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FACULTAD DE CIENCIAS MÉDICAS

ESCUELA ACADÉMICO PROFESIONAL DE MEDICINA

ENSAYO

“TÍTULO”

“CONSUMO DE COMIDA RÁPIDA Y SUS DESTRUCTIVAS REPERCUSIONES


EN LA SALUD DE LOS ADOLESCENTES”

“LÍNEA DE INVESTIGACIÓN”

COMUNICACIÓN EN NUTRICIÓN Y SALUD

AUTORES (es)

MARIA JOSÉ ABRAMONTE LOZADA

DENNIS ARTURO CABRERA CAMPAÑA

DANITZA NATALI MORÁN SÓCOLA

ASESOR:

BRITALDO RUIZ ALMENGOR

PIURA-PERÚ

2018-II
ÍNDICE

I. INTRODUCCIÓN……………………………………………………………………3

II.ARGUMENTACIÓN………………………………………………….…….…..4,5,6

III.CONCLUSIONES………………..…………………………………………………7

IV.RECOMENDACIONES……………………………………………………………7

V. REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS………………………………………………8
I. INTRODUCCIÓN

El 58% de los peruanos tienen exceso de peso y el 21% obesidad, lo que coloca a
nuestro a nuestro país en una situación de emergencia si se compara con otras
naciones con similar PBI, según el Índice de Progreso Social, del estudio de
Integración, Instituto de Análisis e Investigación. Como se sabe la comida chatarra
es muy consumida por los intensos sabores, la palatabilidad y fácil adquisición que
posee; si bien no es aconsejable su consumo habitual, la mayoría de la población
hace caso omiso a eso. Entre las características generales de esta comida destaca su
abundancia en grasas saturadas y colesterol, y el ser de fácil preparación y de bajo
costo. Todas estas cualidades la hacen ver como opción más accesible para saciar el
hambre, especialmente para los adolescentes quienes no poseen hábitos alimenticios
específicos, generando un desorden en su estilo de vida, al disminuir así el consumo
de alimentos saludables esenciales como son las frutas, vegetales, legumbres y todos
aquellos que estén ricamente compuestos por componentes nutritivos para nuestra
salud.

Los efectos que llega a presentar la ingesta en exceso de comida rápida son
altamente nocivos para la salud, ya que no solo es la principal causa de obesidad,
sino también guarda relación a largo plazo con patologías crónicas como
Hipertensión arterial, Diabetes tipo II, y otras no crónicas como obesidad o caries.

Este ensayo lo realizamos con el fin de concientizar a los adolescentes y sus padres
sobre el tipo de estilos de vida negativos que ellos están adquiriendo, así como
lograr orientarles e informarles sobre los componentes nocivos de la comida
chatarra, los procesos químicos que alteran y como a corto y largo plazo genera
daños irreversibles en nuestra salud, logrando así que mejoren su alimentación y
hábitos alimenticios, y por tanto tengan una vida plena y llena de vitalidad.

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II. ARGUMENTACIÓN

“El consumo de comida chatarra”- independiente “x”

Es la elevada ingesta de alimentos que contienen grandes cantidades de sal, altos niveles
de grasa, azúcares y condimentos que generan un efecto particular en quien la ingiere:
incrementa su apetito y sed; teniendo en cuenta que esta comida no aporta sustancias
nutritivas o saludables para la ejecución de las funciones corporales o fisiológicas, su
consumo a largo plazo conllevará a problemas nutricionales y metabólicos,
repercusiones sociales así como también culturales. Aquella comida es diseñada para
poseer altas palatabilidades (muy sabrosas y deseables), generando cierta adicción,
limitando se esta manera el consumo de alimentos saludables.

“Repercusiones destructivas en la salud del adolescente”- dependiente “y”

Potencialmente todos los alimentos son perjudiciales si se abusa de su consumo, pero


los que se consideran comida chatarra, es decir, que poseen altos niveles de sodio, son
perjudiciales por su vínculo a enfermedades cardiovasculares; los lípidos junto con los
adictivos se necesitan en menores cantidades porque producen efectos adversos como
los siguientes: problemas de memoria y aprendizaje, depresión entre jóvenes, fatiga y
debilidad, problemas digestivos, incrementa riesgo de enfermedades renales y el más
conocido y común obesidad, el cual se da por alimentación baja en fibra.
Lamentablemente todo lo mencionado es frecuente gracias a la falta continua de
conciencia por las personas con respecto al tipo de alimentación y estilo de vida que
deciden llevar. Según Unicef el excesivo consumo actual de comida chatarra, incentiva
a un patrón que puede ocasionar un sinfín de problemas encabezando en la lista
obesidad y eso vendrá ligado a otras enfermedades que se mencionaran más adelante,
por lo tanto, no existe duda sobre lo nociva que resulta este tipo de comida para el
organismo.

