Sei sulla pagina 1di 72

Sintonías

corporales
Memoria y resistencia de defensoras,
un seguimiento a la Resolución 1325
Sintonías
corporales
Memoria y resistencia de defensoras,
un seguimiento a la Resolución 1325
Sintonías Corporales: memoria
y resistencia de defensoras, un
seguimiento a la Resolución 1325
Liga Internacional de Mujeres por la Paz y la Libertad -
LIMPAL Colombia

Dirección
Diana María Salcedo López
Coordinación general de la investigación
Diana María Salcedo López
Paula Andrea Moreno Serrano
Equipo de investigación
Alexandra Olarte Nanclares
Liseth Tatiana Molina Arcos
Samantha Moreno Jiménez
Equipo regional Meta
Mayda Roldán
María Ávila
Equipo regional Bolívar
Cecilia Cuesta Morales
Susana Navarro
Fotografías
Emilia Alejandra Morales Camacho
Diseño de portada y diagramación
Diana Pérez
Corrección de estilo
Erika Gómez López
Con el apoyo de
HealthNet TPO
Contenido

Presentación / 5
Introducción / 9
Hacia una definición de afectaciones psicosociales / 16
Aproximación metodológica / 20
Enfoque psicosocial / 21
Enfoque territorial / 22

01
Capítulo

Agenda de Mujeres, Paz y Seguridad de las Naciones Unidas:


Resolución 1325 / 23
Indicadores de cumplimiento para la Resolución 1325  / 24
La participación de lideresas y defensoras en el proceso de paz / 26
La prevención de conflictos: una mirada a la seguridad de las lideresas
y defensoras de DDHH / 29
El impacto multidimensional de la violencia en la vida de las defensoras:
los escenarios de protección / 32

02
Capítulo

Afectaciones psicosociales de lideresas y defensoras de derechos humanos / 35


En conversación con las lideresas / 38
Daños y afrontamientos: una mirada preliminar / 39
Las afectaciones psicosociales y el componente de Prevención / 41
Psicosoma / 51

¿Conclusiones? Entre Conexiones y Complejidades  / 60


Recomendaciones / 63
Recomendaciones para las instancias normativas / 63
Recomendaciones para la comprensión psicosocial y el acompañamiento / 64
Referencias / 67
Taller para el fortalecimiendo del autoestima, Bolívar, 2019.
5

Presentación

L
a Liga Internacional de Mujeres por la Paz y sobre la Resolución 1325, el desarme y las mujeres en
la Libertad, LIMPAL (WILPF, por sus siglas en Colombia, con el que plasmó su contribución sobre
inglés) es una organización feminista, pacifista los pasos para una paz sostenible y duradera, plan-
y antimilitarista. Tras su fundación en 1915, traba- teando preguntas basadas en experiencias, necesi-
ja en 47 países para promover el empoderamiento dades y propuestas de las mujeres mismas.
de las mujeres y la incorporación de los enfoques
de género y de sus derechos en los procesos de Desarmando la vida busca integrar el andamiaje teóri-
construcción de paz, reconociendo la necesidad de co basado en los instrumentos del derecho internacional,
eliminar la desigualdad en las esferas de la vida pú- principalmente la agenda de mujeres, paz y seguridad y su
blica y privada, y de elevar las voces de las mujeres relación con los temas de desarme, desmilitarización y co-
para avanzar en la construcción de un mundo con mercio de armas pequeñas en el escenario del posconflic-
mayor justicia para las mujeres. to, tomando como referencia la mirada de organizaciones

En Colombia, LIMPAL se ha dedicado a defender de mujeres que durante años han venido trabajando en

y fomentar la garantía de los derechos de las muje- los territorios y levantado sus posturas políticas basadas

res con el propósito de alcanzar la justicia, la repa- en realidades locales, que reflejan necesidades específicas

ración y la igualdad, a través del empoderamiento para la incorporación del enfoque de género y derechos

participativo de mujeres y jóvenes impactadas y de las mujeres para la construcción de paz (Limpal, 2016).

sobrevivientes del conflicto armado. Desde 1998,


LIMPAL Colombia se ha comprometido con la cons- Un año después, LIMPAL publicó el informe Mu-
trucción de escenarios de paz estable y duradera, jeres por el Desarme, + vidas - armas: una mirada al
por medio de la incidencia y participación política desarme desde la Resolución 1325, desde el que hizo
de mujeres que promueven la defensa y protección seguimiento al proceso de dejación de armas de las
de sus derechos en el territorio nacional. FARC-EP y los vínculos con los derechos humanos
de las mujeres y las garantías de seguridad. En él se
Desde la firma del Acuerdo de Paz en el 2016, las
analizaron, además, algunos de los efectos para las
iniciativas de LIMPAL con respecto a la aplicación de
mujeres de la circulación de armas en los territorios
la Resolución 1325 se han focalizado en agenciar
y una reflexión sobre el impacto de los elevados
trabajos de investigación cuyo fin es instar al Estado
presupuestos destinados al gasto militar y al sector
colombiano a hacer mejoras que sean diseñadas con
defensa (Limpal, 2017).
y para las mujeres. En junio del 2016, ad portas del
inicio del Acuerdo de Paz, LIMPAL publicó el informe En 2018, tras varios acercamientos y un trabajo
anual de seguimiento Desarmando la vida, reflexiones de acuerdos y reflexiones internas, se presentó el
6 Liga Internacional de Mujeres por la Sintonías Corporales: memoria
Paz y la Libertad / Limpal Colombia y resistencia de defensoras, un
seguimiento a la Resolución 1325

Conmemoración 8 de marzo, San Jacinto, Bolívar.

informe titulado Lucha por una reincorporación con como mujeres, en un entorno patriarcal, nos permi-
dignidad para las mujeres: informe de seguimiento a la ten unir apuestas colectivas en pro de la garantía de
Resolución 1325 con recomendaciones para procesos derechos para las mujeres.
de reincorporación. Este fue un proceso en el que, a
En esta línea de trabajo desde la investigación si-
partir del diálogo de saberes entre LIMPAL y FARC, tuada, participativa y popular, LIMPAL ha desarro-
se publicó la decisión en el informe de LIMPAL de: llado su propuesta pacifista y feminista para apor-
tar elementos de análisis a la dinámica nacional e
[...] avanzar en un camino conjunto para desarrollar un internacional que sirvan de excusa para entablar
análisis político de los procesos de reincorporación de las diálogos disímiles entre la experiencia de las mu-
mujeres farianas desde un enfoque de género y derechos de jeres en sus diversidades y la agenda nacional e
las mujeres, que aporte una mirada crítica y un balance más internacional de mujeres, paz y seguridad. En este
completo sobre la reincorporación para las mujeres, como año 2019, tras 19 años de presentada la Resolución
una apuesta decidida por la transformación del país (2018). 1325 en el seno de la Asamblea General, presenta-
mos nuestro informe Sintonías Corporales: memoria
Este informe permitió avanzar en las reflexiones y resistencia de defensoras, en el que mantenemos
frente a las agendas de las mujeres en procesos de nuestra línea de trabajo, el cual incorpora la inves-
reincorporación, sus propuestas de construcción tigación-acción-participación y el diálogo de saberes
de ciudadanía y evidenciar los vasos comunicantes desde el análisis interseccional, que rescata desde
que, desde los lugares de opresión y desigualdad las narrativas de las mujeres, en este caso de las
Presentación 7

defensoras de derechos humanos, los saberes más En el caso de las mujeres


aproximados a la lectura de un contexto adverso
defensoras, el derecho a
del cual emergen los más fuertes liderazgos.
defender ha estado atravesado por el
Este derecho para las mujeres ha significado
ser mujer en una sociedad patriarcal,
rebasar las estructuras patriarcales que alimen-
lo que ha implicado que hagan uso
tan los obstáculos para el reconocimiento de su
participación en representación y en nombre de de sus capacidades desarrolladas a
otras. Estas estructuras suponen que las mujeres través del rol históricamente asignado;
mantengan el rol históricamente considerado para así, las defensoras desarrollan su
ellas relacionado tradicionalmente con el cuidado,
práctica desde los lugares del trabajo
las labores domésticas y la reproducción de la vida;
comunitario, en tejido, en red”.
sin embargo, diversas dinámicas sociales, que para
el caso colombiano han estado atravesadas por
significa la defensa de derechos humanos, otor-
las dinámicas de la guerra, han llevado a que las
gándole a este ejercicio un nivel de mayor cercanía
mujeres sobrevivientes ocupen el lugar reservado
con las realidades y afectaciones que, en particular
generalmente para los varones, en la esfera de lo
–aunque no exclusivamente–, les ocurren a las mu-
que se ha denominado por el patriarcado como lo
jeres por el hecho de serlo, ya sea en el marco del
público. Ocupar esos espacios con agendas, voce-
conflicto armado, de las relaciones de pareja, expa-
rías y propuestas que tienen como base y funda-
reja y familiares y en el ámbito de los espacios de
mento sus vivencias y experiencias y las de otras, ha
participación, entre otros.
significado para ellas enfrentar la colonialidad y la
masculinización de la palabra, del testimonio y, en Claramente, esto está imbricado por la construc-
últimas, de la verdad. ción del sujeto mujer defensora que es atravesado
por múltiples interseccionalidades, siempre con la
Si bien el ejercicio de defensa de derechos hu-
apuesta de resguardar la democracia, profundizar
manos es desarrollado por hombres y mujeres, las
su ciudadanía y fortalecer el ejercicio político de
maneras que encuentran unos y otras para ejercer
las mujeres. Estas apuestas se han convertido en
este derecho tienen unas connotaciones distintas
motivadores de su acción de defensa de derechos,
que reflejan el lugar habitado desde el que se ges-
lo que posibilita que, desde las múltiples actorías
tionan capacidades alternas para responder a las
políticas, sean ellas quienes van abriendo nuevas
dinámicas de los liderazgos y, por supuesto, de las
rutas, visiten lugares políticos donde eleven su voz
afectaciones, los riesgos y las amenazas que se pre-
y construyan poco a poco un discurso robusto fren-
sentan en el contexto.
te a las diversidades en la defensa de los derechos
En el caso de las mujeres defensoras, el derecho humanos, la construcción de paz y la participación
a defender ha estado atravesado por el ser mujer de las mujeres.
en una sociedad patriarcal, lo que ha implicado que
Desde nuestro lugar político, LIMPAL continúa
hagan uso de sus capacidades desarrolladas a tra-
apostando por la reivindicación de estas voces de de-
vés del rol históricamente asignado; así, las defen-
fensa de los derechos, de la paz, la vida y la dignidad.
soras desarrollan su práctica desde los lugares del
trabajo comunitario, en tejido, en red. Desde sus Diana SalcedoLópez
prácticas han robustecido el contenido de lo que Directora
8

Introducción

E
n Colombia, los roles de liderazgo y defensa justamente el lugar donde se sitúan las personas
de derechos han sido experiencias clave para que defienden los derechos humanos, y desde don-
contribuir al goce efectivo de los derechos hu- de emprenden luchas y búsquedas por el bienestar
manos y al fortalecimiento de procesos sociales ba- colectivo. Ya sea en tiempos de guerra, en los es-
sados principalmente en la exigibilidad de justicia al pacios rurales, centros urbanos o en sus hogares,
Estado, de garantías plenas para el ejercicio de de- los esfuerzos por la paz ocurren en paralelo con
rechos y en procesos colectivos para visibilizar los determinados niveles de desgaste: físico, mental,
enormes desafíos del Estado colombiano en mate- emocional, económico, relacional y espiritual, por
ria de prevención, protección y no repetición ante mencionar algunos.
violaciones de derechos humanos. Estas experien-
Si se añade a este panorama general un conflicto
cias de defensa de derechos humanos no siempre
armado interno con el consecuente resquebraja-
cuentan con la solidaridad de toda la sociedad, y
miento del tejido social, los desgastes del ejercicio
aunque el discurso de los gobiernos generalmente
de defensa son exacerbados y profundizados, pues
es de respeto a la labor, en la realidad, las múltiples
la violencia se convierte en un fenómeno extendido
afectaciones y los impactos desproporcionados
con implicaciones culturales, directas y estructura-
sobre quienes los defienden evidencian la falta de
les1. Estas violencias recaen con frecuencia sobre
compromiso político y de respeto y reconocimiento
sectores poblacionales cuyo acceso al poder no ha
a la labor que desarrollan.
sido dominante, como el caso de las mujeres, niñas
En conjunto, estos liderazgos parten desde una y niños, población campesina, afrocolombiana e in-
intención por la dignificación plena de sus vidas y la dígena, y sectores sociales LGBTIQ+2 .
de sus comunidades. Es preciso recordar que son
En medio de estas circunstancias, algunas de es-
también respuestas a las distintas expresiones de
tas personas han decidido tomar voz y acción sobre
desigualdad y exclusión, al control social y territo-
rial por parte de actores armados, a los intereses
1 Según Johan Galtung (citado por Díaz, Dora Ortega, Magda Prieto, Patri-
económicos de instituciones ajenas a las comunida- cia Zabala, Sonia, 2012, p. 17), “la violencia directa genera daños físicos y
des y a los modos conflictivos de gestionar la con- psicológicos sobre las personas. Se relaciona con la guerra como máxi-
ma expresión de agresión directa. La violencia estructural procede de
vivencia. En el existir, interactuar y transitar de es-
estructuras sociales, políticas y económicas opresivas que impiden que
tas personas, el desarrollo en Colombia se ha visto las personas desarrollen su potencial; la pobreza, el hambre, la imposi-
atravesado por conflictos político-electorales y de bilidad de acceder a la educación o la salud [...] La violencia cultural pro-
cede de la imposición de unos valores y pautas culturales que niegan la
dominación territorial, que han propiciado fuertes diversidad cultural y legitiman las otras dos formas de violencia”.
polaridades en la población, sustentadas sobre las 2 Lesbianas, gays, bisexuales, trans, intersexuales, queer y + para los de-
más colectivos no representados en las siglas anteriores, como demi-
nociones de violencia y paz. Estos contrastes son sexuales, pansexuales y asexuales.
Introducción 9

las diferentes expresiones de opresión, discrimina- La presente investigación


ción, marginación o exclusión que atraviesan sus
evidenció que los escenarios
vidas, y emprender un camino de vida en el que su
actuar sea tutela de las garantías y derechos a que de liderazgo están limitados por los
todas las personas tienen acceso, en tanto seres riesgos sociopolíticos que trajo el
humanos.
proceso de paz y que se suman a la
La presente investigación evidenció que los es- permanencia de lógicas territoriales y
cenarios de liderazgo están limitados por los ries-
nacionales de corrupción, desgobierno
gos sociopolíticos que trajo el proceso de paz y que
se suman a la permanencia de lógicas territoriales y tráficos ilegales”.
y nacionales de corrupción, desgobierno y tráficos
ilegales. En ese contexto, las mujeres defensoras trario a ello, toda persona que defiende derechos
entrevistadas comprobaron que el panorama ac- humanos ejerce un liderazgo social, cuya apues-
tual no solo lo genera riesgos y amenazas a su ta decidida es justamente defender las garantías
vida, sino alteraciones e impactos a su bienestar para las personas. Quienes defienden derechos
mental, físico y emocional. A continuación, se pre- humanos se diferencian de los líderes y lideresas
sentarán algunos rasgos generales de los perfiles porque los primeros no solo luchan en contra de
de las mujeres entrevistadas, no sin antes diferen- la violación a los derechos, sino que su quehacer
ciar entre los roles de liderazgo y defensa de los abarca más circunstancias. Según el Relator Espe-
derechos humanos. cial de las Naciones Unidas, Michel Forst, estas la-
Para fines de este informe, una lideresa defenso- bores incluyen:
ra de derechos humanos se define como una per-
sona comprometida y reconocida por sus acciones Ayudar a los Estados partes en la elaboración de las
de construcción del tejido social, y cuya incidencia políticas públicas para el cumplimiento de sus obligacio-
busca dignificar de manera positiva y justa la vida nes [...] [los defensores/as pueden ser] padres y madres
de los miembros de su comunidad. El programa So- que buscan el reconocimiento y la inclusión de sus hijos
mos Defensores (2018) retoma la consideración de transgénero, un denunciante que informa de infraccio-
que los líderes y las lideresas son: nes de las normas laborales, un funcionario que enjuicia
a quienes han cometido violaciones de los derechos hu-

El alma de los territorios, son el faro de sus comunida- manos y aquellos que sufren pobreza extrema y priva-

des, son fuente de democracia, son germen de saber an- ción y luchan contra los sistemas de explotación, entre

cestral, hacen parte del cordón umbilical con la tierra […] otros (2018, pp. 7-19).

son la esperanza de paz en la coyuntura histórica que vive


Colombia. Esos hombres y mujeres son esto y mucho más Esto no significa que una lideresa no pueda
[…] su inmenso sacrificio no lo perdonará la Historia (p. 3). ser defensora o viceversa, ya que ambos roles no
son excluyentes. Por el contrario, la comunidad
Es importante señalar que esta referencia par- internacional en voz de la Asamblea General de
te de la diferencia entre lideresa y defensora de la ONU promueve en los Estados y sociedad civil
derechos humanos, toda vez que cualquier perso- la Resolución 53/144 de 1998, mediante la cual
na puede ser líder de un proceso o de una causa, se aprueba la Declaración sobre los defensores
pero esa causa puede no ser necesariamente una de Derechos Humanos y con la cual se destaca la
apuesta por la defensa de derechos humanos; con- existencia de un movimiento mundial en el que
10 Liga Internacional de Mujeres por la Sintonías Corporales: memoria
Paz y la Libertad / Limpal Colombia y resistencia de defensoras, un
seguimiento a la Resolución 1325

todes estamos inmersos, 3 independientemente desde la base, en la exigencia de garantías para que
de las diversas culturas. las comunidades tengan una vida plena en los terri-
torios. La movilización social es el llamado que hace
La paz, siendo otra parte de la cultura, ha incidi-
la ciudadanía para exigir reparación y participar ac-
do en la generación de prácticas y modos no vio-
tivamente de procesos que disminuyan la vulnera-
lentos de gestionar los conflictos que impactan la
ción o no satisfacción de las necesidades básicas:
vida de las lideresas y sus comunidades, también
de supervivencia, de bienestar, de identidad y de
tiene alcances, así como niveles de respuesta di-
libertad. En el movimiento campesino las luchas se
recta, estructural y, por tanto, cultural. Dado que
dan aún por los asuntos de salud y trabajo, servi-
las acciones por la paz han logrado dimensiones
cios y recursos de uso público, generación de espa-
colectivas, quienes defienden los derechos huma-
cios para habitar, extractivismo minero y situación
nos y se ubican en la construcción de paz son un
medioambiental.
grupo social. En línea con las comprensiones de
Iris Marion Young: La mirada de otros movimientos sociales se hace
pertinente para considerar el contexto de este in-
[Los grupos sociales son] una clase específica de colecti- forme. Desde los movimientos por los derechos de
vidad con consecuencias específicas respecto de cómo las los sectores poblacionales LGBTIQ+ se han logrado
personas se entienden a sí mismas y entiende a las demás conquistas como el posicionamiento en la política y
[…] con afinidades específicas debido a sus experiencias o en la sociedad a partir de los desarrollos en mate-
formas de vida similares, lo que lleva a asociarse entre sí ria de reconocimiento y legislación sobre derechos
más que con aquellas otras personas que no se identifican patrimoniales y pensionales, de reasignación sexual
con el grupo o que lo hacen de otro modo (1990, p. 77). en personas trans, atención en centros de salud y
matrimonio igualitario. Sin embargo, todavía que-
Para comprender el movimiento social, debe te- dan retos como la efectiva implementación de estas
nerse en cuenta que son agrupaciones sociales y la normativas, la visibilidad e inclusión de las agendas
interlocución que de allí se hace con la presencia de población transgénero, sectores regionales y, en
y postura del gobierno. Se caracterizan por su vo- general, la puesta en marcha de estas iniciativas en
luntad para movilizar los intereses de un colectivo lo cotidiano.
con el fin de llamar la atención de las figuras de au- El movimiento indígena alcanza ya una trayecto-
toridad gubernamental, el uso de diferentes estra- ria que ronda los 48 años y que ha enfrentado te-
tegias para impulsar la acción política (manifesta- mas como la conformación de grupos armados en
ciones, asambleas, comunicaciones, entre otras) y sus territorios, la persecución y asesinato de perso-
por las demostraciones públicas que dejan claro la nas que fomentan los liderazgos, la organización in-
unidad del movimiento social. dígena a nivel Colombia y representación política, la
Los movimientos sociales se han organizado y ac- capacitación en centros urbanos, la defensa del de-
tuado por la reivindicación de derechos en diversos recho a la tierra como un bien colectivo (Programa
ámbitos. Con más de 45 años de historia, el sentido de comunicaciones del Consejo Regional Indígena
de estas luchas se ha inscrito en la reivindicación del Cauca -CRIC, 2019). De acuerdo con Daniel Mar-
tínez (2016), un ejemplo de lo anterior, son las Guar-
dias Indígenas, quienes realizan intervenciones no
3 Declaración sobre el derecho y el deber de los individuos, los grupos y
violentas como protección de las autoridades y sus
las instituciones de promover y proteger los derechos humanos y las
libertades fundamentales universalmente reconocidos. Recuperado comunidades, implementación de sistemas de aler-
de: https://www.ohchr.org/Documents/Issues/Defenders/Declaration/
ta temprana, interlocución con instancias estatales
declaration_sp.pdf
Introducción 11

e internacionales, ejecución de programas de Edu- más las violencias que se ejercen contra las mujeres tam-
cación para la paz y acompañamiento de procesos bién son diferencias. En la guerra, el cuerpo de la mujer
de retorno son conquistas en la construcción de al- también ha sido visto como un objetivo, como un blanco
ternativas en la gestión de conflictos, pues también para vulnerarlas (párr. 3).
apelan al resto de la comunidad para conservar
el equilibrio en las relaciones, fortaleciendo así la Los movimientos de mujeres integran la plurali-
capacidad colectiva de autonomía, autodetermina- dad colombiana. Se han descrito como un conjunto
ción y protección de la cosmovisión. heterogéneo de diversos orígenes sociales, étnicos
A su vez, las defensoras Afrocolombianas de de- e históricos que comenzó a posicionarse desde la
rechos humanos desempeñaron un papel clave en década de 1970. Durante esta trayectoria se han
la formulación y difusión de disposiciones sobre gé- aliado mujeres de sectores y causas populares,
nero y raza en el Acuerdo de paz; aun así, el hecho sindicales, estudiantiles, movimientos por los dere-
de que el gobierno actual no haya tomado medidas chos a la salud sexual y reproductiva, al acceso de
para implementar dichas disposiciones ha signifi- servicios como el acueducto, educación, los dere-
cado para estas mujeres seguir viviendo en zonas chos laborales, el acceso a propiedad, el derecho a
de conflicto y siendo víctimas de violencias basadas la participación en los espacios de decisión, en favor
en género (Procesos de Comunidades Negras et de la paz, la profundización de la democracia y el
al., 2019). A raíz de esto han surgido movimientos fortalecimiento de la ciudadanía para las mujeres.
como Cuerpo Silenciados,4 proyecto con el que la Frente a este bagaje histórico, las mujeres que
revista digital Vive Afro ha iniciado un trabajo para desempeñan roles de liderazgo y defensa de dere-
visibilizar la labor y las historias de mujeres afro víc- chos humanos deben encarar una serie de riesgos
timas del conflicto armado en Colombia, a través de para su vida, integridad y seguridad en razón de: 1) la
una plataforma interactiva con infografías, videos, existencia de un conflicto armado que agudiza la vio-
podcasts y fotos que cuentan la historia de tres lide- lencia y discriminación contra las lideresas y defen-
resas Afro y su trasegar en defensa de derechos hu- soras, 2) un contexto patriarcal que niega cualquier
manos. En el reportaje de Adrián Atehortúa (2019) transgresión a las normativas de género tradicional-
se documenta el testimonio de Vanessa Márquez, mente asignadas a las mujeres, lo que conlleva un
directora de Vive Afro, quien asegura que este mo- aumento significativo de la violencia en contra de las
vimiento se dio porque lideresas y defensoras de derechos humanos.

Ahora bien, para comprender el papel político de


[…] notamos que había una enorme ausencia de narra-
las lideresas y defensoras en la construcción de paz
ciones sobre mujeres afro en el conflicto y desde todos
es necesario visibilizar la existencia de relaciones de
los lados: población civil, grupos al margen de la ley, el Es-
poder en los territorios y escenarios decisorios de la
tado… Es como si nadie contara sus historias. Vimos que
esfera pública. Para Sandra Barreto Daza (2018), las
era muy necesario generar estos espacios, porque ade-
lideresas y defensoras deben encarar un sistema de
relaciones dinámicas dominados por los intereses
4 Plataforma multimedia que presenta las historias de vida de tres lide- de la fuerza pública, el gobierno nacional, y demás
resas afrocolombianas cuyas labores, dolores y legados han sido poco
reconocidos o enmendados por la sociedad y el Estado Colombiano. actores que se encuentran anclados a una cultura
Ellas son Inis Mosquera, sobreviviente de la masacre de Bojayá; Yolanda patriarcal, que privilegia la voz masculina en el ám-
Perea, lideresa de Riosucio (Chocó) cuyo trabajo beneficia a 300 familias
y 500 niños de su comunidad; y Ana Fabricia Córdoba, una de las lidere-
bito público y político. Esta situación obstaculiza la
sas legendarias del Urabá antioqueño desplazada por los hostigamien- participación y vocería de las mujeres lideresas en
tos y crímenes de las Autodefensas Unidas de Colombia y asesinada en
Medellín en 2011. https://cuerpossilenciados.revistaviveafro.com
12 Liga Internacional de Mujeres por la Sintonías Corporales: memoria
Paz y la Libertad / Limpal Colombia y resistencia de defensoras, un
seguimiento a la Resolución 1325

las agendas de paz porque genera una posición asi-


métrica en los niveles de toma de decisión.

No obstante, esas relaciones de poder no siem-


pre condicionan las acciones ni las estrategias de
las mujeres, pues en la figura de defensora reposan
elementos de poder, así como legitimidad colectiva
que busca alcanzar el goce pleno de los derechos
humanos dentro de sus comunidades y territorios.
Dicho poder surge de las relaciones de confianza,
del reconocimiento que tiene la comunidad sobre la
labor de estas mujeres, de la experiencia que ellas
han obtenido en los escenarios de concertación po-
lítica, de las relaciones de apoyo y de la recupera-
ción con sus familias y colectivos.

