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Concepción, diecisiete de octubre de dos mil diecisiete.

VISTO Y OÍDOS:
PRIMERO: Comparece doña MARIA ANA CAMPOS MARIN, Auxiliar de Servicio,
domiciliada en Mónaco N° 2000, Comuna de Hualpén, quien interpone demanda
de despido Injustificado, nulidad del despido y cobro de prestaciones laborales, en
contra de la ILUSTRE MUNICIPALIDAD DE HUALPÉN, representada legalmente
por su Alcalde, doña Katherine Torres Machuca, ambos domiciliados en calle
Chaitén, N° 8070, de la comuna de Hualpén, en virtud de los antecedentes de
hecho y derecho que a continuación expone:
En cuanto a la relación laboral.
1.- Señala la actora que ingresó a prestar servicios para la Dirección de
Administración de Salud de la Municipalidad de Hualpén, con fecha 08 de julio de
2008, en calidad de Auxiliar de Servicios, correspondiéndole la ejecución de las
siguientes tareas:
a) Aseo y orden de box durante la atención SAPU y el término de este.
b) Realizar el recambio de bolsas, toalla de papel y sabanilla las veces que sea
necesario.
c) Sacar basura de todos los box y realizar higiene de box cuando existan
derrames, con la utilización de EPP, las veces que sea necesario.
d) Solicitar, proponer arreglos y reparaciones necesarias para el funcionamiento
SAPU.
e) Participar en las actividades de capacitación a las que sea convocado.
f) Colaborar en las funciones administrativas que determine la Enfermera
Coordinadora de SAPU.
g) Realizar la entrega de turno, informando las actividades y novedades en libro
respectivo.
h) Realizar la solicitud de insumos de aseo necesario para el buen funcionamiento
SAPU.
i) Colaborar en atención del paciente cuando se le requiera, según corresponda.
j) Otras actividades asignadas por encargado de programa.
2.- Su contrato era de carácter indefinido.
3.- Su remuneración mensual era la suma de $486.000 o $ 2.700 por hora de
trabajo.
4.- Su jornada de trabajo era de lunes a viernes de 16:00 a 23:00 hrs o de 23:00 a
08:00 dependiendo del turno de trabajo que le correspondiera, pues efectuaba el
denominado trabajo en 4° turno que se utiliza en el sistema de salud.
5.- Asimismo, durante todo el tiempo en que estuvo vigente su vínculo contractual
cumplió correcta y oportunamente y de modo intachable todas sus obligaciones
laborales.
En cuanto al vínculo de subordinación y dependencia.
1.- Tal como señala el Código del Trabajo, el contrato de trabajo “es una
convención por la cual el empleador y el trabajador se obligan recíprocamente,
éste a prestar servicios personales bajo dependencia y subordinación del primero,
y aquel a pagar por estos servicios una remuneración determinada”. Agrega
además, el citado código en su artículo 8° que “toda prestación de servicios en los
términos señalados en el artículo anterior, hace presumir la existencia de un
contrato de trabajo.” Finalmente, el artículo 9° del Código indica “El contrato de
trabajo es consensual”.
2.- De este modo, el elemento relevante para la determinación de la existencia de
un contrato de trabajo es la “subordinación y dependencia”. Se trata del elemento
esencial y diferenciador del contrato de trabajo de otras figuras contractuales, y
que no es más que la potestad de mando y dirección del empleador y el deber de
obediencia del trabajador, la cual, se encontraba presente desde el inicio de la
relación laboral, ya que las labores que ejecutaba eran en beneficio directo y
exclusivo de la demandada, por cuenta ajena, con los elementos y materiales de
trabajo que esta le otorgaba, en sus dependencias, en jornadas y horarios por ella
determinados, bajo sus procedimientos, ordenes, instrucciones y directrices,
mediante un pago mensual, labores permanentes, continuas, exclusivas y estables
en el tiempo, etc.
3.- Para mayor claridad, resulta útil hacer presente que no obsta para la presencia
efectiva de este elemento esencial y piedra angular del derecho del trabajo, el
hecho de existir un contrato de honorarios, ya que de acuerdo al principio laboral
de la “primacía de la realidad”, las cosas en derecho laboral son los que su
verdadera naturaleza indica, sin importar el nombre que le otorguen o asignen las
partes, correspondiendo al Juez de la causa descubrir y mover el velo y con los
elementos de convicción que aporten las partes determinar la naturaleza real del
vínculo existente, actividad que sin lugar a dudas dejará de manifiesto el
subterfugio e ilegalidad en que han incurrido las demandadas, precarizando una
actividad que por esencia es de naturaleza laboral.
4.- Este mismo criterio ha sido sustentado por la Excelentísima Corte Suprema, en
causa rol 5699—2015.
5.- Así las cosas, corresponde analizar si su vinculación a la demandada cumple o
no los requisitos exigidos por el artículo 4 de la Ley 18.883. La señalada norma
indica “Podrán contratarse sobre la base de honorarios a profesionales y técnicos
de educación superior o expertos en determinadas materias, cuando deban
realizarse labores accidentales y que no sean las habituales de la municipalidad;
mediante decreto del alcalde. Del mismo modo se podrá contratar, sobre la base
de honorarios, a extranjeros que posean título correspondiente a la especialidad
que se requiera.” Pues bien, la señalada norma exige en primer lugar la posesión
de un título profesional o técnico, o la expertiz en alguna materia, requisitos que
personalmente no cumplo. En segundo lugar, se exige que la vinculación a
honorarios se efectúe para el desarrollo de labores accidentales y que no sean
habituales para la Municipalidad, cuestión que tampoco se cumple pues mis
servicios fueron continuos, para labores permanentes y propias del ejercicio
Municipal, como es la mantención del orden e higiene de las dependencias de los
Servicios de Atención Primaria de Urgencia, actividades que desarrollé desde el
año 2008.
6.- De este modo, resulta evidente que, no teniendo los servicios que prestaba
característica específica y particular que señala la norma del art. 4° de la ley
18.883 -o que tampoco se desarrolla en las condiciones de temporalidad que
indica-, sino que, más bien, satisfaciendo una exigencia que la ley reclama de un
órgano público, en su caso estamos frente a una verdadera relación laboral de
acuerdo a las normas del código del trabajo, cuestión que deberá por tanto ser
reconocida y declarada por V.S.
En cuanto al término de la relación laboral.
1.- Así las cosas, con fecha 15 de marzo de 2016, le fue comunicado por el
Municipio demandado, el término de su vinculación contractual, en los términos
siguientes:
“VISTOS: Lo dispuesto en el artículo 6 y 7 de la Constitución Política de la
República, el artículo 2 de la Ley de Bases Generales del Estado, artículo 2, 40
inciso 2do y 63 de la Ley N° 18.695 Ley Orgánica Constitucional de
Municipalidades, artículo 4 de la Ley N° 18.883 Estatuto Administrativo para
Funcionarios Municipales, artículo 4°, inciso 1°, de la Ley 19.378 Estatuto de
Atención Primaria, Decreto DAS N° 971 de fecha 16 de febrero de 2017, Contrato
de Prestación de Servicios Personales a Honorarios de fecha 27 de enero de
2017. CONSIDERANDO: 1.- Que, en virtud de lo señalado expresamente del
artículo 4 de la Ley N° 18.883, esto es, "podrán contratarse sobre la base de
honorarios a profesionales y técnicos de educación superior o expertos en
determinadas materias, cuando deban realizarse labores accidentales y que no
sean las habituales de la municipalidad; mediante decreto del alcalde..."
agregando luego que "se podrá contratar sobre la base de honorarios, la
prestación de servicios para cometidos específicos, conforme a las normas
generales". "Las personas contratadas a honorarios se regirán por las reglas que
establezca el respectivo contrato y no les serán aplicables las disposiciones de
este Estatuto". "Las personas contratadas a honorarios se regirán por las reglas
que establezca el respectivo contrato y no les serán aplicables las disposiciones
de este Estatuto"; aplicable por mandato del artículo 4 inciso 1 ero de la Ley N°
19.378 que señala que "en lo no regulado expresamente por las disposiciones de
este estatuto, se aplicarán en forma supletoria, las normas de la Ley 18.883,
Estatuto de los funcionarios Municipales".
