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Problemas comunes a la hora de amamantar

Con demasiada frecuencia, las madres encuentran problemas para iniciar o para continuar con
la lactancia materna cuando ésta ya ha comenzado, por ello los niños reciben poco o durante
poco tiempo la leche de su madre. La mayoría de las veces esto se debe a la ignorancia o a una
mala información en la técnica de amamantar. Desgraciadamente, existe mucho
desconocimiento y demasiados bulos que contribuyen a privar a los niños del alimento óptimo
para su crecimiento; el único que, además, le vacuna y previene contra múltiples
enfermedades.

Los hijos tienen todo el derecho a ser alimentado por sus madres, porque su leche le protege.
Se puede afirmar con seguridad que la retirada de la lactancia materna no está indicada en casi
ninguna situación, a pesar de ello, se retira innecesariamente por las siguientes causas:

 Dolor

Amamantar siempre es placentero, sin embargo, los primeros días puede sentirse dolor o 
molestias cuando el bebé se engancha al pecho. La causa mas frecuente del dolor de pezones
es la mala colocación del bebé, succionando sólo el pezón, no toda la mamila. Este dolor es
transitorio, suele desaparecer en una semana.

Grietas

Las grietas suelen estar producidas por la mala postura del bebé con respecto al pecho,
comprimiendo fuertemente con sus encías el pezón de su madre. Además del dolor puede
aparecer sangrado o vómito con sangre. Las grietas sólo precisan limpieza del pezón después
de cada toma y corregir la posición para que la boca del niño abarque una gran parte de la
areola y no sólo el pezón. Las pezoneras de silicona blanda pueden ser útiles en algunos casos.

Ingurgitación de las mamas

La congestión o ingurgitación de las mamas es normal a partir del tercer día del parto, porque en
esos días la producción de leche aumenta rápidamente y el bebé puede ser incapaz de extraerla
toda. La ingurgitación es molesta pero disminuye o desaparece hacia el final de la primera
semana después del parto. A veces, la tensión de los pechos es tan dura que el bebé no se
puede agarrar, en esos casos se debe apretar con los dedos de ambas manos sobre la areola,
en la base el pezón,  intentando hundir la mano durante unos minutos. De esta manera
aparecerán algunas gotas de leche que estimularan la succión del bebé, a la vez que le permita
disponer y agarrar mejor el pezón.

Pezones planos

Algunas mujeres tienen pezones pequeños, tan aplanados, que el bebé puede tener dificultad
para atrapar, sujetar y mantener el pezón dentro de su boca. Se le puede ayudar apretándose
con los dedos índice y pulgar, la areola mamaria con fuerza. Esto permite que el pezón salga del
pecho, facilitando así que el bebé se pueda agarrar al pezón.

Mastitis

 La mastitis es la inflamación de una parte de la mama. Se origina, generalmente por la


acumulación de leche producida por la obstrucción de un conducto de los que transportan la
leche al pezón, también por la ausencia de vaciado de toda la leche producida; más tarde puede
infectarse. En ambos casos, con infección o sin ella, existe dolor que mejorará al finalizar la
toma y aumentará al empezar la siguiente. También puede existir enrojecimiento y aumento de
calor en la zona dolorosa, a veces fiebre.

En ningún caso la mastitis justifica la retirada de la lactancia materna, tampoco cuando ésta
cursa con fiebre alta o la madre recibe antibióticos para la curación.

 No tener suficiente leche

Ésta es, seguramente, la causa más frecuente de fracaso de la lactancia materna, la


creencia errónea de no tener suficiente leche o que la composición de la leche no es la
adecuada, está aguada o es incompleta. Se sabe que la composición de la leche materna se
mantiene incluso en caso de malnutrición materna porque es el seguro del mantenimiento de la
especie.

Problemas con la lactancia materna: pezones irritados


Irritación durante los primeros días

Es posible que sus pezones estén sensibles los primeros días de amamantar a su
bebé. Esto es normal para muchas mujeres.

También puede ser que experimente más sensibilidad en los primeros minutos del
amamantamiento. Esta sensibilidad debería disminuir a medida que sigue
amamantando. En la mayoría de las mujeres este dolor disminuye durante la
primera semana.

No es normal que el dolor dure todo el amamantamiento o que sea intenso. De ser
así, es importante que busque inmediatamente la ayuda de un experto en lactancia
materna.

Irritación causada por una posición y forma de prenderse incorrectas

Cuando el bebé se une al pecho de la madre se dice que se "prende". Sostener bien
a su bebé y ayudarle a prenderse correctamente al pecho le evitará la irritación en
los pezones. La irritación a menudo dura todo el amamantamiento si el bebé no se
prende bien o no está en una buena posición respecto del pecho. Esto puede
causar que sus pezones se enrojezcan, se amoraten o se agrieten. Una grieta es
una ruptura que se produce en la piel.
Cómo sostener correctamente a su bebé cuando le va a dar de mamar

Para amamantar a su bebé, acérquelo a su propio cuerpo de manera que el pecho,


el estómago y los muslos del bebé estén en contacto con su abdomen. Sostenga la
espalda y el cuello del bebé con una de sus manos o apoye la cabeza del bebé en
su brazo. El bebé debe poder alcanzar el pecho con facilidad.