A raíz de estas acciones de liderazgo muchas mu-


jeres han quedado expuestas a agresiones físicas,
mentales, emocionales y espirituales que permean
de manera negativa su vida e integridad. Desde el
1 de enero de 2009 al 31 de marzo de 2019 fue-
ron asesinadas más de cien mujeres defensoras de Acción directa no violenta. Conferencia antimilitarista:
derechos humanos, cifras estimadas por el progra- Antimilitarismos en Movimiento 2019 .

ma Somos Defensores. Esto significa que entre el


año 2009 y 2018 se incrementaron los asesinatos
de defensoras en un 433,3%, cifra superior que el micas bélicas del conflicto armado, así como de las
incremento porcentual registrado en el caso de los condiciones de pobreza, corrupción y violencia so-
asesinatos de hombres defensores para el mismo ciopolítica que persisten en los diversos territorios
periodo (379,3%). Si se toma el porcentaje en 2013 del país (2018). Esto se evidenció en el proceso de
como referencia, el incremento de los asesinatos de paz entablado por el gobierno de Juan Manuel San-
defensoras es del 45,5% (Indepaz, 2019). tos (2010-2018) y el grupo al margen de la ley, Fuer-
zas Armadas Revolucionarias de Colombia, Ejército
De cara a las afectaciones en el plano individual del pueblo (FARC-EP), en el que se contó con la inci-
y colectivo, las lideresas han trabajado en coordina- dencia política de mujeres defensoras de derechos
ción con sus comunidades y otros sectores sociopo- humanos para la creación de un acuerdo con enfo-
líticos para visibilizar, denunciar y reparar los hechos que de género y líneas de acción para la protección
de violencia a través de estrategias de incidencia po- de poblaciones históricamente vulneradas y exclui-
lítica que aportan a la construcción de la paz en los das por las dinámicas del conflicto.
territorios. Esto posibilita la transformación de las
En efecto, la firma del Acuerdo de Paz logró visi-
relaciones de inequidad, discriminación y violencia.
bilizar las herramientas psicosociales de resistencia
Según Sandra Barreto Daza es posible afirmar, que las mujeres lideresas y defensoras desarrollan
entonces, que el principal capital político de las li- para enfrentar las múltiples circunstancias y facto-
deresas y defensoras se centra en las acciones de res que les impactan de manera directa e indirecta
resistencia, denuncia y reivindicación de las diná- en el desarrollo de su ejercicio de defensa de dere-
Introducción 13

chos humanos. Según el documento redactado por en particular la violencia sexual, se intensifican en las si-
Patrick Ball, César Rodríguez y Valentina Rozo: tuaciones posteriores a conflictos (2013).5

[...] desde la firma del Acuerdo Final entre el Gobierno y De igual forma, la constante conjunción entre la
las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) búsqueda de la paz y las estrategias de resistencia
en noviembre de 2016, distintas organizaciones han de- en un escenario de violencia y discriminación han
nunciado el incremento de los asesinatos de líderes socia- generado sentimientos de fatiga, problemas de
les. Aunque la firma del acuerdo redujo la letalidad de la concentración, trastornos del sueño, sentimientos
violencia en general, éste implica a su vez nuevas amena- de culpa o desesperanza, aumento de pensamien-
zas derivadas del “reacomodamiento militar de las guerri- tos negativos sobre sí mismas, etc. En consecuen-
llas, el rearme paramilitar y el desgaste de la prolongación cia, las lideresas y defensoras han quedado expues-
de la ofensiva militar del Estado, que no ha podido dar fin tas a situaciones de riesgo que ponen en relieve los
al conflicto (2018, pp. 2- 3). obstáculos que enfrentan para aportar a la cons-
trucción de una paz estable y duradera.
En ese sentido el panorama sociopolítico de Co- Si bien estas mujeres continúan su labor de cam-
lombia dio un giro determinante desde el 2016, año bio y gestión de paz, también han orientado sus li-
en el cual inicia la campaña presidencial para las derazgos alrededor de cuestiones no tradicionales,
elecciones del 2018 y culmina el proceso de paz en- como el acceso a la tierra, los derechos de las po-
tre el gobierno nacional y las FARC-EP. Este nuevo blaciones con orientaciones sexuales e identidades
contexto sociopolítico generó numerosas afectacio- de género diversas, la participación política de las
nes a la vida, integridad y seguridad de las lideresas y mujeres en los niveles decisorios de los procesos de
sus comunidades pues, como se evidencia, el recru- paz, los recursos naturales, los saberes ancestrales,
decimiento de la violencia y la falta de garantías de etc. (Indepaz, 2019).
protección han sido factores determinantes para im-
De manera particular, el protagonismo de las
pactar los procesos organizativos de estas personas.
defensoras y lideresas en la lucha por la tierra y el
En la mirada internacional, la prevalencia de esas territorio se enmarca también en la base del conflic-
situaciones asociadas al escenario de posconflicto to armado en Colombia asentado en la disputa por
ya ha sido verificada en análisis comparado por la titulación, posesión o utilización de la tierra para
múltiples actores internacionales y reconocidos por fines lucrativos de economías mayoritariamente ile-
la Recomendación General N.º 30 del Comité de la gales. Según Carolina Mosquera, Mónica Carmona
Convención sobre la Eliminación de Toda Forma de y Cinthya Carrillo en las cifras entregadas a la cor-
Discriminación contra la Mujer (CEDAW, por sus si- poración SISMA Mujer y la Red Nacional de Mujeres
glas en inglés): Defensoras de Derechos Humanos:

[…] para la mayoría de las mujeres en entornos poste- […] en al menos 7 casos de los asesinatos de defensoras
riores a conflictos, la violencia no termina con el alto el fue- de 2013 a 2019, se registró que realizaban acciones en de-
go oficial o la firma del acuerdo de paz y suele aumentar en fensa de los derechos ambientales y territoriales, oponién-
las situaciones posteriores a conflictos. El Comité reconoce dose en algunos casos a la realización de proyectos minero
que muchos informes confirman que, aunque las formas energéticos (2019, p. 81).
y los lugares de la violencia cambian, lo que quiere decir
que puede que ya no exista la violencia patrocinada por el
Estado, todas las formas de violencia por razón de género,
5 Esta recomendación fue aprobada el 1 de noviembre de 2013.
14 Liga Internacional de Mujeres por la Sintonías Corporales: memoria
Paz y la Libertad / Limpal Colombia y resistencia de defensoras, un
seguimiento a la Resolución 1325

Algunas barreras estructurales que afectan a las Las defensoras de la tierra y los territorios son
defensoras se encuentran en los atentados contra solo un ejemplo dentro del amplio grupo de mu-
los acueductos, los centros de salud, misiones mé- jeres que lideran procesos de exigibilidad ante el
dicas, la siembra de minas antipersonales y las fu- Estado. El común denominador en estos ejercicios
migaciones a cultivos ilícitos y de alimento. Estas re- de exigibilidad está en la respuesta estatal que, ge-
sultan en daños físicos y a su salud mental al alterar neralmente, no solo reproducen violencias desen-
negativamente su acceso al agua potable, atención cadenadas por la obstrucción jurídica a las luchas
hospitalaria oportuna, su movilización segura por de lideresas y defensoras, sino que también contri-
senderos rurales y su suministro de alimentos. Para buyen a la estigmatización por parte de sus comu-
el grupo de Gestión Integrada para la Salud Mental nidades, que con el tiempo se fragmentan. Es decir,
(2014), todas las anteriores son circunstancias que los señalamientos en contra de las lideresas logran
afectan la salud mental de las defensoras, ya que mermar la confianza que tiene la comunidad sobre
provocan sentimientos de desasosiego, temor y an- el liderazgo de estas mujeres porque reproducen
siedad, situaciones de alteración del sueño que por estereotipos discriminatorios que generan rupturas
su duración prolongada llegan a producir un dete- en la cohesión interna y agudiza las tensiones entre
rioro significativo en su vida en comunidad y en su la lideresa y su comunidad.
labor de liderazgo.
En respuesta a eso, las mujeres lideresas y de-
Pese a los daños mencionados, las defensoras fensoras han desarrollado procesos reivindicativos
de derechos humanos han persistido en mantener para erradicar la violencia histórica que ha afectado
una cohesión comunitaria frente a la debilidad insti- sus cuerpos, sus vidas, sus sistemas familiares, los
tucional del Estado para garantizar sus derechos co- territorios en los que se encuentran y sus comuni-
lectivos en el acceso, aprovechamiento y posesión dades. Si bien el presente informe reconoce que el
de tierras. Un ejemplo, es la instauración de mega- carácter multidimensional de la violencia y el con-
proyectos enfocados a la explotación indiscrimina- flicto armado ha generado diferentes estrategias
da de recursos naturales que benefician a empre- de afrontamiento y liderazgo, también señala que
sas o particulares ajenos a las comunidades. A raíz la mayoría de mujeres defensoras han emprendido
de este fenómeno, las defensoras territoriales han acciones de apoyo a la construcción de una paz es-
denunciado el favoritismo y la promoción de rutas table y duradera en un escenario constante de ries-
individuales de acceso, formalización y restitución go, exclusión y estigmatización.
de tierras que ralentiza injustificadamente las rutas
colectivas de participación en programas de imple-
mentación de proyectos productivos, patrocinados
por entidades como la Agencia Nacional de Tierras
(ANT) y la Unidad de Restitución de Tierras (URT)
(Procuraduría General de la Nación, 2018).
Hacia una definición de
afectaciones psicosociales

L
a expresión “afectación psicosocial” se utilizará relaciones íntimas y con la institucionalidad, ruptu-
con fines descriptivos e informativos. Por esta ras en vínculos familiares, las experiencias traumáti-
razón, alude al conjunto de daños psicosocia- cas como el desplazamiento forzado (2014).
les y estrategias de afrontamiento que han surgido
Con respecto a la noción de afrontamientos, Susan
en la experiencia de defensa de derechos. Teniendo
Folkman y Richard Lazarus (1986) tomaron en con-
en cuenta las implicaciones sociales, políticas y cul-
sideración el conjunto de recursos, estrategias y es-
turales del accionar de las lideresas, y que también
fuerzos comportamentales y cognitivos orientados a
resultan impactadas sus relaciones familiares, afec-
resolver la situación amenazante o adversa, a redu-
tivo-eróticas y en sus vínculos con la comunidad, se
cir la respuesta emocional o a modificar la evalua-
hace necesario tomar un posicionamiento ético y
ción que se hace de dicha situación. En el contexto
político sobre lo que entendemos por “daño”, con
sociopolítico colombiano, se han estudiado las es-
el fin de reconocer, así como de señalar el evidente
trategias de afrontamiento de las personas sobre-
impacto que tienen las violencias, agresiones y di-
vivientes a hechos victimizantes, las cuales pueden
námicas en el detrimento de la vida. En palabras de
aumentar el sufrimiento psíquico. Entre las que au-
Martha Bello y Ricardo Chaparro, se debe asumir
mentan, se observa la evitación emocional, la agre-
una comprensión de los mismos como “procesos
sión, la negación de los impactos, el consumo de al-
que vulneran la dignidad humana – afectan negati-
cohol y la distorsión de creencias religiosas. Sobre las
vamente las relaciones satisfactorias desde las que
estrategias que disminuyen, el sufrimiento, se men-
se construye y sostiene el sujeto –, y que conllevan
cionan la reevaluación positiva de la situación, las ac-
a la generación de situaciones de carencia como ne-
ciones para modificar o solucionar los problemas y
gación del sujeto humano digno” (2011, p. 31).
la búsqueda de apoyo social. Sin embargo, para No-
El daño psicosocial ha sido estudiado en las situa- helia Hewitt, Fernando Juárez, Arturo Parada, Jeannie
ciones que justamente vulneran la integridad hu- Guerrero, Yineth Romero, Andrea Salgado y Martha
mana y se ha llegado a distintas reflexiones sobre Vargas (2016), es oportuno resaltar la preocupación
la multiplicidad de formas en que se manifiestan latente que estos estudios han indicado sobre el he-
de acuerdo a la posición de las personas en el en- cho de que continúa una baja percepción de la nece-
tramado social y comunitario. Para Alba Nefer y Án- sidad de atención en salud por estos impactos, a raíz
gela Yadira Hinestroza, algunos daños psicosociales de la habituación frente al contexto de prolongadas
incluyen los estados prolongados de incertidumbre, violencias y de la consecuente relegación de estas
miedo, alteración nerviosa, la disminución en la per- afectaciones al ámbito privado de las personas.
cepción de bienestar, seguridad y confianza en las
16 Liga Internacional de Mujeres por la Sintonías Corporales: memoria
Paz y la Libertad / Limpal Colombia y resistencia de defensoras, un
seguimiento a la Resolución 1325

En este sentido, para efectos del análisis que se Para identificar y comprender
presenta en esta investigación, se utiliza la expre- las afectaciones de las mujeres
sión “afectación psicosocial”, dado que permite re-
lideresas y defensoras desde un
conocer y hablar de los daños o cómo el contexto
impactó a la persona, y también de los afrontamien- planteamiento psicosocial, es clave
tos, o cómo las personas se organizan y agencian recordar que el proceso implica
para impactar su contexto. Para este informe se in- incluir sus identidades y aquello
cluyen entre los afrontamientos todas las acciones que las habita: creencias, opiniones,
colectivas que busquen un restablecimiento de los
experiencias y sentires”.
modos de relación no violentos. De esta manera, se
hace razonable entablar conversaciones con lide-
3. Psico-soma, entendido como el conjunto de ex-
resas y defensoras, quienes son reconocidas como
presiones de sufrimiento o alteración psíquica y
figuras representativas de las comunidades y sus
otras afectaciones psicológicas (estado de ánimo,
procesos de re-existencia.
motivación, alerta, manejo de emociones, proce-
Con respecto al análisis de las afectaciones psi- sos de duelo y daño moral), incluido el deterioro
cosociales, se considerarán las conceptualizaciones de la salud mental y psicosocial de la persona.
planteadas en el texto de Martha Bello y Ricardo
4. Comunidad, se refiere a la dimensión colectiva
Chaparro (2011) acerca de las expresiones del daño
y sociocultural de la lideresa y defensora como
psicosocial. El ejercicio de conceptualización surgi-
parte de un grupo, organización o colectivo.
do de la revisión teórica y de lo comentado en en-
trevistas y grupos focales da origen a las categorías Esta categoría describe las rupturas y uniones
que se utilizarán en el análisis de la información, comunitarias, resistencias, vulnerabilidades y
definidas así: resiliencias gestionadas en conjunto.

1. Identidad, abarca las formas en que la persona Para identificar y comprender las afectaciones de
se refiere a sí misma y cómo es referenciada las mujeres lideresas y defensoras desde un plan-
por otros y otras, junto todas las transformacio- teamiento psicosocial, es clave recordar que el pro-
nes, deconstrucciones, acciones, significados e ceso implica incluir sus identidades y aquello que
interpretaciones relativas a la propia existencia las habita: creencias, opiniones, experiencias y sen-
y proyecto vital, empoderamiento, sensación de tires. Es un contexto de posturas éticas y políticas
libertad o autonomía. La dimensión de identi- en donde es preciso reconocer las violaciones a los
dad es dinámica, es decir, interactúa con el en- derechos de las mujeres y sus comunidades. Dis-
torno, por esto se tendrá en cuenta la identidad tinguirnos como parte de esta realidad social nos
en su expresión individual y social. pone en un lugar de autoidentificación como acto-
res y actoras con varios grados de responsabilidad
2. Cuerpo, comprende el conjunto de significados
sobre su transformación. Del mismo modo, ver las
e interpretaciones dados a lo que le sucede al
cuerpo como organismo vivo y también aspec- particularidades de cada mujer y su comunidad fa-
tos del contexto normativo, activo y discursivo vorece la no patologización ni homogeneización de
que inciden sobre el mismo. Incluye el medio sus vivencias, porque la comprensión en contexto
ambiente (desastres naturales, contaminación permite ver que no existen dos lideresas iguales, ni
del agua y aire, minas antipersona, destrucción dos procesos comunitarios idénticos, ni experien-
de suelos y recursos para la alimentación y su- cias de defensa de derechos que se repliquen.
pervivencia).
Hacia una definición de afectaciones psicosociales 17

Así, es de subrayar que, para una comprensión nes, fundaciones, resguardos, veedurías y uniones,
no polarizada de las afectaciones psicosociales, donde se ha hecho incidencia consistente para que
deben entrar en consideración las estructuras so- la atención de todas las personas se dirija hacia los
ciales, económicas, políticas y todas las dinámicas sectores de la sociedad a quienes se debe proteger.
de concentración de poder e impunidad. También,
Ante estas acciones, las entidades estatales y
según Andrés Bastidas Beltrán (2011), los espacios
agencias institucionales han creado una serie de
o momentos de diálogo que este marco esta-
leyes y programas para proteger la vida, integri-
blece con las alternativas de desarrollo, for-
dad y seguridad de estas personas. Sin embargo,
talecimiento de procesos organizativos,
como se explicará a continuación, los escena-
construcción de escenarios de acceso
rios institucionales son insuficientes e inefi-
a la justicia y la construcción de me-
cientes para brindar un servicio de salud ade-
moria. De acuerdo con Bastidas, el
cuado a las necesidades y especificidades
contexto colombiano se caracteriza
que requieren las mujeres. En ese sentido,
por la tensión de intereses que gene-
el siguiente apartado presentará breve-
ran exclusión social y debilitamiento
mente el entramado jurídico que ha
de procesos de resistencia, reivindica-
desarrollado el gobierno colombia-
ción y esfuerzos coordinados por la jus-
no para atender las situaciones de
ticia social. Todo ello, configura un lugar de
riesgo a las que se ven expuestas
encuentro que las mujeres han reclamado para
las lideresas y defensoras de dere-
generar acciones transformativas. Una de estas rei-
chos humanos.
vindicaciones ha sido la construcción de paz.

Es justamente el lugar de encuentro posibilitado La figura del Estado frente a las


por las coyunturas, bifurcaciones y transformacio- afectaciones psicosociales de lideresas
nes sociales aquello que resulta de interés organi-
y defensoras de derechos humanos
zativo entre los grupos de personas que se perca-
tan de las disonancias y conflictividades y deliberan En lo que respecta a la normatividad, medidas, pro-
conjuntamente para hacer un llamado a la socie- gramas y planes que se encargan de prestar aten-
dad con el fin de reclamar el respeto y cumplimien- ción a las mujeres víctimas de violencias, muchas
to de sus derechos. La interlocución propuesta por entidades de salud, justicia y seguridad desconocen
los movimientos sociales también se da con el Es- protocolos para hacer seguimiento y acompaña-
tado, a través de acciones que expongan las pro- miento, lo que resulta en la revictimización de es-
blemáticas generadas individual y colectivamente, tas mujeres. Uno de los factores que ha incidido en
y se demande una intervención efectiva para su re- que Colombia no tenga una política clara que res-
paración. ponda a las necesidades en materia de salud men-
tal y atención psicosocial es la falta de designación
Dentro de las plataformas de asociación colectiva,
presupuestal para cumplir con esta obligación. En
las personas que abanderan el ejercicio de defensa
2011, cuando se crea la Ley 1448,6 por la cual se
se hacen claves en cada momento del proceso tute-
dictan medidas de atención, asistencia y reparación
lar de los mínimos para la reparación. Un ejemplo
de los logros de la movilización social son aquellos
obtenidos por las y los sobrevivientes del conflicto ar- 6 Ley 1448 de 2011, 10 de junio de 2011. Medidas de atención, asistencia
mado, unidos como organizaciones de víctimas, aso- y reparación integral a las víctimas del conflicto armado interno. Diario
Oficial 48096. Recuperado de: https://www.ictj.org/sites/default/files/
ciaciones, mesas, observatorios, comités, corporacio-
subsites/colombia-linea-tiempo/docs/Ley1448/ley1448.pdf
18 Liga Internacional de Mujeres por la Sintonías Corporales: memoria
Paz y la Libertad / Limpal Colombia y resistencia de defensoras, un
seguimiento a la Resolución 1325

integral a las víctimas del conflicto armado interno, mero inicial de víctimas que dejó el recrudecimien-
entre otras disposiciones, es cuando surge con ma- to del conflicto armado en el marco de la Ley 1448
yor relevancia la obligación del Estado para respon- y, sin embargo, este monto no garantiza la atención
der ante esas necesidades puntuales de las víctimas de todas las víctimas, por lo que se recomienda am-
del conflicto armado. pliar la vigencia de la ley al menos otra década. Lo
mismo sucede con la Ley 1257 que, promovida por
A pesar de que la CEDAW, junto con múltiples or-
más de una docena de organizaciones de mujeres
ganismos internacionales, ha manifestado que “la
en 2008 y tras haberse convertido en un triunfo al
violencia por razón de género relacionada con los
dictar normas de sensibilización, prevención y san-
conflictos genera un amplio abanico de consecuen-
ción de formas de violencia y discriminación contra
cias físicas y psicológicas para la mujer” (2013, p. 16),
las mujeres, al día de hoy no cuenta con respaldo
el más reciente informe del Instituto Kroc de Estu-
del Estado en su implementación, especialmente en
dios Internacionales de Paz (2018) evidencia que la
cuanto a las respuestas requeridas en materia de
falta de presupuesto ha dejado sin cobertura a zonas
prevención y acompañamiento psicosocial.
rurales. Esto genera una respuesta inadecuada a po-
blaciones étnicas por parte del Estado a través del En atención a lo mencionado por Mónica Car-
Ministerio de Salud y la Unidad de Víctimas y otras mona, Cinthya Carrillo y Carolina Mosquera (2019),
comunidades alejadas de los centros poblados. para el caso de la ley 1257, la Defensoría del Pue-
blo a pesar de tener dos programas: un servicio
Si bien estos factores han repercutido en la vida
de asesoría y acompañamiento psicosocial para
e integridad de las personas víctimas del conflicto
mujeres víctimas8 y un Programa de Género del
armado, muchas de ellas ejerciendo un rol de lide-
Sistema Nacional para personas LGBTIQ+, no cuen-
razgo y defensa de derechos humanos no solo en
ta con garantías de acceso a la justicia para muje-
calidad de víctimas se han visto afectadas de ma-
res ni cuenta con información incluyente sobre las
nera exponencial en su salud mental por la falta
rutas de atención para mujeres con algún tipo de
de cobertura y acceso a atención psicosocial pro-
discapacidad que no saben leer o escribir, quienes
fesional. A pesar de que existen mecanismos de
hablan dialectos o lenguas diferentes al españo; lo
atención psicosocial a los que ellas pueden acceder
que duplica los riesgos de enfrentar violencias para
como el Plan Nacional de Rehabilitación Psicosocial
estas mujeres al no recibir atención adecuada y
para la Convivencia y No Repetición que nace de la
oportuna.
Ley 1448 y se establece en el punto 5 del Acuerdo
de Paz, no ha significado mayor respuesta para las
defensoras y lideresas.

En cifras, solo el 20% de víctimas en el Programa


de Atención Psicosocial del Ministerio de Salud han
recibido atención, y cerca de tres millones de perso-
nas aún no son consideradas para formar parte de
dicho programa (Periódico El Espectador, 2018). De
acuerdo a la Comisión de Seguimiento a la Ley de
Víctimas del Congreso de la República se necesitan guimiento-a-la-Ley-de-Victimas-y-Decretos-Leyes-Etnicos-aler-
tan-sobre-aumento-de-nuevos-hechos-de-violencia-y-precisan-qu-
alrededor de $115,97 billones más para cubrir el nú- e-se-requiere-_115_9-billones-para-reparar-a-las-victimas.news
8 El programa funciona con las “duplas de género” (psicólogas, trabajado-
ras sociales y abogadas) 4 en 13 defensorías regionales (Guajira, Atlán-
7 Así lo estima la Procuraduría General en su Boletín 587 de Agosto del tico, Bolívar, Urabá, Antioquia, Caldas, Cundinamarca, Bogotá, Chocó,
2019: https://www.procuraduria.gov.co/portal/-Comisiones-de-se- Valle, Cauca, Arauca y Norte de Santander) (Sisma Mujer, 2016).
19

Aproximación metodológica

L
as bases de este estudio están en la episte- venientes de distintos lugares en el país, con dis-
mología feminista. En línea con las posturas tintos tipos de liderazgo, cuya acción de defensa
éticas y políticas de LIMPAL Colombia, así como es reconocida a nivel público o comunitario, y que
la apuesta internacional (retirar coma) de su agenda comprenden temas que abordan desde los dere-
de incidencia, y en atención a las consideraciones de chos de las mujeres, derechos de las personas con
Norma Blázquez (2012), se asume una aproximación experiencia de vida trans, derechos de los sectores
al saber generado desde y con las mujeres que evi- sociales LGBTIQ+, derecho al agua, derechos de las
ta las formas sistemáticas de silenciamiento de las mujeres negras y derechos de las víctimas de críme-
mismas, para optar por la construcción de signifi- nes de estado. Las defensoras que participaron en
cados en términos de equidad entre las personas las consultas pertenecen a colectivos, plataformas y
involucradas. Estos planteamientos tienen un desa- organizaciones que se movilizan e inciden política-
rrollo previo, que se origina en lecturas feministas mente, por distintas causas dentro del proceso de
críticas de la pretensión de objetividad y universa- construcción de paz desde los territorios. En este
lismo de la ciencia, las cuales han propuesto como orden de ideas, la metodología empleada buscó re-
alternativa una aproximación epistemológica basa- conocer las particularidades y diferencias entre las
da en la idea de Donna Haraway en la que “la obje- defensoras a través de preguntas que nos permitie-
tividad feminista trata de la localización limitada y ran indagar sobre nuestra preocupación central evi-
del conocimiento situado, no de la trascendencia y denciada gracias al trabajo con las mujeres sobre el
el desdoblamiento del sujeto y el objeto” (1995, p. acompañamiento psicosocial a las defensoras.
327). Para Sara Alvarado y Adriana Arroyo Ortega
A nivel individual, la indagación se hizo a través
(2017) este mismo conocimiento situado permite
de entrevistas semiestructuradas las cuales tuvie-
identificar maneras diversas de mirarse, nombrar-
ron dos momentos: el primero, se orientó en co-
se y narrarse desde las contingencias, pluralidades
nocer la lectura que las lideresas tienen sobre los
y contradicciones. Este conocimiento situado del
componentes centrales de la Resolución 1325; el
que parte la investigación permite centrar la rele-
segundo momento, tuvo como objetivo identificar
vancia en la experiencia viva de las mujeres defen-
afectaciones psicosociales vividas por las mujeres a
soras, dotándolas de autoridad en contraposición
raíz de un suceso puntual de vulneración a sus de-
al prisma patriarcal que ha construido conocimien-
rechos o a lo largo de su ejercicio de defensa. Estas
to y experiencia desde el lugar pretendido del suje-
entrevistas se hicieron a siete lideresas y defenso-
to universal masculino, “blanco” heterosexual.
ras en cuatro ciudades y un municipio del país. A ni-
La elaboración del informe de seguimiento se vel grupal, se optó por realizar grupos focales con li-
propuso contar con las voces de defensoras pro- deresas y defensoras en una ciudad y un municipio,
20 Liga Internacional de Mujeres por la Sintonías Corporales: memoria
Paz y la Libertad / Limpal Colombia y resistencia de defensoras, un
seguimiento a la Resolución 1325

psicosomáticos y de la comunidad. Así, el análisis pre-


sentado combina las categorías nombradas con los
aportes de los siguientes enfoques de trabajo:

Enfoque interseccional:
El enfoque interseccional es adoptado por este in-
forme como pauta metodológica clave en el proce-
so de análisis integral de acuerdo con Soledad Valle
(2016) para identificar, describir y comprender los
diferentes ejes de desigualdad, opresión, discrimi-
nación o vulnerabilidad que afectan a las mujeres
líderes y defensoras ubicándolas en situaciones de
riesgo y exclusión social. Este enfoque se basa en
considerar la realidad social como un constructo
plural y diverso, lo cual facilita identificar, no solo la
diversidad de las lideresas y defensoras, sino tam-
bién la diversidad de los impactos y de las capaci-
dades mismas de afrontamiento que desarrollan
desde su lugar social.
Taller sobre Autoestima. San Jacinto, El enfoque implica analizar los mandatos y roles
Bolívar, 2019.
asignados a las mujeres, y normalizados por lógicas
patriarcales, que generan barreras para la inclusión
donde participaron en promedio siete participantes en espacios de participación política, expresadas en
con perfiles que se pueden enmarcar en profesio- términos de edad, clase social, acceso a estudios
nales que apoyan a defensoras desde herramien- formales, etnia, ubicación territorial (rural o urbano)
tas terapéuticas, psicosociales y alternativas para y trabajo (remunerado o no remunerado). En vista
la sanación emocional. Los grupos focales tuvieron de que estas expresiones de normas y mandatos
como propósito orientar las conversaciones hacia constituyen aristas desde donde puede analizarse
las experiencias puntuales que habían generado la desigualdad originadora de conflictos. De esta
afectaciones psicosociales. manera, en palabras de Tomeu Sales Gelabert, el
“objetivo básico del análisis interseccional es abor-
Para evidenciar otras voces, se acudió también dar críticamente los diferentes ejes de poder que
a la revisión de fuentes primarias y secundarias constituyen a los grupos oprimidos y privilegiados
con el fin de ampliar el marco de comprender de de la sociedad” (2017, p. 251).
la problemática desde la literatura y otros estudios
realizados en la materia, siempre bajo la lógica de Por lo anterior, una mirada interseccional permi-
evidenciar los análisis feministas. te plasmar y comunicar los aportes que las lidere-
sas y defensoras hacen como parte del proceso de
La información recolectada se sistematizó uti-
reconocimiento y entendimiento a su liderazgo, así
lizando matrices categoriales que respondieran
como su agencia para avanzar a la aplicación de es-
tanto a la lectura hecha de los componentes de la
trategias. En este caso, de garantías integrales.
Resolución como a las afectaciones psicosociales
categorizadas en aspectos identitarios, corporales,
Aproximación metodológica 21

Enfoque psicosocial: En circunstancias sociales y


El enfoque psicosocial ubica su mirada de aná- políticas de violencia, ha sido
lisis sobre la relación entre el contexto socio- planteado que no solo se estudia el
cultural y las personas, y cómo esto incide so- dinamismo de procesos subjetivos
bre las particularidades psicológicas de estas,
como cognición, emoción y trauma,
es decir, sus pensamientos, emociones y com-
portamientos. En la investigación de derechos
sino que se incorporan al análisis los
humanos, de acuerdo con Carlos Beristain, lazos que éstos tienen con procesos
este enfoque es una herramienta para “valo- sociales, como la amenaza y la
rar el impacto, entender la experiencia de las destrucción”.
víctimas, y prepararse para los desafíos de las
denuncias, los procesos judiciales y los proce- Enfoque territorial:
sos de acompañamiento” (2010, p. 11).
Este enfoque establece que el territorio es un es-
En este sentido, para David Becker y Barbara pacio socialmente construido que va más allá de
Weyermann (2006), el interés del enfoque psicoso- las condiciones físico-biológicas. En consecuen-
cial. En circunstancias sociales y políticas de violen- cia, tal como es mencionado por Julio Berdegué
cia, ha sido planteado que no solo se estudia el di- y Alexander Schejtman (2004), se estudia el te-
namismo de procesos subjetivos como cognición, rritorio. De igual forma, como es señalado por
emoción y trauma, sino que se incorporan al aná- Mariana Calcagni y Valentina Cortínez (2017), el
lisis los lazos que éstos tienen con procesos socia- enfoque territorial permite develar las secuelas
les, como la amenaza y la destrucción. Según Juan que dejó el conflicto armado y las dinámicas de
David Villa, una lectura con perspectiva psicosocial violencia en la vida de mujeres y niñas, ya que se
implica partir de principios como “los de dignidad, ha desconocido o ignorado su agencia como fac-
apoyo mutuo, solidaridad, vida con calidad, enfo- tor clave en la distribución de tierras y el empo-
que de derechos, enfoque de género y desarrollo deramiento de la población. El enfoque territo-
humano integral en salud mental” (2012, p. 353). rial aparece, entonces, como una herramienta de
Por este motivo, la noción de bienestar de este análisis que permite visibilizar el trabajo produc-
enfoque se fundamenta en el conjunto enunciado tivo y reproductivo de las mujeres con respecto a
por Villa de “sintomatologías o trastornos, procesos la tierra y el ambiente, que tradicionalmente han
epidemiológicos, patologías sociales y carencias; sido reconocidos como espacios masculinos y
sino también procesos colectivos, sig- militarizados, partiendo de la reflexión del cuer-
nificados y sentidos, afrontamientos po como primer territorio para las mujeres.
y factores de resiliencia individual y
comunitaria” (2012, p. 354).
Tribunales de la Memoria, Vista Hermosa, Meta, 2018.
01
C ap í t ul o

Agenda de
Mujeres, Paz y
Seguridad de
las Naciones
Unidas:
Resolución
1325

Mural Bolívar, 2016.


24

Da miedo decir “yo soy defensora de derechos humanos” en todos los


espacios, porque yo no sé quién está de acuerdo con ser defensora de
derechos humanos y eso mismo está pasando con esa estigmatización
que desde la institucionalidad se ha venido haciendo.
Defensora, intervención en grupo focal, Meta, 2019.

L
a Resolución 1325 del Consejo de Seguridad encuentran expuestas a sufrir de violencias por la
de las Naciones Unidas es un marco normati- existencia de un conflicto armado, este informe prio-
vo de carácter imperativo que insta a los Esta- rizará la visión y experiencia de lideresas y defenso-
dos miembros a reconocer el papel de las mujeres ras de derechos humanos como sujetos de estudio
en la construcción y consolidación de la paz. Como para el análisis, en tanto son ellas defensoras de
describe Carmen Magallón (2004), fue aprobada derechos humanos, quienes sostienen de manera
el 31 de octubre del año 2000, exhorta al Secreta- estructural los procesos comunitarios posacuerdo
rio General de las Naciones Unidas y a los Estados y agencian nuevas posibilidades de transformación
miembros a ejecutar las siguientes acciones: de las disputas armadas en los territorios. Entendido
esto, el presente capítulo abordará la relación entre
• Garantizar la participación de las mujeres en los
los componentes de la Resolución 1325 y las afecta-
niveles decisorios de los procesos de paz.
ciones psicosociales que permean la vida y seguri-
• Articular la perspectiva de género a la agenda
dad de las mujeres líderes y defensoras. Para ello se
de paz.
presentará a continuación una breve descripción de
• Crear medidas para proteger las mujeres en
los indicadores de cumplimiento que fundamentan y
los conflictos armados y en las situaciones post
responden al marco normativo de la 1325.
bélicas.
• Hacer transversal el enfoque de género en la
Indicadores de cumplimiento para la
recolección de datos y sistemas de información
Resolución 1325
de Naciones Unidas, así como en la puesta en
práctica de los distintos programas. En abril de 2010 se presentó al Consejo de Segu-
ridad de las Naciones Unidas una propuesta para
Conforme a estas disposiciones surge la Agenda
instaurar una serie de indicadores que permitan su-
internacional de Mujeres, Paz y Seguridad, la cual
pervisar la implementación de la Resolución 1325
logra poner de relieve los compromisos acordados
en los Estados miembros. Según Dora Díaz, Susana
en la Plataforma de Acción de Beijing de 1995, el
Ortega, Patricia Prieto y Sonia Zabala, en octubre de
Protocolo facultativo de la CEDAW en 1999 y otras
ese mismo año se logró la aprobación de 26 indi-
herramientas internacionales que buscan aumen-
cadores para “determinar de qué manera se están
tar la participación de las mujeres en la prevención,
alcanzando los resultados previstos en relación con
gestión y solución de los conflictos armados.
las temáticas que involucran las resoluciones sobre
Si bien la Resolución 1325 habla de medidas de mujeres, paz y seguridad” (2012, p. 46). Los indica-
protección, y prevención a mujeres y niñas que se dores se agruparon en cuatro componentes:
01 Agenda de Mujeres, Paz y Seguridad de
las Naciones Unidas: Resolución 1325
25

evalúa la respuesta institucional para enfren-


tar las violaciones de derechos a las mujeres y
niñas durante los conflictos en los procesos de
cesación del fuego, las negociaciones de paz y
después de los conflictos. Desde las Naciones
Unidas se evalúa el número de mujeres que
son comisionadas en los órganos nacionales de
derechos humanos, también, el porcentaje de
casos denunciados de explotación y abuso se-
xual en cada país. De igual forma se pide a los
Estados miembro que desarrollen disposiciones
para atender las necesidades y los problemas
concretos de las mujeres y niñas en los siste-
mas de alerta temprana y los mecanismos de
prevención de conflictos.

3. Protección: Por medio del énfasis en la necesidad


de garantizar la protección a la vida, integridad
y seguridad de todas las personas sin excluir o
discriminar por razones de género, las Naciones
Mural 8 de marzo, 2018, Meta.
Unidas piden a los Estados miembros que pro-
vean la seguridad, la salud física y mental de las
mujeres y niñas, y el pleno respeto de sus dere-
1. Participación: Buscar medir la incorporación de
chos humanos. Para ello es necesario que los
las mujeres y sus intereses en los niveles deci-
Estados creen y apliquen leyes que respeten los
sorios de los procesos de culminación y gestión
derechos políticos, económicos, sociales y cul-
de conflictos, así como evaluar en qué medida
turales de las mujeres y niñas, de conformidad
las mujeres participan en la concertación de
con las normas internacionales. De igual forma,
los acuerdos de paz. Para lograrlo, el Consejo
los Estados deben tener mecanismos y estruc-
de Seguridad de las Naciones Unidas exige a los
turas operacionales para reforzar el control de
Estados miembro que brinden mayor represen-
armas pequeñas y armas ligeras que ponen en
tación y participación a las mujeres en los pro-
riesgo la seguridad e integridad de las personas.
cesos de paz como mediadoras, negociadoras
Finalmente, la ONU pide que los Estados cuen-
y expertas técnicas en negociaciones oficiales.
ten con servicios de apoyo y acceso a la justicia
Asimismo, pide mayor participación en el go-
por parte de las mujeres cuyos derechos han
bierno nacional y local, como ciudadanas, fun-
sido vulnerados.
cionarias electas y miembros en la toma de de-
cisiones. 4. Socorro y recuperación: Se preocupa por las ne-
cesidades particulares de mujeres y niñas, en
2. Prevención: Busca medir las previsiones del Es-
especial las relacionadas con el acceso a los
tado para evitar cualquier forma de violencia o
servicios de salud, educación y atención, en-
vulneración a los derechos de las mujeres y ni-
tendiendo que el conflicto armado puede exa-
ñas, al destacar los temas relativos a violencia
cerbar la violencia y obstaculizar la plena sa-
sexual y violencia basada en género. También,
tisfacción de estos servicios. De acuerdo con
26 Liga Internacional de Mujeres por la Sintonías Corporales: memoria
Paz y la Libertad / Limpal Colombia y resistencia de defensoras, un
seguimiento a la Resolución 1325

las Naciones Unidas, este componente evalúa La participación de lideresas y


los programas de socorro y recuperación a las defensoras en el proceso de paz
mujeres y niñas, especialmente de los grupos
Históricamente las mujeres lideresas y defenso-
vulnerables (desplazadas internas, víctimas de
ras de derechos humanos se han preocupado por
la violencia sexual o la violencia basada en el
las asimetrías o desequilibrios en su participación
género, excombatientes, refugiadas y mujeres
política dentro de los espacios de la esfera públi-
que regresan). Se evalúa el grado de transver-
ca, pues la presencia y representación de hombres
salización del enfoque género en las institu-
y mujeres en los poderes del gobierno no ha sido
ciones establecidas después de los conflictos
paritaria. Por tal motivo, las lideresas y defensoras
y los procesos de justicia, transición, reconci-
han entablado una agenda de resistencia e inciden-
liación y reconstrucción. También, evalúa que
cia política para instar al Estado Colombiano a que
los programas de desarme, desmovilización y
garantice participación efectiva a las mujeres defen-
reintegración tengan en cuenta las necesidades
soras, en el diseño e implementación de los acuer-
particulares de las agentes de seguridad, las ex-
dos de paz, con el fin de reconocer los problemas
combatientes, las mujeres y las niñas asociadas
de desigualdad y discriminación acentuados por el
con los grupos armados.
conflicto armado.
De acuerdo a lo anterior, el presente informe se
Si bien las defensoras han luchado por eli-
servirá de la Resolución 1325 como marco normati-
minar las asimetrías en los niveles deciso-
vo para elaborar reflexiones acerca de las
rios de la política colombiana, y en
afectaciones psicosociales de mujeres
especial las asimetrías en los pro-
defensoras de derechos humanos, que
cesos de paz, también han tenido
han tenido que afrontar grandes obs-
que enfrentar múltiples obstáculos
táculos en su labor, por prejuicios, estig-
para posicionar sus estrategias de lucha y resis-
matizaciones y faltas de garantías a la pro-
tencia. Como se ha mencionado antes, la violencia
tección de sus derechos. Al ubicar sus testimonios
estructural presente en la sociedad colombiana ha
como centro del análisis se pretende evidenciar los
naturalizado el señalamiento y la estigmatización
daños psicológicos, físicos, mentales y emocionales
de las lideresas y defensoras por desempeñar una
que afectan su vida e integridad en clave de la Re-
labor tradicionalmente masculina y por salirse de
solución 1325.
los estándares de la esfera privada. Estas dinámicas
Gracias al entendimiento de que el ejercicio de la patriarcales terminan por obstaculizar el ejercicio
defensa de derechos humanos es una práctica inte- pleno de participación, pues genera serias afecta-
gral que desarrollan las mujeres en favor de la paz, ciones a la salud mental, emocional y física de estas
este apartado del informe busca visibilizar algunas personas.
de las relaciones entre las afectaciones psicosocia-
A partir de ese escenario es posible afirmar que
les de las lideresas entrevistadas y la participación
la participación política en los procesos de cons-
en espacios de toma de decisión, la prevención de
trucción de paz sigue siendo un derecho que no es
violencias y la protección en el marco de la cons-
suficientemente garantizado para las lideresas y de-
trucción de paz. Todo esto en línea con la Resolu-
fensoras de derechos humanos. De hecho, cuando
ción 1325 y la agenda internacional de mujeres, paz
una mujer llega a los espacios de representación o
y seguridad.
mesas de diálogo enfrentan no solo los obstáculos
estructurales de la participación para las mujeres,
01 Agenda de Mujeres, Paz y Seguridad de
las Naciones Unidas: Resolución 1325
27

asociados a la permanencia de patrones patriar- En Colombia, se evidencia la


cales y machistas que vetan el ejercicio político y poca voluntad del gobierno
ciudadano de la representación en las experiencias
actual, de Iván Duque, por avanzar en
de las mujeres, sino otros obstáculos que provie-
nen del reconocimiento de sus agendas y apuestas
la implementación del Acuerdo Final y,
como válidas para la transformación social, una en particular, con las medidas creadas
estigmatización que aún prevalece sobre la poca para fomentar la participación política
pertinencia de las experiencias así como las habi- de las mujeres en el posconflicto”.
lidades de las mujeres para acercarse a construir
escenarios de diálogo que recojan y beneficien a las
comunidades en general. falta de un Estado garante de la participación de
Esta situación ha desencadenado emociones ne- las mujeres se evidencia principalmente en el poco
gativas como el estrés, la desilusión, la tristeza, la avance de las políticas públicas que, aunque no son
depresión, al igual que cualquier otra emoción que la solución a todos los asuntos estructurales que
surge en situaciones con poco o nulo reconocimien- afectan a las mujeres, son la respuesta mínima que
to a su rol político de liderazgo. Así lo explica una de se espera del Estado.
las lideresas entrevistadas: En Colombia se evidencia la poca voluntad del go-
bierno actual, de Iván Duque, por avanzar en la im-
Los obstáculos (a la participación) pienso que aún per- plementación del Acuerdo Final y, en particular, con
siste la violencia de género, la inseguridad y el miedo en las medidas creadas para fomentar la participación
algunos sectores. Para las mujeres supone mayor zozobra, política de las mujeres en el posconflicto. Como se-
además todo esto acontece en territorios donde el conflic- ñala el Instituto Kroc, en su lugar, se encuentra con:
to de otra manera, de otros aspectos sigue presente y que
para las mujeres puede tornarse más paralizante. Otro […] bloqueos y/o retrasos en la implementación, tales
obstáculo tiene que ver con la poca oferta laboral [...] pasa, como la no aprobación de las circunscripciones transito-
por ejemplo, unos niveles económicos y las mujeres a ve- rias especiales de paz, o de la reforma política electoral
ces por su falta de empoderamiento acorde a las exigen- que busca ampliar la democracia entre los partidos políti-
cias del momento, frente a estas carencias de lo mínimo cos, garantizar la financiación en igualdad de condiciones,
frente a estos recursos económicos crea dependencia y la mejorar la mecánica electoral y fomentar la participación
dependencia genera sometimiento. Otro obstáculo tiene política de las mujeres, entre otras cosas (2019, p. 4).
que ver con niñas y jóvenes que han sido sometidas se-
xualmente simplemente porque en la casa no está la olla De ese modo, las defensoras y lideresas deben
en el fogón, no está el plato de comida. Entonces todo esto encarar numerosas dinámicas patriarcales y he-
también se convierte en obstáculos en unos determinados gemónicas que obstaculizan el goce pleno de los
momentos (Lideresa, comunicación virtual, 2019). derechos sociales y políticos y que se suman a los
elevados niveles de violencia sociopolítica predomi-
De esa manera, la participación de las lideresas nantes en los territorios del país. No obstante, este
y defensoras se encuentra permeada por prácti- panorama no ha frenado las acciones de incidencia
cas machistas que reproducen mandatos sociales y resistencia en la agenda de paz, pues en la mayo-
de género discriminatorios y excluyentes que se ría de casos los obstáculos son un motor para con-
suman, en algunos casos, a prácticas racistas y cla- tinuar con su labor de liderazgo y defensa de de-
sistas que demeritan la labor de las defensoras. La rechos humanos. De hecho, durante el proceso de
28 Liga Internacional de Mujeres por la Sintonías Corporales: memoria
Paz y la Libertad / Limpal Colombia y resistencia de defensoras, un
seguimiento a la Resolución 1325

diálogo entre el Gobierno de Juan Manuel Santos Es importante señalar que el


como vocero del Estado Colombiano y FARC - EP, las Acuerdo Final dispuso en el
mujeres constituyeron el 33% de los negociadores
punto 2 los mecanismos y medidas
de paz en La Habana (Cuba), el 3%, mediadoras y el
2% signatarias. Esta participación de las mujeres, se
para garantizar la participación
alcanzó tras un amplio proceso de incidencia nacio- de movimientos y organizaciones
nal e internacional, para cumplir con los principios sociales, reconociendo la necesidad
de participación de la Resolución 1325, entre otras. de garantizar la convivencia, la
Esto logro alcanzado en el proceso de paz, elevó tolerancia y la no estigmatización
las cifras internacionales de participación de las mu- para el fortalecimiento democrático y
jeres en acuerdos de paz, pero para las mujeres en
participativo del país”.
Colombia no solo significó el aumento de un porcen-
taje sino que mostró que las propuestas de las muje-
res más allá de la transversalización del enfoque de democrático y participativo del país. Frente a este
género, en línea con el fortalecimiento organizativo tema, el Instituto Kroc (2019) en su labor de Apoyo
territorial, una realidad que vienen construyendo Técnico al componente de verificación del Acuerdo
desde las apuestas cotidianas, solidarias y comuni- Final, afirma que se ha avanzado en algunas garan-
tarias en los territorios. Así lo declaró una de tías para la participación, como la aprobación
las lideresas entrevistadas: del Estatuto de la Oposición, el despliegue
preventivo de medidas de fortalecimiento
Modestamente puedo decir que, de alguna a la judicialización, el Plan de Acción Opor-
manera, en este trasegar y caminar se ha facili- tuna de prevención y protección para los
tado y lo hemos hecho de manera colectiva, ¿no? defensores de derechos humanos, líderes
No con los resultados que añoramos, pero sí en el sociales, comunales y periodistas (PAO). Asimis-
despertar de la conciencia frente a la participación mo, el Instituto Kroc insiste en que se ha fortale-
plena de las mujeres, y esto lo hemos hecho a través cido la participación de líderes/as y defensores/as
de los diferentes talleres, los diplomados tanto con jóvenes en los programas de desarrollo con enfoque territo-
como las mujeres que ya van perfilando como una opción rial (PDET), ya que:
a la participación. Entonces como en esos diferentes ciclos
de la vida hemos ido perfilando que para esa participación Se han adelantado asambleas con líderes y comunidades
es garantía pasar por unos procesos formativos es garan- de más de 11 000 veredas de los 170 municipios más golpea-
tía el calificarlo, por un lado, por el deber hacer, pero, por dos por el conflicto armado, a través de 1 630 pre asambleas
otro lado, porque las exigencias para nosotras las mujeres veredales, incluyendo 305 consejos comunitarios, 452 res-
es mucho más reñido que para los hombres, entonces la guardos indígenas, 6 zonas de reserva campesina; además
respuesta es sí (Lideresa, comunicación virtual, 2019). de organizaciones sociales, territoriales, étnicas, de mujeres,
LGBTI, ambientales y productivas de los 16 territorios priori-

Finalmente, es importante señalar que el Acuer- zados, alcaldes de los 170 municipios y sus gobernadores, cá-

do Final dispuso en el punto 2 los mecanismos y maras de comercio, gremios y empresas de estos territorios.

medidas para garantizar la participación de movi- Al 13 de diciembre de 2018, habían participado alrededor de

mientos y organizaciones sociales, reconociendo la 147 499 personas, de las cuales el 41% (61 054) son mujeres.

necesidad de garantizar la convivencia, la toleran- Estas personas han participado y aportado en la construc-

cia y la no estigmatización para el fortalecimiento ción de una visión de futuro compartida y una serie de inicia-
01 Agenda de Mujeres, Paz y Seguridad de
las Naciones Unidas: Resolución 1325
29

tivas de desarrollo regionales, municipales y veredales que


La prevención de conflictos: una
buscan alcanzar dicha visión. Ahora el reto es comenzar la
implementación de esas iniciativas (2019, p. 38).
mirada a la seguridad de las
lideresas y defensoras de DDHH
No obstante, el Instituto Kroc, haciendo eco de Ante el panorama actual de agresiones, persecucio-
las advertencias realizadas por las organizaciones nes, asesinatos y demás formas de violencia contra
de mujeres, señala que son más los retos que los líderes/as y defensores/as de derechos humanos, la
avances que ha tenido el gobierno nacional en la comunidad internacional ha pedido al Estado Colom-
implementación del punto 2 del Acuerdo Final. Esto biano que no desconozca “su deber de garante de la
se debe a la fragmentación de las propuestas le- vida e integridad de las personas defensoras, puesto
gislativas y la falta de voluntad política para desa- que esto implica una omisión flagrante de sus de-
rrollar la ley de garantías y promoción de la parti- beres, contemplados en la Declaración de Naciones
cipación ciudadana: la Reforma Política y Electoral, Unidas sobre defensores de derechos humanos de
y Circunscripciones Especiales Transitorias de Paz. 1998, entre otros” (2018, p. 5), ante lo cual insta al
Igualmente, según el Instituto Kroc (2019) los altos gobierno de Iván Duque (2018-actualidad) para que
índices de violencia política y social, la polarización implemente medidas integrales de protección y pre-
y la estigmatización durante el período electoral de vención para culminar con la ola de violencia.
2019 han afectado los niveles de participación en la
Aunque el presente informe dedicará una sección
medida en la que no se cuenta con las garantías de
en el capítulo dos para abordar algunos elementos
protección para el ejercicio democrático.
en mayor detalle sobre la prevención de violencias
Partiendo de este panorama las defensoras y a lideresas y defensoras de derechos humanos, es
lideresas han desafiado la violencia estructural y importante recordar que el Estado colombiano debe
patriarcal que obstaculiza el goce pleno de sus de- garantizar la vida, seguridad, e integridad de quienes
rechos en la esfera pública, a través de acciones de defienden derechos humanos a través de estrate-
resistencia e incidencia política en los niveles deci- gias integrales que prevengan la violencia más allá
sorios del gobierno nacional. Una de estas estrate- de respuestas militarizadas, como un guardaespal-
gias corresponde a la apropiación y exaltación de das, un carro blindado, un chaleco antibalas, etc. El
la Resolución 1325 como un marco normativo em- Estado colombiano en el 2012, promovió la Resolu-
pleado por organizaciones de mujeres, feministas ción 805 reconoce por primera vez las necesidades
y defensoras de la paz para exigir el cumplimiento especiales de prevención y protección de las muje-
de los derechos humanos y fomentar una sociedad res, lo que se sumaba al pronunciamiento del Auto
democrática, participativa e incluyente. 098 de 2013 de la Corte Constitucional colombiana
En ese sentido, la Resolución 1325 ha sido un en la materia que señalaba la necesidad de:
mecanismo de presión para empoderar y fortalecer
los procesos de participación, gestión y acción de La adopción de medidas concretas para favorecer un
defensa en territorios, ya que reconoce los efectos entorno institucional favorable a la labor de las defenso-
desproporcionados de la guerra, y fomenta el papel ras de derechos humanos. Para ello, la Sala encuentra que
de las mujeres como constructoras de paz. las entidades competentes deben detectar y tomar co-
rrectivos pertinentes para evitar las actitudes y prácticas
discriminatorias o despectivas en contra de las defensoras
de derechos humanos en los que puedan incurrir funcio-
narios y funcionarias del Estado; incentivar la labor de las
30 Liga Internacional de Mujeres por la Sintonías Corporales: memoria
Paz y la Libertad / Limpal Colombia y resistencia de defensoras, un
seguimiento a la Resolución 1325

mujeres defensoras de derechos humanos a través de y defensoras de derechos humanos; y (c) La gestión
campañas públicas que legitimen su labor; adelantar pro- institucional del riesgo con enfoque de género y de-
gramas formativos en derechos humanos de las mujeres a rechos de las mujeres, integrando una perspectiva
todos los funcionarios que, en el marco de sus funciones étnica y diferencial” (Consejería Presidencial para la
legales o constitucionales, deban atender a las mujeres lí- Equidad de la Mujer, 2018, pp. 29-30). Poner en mar-
deres víctimas del desplazamiento forzado.9 cha una respuesta integral, entonces, debe centrarse
en mecanismos de prevención estructural, es decir,
En esta medida, la prevención debe estar enca- no basta con emitir decretos y resoluciones en ma-
minada a evitar discriminaciones, estigmatizaciones teria de prevención y protección a los/as líderes/as y
y cualquier forma de violencia que afecte la vida y defensores/as. Es necesario priorizar un enfoque de
seguridad de las defensoras, sus comunidades y te- derechos para crear e implementar políticas públi-
rritorios. Para ello, es necesario un diálogo articula- cas encaminadas a la prevención. De no cumplir con
do con instituciones locales, departamentales y na- estas medida, se corre el riesgo de exponer a las li-
cionales que brinden un análisis de los factores que deresas y defensoras a ser víctimas de múltiples for-
generan violencia y respondan de manera inmediata mas de violencia, entre las cuales destacan la violen-
a las alertas tempranas emitidas por la De- cia sexual y la violencia basada en género.
fensoría del Pueblo, así como los riesgos Según el Instituto de estudios para el de-
identificados por las lideresas y defensoras sarrollo y la paz (Indepaz), en el año 2016
de derechos humanos. se registró un caso de violación sexual a
En el marco del Proceso Nacional de Garantías una defensora de los derechos humanos,
para la labor de Defensores de Derechos Huma- mientras que en el 2017 se registraron
nos, Líderes Sociales y Comunales, iniciado en seis casos, representando un incremento
2009, se han dado esfuerzos coordinados en- de 500% respecto al año anterior; para el
tre las plataformas de Derechos Humanos, Paz año 2018 se reportan cuatro casos de vio-
y Democracia articuladas en el Techo Común10, el lencia sexual contra defensoras de derechos
Programa Presidencial de Derechos Humanos, la co- humanos y un caso contra una mujer que ejerce
munidad internacional y con el liderazgo del Minis- actividades políticas. Finalmente, para el primer tri-
terio del Interior y Justicia. Gracias a este escenario, mestre de 2019 el Instituto registró tres casos de
se ha formulado el Programa Integral de Garantías presunto delito sexual contra defensoras de dere-
para Mujeres Lideresas y Defensoras de Derechos chos humanos, lo cual llama la atención por cuanto
Humanos (reglamentado en la Resolución 0845 de es casi la totalidad de casos del año anterior. Más
2018) el cual indica que “se requieren acciones ins- allá de las cifras y el aumento significativo de los
titucionales dirigidas a: (a) Fortalecer los liderazgos casos de violencia sexual por año, lo que evidencian
de las mujeres, sus organizaciones y su articulación estos datos es la falta de mecanismos eficientes de
con el movimiento social; (b) El reconocimiento y res- prevención para mitigar y erradicar los patrones de
paldo público de la labor que cumplen las lideresas violencia sexual que prevalecen en las victimizacio-
nes a defensoras de derechos humanos.