2.- Que, en virtud de lo dispuesto en el Contrato de Prestación de Servicios
Personales a Honorarios, celebrado con fecha 27 de enero de 2017, en su
cláusula octava, se señala expresamente que "su vigencia se extenderá hasta el
31 de marzo de 2017", lo que se ratifica en el Decreto DAS N° 971, de 16 de
febrero de 2017, que señala que la vigencia del contrato de prestación de servicios
a honorarios, del 01 de enero de 2017 hasta el 31 de marzo de 2017. Fijando en
forma clara la fecha de término de dicho contrato de Prestación de Servicios a
Honorarios, esto es, el 31 de marzo de 2017.
3.- Que, el Contrato de Prestación de Servicios a Honorarios antes citado, no
contempla cláusula alguna que establezca prórroga automática del vínculo
contractual ante el silencio de las partes contratantes, motivo por el cual no
corresponde interpretar la voluntad de las partes en dicho sentido, especialmente
cuando implica la disposición de recursos municipales no contemplados para
dicho efecto.
4.- Que, ante lo antes expuesto, y constando en el contrato de prestación de
servicios a honorarios en cuestión la existencia y conocimiento de las partes
acerca de la cláusula que señala que la prestación de los servicios tiene "vigencia
hasta el 31 de marzo de 2017", esta autoridad se ve en la necesidad de hacer
efectiva dicha estipulación en aras de resguardar adecuadamente el patrimonio de
la Municipalidad de Hualpén.
DECRETO:
1.-Póngase en su conocimiento, que se pone término al Contrato de Honorarios de
don (ña) MARIA ANA CAMPOS MARIN, RUT. 11 .179.355-7, atendidos los
fundamentos y circunstancias antes descritas, a contar del 31 de marzo de 2017.
2.- Que el prestador de servicios en referencia deberá entregar todos los
antecedentes, documentos y/o similares que existan en su poder y que sean de
propiedad del municipio, al Director del Departamento en el cual presta servicios,
dentro del plazo de 5 días desde la notificación del presente Decreto”.

2.- Como puede observarse, en todo momento el ex empleador deja en evidencia


su voluntad de despedir, sin embargo, no se señala correctamente la causal de
despido que pretende invocar, tratándose en los hechos de un despido sin
expresión de causa legal.
3.- Además, la señalada comunicación, no da cumplimiento a las formalidades del
artículo 162 del Código del Trabajo, pues jamás se le dirigió la comunicación
exigida por dicha norma, en los términos por ella requeridos.
4.- En esta línea, según se ha fallado por nuestros Tribunales de Justicia, la carta
que comunica el despido debe materializarse personalmente o por carta enviada
certificada al domicilio de la trabajador, señalando la causal o causales invocada y
los hechos que sirven de base al acto del empleador, con copia a la Inspección de
Trabajo respectiva; no obstante y tal cual lo ha reiterado la Jurisprudencia, al no
concretarse dicho aviso, constituye una infracción formal que hace que el despido
sea injustificado. Concordante con ello, la comunicación anotada resulta de la
esencia en términos del conocimiento que debe adquirir el trabajador respecto de
las razones de su despido, situación que conlleva el eventual ejercicio de la
defensa; lo anterior, resulta acorde a que todo despido debe concretarse dentro de
los parámetros de las garantías constitucionales, situación que refrenda el artículo
5 del Código del Trabajo (Corte de Apelaciones de Santiago, 28 de diciembre de
2011, Rol 701-2011).
En cuanto a la sanción de nulidad del despido:
1.- La ley indica, para que el despido surta sus efectos propios, exige acreditar el
pago de las cotizaciones de seguridad social. Si ello no ocurre, el despido no
produce, respecto del empleador, el efecto de poner término al contrato de trabajo.
En la especie, al momento del despido, el empleador adeudaba las cotizaciones
de seguridad social correspondientes al periodo de 08 de julio de 2008 a 31 de
marzo de 2017.
2.- De este modo, el despido debe considerarse nulo, pues de conformidad con lo
expuesto en el art. 162 inc 5° del Código del Trabajo, para proceder al despido de
un trabajador por alguna de las causales a que se refieren los incisos precedentes
o el artículo anterior el empleador le deberá informar por escrito el estado de pago
de las cotizaciones previsionales devengadas hasta el último día del mes anterior
al del despido, adjuntando los comprobantes que lo justifiquen. Si el empleador no
hubiere efectuado el pago íntegro de dichas cotizaciones previsionales al
momento del despido, éste no producirá el efecto de poner término al contrato de
trabajo.
3.- Por su parte, el inciso 6° del mismo artículo señala que el empleador podrá
convalidar el despido mediante el pago de las imposiciones morosas del
trabajador, lo que comunicará a éste mediante carta certificada acompañada de la
documentación emitida por las instituciones previsionales correspondientes, en
que conste la recepción de dicho pago.
4.- A su vez, el inciso 7° del artículo ya citado señala que el empleador deberá
pagar al trabajador las remuneraciones y demás prestaciones consignadas en el
contrato de trabajo durante el período comprendido entre la fecha del despido y la
fecha de envío o entrega de la referida comunicación al trabajador.
5.- Que de conformidad con lo prescrito en el art. 177 del Código del Trabajo el
finiquito no producirá el efecto de poner término al contrato de trabajo si el
empleador no hubiera efectuado el integro de dichas cotizaciones previsionales.
6.- Finalmente, la norma del artículo 510 inciso 3° del Código del Trabajo indica
que “la acción para reclamar la nulidad del despido, por aplicación de lo dispuesto
en el artículo 162, prescribirá también en el plazo de seis meses contados desde
la suspensión de los servicios”.
Pide en definitiva, en virtud de lo señalado anteriormente tener por
interpuesta demanda de por despido injustificado, nulidad del despido y cobro de
prestaciones laborales en contra de la Ilustre Municipalidad de Hualpén,
representada legalmente por doña Katherine Torres Machuca, darle tramitación, y
en definitiva dar lugar a ella en todas sus partes y en definitiva declarar:
1. Que el vínculo jurídico que existió entre mi persona y la demandada era de
naturaleza laboral, existiendo subordinación y dependencia.
2. Que el despido de que he sido objeto es injustificado.
3. Que por existir cotizaciones previsionales pendientes al momento de la
terminación del contrato, se debe aplicar al empleador la sanción denominada de
nulidad del despido del artículo 162 inciso 7° del Código del Trabajo.
4. Que como consecuencia de lo anterior, el demandado deberá pagarme las
siguientes prestaciones:
a) Indemnización por falta de aviso previo, por la suma de $ 486.000, o la suma
mayor o menor que se determine conforme al mérito de autos.
b) Indemnización por años de servicios, por la suma de $ 4.374.000, o la suma
mayor o menor que se determine conforme al mérito de autos.
c) Aumento de 50% de la indemnización por años de servicio según lo dispuesto
en el art. 168 del Código del Trabajo, por la suma de $ 2.187.000.- o la suma
mayor o menor que se determine conforme al mérito de autos.
d) Feriados Legales (120 días), por la suma de $ 2.835.000.- o la suma mayor o
menor que se determine conforme al mérito de autos.
e) Feriado Proporcional, por la suma de $ 290.925.- o la suma mayor o menor que
se determine conforme al mérito de autos.
f) Las Cotizaciones Previsionales correspondientes a todo el periodo trabajado,
por las sumas que se determine conforme al mérito de autos.
g) Las remuneraciones que se devenguen desde el término de la relación laboral
hasta la convalidación del despido, por parte del empleador, de conformidad con lo
expresado en el artículo 162 inc. 7 del Código del Trabajo.-
h) Los intereses y reajustes que se devenguen conforme a derecho.
i) Las costas de la causa.