Llama mucho la atención que en nuestro país como consecuencia de múltiples factores
complejos haya aumentado notoriamente el peso de todos los grupos etarios de la
población, pero ahora nos centraremos en los adolescentes quienes, influenciados por
medios de comunicación, el tiempo de permanencia en la escuela o la universidad
(primeros años) y el horario de estas hace que no tengan establecidos sus estilos de vida.
Pero, ¿Por qué sucede todo esto?, hoy en día, nuestro estilo de vida, se ve alterado por la

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escasez de tiempo para comer en casa, pero; así que comer diariamente fuera de ella es
la solución más rápida, aquí es donde entran a tallar los locales de comida rápida que
tienen precios accesibles. A esto se le suma que sirven en cortos periodos de tiempo y
por tanto se dispone de más tiempo para realizar otras actividades, con lo cual resulta
perfecto, pero sin evaluar las consecuencias nocivas en nuestra salud física, mental y
también social, socavando la autoestima, interfiriendo con el desenvolvimiento
académico y afectando incluso las relaciones de familia. Anteriormente hemos señalado
que uno de los problemas de la comida chatarra es la ingesta de un exceso de aporte
energético, siendo esta característica de gran importancia en lo que a obesidad se
refiere. Debemos partir definiendo que la obesidad es una enfermedad caracterizada por
un desequilibrio en el balance energético, siendo este el resultado del aporte y gasto
energéticos. Cuando el aporte supera al gasto el balance es positivo y, por tanto, se
traduce en un aumento de peso. Las calorías de nuestra dieta, unido al hecho de que hoy
en día vivimos en una sociedad muy sedentaria, hace que se produzca un aumento en la
incidencia y prevalencia de la obesidad que conlleva una serie de consecuencias
sociales, aunque estas son mínimas en comparación con todas las consecuencias
fisiopatológicas, por el exceso de peso.

Ahora veremos que esto cobrara sentido en nuestro país, como se menciona el consumo
de alimentos no saludables va de la mano con los que son los bajos estándares de
desempeño en el aprendizaje, pues está comprobado que Puede generar problemas de
memoria y aprendizaje porque un estudio publicado en 2011 en el American Journal of
Clinical Nutrition reveló que las personas saludables que consumen comida basura
durante tan solo 5 días obtenían resultados bajos en pruebas cognitivas que evaluaban la
atención, la velocidad y el humor. Entonces una de las conclusiones sostenía que comer
comida basura durante 5 días de forma regular puede deteriorar la memoria, que
seguramente derive del hecho de que las dietas pobres y tóxicas pueden generar ciertas
reacciones químicas que llevan a la inflamación del hipocampo, asociada a la memoria
y el reconocimiento. Asimismo, las dietas con un alto contenido de azúcares y grasas
pueden suprimir la actividad de un péptido del cerebro denominado BDNF (factor
neurotrófico derivado del cerebro), que ayuda en la formación de la memoria y el
aprendizaje.

El cerebro contiene sinapsis responsables del aprendizaje y la memoria, y comer


demasiadas calorías puede interferir con la producción saludable y el funcionamiento de

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la sinapsis. "Estamos generando nosotros mismos un gran enemigo para nuestro
organismo, aquí añadiremos sobre que no sólo la comida chatarra engorda, sino que
podría causar demencia. Una investigación muestra que nuestra dieta de calorías
aumenta el riesgo de demencia guarda una relación directa con los hábitos alimenticios,
por lo que se ha planteado la hipótesis de que las dietas ricas en grasa aumentan las
posibilidades de contraer esta dolencia en unos años si se persiste con este estilo de vida
totalmente desordenado y peligroso solos será una bomba de tiempo. Ahora
continuando un estudio que ha publicado en la revista Public Health Nutrition "cuanta
más comida rápida se consume, mayor es el riesgo de depresión, según los datos
estudiados por los científicos, quienes consumen comida rápida presentan un
incremento del riesgo de desarrollar depresión del 51 por ciento mayor respecto a
aquellos que no se alimentan de este tipo de comida. Los adolescentes padecen diversos
cambios hormonales, los hace susceptibles a los repetimos cambios de humor y de
conducta. Ahora por otro lado, la sensación de fatiga y debilidad pues como venimos
recalcando sobre estos alimentos es la carencia de nutrientes que el organismo requiere
para mantenerse saludable y funcional. la sensación de estar lleno y satisfecho, pero no
te brinda de energía, por lo que en poco tiempo te sientes débil y agotado. lleva tus
niveles de energía a un nivel tan bajo que puede resultar difícil realizar las tareas más
sencillas. Las dietas saludables es fundamental para mantener los cambios hormonales
en un equilibrio, y como la comida chatarra carece de los nutrientes, el riesgo de
padecer depresión aumenta si se come de manera constante.