9 Corte Constitucional de Colombia (2013). Relatoría Auto 098 de 2013,


Esto representa un riesgo a la seguridad, vida e in-
M.P. Luis Ernesto Vargas Silva. Recuperado de https://www.corteconsti- tegridad de las mujeres líderes y defensoras de dere-
tucional.gov.co/relatoria/autos/2013/a098-13.HTM
chos humanos, que se suma a las complejas afecta-
10 El Techo Común está conformado por la Asamblea Permanente de la
Sociedad Civil por la Paz, la Plataforma Colombiana de Derechos Huma- ciones emocionales que van degenerando su salud
nos, Democracia y Desarrollo, la Alianza de Organizaciones Sociales y
mental y física. Tal y como lo refleja el siguiente tes-
Afines y la Coordinación Colombia – Europa – Estados Unidos.
01 Agenda de Mujeres, Paz y Seguridad de
las Naciones Unidas: Resolución 1325
31

timonio, las agresiones sexuales no solo impactan la a cuestiones de trabajo y a pasear al perro de noche y en
vida de la víctima, sino que acentúa los sentimientos la mañana temprano porque lo tengo que sacar y a hacer
de debilidad, rabia o algún tipo de patología como mercado, porque hay mercado por internet y me traían las
trastornos depresivos a las defensoras que trabajan cosas que no eran… entonces me tocó, pero yo sí desarro-
con poblaciones víctimas de este delito: llé mucha misantropía, yo prefiero estar en mi entorno, mi
espacio o encerrada en la oficina cuando tengo que ir a la

Para mí, el reto aquí en el Meta es esclarecer que hubo oficina, o en alguna reunión (Lideresa, comunicación per-

demasiada violencia sexual, que las mujeres las cogieron sonal, 2019).

como objeto de guerra, sino que se ha tenido todo muy ca-


llado no han podido denunciar muchas porque los mismos En suma, los procesos de autocuidado enten-
maridos le prohíben. Aunque este trabajo es demasiado pe- didos como el conjunto de actividades desde las
ligroso hay veces uno sufre unos desequilibrios emociona- que se puede hacer una revisión personal y una
les tenaces. Por ejemplo, nos hemos encontrado unos casos reflexión sobre la manera en la que se desarrolla
que nos retroceden las víctimas de violencia sexual jamás la defensa de los derechos humanos intentando
se curan porque está uno tranquilo y se encuentra con los concretar en lo cotidiano nuestros discursos a favor
mismos casos y esas vivencias lo ponen a uno a llorar lo de la vida de las personas. Esto, con el ánimo de
quebrantan eso es tenaz y yo digo que los defensores de reconocer que los espacios de trabajo en los que las
derechos humanos estamos amenazados psicológicamente defensoras desarrollan su labor, en muchas ocasio-
terminar locos o chiflados (Defensora del Meta, comunica- nes, también están permeados por una cultura ma-
ción presencial, 2019). chista, patriarcal, de explotación o autoexplotación.

Esta reflexión desde el autocuidado como centro,


Estas manifestaciones no solo dan cuenta de permite reconocer también la necesidad de espa-
los daños en la salud física y mental que deja una cios para distraerse, desahogarse, renovarse y for-
agresión sexual en la víctima y defensora, también talecerse que permiten, además, identificar que, en
demuestra las deficiencias estructurales en las me- muchas ocasiones, por el nivel de cansancio y des-
didas de prevención y protección que tiene el Esta- gaste de las defensoras, en momentos de riesgo,
do para garantizar la seguridad y protección de los no han podido percibir diversos incidentes de se-
derechos humanos en Colombia. guridad o se han expuesto más de lo necesario. En
Ante la debilidad institucional para prevenir las general, los ritmos de trabajo de las defensoras fa-
múltiples formas violencias que afectan la vida de las cilitan situaciones de elevado estrés y otros estados
lideresas y defensoras, las mujeres han optado por de ánimo que afectan las dinámicas de afectividad y
crear estrategias de cuidado colectivo o individual relación dentro de las organizaciones y, en general,
como un recurso propio que contribuye a la creación generan conflictos con las personas del entorno11.
de un espacio seguro para ellas y sus comunidades.
Esto se ve reflejado en el siguiente testimonio: 11 Tomado de la Guía de Acompañamiento Casa la Serena (2016, pp. 6-7) En
el 2016, la IM-Defensoras y Consorcio Oaxaca, crearon Casa La Serena,
un proyecto de estancias temporales para mujeres que pertenecen
Vivo muy prevenida, yo tengo unos procesos de pre- a alguna de las redes nacionales de defensoras que se han creado
en Honduras, Guatemala, El Salvador, Nicaragua y México. Dichas
vención altísimos y yo creo que eso me ha generado una estancias tiene como objetivo abonar a la recuperación, sanación,
misantropía que yo prefiero estar en mi espacio en mi descanso y reflexión de defensoras de derechos humanos que atra-
viesan por situaciones de cansancio extremo, desgaste emocional o
entorno en mi sitio seguro a salir, yo salgo cuando tengo
físico, crisis personales, duelos, pérdidas u otros impactos derivados
que salir e interactuar con la gente cuando tengo que in- del contexto de violencia y la cultura patriarcal, que dificultan y obs-
taculizan su labor de defensa. http://im-defensoras.org/wp-content/
teractuar, yo prácticamente últimamente salgo solamente
uploads/2019/04/casaserenaweb.pdf
32 Liga Internacional de Mujeres por la Sintonías Corporales: memoria
Paz y la Libertad / Limpal Colombia y resistencia de defensoras, un
seguimiento a la Resolución 1325

Desde esta perspectiva, los mecanismos de pre- a las agresiones contra defensoras y lideresas en el
vención no se limitan a las previsiones del Estado período posterior a la firma del acuerdo, así como
para evitar cualquier forma de violencia o vulne- de que los grupos de mujeres más vulnerables, en
ración a los derechos de las mujeres y niñas, tam- particular las mujeres afrocolombianas, indígenas,
bién comprenden los procesos de reconocimiento, rurales, lesbianas, bisexuales y transgénero, y las
afrontamiento y resistencia que busca el empode- mujeres con discapacidad, quienes deben ser prote-
ramiento individual y colectivo de las lideresas y gidas de manera diferencial e integral.
defensoras para sobrellevar las cargas emocionales
de su labor. De igual forma, varias de las entrevis-
tadas manifestaron que la prevención no solo debe
contemplar medidas para eliminar la violencia di- El impacto multidimensional de la
recta tal como asesinatos, torturas, desapariciones, violencia en la vida de las defensoras:
violaciones sexuales, etc. También debe abordar los escenarios de protección
herramientas para erradicar la violencia estructural En diciembre de 2013 se creó en la Asamblea Ge-
que reproduce estigmatizaciones y discriminacio- neral de las Naciones Unidas la Resolución por la
nes en contra de las personas que ejercen un rol Protección de las Defensoras de los Derechos Hu-
de liderazgo y defensa en la sociedad colombiana. manos y las Personas Defensoras de los Derechos
Para ello se debe trabajar en las desigualdades, las de la Mujer como un referente internacional para
asimetrías y exclusiones de mujeres en la esfera pú- reconocer los riesgos a los que se exponen las lide-
blica y privada. Así lo expresó una de las mujeres resas y defensoras en contextos de conflicto arma-
entrevistadas: do interno. Reconociendo que las mujeres defen-
soras son figuras clave en la construcción de paz,
Y la seguridad no solamente en un sentido en que yo no justicia, e igualdad, la Resolución exige a los Estados
vaya a recibir algún tipo de agresión. La seguridad en que miembros que adopten programas concretos con
yo me sienta libre en cualquier espacio, [...] bueno, en mi una perspectiva de género para la protección inte-
caso yo no tengo problema, porque ya la gente me conoce gral de estas mujeres.
por mi trabajo, pero …. Esa persecución … esa estigmatiza-
De esta manera, la comunidad internacional ins-
ción … esos imaginarios que recaen sobre muchas mujeres
ta al Estado colombiano a proteger la vida, inte-
(Lideresa, comunicación personal, 2019).
gridad y seguridad de las mujeres que emprenden
acciones de defensa y liderazgo. En la reciente vi-
Adicionalmente, la prevención debe tener un en- sita a Colombia, del señor Relator para Defensores
foque diferencial, étnico, interseccional que, de cara y defensoras de derechos humanos de Naciones
a la diversidad de identidades de género, orientacio- Unidas, constató los numerosos ejemplos de falta
nes sexuales, ubicaciones geográficas, edades, nive- de respuesta o de medidas de protección insufi-
les económicos y demás factores que confluyen en cientes para los defensores y defensoras de de-
las comunidades y que son importantes para respe- rechos humanos en áreas rurales o remotas. Así
tar la dignidad de estas personas. También, el Comi- mismo, reconoció que el enfoque del programa de
té de la CEDAW advierte que ignorar la multiplicidad protección existente tiene un enfoque en gran par-
de factores que afectan a las lideresas y defensoras te reactivo y material que perjudica la efectividad
solo trae una visión general y poco exhaustiva de de sus medidas de protección y expone a la Uni-
los daños y afrontamientos que impactan sus vidas. dad Nacional de Protección a reducir su capacidad
También se preocupa por el considerable aumento debido a un gran número de casos que continúan
01 Agenda de Mujeres, Paz y Seguridad de
las Naciones Unidas: Resolución 1325
33

sin resolverse. De manera particular en su visita, el Ante la poca o nula efectividad


relator mencionó que: de las medidas de protección a
defensoras, lideresas, sus comunidades
Las mujeres (en Colombia) siguen siendo uno de los
y territorios, han surgido numerosas
grupos más afectados por el conflicto [...] enfrentan ries-
gos diferenciados y efectos desproporcionados que se afectaciones desencadenadas
exacerban de acuerdo con los derechos que defienden, por sentimientos de estrés que
su orientación sexual e identidad de género, su origen ét- repercuten la labor de liderazgo y
nico, su ubicación territorial y, por lo común, junto con defensa de derechos y que se suman
todos ellos, su pertenencia a una población víctima de la
a la inoperancia del Estado y de los
guerra12 (Forst, 2018, p. 24).
gobiernos locales y nacional”.
También se ha evidenciado que las dinámicas del
conflicto y la violencia estructural han agravado las concejo municipal” (Secretario General de las Nacio-
situaciones de riesgo y han imposibilitado la plena nes Unidas en Colombia, 2019, p. 10).
garantía al derecho de protección y seguridad. Esto
Ante la poca o nula efectividad de las medidas
se evidenció en el informe trimestral del Secretario
de protección a defensoras, lideresas, sus comuni-
General sobre la Misión de Verificación en Colom-
dades y territorios, han surgido numerosas afecta-
bia de octubre de 2019:
ciones desencadenadas por sentimientos de estrés
que repercuten la labor de liderazgo y defensa de
Los atentados contra líderes sociales y defensores y de-
derechos y que se suman a la inoperancia del Esta-
fensoras de los derechos humanos siguen siendo motivo
do y de los gobiernos locales y nacional.
de gran preocupación y me preocupan especialmente las
repercusiones de esos ataques en las comunidades y en En síntesis, por un lado la falta de protección a
su tejido social. En lo que va de 2019, los actores de la so- lideresas y defensoras ha generado numerosas
ciedad civil y las instituciones del Estado han informado de afectaciones a nivel físico, mental, emocional, orga-
123 presuntos asesinatos de defensores y defensoras de nizativo y cultural, lo que ha obstaculizado su labor
derechos humanos y de líderes sociales (p. 10). de cambio y gestión de paz. Por otro lado, la falta de
protección integral y la ausencia del Estado en va-
Si bien los atentados y agresiones se han pre- rios territorios ha posibilitado el resquebrajamiento
sentado en todo el territorio nacional, el informe del tejido social y el posicionamiento de nuevos ac-
del Secretario General destaca la situación en el tores armados ilegales y economías ilícitas que au-
departamento del Cauca, entre el mes de agosto y mentan la violencia contra las mujeres que defien-
septiembre, cuando registró la alarmante cifra de den los derechos de sus comunidades y territorios.
19 asesinatos, “incluido el brutal atentado contra la Frente a lo anterior, el Comité de la CEDAW
candidata del Partido Liberal a la alcaldía del mu- (2019) ha recomendado al gobierno Colombia-
nicipio de Suárez, asesinada junto con otras cinco no que aumente la presencia de las instituciones
personas, entre ellas su madre, y un candidato al del Estado y el acceso a los servicios básicos en
las antiguas zonas de conflicto, teniendo en cuen-
12 Declaración de Fin de Misión del Relator Especial de las Naciones Unidas ta las necesidades específicas de las mujeres que
sobre la Situación de los Defensores y las Defensoras de Derechos Hu-
requieren de una protección específica y diferen-
manos, Michel Forst, en su visita a Colombia el 20 de noviembre al 3 de
diciembre de 2018. Doc. A/HRC/37/51/Add.1 página 24. cial. De igual forma, Indepaz (2019) señala que el
34 Liga Internacional de Mujeres por la Sintonías Corporales: memoria
Paz y la Libertad / Limpal Colombia y resistencia de defensoras, un
seguimiento a la Resolución 1325

organismo de seguridad de orden nacional cono- ma de violencia sexual, a mí me mandaron una protección
cido como Unidad Nacional de Protección (UNP) y qué protección, pues ser testigo denunciante. A mí me
no logra proteger a cabalidad los derechos de las mandan una protección y me mandan unos policías a mi
lideresas y defensoras porque se han denunciado casa, y como me mandaron un policía a mi casa de eso
casos de violencia y agresión perpetrados por hom- se me vino la amenaza, porque el del Clan del Golfo decía
bres que tenían el deber de brindarles protección: que esos policías que llegaban a mi casa era porque yo los
llevaba para que lo cogieran a él o alguna cosa, entonces

Algunas defensoras han informado a organizaciones de son riesgos que le ponen a uno, yo tuve que firmar, que yo

mujeres sobre situaciones de violencia psicológica, hostiga- no quería esos policías (Lideresa, comunicación personal,

miento o violencia sexual que va desde acoso hasta acceso 2019).

carnal violento a las protegidas por parte de los hombres de


protección. Se tiene conocimiento por la información obteni- Esto pone en evidencia la falencia del Estado por
da por Sisma Mujer de 12 casos de violencias basadas en gé- percibir la protección como sinónimo de militariza-
nero contra defensoras usuarias de medidas por parte de los ción, pues la presencia de un policía en la casa de
hombres encargados de su protección durante el año 2018. una lideresa no logró salvaguardar la seguridad de
Adicionalmente, las situaciones identificadas dan cuenta de ella, sino que aumentó los riesgos de vulneración,
comentarios prejuiciosos, amenazas, actos de control sobre estigmatización y señalamientos. En este sentido,
las actividades, la apariencia, el celular, la vestimenta, las las medidas de protección deben de estar enca-
amistades o los lugares que frecuentan las mujeres; manipu- minadas a la construcción de convivencia, justicia
laciones, coacción, insinuaciones de contenido sexual o des- social y articulación entre el Estado, las lideresas y
calificaciones, que configuran patrones de discriminación y defensoras de derechos humanos para fomentar la
formas de revictimización que profundizan y actualizan los transformación cultural y las dinámicas de violencia
impactos de las agresiones previas, reproduciendo matrices presentes en la sociedad colombiana.
de desigualdad contra las defensoras (p. 60).
Todo lo anterior se enmarca en los procesos de
exigibilidad de derechos humanos contemplados
Estas conductas de violencia, discriminación y es- por la Agenda internacional de Mujeres, Paz y Se-
tigmatización por parte de los funcionarios hombres guridad, y la Resolución 1325. Estos marcos nor-
de la UNP muestra la violencia institucional que de- mativos reconocen el papel de liderazgo y defensa
ben enfrentar las defensoras y lideresas en razón a que tienen las mujeres en los contextos de conflicto
su labor de liderazgo y de su género. Por tal motivo, y violencia y se preocupa por brindar garantías de
muchas de ellas han constatado que el Estado colom- protección, participación, prevención y socorro. Por
biano no logra garantizar efectivamente la protección tal motivo, el capítulo 1 abarca los componentes de
a sus derechos individuales y colectivos; de hecho, la la Resolución 1325 para visibilizar las reivindicacio-
mayoría de los testimonios obtenidos por las entre- nes estructurales de lideresas y defensoras en sus
vistas indican que el gobierno no protege, sino que territorios, así como de visibilizar las situaciones de
genera y reproduce violencias y prejuicios sobre las riesgo que afectan los ámbitos físico, psicológico y
lideresas y defensoras de derechos humanos: emocional de estas mujeres. Conforme a lo ante-
rior, el siguiente apartado pretende analizar las pro-
La 1325 dice que tienen que brindarle garantías a uno, pias realidades de lideresas y defensoras, junto con
en protección y, para mí, el Estado no cumple con eso. No las afectaciones psicosociales que tienen de cara a
sé para otras lideresas pero para mí, porque, como vícti- su rol de liderazgo y defensa.
Conmemoración del Día Internacional de la Violencia Contra Las Mujeres, Mesetas, 2019.
02
C ap í t ul o

Afectaciones
psicosociales
de lideresas
y defensoras
de derechos
humanos

Conmemoración 8 de marzo, Bolívar, 2017.


37

Para las activistas, la búsqueda de reconocimiento y la entrega por


la causa de la defensa de los derechos de otras mujeres, se realiza en
muchas ocasiones a través de un activismo heroico, con alto sentido de
sacrificio y la entrega sin límites. En esta entrega sin límites, el cuidado de
sí desaparece, no es una prioridad, generando un desgaste emocional y
físico que deriva en enfermedad.
Fondo de Acción Urgente para América Latina y el Caribe (2015, p. 15).

E
l Consejo de Seguridad de las Naciones Uni- hace énfasis en aspectos que dialogan con los ob-
das (2000), en la Resolución 1325, reconoce jetivos puntuales de este Informe de seguimiento,
que acciones como “la comprensión de los pero que no pueden comprenderse como la totali-
efectos de los conflictos armados en las mujeres y dad una lectura completa de la situación.
las niñas [...] pueden contribuir considerablemente
En vista de la complejidad histórica, poblacional,
al mantenimiento y el fomento de la paz y la segu-
cultural y normativa que acompaña la labor de de-
ridad internacionales” (p. 2). En materia de preven-
fensa de derechos humanos, sobre el enfoque psi-
ción, la Resolución reconoce el valor de la presencia
cosocial convergen áreas del saber, como la psico-
de mujeres en los espacios de gestión, resolución y/o
logía, el trabajo social, la antropología, el derecho,
transformación de conflictos y construcción de paz.
la sociología y las ciencias pedagógicas, por men-
A partir de las narrativas sobre las afectaciones cionar algunas. Todos estos actores construyen un
psicosociales asociadas con la experiencia de defen- grupo de conocimiento interdisciplinar como ha
der los derechos humanos, bien sea desde la mo- sido denominado por Ángela María Estrada, Karen
dalidad de liderazgo, o desde el acompañamiento Ripoll y Diana Rodríguez (2010), donde se articu-
de procesos tutelares y acciones de incidencia po- lan las acciones y reflexiones de diversos cuerpos
lítica en comunidades e instituciones, este capítulo interesados en temas humanitarios, que trabajan
muestra algunos de los rasgos más característicos conjuntamente en la producción de conocimiento
de dichas afectaciones. También, intenta hacer una y mejores prácticas de acompañamiento e inves-
lectura desde las herramientas de psicología social tigación a los procesos de defensa. Ejemplos de
y desde los feminismos para propiciar una reflexión estas entidades son institutos de investigación,
sobre la necesidad de crear vínculos de sentido, universidades, observatorios de derechos huma-
entre el planteamiento de la Resolución anterior- nos, Think Tanks, colectivos activistas, además de
mente citado y la importancia que tiene el bienes- las respuestas y medidas en clave de comisiones,
tar psicosocial de las lideresas y defensoras en los mesas de trabajo y cuerpos normativos por parte
procesos de construcción de paz. La extensión del del sector público, en donde se dan importantes
capítulo no alcanza a cubrir la magnitud real de las desarrollos sobre los aspectos humanitarios en el
afectaciones de las defensoras, razón por la cual se fomento de la paz.
38 Liga Internacional de Mujeres por la Sintonías Corporales: memoria
Paz y la Libertad / Limpal Colombia y resistencia de defensoras, un
seguimiento a la Resolución 1325

Partimos de estas condiciones de multidimen- Entender los aspectos


sionalidad e interés interdisciplinar para hacer un psicosociales y las afectaciones
llamado a la ampliación y generación de saberes y
a las defensoras y lideresas es, en sí
reflexiones sobre las armonías y disonancias que la
defensa de derechos ha representado para la muje- mismo, un acto político de resistencia
res defensoras. Todo lo anterior, bajo la compren- ante la guerra, una forma de detonar
sión que la categoría “mujer” no es universal, que no los patrones patriarcales que ubican
está por encima de las personas, sino que se cons- lo asociado a los sentimientos, a la
truye en contextos particulares y se expresa pun-
humanización de las luchas en el lugar
tual y diferencialmente. Es decir, se hace prioridad
comenzar con la consideración de que las mujeres de la debilidad”.
son diversas, y por tanto, las lideresas y defensoras
también lo son.
conectadas y dialogan de diferentes formas en la
Las voces y sentires de algunas de ellas se inclu-
experiencia de cada lideresa.
yeron en este informe de seguimiento, con el fin
de reconocerles en la cercanía del encuentro, y que
esto también lograse trazar las conexiones entre las En conversación con las lideresas
normativas existentes y sus vivencias en la cotidia- Tener una aproximación a conversar con las lidere-
nidad. La línea informativa de este capítulo analiza sas fue una oportunidad para adentrarse en las rea-
los resultados de las conversaciones dispuestas en lidades, sentires e ideas que sustentan el creciente
las categorías de análisis, esto es: afectaciones psi- posicionamiento del liderazgo y conquistas de los
cosociales relativas a la Identidad, cuerpo, aspectos movimientos sociales colombianos. También per-
psicosomáticos y comunidad, articulando éstas con mitió conocer la manera en que las comunidades
el componente de prevención de la Resolución 1325. se han apropiado de saberes sobre derechos hu-
Entender los aspectos psicosociales y las afecta- manos e instrumentos normativos de exigibilidad,
ciones a las defensoras y lideresas es, en sí mismo, y evidenciar cómo esto se manifiesta en los logros
un acto político de resistencia ante la guerra, una grandes y pequeños, en pro de buscar el bienestar
forma de detonar los patrones patriarcales que y la dignificación de la vida.
ubican lo asociado a los sentimientos, a la huma- Las entrevistas ocurrieron en sitios que repre-
nización de las luchas en el lugar de la debilidad. sentaban un lugar seguro y conocido por las lidere-
Atribuirle sentido, cuestionar las prácticas de abu- sas: en su casa, su oficina, un sitio público o a través
so que afectan las mentes y, con ello, las actuacio- de comunicaciones virtuales como la videollamada,
nes de las defensoras y sus capacidades de afron- que ellas mismas propiciaron desde sus segurida-
tamiento, son una manera expresa de frenar las des. Los espacios en que se movían las lideresas y
violencias y exigir respuestas humanas que se dis- defensoras implicaron que en algunos casos no se
tingan de las que buscan construir máquinas que entrevistaron solas, sino acompañadas por un fami-
trabajan por causas justas, pero a quienes se les liar, compañeros o compañeras de trabajo y perso-
niega el reconocimiento de su propio dolor y de sus nas de su comunidad. Debido a estas expresiones
propios impactos. distintas y particulares, se hizo clave dedicar un mo-
Es importante tener en cuenta que, a efectos de mento previo a la guía de realización de entrevistas
análisis, las categorías se describen por separado. y grupos focales para familiarizarse con los estilos
No obstante, en la vivencia real todas están inter- de comunicación de cada mujer y, a la vez, facilitar
02 Afectaciones psicosociales de lideresas
y defensoras de derechos humanos
39

Mural Bolívar, 2016.