SEGUNDO: Comparece doña KATHERINE POVEDA NAVARRETE, abogada, por
la MUNICIPALIDAD DE HUALPEN, quien contesta la demanda solicitando el
rechazo de la misma, por los antecedentes de hecho y derecho que a continuación
pasa a señalar, con expresa condenación en costas:
Opuso excepción de incompetencia absoluta del tribunal, la cual fue
resuelta en la audiencia preparatoria (Se rechaza la excepción de incompetencia)
Contestando derechamente la demanda, en el primer otrosí: En el
eventual caso que este Tribunal estime su competencia en la materia, en tiempo y
forma en contesta la demanda de autos, sobre despido injustificado, declaración
de relación laboral, cobro de prestaciones, indemnizaciones, nulidad del despido,
interpuesta en contra de su representada, en atención a los siguientes
antecedentes de hecho y derecho que justifican la improcedencia de la prestación
reclamada y de cualquier otro ítem alegado por la contraria, rechazando de plano
la totalidad de las pretensiones alegadas.
En cuanto a los hechos:
1.- En primer término señala que es efectivo que la demandante prestó servicios
para su representada en virtud de contratos de prestación de servicios a
honorarios, para labores específicas, desde el 2 de febrero de 2009 hasta el 31 de
marzo de 2017.
2.- Que es efectivo que en su calidad de prestador de servicios, percibía por
dichos servicios efectivamente la suma que la actora señala.
3.- Que las funciones específicas para las cuales fue contratada la actora son las
señaladas por ésta en su demanda.
5.- Que la última contratación de la actora en calidad de prestadora de servicios a
honorarios fue por el periodo comprendido entre el 01.03.2017 a 31.03.2017.
Dicha contratación fue aprobada y ratificada mediante la dictación de Decreto
Alcaldicio N° 971 de fecha 16.02.2016.
6.- Finalmente indica que mediante Decreto Alcaldicio N°1295 de fecha
15.03.2017 se comunica a la actora el término de su Contrato a Honorarios,
atendido a lo estipulado en la cláusula octava de su contrato de honorarios que
indica expresamente la fecha de conclusión de los referidos servicios para el
convenio en específico.
En cuanto al derecho.
1.- Por aplicación del Principio de legalidad, consagrado constitucionalmente en
los artículos 6 y 7 de la ley fundamental, un ente público como lo es la
Municipalidad de Hualpén desde el momento que debe someter su acción tanto a
la Constitución como a las normas dictadas conforme a ella y desarrollar sus
funciones dentro de su competencia, se encuentra absolutamente impedido de
celebrar contratos de trabajo con su personal cuando la ley no lo exige
expresamente, como es el caso, afirmar lo contrario implica imponer un actuar
antijurídico hacia la demandada.
2.- De conformidad con este principio el servicio demandado debe,
obligatoriamente, actuar subordinado al derecho, esto es, investido legalmente,
dentro de su competencia, en la forma prescrita por la ley, y bajo prohibición de
asumir otra autoridad o derechos que los que expresamente se les hayan
conferido y que por tanto, debe atenerse a las bases de organización,
procedimiento y solemnidades que dispone la misma ley fundamental, y al mismo
tiempo, en armonía con su sustancia normativa.
3.- Así, el principio de juridicidad contribuye a ejercer en forma real y valedera los
derechos fundamentales, sin perjuicio de que también sirve de contención a los
posibles abusos de poder. En consecuencia, la Municipalidad no puede contratar
en virtud de las normas del Código del Trabajo sino mediante una ley que
expresamente lo habilite para ello; y en tanto ésta no exista, deben aplicarse las
disposiciones contenidas en el estatuto administrativo, en cualquiera de las
modalidades de contratación que éste contiene.
4.- En el mismo sentido indicar que expresamente en el artículo 3° de la Ley
18883, se dispone que labores o funciones pueden ser sujeto de aplicarse las
disposiciones del Código de Trabajo y que por consiguiente se entiende una
relación laboral respecto de ellos, así señala; “Quedarán sujetas a las normas del
Código del Trabajo, las actividades que se efectúen en forma transitoria en
municipalidades que cuenten con balnearios u otros sectores turísticos o de
recreación. El personal que se desempeñe en servicios traspasados desde
organismos o entidades del sector público y que administre directamente la
municipalidad se regirá también por las normas del Código del Trabajo. Los
médicos cirujanos que se desempeñen en los gabinetes sicotécnicos se regirán
por la ley N° 15.076, en lo que respecta a remuneraciones y demás beneficios
económicos, horario de trabajo e incompatibilidades. En las demás materias, que
procedan, les serán aplicables las normas de este estatuto.”

Inexistencia de relación laboral.


1.- El artículo 4 de la ley 18.883 establece que pueden contratarse sobre la base
de honorarios a profesionales y técnicos de educación superior o expertos en
determinadas materias, cuando deban realizarse labores accidentales y que no
sean las habituales de la municipalidad; mediante decreto del alcalde. Además, se
podrá contratar sobre la base de honorarios, la prestación de servicios para
cometidos específicos, conforme a las normas generales. Las personas
contratadas a honorarios se regirán por las reglas que establezca el respectivo
contrato y no les serán aplicables las disposiciones de este Estatuto.
2.- Todo ello se encuentra en armonía con la normativa contenida en el Código del
Trabajo, que establece al efecto en su artículo 1, inciso 2º: "Estas normas no se
aplicarán, sin embargo, a los funcionarios de la Administración del Estado,
centralizada y descentralizada, del Congreso Nacional, del Poder Judicial, ni a los
trabajadores de las empresas o instituciones del Estado o de aquellas en a que
éste tenga aportes, participación o representación, siempre que dichos
funcionarios o trabajadores se encuentren sometidos por ley a un estatuto
especial”.
3.- Indicar que la actora fue contratada para el servicio específico de Auxiliar de
Servicio, en atención a la existencia de Convenio entre la Municipalidad y el
Servicio de Salud de Talcahuano para la ejecución del Convenio de Servicio de
Atención Primaria de Urgencia (SAPU).
4.- De acuerdo a lo anterior no es efectivo que el actor haya prestado servicios
bajo vínculo de subordinación y dependencia regulados por el Código del trabajo,
como lo señala en su presentación.
5.- Indica que la actora no cumplía jornada de trabajo en los términos expuestos
en su demanda ni en los términos requeridos por la norma legal y la doctrina en la
materia. Agregando que efectivamente existía un control horario con el objeto de
dar cumplimiento al calendario SAPU y al cronograma establecido en el Convenio
de Servicio de Atención Primaria de Urgencia (SAPU).
6.- Que, no existía respecto de la demandante supervisión y/o control directo de su
desempeño. Sin perjuicio de esto último, la Municipalidad como entidad
administradora debía velar por el cumplimiento de las condiciones técnicas
exigidas por el Convenio. Así también queda de manifiesto por el propio actor al
no expresar que haya sido objeto de evaluación por parte de su supuesto
Empleador, lo que sí existe por parte del Municipio en su calidad de Ente Ejecutor
es una Supervisión Técnica del Convenio en atención al servicio prestado y al
origen de los fondos.
7.- En cuanto a la retribución por los servicios, es necesario señalar que tenía
como supuesto un informe en que el actor detallara las labores realizadas, con el
cual se aprobaba el pago, por lo que sin la presentación de este o su presentación
deficiente el pago no era cursado, lo que demuestra claramente la naturaleza civil
de la contratación. Unido lo anterior a la boleta de honorarios emitida por el actor,
la que sería ideológicamente falsa en caso de encontrarnos ante una relación
laboral. En este contexto es que podemos afirmar que la relación que une a las
partes es de carácter civil y no laboral.
