nueva Edad¨. Una de las características de este liderazgo, es donde

el líder debe conocer cómo se utiliza las nuevas tecnologías, al momento de desarrollar el
análisis y síntesis de la información; asimismo los líderes deben entender que ellos siempre
dirigen a personas, y no así a objetos, en consecuencia debe tener la capacidad de suministrar,
escuchar lo que la gente quiere, para así tener un equipo motivado y estar paralelo a la
competencia.
Los estilos de liderazgo
Según Achua y Lussier (2011), los estudios realizados por la Universidad de Iowa, el estilo
de liderazgo consiste en la combinación de los rasgos y habilidades, donde el componente
más predominante es el comportamiento, donde el líder interactúa directamente con sus
seguidores, para lograr los objetivos establecidos. Los estudios realizados por la universidad
Iowa y su colaborador Kurt Lewin, establecieron dos estilos de liderazgo:

a. Estilo de liderazgo autocrático. El líder autocrático tiene un trato vertical a los

colaboradores, asimismo también no tiene consideración a los seguidores para tomar
decisiones, y también el líder indica las tareas que deben realizar los seguidores, y
supervisa de muy cerca.

b. Estilo de liderazgo democrático. El líder democrático promueve la participación de los

seguidores para tomar las decisiones, y asimismo también coordina con los seguidores
para desarrollar las diferentes actividades, y la supervisión no es de cerca a los
seguidores.

En consecuencia, los estilos de liderazgo como autocrático y democrático, son muy extremos,
en función en una línea continua.
Según Achua y Lussier (2011), los estudios realizados por la Universidad de Michigan fue
dirigida por Rensis Likert, y como el principal objetivo del estudio fue determinar la eficacia
del liderazgo, en dicho estudio utiliza entrevistas para recoger información acerca de los
estilos de liderazgo. Las metas del estudio fue clasificar a los líderes como efectivos y no
efectivos, en comparación la conducta de los líderes en la gran y escasa producción; y
también fue establecer las causas del liderazgo efectivo. Con la investigación identifican dos
estilos de liderazgo:

a. Estilo de liderazgo centrado en el trabajo. El líder centrado en el trabajo pone mayor

énfasis en las metas y también colabora en el trabajo. El líder es el principal responsable
de las tareas indicadas que debe cumplir los seguidores en el puesto, y asimismo el líder
dirige de muy cerca a los seguidores con metas claras.

b. Estilo de liderazgo centrado en los empleados. El líder centrado en los seguidores

considera dos componentes como el apoyo y la facilitación en la interacción. El líder
centrado en los empleados, se enfoca en las necesidades humanas de los seguidores;
asimismo el líder tiene mayor consideración de los seguidores y promueve la
comunicación, confianza y respeto.

Según Achua y Lussier (2011), los estudios realizados por la Universidad Estatal de Ohio fue
dirigida por Ralph Stogdill, para identificar estilos de liderazgo efectivo; en la investigación
realizada establecieron dos dimensiones o tipos de liderazgo, durante el proceso
denominaron estructura de inicio y consideración.

a. Comportamiento de estructura de inicio. Este estilo de liderazgo de estructura de inicio

se centra en la ejecución de las tareas, según los objetivos establecidos.

b. Comportamiento de consideración. El estilo de liderazgo de consideración se centra en

satisfacer las necesidades de los seguidores y en generar las relaciones.

En consecuencia, el líder puede mostrar un alto o bajo grado en estructura de inicio o en

consideración; es así el modelo de liderazgo de la Universidad Estatal de Ohio establece
cuatro estilos de liderazgo: baja estructura y alta consideración, alta estructura y alta
consideración, baja estructura y baja consideración, y alta estructura y baja consideración.
El comportamiento del líder con alta estructura y baja consideración, ocurre cuando las
órdenes solo van de una sola dirección, y asimismo las decisiones se toman sin la
participación de los seguidores; mientras el líder con alta consideración y baja estructura,
generan una comunicación bidireccional, y las decisiones son compartidas con los
seguidores. En consecuencia, se establece que un seguidor feliz es también uno productivo.

Según Sastre (2013), el estilo de liderazgo refiere al comportamiento del líder, es la

combinación de su personalidad y experiencia; por lo tanto, la clasificación de los estilos de
liderazgo fue de distintas maneras como:

a. El líder autocrático, es donde las decisiones están centralizadas en el líder, asimismo

se puede comparar como un dictador, que no permite la participación de los colaboradores;
y las decisiones se toman a gran velocidad para alcanzar las metas establecidas; y este tipo
de liderazgo es muy efectivo en situaciones de crisis en diferentes campos de aplicación.

b. El líder participativo, es donde hay la participación de los colaboradores en la toma

de decisiones, estas decisiones surgen de la consulta previa al grupo. Lo cual es totalmente
antagónico al líder autocrático.

c. El líder laissez faire, el grupo tiene mayor libertad; y el líder le faculta al grupo la
libertad para tomar decisiones; lo cual puede funcionar con pequeños equipos, que tengan un
alto grado de motivación donde haya la instrucción hacia los colaboradores.

Estilos de formación y estilos directivos

Según Ramírez (2009), los estilos de formación van de la mano con los estilos directivos, en
el proceso de enseñanza y aprendizaje en el ambiente educativo, donde las funciones del
profesor y del director del centro educativo, las técnicas y el clima laboral, propician una
determinada actitud que es más importante que la técnica en sí.
No hay estilos buenos ni malos, sino que cada situación requiere una respuesta, asimismo
tener el nivel de flexibilidad suficiente para responder de manera adecuada; Para poder llevar
bien los problemas y desarrollo de las funciones, es necesario emplear técnicas que den
efectividad para alcanzar los resultados favorables en la organización.
El líder perfecto no existe, a medida que va desarrollándose la sociedad aparecen nuevos
planteamientos y escritos, donde manifiesta que una sola persona no es suficiente para
conducir y lograr los objetivos del común, que exige la modernidad.
En la sociedad todo esta concatenado, en función a la necesidad y objetivos planificados, es
donde se necesita de personas que tienen ciertas cualidades para encaminar al éxito de la
organización.
El exitoso siempre plantea nuevas ideas, estrategias, propuestas, decisiones; con lo cual tiene
un horizonte prospectivo, al desarrollo a nivel personal y organizacional.