que el equipo de investigación y las participantes Daños y afrontamientos: una mirada


se hallaran en un espacio de mutua confianza, para preliminar
establecer acuerdos de comunicación, aclaración
Las narraciones abordaron problemáticas latentes
de dudas y, finalmente, encuadre y desarrollo de la
en los contextos de acción de las mujeres líderes,
guía de entrevista.
tales como amenazas telefónicas, escritas y perso-
Durante los encuentros las mujeres compartie- nales (de actores conocidos o desconocidos), agre-
ron anécdotas relacionadas con el ejercicio de de- siones físicas, violencia sexual, prejuicios de parte
fensa. También hacían memoria de sus trabajos de de funcionarios y funcionarias del sector público y
atención en salud a comunidades, hablaban con profesionales de la salud, desplazamiento forzado y
valentía y lágrimas de sus experiencias de pérdi- separación familiar, junto con otras situaciones que
da y dolor durante el conflicto armado, mientras causaron miedo, desconfianza, ansiedad, evitación
que otras nombraban recuerdos sobre la manera emocional y aislamiento social. Todo esto significó
en que inició su trayectoria como defensoras: los pérdidas en el sentido de bienestar, seguridad de
primeros colectivos, asociaciones o movimientos cara al futuro, disminución en su percepción de jus-
de los que hicieron parte. De una u otra forma, se ticia y en su motivación para continuar siendo agen-
mostraron abiertas a que sus voces fueran escu- te defensora de derechos humanos.
chadas y a posicionar las preocupaciones que las
Si bien este tipo de daños e impactos han sido
actuales circunstancias traen para sus vidas y las
documentados en los ámbitos de los movimientos
de sus comunidades.
40 Liga Internacional de Mujeres por la Sintonías Corporales: memoria
Paz y la Libertad / Limpal Colombia y resistencia de defensoras, un
seguimiento a la Resolución 1325

sociales, estudiados por los sectores académicos, nes de los grupos focales resaltaron aspectos que
intervenidos desde los jurídico-legales y difundidos dan luces frente a las preocupaciones alrededor de
desde los mediáticos, es preciso reconocer que aún los procesos organizativos, en términos de la dura-
hace falta complejizar las lecturas para comprender ción del acompañamiento hecho a mujeres en con-
los aspectos que empeoran o mitigan las condiciones diciones de alta vulnerabilidad y las posibilidades
en que ocurre el daño, y las circunstancias que facili- de fortalecer los vínculos ya tejidos con ellas.
tan gestar afrontamientos más efectivos, que a largo
plazo se traducirán en el fortalecimiento de la pre- Me he encontrado con situaciones en las que acompa-
vención. Las entrevistas y grupos focales permitieron ñamos dentro de un proyecto a mujeres que son víctimas
constatar que factores como la ubicación geográfica, de cualquier tipo de violencia, el gran problema es cuando
facilidad de acceso a medidas de protección estatal, se acaba un proyecto y uno cree que dentro del proyecto
la edad, la pertenencia a un grupo étnico y el acceso a se logran las rutas de atención a esa víctima, pero luego
la educación formal incidieron en el grado de intensi- se termina el proyecto y no hubo como esa incidencia. En-
dad y expresión de los daños y afrontamientos. tonces me queda a mí, como lideresa, como organización,

Sobre las diversas estrategias de afrontamiento el compromiso de no dejarla sola, que en el proyecto no

de las lideresas, pudo identificarse en el aspecto indi- se logró porque era a cuatro o cinco meses, entonces la

vidual, acciones como la evitación de conversaciones víctima está en su crecimiento personal, en su propio em-

o interacciones de alta intensidad emocional (o, por poderamiento, en creer en ella y como eso es un proceso

el contrario, sentir y expresar abiertamente la emo- a largo plazo porque es para su propia vida (Defensora, in-

ción particularmente en el llanto), la disminución de tervención en grupo focal, 2019).

su visibilidad y acción pública como defensora a raíz


de amenazas, así como la valoración alternativa de Uno de los desafíos del proceso mismo de brindar
sus circunstancias tendiente a otorgar significados atención a las mujeres sobrevivientes de hechos victi-
positivos. Hay un interés por adquirir conocimientos mizantes radica en que las acciones facilitadas están
para mejorar sus prácticas de liderazgo y defensa, imbuidas en un contexto que abarca tiempos, espa-
trazar y comunicar sus límites para aquello que pue- cios y personas fuera del acompañamiento. Aunque
de ser asimilado emocionalmente en determinadas esta circunstancia no es problemática en sí, al ubicar-
situaciones, procurar el cuidado de sí en lo referido a la en diálogo con lo que se ha señalado en capítulos
alimentación, descanso y fomento de pasatiempos o anteriores sobre los niveles de alcance que tiene la
aficiones como el teatro y el tejido. violencia en el contexto colombiano, nos percatamos
de la contundencia que subyace a la inquietud de
Los afrontamientos colectivos todavía encaran
las lideresas. En el caso de las agresiones físicas por
retos que se originan por las mutaciones, evolucio-
parte de compañeros sentimentales, la vida en los
nes o repeticiones de la violencia, en sus vertientes
espacios cotidianos de las mujeres acompañadas es
cultural, estructural y directa. Las voces de las lide-
un punto de reflexiones urgentes sobre cómo cuidar
resas hablaron con preocupación sobre las ruptu-
de los avances logrados a largo plazo en cuanto a la
ras comunitarias a causa de los conflictos en la con-
recuperación psicosocial, en vista de que, en muchas
vivencia con vecinos, presencia de grupos armados
ocasiones, en los entornos habituales se naturalizan
ilegales y microtráfico de sustancias psicoactivas,
y perpetúan acciones de violencia y maltrato.
señalando que las dificultades para la asociación y
fortalecimiento comunitario se exacerban por los Con el ánimo de considerar el panorama pre-
estados de miedo, terror, silenciamiento e incerti- liminar de daños y afrontamientos, en el próximo
dumbre entre los y las habitantes. Las intervencio- apartado se procederá a profundizar en el análisis
02 Afectaciones psicosociales de lideresas
y defensoras de derechos humanos
41

Nuestra identidad se teje, prácticas del cuerpo en lo cotidiano, tradiciones y


entonces, desde y con la costumbres, usos del lenguaje, valores, creencias
y símbolos, todos estos, en interacción constante,
socialización en casa, espacios
otorgan sentido al ser y estar en el mundo. Para
educativos, espacios comunitarios, subrayar su aspecto dinámico y dialógico, la iden-
espacios laborales; tanto los que se tidad puede expresarse como identidad individual
frecuentan, como los que se visitan e identidad social. Dos conceptos que, de acuerdo
pocas o una única vez”. a los preceptos de Anastasio Ovejero (2015), se nu-
tren y dan soporte mutuamente. Nuestra identidad
se teje, entonces, desde y con la socialización en
de las afectaciones psicosociales de las lideresas y casa, espacios educativos, espacios comunitarios,
defensoras, desde cuatro categorías de análisis, ar- espacios laborales; tanto los que se frecuentan,
ticulando esto con el componente de prevención de como los que se visitan pocas o una única vez. Es-
la Resolución 1325. pacios que, para las mujeres, han estado marcados
por determinantes patriarcales que han intentado
Las afectaciones psicosociales y el quitarles valor a sus prácticas, a sus voces y a su
sabiduría.
componente de Prevención
Esta identidad de las mujeres defensoras no es
Las observaciones y reflexiones aquí desarrolladas
homogéneo. No lo es en la medida en que está in-
tienen como objetivo precisar cuatro expresiones o
miscuido en múltiples formas de opresión que le
dimensiones de afectación psicosocial, aproximán-
han constituido y que determinan no solo su ser,
dose a sus formas de manifestación en los aspectos
sino su estar y su hacer en un mundo con las carac-
de identitarios, corporales, psicosomáticos y comu-
terísticas del que habitan hoy en día. Ese sujeto mu-
nitarios. Con este objetivo, se facilitan las compren-
jer que defiende derechos y se resiste a la guerra
siones acerca de la importancia de dirigir la mirada
es un compendio de mujeres, de otredades, de ex-
y abrir los diálogos sobre la situación de las lidere-
periencias, vivencias y expresiones que animan una
sas y defensoras de derechos humanos y su lugar
acción individual y colectiva entorno al contexto de
en los procesos de construcción de paz, así como
guerra y desigualdad.
las maneras en que estos hallazgos se articulan con
los contenidos de la Resolución 1325 en materia de Comenzar por los aspectos de identitarios marca
prevención. el inicio de una trayectoria de comprensión acerca
de cómo se construyen las personas lideresas y de-
Identidad fensoras de derechos humanos, que en un momen-
Una cosa es meternos en el rol de mujeres, pero junto to posterior facilitará el entendimiento del vivir en
a ese rol de mujeres, ¿yo quién soy? paralelo con la identidad social, ese nosotros cuyas
Lideresa, comunicación virtual, 2019. luchas y reivindicaciones abanderan. De este modo,
es posible atender al rumbo de los procesos socia-
les y políticos emprendidos por sus comunidades
Por identidad se comprende el modo en que las
sin perder de vista a las personas e historias indivi-
lideresas y defensoras se refieren a sí mismas y
duales que la conforman.
cómo otras personas se refieren a ellas. Esta noción
se caracteriza por surgir, cambiar y evolucionar en Las lideresas y defensoras no solamente se ex-
relación a su contexto y todo aquello que habita allí: presan por el acto de referirse a características bá-
sicas de sí mismas, tales como su nombre, edad,
42 Liga Internacional de Mujeres por la Sintonías Corporales: memoria
Paz y la Libertad / Limpal Colombia y resistencia de defensoras, un
seguimiento a la Resolución 1325

Manifestación por la Paz, Bogotá, 2019.

lugar de vivienda y ocupación. La identidad y los Así, el sujeto mujer defensora de derechos huma-
procesos en que es construida, tienen un sentido nos, es uno construido de las interseccionalidades,
más profundo, el cual nace de cuestionarse por el de esas múltiples mujeres que les habitan, de esas
sentido existencial y los valores asimilados, como múltiples experiencias y reacciones que marcan su
el respeto, aspectos que fortalecen su convicción memoria, como señal de haber vivido. Las mujeres
como defensoras de derechos y las motivan a so- defensoras, constructoras de paz y resistentes a la
brevivir y continuar resistiendo ante las presiones guerra, son ciudadanas que han forjado el andar
externas que van en detrimento de su liderazgo. en medio de un sistema de dominación y opresión,
que les ha situado desde el lado de la vulnerabili-
También soy terriblemente ensañada a la defensa de dad y el desbalance de poder. En esos escenarios
los derechos de los otros, de respeto por el otro (Lideresa, en los que las mujeres no tenían voz, en los que cu-
comunicación personal, 2019). raban a las personas heridas, en los que escucha-
ban las conversaciones de los varones planeando
Las circunstancias en que decido empezar mi liderazgo
el próximo ataque, en donde se escapaban en la
tiene que ver un poco por esos mismos llamados que la
noche para ayudar a otras mujeres en situaciones
vida nos hace, pero también en el camino digamos se van
de violencia, aprendieron a desarrollar capacidades
hilando cosas, uno va discerniendo en qué se debe ocupar,
logradas a fuerza de imposición, para ponerlas al
pero también uno va dando como respuesta a la razón de
servicio de las comunidades y aportar en la cons-
la existencia misma (Lideresa, comunicación virtual, 2019).
trucción de paz.
02 Afectaciones psicosociales de lideresas
y defensoras de derechos humanos
43

Lejos de esto está la naturalización de ese suje- la guerra y la violencia ha hecho como sociedad,
to mujer defensora de derechos humanos. No es como pueblos y como mujeres, las defensoras de
posible pensar en este compendio de experiencias derechos humanos generan un conocimiento de la
y multiplicidad de mujeres, con una relación intrín- historia desde otro lugar, lo que les ha permitido
seca y unidimensional a la paz y la vida. En las de- optar por el camino de la construcción de paz y la
fensoras de derechos humanos se puede eviden- resistencia a la guerra.
ciar una identidad colectiva que avanza desde sus
Ese lugar en el que se ubican como defensoras,
saberes y con sus herramientas, en el camino de la
el lugar de la enunciación, es también el lugar de la
transformación social.
potencia, de situarse en el mundo para responder
Las formas de referirse a sí mismas dentro de la ante el contexto y desde allí construir los puentes
experiencia de liderazgo, permiten ubicar la identi- para responder a la guerra desde las prácticas no
dad de las lideresas en relación con la orientación de violentas. El Lugar de la Enunciación es el que per-
su quehacer: la historicidad de sus procesos, la etnia, mite entender el lugar social que las personas asu-
la experiencia de vida trans o el haber vivido hechos men para agenciar su poder, actuar en sus contex-
victimizantes y ser sobreviviente de los mismos. tos y comunicar sus discursos. Como lo menciona
Djamila Ribeiro, es la ubicación social que se toma
He hecho parte durante 20 años de un proceso de mujeres con el fin de: “pensar y existir en el mundo, incluso,
[...] en esta organización hemos promovido sobre todo los de- garantizando una multiplicidad de voces y perspec-
rechos de las mujeres amas de casa y el derecho al agua para tivas de otros grupos invisibilizados” (2018, p. 17).
las mujeres (Lideresa, comunicación personal, 2019). Es una apuesta ética que abre caminos para des-
montar prácticas y regímenes de autorización dis-
Fui decantando que mis energías se debían concentrar
cursiva, en los que se ha centralizado la producción
en una especificidad [...] prioricé que tenía que dar res-
de conocimiento, con el consecuente silenciamien-
puesta en un sector específico como mujer y como mujer
to o supresión de saberes provenientes de grupos
negra (Lideresa, comunicación virtual, 2019).
sociales no hegemónicos.
Hago parte de una organización que trabaja con perso-
Los aspectos de identidad de las lideresas entre-
nas con experiencia de vida trans, sus familias, sus redes
vistadas nos informan sobre el lugar, recursos, ac-
de apoyo, con infancias y adolescencias trans, también
titudes y acciones que las mismas toman para de-
adultos trans [...] digamos que mi trabajo actual se ha con-
terminar y referirse a su existencia dentro de un
vertido para mí en mi proyecto de vida, llevo mucho tiem-
contexto en donde algunas personas se refieren a
po en esto (Lideresa, comunicación personal, 2019).
ellas de modo hostil, como lo evalúa Johan Galtung
Soy víctima de violencia sexual en el marco del conflicto (2016), al punto de incrementar la violencia en su
armado [...] Me dedico en el liderazgo, me dedico a trabajar contra, menoscabando la satisfacción de necesida-
todo lo que es la prevención de la violencia sexual, porque des básicas, felicidad y prosperidad. De este modo,
lo que me pasó a mí no quiero que le pase a otra persona es posible identificar en los daños por situación de
(Lideresa, comunicación personal, 2019). amenaza, intimidación o desacreditación, idearios
culturales de rechazo frente a la acción y presencia
Entre estas interseccionalidades, existe un lugar de las mujeres (cisgénero o transgénero) en espacios
desde el que las lideresas y defensoras se sitúan, y acciones de gestión de conflictos, lo cual moviliza
el cual conecta su identidad individual con la iden- sentimientos de temor que suponen, además, un
tidad social que da marco a su ejercicio de defen- riesgo de distanciamiento o cese en la participación
sa de derechos. Desde la conciencia del daño que durante la construcción de paz.
44 Liga Internacional de Mujeres por la Sintonías Corporales: memoria
Paz y la Libertad / Limpal Colombia y resistencia de defensoras, un
seguimiento a la Resolución 1325

Tomamos como ejemplo de lo considerado an- Los afrontamientos de las


teriormente, el trabajo organizativo y la promoción mujeres entrevistadas dieron
del agenciamiento de las mujeres en algunos terri-
cuenta de distintos momentos en
torios, que enfrenta retos como la falta de acogida
en las comunidades receptoras de los proyectos el proceso de apropiación sobre la
implementados por algunas organizaciones, dado identidad, que atienden al carácter
que su labor es comparada con aquello que tradi- dinámico y diferencial de la misma.
cionalmente se ha adjudicado a los roles de las mu- Para una de ellas, por ejemplo, su
jeres. Las defensoras de derechos de las mujeres,
construcción identitaria no se ha visto
por ejemplo, se encuentran a menudo en situacio-
nes donde su labor es juzgada como promovedora afectada pese al temor y acciones de
de rupturas matrimoniales y distanciamiento fami- distanciamiento o alteración de rutinas
liar, razón por la que también reciben amenazas. que tomó frente a las amenazas”.
En consecuencia, algunas de ellas afrontan estas
situaciones ocultando su acción de defensa y ac-
cionando desde la privacidad y el silencio. el proceso de apropiación sobre la identidad, que
atienden al carácter dinámico y diferencial de la
misma. Para una de ellas, por ejemplo, su construc-
Suelen decirnos que somos unas destructoras de fami-
ción identitaria no se ha visto afectada pese al te-
lias, en vez de ver que ayudamos a una mujer. Siempre es-
mor y acciones de distanciamiento o alteración de
tamos en esas situaciones en donde se habla de nosotras
rutinas que tomó frente a las amenazas. Eso puede
y uno llevaba una zozobra de no saber si se van a cumplir
comprenderse con la lectura de su trayectoria e in-
esas amenazas, lo único es ayudar a escondidas y no dar
terés por la defensa de los derechos de las perso-
a conocer su trabajo frente a la comunidad, toca trabajar
nas con experiencias de vida trans, que comenzó
de manera reservada (Defensora, intervención en grupo
a temprana edad y de forma autónoma y, en este
focal, 2019).
sentido, es visible el empoderamiento con respecto
Esa estigmatización, que desde la misma institucionali- a su construcción identitaria, frente a las hostilida-
dad se ha venido haciendo, es que los defensores de dere- des que históricamente han afectado a los sectores
chos humanos y las defensoras de derechos humanos son sociales LGBTIQ+.
problemáticos. Yo, por ejemplo, a alguien que no conozca
Se tomó otro ejemplo del relato de una mujer
no le cuento lo que hago. Solo le digo que yo trabajo con
defensora, cuyo recorrido se asocia principalmente
los mercados campesinos, yo hago esto y esto, y ya. O sea,
con hacer parte de una organización no guberna-
es como un escudo que tenemos ahí, para mí es un escudo
mental. Siente un mayor respaldo y fortalecimiento
combinar el ejercicio de liderazgo con nuestras microem-
de su liderazgo por estar en procesos compartidos
presas y participación en los mercados campesinos (Defen-
y acompañados, incluso en un contexto territorial
sora, intervención en grupo focal, 2019).
riesgoso para la acción individual.

Los relatos anteriores suscitan reflexiones urgen- El componente de prevención de la Resolución


tes sobre las posibilidades y recursos actuales que 1325 hace referencia al fortalecimiento de mecanis-
algunas defensoras tienen para la reivindicación y mos que promueven la construcción de una cultura
replanteamiento de su existencia dentro de la co- de no violencia hacia las mujeres. Uno de los casos
munidad. Los afrontamientos de las mujeres entre- estudiados durante esta investigación fue el de una
vistadas dieron cuenta de distintos momentos en lideresa y defensora de raíces indígenas que narra la
02 Afectaciones psicosociales de lideresas
y defensoras de derechos humanos
45

manera en la cual ser partera de miles de niños en


las comunidades indígenas de Colombia dio sentido
a su liderazgo, porque le posibilitó comprender que
su papel era de suma importancia para los rituales
de alumbramiento de mujeres en los territorios:

Uno como partera tiene que bañarse en el río, decían


que era pa’ darle al niño salud, darle vida, darle como es-
piritualidad, como alegría… tenían muchas cosas en ellos a
través de la partera, porque si uno decía que no se quería
bañar, entonces el peladito o peladita iba a ser floja (Lide-
resa, comunicación personal, 2019).
Jornada de paz, Mesetas, Meta, 2018.

El momento evocado demuestra cómo la lideresa


en su labor de apoyo y cuidado fortalece los valo-
del conocimiento acerca de los modos no violen-
res espirituales de los recién nacidos y sus madres
tos de intervenir y protege las relaciones al inte-
y, con ello, cultiva modos no violentos de relación.
rior de la comunidad. La conversación con esta
Este actuar basado en el saber indígena ancestral
lideresa permite rescatar de esta práctica ances-
de la lideresa también construye paz, como es
tral del pueblo wayuu, la centralidad de la palabra
mencionado por Martha Bello y Ricardo Chaparro
y el diálogo para garantizar estabilidad colectiva.
(2010), en la medida en que une las dicotomías sa-
De acuerdo con Johnny Alarcón (2009), estos dos
lud mental y salud física, individuo y colectivo, mien-
aspectos fundamentan el proceso de transforma-
tras que la prevención es el conjunto integrado de
ción social que buscan la conversación y repara-
medidas aplicadas con miras al bienestar social. La
ción de los afectados.
narración de ella también permite identificar que su
presencia en los entornos naturales, su participa- En clave de prevención, las consideraciones an-
ción activa en el acompañamiento y cuidado de los teriores sobre los procesos dialógicos se conectan
procesos de alumbramiento y parto, y el estar en con los relatos de otras mujeres sobre la adquisi-
territorio con el fin de evitar circunstancias no de- ción de conocimiento y la reflexión por el ser como
seadas o conflictivas para los hijos, hijas y el futuro medidas de resolver o ajustarse ante las situacio-
de la comunidad, son todas formas de fomentar la nes amenazantes en el presente y a futuro. Toda
paz, que se apoyan en saberes ancestrales sobre la acción que implique problematizar y resignificar la
conexión entre la Madre Tierra y quienes la habitan. violencia y sus manifestaciones estructurales, cul-
turales o directas es, en sí, una acción preventiva:
A su vez, el acto comunicativo de la lideresa
el cuestionamiento de la historicidad, evolución y
refleja a lo que en algún momento de la conver-
naturalización de las dinámicas del conflicto genera
sación ella mencionó como el palabrero, función
nuevos marcos de sentido para la defensa de dere-
social asumida por algunos hombres en el pueblo
chos, a la vez que despliega un mayor número de
wayuu, cuya función es mediar en los procesos de
recursos para la transformación del conflicto y el
negociación, resolución de conflictos y sanción de
fomento de la paz.
delitos. La palabra tiene un valor fundamental en
el contexto e historia de este pueblo, y su cons- En este orden de ideas, la prevención implica el
tante puesta en práctica genera una transmisión reconocimiento de las diversas identidades políticas
46 Liga Internacional de Mujeres por la Sintonías Corporales: memoria
Paz y la Libertad / Limpal Colombia y resistencia de defensoras, un
seguimiento a la Resolución 1325

construidas por las mujeres en los territorios. En el bres y mujeres. En concordancia con esto, desde la
caso de la realidad colombiana, el énfasis dado al dupla hombre-mujer se gestan desigualdades que
acto de reconocer se apoya en la noción de que la históricamente han favorecido las experiencias vi-
subjetividad individual está inscrita en contextos po- tales de los cuerpos construidos como hombres, al
larizados, a menudo fragmentados y codificados en punto de constituirse en la hegemonía de estos so-
lenguaje de la diferencia. De este modo, visibilizar in- bre los cuerpos de las mujeres, y también sobre los
tegralmente el otro o la otra es un punto de partida cuerpos que no se inscriben en este binario.
para la sensibilización sobre las condiciones puntua-
Los cuerpos de las lideresas y defensoras son
les requeridas para la gestión de los conflictos.
interpelados por la desigualdad enraizada por la
noción de género. En Colombia, dicha noción se
Cuerpo
instaura como una norma en la que se asigna a las
Vale la pena sacarle una risa al dolor, porque cuando mujeres y cuerpos que no entran en el binarismo,
usted denuncia le ayuda a esa persona ve como esa varias expectativas y experiencias frente a cómo es-
mirada de expresión de agradecimiento: esos son los tar y expresar sus corporalidades, lo cual también
abrazos más importantes y sinceros que uno recibe en dialoga sobre la categoría anteriormente analizada:
esa etapa cuando uno saca la gente hasta vivir bien. identidad. Son normas porque justamente se natu-
Defensora, intervención en grupo focal, 2019. ralizan y legitiman en la cotidianidad de las comu-
nidades, lo que incrementa su poder de regulación
Un entendimiento preliminar del cuerpo humano su- sobre las relaciones sociales y refuerza así las des-
geriría que es el organismo vivo que habita el mun- igualdades entre los géneros.
do. Sin embargo, es necesario ampliar esta defini- En la experiencia de defender los derechos hu-
ción, pues el cuerpo no termina en los límites de la manos, las lideresas adquieren elementos como
piel: es también un primer territorio de resistencia y herramientas jurídico-legales para la exigibilidad,
poder, lugar donde se imprimen y se memorizan las se reúnen y conversan en espacios de aprendizaje
construcciones identitarias, el nodo donde confluyen que posibilitan el fortalecimiento de sus liderazgos
sentimientos, pensamientos, habla, acción y relación. y comparten conocimientos con otros líderes y li-
Para la filósofa y teórica queer Judith deresas sobre las causas que aban-
Butler (2008) “el cuerpo cobra forma deran. Estos encuentros favorecen
y figura en el contexto de ciertas nor- comprensiones y acciones sobre
mas discursivas […] que lo ‘con-forma’ las causas de la desigualdad aspec-
activamente. Pero al cuerpo no puede to que, como se ha señalado, tiene
reducírselo a las distintas formas que una relación cercana con la noción de
adopta, ya que por debajo de su desarrollo género y las asignaciones hechas a los
y transmutación hay algo continuo” (p. 83). cuerpos, aspecto donde se focalizan algunos lide-
En este sentido, una norma discursiva puede ser razgos, como los pertenecientes a movimientos por
la noción de género, término que la Organización los derechos de las mujeres (niñas, adolescentes y
Mundial de la Salud13 ha planteado como el con- adultas) y de los sectores sociales LGBTIQ+. En es-
junto de funciones, comportamientos, actividades tos casos, la defensa de derechos se convierte en
y atributos asignados por una sociedad a los hom- un escenario y forma de gestionar procesos para
la transformación y actualización de las normas
discursivas generadoras de dinámicas conflictivas,
13 Organización Mundial de la Salud. Temas de salud: “género”. https://
www.who.int/topics/gender/es/
02 Afectaciones psicosociales de lideresas
y defensoras de derechos humanos
47

tales como la disparidad que origina el binario hom- La labor de defensa de derechos
bre-mujer. humanos como experiencia vital
Se reconoce que las lideresas con quienes con- implica adquirir saberes, lenguajes
versamos han agenciado como defensoras que y formas particulares de actuar y
abordan otros temas diferentes al género, tales
transitar en el mundo, prácticas que
como la reparación a personas sobrevivientes al
conflicto armado, personas en situación de priva- son reiterativas en el tiempo; cambian,
ción de libertad y el derecho al agua. Con la inten- evolucionan y acompañan a la persona
ción de ampliar el marco de comprensión sobre y al cuerpo de la lideresa: la biografía
el cuerpo planteado en la reflexión de Butler, pro- incide en la biología”.
seguimos a hablar de la labor de defensa de dere-
chos humanos, pues resulta ser un ejemplo útil en
la comprensión de las normas discursivas que dan ciones de lideresa, actualiza las normas discursivas
forma y permean las vivencias de todos los cuerpos, que regulan las relaciones sociales en los territorios
independientemente de si el foco de interés se ubi- por medio de prácticas puntuales, como la labor de
ca en el género. defensa de derechos. Algunos de los liderazgos se
han ejercido por décadas lo cual, indudablemente,
La labor de defensa de derechos humanos como
deja historia sobre los cuerpos y los territorios, fa-
experiencia vital implica adquirir saberes, lengua-
cilitando los procesos que se orientan a revertir y
jes y formas particulares de actuar y transitar en el
cuestionar los lugares legitimados de silencio y su-
mundo, prácticas que son reiterativas en el tiempo;
misión y distanciamiento de la participación activa
cambian, evolucionan y acompañan a la persona
en procesos de transformación social, sostenidos a
y al cuerpo de la lideresa: la biografía incide en la
través del tiempo.
biología. En un primer sentido, relacionado con el
asunto de la identidad, esto aporta a la experiencia Como es señalado por Martha Bello y Ricardo
corporal que tiene de sí. En un segundo sentido, por Chaparro (2011), los daños y afrontamientos en el
la huella y memoria que su cuerpo deja en el territo- cuerpo aluden a condiciones (lesiones físicas y a
rio a través de su labor. la integridad sexual, alteraciones en el medio am-
biente, prácticas de autocuidado, como ejercicio,
Me dedico a una labor que realmente me hace mejor alimentación y sueño) que más tarde tendrán una
como persona, la labor de la defensa de DDHH (Defensora, implicación en las afectaciones psicosomáticas.
comunicación virtual, 2019). Los cuerpos de las lideresas y defensoras han
Yo soy líder desde que tenía 18 años. Trabajé en muchas sufrido daños por actos violentos que impactan su
partes de Colombia. Yo trabajé muchos años con el Gobier- integridad personal. Agresiones físicas por parte
no, trabajé en las comunidades y sí, he sido una persona de actores no identificados, violación sexual en el
que desde ahí [...] lo que pasa es que uno en ese tiempo conflicto armado y las amenazas por parte de ve-
no decía “líder”, no, sino decía “una señora que acompaña, cinos que, paradójicamente, son formas de visibili-
que ayuda, o que está… una trabajadora” (Lideresa, comu- zar que el cuerpo no se agota en la cabeza, torso y
nicación personal, 2019). extremidades, sino que existe a su alrededor una
serie de discursos que naturalizan condiciones de
vulnerabilidad y exposición a nuevos daños y que
Los relatos anteriormente incluidos permiten ob-
se reflejan en sus narrativas cuando son sujetos
servar también que el hecho mismo de asumir fun-
48 Liga Internacional de Mujeres por la Sintonías Corporales: memoria
Paz y la Libertad / Limpal Colombia y resistencia de defensoras, un
seguimiento a la Resolución 1325

provistos de medidas de protección material por


parte del Estado.