8- Reiterar lo manifestado precedentemente en el hecho de negar tajantemente
que haya existido término de una eventual relación laboral con la actora. Lo
anterior por una razón fundamental, la demandante no mantiene ni mantuvo jamás
relación laboral con su representada por lo que difícilmente se pudo haber
esgrimido causal legal de cese de funciones u otra estipulada en el Código del
Trabajo, como por el hecho que su carácter fue de prestador de servicios, vía
modalidad de honorarios cesando sus servicios por el solo vencimiento del
contrato, situación que siempre estuvo en pleno conocimiento del actor, por lo que
no existe necesidad de esta parte de estipular o esgrimir causal más allá término
del contrato de honorarios por vencimiento del plazo.
Inexistencia de funciones habituales.
1.- El artículo 4 establece que pueden contratarse sobre la base de honorarios a
profesionales y técnicos de educación superior o expertos en determinadas
materias, cuando deban realizarse labores accidentales y que no sean las
habituales de la municipalidad.
2.- Que en el caso de autos señalan que las funciones ejercidas por el actor no
son habituales y se ejecutan en el marco del Convenio de Servicio de Atención
Primaria de Urgencia (SAPU).
3.- Indicar que la razón de contratación de la demandante es la firma Convenio de
Servicio de Atención Primaria de Urgencia (SAPU) mediante el cual la
Municipalidad adquiere el compromiso de destinar la trasferencia de fondos a la
implementación y desarrollo del referido convenio y por consiguiente a la
contratación del personal humano necesario para el fiel cumplimiento de éste.
Improcedencia legal de las pretensiones pecuniarias demandadas.
1.- Indica que las pretensiones solicitadas por el demandante son de naturaleza
indemnizatoria y que suponen la existencia de un vínculo laboral, inexistente en
este caso.
2.- Además, la sanción establecida en el artículo 162 del Código del Trabajo y las
cotizaciones solicitadas son improcedentes en casos que se discute entre las
partes la existencia de un vínculo normado por el Código del Trabajo, ya que la
existencia de una relación de naturaleza laboral nacería sólo con la sentencia que
acoge una demanda de esa naturaleza, por lo que la obligación de enterar
cotizaciones previsionales sólo podría exigirse a partir del inicio de la relación
laboral ya declarada, jamás con anterioridad.
3.- Así lo ha resuelto la Excma. Corte Suprema, en sentencia de casación en el
fondo de fecha 2 de julio de 2013, pronunciada en los autos "Rubber Toledo Avila
con Transportes y Comercial Bercy del Carmen Oyarzún Díaz E.I.R.L”, Rol Ingreso
N° 338-2013.
4.- Por consiguiente, procede rechazar la petición de la demandante en orden al
pago de prestaciones de naturaleza laboral y previsional durante todo el tiempo
que medie entre el término de la prestación de sus servicios y la sentencia o la
convalidación, en atención al vínculo contractual que existió con la actora, esto es,
prestación de servicios a honorarios.
Pide en definitiva, se tenga por contestada demanda sobre Declaración de
Relación Laboral, Despido Injustificado y cobro de prestaciones e indemnizaciones
laborales en procedimiento de aplicación general, en contra de su representada la
MUNICIPALIDAD DE HUALPEN, rechazando la demanda en todas sus partes en
atención a los antecedentes de hecho y derecho precedentemente expuestos y
declarando expresamente:
1.- Que no existe relación laboral alguna.
2.- Que no existe Despido Injustificado.
3.- Que no existe por nuestra parte deuda alguna por ningún concepto
remuneracional respecto a la demandante – prestaciones e indemnizaciones.
4.- Que no se adeuda por tanto reajuste e intereses.
5.- Que se condene en costas a la demandante.
6.- O lo que Ud., tenga a bien determinar conforma al mérito del proceso.
TERCERO: Se deja constancia que en audiencia preparatoria de fecha 02 de
agosto de 2017, se hizo llamado a conciliación, el cual no se produce por no tener
facultades para conciliar la demandada.
CUARTO: Que en audiencia preparatoria, mencionada en el punto anterior, se
fijaron hechos no controvertidos y se fijaron como hechos a probar los siguientes:
Hechos no controvertidos:
1.- Que la remuneración de la actora era de $486.000 mensuales.
2.- Que la desvinculación de la demandante se comunica con fecha 15 de marzo
de 2017, haciéndose efectivo el día 31 de marzo del mismo año.
3.- Que atendida la negación de la relación laboral por la demandada, ésta no ha
pagado las cotizaciones previsionales durante el periodo demandado.
Hechos a probar:
1.- Efectividad de haber existido relación laboral entre la demandante y la
demandada. En su caso, fecha de inicio, prestaciones convenidas y funciones
desarrolladas.
2.- Efectividad de haber sido desvinculada la actora en la forma en que señala en
su libelo.
3.- En su caso, estado de pago de las remuneraciones y feriados que se reclaman
en la presente causa.
QUINTO: Que en audiencia de juicio la demandante se valió de los siguientes
medios probatorios.
Documental:
1. Certificado de nombramiento con fecha 20 de marzo de 2017.
2. Convenio de Servicio de Atención Primeria de Urgencia con fecha de 01 de
enero de 2017 a 31 de marzo de 2017.
3. Decreto N° 1295
4. Boletas de Honorarios N° 117, N° 120, y N° 123, de los meses de enero,
febrero, marzo de 2017.
5. Informe anual de boletas de honorario electrónicas de años 2014, 2015, 2016,
2017.
Confesional: Renuncia a la confesional.
Testimonial:
1. Sebastián Ignacio Flores Castillo, Rut 17.347.693-0.
2. Eduardo Palma Rosales, Rut 5.177.299-7.
SEXTO: Que en audiencia de juicio la demandada se valió de los siguientes
medios probatorios:
Documental:
1. Decreto Alcaldicio nº 1295 de fecha 15 de marzo de 2017 que comunica
término del contrato por vencimiento del plazo.
2. Decreto Das que aprueba la contratación a honorarios de la actora nº971 de
fecha 16 de febrero de 2017.
3. Contrato a honorarios de fecha 27 de enero de 2017 entre la Municipalidad de
Hualpén y la actora.
4. Decreto Das que aprueba la contratación a honorarios de la actora nº1811 de
fecha 14 de abril de 2016.
5. Contrato a honorarios de fecha 11 de abril de 2016 entre la Municipalidad de
Hualpén y la actora.
6. Decreto n° 110 de fecha 31.03.16 que aprueba y ratifica convenio programa
servicio de atención primaria de urgencia (SAPU) Cesfam Hualpencillo, año
2016.
7. Decreto n° 105 de fecha 31.03.16 que aprueba y ratifica convenio programa
servicio de atención primaria de urgencia (SAPU) Cesfam Talcahuano Sur,
año 2016.
8. Decreto n° 106 de fecha 31.03.16 que aprueba y ratifica convenio programa
servicio de atención primaria de urgencia (SAPU) Cesfam La Floresta, año
2016.
9. Decreto Das que aprueba la contratación a honorarios de la actora nº 814 de
fecha 12.02.16.
10. Contrato a honorarios de fecha 26.01.16 entre la Municipalidad de Hualpén y
la actora.
11. Decreto Das que aprueba la contratación a honorarios de la actora nº 685 de
fecha 5.02.15.
12. Contrato a honorarios de fecha 12.01.15 entre la Municipalidad de Hualpén y
la actora.
13. Decreto Das que aprueba la contratación a honorarios de la actora nº346 de
fecha 17.01.14.
