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Transgrediendo la mirada.

Confluencias entre moda, género y arte*


Transgressing the look. Confluences between fashion, gender and art

Mara Rodríguez Venegas**


Universidad de las Artes

Resumen Abstract
El presente artículo propone reflexionar sobre las re- In the present article an analysis about the relation-
laciones cruzadas entre arte, moda y género en la praxis ship between art, fashion and genre in the artistic prac-
artística del diseño de modas. El espacio ganado por el tice of fashion design is addressed. The space delimited
fenómeno moda en la sociedad actual ha llevado al hom- by fashion phenomenon in the current society conforms
bre a seguir determinados estereotipos sociales que le several social stereotypes with special interest in the visu-
otorgan especial interés a lo visual. La construcción de al aspects. The canons of beauty and life’s style created for
cánones de belleza y estilos de vida pensados para el con- human consumption represent a start point for design-
sumo ha sido un punto de partida para las creaciones de ers, who use to break frontiers between art and design.
algunos diseñadores que tienden a invisibilizar las fronte- Thus, it’s necessary to make a concept that explain when
ras entre los ámbitos del diseño y el arte. Por ello resulta the fashion became in art and this situation is called fash-
necesario conceptualizar la moda cuando se acerca a los ion with form of art. This concept allows to understand
espacios privativos de lo artístico a partir del despliegue the work of designs based on genre problems and suggest
del concepto moda con forma de arte. Tal construcción a new read of designs where art, fashions and genre are
conceptual permite comprender la obra de diseñadores mixed together.
que apoyados en las problemáticas de género, sugieren Keywords: Art, Fashion, Genre, Fashion with form of
una relectura de sus creaciones, al transgredir la mirada art, Beauty, Design.
donde confluyen arte, moda y género.
Palabras clave: Arte, Moda, Género, Moda con for-
ma de arte, Belleza, Diseño.

Referencia de este artículo (APA): Rodríguez Venegas, M. (2014). Transgrediendo la mirada. Confluencias entre moda, género y arte.
Pensamiento Americano, 7(12), 106-124.

Recibido: 18 de noviembre de 2013 • Aceptado: 30 de enero de 2014


* Articulo resultado del proyecto de tesis de maestría en Historia del Arte que defendí en el 2012, por la Universidad de La Habana,
en la Facultad de Artes y Letras. Titulado “Arte con Moda?, Un estudio de la huella del proyecto Arte y Moda en la cultura cubana
actual”.
** Licenciada en Filosofía (Universidad de La Habana, 2007), Máster en Historia del Arte (Universidad de La Habana, 2012). Se
desempeña como Profesora Asistente de Estética del Instituto Superior de Arte (ISA). Ha cursado postgrados sobre Estética, Arte
y Teoría de la Cultura. Ha participado como ponente en conferencias y eventos de especialidades a fines en el ISA, la Universidad
de la Habana, la Universidad Central de las Villas “Marta Abreu”, La Galería Raul Oliva, entre otros. Su línea investigativa versa
sobre las relaciones entre el arte y la moda en la sociedad actual. mara.rodriguez@isa.cult.cu

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Introducción teóricos se han acercado a ella desde diferentes


En los últimos tiempos la dinámica de la disciplinas como: la filosofía, la psicología y la
moda ha ganado un espacio meritorio dentro sociología. Como objeto de estudio, la moda
de la vida moderna. Su capacidad de crear y sa- despertó la atención de algunos pensadores
tisfacer necesidades y estilos de vida la han he- como George Simmel (1858- 1918) y Thorstein
cho articularse de manera lógica en la vida del Veblen (1957- 1929). El primero en su texto
hombre moderno. Su afianzamiento como fe- “Filosofía de la moda” (2011), destacó el papel
nómeno alcanzó validez desde la Modernidad. de la distinción como un elemento congruen-
De este modo adquiere un sistema de valores te a la dinámica de la moda y que al mismo
consustanciales con la dinámica económica tiempo explicó su carácter cíclico dentro de la
donde lo nuevo, lo efímero y lo cambiante co- dinámica social moderna (Simmel, 2011). Ve-
bran sentido apuntado al afianzamiento de una blen por su parte en su texto “Teoría de la clase
ética del tener. Este cuadro valorativo viabiliza ociosa” publicado por primera vez en 1899 en-
la fácil inserción del fenómeno de la moda en tiende la moda en relación al consumo (Veblen
la contemporaneidad al adquirir sobre la base 2000). Su teoría sobre la misma la hace validar
de dichos valores otras cualidades que apun- el llamado “consumo ostensible u ostentatario”
tan a la creación de estereotipos, cánones de como una categoría que marca mecanismos de
belleza o estilos de vida. Dicho esto el presente distinción y superioridad mediante el empleo
artículo pretende reflexionar sobre las relacio- de símbolos que posibilitan que no todas las
nes cruzadas entre moda, arte y género en el clases sociales puedan consumir los mismos
contexto de la sociedad contemporánea don- productos (Veblen 2000). De esta manera ad-
de los medios de comunicación y la tecnología vierte que:
construyen estereotipos e ideales de conductas
a partir de los roles sociales de lo masculino y El gasto en el vestir tiene (…) la ventaja
lo femenino. de ofrecer al observador una indicación
de la situación pecuniaria que puede
1. Apuntes necesarios sobre el fenómeno apreciarse a primera vista, pues en ma-
moda teria de ostentación es una característi-
El fenómeno moda se ha proyectado en ca que se encuentra presente de modo
todas las esferas de la vida de la mano de su más notorio y acaso universal en lo que
aliado, el diseño. Por esta razón conviven a se refiere al vestido que en ninguna otra
la misma vez modas de equipos electrónicos, especie de consumo (Veblen; 2000, 177 )
modas de diseños de interiores, de muebles, de
carros, de vestimenta entre otras. Por el rol que El consumo actúa como un factor determi-
esta última ha jugado en la vida, numerosos nante en el análisis de Veblen, quien es consi-