[Sobre la medida de protección recibida] a mí me man-


dan una protección y me mandan unos policías a mi casa,
y como me mandaron un policías a mi casa de eso se me
vino la amenaza, porque el del Clan del Golfo decía que
yo… esos policías que llegaban a mi casa, era porque yo los
llevaba para que lo cogieran a él o alguna cosa, entonces
son riesgos que le ponen a uno. Yo tuve que firmar que yo
no quería esos policías, ellos dijeron que iban a hablar con
[...] UNP y ellas me llamaron, que “vamos a hacer la valo-
ración del riesgo”. Ya hace año y pico, nunca han llegado a Taller de Ecofeminismo, Caquetá, 2018.

mi casa. Entonces la protección del gobierno para nosotros


los líderes no es ninguna [...] se expone a nosotras como
líder, porque donde yo vivo hay microtráfico, hay pandilla, etnocidio). Esto se puede evidenciar en el siguiente
hay Bacrim, grupos organizados, entonces eso lo pone a testimonio, el cual da cuenta de los daños emocio-
uno en riesgo, porque lo que dicen es “la sapa del sector”, nales que causó el detrimento ambiental:
al llegar la policía dicen es la sapa del sector, se le viene
encima el mundo, y a mí se me vino el mundo encima, lle- Vi con tristeza como parte de ese mar, de la tierra, de la
gando la policía a mi casa, que tuve que sacar a mis hijos arena es arena que de niña la conocí de ese color gris, se
(Lideresa, comunicación personal, 2019). estaba tornando de un color como alquitrán o como si fue-
ra petróleo, y no era porque tenía ni alquitrán ni petróleo.

Al exceder los límites de la piel cuando se habla del Era una mancha muy oscura. Eso se me quedó grabado, y

cuerpo también se hace referencia al entorno habi- solo dije en mi interior “esto tiene que ver con todo lo que

tado por la persona, tales como la tierra, el territorio, está aconteciendo en el territorio, esto tiene que ver con

el medio ambiente, los recursos para la alimentación, dolor, esto tiene que ver con vidas, esto tiene que ver con

cultivo, y movilidad. A este respecto, resulta pertinen- sangre” (Lideresa, comunicación virtual, 2019).

te incluir el concepto de Ecogenoetnocidio, planteado


por el historiador afrocolombiano Santiago Arboleda Asimismo, se tomó como ejemplo el caso de la
Quiñónez (2018, 2019), el cual surge a partir de hilar población afrocolombiana, ya que es uno de los
las complejas conexiones entre despojo histórico, sectores poblacionales cuyos cuerpos han sido
desplazamiento interno, masacres, envenenamiento receptores de fuertes daños e impactos, teniendo
de ríos y lagunas, destrucción de fuentes para la ali- en cuenta el racismo como un factor estructura-
mentación y la fracturación de tejidos socioculturales. dor de complejas violencias que van desde los ac-
tos de discriminación hasta la extinción de la vida
A partir de este panorama, donde la posesión y
y cultura. Desde las tradiciones afrocolombianas
titulación de tierras es uno de los principales moti-
se da una comprensión holística de la vida. El in-
vos para agredir, discriminar y/o violentar los dere-
vestigador y autor afrocolombiano representa
chos en Colombia, el concepto de Ecogenoetnocidio
todas estas esferas en el término Ecogenoetno-
permite analizar las constantes violaciones sistemá-
cidio, comprendiendo mucha profundidad sobre
ticas de los cuerpos de las lideresas y defensoras,
la aproximación e interpretación de la experien-
sus territorios y sus culturas (genocidio, ecocidio,
cia de las mujeres que hacen parte comunidades
02 Afectaciones psicosociales de lideresas
y defensoras de derechos humanos
49

étnicas. De allí que resulte importante hacer una buya a la recuperación psicosocial de las relaciones
lectura de las normas discursivas que en la socie- de confianza al interior de las comunidades y con
dad colombiana agudizan la violencia en contra los y las funcionarias del Estado.
de los cuerpos de ellas.
Sugerimos lo anterior para aportar elementos
Las reflexiones de Arboleda acerca de la comple- en el proceso de comprender que la prevención de
jidad de los factores que estructuran las violaciones violencias contra los cuerpos de las mujeres y niñas
a los sectores poblacionales afro da fuerza al plan- también está interpelada por narrativas y simbo-
teamiento de que el cuerpo es un nodo sobre el que lismos presentes en la cultura, la institucionalidad,
recaen todas las formas del conflicto y del ejercicio los sistemas de creencias, contextos y espacios de
o abuso del poder. Hubo dos casos particulares en aprendizaje que invariablemente tienen un impac-
las entrevistas de las defensoras que evidenciaron to significativo en la corporeidad y construcciones
esto con respecto a las medidas de protección po- identitarias que las habitan. La militarización de
liciales. Allí se ejemplifica el efecto de la Fuerza Pú- los cuerpos y territorios, como artefacto institucio-
blica sobre los cuerpos y espacios cotidianos de las nal en estados como el colombiano, resulta ser un
mujeres líderes: los oficiales de policía, su indumen- discurso que irrumpe en los contextos y sentidos
taria, vehículos y armas configuran una estética de culturales, sustentando su accionar en un modo
la militarización en veredas, comunidades, barrios específico, pero sistemático, de aproximarse a la
o comunas y zonas rurales que, en intentos de pro- protección social de la población en los territorios,
teger la vida de la defensora, acaban por disociarse hecho que supone un limitante en la comprensión
de las necesidades integrales y diferenciadas de la del conflicto y sus expresiones. Veamos un ejemplo.
mujer y su comunidad. Como resultado, las afecta-
Se realizó una lectura de algunos procedimientos
ciones psicosociales se dan en torno a estados de
de la Unidad Nacional de Protección para identificar
estrés, ansiedad e hipervigilancia.
las ideas generales que actualmente existen sobre
Las disonancias resultantes de la acción de la la seguridad para los cuerpos y que se comunican
Fuerza Pública son percibidas como un riesgo por desde la institución estatal. Este organismo de se-
las lideresas, quienes son conocedoras de su con- guridad ha adoptado una perspectiva que incluye
texto y de las dinámicas de violencia existentes los Derechos Humanos y el enfoque diferencial
(delincuencia común, crimen organizado, tráfico de (territorial, étnico y de género) en sus protocolos
drogas, entre otros). El armamento utilizado, tan- de acción, uno de ellos es la evaluación de riesgo
to por la Fuerza Pública como por grupos ilegales, colectivo. El desarrollo de talleres “en el lugar que
pierde toda connotación de protección y adquiere se acuerde, a fin de identificar conjuntamente las
significados de riesgos, peligro y muerte. La pre- amenazas, los riesgos y las vulnerabilidades a las
vención, en este sentido, implica desarrollar ajus- que está expuesto el colectivo”14 contribuye a lograr
tes entre los mandatos institucionales del sector un acercamiento a las problemáticas de los grupos,
seguridad y el modo en que se despliega la coti- comunidades u organización. Sin embargo, estos
dianidad de las mujeres y comunidades que exigen protocolos no profundizan sus lecturas las implica-
protección a fin de que se implementen estrategias ciones del proceso de comprender los impactos de
sensibles con las diferentes condiciones de vulne- los conflictos en las mujeres y las niñas, puesto que
rabilidad propias de los territorios, haya un cese en la identificación conjunta de amenazas y riesgos no
la homogeneización de aquello que se considera
“protector” de los cuerpos se eviten prácticas que 14 Unidad Nacional de Protección. ¿Cómo acceder a la ruta de protección
colectiva? https://www.unp.gov.co/atencion-al-ciudadano/preguntas-
exacerban los riesgos de victimización y se contri-
y-respuestas-frecuentes/
50 Liga Internacional de Mujeres por la Sintonías Corporales: memoria
Paz y la Libertad / Limpal Colombia y resistencia de defensoras, un
seguimiento a la Resolución 1325

quiere decir que se comprendan las relaciones y Las consideraciones sobre


complejidades socioculturales que causan, rodean la UNP señalan apenas un
o subyacen a las necesidades de protección en el
segmento del entramado de actores y
grupo o colectivo, atendiendo también a su carácter
dinámico y relacional. estructuras que reproducen las lógicas
divisorias desde las que se configuran
En otras palabras, una identificación acertada de
las necesidades de protección se da en la relación las desigualdades y condiciones de
sostenida por procedimientos que escuchen y re- vulnerabilidad”.
ciban respetuosamente las preocupaciones, temo-
res, descontentos y malestares de las personas y
grupos que solicitan su servicio. Las condiciones Estado es una parte importante en la sistematiza-
para la prevención, por tanto, deben estudiarse ción y mejoría de los mismos, no debe anteponerse
sensiblemente, en detalle y con profundidad, dis- a la causa misma del trámite: la vulneración de la
poniendo del tiempo y espacios para promover y integridad en la vida o comunidad de las personas,
cultivar la comunicación, los lazos de confianza y expresada en sus cuerpos y territorios. En los terri-
las experiencias compartidas en las que se gesta el torios, esas normas y procedimientos están lejos de
sentimiento de sentirse a salvo. ser parte de las reacciones primarias que buscan
las defensoras ante una situación de riesgo: “A pe-
El reconocimiento de estas desconexiones en sar de que nos digan que “norma”, que esa cosa de
los procedimientos para la prevención contribuye seguridad para la mujer, pero eso en el contexto te-
a identificar los puntos donde se debe dar más co- rritorial no se ve, en el contexto de la vida cotidiana
herencia y fuerza a la implementación de la Resolu- de las mujeres no se ve eso [...] de todas maneras
ción, teniendo en cuenta que en sus lineamientos se está esa preocupación que está latente porque se
abordan núcleos o ideas centrales en la experiencia sabe que no hay garantías” (Defensora, interven-
de las mujeres lideresas y defensoras en la cotidiani- ción en grupo focal, 2019).
dad, tanto a nivel individual como en colectividad. En
palabras de la antropóloga Rita Segato (2003): Por su parte, otra defensora mencionó una anéc-
dota en la que: “una vez estamos haciendo un tra-
bajo con mujeres, entonces vimos algo como curio-
Mediante la identificación de ese núcleo de sentido –
so y yo prendí el botón de pánico, pero eso no sirvió
siempre, en algún punto, colectivo, siempre anclado en
para nada: más pánico nos dio que nos sentimos
un horizonte común de ideas socialmente compartidas,
solas de verdad, a los cuatro días me llamaron para
comunitarias – podemos actuar sobre estos actores y sus
saber cómo estaba, me llamaron de la UNP” (Defen-
prácticas, aplicar con éxito nuestras acciones transforma-
sora, intervención en grupo focal, 2019).
doras, sean ellas jurídico-policiales, pedagógicas, publicita-
rias o de cualquier otro tipo (p. 2). Las consideraciones sobre la UNP señalan apenas
un segmento del entramado de actores y estructu-
¿Hay una comprensión de los Derechos Humanos ras que reproducen las lógicas divisorias desde las
en estas lecturas?¿Qué reflexiones se están haciendo que se configuran las desigualdades y condiciones
sobre los efectos particulares del conflicto en las muje- de vulnerabilidad. Es importante fomentar reflexio-
res y las niñas? nes más complejas sobre las medidas que preten-
den contribuir a la reparación de las fragmentacio-
Si bien es cierto que la documentación de los pro-
nes sociales ocurridas por la guerra, en un lenguaje
cesos para la solicitud de medidas de protección del
que acompañe y se oriente desde la inclusión, el
02 Afectaciones psicosociales de lideresas
y defensoras de derechos humanos
51

encuentro desde la colaboración sostenida a largo Con la terapia psicológica que tomé, yo porque antes es-

plazo y en diferentes áreas, atendiendo al recono- taba muy afectada, yo hablaba mi hecho... yo lloraba, o sea,

cimiento de los factores que afectan la seguridad. no me salía palabra, las manos me sudaban, pero con las
terapias que recibí ya yo me paro, y si es aquí, y si es de
Estos factores pueden ser la clase, etnia, edad,
gritarlo a la salida ¡soy víctima de violencia sexual! porque a
poder, territorio y medio ambiente, como también
mí no me debe de dar pena, le debe de dar pena al que me
el trabajo, las relaciones interpersonales y la hue- hizo el daño a mí (Lideresa, comunicación personal, 2019).
lla de las acciones emprendidas en la defensa de
derechos. Esto da sustento y razón a la compren-
sión sobre la necesidad de asumir estrategias pre- Psicosoma
ventivas en clave de multidimensionalidad, es de- No me quiero dejar poseer de esa idea de que eso es
cir, que convoquen el trabajo conjunto de distintos tan horrible, tan espantoso. Yo quiero conservar la
sectores sociales para eliminar las desigualdades mesura.
causantes de exclusión, pobreza y violencia. El re- Lideresa, comunicación personal, 2019.
conocimiento de las necesidades diferenciales de
cada cuerpo, establece también conexiones con la Las afectaciones psicosomáticas son alteraciones a
diversidad de identidades y las repercusiones que nivel psicológico que se originan o repercuten en el
estos daños tienen sobre el despliegue pleno de la cuerpo de la persona. Según Martha Bello y Ricardo
mismas, teniendo en cuenta que en las construc- Chaparro (2011), el conflicto armado y la violencia
ciones identitarias se habla del proyecto de vida, sociopolítica en Colombia han sido un ejes para
las prácticas cotidianas, la actividad laboral y la entender los daños psicosomáticos de mujeres y
identidad social. hombres, pues los altos niveles de violencia directa,
estructural y cultural generan quiebres emociona-
Entretanto, las lideresas y defensoras han opta-
les y, en ocasiones, mentales en la vida individual y
do por concebir discursos propios sobre lo que sig-
social. Esto se debe a que, como manifiestan Bello y
nifica su protección y recuperación, que abarcan un
Chaparro, en este sentido, “los eventos de violación
lenguaje y forma de nombrar lo que vive su cuerpo
sistemática de los Derechos Humanos menoscaban
y también unas prácticas que den sentido a la inten-
la dignidad, deterioran los soportes sociales y es-
ción de afrontamiento. Algunas de ellas sostienen pirituales y colocan a las personas y a sus comuni-
un interés o disposición para mejorar su salud físi- dades en condiciones de extrema desprotección y
ca, mental y emocional. Estas estrategias son asu- vulnerabilidad” (2011, p. 41). Por su sistematicidad,
midas con posterioridad a momentos de reflexión las dinámicas de conflicto son trazables en el tiem-
sobre el sentir vivenciado en el cuerpo. po y espacio, aspecto que le otorga historia y huella
en el psicosoma; esto es, la unidad del cuerpo con
[Sobre la pregunta “Si su cuerpo pudiera hablar, ¿qué aquello que le habita: pensamientos, emociones y
diría?”] Yo creo que diría muchas cosas, entre ellas sobre el comportamientos de los cuerpos.
cansancio, a veces como hoy no vamos a trabajar ¿verdad?, En las conversaciones con las defensoras se en-
o cosas como de ¿por qué no te tranquilizas un poco? ¿por contraron narraciones sobre alteraciones en el es-
qué no te tomas eso más despacio? pues el cuerpo me ha tado de alerta y sueño, hipervigilancia e irritabilidad
hablado tanto así que una de las maneras es decir tengo durante conversaciones con los demás. Un factor
que bajarle a todo esto y cada vez digo “no, lo siento” (Lide- que sobresale es la sobrecarga de trabajos asocia-
resa, comunicación personal, 2019). dos a las labores tutelares de derechos y prolonga-
52 Liga Internacional de Mujeres por la Sintonías Corporales: memoria
Paz y la Libertad / Limpal Colombia y resistencia de defensoras, un
seguimiento a la Resolución 1325

da exposición a narraciones de experiencias dolo-


rosas de las personas que acompañan, lo cual tiene
un efecto acumulativo en el tiempo que desenca-
dena estados de apatía. Estas situaciones terminan
en menoscabar el reconocimiento de sí y del otro u
otra, olvidar o ignorar la noción de dignidad, dete-
riorar los soportes sociales y espirituales y ubicar a
las personas junto a sus comunidades en condicio-
nes de extrema desprotección y vulnerabilidad.

Los liderazgos también se viven con miedo, dolor,


indignación, y rabia. Estos sentimientos se conectan
con malestares físicos, tales como el insomnio, do-
Encuentro Nacional Niñas y Adolescentes, Bogotá, 2019.
lores de cuello e indigestión. Lo anterior repercute
la aparición de irritabilidad, hipervigilancia o estar
alerta constantemente, y afrontamientos que pue-
disponibilidad amplia de tiempo, algunas incluso lo
den implicar evitación o distanciamiento de las per-
describieron como 24 horas, 365 días al año.
sonas pertenecientes a la comunidad, en especial
durante momentos y espacios para hablar de los La sobrecarga de actividad resultante dificulta
problemas que viven las otras personas. que las mujeres defensoras realicen los procesos
de duelo y elaboración emocional necesarios para
Cuando la lideresa se siente físicamente exhaus-
garantizar el bienestar y la salud mental. Acciones
ta, su atención se dirige a solucionar el cansancio a
como la participación e incidencia política, el traba-
través del alejamiento, situación que, si no es abor-
jo comunitario, la vocería, la interlocución con ins-
dada, puede convertirse en apatía, aclarando que
titucionalidad, la exposición a riesgos y situaciones
no es falta de interés, sino que la misma sobreexpo-
traumáticas o generadoras de sufrimiento psíquico,
sición reduce gradualmente la capacidad de acoger
tanto propias como ajenas, exigen o demandan que
las preocupaciones ajenas con el mismo grado de
las lideresas cuenten con capacidad de empatía, ha-
sensibilidad. El impacto de estos daños psicosomá-
bilidades de comunicación y mediación en conflic-
ticos también se evidencia a largo plazo, con el cese
tos con personas de creencias y poder diferentes,
o reducción de actividades para el crecimiento per-
y disposición física para la movilidad y la acción en
sonal y la necesidad de aislarse socialmente, a fin
distintos escenarios. En lo cotidiano, ejercer la labor
de encontrar cualquier espacio y tiempo para dar
de defensoras, les exige unas condiciones y habili-
un receso a las presiones sobre el cuerpo.
dades para las cuales no necesariamente están pre-
El análisis de las circunstancias narradas por las paradas y que requieren desarrollar por el mismo
lideresas sobre el cansancio físico, agotamiento efecto de ser soporte de un proceso, una comuni-
emocional, irritabilidad, descuido de necesidades dad o una red.
básicas como alimentación y sueño, abren un es-
Otro de los principales obstáculos para afron-
pacio para el diálogo sobre los límites que tienen
tar los daños psicosomáticos es la precaria visibi-
los cuerpos. Una de las afectaciones psicosociales
lidad o tratamiento que brindan las instituciones
se origina en que la defensa de derechos es con-
de atención y protección social a lideresas y de-
figurada en el lenguaje y prácticas de las lideresas
fensoras, ya que no siempre tienen en cuenta las
como una labor intensa que requiere de espacio y
especificidades de las mujeres, las circunstancias
02 Afectaciones psicosociales de lideresas
y defensoras de derechos humanos
53

en las que surgen sus daños, ni las condiciones mí-


Un ejercicio de prevención para el trabajo
nimas para la prestación de los servicios integra-
organizativo
les de salud en tiempos eficaces de respuesta. En
Sugerimos la siguiente estrategia de aproximación
consecuencia, como estrategias de afrontamien-
al abordaje los daños psicosociales en el trabajo
to no surge primero la búsqueda de apoyo social
organizativo, a través de cinco aspectos puntos o etapas
que tienen relación con los espacios organizativos de y/o profesional, sino que se priorizan momentos
lideresas y defensoras. El proceso se despliega de la y prácticas para la introspección e identificación
siguiente forma: de necesidades personales, sin comentarlo con
• Identificar las fuentes de estrés durante el ejercicio más personas, así como también el resistir a las
de defensa. Posteriormente, determinar si es posible presiones externas a través del pensamiento op-
modificar las mismas. En caso de no ser posible tales timista, procurar actitudes positivas para cada día,
cambios, es preciso, en palabras de Carlos Beristain
el aprendizaje de manejo de emociones en situa-
“replantear los objetivos o tomarlas como límites de la
propia acción” (2010, p. 144).
ciones difíciles. Finalmente, en contextos donde
las lideresas cuentan con apoyo e información de
• Desarrollar habilidades de auto-observación sobre
pensamientos, emociones y conductas para detectar otras personas, redes y organizaciones, dan con
oportunamente estados de estrés, mientras se un afrontamiento a partir de la participación de
tiene capacidad psicológica para ello. Si la lideresa procesos psicoterapéuticos.
se encuentra ya en un estado de burn-out, su
recuperación no basta con espacios de descanso: el
En vista de lo anterior, la función preventiva de
burn-out puede reproducirse con facilidad y rapidez, los desgastes psicosomáticos deviene en preven-
ante lo cual se hace necesario tomar medidas de ción de los conflictos en las relaciones. Esto puede
cambio sobre la situación que ha generado el estrés. nutrirse de procesos de identificación y respuesta
• Determinar las formas particulares de afrontamiento oportuna a situaciones de Burnout, el cual, en pala-
y manejo de tensión emocional, para estimular y/o bras de Carlos Beristain es tenido como un estado
flexibilizar su utilización en los contextos que así lo
de “cansancio emocional extremo y mecanismos
requieran.
de defensa primitivos (distancia emocional, cinis-
• Reconocer los impactos que tiene la situación de daño
mo, etc.); pero también por síntomas de desperso-
y estrés en las dinámicas de grupo. Las afectaciones
grupales pueden manifestarse en situaciones de alta nalización (insensibilidad, cuestionamiento de los
reactividad (interacciones agresivas, malentendidos), propios valores)” (2010, p. 144). Estas característi-
limitaciones de la comunicación grupal (aislamiento, cas constituyen un obstáculo para participar con
inhibición y actitudes defensivas) y deterioro de la sana disposición para la gestión efectiva de conflic-
confianza.
tos, dado que estos procesos se dan en contextos
• A nivel organizacional, procurar claridad en los que, de por sí, ya son tensos y desgastantes.
objetivos y agendas de trabajo, adoptando el esquema
propuesto por Carlos Beristain de “formación, Es preciso volver sobre la humanidad de las
supervisión, cambios organizativos, formas de apoyo defensoras de derechos, y no idealizar su queha-
después de incidentes críticos o posibilidad de cer como “superheroínas”, pues no se trata de un
contacto con apoyo profesional específico” (2010, p.
cuento llamado Violencia y Desigualdad, que jus-
150). Las formas de apoyo que resulten de aplicar este
tamente ellas no escribieron ni disponen del po-
esquema, deben ser conscientes a las necesidades y
tengan sentido para la gente, dado que en muchas der por sí solas, que se requiere para darle fin. La
ocasiones puede ser difícil ser consciente del propio prevención debe hallar un lugar en los servicios o
estado psicológico o dar el paso para pedir ayuda. espacios para el cuidado, el descanso y la modifi-
cación de los ritmos y orientaciones en el trabajo,
Abordaje del estrés como ejercicio de prevención. Adaptado de Enfrentar el estrés
(Beristain, 2010, pp. 144-150)
ya que esto salvaguarda la función social y cons-
54 Liga Internacional de Mujeres por la Sintonías Corporales: memoria
Paz y la Libertad / Limpal Colombia y resistencia de defensoras, un
seguimiento a la Resolución 1325

titucional de participación en la comunidad, sin temente político) el accionar de las personas, aun-
que esto implique agotamiento ni menoscabo en que tengan diferencias, se da a través de la unión
la satisfacción de las necesidades básicas de las li- en clave de comunidad.
deresas.
Hay articulaciones y bueno, donde está lo humano siem-
Comunidad pre hay las diferencias, pero frente a este tema de construc-
La protección para mí es parcería, creo que nos ción de paz pienso de que hay allí un caminar colectivo, hay
hemos aprendido a defender entre nosotras, a cuidar un caminar en la diferencia y que frente a esa diferencia cla-
entre nosotras. ro está hay que ir ganando protagonismo de manera iguali-

Lideresa, comunicación personal, 2019 taria (Lideresa, comunicación personal, 2019).