14. Decreto Das que aprueba la contratación a honorarios de la actora nº 345 de
fecha 13.02.13.
15. Contrato a honorarios de fecha 15.01.13 entre la Municipalidad de Hualpén y
la actora.
16. Decreto Das que aprueba la contratación a honorarios de la actora nº 393 de
fecha 13.03.12.
17. Contrato a honorarios de fecha 1.02.12 entre la Municipalidad de Hualpén y la
actora.
18. Decreto Das que aprueba la contratación a honorarios de la actora nº199 de
fecha 21.02.11.
19. Contrato a honorarios de fecha 10.01.11 entre la Municipalidad de Hualpén y
la actora.
Decreto Das que aprueba la contratación a honorarios de la actora nº 492 de
fecha 16.06.10.
Confesional: Renuncia a esta prueba.
Testimonial:
1. Alejandra Sandoval Riquelme, cédula de identidad 14.062.906-5.
2. Carolina Navarrete Nassar, cédula de identidad n° 14.356.091-0.
SEPTIMO: Que la cuestión debatida en el juicio, consiste en determinar la
naturaleza jurídica de la relación que unió a la partes, en atención a que la actora
reclama prestaciones derivadas de la naturaleza laboral y por ende reguladas por
el Código del Trabajo, y la demandada alega que las funciones ejercidas por la
actora no son habituales y se ejecutan en el marco del Convenio de Servicio de
Atención Primaria de Urgencia (SAPU), de manera que la razón de contratación
de la demandante es la firma Convenio de Servicio de Atención Primaria de
Urgencia (SAPU) mediante el cual la Municipalidad adquiere el compromiso de
destinar la trasferencia de fondos a la implementación y desarrollo del referido
convenio y por consiguiente a la contratación del personal humano necesario para
el fiel cumplimiento de éste.

OCTAVO: Que de la prueba acompañada por la demandante y por la demandada,


analizada conforme a las reglas de la sana critica, es posible establecer los
siguientes hechos:
a) La actora prestaba servicios para la Ilustre Municipalidad de Hualpén desde
el 08 de julio de 2008 hasta el 31 de marzo de 2017, desempeñándose en el Sapu
(Servicio de atención primaria de urgencia) de Hualpén. Así lo indica el certificado
emitido por el Encargado del departamento de Recursos Humanos de la Dirección
de Administración de Salud (DAS) de la Municipalidad de Hualpén y también
consta de los Decreto Das que aprueba la contratación a honorarios de la actora y
de los Contrato a honorarios entre la Municipalidad de Hualpén y la actora, todos
desde el año 2010 a 2017.
b) La actora se encontraba adscrita a la Dirección de Administración de Salud
de la Municipalidad de Hualpén, ello consta de los contratos de trabajos a
honorarios de los años 2016, 2015, 2013, 2012, 2011 y 2010 acompañados por la
demandada, en donde se indica, en la cláusula séptima, que la demandante
deberá acreditar ante el citado organismo que los servicios contratados han sido
ejecutados a entera satisfacción de la dirección del Cesfam (Centro de salud
Familiar). Del mismo modo del certificado emanado del Encargado del
departamento de Recursos Humanos de la DAS Municipalidad de Hualpén, se
indica que la demandante era prestadora de servicios para la Dirección de
Administración de Salud de la Municipalidad de Hualpén.
c) La actora desempeñaba sus funciones en el Sapu (servicio de atención
primaria de urgencia) el cual se encontraba adscrito al Cesfam (Centro de Salud
Familiar). Así lo declararon los testigos de la demandada, por un lado doña
Alejandra Sandoval indicó que el Sapu funciona en virtud de un convenio y que se
encuentra dentro del Cesfam, luego la testigo Carolina Navarrete, señaló que por
cada Cesfam existe un Convenio Sapu.
d) La Municipalidad celebró con el Servicio de Salud de Talcahuano un
convenio en virtud del cual se financió el Servicio de Atención de Salud Primaria
de Urgencia, para los usuarios de la comuna de Hualpén.
Así consta de la prueba documental acompañada por la demandada
consistente en Decreto Das Nº 971 de fecha 16 de febrero de 2017, Nº 1811 de
fecha 14 de abril de 2016, Nº 814 de fecha 12 de febrero de 2016, N° 685 de 05
de febrero de 2016, Nº346 de fecha 17 de enero de 2014. Nº 345 de fecha 13 de
febrero de 2013, N° 393 de fecha 13 de marzo de 2012, Nº 199 de fecha 21 de
febrero de 2011 y Nº 492 de fecha 16 de junio de 2010, todos estos aprueban la
contratación a honorarios de la actora
Igual conclusión se extrae de los Decreto N° 110 de fecha 31 de marzo de
2016 que aprueba y ratifica convenio programa servicio de atención primaria de
urgencia (SAPU) Cesfam Hualpencillo, año 2016, Decreto N° 105 de fecha
31.03.16 que aprueba y ratifica convenio programa servicio de atención primaria
de urgencia (SAPU) Cesfam Talcahuano Sur, año 2016, Decreto N° 106 de fecha
31.03.16 que aprueba y ratifica convenio programa servicio de atención primaria
de urgencia (SAPU) Cesfam La Floresta, año 2016,
e) La actora fue contratada para desempeñar funciones de Auxiliar, debiendo
realizar, entre otras funciones, las de Aseo y orden de box durante la atención
SAPU y el termino de este; realizar el cambio de bolsas, toalla de papel y
sabanillas las veces que sea necesario; solicitar, proponer arreglos y reparaciones
necesarias para el funcionamiento del Sapu; Colaborar en las funciones
administrativas que determine la enfermera colabora del Sapu; realizar la solicitud
de insumos de aseos necesarios para el buen funcionamiento Sapu.
Esto consta de la prueba documental acompañada por las partes
consistente en Contrato de prestación de servicios.
NOVENO: Teniendo como base las funciones ejecutadas por la demandante y el
convenio celebrado por la demandada, según lo establecido en el considerando
anterior es necesario indicar que de acuerdo a lo dispuesto en el artículo 4 de la
ley 18.695 “Las municipalidades, en el ámbito de su territorio, podrán desarrollar,
directamente o con otros órganos de la Administración del Estado, funciones
relacionadas con: b) La salud pública y protección del medio ambiente”.
Luego el artículo 1 de la ley 19.378 que establece el estatuto de atención
primaria de la salud, señala diversas formas de administración de los servicios de
atención primaria de salud, indicando que estos pueden ser traspasados a las
municipalidades, en virtud de los principios de descentralización y
desconcentración, o bien puede tratarse de establecimientos creados por las
municipalidades, traspasados con posterioridad por los Servicios de Salud o
incorporados a la administración municipal por cualquier causa.
En este caso, la demandada no ha cuestionado que la administración de
salud primaria sea ejercida por la Municipalidad, invocando solamente un convenio
entre el servicio de Salud y la Municipalidad de Hualpén mediante el cual se crea
el Servicio de Atención Primaria de Urgencia.
Sin embargo resulta conveniente citar los artículo 49, 51, 56 y 58 de la
citada ley, así las cosas el artículo 49 dispone “Cada entidad administradora de
salud municipal recibirá mensualmente, del Ministerio de Salud, a través de los
Servicios de Salud y por intermedio de las municipalidades correspondientes, un
aporte estatal”; luego el artículo 51 señala “Sólo darán derecho al aporte a que se
refiere el artículo 49 las acciones de salud en atención primaria destinadas al
fomento, prevención y recuperación de la salud y a la rehabilitación de las
personas enfermas y sobre el medio ambiente, cuando corresponda, en los
establecimientos municipales de atención primaria de salud.”, por su parte el
artículo 56 prescribe “Los establecimientos municipales de atención primaria de
salud cumplirán las normas técnicas, planes y programas que sobre la materia
imparta el Ministerio de Salud. No obstante, siempre sin necesidad de autorización
alguna, podrán extender, a costo municipal o mediante cobro al usuario, la
atención de salud a otras prestaciones. Las entidades administradoras definirán la
estructura organizacional de sus establecimientos de atención primaria de salud y
de la unidad encargada de salud en la entidad administradora, sobre la base del
plan de salud comunal y del modelo de atención definido por el Ministerio de
Salud. En el caso que las normas técnicas, planes y programas que se impartan
con posterioridad a la entrada en vigencia de esta ley impliquen un mayor gasto
para la municipalidad, su financiamiento será incorporado a los aportes
establecidos en el artículo 49”.
