El Desarrollo social y la descentralización

César Hilton Aguilar Ramos

Ceagui5@hotmail.com

El término desarrollo, desde una visión social, se entiende como el proceso en el cual las
necesidades de la población se satisfacen con el uso racional y sostenible de recursos y sistemas
naturales. Dicho así, la utilización de estos recursos estaría basada en una tecnología que respeta
los aspectos culturales y los derechos humanos. Esta definición incluye la especificación de que los
grupos sociales tienen acceso a organizaciones y a servicios básicos como educación, vivienda,
salud, nutrición y sobre todo, que sus culturas y tradiciones sean respetadas dentro del marco
social de un estado-nación en particular.
El desarrollo social es un proceso que en el transcurso del tiempo, conduce al mejoramiento de las
condiciones de vida de toda la población en diferentes ámbitos: salud, educación, nutrición,
vivienda, vulnerabilidad, seguridad social, empleo, salarios principalmente. Implica también la
reducción de la pobreza y la desigualdad en el ingreso. En este proceso, es decisivo el papel del
Estado como promotor y coordinador del mismo, con la activa participación de actores sociales,
públicos y privados.

Para Amartya Sen, “el desarrollo puede concebirse […] como un proceso de expansión de las
libertades reales de que disfrutan los individuos”. Esta interpretación del desarrollo, ha llevado a
otorgar una importancia fundamental al concepto de desarrollo humano, como un proceso paralelo
y complementario al desarrollo social.  El desarrollo humano “se refiere a la creación de un entorno
en el que las personas pueden desplegar su pleno potencial y tener una vida productiva y creativa,
de acuerdo a sus intereses y necesidades”.
Por otro lado, el enfoque de los derechos humanos se ha constituido en un referente de las
políticas sociales, en particular los derechos humanos de segunda generación que se definen
como “los derechos económicos, sociales y culturales, debido a los cuales, el Estado de Derecho
pasa a una etapa superior, es decir, a un Estado Social de Derecho.” Entre los derechos sociales
encontramos la seguridad social, el trabajo, la formación de sindicatos, la educación primaria y
secundaria gratuita, un nivel de vida que garantice la salud, la alimentación, el vestido, la vivienda,
la asistencia médica y los servicios sociales necesarios. Como resultado de este enfoque, se
encuentran las demandas que buscan que los derechos sociales se reconozcan en las
legislaciones de los países, pero que además se establezcan mecanismos que garanticen su
cumplimiento y su control.
Todo lo anterior está íntimamente ligado a un proceso de descentralización que es una política
permanente del Estado que busca el desarrollo integral del país, proceso que debía ser gradual y
asociado a la acreditación de capacidades de las nuevas autoridades regionales y locales y la
participación de la sociedad civil seria central en los procesos de concertación para la elaboración
de los planes de desarrollo, presupuestos participativos, etc.
A través de la descentralización se busca: el bienestar y desarrollo humano satisfaciendo
necesidades básicas y desarrollando capacidades, fortalecimiento de las unidades locales y
regionales para tener una visión compartida de desarrollo sostenible, desarrollo económico y
progreso material y la formación de una cultura ciudadana y democrática para el ejercicio de
derechos y deberes, con participación ciudadana en el marco de un estado de derecho.
La descentralización debe hacer del Perú un país de oportunidades para todas y todos sus
habitantes (expansión de libertades según Amartya Sen), del mismo modo deberían caracterizarse
por la rendición de cuentas, para que los gobiernos locales puedan estar sujetos a control
democrático. De esa forma, los ciudadanos deberían influir en las decisiones adoptadas por los
consejos locales elegidos.
En el proceso de descentralización, las municipalidades o gobiernos locales tienen un reto
fundamental: Fortalecer sus competencias y capacidades para readecuar su rol y dejar el viejo
papel de ser instancias dedicadas a los servicios básicos locales para pasar a convertirse en
agentes promotores del desarrollo local aportando al de su región.
Algunas competencias habituales del gobierno local son las que se señalan a continuación:

- Desarrollo local
- Ordenamiento territorial
- Protección del entorno natural y edificado
- Vivienda
- Suministro de agua y Alcantarillado
- Drenaje de agua de lluvia
- Cementerios públicos
- Caminos y zonas públicas locales
- Protección contra incendios
- Transporte público local
- Educación primaria, incluido el jardín de niños
- Atención de salud, Servicios sociales
- Actividades culturales y deportivas
- Bibliotecas y centros culturales

Por último la descentralización no es la panacea, dado la enorme diversidad de obstáculos

culturales, históricos, económicos, jurídicos y financieros a los que se enfrenta nuestro país. La
restauración o establecimiento de un equilibrio de poder y responsabilidades entre los diferentes
niveles de gobierno ha presentado normalmente significativos desafíos políticos administrativos.
Por lo tanto tener una visión holística del desarrollo social y humano agregado a una política seria
de descentralización de nuestra nación, permitirá un mejor desarrollo local por el bien de todas las
personas y su libertad como objeto de ese desarrollo.