La comunidad sitúa los procesos de defensa y exi- Prevenir los daños psicosociales de las mujeres
gibilidad de derechos, origina y nutre el liderazgo líderes tiene una repercusión directa en la protec-
en la vida compartida, orienta el acompañamiento ción de las comunidades de las que son parte, por-
de personas en sus procesos de recuperación psi- que la manera en que se vivencia la construcción
cosocial y fortalece el sentido de agenciamiento individual de la lideresa, y todo aquello que la nutre,
o empoderamiento. Es clara su centralidad en la en especial su salud mental y bienestar psicosocial,
comprensión sobre los impactos de los conflictos repercute en los modos de relacionarse con los de-
en las mujeres y niñas en los diferentes colectivos más, de crear un sentido compartido de nosotros y
que conforman. Para la psicóloga venezolana Ma- nuestra comunidad. Si ella se encuentra en un esta-
ritza Montero (2004), la comunidad se define como do de miedo, apatía, estrés, agotamiento y con de-
un “grupo en constante transformación y evolución seos de aislarse socialmente, no habría condiciones
[...] que en su interrelación genera un sentido de para que ella pueda desempeñar las acciones que
pertenencia e identidad social, tomando sus inte- le configuran como lideresa. Su capacidad de vin-
grantes conciencia de sí como grupo, y fortalecién- cularse de lleno con las luchas que han agrupado
dose como unidad y potencialidad social” (p. 100). a su comunidad estaría disminuida y también exis-
La comunidad, de acuerdo con la investigación de la tirían fuertes limitaciones a la posibilidad de estar
autora, es un punto de encuentro buscado por uno abierta a las respuestas que la misma comunidad
o varios grupos de personas. Ser un punto de en- tenga con ella, en vista de que los daños psicoso-
cuentro quiere decir también que tiene un lugar e ciales generan fracturas entre las personas de una
historia común, aspecto que da un marco para que colectividad, independientemente de si se trata de
las relaciones construidas en la comunidad se con- asumir un rol de defensora o no.
figuren en la cercanía, dando un sentido al nosotros. La defensa de derechos humanos asigna una
La confianza, solidaridad, el compartir emociones connotación política a la subjetividad, y eso es, sin
y satisfacer necesidades, así como la autonomía y duda, algo que se alinea con los principios consti-
libertad son algunos nodos que sustentan las rela- tucionales de la participación democrática. Sin em-
ciones en la comunidad. bargo, el contexto colombiano ha sido escenario de
La experiencia de las lideresas indica que cono- notables desbalances en las funciones estatales de
cen las vicisitudes que puede tomar el encuentro garantía y protección, a raíz de la polarización so-
entre seres humanos, además de las diferencias en- cial, la violencia que fragmenta las comunidades y
tre una persona y otra. Más allá de esto, cuando se la falta de cobertura gubernamental en los territo-
trata de la construcción de paz (un proceso eminen- rios. Surge, entonces, en algunas personas una res-
02 Afectaciones psicosociales de lideresas
y defensoras de derechos humanos
55

ponsabilidad implícita de garantizar los derechos, nes interpersonales, lo cual da un suelo firme para
cuya magnitud es tal que inevitablemente desborda ejercer prácticas de emancipación que se asumen
la capacidad física y emocional de una mujer como con el objetivo de desmontar los idearios de secta-
ciudadana para efectuar transformaciones sociales rismo, silencios y separación al interior de los sec-
de largo alcance, que les lleva a cargar con lo pro- tores sociales Trans, para situar nuevos lugares de
pio y lo ajeno, reproduciendo el mandato patriarcal respuesta que reconozcan y hagan más humanos
de ser para los/as otros/as, que invita además a no los vínculos entre las personas con construcciones
hacer conciencia de los impactos y de la necesidad identitarias no hegemónicas.
de fortalecer capacidades de afrontamiento indivi-
Considerar la comunicación y los vínculos inter-
duales y colectivas.
personales se hace pertinente para señalar que las
El sentido de que esta mención se haga como mujeres entrevistadas no expresaron tener una
parte de las afectaciones psicosociales, se ubica función aislada o ajena al territorio en el que tra-
en considerar la repercusión que tiene asumir esta bajan, por el contrario, son funciones dadas en el
responsabilidad, sobre la posibilidad de fortalecer encuentro de subjetividades y, por tanto, afectan la
otros aspectos de la subjetividad de las lideresas vida de cada miembro en la comunidad. Esto se de-
que inciden en la prevención y gestión de conflictos, riva del hecho de que la labor de liderazgo y defen-
tales como las prácticas de autocuidado, manejo sa de derechos involucra la dinamización de relacio-
emocional, aprendizaje de habilidades, cultivo del nes para mejorar el bienestar social en materia de
sistema de creencias, expresión de sentimientos salud, educación, justicia, y garantía de derechos.
e ideas y delimitación cuidadosa de funciones en
Como lo señalan Mónica Carmona, Cinthya Carri-
lo público (como defensora y actora social) y en el
llo y Carolina Mosquera:
ámbito privado. Hacer conciencia de estas prácticas
transgresoras de autocuidado desde las mujeres,
Para las mujeres defensoras, el liderazgo se presenta
implica también evidenciar que la protección y la
como una opción vital que les ha permitido superar las ex-
prevención no están situadas en otro lugar distinto
periencias difíciles de violencia y las ha transformado posi-
al propio, al construido en colectivo, al generado a
tivamente dotándolas de la capacidad de resistir y pervivir.
partir de los lazos de empatía y en las relaciones co-
Para ello, han transitado por un proceso de resignificación
tidianas responsables y respetuosas entre nosotras.
de la propia trayectoria de vida, atravesada por la guerra
El afrontamiento colectivo pasa por el uso del y las violencias, un proceso de crecimiento personal y de
lenguaje y los modos de comunicación interperso- construcción colectiva, definido por ellas muchas veces
nal. Un ejemplo es el término la parcería, comenta- como empoderamiento (2019, p. 30).
do por una lideresa y activista transgénero, que se
refiere a las formas de expresar solidaridad e inclu- Lo anterior denota que muchas mujeres ven en
sión en su comunidad, atendiendo al hecho de que el liderazgo una oportunidad para tener un comien-
el término “sororidad” puede no ser referenciado zo nuevo en sus vidas, en sus comunidades y en sus
con frecuencia en los entornos cotidianos, mien- territorios. Un comienzo que articule sus vivencias
tras que las expresiones “parcero, parcera” y, por e intereses personales con acciones de transforma-
ende, parcería hacen parte de un marco de com- ción social de carácter colectivo.
prensión común más amplio y nombrado. En este
A estas iniciativas se unen las estrategias de
afrontamiento particular, es posible develar que en
protección colectiva, manifestadas en narrativas
algunas comunidades, los actos de inclusión en el
y prácticas cotidianas como la parcería, que hace
lenguaje permiten el fortalecimiento de las relacio-
56 Liga Internacional de Mujeres por la Sintonías Corporales: memoria
Paz y la Libertad / Limpal Colombia y resistencia de defensoras, un
seguimiento a la Resolución 1325

Taller Psicosocial con Madres y Cuidadoras, Tumaco, Nariño, 2019.

referencia a los espacios de encuentro, habla y es- como agentes de cambio en sus realidades. Según
cucha que propician conversaciones sororas sobre sus relatos las lideresas y defensoras se esfuerzan
los sentires asociados con la defensa de derechos por identificar y mitigar las situaciones que afectan
humanos: amor, solidaridad, rabia y resentimiento; a la comunidad a través de la apropiación de sus
emociones que permiten el reconocimiento del va- problemas y accionar sobre los mismos. No obs-
lor intrínseco en cada persona. La parcería resulta tante, varias de ellas advierten que las condicio-
un ejemplo clave para comprender la importancia nes de discriminación y violencia han sido factores
de nombrar y ubicar el lenguaje en la proximidad constantes en las comunidades y territorios donde
dada por la convivencia, de modo que pueda forta- ellas trabajan. Esto se debe a los altos niveles de
lecer los lazos y acciones colectivas por el desarrollo estigmatización que exacerba la discriminación y la
de la comunidad. La prevención de conflictos es po- violencia basada en género, pues todavía persisten
tenciada por estrategias de comunicación incluyen- idearios culturales sobre los roles de cuidado asig-
tes y no sectarias. nados a las mujeres.

La comunidad constituye un eje de experiencia Sin embargo, cuando una mujer opta por aban-
central en la vida de las lideresas y defensoras en- donar los espacios que le asigna la sociedad para
trevistadas. En sus vivencias es posible develar la tomar un rol de defensa se generan ataques a ella,
importancia y sentido que otorga el encuentro in- su familia o sus colectivos. De igual forma, las afec-
tersubjetivo y a las nociones de empoderamiento taciones dependen del contexto, la gente y la cultura
dados por el reconocimiento mutuo y el nombrarse particular del lugar donde la defensora desarrolle
02 Afectaciones psicosociales de lideresas
y defensoras de derechos humanos
57

su labor, pues no todas las comunidades tienen la pero demorita, ninguna”. Yo salí de ese ascensor pálida y
misma fuerza para profundizar en los imperativos de yo me puse a pensar y les dije: “¡vámonos!” a los escoltas,
una sociedad patriarcal. Por ejemplo, las lideresas in- y me dijeron: “¿qué tiene?” y yo no podía... me temblaban
dígenas y afrodescendientes enfrentan diversas for- las piernas. Salí y me subí al carro y les dije: “me acabaron
mas de violencia y discriminación por su raza, etnia y de amenazar en el ascensor, ¿de qué me sirven ustedes si
sexo, lo que a su vez ha generado mayores afectacio- yo estaba en el ascensor sola y ustedes estaban abajo?”
nes a su labor de liderazgo y defensa. (Defensora, intervención en grupo focal, 2019).

Los sentimientos de miedo, desconfianza y ansie-


dad, dados en la esfera individual pueden extender- Las relaciones familiares de las lideresas también
se también a las comunidades cuando se afecta o sufren daños. Algunas de ellas optaron por sepa-
se atenta contra una defensora, generalizando, en rarse de sus familias para protegerlos de amenazas
ocasiones, el silencio alrededor de los hechos que o posibles agresiones, mientras que otras mujeres
produjeron dichas emociones. Sobre la comunidad tuvieron que salir de sus territorios o lugares de na-
también se narran las distancias: “yo creo que es cimiento, también por hechos de desplazamiento
cómplice a veces, guarda silencios. Por ejemplo, en forzado. Estas situaciones repercuten en el sentido
esas violencias de mi barrio yo veo a mis vecinas tan de estabilidad a largo plazo de las relaciones fami-
silenciosas, ya casi no hablan, ya casi no hacen ni liares, las cuales se rodean de significados sobre la
chismes” (Lideresa, comunicación personal, 2019). fragilidad de la vida, la incertidumbre, aspectos que
pueden profundizar los daños en la esfera relacio-
La violencia en Colombia ha generado que una nal de las lideresas y defensoras, que se reflejan en
parte de las mujeres lideresas se sientan cohibidas cuestionar el sentido de ser defensora, y tener sen-
de participar en espacios políticos con sus colecti- timientos de soledad, angustia y tristeza:
vos, ya que en reiteradas ocasiones fueron señala-
das y perseguidas por actores armados que obsta-
Cuando estamos todos reunidos en casa compartimos
culizan la capacidad de acción individual y colectiva.
en casa, mis hijos se preocupan mucho por mí, yo les digo:
El insidioso despliegue de amenazas o agresiones
“si se han de morir nos vamos a morir y me buscan es a mí
ha generado miedo, incertidumbre, y rupturas co-
no a ustedes”, y me dicen: “sí, pero mi mamá debería dejar
munitarias. Ante estas situaciones de vulnerabi-
de estar luchando con esa gente, esa gente nunca les va
lidad, se comentan cuestiones por la solidaridad
ayudar, ni le va a agradecer nada” [...] A veces me siento
entre las personas de una misma comunidad, así
sola por allá pensando, me pongo a llorar... no delante de
como la efectividad de las medidas de protección.
ellos, porque uno llora sí a veces; delante de la gente uno
no llora (Defensora, intervención en grupo focal, 2019).
La falta de solidaridad de las personas de los sectores
sociales LGBTI, de sumarse a las luchas de las personas
Los desgarres en el tejido interpersonal son fac-
transgénero y la falta de sororidad ¡de otras mujeres! De
tores para considerar la prevención como un acer-
reconocer la feminidad en una persona transgénero, y con-
camiento integral que pueda subsanar necesidades
tribuir a todo esto, también hace que las personas como
de habitabilidad, seguridad y condiciones de cola-
que se alejen del entorno social (Lideresa, comunicación
boración en los territorios, pues es allí donde se
personal, 2019).
construye la acción de la lideresa, sus modos de re-
A mí me gustaba mucho ir a gestionar por la comunidad lación y las opciones para mover las cargas y males-
en la gobernación, con la alcaldía y un día llegaron y un tares emocionales en oportunidades de transfor-
hombre me abrazó y me dijo: “hola amiguita, rebajita hay, mación personal y colectiva, dado que en el relato
58 Liga Internacional de Mujeres por la Sintonías Corporales: memoria
Paz y la Libertad / Limpal Colombia y resistencia de defensoras, un
seguimiento a la Resolución 1325

lizadas en colectivo cuenten con un lugar de enun-


ciación mejor definido y, en consecuencia, que sus
reivindicaciones sean efectivamente posicionadas
en su contexto de acción.

A su vez, la comunidad tiene un efecto protector


sobre cada persona que la integra, ya que la apertu-
ra de espacios para la formación y concientización
en los contextos de acción, crean nuevos lenguajes
escritos en clave de inclusión, reconocimiento, in-
formación sobre problemáticas latentes y rutas de
atención, sensibilización con las experiencias de
otras personas con quienes se comparte dentro de
la comunidad y fortalecimiento de la capacidad de
agencia para tomar decisiones y llevar a cabo accio-
nes transformadoras.

La sororidad, el trabajo conjunto, la necesidad de prote-


gernos entre nosotras, acompañarnos, el estar pendientes
unas a otras, que en manada somos más y nos sentimos
más fuertes y eso nos hace mejorar nuestras condiciones
Taller Psicosocial, Meta, 2018.
físicas, yo creo que ahí hay muchas respuestas a eso (Lide-
resa, comunicación personal, 2019).

de la lideresa se logra entrever la preocupación de


varias comunidades que todavía viven en el silen- En la finalización este apartado es posible afir-
ciamiento sistemático. mar que las afectaciones psicosociales a las comu-
nidades, representadas en la voces y expresiones
En varias ocasiones las defensoras manifestaron
corporales e identitarias de las lideresas y defenso-
que los intereses en común, el sentido de pertenen-
ras continúan originándose y evolucionando en las
cia en los colectivos y las vivencias compartidas son
coyunturas y tensiones propias de la cotidianidad
factores que contribuyen a crear mecanismos de
misma. En cada territorio, vereda, barrio, comuni-
afrontamiento. Esto se debe a la confianza y los la-
dad y resguardo, han sido justamente las resisten-
zos afectivos que consolidan con sus comunidades,
cias de las mujeres a las circunstancias tambalean-
para mitigar los daños y vulneraciones a las que se
tes, aquellas que nos dan varias pistas acerca de las
encuentran expuestas. Esto se expresa por la crea-
oportunidades disponibles para interpelar sus pro-
ción de espacios de aprendizaje sobre herramien-
pias vulnerabilidades en los contextos específicos
tas normativas y constitucionales para ejercer la
de acción, asumiendo como procesos para lograrlo:
defensa de sus derechos en general, pero también
la creación, el fomento, la actualización y la trans-
se adquieren conocimientos sobre las particularida-
formación de discursos compartidos que a largo
des que su origen, procedencia, legado y opción de
plazo permeen los significados socioculturales y ju-
vida y sus implicaciones en el marco jurídico-legal
rídico-legales sobre la prevención y no repetición de
y social. Esto posibilita que las movilizaciones rea-
actos violentos y hechos victimizantes.
59

Marcha por la vida de personas defensoras de Derechos Humanos, Bogotá, 2019.


60

¿Conclusiones? Entre conexiones


y complejidades

L
a identificación de daños y afrontamientos ex- gue a exacerbar su exposición a riesgos y daños por
presados en afectaciones psicosociales dentro parte de terceros, esto es, medidas que reconozcan
de las experiencias de defensa de derechos la diferencia y las particularidades en las que están
permitió acercarse a la complejidad, profundidad inscritos los cuerpos de las defensoras.
que implica asumirse como sujeto que emprende
Con respecto a la dimensión Psicosoma, las expe-
liderazgos y trabaja en comunidad para defender y
riencias de defensa fueron un núcleo sensible y de
dignificar la vida.
sentido para las vivencias de las lideresas. El cons-
En la dimensión de Identidad, nacen reflexiones tante actuar por las causas colectivas se convierte,
acerca de la defensa de derechos humanos como gradualmente, en un factor de distanciamiento con
proceso que fortalece el posicionamiento y lugar las necesidades personales e individuales en mate-
desde el que se enuncia la conciencia política, en la ria de salud mental y bienestar psicosocial. Si este
identidad individual y social y, en esta medida, tiene distanciamiento no es atendido, las lideresas se ven
una potencia para fortalecer y reivindicar las cons- en situaciones de malestar psicológico y físico como
trucciones identitarias de los grupos sociales que el estrés, fatiga, insomnio estados depresivos, irri-
han sido sometidos al silenciamiento sistemático tabilidad, miedo, aislamiento social, los cuales son
y la adjudicación de identidades, por parte de los acumulativos y tienen repercusiones sobre sus re-
regímenes hegemónicos y homogeneizadores, que laciones interpersonales, comunitarias y el sentido
de ninguna forma reflejan ni narran las vivencias general de lo que les motiva a defender derechos
reales de estos sectores sociales. En la dimensión humanos. Estas observaciones permiten percatar-
Cuerpo, se identificaron situaciones de vulneración se de la paradoja que subyace a las vivencias de
que persisten y se legitiman en lo cotidiano que, algunas personas que emprenden la defensa de
paradójicamente, se dan desde los daños y desde derechos como la salud, seguridad, acceso a servi-
los intentos de afrontar las situaciones. La militari- cios y pleno despliegue de todas las libertades que
zación de los cuerpos, dinámica que se ejemplificó le corresponden por el hecho de ser humanas, sin
en la medida de protección policial, uso de armas que ello les garantice cambios sustanciales en sus
para la supuesta protección, y asignación de chale- contextos de vulnerabilidad, violencia, opresión y
cos antibalas en el entorno cotidiano, evidencia que otros factores que les impiden gozar de los mismos
en materia de prevención, es preciso crear medidas derechos por los que abogan.
que se ajusten a la visibilidad pública con la que
cuentan las lideresas y defensoras, sin que esto lle-
¿Conclusiones? Entre conexiones y complejidades 61

En la dimensión de Comunidad pudimos captar Las emociones se comparten


una parte de la compleja red en donde se urden en sonrisas, lágrimas, abrazos,
las experiencias identitarias, corporales y psicoso-
besos, comadreos y apretones de
máticas de las lideresas y defensoras. Las voces
de las lideresas enunciaron perspectivas potentes manos: acciones transformadoras
con respecto al lenguaje y su importancia en el con significado y huella en el cuerpo,
encuentro interpersonal, en la significación de las generadoras también de una memoria
vivencias colectivas y la incidencia de los procesos de pertenencia, una memoria colectiva”.
sociales de los grupos y organizaciones en la cons-
trucción de una base política para el ejercicio de
liderazgo. Saberse escuchada, recibida y apoyada portamientos tendientes al aislamiento, temor y
por la propia comunidad es un punto que protege malestar frente a la relación con los demás, si no
la confianza de las relaciones que existen con la son acompañadas para su recuperación, corren
convivencia, el empoderamiento sobre el manejo el riesgo de imprimirse sobre el cuerpo, situación
de las dolencias físicas y de las cargas emociona- que también compromete al psicosoma y, en al-
les, como también el agenciamiento de recursos y gunos casos, a las construcciones identitarias.
herramientas para transformar los modos de re- En esta circunstancia, es indispensable nutrir las
lación violentos en caminos y formas pacíficas de lecturas interseccionales aportadas por enfoques
llegar al bienestar colectivo. diferenciales (territorial, étnico, de género, entre
otros) para vivenciar un proceso de prevención
La búsqueda de apoyo social por parte del gru- fundamentado en la noción de acompañamiento,
po, comunidad, organización o red se destaca como dicho por Luisa Gaindo, Stella Sacipa y Claudia To-
estrategia de afrontamiento, al configurarse como var, como un “estar con, dar calor de vida, renovar
práctica de encuentro para el cuidado entre las per- la confianza, sentir la presencia del otro, escuchar
sonas. Las emociones se comparten en sonrisas, lá- amorosamente” (2005, p. 11), comprensión que
grimas, abrazos, besos, comadreos y apretones de justamente está en armonía con la experiencia de
manos: acciones transformadoras con significado y las lideresas y defensoras, cuando afirman que
huella en el cuerpo, generadoras también de una “proteger es cuidar, es rodear, proteger es defen-
memoria de pertenencia, una memoria colectiva. der y en término de esa vida misma, proteger es
Son, todos estos, núcleos de sentido que funcionan conservar” (Lideresa, comunicación virtual, 2019).
también como puntos de referencia durante el diá-
logo, justamente para situarse en la conciencia de Sin duda, los liderazgos sociales orientados a
que las lideresas y defensoras son conocedoras de la transformación de conflictos transitan caminos
aquello que ocasiona sus malestares emocionales, oscurecidos por todos los factores que inciden en
mentales y físicos, ante lo cual algunas ya han toma- las dificultades para vivir la paz. En muchas oca-
do acción para su transformación. siones, las impresiones y sentires suscitados entre
las lideresas y las investigadoras fueron de incer-
Por el contrario, saberse amenazada, juzgada, tidumbre, cuando surgían cuestiones relativas a
ignorada o cuestionada dota las experiencias de ¿quiénes más se están apuntando a estas luchas?
liderazgo y defensa con sentidos sobre el sufri- ¿cuándo podremos decir que la mayoría se ha uni-
miento y el conflicto, lo cual dilata las posibilidades do a estas causas?
de encuentro con las y los demás para el cuida-
do mutuo, el trabajo colaborativo y la protección Los planteamientos de la Resolución 1325 como
de la vida. En este sentido, las emociones y com- marco normativo reconoce, entre otras cosas, la
62 Liga Internacional de Mujeres por la Sintonías Corporales: memoria
Paz y la Libertad / Limpal Colombia y resistencia de defensoras, un
seguimiento a la Resolución 1325

necesidad de brindar garantías de participación, denuncia, la exigencia e interponer acciones cons-


protección y prevención a mujeres y niñas que se tructivas de paz. Lo anterior, con el fin de dignificar
encuentran expuestas a situaciones de violencia la vida y transformar las lógicas y dinámicas de la
y/o discriminación. No obstante, diecinueve años guerra, que día a día terminan con la vida de más
más tarde de su creación se han visto grandes obs- defensoras y defensores de derechos humanos.
táculos para lograr implementar las disposiciones
Más allá de adquirir conocimientos y habilidades
destacadas.
para exigir garantías en los espacios institucionales,
En el caso de Colombia, la implementación del ellas construyen culturas de paz sintonizándose con
Acuerdo de paz y, en especial, las medidas que ha- la vida misma para generar memorias y resistencias
cen alusión al enfoque de género y la participación colectivas en donde la violencia no sea un referente
política de mujeres en los niveles decisorios de la de sentido. Paulatinamente, configura Subjetivida-
agenda de paz han sido lentas, frágiles, y poco efec- des Políticas para la Vida las cuales, en palabras de
tivas, gracias a la profunda polarización política y a Claudia Tovar, se comprenden como: “la cualidad
los altos niveles de desconfianza que dan la espalda del Sujeto personal o colectivo que en el encuentro
a los cambios que la paz puede traer. Desde este pa- con otros se hace consciente de su propio poder y
norama, diversas esferas de la vida social, han enun- del poder de articularse entre sí para transformar la
ciado la responsabilidad del Estado colombiano de realidad, asumiendo dicha tarea como una opción
dar respuesta oportuna a la situaciones de violencia ética por la producción, defensa y cuidado de la vida”
contra las lideresas y defensoras de derechos huma- (2015, p. 13). El proceso investigativo logró identificar
nos, pues las constantes muestras de violencias tales que los esfuerzos de lideresas y defensoras buscan
como: feminicidios, homicidios, torturas, violencia justamente apartarse de las dinámicas y polarizacio-
sexual, secuestros, detenciones arbitrarias, amena- nes del conflicto para crear y potenciar políticamente
zas, hostigamientos, calumnias, limitación de sus li- nuevas formas de vida compartidas en comunidad.
bertades y condenas injustas han repercutido contra
Gracias al conocimiento de que las defensoras
su salud física, mental y en consecuencia, contra el
y lideresas son sujetos que se comprometen con
bienestar psicosocial de sus comunidades.
dichos esfuerzos por un buen vivir, advertimos la
Ante la inoperancia del Estado colombiano y su trascendencia de las acciones que ellas y sus comu-
limitada capacidad para complejizar u optimizar el nidades emprenden para transformar las memo-
cumplimiento de sus obligaciones en materia de rias y disonancias de la violencia que han permeado
protección y prevención, se han generado impac- sus contextos, acciones que demuestran la centra-
tos desproporcionados en quienes avanzan en la lidad de la prevención y protección en el fomento
búsqueda de espacios desde los cuales elevar la de la paz.
63

Recomendaciones

E
l presente informe identificó las afectaciones de evaluar los niveles de riesgo a los cuales han
psicosociales que han tenido algunas lidere- sido expuestas, sino que se tomen en cuenta
sas y defensoras de derechos humanos en el sus contextos de vida y trabajo, en especial, el
ejercicio de defensa y con base en este análisis se de quienes trabajan en la defensoría de dere-
reconocen no sólo la multidimensionalidad de los chos humanos.
factores que impactan la inclusión de las mujeres
• Garantizar, facilitar, fomentar y proteger la par-
en los procesos de construcción de paz, tal como
ticipación de lideresas y defensoras en los es-
los aborda la Resolución 1325, sino también re-
pacios de decisión en los territorios, como los
flexiones para la comprensión, acompañamiento
Programas de Desarrollo con Enfoque Territo-
y transformación de las afectaciones psicosociales
rial (PDET), pues ello contribuye a la realización
que las mismas defensoras hacen para mejorar su
de Objetivos de Desarrollo Sostenible como fin
situación.
de la pobreza e igualdad de género.