De las normas citadas es posible concluir que si bien es cierto existe una
atención de salud que depende del Estado, como es la atención secundaria
constituida por hospitales, centros de diagnósticos y tratamientos (CDT), no hay
que desconocer que las Municipalidades, dentro de sus funciones también deben
velar por la salud pública, y en este caso, lo que se les asigna a ellas es la
atención primaria de salud. Ahora bien, es en este contexto, es decir aquel en que
las Municipalidades son administradoras de la atención primaria de salud, que la
ley 19.738 en su artículo 49 señala que las Municipalidades, a través de los
Servicios de Salud, recibirán de parte del Ministerio de Salud un aporte estatal, en
la medida que las acciones de salud estén destinadas al fomento, prevención y
recuperación de la salud, como lo dispone el artículo 51.
DECIMO: Que, de esta forma, y en base a lo analizado precedentemente, es decir
que los centros de atención primaria, dentro de los cuales se encuentra el Cesfam
y el Sapu, son administrados por las municipalidades, es posible establecer que a
través de esta repartición la demandada cumple con la función de salud pública, la
que desarrolla, tal como lo establece el artículo 4 de la ley orgánica constitucional
de municipalidades, en colaboración con otros órganos de la Administración del
Estado, como es, el Servicio de Salud.
Es en ese contexto que el Municipio celebra con el Servicio de Salud de
Talcahuano el convenio en virtud del cual se crea el de Servicio de Atención
primaria de Urgencia. Así también se desprende de los testigos de la demandada,
ya analizados en el considerando precedente, quienes estuvieron contestes en
que el Sapu, fue instaurado en virtud de convenios celebrados con el Servicio de
Salud.
UNDECIMO: Como se advierte, la celebración de convenios entre el municipio y el
Servicio de Salud, no ha podido tener propósito distinto que el de satisfacer
obligaciones que por ley están asignadas a los entes comunales. Fluye de lo que
se viene desarrollando, que en la triangulación entre la Ilustre Municipalidad de
Hualpén, la demandante y el Servicio de Salud de Talcahuano, la Municipalidad
cumple sus fines normativos según ley orgánica sin emplear personal propio suyo,
no obstante hallarse cumpliendo uno de sus principales objetivos, cual el de la
salud pública, valiéndose de recursos ajenos, provenientes, en este caso, del
Servicio de Salud de Talcahuano, con un claro propósito de carácter permanente y
habitual.
DECIMO SEGUNDO: Ahora bien, de acuerdo a lo señalado en el Decreto 1295 de
15 de marzo de 2017, acompañado por ambas partes, la actora fue contratada en
virtud del artículo 4 de la ley 18.883 sin embargo por lo ya razonado y entendiendo
que la salud publica le incumbe a la demandada por ley, en razón de su propia
naturaleza -dentro de la estructura que el Estado se ha dado para la
implementación del bien común a nivel local- no es posible pretender cumplir este
cometido por intermedio de personal a honorarios, como si se tratase de un asunto
especifico, pues en este caso siempre la atención primaria de salud estará dentro
de las funciones del Municipio, sin que se trate de un proyecto puntual que deba
ejecutar el Municipio, sino que forma parte de algo permanente y constante,
máxime si la demandante prestó servicios desde el año 2008 para la
Municipalidad de Hualpén en forma continua e ininterrumpida.
Por estas consideraciones no será oída la alegación de la demandada en
torno a que el municipio es un mero ejecutor de programas financiados por otro
servicio público.
En este mismo sentido ha fallado la Excelentísima Corte Suprema en
recurso de unificación de jurisprudencia rol 78.992-2016, de fecha nueve de mayo
de 2017.
DECIMO TERCERO: Que así las cosas, no encontrándose la actora dentro de las
hipótesis del artículo 4 de la ley 18.883, cobra aplicación lo ya resuelto por nuestro
máximo Tribunal a través de diversos recursos de unificación de jurisprudencia,
tales como 18.186-2017, 23.647-2014, 16346-2016 y 35.145-2016, en los que ha
señalado que “si se trata de una persona natural que no se encuentra sometida a
estatuto especial, sea porque no ingresó a prestar servicios en la forma que dicha
normativa especial prevé, o porque tampoco lo hizo en las condiciones que esa
normativa establece –planta, contrata, suplente-, inconcuso resulta que la
disyuntiva se orienta hacia la aplicación del Código del Trabajo o del Código Civil,
conclusión que deriva de que en el caso se invoca el artículo 4° de la Ley N°
18.883, norma que, sustrayéndose del marco jurídico estatutario que establece
para los funcionarios que regula, permite contratar sobre la base de honorarios en
las condiciones que allí se describen y que se consignaron en el fundamento
quinto, las que, en general, se asimilan al arrendamiento de servicios personales
regulado en el Código Civil y que, ausentes, excluyen de su ámbito las
vinculaciones pertinentes, correspondiendo subsumirlas en la normativa del
Código del Trabajo, en el evento que se presenten los rasgos característicos de
este tipo de relaciones –prestación de servicios personales, bajo subordinación y
dependencia y a cambio de una remuneración, según ya se dijo-, no sólo porque
la vigencia del Código del Trabajo constituye la regla general en el campo de las
relaciones personales, sino porque no es dable admitir la informalidad laboral y
suponer que por tratarse de un órgano del Estado, que debe someterse al
principio de la juridicidad, recogido en los artículos 6 y 7 de la Constitución Política
de la República, puede invocar esa legalidad para propiciar dicha precariedad e
informalidad laboral, la que por lo demás se encuentra proscrita en un Estado de
Derecho… Que, en consecuencia, la acertada interpretación del artículo 1° del
Código del Trabajo, en relación, en este caso, con el artículo 4° de la Ley N°
18.883, está dada por la vigencia de dicho Código del Trabajo para las personas
naturales contratadas por la Administración del Estado, en la especie una
Municipalidad, que aun habiendo suscrito sucesivos contratos de prestación de
servicios a honorarios, por permitírselo el estatuto especial que regula a la entidad
contratante, prestan servicios en las condiciones previstas por el Código del
ramo… Corresponde calificar como vinculaciones laborales, sometidas al Código
del Trabajo, a las relaciones habidas entre una persona natural y un órgano de la
Administración del Estado, en la especie, una Municipalidad, en la medida que
dichas vinculaciones se desarrollen fuera del marco legal que establece –para el
caso- el artículo 4° de la Ley N° 18.883, que autoriza la contratación sobre la base
de honorarios ajustada a las condiciones que dicha norma describe, en la medida
que las relaciones se conformen a las exigencias establecidas por el legislador
laboral para los efectos de entenderlas reguladas por la codificación
correspondiente.
DECIMO CUARTO: Que, afirmado como fue, que la demandante no es una
persona sujeta a una contratación a honorarios en los términos del artículo 4 de la
ley 18.883 y no pudiendo enmarcarlo dentro de la calidad de funcionario de planta
y de contrata, corresponde analizar si en la especie efectivamente concurren o no
los supuestos del artículo 7º del Código del Trabajo como sostiene el actor, para
determinar así el sustento de una relación laboral que permita seguir analizando
las acciones intentadas.