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derado por la historiografía como uno de los tradicionalmente se explicaban de forma sin-
autores del enfoque clásico de la moda. Mien- gular sin tener en cuenta alguna relación con
tras Simmel (2011) asume la distinción como su entorno. De ahí que este autor entienda el
uno de los resortes que mueve la moda en la impacto de la moda en congruencia con las ca-
sociedad moderna, Veblen (2000) prefiere, racterísticas de la sociedad moderna, pues des-
observar su comportamiento desde ese con- de el momento en que la moda responde a un
sumo ostensible, que parece funcionar como determinado contexto, estimula expectativas,
un ejercicio de poder social justificando así el fantasías y sueños de sus consumidores. Por
carácter cíclico de la moda. Como podemos ello este autor es de la opinión que los objetos
ver, el aporte de Veblen (2000) se torna fun- se consumen principalmente por su valor de
dacional para las comprensiones posteriores cambio, en razón del prestigio y el status social
del fenómeno moda, la cual entiende insertada (Lipovestky, 1990). De ahí que consideremos
a la dinámica económica de la sociedad mo- que “el consumo de moda es un instrumento
derna. Aunque sus aportes sobre el estudio de de jerarquía social donde los objetos son un
la moda pertenecen al periodo clásico, se han ámbito de producción social de diferencias y
convertido en referencia directa de investiga- valores clasistas” (Martinez, s.f, 102). En la
ciones posteriores, que entienden el consumo misma línea de este pensamiento, el filósofo
como una categoría indispensable que explica francés Gilles Liovetsky (1990) introduce su
la movilidad de muchos de los fenómenos que criterio en torno a la moda como un elemento
acontecen en la época actual. (Martinez, s.f) distintivo de la sociedad moderna, como pro-
ductora de sensibilidades, relaciones sociales y
Desde mediados del siglo XX, surgen los estilos de vidas diferentes.
llamados enfoques contemporáneos de la
moda, que toman el consumo como uno de los A diferencia de Simmel, Lipovetsky obser-
elementos más importantes del análisis, y en la va los cambios que experimenta el fenómeno
mayoría de los casos establecen una relación moda, al que prefiere estudiar dejando a un
recíproca entre la moda y el consumo. El filó- lado los conceptos de la distinción y de dife-
sofo Jean Baudrillard basándose en tal criterio renciación. Su propuesta recogida en el libro
asegura que “la forma moda se convierte en la “El imperio de lo efímero” (1990) anuncia “los
columna vertebral de la sociedad de consumo” puntos de inflexión organizativos, estéticos y
(Lipovetsky 1990, p 193) al ser entendida como sociológicos que han determinado el recorrido
parte importante de las relaciones sociales pluricelular de la moda” (Lipovetsky 1990, p
que tienen lugar en la sociedad. El mérito de 12). El autor establece una diferencia en torno
su pensamiento está en el hecho de ubicar en a algunos análisis precedentes del fenómeno
un solo cuadro explicativo los fenómenos que moda, donde generalmente encontramos la

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construcción de una historia de la moda desde nocidas Casas de Moda, por la popularidad de
el progreso innegable de los diferentes estilos, los modistos y diseñadores, y por la autonomía
así como el papel de la elegancia, tal como si que gana la moda en la sociedad moderna que
fueran los únicos resortes que al parecer, justi- se vuelve cada vez más novedosa y seductora2
ficaran el lugar de la moda en el vestir. La cos- (Lipovetsky, 1990).
movisión de Lipovetsky le permite compren-
der que la moda se encuentra al mando de la El análisis que propone este autor sostiene
sociedad moderna, y con ella lo efímero y la algunos puntos de diferenciación con respecto
seducción constituyen los elementos más im- a estudios precedente sobre la moda. Liovetsky
portantes que la califican hoy. (1990) centra su punto de vista no en la histo-
ricidad de los estilos de vestir, sino en el lugar
La propuesta de análisis de Lipovetsky y el papel que ocupa la moda como parte del
apunta hacia la división de la moda en dos sistema de relaciones sociales. En este sentido
épocas, la primera desde el siglo XV hasta el podemos notar la importancia que también
XIX, y la segunda: desde la segunda mitad del ocupa el consumo dentro de su teoría, pues a
siglo XIX hasta el siglo XX (Lipovetsky, 1990). través de él se masifica o democratiza la moda
Esta diferenciación de etapas se basa en los en el vestir. Esto puede ilustrarse a partir del
grados de socialización del fenómeno. En la impacto que tuvo “prêt–à–porter”3 a mediados
primera etapa el autor entiende la moda en su del siglo XX, trayendo como consecuencia la
fase inaugural. En este momento se revelan sus democratización o masificación de la moda.
incipientes rasgos sociales y también estéticos
en grupos muy restringidos que monopolizan Siguiendo el criterio de Liovetsky (1990),
tanto su poder como sus creaciones (Lipovets- 1
desde la revolución industrial la moda pasa por
ky, 1990). Aquí es donde lo artesanal tiene un
lugar significativo. En su segunda etapa: desde
2 El modisto inglés Charles Fredrick Worth (1825- 1895) fue
el siglo XIX hasta el siglo XX, la Alta Costura y el primero en fundar una Casa de Modas en París. En ella
la confección industrial alcanzan un importan- se diseñaba ropa por encargo, que no solo estaba destinada
a ser utilizada por nobles sino también por los “nuevos
te papel, se comienza a promover una nueva ricos”, pues estos últimos la empleaban como emblema de
distinción. A raíz del cambio de producción social, y la
visualidad que se hace acompañar por las co- aparición y especialización de la máquina de coser, las clases
altas que carecían de cualquier título nobiliario, disfrutarían
de diseños exclusivos, realizados por la industria con la
firma del diseñador principal. Este hecho marcaría el papel
y el lugar que tiene la moda en el modo de producción
1 En esta etapa los modistos comienzan a darse a conocer, y capitalista, ya que la distinción y el consumo será las
sus trabajos tienden a ser encargados por reyes, duques… nuevas directrices de sobre las cuales se potencie el destino
y personas con título nobiliario. Entre los nombres más de la moda amen de las cualidades que asuma en épocas
significativos citamos a: Madame Raimbaud, Maurice posteriores.
Beauvais, Vignon, Palmyre, Victorine, Staub, Blain, 3 Prêt-à-porter es una expresión francesa que significa
Chevreuil… y Rose Bertin (1747- 1813) quien fungía textualmente «Listo para llevar». Se refiere a las prendas
como sombrerera y modista de la reina María Antonieta de de vestir producidos con patrones que se repiten para
Francia. diferentes tallas en función de su demanda.