Según una tesis publicada por la Universidad Abierta Interamericana en el 2012, nos
expone que: “Uno de los factores predominantes para la adquisición de enfermedades
crónicas no transmisibles (ECNT) y enfermedades cardiovasculares (ECV), son los
malos hábitos alimenticios que la población adquiere desde su adolescencia, yendo de la
mano con otros factores en la edad adulta como la herencia, el sedentarismo, la falta de
actividad física y el tabaquismo; produciendo el riesgo de sufrir de infartos por el
bloqueo del flujo sanguíneo, gracias a la formación de placas compuestas de colesterol y
triglicéridos. Por tanto, se deduce que la etapa crucial para que en el futuro una persona
pueda poseer de salud y vitalidad es la adolescencia.

Para finalizar también se considera el daño al sistema digestivo (porque el aceite en la


comida se deposita en las paredes del estómago y aumenta la producción de ácido,
generando así la irritación de sus paredes), y las neoplasias por fallas endocrinas (como

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cáncer de mama, ovario, endometrio y próstata), y otros factores (como cáncer de
hígado y páncreas).

III. CONCLUSIONES

Los adolescentes son quienes consumen más comida chatarra, al no tener un estilo
de vida saludable, ya que son más susceptibles por la etapa de búsqueda de
identidad. Sus preferencias se ven afectadas por la publicidad y los estereotipos que
se presentan en la sociedad, por tanto, todo esto se ve reflejado en los alimentos
seleccionados por ellos como frituras, bebidas y alimentos altos en azúcar y harina
refinada, dulces y sopa maruchan.
Por esa errónea selección de alimentos terminan adquiriendo enfermedades a corto
plazo como mala memoria, falta de concentración, obesidad; y a largo plazo como
HTA, diabetes mellitus, fallas renales así como cardiovasculares.

IV. RECOMENDACIONES

Se recomienda a los padres estar más atentos en cuanto al cuidado de la alimentación


de sus hijos adolescentes, así como también el saber orientarles que tipo de comida
es buena o mala para su desarrollo, para evitar así que ésta se retrase. Así como se les
recomienda a los padres, también y por obvias razones nos dirigimos a los
adolescentes, para que puedan tomar conciencia sobre si sus estilos de vida actuales
son aptos, y si no lo son pues que sepan identificar las fallas para su pronta
corrección y así puedan adquirir costumbres saludables, como el consumir comida
balanceada rica en proteínas y vitaminas (como verduras, legumbres, frutas, raíces),
baja en sal y calorías; así como el incremento del consumo de agua y mas no el de
bebidas con alto contenido de azúcar. Todo esto les permitirá tener una mejor calidad
de vida, y por tanto poder disfrutar de una salud estable, cabe resaltar que la buena
alimentación va de la mano con la actividad física, para que nuestro cuerpo adquiera
resistencia y mucha vitalidad para su buen funcionamiento.

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V. REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS

 Fernández Ramírez, A., Izquierdo Córser, P., Valero Leal, K., Allara Cagnaso,
M.,Piñero González, M. y García Urdaneta, A. (2006). Efecto del tiempo y
temperatura de almacenamiento sobre la calidad microbiológica de la carne de
hamburguesa. Revista Científica, 16 (4).

 Gutierrez-Fisac, J.L. (1.998). Obesidad y nivel socioeconómico. Revista


Medicina Clínica, 110 (9).

 Gutierrez-Fisac, J.L., Regidor, E., López García, E., Bangas, J.R. y Rodríguez
Artalejo,F. (2003). La epidemia de obesidad y sus factores relacionados: el
caso de España. Cadernos de Saúde Pública. 19 (1).

 Molini Cabrera, Dolores. “Repercusiones de la comida rápida en la sociedad.


Sevilla. 2007. 635-659 pg.

 Greppi, Guillermo David. “Hábitos alimentarios en escolares adolescentes”.


Universidad Abierta Interamericana. Argentina. 2012.

 Castro Parrales, Ángel Vicente. Trastornos alimenticios por consumo de


comida chatarra en los niños de séptimo año de educación general básica de la
escuela fiscal mixta “JOSÉ JESÚS OCAMPO SALAZAR ”. Universidad de
Guayaquil. Ecuador. 2013-2014.

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