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6 Ingresos

La normativa internacional contempla criterios diferentes para el tratamiento de ingresos con


contraprestación e ingresos sin contraprestación. A continuación, se exponen los criterios de
reconocimiento, medición, presentación y revelación aplicables en cada caso.

5.6.1 Ingresos de transacciones sin contraprestación

Comprenden las entradas brutas recibidas o por recibir de la entidad provenientes de beneficios
económicos o potencial de servicio, las cuales representan un aumento en los activos
netos/patrimonio distinto a aquel relacionado con las contribuciones de los propietarios. Este
aumento se origina con una recepción de recursos sin ninguna contraprestación a cambio, una
contraprestación simbólica o una contraprestación que no se aproxima al valor razonable de los
recursos recibidos.

La NICSP 23 establece los criterios para el reconocimiento, medición y revelación de los ingresos
sin contraprestación, tales como impuestos y transferencias monetarias y no monetarias. Por su
parte, el RCP desarrolla estos conceptos en las normas técnicas de rentas por cobrar, deudores e
ingresos.

La normativa internacional señala aspectos generales a tener en cuenta para llevar a cabo el
análisis de la entrada inicial de recursos de transacciones sin contraprestación. Al respecto,
establece que el reconocimiento de ingresos sin contraprestación (activos transferidos), se
encuentra supeditado a la existencia de condiciones, restricciones y estipulaciones sobre los
activos transferidos. Además, mantiene como criterios generales de reconocimiento, la
probabilidad de flujo de beneficios económicos futuros o potencial de servicio, y la medición fiable
del valor razonable.

De otra parte, si bien el RCP no prescribe conceptualizaciones en relación con condiciones,


restricciones y estipulaciones sobre los activos transferidos, sí plantea tres criterios o condiciones
transversales de reconocimiento de hechos económicos: que los elementos de los estados
contables afectados por los hechos se puedan asociar claramente; que las expectativas de
aplicación y generación de recursos para el cumplimiento de funciones de cometido estatal sean
ciertas o que pueda asegurarse que acontecerán con alto grado de probabilidad; y que la
magnitud de la partida pueda ser medida confiablemente en términos monetarios. Desde la
perspectiva internacional, el control es un aspecto a considerar para el reconocimiento de activos.
En tal sentido, desde la armonización del RCP con NICSP, en el 2007, se incorporó este criterio en
el RCP y su materialización se ha dado, fundamentalmente, en el caso de los bienes de uso
permanente sin contraprestación, los cuales son reconocidos como propiedades, planta y equipo
por las entidades de gobierno general.

A continuación, se presentan aspectos fundamentales en cuanto al reconocimiento, medición y


revelación de los impuestos y transferencias.

5.6.1.1 Impuestos

La normativa internacional señala que los impuestos se reconocen cuando ocurre el hecho
imponible y se cumplen los criterios de reconocimiento del activo. En cuanto a la medición,
establece que cuando existe diferencia entre el momento del hecho imponible y el cobro del
impuesto, es factible la medición fiable utilizando modelos estadísticos.

Por su parte, el RCP señala que los ingresos por impuestos deben reconocerse por el valor
determinado en las declaraciones tributarias, las liquidaciones oficiales en firme y demás actos
administrativos, que liquiden obligaciones a cargo de los contribuyentes, responsables y agentes
de retención. Dichos ingresos deben reconocerse cuando surjan los derechos que los originan, con
base en las liquidaciones de impuestos, retenciones y anticipos.