También puede sostener a su bebé bajo su brazo a un costado de su cuerpo.


Sostenga la espalda y el cuello del bebé con una de sus manos. Considere la
posibilidad de apoyar al bebé en algunas almohadas. En esta posición será más
fácil que el bebé esté erguido.

Usted también se puede recostar de lado para amamantar. Su bebé está recostado
cerca de usted, de lado y con la cabeza un poco inclinada hacia atrás. Puede estar
más cómoda si coloca almohadas detrás de usted y bajo su cabeza. Puede colocar
también una almohada tras de la espalda del bebé.

En todas las posiciones

 Asegúrese de que la nariz del bebé esté frente a su pezón cuando empiece a hacer
que se prenda
 Asegúrese de que el bebé entre en contacto con el pecho con la cabeza ligeramente
inclinada hacia atrás, en una posición de olfateo
 La cabeza del bebé no debe estar torcida y no se debe girar hacia su hombro

Algunos bebés se prenden bien sin necesidad de sostener la mama. Quizá sienta
usted que debe sujetar su mama para ayudar a su bebé a prenderse. Sostenga su
mama colocando su pulgar de un lado y los dedos del otro lado de la mama. Sus
dedos deben estar bien lejos de la areola. La areola es la zona más oscura que
rodea el pezón. Su bebé necesita introducir el pezón profundamente dentro de la
boca.

Forma correcta de prenderse

Deje que su bebé la guíe para prenderse correctamente. Puede empezar por
sostener a su bebé entre sus mamas, con su piel pegada a la de usted. Cuando él
empiece a buscar la mama, muévalo suavemente hacia su mama mientras le
sostiene el cuello y hombros con la mano. Deje que su bebé busque el pezón, lo
alcance y se prenda a su pecho.

Acerque a su bebé al pecho con la cabeza ligeramente inclinada hacia atrás.

Si su bebé no está abriendo la boca, rócele ligeramente el labio de esquina a


esquina con su pezón. Recuerde interrumpir el contacto entre la boca de su bebé y
su pezón al final de cada movimiento.

Procure que su bebé se prenda cuando tenga la boca tan abierta como en un
bostezo. Tenga paciencia. Espere a verle la boca ancha y abierta.
Acerque al pecho primero el mentón del bebé, y luego el labio inferior.

Cuando abra grande su boca, llévelo hacia su mama de manera rápida pero suave.
No lleve su mama hacia el bebé. El mentón de su bebé es lo que hace contacto en
primer lugar con el pecho, luego el labio inferior cubriendo la mayor superficie de
areola posible, y por último el labio superior. La punta de la nariz está cerca de la
mama o la toca. Si su bebé se prende correctamente, cubrirá más areola con el
labio inferior que con el superior.

Si aún siente dolor cuando el bebé se prende al pecho, presiónele el mentón hacia
abajo con el dedo.

Asegúrese de que el labio inferior de su bebé cubra más areola que el superior.

Irritación causada por succión inadecuada

Puede ser que su bebé esté prendido en la posición correcta, pero que usted tenga
los pezones irritados. De ser así, es posible que su bebé no esté succionando
adecuadamente. La irritación de los pezones generalmente dura lo mismo que el
amamantamiento.

Pídale al especialista en lactancia materna que controle la forma de succionar del


bebé. A veces enseñarle a succionar y alimentarlo con los dedos puede ser
necesario para que su bebé aprenda a succionar correctamente.

Irritación causada por infección

Los pezones irritados y agrietados que no se curan después de corregir la posición y


la forma de prenderse pueden deberse a una infección causada por bacterias.

Los pezones también se pueden infectar con hongos. Una infección por hongos
puede transmitirse fácilmente entre una madre y su bebé, así que es importante que
su médico trate a ambos. La infección por hongos causa dolor, que a menudo
comienza repentinamente, después de días o semanas de lactancia sin dolor. Las
madres experimentan dolor y ardor durante todo el amamantamiento y entre un
amamantamiento y otro. Quizá note usted la piel escamosa, brillosa y de color
rosado rojizo en el pezón.

Las madres o bebés que hayan estado medicados para tratar infecciones pueden
contraer infecciones con hongos más fácilmente.