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varios estadios o fases que tienen como base el social de imágenes y de sujetos con una gran
consumo. Este autor concuerda con la exis- carga de espectacularidad (Debord, 1990). Este
tencia de una primera fase donde la moda se fenómeno se ha sustentado particularmente a
produce para las clases élites que hoy se conoce partir del despliegue de la técnica y la tecnolo-
como moda de “Alta Costura” También pode- gía en la vida del hombre.
mos hablar de una segunda fase que comprende
la democratización de la moda con el prêt–à– Desde la promulgación y defensa del pro-
porter. Y por último una tercera fase, que hoy yecto moderno se confiaba que la ciencia y la
habría que reconocer, que considera la moda técnica viabilizarían el desarrollo social y hu-
que se produce para diferentes grupos socia- mano, pero la humanidad “en lugar de entrar
les (Lipovetsky, 1990). Entonces en el estudio en un estado verdaderamente humano, desem-
del fenómeno moda es obligada la referencia bocó en un nuevo género de barbarie”(Ador-
a la relación que se establece con el consumo y no & Horkheimer, s.f p.2) Tal y como habían
la masividad, a partir del proceso de socializa- anunciado los filósofos alemanes Adorno y
ción. La moda se hace para las clases altas pasa Horkheimer, el desarrollo de las ciencias y en
por un filtro donde las colecciones presentadas particular de la técnica y la tecnología parecían
por diseñadores se imitan realizándose con te- situar al hombre ante un nuevo panorama,
jidos de una calidad inferior, adaptándolas a las donde su autonomía se diluía y perdía prota-
necesidades de las clases medias y bajas, para gónico.
ser comercializada luego en los mercados, bajo
los preceptos de la novedad que imponen las El singular descentramiento del sujeto, vis-
colecciones de otoño- invierno, primavera-ve- to y estudiado desde la teoría, valida el lugar
rano. A partir de aquí podemos observar por que comienzan a ganar los objetos o cosas en
qué Liovetsky (1990) es partidario de explicar la vida del hombre. Las imágenes publicitarias
el fenómeno de la moda dentro de la sociedad trabajadas artísticamente promueven la incli-
y no como un segmento autónomo. nación del gusto hacia historias ficticias que
se crean alrededor de eso objetos. Su presen-
2. Enfocando la mirada: confluencias en- tación en la escena cultural se acompaña de lo
tre moda, medios de comunicación y género espectacular como su principal atributo, una
Más allá de la relación de la moda con el cualidad que marca su favoritismo tanto en el
consumo, de su poder cíclico evaluado a par- mercado como dentro de las necesidades del
tir de la distinción y sobretodo del contexto en hombre. Hoy en día no se concibe la entrada de
que se desarrolla, la moda también ha formado un producto o marca al mercado, sin que esté
cánones de belleza a partir de estilos de vidas. acompañado de imágenes espectaculares, ni de
Ello ha sido posible a través de la construcción spots publicitarios que cuenten la una suerte

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de historia de ficción que al mismo tiempo se nidad o masculinidad. Estas construcciones


vuelva real. sociales tienen que ver con las disímiles ma-
neras en que se ha pensado y conceptualizado
En este contexto de ficción y realidad se el género y con el debate que ha suscitado en
construyen cánones e ideales de belleza mar- el campo de la teoría y de las investigaciones
cados por la sensibilidad contemporánea. Los sociales.
medios de comunicación se convierten en-
tonces en los principales productores y dis- Según las estudiosas de esta temética Ceci-
tribuidores de imágenes espectaculares mate- lia Blondet y Patricia Oliart la categoría género
rializando una suerte de idilio por las formas tiene una fuerte carga cultural contextualiza-
estilizadas. Sobre este particular Umberto Eco da en la sociedad, a partir de la cual elabora
(2006) apunta que “los medios de comunica- sus convenciones sobre masculinidad o feme-
ción de masas ya no presentan un modelo uni- nidad. (Blondet & Oliart s.f) Por esa razón el
ficado, un ideal único” (p. 426) a seguir, sino género tiende poseer una influencia desde lo
que más bien proponen diferentes estilos de social, al readecuarse y “ser el resultado de
vida que coinciden con disímiles cánones de nuestra interacción con las convenciones so-
belleza, permitiendo que el hombre se sienta ciales, las prácticas a nuestro alrededor y nues-
identificado siempre y no excluido o aislado. tra comprensión de ese entorno. (Blondet &
De esta formar la inclusión y el pluralismo se Oliart s.f p.4). De esta forma lo binario deviene
vuelven elementos sintomáticos de las dinámi- una suerte de ordenamiento social para pensar
cas de las sociedades de consumo, donde los las problemáticas de género. Quizás esta con-
gustos, estilos de vidas y modos de comporta- cepción se encuentra muy a tono con la Mo-
miento parecen estar regidos por el poder de dernidad que exaltó los valores racionalistas,
los medios de comunicación. positivistas y binarios. A partir de este criterio
se pensó lo femenino/masculino; mujer/hom-
El mundo de espectáculo, el deporte, los bre; macho/hembra, como símbolo de valores
negocios y hasta la política son algunos de los opuestos. Este hecho se fue dinamizando en
terrenos donde se legitima la construcción de todas las esferas hasta expresarse en el sistema
imágenes desde el punto de vista social. Com- moda donde el universo femenino ha estado
portamientos, modos de vestir y de hablar son asociado a lo privado, al ornamento, a la deco-
algunas de las piezas claves que venden los me- ración y al adorno, mientras que lo masculino
dios de comunicación como paradigmas esté- se identifica con lo público, con lo laboral, con
ticos o ideales a seguir. También alrededor del la simpleza, la fortaleza y la sobriedad. Ambas
ser humano se crean mitos y estereotipos que visiones del género construidas desde el pensa-
acentúan en la mayoría de los casos su femi- miento moderno, incrementaron la mirada de