DECIMO QUINTO: Al efecto, el mencionado artículo establece que "Contrato
individual de trabajo es una convención por la cual el empleador y el trabajador se
obligan recíprocamente, este a prestar servicios personales bajo dependencia y
subordinación del primero, y aquél a pagar por estos servicios una remuneración
determinada". De tal definición legal, es posible deducir que para estar en
presencia de un contrato de trabajo deben concurrir copulativamente los
siguientes supuestos: a) Dos partes ligadas por un vínculo. Por un lado el
empleador, acreedor del trabajo y, por el otro, el trabajador, deudor del trabajo.
Entendiendo en cada sujeto, la definición otorgada en el artículo 3° del mismo
Código del Trabajo; b) La prestación de servicios personales. La prestación de
servicios constituye la principal obligación del trabajador. Prestación que el
dependiente debe efectuar en forma personal, no resultando posible que encargue
ésta a otro sujeto; c) Una remuneración por la prestación de servicios. Por la
prestación de servicios que efectúe el trabajador, debe recibir del empleador, una
remuneración determinada, constituyendo el deber más importante de este frente
a aquél; y d) Subordinación o dependencia. Este elemento no es definido por el
legislador, pero puede entenderse por tal el sometimiento, en relación a las
labores ejecutadas, a la forma y condiciones impuestas por el empleador; siendo
indispensable que concurran todos los otros indicados.
De tal manera que cada vez que concurran todos estos elementos
señalados, estaremos en presencia de un contrato de índole laboral, cualquiera
sea la denominación que le otorguen las partes. En otros términos, cuando haya
una prestación de servicios personales a cambio de una remuneración y se
efectúe bajo subordinación y dependencia, habrá que calificar tal relación como un
contrato de trabajo, por mucho que las partes le hayan asignado otra
denominación, lo anterior por aplicación del principio de la primacía de la realidad
y del principio de la irrenunciabilidad de los derechos laborales. Pero, si se omite
uno de estos requisitos, el contrato no podrá ser calificado como del tipo laboral,
sino de una naturaleza diversa.
DECIMO SEXTO: Que la prueba rendida por el actor, apreciada conforme a las
reglas de la sana critica, resultan ser suficiente para concluir que entre las partes
de esta causa efectivamente existió una relación laboral en los términos
pretendidos, desde que ha sido acreditado que el demandante prestó servicios
para la demandada desde el año 2008, de manera remunerada, mensual,
ininterrumpida, continua, permanente y que cumplía instrucciones de sus jefes
directos.
En efecto, las partes no controvirtieron que la demandante ingreso a prestar
servicios para la Municipalidad el año 2008, acompañando la demandada como
prueba documental contratos suscritos entre las partes los años 2010, 2011, 2013,
2015, 2016 y 2017 y 2016 y la demandante acompaño certificado del encargado
del departamento de recursos humanos de la DAS de la demandada que certifica
que la actora prestó servicios para la Municipalidad desde el 08 de julio de 2008
hasta el 31 de marzo de 2017.
Además en los contratos suscritos entre las partes, se indica en la cláusula
séptima que la actora debía rendir cuenta de su desempeño y que sus funciones
debían ser ejecutadas a entera satisfacción de la directora del Cesfam, se señala
también en los contratos que la actora estará sujeta a los turnos fijados en el
respectivo servicio de urgencia, también se indica que las funciones prestadas por
la demandante serán exclusivas, pues se establece en la cláusula tercera la
incompatibilidad de sus funciones con cualquier otra que desarrolle en forma
simultánea, en contratos anteriores también se establecía que la actora tendría
derecho a 15 días de descanso, comprendidos dichos periodos los días sábados y
domingo, 5 días de reposo médico y 5 días de capacitación.
Por otro lado el testigo de la demandante Sebastián Flores indico que
estaba sujeta a la modalidad de turnos, detallando que existía un turno día, turno
noche y luego descansaban, que este sistema de turnos era habitual en el rubro
de la salud, también indico que el horario que debía cumplir la demandante se
controlaba por huella digital y por libro. Finalmente precisó que debía recibir
instrucciones de la enfermera jefa del Sapu, Alejandra Bobadilla.
Por su parte el testigo Eduardo Palma sostuvo en estrados que la actora
desempeñaba sus funciones por turnos de tarde, noche y luego descanso,
precisando que la asistencia era controlada por un reloj control y una bitácora y
que recibía instrucciones de la dirección de salud, específicamente de la jefa de
personal doña Alejandra Bobadilla.
Por otro lado los testigos de la demandada sostuvieron que esta recibía
instrucciones de una jefatura, Alejandra Bobadilla,
DECIMO SEPTIMO: De manera que todos los elementos recientemente
mencionados reflejan un vínculo de subordinación y dependencia, pues
demuestran que la actora no tenía plena libertad al ejecutar sus funciones, pues
no sólo debía reportarse con su superior, que en este caso corresponde a la
Dirección de Administración de Salud, con la respectiva visación de la Dirección
del Cesfam, sino que además debía cumplir con asistencia, lo que se desprende
de lo declarado por los testigos y de las estipulaciones del contrato que “autorizan”
a ausentarse en casos determinados, y a que autorizan a ausentarse 15 días, lo
que equivale al feriado legal otorgado a los trabajadores, todo esto a contrario
sensu implica que la actora no tenía libertad para desempeñar sus funciones en el
horario que él quisiera.
Así las cosas, puede concluirse que en la especie existen dos partes
ligadas por un vínculo contractual, la Ilustre Municipalidad de Hualpén, que impone
a una de ellas el deber de prestación de servicios personales como son las
funciones que ya fueron anotadas, que la demandante debía efectuar en forma
personal y exclusiva, no resultando posible que encargue ésta a otro sujeto y una
remuneración por la prestación de servicios que efectuaba el trabajador.
DÉCIMO OCTAVO: Que, en lo que respecta al vínculo de subordinación y
dependencia, puede sostenerse que de haber existido una relación real de un
profesional de honorarios, operaría una vinculación horizontal y no vertical como
opera en materia laboral, lo que es inherente en las relaciones entre empleador y
trabajador. Así, de la prueba incorporada por ambas partes, como son los
respectivos Contratos a los que ya se ha hecho referencia, puede establecerse
que la actora debía informar de su actuación a la Dirección de Administración de
Salud quien la supervisaba técnicamente y además este último debía velar por el
cumplimiento del cometido; por último, la actora tenía una serie de derechos que
se le asignan a quienes tienen este vínculo de laboralidad. En efecto, se le
concede un permiso especial de 15 días hábiles, que equivale a un feriado legal.
De todas obligaciones y beneficios que le asisten al demandante y que han
sido debidamente asentados, puede concluirse que en la especie no se verificó la
relación horizontal de igualdad de partes propia del arrendamiento de servicios,
sino derechamente una vinculación vertical de mando y obediencia, lo que se
refleja en que a pesar de ser la actora un supuesto funcionario a honorarios,
igualmente gozaba de una serie de beneficios propios de un vínculo de carácter
laboral, satisfaciéndose así el último de los requisitos para tener el vínculo por tal.
DÉCIMO NOVENO: Que, en la especie ha quedado acreditada la existencia de la
relación laboral entre las partes, la que según lo establecido en el considerando
séptimo letra a) el 08 de julio de 2008 y finalizó el 31 de marzo de 2017,
desvirtuándose la naturaleza del contrato en los términos del artículo 4 del
Estatuto Administrativo, a uno de duración indefinida conforme a la regla general
en materia de contratos, motivo por el cual su eventual terminación por decisión
del empleador se debía ajustar al mérito de las exigencias del Código del Trabajo.