Es importante que el médico controle para ver si hay infección. En caso de infección
bacteriana, su médico prescribirá una pomada antibiótica para que se aplique sobre
los pezones. Para las infecciones con hongos se prescribe un medicamento
antifúngico tanto para la madre como para el bebé. A veces también se añade
cortisona (un medicamento para reducir la inflamación) a un ungüento.
Irritación al final del amamantamiento

Algunas madres sienten quemazón y dolor punzante después de amamantar. Los


pezones se vuelven blancos después del amamantamiento, luego rojos, y a veces
azules antes de volverse rosados de nuevo. En algunas madres, esto se debe a una
diferencia de temperatura entre el aire frío y la boca tibia del bebé. La causa
también puede ser que el bebé apriete el pezón con los dientes o encías, o que no
se prenda bien y disminuya el flujo de sangre hacia el pezón.

Cubra sus pechos con toallas calientes después de amamantar. Esto permite que
los pezones se enfríen gradualmente. Compruebe que su bebé se encuentre bien
ubicado y prendido. Pida más ayuda a su médico si este dolor no desaparece.

Irritación por lactancia en un pecho congestionado

Congestión significa que la mama está muy dura. El área alrededor del pezón
también puede endurecerse mucho. El pezón no entra fácilmente hasta el fondo de
la boca de su bebé. Por esta razón, el pezón se frota contra la parte superior de la
boca del bebé, y se irrita.

Colóquese compresas tibias o frías en el pecho antes de amamantar, y presione


suavemente con la mano para obtener de su mama algo de leche. El área alrededor
del pezón debe estar suave antes de que su bebé se prenda. Son útiles las
compresas frías después del amamantamiento y entre amamantamientos. Pida
ayuda a un especialista en lactancia si no logra ablandar sus mamas.

Irritación a causa de un conducto mamario bloqueado

Algunas madres pueden advertir un punto blanco en su pezón y experimentar dolor


durante el amamantamiento. Esto puede significar que uno de los conductos
mamarios se ha bloqueado donde se abre hacia el pezón. Las compresas calientes
antes de amamantar pueden ser de ayuda, así como amamantar frecuentemente. Si
en unos días no hay mejoría, su médico puede abrirle el conducto con una aguja
estéril.

Irritación de los pezones cuando el bebé sufre anquiloglosia (lengua


anclada)

Algunos bebés no pueden mover fácilmente la lengua porque la tienen muy pegada
al piso de la boca. Si el bebé no logra sacar la lengua más allá de las encías, puede
tener problemas para prenderse al pecho y succionar, lo cual causa irritación en los
pezones. Su médico y un especialista en lactancia deben controlar a su bebé.

Otras medidas para ayudar a prevenir y tratar pezones irritados

Cuidado de las mamas

 Lávese los pezones una vez al día con agua tibia pero sin jabón. El jabón elimina los
aceites naturales necesarios para mantener húmeda la piel del pezón. Aplique
suavemente algo de leche materna en sus pezones después de cada
amamantamiento
 Deje que sus pezones se sequen solos, o use un secador de pelo en la temperatura
más baja
 Use almohadillas absorbentes de algodón que se puedan lavar en lugar de las
descartables. No utilice almohadillas absorbentes con forro plástico. Éstas
mantienen la piel demasiado húmeda. Remoje la almohadilla absorbente si se le
pega al pezón. Esto evita arrancar la piel del pezón
 Utilice copas protectoras de plástico sobre su areola dentro de su sostén de
lactancia. Las copas protectoras protegen sus pezones del roce contra el sostén de
lactancia. Las copas protectoras están disponibles en algunas farmacias y en la
Tienda de Alimentos Especiales ubicada en el piso principal de SickKids

Cuándo está amamantando

 Recuerde introducir un dedo en la comisura de la boca del bebé, pasando los labios
y las encías, para interrumpir la succión y así poder retirar al bebé de la mama
 Trate de amamantar primero en el pecho menos irritado
 Amamantar en diferentes posiciones puede aliviar la irritación
 Amamantar con más frecuencia y por períodos más cortos puede resultarle más
cómodo
 Cuando su bebé está aprendiendo a tomar el pecho trate de evitar el uso de
chupetes y tetinas de biberón. La mayoría de los bebés succionan el pecho de
manera diferente que las tetinas de los biberones o los chupetes. Esto puede hacer
que a su bebé le resulte difícil amamantarse, y puede causar irritación en los
pezones
 Si los pezones le duelen mucho como para amamantar, permita que ambos o uno de
ellos se sane. Para mantener su producción de leche, debe extraerse leche en los
mismos horarios en que su bebé se amamanta . La leche materna extraída es la
leche que usted saca de su pecho usando su mano o una bomba extractora.
Durante el día o los días que su pezón tarde en curarse, lo mejor es alimentar a su
bebé con el dedo

Si experimenta dolor al extraerse la leche, por favor consulte el folleto sobre "Leche
Materna: extracción para su bebé hospitalizado."

Puntos clave

 La irritación de los pezones es muy común la primera semana de amamantar


 Prevenga la irritación mediante la posición y la manera de prenderse correctas
 Los pezones irritados son una de las principales razones por las que las madres
dejan de amamantar
 El diagnóstico temprano y el tratamiento de la irritación de los pezones es muy
importante

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