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los imaginarios femenino y masculino a partir son concebidos como signos referenciales,
de patrones de vestir excluyentes y distintivos. construidos socialmente y en consecuencia
Este criterio reafirmado desde una postura no son algo dado, preconstruido, sino fruto de
excluyente se avala desde lo social a partir de la lucha que opera en su propia construcción”
normas de comportamientos, gestos, lenguajes (González, 2013, p. 183). Las relaciones de lu-
y modos de vestir. cha entre los pares dicotómicos cobran sentido
a partir de su inserción en un sistema de rela-
Blondet y Oliart (s.f) destacan entre las co- ciones sociales. Ellos parecen operar a partir de
rrientes de estudio de género la que entiende la dominación de uno sobre otro. En ellos las
el género como categoría analítica que postula diferencias pueden darse a través del sexo, del
que “las categorías excluyentes hombre y mu- género, del color de la piel, del poder adquisi-
jer no pueden existir una sin la otra” (s.f, p.10). tivo entre otros.
Es decir que una de ellas se construye a partir
de su oposición con la otra. La concepción cul- La manera en que ha sido construida y visi-
tural obliga al “bello sexo” a cumplir determi- bilizada la imagen femenina en la sociedad oc-
nados roles sociales, y su legitimación dentro cidental se sustenta en los tres roles de la mujer
del circuito social se proyecta en función del como hija, madre y esposa, con atributos que
cumplimiento de estas metas como una “as- van desde su educación hasta su sensibilidad
piración”. Independientemente de sus anhelos y carisma. Estas cualidades construidas desde
desde el punto de vista laboral y humano, lo la designación patriarcal se han convertido en
social tiende a medir a la mujer a partir de su estereotipos que exaltan algunos valores, acti-
capacidad de procrear, de educar a sus hijos y tudes, comportamientos y capacidades dentro
de mantener un hogar. En este sentido existe de la esfera social.
una construcción social de lo femenino, ya
dado antes de que una niña llegue al mundo Los medios de comunicación han retoma-
(Álvarez, 2011) Por ello “el género no remite a do esta construcción social y la han llevado a
una identidad sustancial, sino a una identidad un nivel alto. Así ha idealizado la imagen fe-
construida en el tiempo” (González 2013, 189), menina, pero particularmente su lado sensual,
donde el contexto epocal exige el cumplimien- animal o erótico se ha vuelto recurrente en va-
to o no de determinados modos de conductas rios espacios de representación que explotan el
atribuido a tanto a lo femenino como a lo mas- poder de lo visual. En el mundo del espectá-
culino. culo este aspecto se ha proyectado con mucha
fuerza. Las estrellas de cine y las celebridades
La norteamericana Judith Butler se inclina difunden en muchos casos su imagen acompa-
a pensar que “el género, la identidad y la raza ñada de dichos aditamentos como un gancho

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para la identificación del receptor con su tra- cación, quienes venden la imagen construida,
bajo artístico o con su figura escultural. Ambos estilizada y bella tanto de seres humanos como
elementos se acompañan de una imagen tra- de objetos de uso y consumo.
bajada artísticamente con ayuda de los medios
tecnológicos. De esta forma la construcción de Esta construcción idealizada de imágenes
cánones de belleza y de estereotipos femeninos espectaculares se inserta en el fenómeno de la
dentro de la sociedad guardan una cercana re- cosificación. En él los seres humanos construi-
lación con lo visual construido a partir de la dos a partir de imágenes estilizadas alcanzan
ayuda de los medios tecnológicos. el apelativo de cosa, en tanto objeto de inter-
cambio construido para satisfacer necesidades
La relación visible entre estereotipos, cáno- espirituales y de placer.
nes de belleza, medios de comunicación y tec-
nología influye notablemente en la recepción La industria de la moda ha pensado a la
de la imagen. En los últimos tiempos la alta de- mujer-objeto, cosificando esa parte sensual y al
finición ha educado al ojo humano a aceptar lo mismo tiempo convirtiéndola en un producto
hipersofisticado, lo hipereficaz y lo hipervisible espectacular. Este hecho queda demostrado
como cualidades intrínsecas de la imagen tan- en las pasarelas que organiza la industria de la
to comercial, como televisiva, como cinemato- moda donde devela las últimas producciones
gráfica. Este perfeccionamiento no deja cabida de lencerías, ropa de dormir, fragancias, pro-
a imaginar, a pensar, a interpretar, porque ya ductos de belleza o accesorios. En la mayoría
todo parece estar dado. Tal y como dice Jean de los casos en ellas se aprecia una gran car-
Baudrillard (s.f): ga de artisticidad apoyada por un excelente
diseño escenográfico que deslumbra al espec-
(…) Nos acercamos cada vez (…) a la tador. De esta manera se construye un verda-
perfección inútil de la imagen. A fuer- dero espectáculo que eventualmente cuenta
za de ser real, a fuerza de producirse en con la presentación de estrellas de la música,
tiempo real, mientras más lograda la de- animadores populares y coreografías atrevidas
finición absoluta, la perfección realista que acompañan la muestra espectacular de las
de la imagen, más se pierde el poder de prendas.
la ilusión”.
Sin dudas la industria de la moda además
Ello hace más creíble la imagen a pesar de de promover sus productos, vende su show
tener más carga de ficción que de realidad. Sin que contiene todos los ingredientes del entre-
dudas esta dicotomía realidad-ficción resulta tenimiento. Su único objetivo parecería pro-
bien aprovechada por los medios de comuni- mover productos, aunque también se propone

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defender el lugar de las marcas en el mercado. rol de informar, pero también de vender de-
Con ayuda de hermosas modelos vende la fi- terminados productos a través de sus páginas.
gura ideal de la mujer occidental y promueven Estas constituyen “verdaderos manuales peda-
también un estilo de vida donde las cirugías, gógicos a escala global (…) pues se editan si-
las dietas y los ejercicios, resultan una solución multáneamente en muchos países respetando
socorrida para alcanzar o mantener la silueta las diferencias vernáculas, pero manteniendo
ideal. Así, el gusto, comienza a ser dominado un estilo particular para cada título editorial”
por los estereotipos y las exigencias sociales. (Escudero 2001. p 104).

Este resulta solo un ejemplo de la influencia Desde hace décadas el cine es otros de los
que tiene la industria de la moda en la cons- ámbitos para promover estas construcciones
trucción de ideales de belleza y en la reafirma- ideales. Desde los años cincuenta, algunas es-
ción de lo sensual y erótico en lo femenino, trellas de cine se identificaron con el trabajo de
construido desde lo social. Todos los creadores los diseñadores promoviendo los diseños tanto
que se insertan en el mundo de la moda pro- en la pantalla como en las revistas de modas.
mueven este patrón de belleza reafirmado por Entre los ejemplos más socorridos podemos
los certámenes del Miss Universe cada año. Los citar las creaciones que el francés Hubert de
principales escenarios de divulgación de la fi- Givenchy hiciera para Audrey Hepburn, (Ma-
gura esbelta y sensual son sin dudas la televi- jor, 2005). También los trabajos del diseñador
sión con los spots publicitarios, las telenovelas, argelino Yves Saint-Laurent para Catherine
las series televisivas, los reality shows de belle- Denueve y Sofía Loren (Golbin, 2005), y los de
za, entre otros. Pierre para Marlene Dietrich, Vivien Leigh y
Katharine Hepburn (Major, 2005). Ello solidi-
La Internet constituye otro espacio de di- ficaba en alguna medida el poder de la moda
fusión por su capacidad de albergar en la web tanto hacia el público como hacia los millona-
un sinnúmero de información y de imágenes rios.
construidas con ayuda de herramientas y pro-
gramas de computación. Una de sus particula- El mundo de la fotografía de modas tam-
ridades es estar a tono con lo que sucede en la bién deviene espacio para divulgar los cánones
televisión posibilitando al espectador el disfru- de belleza existente, pero también para crear
te de un determinado programa televisivo con otros sobre la base de un trabajo artístico que
sólo pinchar la opción “descarga”. apunta muchas veces hacia la disolución de
las diferencias entre el mundo del arte y de la
Otros de los escenarios lo constituyen la moda. Entre los fotógrafos más consagrados
prensa y las revistas pensado para cumplir el en esta labor destacan: Irving Penn, Richard

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Avedon, Guy Bourdin, Helmut Newton entre con el desarrollo del arte en las primeras déca-
otros. das del siglo XX.