5.6.1.2 Transferencias

De acuerdo con la NICSP 23, las transferencias incluyen subvenciones, asunción y condonaciones
de deudas, multas, legados, regalos, donaciones, y bienes y servicios en especie. Este concepto es
más amplio que el contenido en el RCP, el cual define las transferencias como los recursos
originados en traslados sin contraprestación directa, y efectuados entre las entidades contables
públicas de los diversos niveles y sectores. La NICSP indica que hay lugar al reconocimiento de
transferencias cuando existe un derecho por ley, y la entidad evalúa que es probable la entrada de
recursos. El RCP establece que las transferencias se reconocen cuando la entidad contable pública
receptora conoce que la entidad contable pública cedente expidió el acto de reconocimiento de su
correlativa obligación. En cuanto a la medición, la NICSP prescribe que esta se efectúa a valor
razonable en la fecha de adquisición, mientras que el RCP señala que el importe para el
reconocimiento corresponde al definido en el acto en el que se reconoce la obligación de la
transferencia. De otra parte, según la norma internacional, el reconocimiento de los ingresos
procedentes de condonaciones de deudas se lleva a cabo por el valor razonable de la deuda
condonada, mientras que el RCP señala que se reconocen por el valor pactado en la asunción del
crédito. La norma internacional señala que las multas se reconocen como ingresos cuando la
cuenta por cobrar cumple la definición de activo y satisface las condiciones de reconocimiento. El
RCP incluye las multas dentro de los ingresos no tributarios y establece que se reconocen una vez
los actos administrativos hayan quedado en firme. Según la NICSP, los legados se reconocen al
valor razonable si es probable que fluyan los beneficios económicos o el potencial de servicio. El
RCP no se refiere a este tipo de ingresos. En cuanto a los regalos y donaciones, la regulación
internacional plantea que los bienes en especie se reconocen por su valor razonable como un
ingreso cuando se reciben o cuando existe un acuerdo vinculante y que, en caso de que existan
condiciones sobre el activo transferido, hay lugar al reconocimiento de un pasivo. Por su parte, el
RCP prescribe el reconocimiento de las donaciones en el patrimonio o en los ingresos,
dependiendo de si constituyen formación bruta de capital o si financian los gastos del período.
Estas donaciones se reconocen por el valor convenido, por el valor establecido en el acto de
donación o por el valor establecido mediante avalúo técnico. En relación con los servicios en
especie, la normativa internacional prescribe que su reconocimiento no es obligatorio; sin
embargo, si hay lugar a ello, los servicios en especie se consideran como activo e ingreso y su
consumo constituye un gasto.

Para el RCP, estos servicios constituyen ingresos, siempre y cuando se puedan medir con
fiabilidad. Según lo dispuesto en la NICSP, los préstamos reembolsables junto con sus intereses se
reconocen a valor razonable y la diferencia con el importe del préstamo se reconoce como un
ingreso sin contraprestación, salvo que existan condiciones que obliguen a reconocer un pasivo
hasta tanto se satisfagan las mismas. El RCP no contempla este tratamiento. Las revelaciones de
los modelos internacionales son más exhaustivas que las exigidas en el Régimen de Contabilidad
Pública27.

5.6.2 Ingresos de transacciones con contraprestación

Comprenden la entrada bruta, durante el periodo, de beneficios económicos surgidos en el curso


de las actividades ordinarias de una entidad, siempre que tal entrada dé lugar a un aumento en el
patrimonio y que dicho aumento no esté relacionado con las aportaciones de los propietarios de
ese patrimonio.

La NIC 18, la NICSP 9 y la sección 23 del modelo NIIF PYMES guardan relación en la definición de
los criterios con los que regulan el reconocimiento, medición, presentación y revelación de los
ingresos de transacciones con contraprestación. A su vez, los criterios para el reconocimiento,
medición, presentación y revelación de los ingresos de los contratos de construcción se
desarrollan en la NIC 11, la NICSP 11 y la sección 23 del modelo NIIF PYMES. Desde la perspectiva
internacional, los ingresos con contraprestación se originan por la venta de bienes, la prestación
de servicios y el uso (por parte de terceros) de activos de la entidad que produzcan intereses,
regalías y dividendos o distribuciones similares.

Por su parte, el RCP contempla la venta de bienes y servicios y otros ingresos no incorporados en
las anteriores categorías. Los ingresos de carácter extraordinario no se consideran en la normativa
internacional, mientras que el RCP los considera como una categoría de ingresos. Las principales
diferencias entre lo estipulado por la normativa internacional y el RCP se observan en el
reconocimiento y medición de ingresos provenientes de la venta de bienes y la prestación de
servicios. Esto se debe a que mientras el referente internacional incorpora criterios tales como el
valor razonable, la transferencia de riesgos y ventajas inherentes a la propiedad de los bienes, y la
determinación del monto de los ingresos atendiendo el grado de terminación, el RCP considera los
valores nominales y la estimación razonable de la contraprestación, la transferencia de la
titularidad y el surgimiento del derecho de cobro como consecuencia de la prestación del servicio.
Con respecto a los ingresos por concepto de intereses, el reconocimiento en ambos modelos es
similar, salvo en lo relacionado con su medición.

Esto es asi porque en la normativa internacional, el reconocimiento de los ingresos por concepto
de intereses se calcula utilizando el método de interés efectivo, mientras que en el RCP, no se
prescriben metodologías de cálculo. De otra parte, en lo concerniente a los intereses de mora, el
RCP señala que se deben registrar en cuentas de orden contingentes y no en el cuerpo de los
estados financieros. De otra parte, al contrastar los criterios de reconocimiento y medición de las
regalías en la normativa internacional y en el RCP, se observan significativas similitudes en el
reconocimiento del ingreso por la contraprestación pactada contractualmente. En cuanto a los
dividendos derivados de las inversiones patrimoniales en entidades no controladas, el tratamiento
también es similar.

Las revelaciones de los modelos internacionales son más exhaustivas que las exigidas en el
Régimen de Contabilidad Pública28

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