VIGESIMO: Que constituye un hecho acreditado que la relación laboral entre las
partes finalizó por la comunicación unilateral emanada de la Alcaldesa de la Ilustre
Municipalidad de Hualpén de fecha 15 de marzo de 2017, la que luego de hacer
referencia al artículo 4 de la ley 18.883 y a que el contrato por ellas celebrados
establece una vigencia hasta el 31 de marzo de 2017, pone termino a dicha
contratación haciendo referencia a la necesidad de resguardar el patrimonio
municipal.
De lo anterior, se aprecia que la comunicación de término del contrato, en
ningún caso hace una descripción precisa de los hechos que efectivamente
habrían constituido las causales en cuestión, pues habiéndose establecido ya que
la relación existente entre ellos excede los marcos del artículo 4 de la ley 18.883
dicha justificación no resulta aplicable, en consecuencia los términos empleados
en la carta infringen lo dispuesto en el artículo 162 inciso 1° parte final del Código
del Trabajo, pues solo hace referencia a la necesidad de resguardar el patrimonio
de la Municipalidad, resultando un despido carente de justificación ante tal
evidente omisión evidente.
VIGESIMO PRIMERO: Que así las cosas y habiéndose establecido que entre las
partes existió una relación laboral y que se puso término a ella fuera de los casos
previstos en el Código del Trabajo, sin invocarse causal legal alguna y sin el
cumplimiento de las formalidades respectivas, solo cabe declarar que el mismo fue
injustificado y en consecuencia, se dará lugar a las prestaciones que en razón de
él le corresponden al actor.
Para el cálculo de tales indemnizaciones se tendrá como base de cálculo el
promedio de las tres últimas remuneraciones percibidas por el actor, considerando
que del mérito de la prueba rendida por este consistente en boletas de honorarios
electrónicas, por los meses de enero, febrero y marzo de 2017, las boletas
emitidas por la actora tenían la naturaleza de variables, por lo que resulta
necesario recurrir a la técnica señalada en el artículo 172 inciso segundo del
código del ramo, ascendiendo dicha remuneración a $416.394.
No es obstáculo para arribar a ese monto, la circunstancia que la
demandante haya alegado una remuneración de $486.000 mensuales, toda vez
que tratándose de un punto de prueba y habiéndose solicitado por la actora las
sumas que el Tribunal estime fijar conforme al mérito del proceso, este Tribunal se
encuentra facultado para fijar los montos que resulten del mérito de la prueba
rendida.
VIGESIMO SEGUNDO: Que en lo tocante a la pretensión de que el despido
adolece de nulidad, habiendo negado la demandada la existencia de una relación
laboral, resulta evidente que no realizó el entero en las instituciones respectivas de
las cotizaciones de seguridad social del actor, por lo que corresponde acoger la
solicitud de declarar que el despido no ha podido producir sus efectos,
aplicándose la sanción del artículo 162 del Código del Trabajo. En efecto,
considerando que la primera cuestión que debió ser dilucidada consistió en
establecer que efectivamente la relación que vinculó a las partes era laboral y
habiendo omitido en la comunicación de término de la relación la información
relativa a estar al día en la declaración y pago de las obligaciones de seguridad
social, lo que desde luego no hizo a la luz de su teoría defensiva en orden a que
en la especie no existía laboralidad, se alza como un hecho inconcuso que la
demandada infringió lo dispuesto en el artículo 162 inciso 5° del Código del
Trabajo, por lo que el despido adolece de nulidad por incumplimiento del deber de
cubrir las cotizaciones previsionales devengadas a favor de la actora a
consecuencia de la relación laboral que las unió. Del mismo modo, tampoco se
acreditó que se hubiera producido la convalidación del despido, acorde al inciso 6°
del citado artículo, razón por la cual, se debe acoger la petición de la actora en
ésta materia. Así, pesa sobre el demandado la obligación de pagar ante los
organismos pertinentes las cotizaciones previsionales y de salud,
correspondientes a todo el período trabajado, todo ello en conformidad al artículo
162 incisos 6 y 7 del Código del Trabajo, tal como se dirá en lo resolutivo de ésta
sentencia.
Que no es obstáculo para aplicar esta sanción, la circunstancia que la
relación laboral se haya declarado en este juicio, pues la reciente jurisprudencia
de nuestro máximo tribunal esta conteste en que ella es procedente cuando la
relación laboral se ha dado por establecida en la sentencia, pues se estima que si
se niega la relación laboral en el juicio la sentencia que recae sobre este no tiene
la naturaleza de constitutiva, atendido que la relación laboral no registra su
nacimiento desde que quede ejecutoriada la decisión en que el tribunal la
reconoció, sino desde la oportunidad en que las partes la constituyeron. Cosa
distinta es que una de ellas se resista a dar cumplimiento a las prestaciones que
de esa relación jurídica se desprenden; además de estimarse que se constituye el
derecho en la sentencia, nada ha existido con anterioridad y no procedería hacer
lugar a la demanda. Así ha fallado la Corte Suprema en causas rol 8318-2014,
6604-2014 y 5286-2016.
VIGESIMO TERCERO: Que correspondía a la demandada acreditar el pago del
feriado legal y proporcional que la actora cobra en su demanda, lo que no hizo,
por lo que se acogerá la demanda en esa parte ordenado su pago.
Por estas consideraciones, y de conformidad, además, con lo dispuesto en
los artículos 1°, 2°, 3°, 7°, 8º, 9°, 63, 159, 162, 163, 168, 173, 425 y siguientes,
445, 453, 454, 456, 457, 458 y siguientes, todos del Código del Trabajo, artículo 1,
4 11 de la Ley N° 18.833, artículo 1698 del Código Civil, artículos 1, 3, 5, y
siguientes de la ley 18.695 y demás disposiciones legales ya citadas en ésta
sentencia, SE DECLARA:
I.- Que habiéndose concluido que existió relación laboral entre las partes, se
acoge la demanda por nulidad del despido, despido injustificado y cobro de
prestaciones laborales deducida por doña MARIA ANA CAMPOS MARIN, contra
de la ILUSTRE MUNICIPALIDAD DE HUALPEN, representada legalmente por
doña KATHERINE TORRES MACHUCA, y en consecuencia se condena a la
demandada al pago de las siguientes prestaciones:
a) $ $416.394 por concepto de indemnización sustitutiva del aviso previo;
b) $ 3.747.546 correspondiente a indemnización por años de servicios;
c) $ 1.873.773 por concepto de recargo de un 50% sobre la indemnización por
años de servicios.
d) Feriado legal correspondiente a los periodos que van desde el 08 de julio de
2008 al 07 de julio de 2016, sobre la base de $416.394 mensuales.
e) Feriado proporcional correspondiente al periodo que va desde el 08 de julio
de 2016 al 31 de marzo de 2017, sobre la base de $416.394 mensuales.
f) Remuneraciones entre la fecha del despido, esto es 31 de marzo de 2017 y
su convalidación, a razón de $416.394 mensuales.

g) El pago de las cotizaciones de seguridad social, en AFP, Fonasa o Isapre,


según sea el caso y AFC Chile, por todo el período trabajado que va desde el 08
de julio de 2008 hasta el 31 de marzo de 2017, sobre la base de una
remuneración de $416.394.
II.- Se declara que las sumas ordenadas se pagarán reajustadas y generarán,
luego de actualizadas, los intereses que proceden conforme lo dispuesto en los
artículos 63 y 173 del Código del Trabajo.
III.- No se condena en costas a la demandada por estimar este Tribunal que
tuvo motivo plausible para litigar.
IV.- En mérito de lo ordenado dese cumplimiento a lo dispuesto en el artículo
461 del Código del Trabajo, oficiándose al efecto.

Regístrese y en su oportunidad archívese.


RIT: O-649-2017.

Dictada por doña ANGELA HERNANDEZ GUTIERREZ, Juez de Letras del


Trabajo de Concepción.

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