3. Alianzas entre el arte y la moda Ante las particularidades que asume la


Las cercanas relaciones entre el arte y la moda cuando se acerca al arte, el concepto
moda constituyen una temática visible en moda muy ligado al consumo queda inoperan-
el mundo artístico contemporáneo. No han te, pues la artisticidad y el valor cultual (véase
sido pocos los modistos que se han sentido Benjamin, 1973) comienzan a ganar protago-
identificados con los diferentes movimientos nismo. Ello permite apelar a la noción de moda
y corrientes artísticas al punto que algunos con forma de arte que se despliega en función
encuentren inspiración en ellos para diseñar. de lo novedoso, lo único e irrepetible mante-
El arte moderno favoreció este primer acer- niendo en cierta medida algunos cánones de la
camiento de la moda hacia el arte, fenómeno moda consumista. En este sentido, este tipo de
que hoy manifiesta cierta vigencia. Sobre este moda suele apropiarse de los resortes actuales
hecho, la crítica alemana Isabelle Graw en su del arte, sin desechar aquellos que su esencia
texto “El último grito. Sobre el arte con forma guarda y que se relacionan con el consumo
de moda y la moda con forma de arte” (2011), masivo, anunciando así un comportamiento
apela a los imperativos de la moda cuando ex- particular. Su desenvolvimiento en el actual
plora los terrenos del arte, estableciendo una contexto cultural nos obliga a repensar las ca-
comparación entre ambas manifestaciones y su racterísticas que asume la moda con forma de
comportamiento en el mundo moderno. arte, quizás como un elemento sintomático del
siglo XX que se expresa hoy con gran fuerza.
Según la opinión de esta especialista hoy
“los diseñadores de modas declaran arte sus En el mundo actual el arte ha buscado
proyectos más explícitamente que antes, limi- otros espacios para expresarse valiéndose de
tando sus tiradas y produciendo ediciones”
(Graw, 2011, p 88), constituyendo una prueba excepciones. Desde el instante en que comienza a firmar
de que la moda comienza a operar tal y como sus obras anuncia el indicio de autonomía y genialidad que
se difunde durante toda la época moderna. Paralelo a esto,
lo ha hecho el arte desde que alcanzó su au- la moda experimenta ese cambio de lugar y relevancia, que
podemos observar con la figura del modisto como hemos
tonomía4, adquiriendo un impulso aún mayor hecho referencia anteriormente. Sin embargo no es hasta
finales mediados del siglo XIX, cuando se crean las primeras
Casas de Moda, cuando se modela la ropa, cuando la figura
del modisto o diseñador alcanza renombre y comienzan a
4 Con la llegada de la Modernidad el arte comienza a firmar sus bocetos que más tarde serán llevados al tejido.
experimentar cierta autonomía. La apertura de los Este hecho sustenta la cercanía entre el arte y la moda dentro
primeros Salones de arte, el surgimiento de los museos, las de la sociedad, y como prueba de ello podemos observar
graduaciones de academias de arte, la crítica de arte… entre cómo el elitismo se convierte en un factor determinante
otros acontecimientos, aseguran la importancia del artista y para ambas esferas de creación, pues en uno y en otra se
la obra dentro de este proceso. En la época pre-moderna la producía para minorías selectas que marcan el “último
figura del artista se mantenía en anonimato salvo algunas grito”.

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116 Transgrediendo la mirada. Confluencias entre moda, género y arte

nuevos soportes y lenguajes que se inscriben arte. Este gesto se hizo más explícito cuando la
en una lógica muchas veces crítica de la so- imagen del hombre se comenzó a trabajar des-
ciedad moderna. La era tecnológica, la cultu- de un sentido más artístico, más conceptual,
ra del consumo, los medios de comunicación empleando diferentes materiales y texturas,
acompañados por el impacto de la propaganda pasando por alto el sentido tradicionalmente
y la publicidad, son elementos estructurales de utilitario del diseño de modas. Así la moda al-
esta sociedad, que al mismo tiempo devienen canzaba otra connotación, y galerías y museos
punto de partida para el trabajo creativo de al- comenzaron a exponer los trabajos de impor-
gunos artistas que ejercen un discurso crítico tantes diseñadores ya consagrados.
sobre esta sociedad de consumo. Esto favorece
el desarrollo de una nueva sensibilidad que se La Galería de Arte Iris Clert en París se inte-

desprende de la percepción estática y tradi- resó por los diseños Paco Rabanne quien desde
el mundo de la arquitectura había incursiona-
cional del discurso del arte, para abrazar otra
do en el del diseño de modas. En sus creacio-
que propicia la comprensión de la obra abierta,
nes experimentaba con el cuero, el metal, los
inacabada, compleja donde lo nuevo, el kitsch,
discos de vinilo entre otras texturas (Kamitsis,
la intertextualidad, el pastiche, la parodia, la
2005). De este modo sus trabajos contenían
ironía, la espectacularidad, el performance, se
una gran carga de artisticidad imposibles de
despliegan de manera coherente. El diseño de
pasar por alto.
modas no permanece al margen de estos he-
chos. Algunos diseñadores apuestan por una
Así mismo en la década de los ochenta el
moda con una finalidad otra, explorando otras
Metropolitan Museum de New York dedicó
manifestaciones artísticas y otorgándole a lo
una retrospectiva a Yves Saint- Laurent, gesto
conceptual un rol importante.
que posteriormente se repitió en el Museo de
Bellas Artes de Beijing. (Golbin, 2005)
Diseñadores como Paul Poiret (1870-1944),
Elsa Schiapirelli (1890–1973), Coco Chanel En el año 2001 el Guggenheim de Bilbao
(1883-1971), Paco Rabanne (n. 1934), Giorgio expuso una retrospectiva de 25 años de crea-
Armani (n.1934), Yves Saint- Laurent (1936- ción de Giorgio Armani, hecho que represen-
2008), Karl Lagerfeld (n.1938), John Galliano taba de forma clara que las fronteras entre el
(n.1960), Alexander McQueen (1969-2012) arte y el diseño se hacían cada vez más difusas.
a lo largo de su vida experimentaron algunos Sobre este particular el comisario del Guggen-
acercamiento al arte, lo cual les ha permiti- heim decía:
do pensar la moda bajo otros preceptos, pues
paralelo a los diseños que lanzan al mercado, “Los museos han roto fronteras, el arte
crean otros que parecían adoptar la forma de se ha democratizado y la creatividad se

