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Giancarlo Grández Ramírez presenta una demanda de amparo contra EsSalud para dejar sin efecto la terminación de su vínculo laboral y ser reintegrado. Trabajó para EsSalud desde 2010 a 2014 a través de contratos de suplencia y fue rotado entre áreas. El juzgado rechazó la demanda al considerar que no acreditó su ingreso a través de concurso público y que los contratos fueron de suplencia temporal. La demanda busca que se declare la desnaturalización de sus contratos a uno de duración indefinida
Giancarlo Grández Ramírez presenta una demanda de amparo contra EsSalud para dejar sin efecto la terminación de su vínculo laboral y ser reintegrado. Trabajó para EsSalud desde 2010 a 2014 a través de contratos de suplencia y fue rotado entre áreas. El juzgado rechazó la demanda al considerar que no acreditó su ingreso a través de concurso público y que los contratos fueron de suplencia temporal. La demanda busca que se declare la desnaturalización de sus contratos a uno de duración indefinida
Giancarlo Grández Ramírez presenta una demanda de amparo contra EsSalud para dejar sin efecto la terminación de su vínculo laboral y ser reintegrado. Trabajó para EsSalud desde 2010 a 2014 a través de contratos de suplencia y fue rotado entre áreas. El juzgado rechazó la demanda al considerar que no acreditó su ingreso a través de concurso público y que los contratos fueron de suplencia temporal. La demanda busca que se declare la desnaturalización de sus contratos a uno de duración indefinida
Giancarlo Grández Ramírez interpone una demanda de amparo contra el Seguro
Social de Salud – Red Asistencial de Tarapoto (EsSalud), la cual solicita que se deje sin efecto la carta 1600-D-RATAR-ESSALUD-2014, ya que este comunica el terminó de su vínculo laboral, también que se le reintegre a sus labores y el nivel que venía empeñando. También afirma que viene desempeñando sus deberes desde el 01 de Marzo de 2010 hasta el 31 de Diciembre de 2014, a través de un contrato de suplencia. También asegura que fue rotado a distintas áreas, lo que acredita que ha prestado diferentes servicios y por ende sus contratos se desnaturalizaron en una relación a plazo indeterminado. Se alega la vulneración de los Derechos al trabajo y a la adecuada protección contra el despido arbitrario. Es ahí donde la entidad demandada argumenta que el demandante ingresa a laborar a EsSalud a efectos de ejercer labores de técnico de servicios administrativos y apoyo 1, nivel T-2, a través de un contrato a plazo determinado, este para cumplir las funciones que se le designaron al trabajador David Zócimo Meza Aguirre, este último siendo promovido, toda vez que no tenía relación laboral de naturaleza determinada con la entidad y que su contrato haya vencido. En este punto se sustenta la entidad demandada para que en la demanda interpuesta por Giancarlo Grández Ramírez sea evaluada de igual manera. El Juzgado Especializado en lo Civil de Tarapoto, con fecha 8 de junio de 2015, declaró improcedente la demanda, por estimar que el demandante no ha acreditado su ingreso vía concurso público de méritos al cargo o puesto respecto al cual solicita su reposición, acreditándose en autos que el demandante ingresó a laborar bajo la modalidad de suplencia, siendo rotado a diferentes áreas, no siendo posible su reincorporación a la Administración Pública. La Sala revisora confirmo la apelada por similar fundamento. Lo que pretende la demanda es la reincorporación del demandante en sus labores habituales, y que se declare la desnaturalización de su contrato como uno de duración indeterminada, más el pago de costos y costas del proceso. La Constitución Política del Perú en el artículo 22, establece que “El trabajo es un deber y un derecho. Es base del bienestar social y medio de realización de la persona”. Pero en este caso el problema radica en determinar si los contratos de trabajo de suplencia suscritos entre el demandante y entidad demandada se desnaturalizaron y se convirtieron en un contrato de plazo indeterminado y que este solo podía ser despedido por causa de su conducta o capacidad laboral. EXP N° 01789 2013-PA/TC Doña Maritza Fernández Baca Salcedo interpuso una demanda de amparo contra el Proyecto Especial Plan Copesco, para que este deje sin efecto el despido arbitrario por el cual fue objeto. También para que se disponga su reposición laboral como asistente administrativo de la Coordinación de Estudios Pre-Inversión, con categoría T-2, con el abono de los costos procesales. Además este manifiesta que ha laborado desde el 01 de Febrero de 2007 hasta el 31 de diciembre de 2011, bajo un contrato laboral, que estuvo sujeto a un horario de trabajo, bajo la subordinación y con la remuneración. Además refiere haber prestado servicios suscribiendo contratos de trabajo, esto sin suscribir contrato a uno, lo cual evidencia una desnaturalización de sus contratos a uno de plazo indeterminado, también se alega una vulneración hacía sus derechos constitucionales al trabajo, a la protección contra el despido arbitrario e defensa, al debido proceso y de la estabilidad laboral. El Procurador Público del Gobierno Regional de Cusco responde la demanda alegando que la accionante realizó labores en forma interrumpida, con lo cual no cumple el requisito de los 5 años de servicios conforme lo prevé el artículo 74 del Decreto Legislativo 728. Este también señala que su contrato era de naturaleza temporal, por lo que éste concluyó en atención al vencimiento del plazo determinado. Segundo el Juzgado Mixto, declaró fundada la demanda, por estimar que se ha acreditado la existencia de un vínculo laboral a plazo indeterminado entre la demandante y su empleador y que su despido carecía de causa justa. Pero la Sala Superior revisora, revocó la apelada y declaró infundada la demanda, por considerar que de lo actuado no se advierte acto lesivo en contra del derecho constitucional al trabajo de la recurrente. La parte demandada argumenta que la actora no fue despedida, pues su contrato de trabajo era de naturaleza temporal, y se precisa que la demandante debe acudir a la vía del proceso laboral para ventilar su pretensión, ya que el proceso de amparo no tiene una naturaleza restitutiva de derechos. La Constitución Política del Perú en el artículo 22, establece que “El trabajo es un deber y un derecho. Es base del bienestar social y medio de realización de la persona”. También al derecho constitucional y a la protección adecuada contra el despido arbitrario reconocido en el artículo 27 de la Constitución, y señalar que este Tribunal en la STC 0976-2001-AA/TC delimitó su contenido e interpretó que debe entenderse por protección adecuada contra el despido arbitrario.