• Se insta al Ministerio de Educación a formular


Recomendaciones para las instancias
estrategias y lineamientos con miras a transfor-
normativas
mar estereotipos relativos a los roles de género
• Se recomienda a las instancias interinstitucio- que incidan en el componente de prevención
nales tomar en cuenta el punto anterior para acogido por la Resolución 1325 contra las vio-
generar medidas de prevención en clave de lencias contra niñas y adolescentes. Esto, con
complejidad, es decir, un accionar sensible a el fin de contribuir a la formación de liderazgos
las necesidades particulares de las mujeres que jóvenes equipados de conocimientos y herra-
trabajan en la defensa de derechos. En este sen- mientas que mitiguen y busquen erradicar las
tido, la generación de diálogos más cercanos en- VBG y la discriminación por orientación afecti-
tre las comunidades y este tipo de instancias es vo-erótica e identidad de género.
un factor que favorece la comprensión y efecti-
• Se insta al Ministerio de Cultura a ejecutar cam-
va respuesta a las experiencias de las lideresas.
pañas innovadoras y participativas de sensibili-
• Se insta al Ministerio del Interior a fortalecer la zación de la mano del MinTIC sobre violencias
operatividad y canales de difusión e informa- basadas en género involucrando a niñas, ado-
ción sobre la Mesa Nacional de Casos Urgentes lescentes y mujeres de todo el territorio nacio-
para el sector social LGBTIQ+ con el fin de que nal para fomentar la orientación de las actitu-
se evalúen como personas cuya orientación se- des e interacciones sociales hacia valores como
xual no sea solo un elemento más al momento el respeto, la no violencia y la no agresión, así
64 Liga Internacional de Mujeres por la Sintonías Corporales: memoria
Paz y la Libertad / Limpal Colombia y resistencia de defensoras, un
seguimiento a la Resolución 1325

como el reconocimiento de la labor que desem- la vida e integridad física y psicológica de las li-
peñan las defensoras, como fundamental para deresas y defensoras.
el desarrollo de la paz.
• Se recomienda a la Fiscalía General de la Nación
• Se hace un llamado a la Consejería Presidencial asegurarse de llevar a los territorios la Directiva
para la Equidad de la Mujer (CPEM) a que incor- 0013 de 2016 a través de informes anuales que
pore los enfoques de género y territorial en los den cuenta de los avances de la tipificación del
planes de Desarrollo Departamentales y Mu- delito de feminicidio. De igual forma, se alien-
nicipales para el 2020, con el fin de reconocer ta a adoptar mayor control de las Fiscalías Sec-
los limitantes que tienen algunas mujeres en el cionales sobre las/los operadores que incluyan
acceso a rutas y recursos y trabajar en su elimi- sanciones cuando se revictimiza a una mujer o
nación efectiva. se tenga desconocimiento y mala praxis de la
normatividad y trato adecuado de atención a
• Duplicar esfuerzos para implementar inmediata
mujeres víctimas de VBG, ya que según la CE-
y efectivamente el Programa Integral de Garan-
DAW15 el hecho de no prevenir, investigar y
tías para Mujeres Lideresas y Defensoras de De-
sancionar todas las formas de violencia por ra-
rechos Humanos y sus planes de acción, tanto
zón de género, raza, u origen étnico además de
a nivel nacional como territorial. Programa que
otros factores, puede dar lugar a un aumento
tiene en cuenta aspectos clave, como preven-
de la violencia contra la mujer en el periodo que
ción, protección y garantías de no repetición y
vive Colombia de post-conflicto.
que será materializado como guía para la par-
ticipación de las mujeres en la política pública, • De manera urgente, y a raíz de los testimonios
el liderazgo y defensa de derechos humanos. de algunas lideresas entrevistadas, en el pre-
Este programa debe tener una amplia difusión y sente informe se hace un llamado de atención
facilitar la inclusión de la mayor cantidad de de- a los gobiernos locales para que desarrollen un
fensoras como sea posible: defensoras indíge- plan de mejoramiento vial que incluya revisión
nas, afrocolombianas, defensoras territoriales, de lugares inseguros para las mujeres, con el fin
defensoras trans, entre otras. de garantizar, entre otras, la óptima iluminación
de las calles, entendiendo esto como un factor
• Exhortar a funcionarias y funcionarios públicos
determinante en la prevención de delitos de
mediante la efectiva aplicación y monitoreo de
abuso y acoso sexual, que en sí representan un
los Protocolos de Servicio al Ciudadano sobre la
arma de guerra que atenta contra la integridad,
ética detrás de la atención oportuna, respetuo-
salud mental y física de las mujeres.
sa y eficaz para con lideresas y defensoras de
derechos humanos, evitando así la re-victimiza-
ción, indiferencia, exclusión o discriminación y Recomendaciones para la comprensión
abuso de poder. y el acompañamiento psicosocial
• Es recomendable que el diseño e implementa- • Fomentar la participación en espacios y mo-
ción de esquemas de seguridad para las muje- mentos para la reflexión sobre los significados
res líderes sean reevaluados, incluyendo una dados a la defensa de derechos y sus intersec-
perspectiva de Acción Sin Daño, así como ma- cionalidades con etnia, orientación sexual, raza,
pear recursos alternativos a las actuales medi-
das de seguridad que militarizan y exponen a 15 Recomendación general número 30 sobre las mujeres en la prevención
riesgos y que, en su lugar, defiendan y protejan de conflictos y en situaciones de conflicto y posteriores a conflictos, pá-
rrafo 35.
Recomendaciones 65

edad y clase social. Es necesaria la realización


de estas actividades de forma progresiva y esta-
ble, de modo que exista un suelo común sobre
el cual dinamizar las relaciones emocionales; de
esta forma, asegurar mínimos de reciprocidad
en el compromiso por el bienestar, factores cla-
ve en la protección del proceso de recuperación
psicosocial.

• Se hace pertinente fomentar la conformación


de diversos grupos de mujeres lideresas y de-
fensoras, ya que esto fortalece el cuidado du-
rante el acompañamiento emocional y político
de ellas y sus comunidades. Estos espacios, ge-
neran un efecto protector al fortalecer los vín-
culos de apoyo en los procesos de recuperación
psicosocial.

• Se recomienda emprender procesos colectivos


entre lideresas y sectores de sus comunidades
donde no se hayan afianzado los vínculos de
confianza, con el fin de que su labor tenga una
recepción en términos de respeto y reconoci-
miento de los aportes hechos para la construc-
ción de paz.

• Fomentar el abordaje de temas relacionados


con la subsistencia económica de las mujeres
por medio de la generación de diálogos acerca
de la importancia de la remuneración de diver-
sos tipos de trabajo, como parte de la identifica-
ción de recursos para afrontamiento de daños
y situaciones de estrés. Esto contribuye a la no-
ción de autonomía e independencia económica
como factores mitigadores de la exposición de
las mujeres defensoras a violencias directas, es-
tructurales y culturales.

• Fortalecer procesos vivenciales y de sensibiliza-


ción, como talleres prácticos con mujeres adul-
tas, niñas y adolescentes, que surjan desde las
lideresas, defensoras, u organizaciones, para
así garantizar la participación con enfoque de
género y vigorizar el resistir en la convivencia
pacífica.
Talleres Cuerpo Memorioso, Caquetá, 2018.
67

Referencias
Alarcón, J. (2009). Palabra y poder. El ‘pütchipü’ y el cruce de Recuperado de http://www.scielo.org.co/pdf/rlcs/v15n1/
fronteras culturales. Gazeta de Antropología, 25 (1). Recu- v15n1a25.pdf
perado de https://www.ugr.es/~pwlac/G25_05Johnny_
Atehortúa, A. (2019). Las voces de las lideresas afrocolombianas.
Alarcon_Puentes.html
Recuperado de http://hacemosmemoria.org/2019/09/08/
Almudena, H. G. (2017). Sexo, género y poder. Breve re- las-voces-de-las-lideresas-afrocolombianas/
flexión sobre algunos conceptos manejados en la arqueo-
Ball, P., Rodríguez, C. y Rozo, V. (2018). Asesinatos de líde-
logía del género. Complutum, 18, 167-174. Recuperado de
res sociales en Colombia en 2016-2017: una estimación
https://revistas.ucm.es/index.php/CMPL/article/view/CM-
del universo. Bogotá: Dejusticia. Recuperado de https://
PL0707110167A
hrdag.org/wp-content/uploads/2018/09/Asesinatos-
Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Li%CC%81deresSocialesColombia2016-2017-VERSIO%C-
Humanos. (2019). Informe de la Situación de los derechos C%81N-FINAL-PARA-WEB-2.pdf
humanos en Colombia. Recuperado de https://undocs.org/
Bastidas, A. (2011). Aproximaciones al daño psicosocial
es/A/HRC/40/3/ADD.3
desde la experiencia de acompañamiento a víctimas de
Angulo, A. (2019). Prólogo. En M. Archila; M. García; L. Parra, violaciones a los derechos humanos e infracciones al De-
y A. M. Restrepo, Cuando la copa se rebosa: luchas socia- recho Internacional Humanitario. En Rappaci, M. L. (Ed.),
les en Colombia, 1975 -2015. Bogotá: Fundación Centro de Reflexiones urgentes en torno a la violencia sociopolítica y el
Investigación y Educación Popular - Programa por la Paz malestar ético (pp. 115-122). Bogotá, Colombia: Editorial
Cinep-PPP. Pontificia Universidad Javeriana.

Amnistía Internacional (2019). Colombia: Incremento de ata- Barreto Daza, Sandra Milena (2018). Los riesgos y el papel
ques contra personas defensoras de los derechos humanos, político de las lideresas sociales en la construcción de la
principal reto de la implementación del Acuerdo de Paz. De- paz territorial en Colombia. Ciudad Paz-ando, 11(1), 7-15.
claración pública. Recuperado de https://www.amnesty. DOI: https://doi.org/10.14483/2422278X.13079
org/download/Documents/AMR2381902018SPANISH.PDF
Bello, M. N. y Chaparro R. (2011). El daño desde el enfo-
Arboleda, S. (2018). Defensa ambiental, derechos humanos y que psicosocial. En Acción sin daño y construcción de paz
ecogenoetnocidio afrocolombiano. Pesquisa em Educação (pp. 31-45). Bogota: Universidad Nacional de Colombia.
Ambiental, 13(1), 10-27. Recuperado de http://www.perio- Recuperado de http://www.bivipas.unal.edu.co/hand-
dicos.rc.biblioteca.unesp.br/index.php/pesquisa/article/ le/10720/651
view/13480
Becker, D. y Weyermann, B. (2006). El enfoque psicosocial:
Arboleda, S. (2019). Rutas para perfilar el ecogenoetnocidio marco conceptual. En Género, transformación de conflictos
afrocolombiano. Hacia una conceptualización desde la y enfoque psicosocial (ficha 2). Berna: Agencia Suiza para
justicia histórica. Nómadas, 50, 93-109. Recuperado de el Desarrollo y la Cooperación (Cosude). Recuperado de
http://nomadas.ucentral.edu.co/nomadas/pdf/noma- http://doc.rero.ch/record/235803/files/02-Gender_con-
das_50/50_6A_rutas_para_perfilar_el_ecogenoetnocidio_ flict_transformation_and_the_psychosocial_approach_ES_
afrocolombiano.pdf D_-_3.217_S_.pdf

Alvarado, S. y Arroyo-Ortega, A. (2017). Subjetividad política: Beristain, C. M. (2010). Manual sobre perspectiva psicosocial en
intersectaciones afrodescendientes. Revista Latinoameri- la investigación de derechos humanos. Bilbao: Hegoa. Re-
cana de Ciencias Sociales, Niñez y Juventud, 15(1), 389-402. cuperado de http://www.corteidh.or.cr/tablas/27117.pdf
68 Liga Internacional de Mujeres por la Sintonías Corporales: memoria
Paz y la Libertad / Limpal Colombia y resistencia de defensoras, un
seguimiento a la Resolución 1325

Blázquez, N. (2012). Epistemología feminista: temas centra- Díaz, D.I., Ortega, M., Prieto, P., y Zabala, S. N. (2012). Muje-
les. En N. Blázquez, F. Flórez, y M. Ríos (Coords.), Inves- res, paz y seguridad. Destejiendo la guerra, tejiendo la paz.
tigación feminista. Epistemología, metodología y represen- Bogotá : Escuela de Estudios de Género, Universidad Na-
taciones sociales (pp. 21-38). México: UNAM . Recuperado cional de Colombia - Fokus, Foro de Mujeres y Desarrollo.
de http://computo.ceiich.unam.mx/webceiich/docs/libro/ Recuperado de http://bdigital.unal.edu.co/47478/1/muje-
Investigacion%20Feminista.pdf respazyseguridad.pdf

Butler, J. (2008). Cuerpos que importan. Sobre los límites mate- Colombia Diversa y La Octava Productora. (2006). ¿Dónde
riales y discursivos del ‘sexo’. Buenos Aires: Paidós. está la diferencia? Recuperado de http://colombiadiversa.
org/colombiadiversa/documentos/diversidad-en-la-es-
Calcagni, M. y Cortínez, V. (2017). Territorios, empoderamien-
cuela/cartilla-donde-esta-la-diferencia.pdf
to y autonomía económica: diversas trayectorias para
avanzar en equidad de género en Chile. Serie Documento Cordero, T., Ospina, L. S. y Correa, T. (Eds.) Mendoza, U.
de Trabajo No. 223. Santiago: Rimisp. Recuperado de ht- (comp.). 2015. Ecos de sonidos de caracolas. Bogotá: Fondo
tps://rimisp.org/wp-content/files_mf/1493915749223AE- de Acción Urgente para América Latina y el Caribe. Recu-
yempoderamientoConcepcionChiloéCalganiyCortinez.pdf perado de https://issuu.com/fondodeaccionurgente-al/
docs/caracola_esp
Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mu-
jer (2019). Observaciones finales sobre el noveno informe pe- Estrada, A. M., Ripoll, K., y Rodríguez, D. (2010). Intervención
riódico de Colombia. Recuperado de https://www.refworld. psicosocial con fines de reparación con víctimas y sus fa-
org.es/pdfid/5ce587b24.pdf milias afectadas por el conflicto armado interno, Revista
de Estudios Sociales, 36. Recuperado de: http://journals.
Comité para la Eliminación de la Discriminación contra la Mu-
openedition.org/revestudsoc/13623
jer, Oficina del Alto Comisionado de Derechos Humanos de
Naciones Unidas (2013). Recomendación general número Frost, M. (2018). Declaración de fin de misión del Relator Espe-
30. Sobre las mujeres en la prevención de confictos y en cial de las Naciones Unidas sobre la Situación de los Defen-
situaciones de conficto y posteriores a confictos. Recupe- sores y las Defensoras de Derechos Humanos. Recuperado
rado de https://www.hchr.org.co/phocadownload/publica- de https://www.ohchr.org/Documents/Issues/Defenders/
ciones/otras/folleto-discirminacion-mujer-WEB.pdf StatementVisitColombia3Dec2018_SP.pdf

Corte Constitucional (21 de mayo de 2013). Auto 098 de Galtung, J. (2016). La violencia: cultural, estructural y direc-
2013, en seguimiento a la Sentencia T-025/04. [MP Luis ta. Cuadernos de Estrategia, 183, 147-168. Recuperado de
Ernesto Vargas Silva]. Recuperado de http://www.corte- http://www.ieee.es/Galerias/fichero/cuadernos/CE_183.
constitucional.gov.co/relatoria/autos/2013/a098-13.HTM pdf

Congreso de Colombia (18 de julio de 1997). Ley 387 de González, A. N. e Hinestroza, A. Y. (2014). Daños psicosocia-
1987. DO: 43.091. Recuperado de https://www.unidad- les provocados por el desplazamiento forzado: historia de
victimas.gov.co/sites/default/files/documentosbiblioteca/ dos mujeres madres cabeza de hogar del distrito de Bue-
ley-387-de-1997.pdf naventura (trabajo de grado), Universidad del Valle (sede
Pacífico), Buenaventura, Colombia. Recuperado de biblio-
Consejería Presidencial para la Equidad de la Mujer (2018).
tecadigital.univalle.edu.co/bitstream/10893/10656/1/CB-
Programa Integral de Garantías para Mujeres Lideresas y
0523788.pdf
Defensoras de Derechos Humanos. Bogotá. Recuperado de
http://www.equidadmujer.gov.co/ejes/publicaciones/pro- Grupo de Gestión Integrada para la Salud Mental (2014).
grama-integral-garantias.pdf Abecé Sobre la salud mental, sus trastornos y estigma. Bo-
gotá: Ministerio de Salud y Protección Social. Recuperado
Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas (31 de octubre
de https://www.minsalud.gov.co/sites/rid/Lists/Bibliote-
de 2000). Resolución 1325 de 2000. Recuperado de https://
caDigital/RIDE/VS/PP/abc-salud-mental.pdf
www.acnur.org/fileadmin/Documentos/BDL/2006/1759.pdf
Guevara, C. A. (2019). Panorama de las personas defensoras de
Defensoría del Pueblo de Colombia (2019). Informe de segui-
derechos humanos y líderes sociales en riesgo en Colombia,
miento a la alerta temprana 026-18. Recuperado de http://
2018 - 2019. Bogotá: Instituto Capaz.
www.defensoria.gov.co/es/public/contenido/8256/Infor-
me-de-seguimiento-a-la-alerta-temprana--026-18.htm Guevara, C. A. y Sánchez, D. (coords.). (2018). Más allá de las
cifras. Segunda parte. Informe enero-junio 2018, Sistema de
Referencias 69

Información sobre Agresiones contra Defensores y Defen- Misión de Verificación de las Naciones Unidas en Colombia
soras de los DD.HH. - SIADDHH. Bogotá: Programa Somos (2019). Informe del Secretario General. Recuperado de ht-
Defensores. Recuperado de https://www.colectivodeabo- tps://colombia.unmissions.org/sites/default/files/sp_-_
gados.org/IMG/pdf/masalladelascifrasespweb.pdf n1928700.pdf

Haraway, D. J. (1995). Ciencia, cyborgs y mujeres. La reinvención Montero, M. (2004). Introducción a la psicología comunitaria.
de la naturaleza. Madrid: Cátedra. Desarrollo, conceptos y procesos. Buenos Aires: Paidós.
Recuperado de http://www.catedralibremartinbaro.org/
Hewitt, N., Juárez, F., Parada, A. J., Guerrero, J., Romero, Y. M.,
pdfs/libro-montero-introduccion-a-la-psicologia-comuni-
Salgado, A. M. y Vargas, M. V. (2016). Afectaciones psicoló-
taria.pdf
gicas, estrategias de afrontamiento y niveles de resiliencia
de adultos expuestos al conflicto armado en Colombia. Mosquera, C., Carmona, M. y Carrillo, C. (2019). Mujeres
Revista Colombiana de Psicología, 25(1), 125-140. Recupera- defensoras libres y seguras: aportes a la verdad para la
do de https://revistas.unal.edu.co/index.php/psicologia/ no repetición. Informe 6. Bogotá: Sisma Mujer y Red Na-
article/view/49966 cional de Mujeres Defensoras de Derechos Humanos.
Recuperado de http://www.indepaz.org.co/wp-content/
Institución Futuro (s. f.) ¿Qué es un Think Tank?. Recuperado
uploads/2019/09/Mujeres-Defensoras-Libres-y-Seguras-
de: https://ifuturo.org/que-es-un-think-tank/
Aportes-a-la-Verdad-Informe-a-la-CEV-SISMA-MUJER-ET-
Lazarus, R. y Folkman, S. (1986). Estrés y procesos cognitivos. AL-18-Junio-2019.pdf
Barcelona: Martínez Roca.
Nefer, A., Hinestroza, A. Y. (2014). Daños Psicosociales provo-
Liga Internacional de Mujeres por la Paz y la Libertad (Limpal cados por el desplazamiento forzado: historia de dos mujeres
Colombia) (2016). Desarmando la vida, reflexiones sobre la madres cabeza de hogar del distrito de Buenaventura (Tesis
Resolución 1325, el desarme y las mujeres en Colombia. Re- de pregrado). Universidad del Valle sede Pacífico, Buena-
cuperado de https://www.humanas.org.co/alfa/dat_parti- ventura. Recuperado de http://bibliotecadigital.univalle.
cular/ar/arc_85748_q_14desarmandolavida2016.pdf edu.co/bitstream/10893/10656/1/CB-0523788.pdf

Liga Internacional de Mujeres por la Paz y la Libertad (Limpal Organización Mundial de la Salud ( s. f.). Temas de salud: géne-
Colombia) (2017). Mujeres por el Desarme: una mirada al ro. Recuperado de https://www.who.int/topics/gender/es/
desarme desde la Resolución 1325. Recuperado de https://
Ovejero, A. (2015). Psicología social e identidad: dificulta-
www.humanas.org.co/alfa/dat_particular/ar/ar_64931_q_
des para un análisis psicosociológico . Papeles del CEIC,
INFORME_1325_2017.pdf
2 (124), 1-17. Recuperado de http://dx.doi.org/10.1387/
Liga Internacional de Mujeres por la Paz y la Libertad (Limpal pceic.14314
Colombia) (2018). Lucha por una reincorporación con digni-
Puentes, A. L. (18 de septiembre de 2019). ¿Cuántos líderes
dad para las mujeres: Informe de seguimiento a la Resolución
sociales han sido asesinados durante 2019? El Colom-
1325 con recomendaciones para procesos de reincorporación
biano. Recuperado de https://www.elcolombiano.com/
[memorias del foro]. Bogotá, 8 de noviembre de 2018.
colombia/paz-y-derechos-humanos/lideres-sociales-ase-
Magallón, C. (2004). Mujeres en los procesos de paz: la Re- sinados-en-colombia-durante-2019-hasta-septiembre-se-
solución 1325 del Consejo de Seguridad. Papeles de Cues- gun-indepaz-PH11611439
tiones Internacionales, 87, 97-104. Recuperado de http://
Procuraduría General de la Nación (2018). Violencia siste-
www.ceipaz.org/images/contenido/1Magallon1325.pdf
mática contra defensores de derechos territoriales en
Martínez, D. R. (2016). La Guardia Indígena Nasa, un ejemplo Colombia. Bogotá: Instituto de Estudios del Ministerio
de intervención noviolenta: relaciones entre la teoría y la ex- Público (IEMP). Recuperado de https://www.procuraduria.
periencia específica. Recuperado de http://www.fes-socio- gov.co/portal/media/file/180710_Violencia%20sistemati-
logia.com/la-guardia-indigena-nasa-un-ejemplo-de-inter- ca-contra%20defensores-derechos-territoriales.pdf
vencion-noviolenta-rela/congress-papers/3210/
Procesos de Comunidades Negras (PCN) ; Madre ; Clínica
Médicos Sin Fronteras (2013). Las heridas menos visibles: salud de Derechos Humanos y Justicia de Género (HRGJ) de la
mental, violencia y conflicto armado en el sur de Colombia. Universidad de Nueva York ; Washington Office on Latin
Recuperado de https://www.msf.es/sites/default/files/le- America (WOLA) y Movimiento de Mujeres Negras, Afroco-
gacy/adjuntos/Informe-Colombia_Junio-2013.pdf lombianas, Raizales y Palenqueras en sus Identidades Di-
versas (2019). Violaciones a los derechos humanos basados
70 Liga Internacional de Mujeres por la Sintonías Corporales: memoria
Paz y la Libertad / Limpal Colombia y resistencia de defensoras, un
seguimiento a la Resolución 1325

en el género de las personas afrodescendientes . Un informe Sisma Mujer (2016). Programa de Garantías para lideresas y de-
para el Comité de Naciones Unidas para la Eliminación de fensoras de derechos humanos. Recuperado de http://www.
la Discriminación Contra la Mujer. Recuperado de https:// sismamujer.org/wp-content/uploads/2016/05/0-4.pdf
colectivodeabogados.org/IMG/pdf/violaciones_a_los_de-
Subirats i Humet, J (dir.); Gomà Carmona, R & Torruella, J
rechos_humanos_basados_en_el_genero_de_las_perso-
(coords.). (2005). Análisis de los factores de exclusión social.
nas_afrodescendientes-_espanol.pdf
Bilbao: Fundación BBVA. Recuperado de http://www.gru-
Programa de comunicaciones del Consejo Regional Indígena pobbva.com/TLFU/dat/DT_2005_04.pdf
del Cauca (CRIC) ( 2019). Vida y lucha en los 48 años del
Tapias, N. (2019). Situación de las lideresas y defensoras de de-
CRIC, movimiento indígena de Colombia y de Latinoamérica.
rechos humanos: análisis desde una perspectiva de género
Recuperado de https://www.cric-colombia.org/portal/vi-
e interseccional. Bogotá: Capaz. Recuperado de https://
da-y-lucha-en-los-48-anos-del-cric-movimiento-indigena-
www.instituto-capaz.org/capaz-policy-brief-4-2019-situa-
de-colombia-y-de-latinoameric
cion-de-las-lideresas-y-defensoras-de-derechos-huma-
Ribeiro, D. (2018). (2018). Breves reflexiones sobre Lugar de nos-analisis-desde-una-perspectiva-de-genero-e-intersec-
Enunciación. Relaciones Internacionales, 39, 13-18 . Recu- cional
perado de https://repositorio.uam.es/bitstream/hand-
Tavares, W. C., Ribeiro, P. M., Rodrigues, P., y Oliveira,
le/10486/685440/RI_39_2.pdf?sequence=1
A. A. (2017). Colcha de retazos: instrumento de re-
Sacipa, S., Tovar, C. y Galindo, L. F. (2005). Guía de orienta- colección de datos en la investigación cualitativa. In-
ciones para el acompañamiento psicosocial a población dex de Enfermería, 26(3), 175-179. Recuperado de
en situación de desplazamiento. Bogotá: CHF . Recupe- http://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pi-
rado de https://www.globalcommunities.org/publica- d=S1132-12962017000200012&lng=es&tlng=es
tions/2005-acompanamiento-psicosocial.pdf
Tovar, C. (2015). Subjetividad política para la vida, resistencia al
Sales, T. (2017). Repensando la interseccionalidad desde la desplazamiento forzado e intervención psi como potencia po-
teoría feminista. Ágora. Papeles de filosofía, 36( 2), 229-256 lítica en Micoahumado. Tesis de doctorado. Pontificia Uni-
. Recuperado de http://www.usc.es/revistas/index.php/ versidad Javeriana. Bogotá. Recuperado de: https://repo-
agora/article/view/3711/4278 sitory.javeriana.edu.co/bitstream/handle/10554/19128/
TovarGuerraClaudiaConstanza2015.pdf?sequence=1&i-
Sánchez, E. L. (2017). El movimiento LGBT (I) en Colombia: la
sAllowed=y
voz de la diversidad de género. Logros, retos y desafíos.
Reflexión Política, 19( 38), 116-131. Recuperado de https:// Valle, S. (2016). La interseccionalidad como herramienta meto-
www.redalyc.org/pdf/110/11054032009.pdf dológica para el análisis cualitativo de las vivencias de las
mujeres víctimas de violencia de género: caleidoscopio de
Sánchez, D. y Muñoz, S. (coords.). (2018). La Naranja Mecá-
desigualdades y múltiples discriminaciones. Recuperado de
nica. Informe anual 2018, Sistema de Información sobre
https://proceedings.ciaiq.org/index.php/ciaiq2016/arti-
Agresiones contra Personas Defensoras de Derechos Huma-
cle/download/943/926
nos en Colombia - SIADDHH. Recuperado de https://www.
colectivodeabogados.org/IMG/pdf/informe-somos-defen- Villa, J. D. (2012). La acción y el enfoque psicosocial de la in-
sores-2019-espanol-web.pdf tervención en contextos sociales: ¿podemos pasar de la
moda a la precisión teórica, epistemológica y metodoló-
Schetman, A. y Berdegué, J. (2004). Desarrollo territorial rural,
gica? El Ágora USB, 2 (2), 349-365. Recuperado de https://
Rimisp. Santiago de Chile: Centro Latinoamericano para
dialnet.unirioja.es/servlet/articulo?codigo=4550239
el Desarrollo Rural . Recuperado de https://www.rimisp.
org/wp-content/files_mf/1363093392schejtman_y_ber- Young, I. M. (1990). La justicia y la política de la diferencia. Ma-
degue2004_desarrollo_territorial_rural_5_rimisp_CArdu- drid: Cátedra.
men.pdf

Silva, P. E. (2017). Los movimientos sociales, el feminismo co-


munitario y sus aportes a los procesos de construcción de
democracia en Colombia. Ciudad Paz-ando, 10( 1), 59-67.
doi: https://doi.org/10.14483/2422278X.11641
Sintonías
corporales
Memoria y resistencia de defensoras,
un seguimiento a la Resolución 1325

Potrebbero piacerti anche