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ha generalizado. Ya no es dominio sólo de sus trabajos. Tal es el caso de la suiza Sylvie


de la pintura y escultura, sino de otras Fleury (n.1961) quien utiliza el universo de la
manifestaciones de la comunicación. Se moda para potenciar sus creaciones. Zapatos,
ha roto el aislamiento del arte contem- carros de compras de supermercados, estrellas
poráneo y el gueto del arte se abre en un de Hollywood… se convierten en paradigmas
abanico de 360 grados de posibilidades. de su trabajo escultórico e instalativo,5. En va-
Lo que sucede ahora con la moda y el rias ocasiones el hierro u otro metal se emplean
diseño, que entran en los museos más como material básico de sus trabajos, demos-
importantes, sucedió hace veinte años trando así la frialdad de una sociedad de con-
con la fotografía que, de ser considerada sumo, donde la belleza y el lujo tienden a jugar
como un arte menor, hoy posee el mis- un rol significativo dentro de sus propuestas.
mo valor estético que las artes mayores.
En el caso del japonés Takeski Murakami,
El arte ha llegado, querámoslo o no, a
mencionado anteriormente, realiza una ven-
las masas; no hay más que pensar en la
ta de carteras diseñadas por él mismo en un
exposición sobre las motos” (Palacios,
museo, gesto que el propio artista declara parte
2005, 10).
de su obra y que deja claro cuando expone: “la
tienda no es parte de la exposición, es el co-
De igual manera, en varias oportunidades
razón de la exposición” (Márquez 2011, p199).
muchas firmas de moda han invitado a artis-
Así la forma moda que se sustenta a partir del
tas contemporáneos a jugar el rol de diseñado-
consumo, la distinción, la espectacularidad y la
res. Tal es el caso de la artista británica Tracey
novedad, se ha convertido en el referente para
Emin (n.1963) quien fungió como diseñadora
la creación de obras de arte que bajo diferentes
de carteras para la marca “Longchamp”; o del
manifestaciones -desde las clásicas como pin-
artista japonés Takashi Murakami (n.1963)
quien diseñó este tipo de accesorio para la tura, escultura…, hasta las más actuales como
marca Louis Vuitton (Márquez, 2011). Estos videoarte- emplean elementos que identifican
dos ejemplos muestran la importancia del di- a la moda espectacular para adaptarlos a su
seño de modas realizado por artistas y también discurso artístico, sugiriendo un lenguaje muy
por diseñadores al punto que los límites de particular, donde el mundo de la moda se toma
ambas manifestaciones comienzan a fusionar- como referente artístico.
se. Esto nos indica que no solo observamos el
tránsito de la moda hacia el arte, sino del arte 4. Arte, moda y género desde la experien-
hacia la moda. cia cubana
En el ámbito cultural cubano muchos dise-
Al mismo tiempo varios artistas han toma-
do la moda como punto de partida de algunos 5 Se refiere a las instalaciones de arte

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ñadores conciben sus creaciones con una gran participan especialistas, críticos y diseñadores
carga artística (Véase: Méndez 2006). En su se lleva a cabo un día antes de la presentación
práctica trabajan con soportes y texturas dife- de la pasarela, con el objetivo de activar el dia-
rentes, al tiempo que subvierten los cánones de logo y la crítica sobre los derroteros del arte y
la moda apelando a temáticas o problemáticas del diseño de modas. Igualmente una exposi-
tanto del terreno artístico como extra artístico. ción fotográfica se inaugura, donde se exponen
En este sentido en varias obras de diseñadores los diseños que ya en se encuentran en el catá-
cubanos se observan la problemática de género logo del evento. Sin dudas el proyecto le toma
sustentada a partir de cómo se ha pensado y el pulso al diseño de modas producido en Cuba
construido los roles femeninos y masculinos bajo el criterio de moda con forma de arte. Ello
en la sociedad. permite el trabajo de la imagen a través de con-
ceptos y problemáticas visibles en la escena
La mayoría de las producciones que se han cultural cubana.
realizado en Cuba, y que al mismo tiempo han
permitido el diálogo entre el arte, la moda y el La diseñadora Maray Pereda recrea el con-
género, ha logrado materializarse en los dise- cepto del metrosexual en su trabajo (Méndez,
ños que se realizan para el proyecto cubano 2006). La concepción del hombre estilizado
Arte y Moda. Desde su primera entrega en dilata la figura del macho en la cultura. La do-
el 2003, cuenta ya con siete ediciones, lo cual minación masculina y patriarcal ha construido
sustenta la sistematicidad en del trabajo de la el estereotipo del macho muy asociado al valor,
moda con forma de arte. A grandes rasgos el la fortaleza y rudeza, alejándolo de los aspec-
dicho proyecto promueve la realización de di- tos que resaltan las cualidades del sexo feme-
seños de moda a partir de la referencia de una nino. Por ello el metrosexual u hombre que se
pieza visual que esté hecha en cualquier sopor- preocupa por el cuidado de su imagen y por
te artístico. Cada diseñador debe crear un dise- estar a la moda parece debilitar las tradiciona-
ño tomando como punto de partida una o va- les concepciones (Méndez, 2006). Mayormente
rias piezas de arte, permitiéndole experimentar este comportamiento comienza en las grandes
con texturas y materiales inusuales. urbes, aunque luego se extiende a otras zonas
hasta difundirse por el mundo. El metrosexual
El proyecto Arte y Moda tiene la peculiari- puede ser homosexual, heterosexual o bisexual
dad presentar sus diseños en pasarela con ayu- y en dependencia de sus preferencias y gustos
da de la interpretación de los mismos. En este resalta su preocupación por la apariencia.
sentido la teatralidad y lo performativo acom-
pañado por la música le otorgan gran noto- Aunque resulta propio de finales de la dé-
riedad a los diseños. Un evento teórico donde cada del siglo XX la proliferación del metro-

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sexual, su antecedente esta en el dandy inglés más en la renovación del vestuario masculino.
del inicios del siglo XIX (Eco, 2006). El dandy También difundía un comportamiento poco
era el individuo que expresaba una gran preo- común que rápidamente fue expresándose en
cupación por la belleza y elegancia. Sobresale el vestuario masculino y en el modo en que éste
ante el comportamiento común, conquistando se usaba para su época. A finales del siglo XX,
a hombres de mundo como: pintores, escrito- esta práctica se revitalizó bajo otro nombre y
res y poetas famosos. Aunque el dandy surgió condicionado por otra época donde se afianza
en Inglaterra pronto se extendió por Euro- y fortalece el imperio de la imagen. Si el ideal
pa. Oscar Wilde, Aubrey Beardsley, Gabriele de belleza se dicta desde la importancia de
D´Annunzio, son algunos de los seguidores los medios de comunicación, permitiendo la
del dandismo. Según Umberto Eco el dandy pluralidad de cánones y estereotipos, el prota-
le hace “culto a la propia vida pública, que hay gonismo que ha alcanzado la imagen del me-
que “trabajar”, moldear como una obra de arte trosexual está avalado por la multiplicidad de
para convertirla en un ejemplo triunfante de conductas, preferencias o gustos.
belleza”. (Eco, 2006, 334). Su comportamien-
to en ocasiones iba en contra de los prejuicios La diseñadora Maray Pereda (Méndez,
y costumbres de la época, lo cual convertía al 2006) parece apoyarse en estos criterios al
dandy en un individuo que resaltaba social- realizar su diseño inspirándose en la obra del
mente. Al respecto Oscar Wilde en su texto “El artista de la plástica Nelson Domínguez. Pere-
pintor de la vida moderna” de 1869 dice “Los da recrea la imagen del hombre metrosexual
hombres que no tienen más profesión que su elaborando un vestuario ajustado de camisa y
elegancia, tendrán siempre, en todas las épocas pantalón negro realizado de mezclilla y pun-
una fisonomía distinta, diferente a cualquier to, al que le agrega los “accesorios artesanales
otra. (…) Estos individuos no tienen otra obli- en metal reciclado de la industria tabacalera
gación que cultivar la idea de belleza de su per- configurando su sensibilidad hacia lo duro, la-
sona, satisfacer sus pasiones, sentir y pensar.” tente en la imagen del metromacho, un ícono
(Wilde 1869 citado en Eco, 2006, 334). A pesar de nuestros tiempos.”(Méndez 2006) De forma
de ello el dandismo asume diferentes formas magistral la diseñadora recrea la imagen de
con algunos de sus representantes los cuales este hombre metrosexual respetando el esti-
van a transitar desde la exaltación de las for- lo de vida y preferencias de éste, sin embargo
mas heroicas hasta la rebelión contra el mundo juega con los accesorios que este suele usar al
moderno. sustituirlos por otros de uso común. Pereda
se lanza a la experimentación con materiales
Aunque el dandy infligía algunas de las re- poco comunes, resaltando sus posibilidades
glas de la sociedad decimonónica, influyó ade- creativas dentro del mundo del diseño y del

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arte. Así esta creadora demuestra que los lími- carga sobre sus espaldas el rol social que le co-
tes entre el arte y el diseño de modas cada vez rresponde permeado de prejuicios y estereoti-
se hacen más invisibles. pos sociales. En un impulso de libertad, auxi-
liándose de un cuchillo (realizado con atrezzo)
Insertar imagen 1 despedaza su vestido. En su lugar reaparece la
Los diseñadores Yandy y Anaice (Méndez, mujer, desprejuiciada, presumida, que se resis-
2010) se cuestionan el rol de la mujer en la so- te a aceptar normativa alguna y que gusta de la
ciedad al crear un diseño a partir de tres pie- moda y del rosado. Al mismo tiempo esta mu-
zas de la artista cubana Aimee García. La pie- jer es víctima de una construcción social de los
za diseñada es primariamente un vestido del cánones de belleza femenina, donde las dietas y
siglo XIX realizado con periódicos. Otra vez soluciones quirúrgicas son la clave de su acep-
el empleo de materiales poco comunes en el tación en el circuito donde vive y se desarrolla.
vestuario demuestra las posibilidades creativas
de la diseñadora. La silueta de flor defendida Aún así la industria de la moda piensa “la
por Charles Worth durante el siglo XIX, queda mujer prefabricada” exaltando solamente su
contenida en una creación realizada con papel lado sensual y erótico. Su imagen maternal lle-
periódico. El diseño presentado en el 2010 du- na de naturalismo, en ocasiones es suplantada
rante el evento Arte y Moda, en La Habana evi- por una suerte de figura ideal sensual que se
dencia la relación cercana que Figueroa tiene apoya en el principio de la seducción. Induda-
con el arte acción, particularmente con el per- blemente Yandy y Anaice acuden al acto per-
formance. El vestido no se muestra en pasare- formático y a lo espectacular para transgredir
la con movimientos comunes, sino a partir de normas y costumbres tomando el cuerpo como
una interpretación. Así música y gestualidad escenario de representación6.
también forman parte de la presentación de-
venida performance. Éste completa la muestra, Al analizar esta pieza desde la lógica es-
cuando en un acto de rebeldía, se despedaza el tructural que la compone, podemos constatar
vestido apareciendo la imagen espectacular de cómo lo espectacular parece jugar un rol im-
una mujer hermosa, símbolo de la moda de las portante dentro del propio diseño. Trastocan-
sociedades moderna. do la significación que tiene la pasarela para la
Alta Costura, el diseño que propone este dúo,
Insertar imagen 2 parece invitarnos a reflexionar en los concep-
Valiéndose de lo espectacular y la teatra-
lidad los diseñadores toman como referente 6 Para el proyecto Arte y Moda, el cuerpo juega un rol
fundamental ya que es el maniquí sobre el cual se sujeta
simbólico a la mujer. Vestida con un traje de el diseño artístico validado por una interpretación
performática, por ello es oportuno pensar el cuerpo como
grandes dimensiones que la asfixia, la fémina escenario de representación

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tos de libertad-asfixia referenciándose en una formato. Este panorama parece reinterpretarse


acción perfomática que completa el resulta- y asumirse de otra manera en la pieza que con-
do visual de esta propuesta. Sin embargo, en cibe la diseñadora Anaice Figueroa.
esta pieza lo espectacular puede ser visto en
dos sentidos: primero como componente del La propuesta novedosa de Figueroa parece
acto perfomático y segundo desde el resulta- explorar el mundo idílico de las muñecas. La
do visual que muestra el diseño a partir de la creadora construye una caja de muñecas de
imagen de la mujer prefabricada. Pudieran ser color rosado donde sobresalen las letras “sexy
estos algunos de los móviles que se leen cuan- doll”. Al interior de esta se encuentra la mu-
do observamos este diseño, donde el trabajo ñeca envuelta en una suerte de sensualismo
con el papel periódico, como textura básica seductor. Motivos realizados con zippers ne-
demuestra el gran dominio de la técnica y el gros y rosados adornan el corto vertido negro
profesionalismo de estos jóvenes diseñadores que se hace acompañar por una enguatada de
otorgándole una independencia indiscutible al nylon rosado que cubre brazos y manos de la
diseño que ya adquiere forma de arte. modelo, exaltando la plasticidad de las muñe-
cas. La diseñadora parece explotar la sensuali-
Otra de los sugerentes diseños de Anaice Fi- dad que acompaña a la figura de dicho juguete,
gueroa (Méndez, 2012) resulta del que realiza a insertándola al mismo tiempo en una historia
partir de la obra de la joven artista cubana Ra- de amores y desamores.
chel Valdés, presentada durante la séptima edi-
ción del proyecto Arte y Moda. Una suerte de La pieza de Figueroa resulta novedosa tanto
erotismo envuelve la obra de Valdés, acompa- por el discurso que emplea, como por la mane-
ñada de una sutil apropiación de la iconografía ra en que hace visible su historia ante el espec-
publicitaria y los códigos de consumo que pa- tador. Una muñeca es rescatada de su caja por
rece asumirse con una estética pop acentuada un galán poseedor de todos los atributos mas-
por los colores estridentes de sus obras de gran culinos materializados en su físico. Un uni-
verso mágico-seductor se pone al descubierto
acompañado también de una música sensual
y moderna, que despierta múltiples lecturas,
donde lo sensual, lo placentero y lo erótico pa-
recen converger de forma novedosa.

Por su parte la diseñadora Jacqueline Fu-


mero se inclina a reflexionar sobre la materni-
dad y el rol de la mujer. Para ello toma como

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referente la pieza de Raúl Valladares Materni- nalidades de rosa y grises. Ambos diseños evi-
dad II. En ella la creadora despliega el concepto dencian una relación formal, compartiendo los
de maternidad, tanto a nivel formal como con- motivos y colores que los hacen confluir como
ceptual. una sola pieza.

En esta oportunidad Fumero esboza dos Sin dudas estas creaciones visibilizan un
piezas diferentes recreando la idea de Vallada- acercamiento hacia las construcciones de lo
res del último día del fin del mundo. El artis- femenino y lo masculino. También apuntan
ta expone una suerte de bicho que protege un sobre los roles sociales y estereotipos que le co-
huevo. A partir de esta idea la creadora exalta rresponden representar a hombres y mujeres.
la belleza del nacimiento empleando la figura Valiéndose de estas problemáticas los diseña-
de una mariposa. El alumbramiento de una dores recrean sus obras a partir de texturas y
nueva vida resulta un suceso singular en la vida soportes diversos. Sus trabajos se distinguen
de la especie animal y también en la humana. por abordar lo teatral y performativo como un
Desde el punto de vista biológico la capacidad elemento sustancial dentro de la obra. Mate-
de la mujer de traer una nueva vida al mundo rializados en el proyecto Arte y Moda, dichas
le otorga determinadas tareas que van marcan- piezas abordan temáticas que desde la teoría
do su rol dentro de la sociedad. En este sentido cultural demandan la atención de especialistas.
el cuidado y la protección de la familia la ubi-
can dentro de un espacio privado que alcanza Las prácticas artísticas contemporáneas
su máxima realización en el hogar. El rol social se encuentran permeadas del gesto inclusivo
de la mujer y la maternidad como función na- donde varias disciplinas convergen en una. Si
tural de ella, constituye un elemento recurrente este hecho fue posible a través del arte de ac-
desde las problemáticas de género que de algún ción y el nuevo realismo a mediados del siglo
modo son resaltadas en esta pieza que anuncia pasado, en nuestros días se hace cada vez más
la belleza del alumbramiento. visible en los ámbitos artísticos.

A nivel formal la pieza de Fumero consta de La moda, el arte y las problemáticas de gé-
dos diseños: el primero visibiliza un bicho, rea- nero parecen aliarse para proponer nuevas zo-
lizado con cartulina mediante la técnica de pa- nas de reflexión en la obra de estos diseñadores
pier maché pintado con una tonalidad gris que cubanos. Sus sugerentes piezas parecen mirar y
simula el acero (material básico de la obra de pensar al hombre contemporáneo zambullido
Valladares). El segundo diseño es la mariposa, en la sociedad actual matizada con el realce de
para la que también emplea la misma técnica lo visual y de la espectacularidad. Desde tales
en la recreación de sus alas que pinta con to- presupuestos se construyen estos discursos ar-

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tísticos visibles tanto para las ciencias sociales obras partiendo de la complejidad tanto con-
como para la praxis artística. ceptual como formal que afrontan sus diseños.

Conclusiones Sin dudas, los resultados creativos del vín-


Las relaciones cruzadas entre arte y dise- culo entre moda, arte y género promueven el
ño de modas posibilitan el realce del término análisis hacia cómo se han construido y ex-
moda con forma de arte. Éste permite el cues- teriorizado los roles femenino y masculino, a
tionamiento de determinadas problemáticas partir de la interpretación que de ellos han he-
que sobresalen en la cultura actual invitando al cho la industria de la moda, el arte y los medios
diálogo crítico. Entre algunas de las temáticas de comunicación. Las propuestas artísticas que
se encuentra la de género pensado desde dife- exploran estas problemáticas transgreden la
rentes enfoques. mirada, permitiendo la confluencia y el diálo-
go interdisciplinar entre arte, moda y género
Las problemáticas de género, determinadas
para unos desde lo social y para otros desde lo Referencias
biológico se visualizan en el trabajo de estas Adorno, J. Horkheimer, M. (s.f). Dialécti-
diseñadoras que exploran en sus propuestas ca del iluminismo. Recuperado de ht-
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mirada que ha hecho la sociedad de la moda, Benjamin, W. (1973). La obra de arte en la épo-
así como de su relación con los femenino en ca de su reproductibilidad técnica. Ma-
primera instancia y con lo masculino, exal- drid: Taurus.
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