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MANUAL AMIR
TRAUMATOLOGÍA Y CIRUGÍA ORTOPÉDICA
(12.ª edición)
ISBN
978-84-17567-45-3
DEPÓSITO LEGAL
M-22153-2019
(1) H. G. U. Gregorio Marañón. Madrid. (15) H. U. Reina Sofía. Córdoba. (27) H. Quironsalud A Coruña. La Coruña. (40) H. C. U. Lozano Blesa. Zaragoza.
(2) H. Ruber Internacional. Madrid. (16) H. U. San Juan de Alicante. Alicante. (28) H. G. U. de Alicante. Alicante. (41) H. U. de La Princesa. Madrid.
(3) H. U. del Sureste. Arganda del Rey, Madrid. (17) H. U. de Bellvitge. L’Hospitalet de (29) H. Central U. de Valencia. Valencia. (42) H. U. Virgen de la Victoria. Málaga.
(4) H. U. La Paz. Madrid. Llobregat, Barcelona. (30) H. G. U. de Valencia. Valencia. (43) H. Central de la Cruz Roja. Madrid.
(5) H. U. Severo Ochoa. Madrid. (18) H. de Manacor. Mallorca. (31) H. U. de Móstoles. Madrid. (44) H. U. Río Hortega. Valladolid.
(6) H. U. Virgen del Rocío. Sevilla. (19) H. U. de Getafe. Madrid. (32) H. U. Sagrat Cor. Barcelona. (45) H. U. Virgen de las Nieves. Granada.
(7) Phoenix Children´s Hospital. Phoenix, EE.UU. (20) H. U. Germans Trias i Pujol. Badalona. (33) H. U. Vall d’Hebron. Barcelona. (46) Clínica U. de Navarra. Madrid.
(8) H. Infanta Cristina. Parla, Madrid. (21) H. U. Puerta de Hierro. Madrid. (34) H. U. de Girona Dr. Josep Trueta. Girona. (47) H. U. Fundación Alcorcón. Madrid.
(9) H. Clinic. Barcelona. (22) H. U. Son Espases. Palma de Mallorca. (35) Parc de Salut Mar. Barcelona. (48) H. U. de Torrejón. Madrid.
(10) H. U. de Fuenlabrada. Madrid. (23) H. U. Ramón y Cajal. Madrid. (36) H. U. Infanta Elena. Madrid. (49) H. U. de Basurto. Bilbao.
(11) H. U. i Politecnic La Fe. Valencia. (24) H. Can Misses. Ibiza. (37) Instituto de Neuropsiquiatría y (50) H. C. U. de Valladolid. Valladolid.
(12) H. U. 12 de Octubre. Madrid. (25) Centre d’Ophtalmologie Sainte Odile. Adicciones, PSMAR. Barcelona. (51) H. U. HM Montepríncipe. Madrid.
(13) H. C. San Carlos. Madrid. Alsacia, Francia. (38) Psiquiatra en ámbito privado. Madrid. (52) H. Infantil U. Niño Jesús. Madrid.
(14) H. Ntra. Sra. de América. Madrid. (26) H. U. Joan XIII. Tarragona. (39) H. U. Fundación Jiménez Díaz. Madrid.
5
ORIENTACIÓN MIR
Rendimiento por asignatura Número medio de preguntas Eficiencia MIR
(preguntas por página) (de los últimos 11 años) (rendimiento de la asignatura
corregido por su dificultad en el MIR)
1,2 7 5
La importancia de esta asignatura a lo largo de la historia del MIR ha sido variable. En la actualidad el número de preguntas oscila
entre las 4 y las 11 preguntas. Un gran porcentaje de éstas son de los tres primeros temas: generalidades, fracturas y luxaciones
de miembro superior e inferior.
La mayoría de las preguntas se plantean en forma de caso clínico y su dificultad suele ser media o baja. Preguntas aisladas en dife-
rentes convocatorias han tenido una dificultad mayor, pero no es lo normal.
Es también habitual que se incluya una pregunta vinculada a imagen de esta asignatura, por lo tanto es importante prestar aten-
ción a las imágenes incluidas tanto en este manual como en el de Radiología.
El tema del paciente politraumatizado resume conceptos de diferentes asignaturas respecto al diagnóstico y tratamiento de este tipo de
pacientes. Es un tema cuya importancia ha aumentado en los últimos años y es recomendable repasarlo (además de durante el estudio
de Traumatología) cuando se finalice el estudio de otras asignaturas (Neurología, Cirugía General, Cardiología, Neumología, etc.).
PD OR RM IM IF TM GC CD NF DG UR OF NR PQ DM ED HM NM MC ET
1 2,6 2,8 3,3 3,7 5 5,3 5,4 5,4 5,8 5,9 6 6,3 6,4 6,5 6,6 6,8 7,5 7,7 10
- eficiente + eficiente
1,83% 10,20%
IM DG
1,99% OF ET 8,25%
2,06% OR CD 7,94%
2,67% UR IF 7,30%
2,67% DM MC 7,18%
3,13% TM NM 6,68%
4,09% PQ NR 5,88%
4,20% PD GC 5,35%
11 7 9 4 6 3 8 8 9 11 6
4,43% RM NF HM
ED 4,93%
año 09 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 4,55% 4,66%
7
ÍNDICE
9
9.4. Cadera dolorosa del adulto joven o atrapamiento femoroacetabular...................................................... 72
9.5. Hallux valgus.......................................................................................................................................... 72
Autores: Alberto Touza Fernández, Gonzalo Luengo Alonso, Fadi Amari Sánchez-Villanueva.
TEMA 10 MANEJO DEL PACIENTE POLITRAUMATIZADO................................................................................74
10.1. Introducción. Definiciones....................................................................................................................... 74
10.2. Atención inicial....................................................................................................................................... 75
10.3. Manejo de la vía aérea............................................................................................................................ 75
10.4. Estado circulatorio.................................................................................................................................. 75
10.5. Traumatismo craneoencefálico................................................................................................................ 76
10.6. Traumatismos maxilofaciales................................................................................................................... 76
10.7. Traumatismo raquimedular y de extremidades o pelvis........................................................................... 77
10.8. Traumatismo torácico............................................................................................................................. 77
10.9. Traumatismo abdominal......................................................................................................................... 77
10.10. Lesiones específicas por animales............................................................................................................ 77
Autores: Ainhoa Guijarro Valtueña, Eloy Tabeayo Álvarez, José Manuel Martínez Díez.
REGLAS MNEMOTÉCNICAS....................................................................................................................................79
BIBLIOGRAFÍA........................................................................................................................................................80
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CURIOSIDAD
Gerhard Küntscher (1900-1972) fue un traumatólogo alemán que estableció las bases del
enclavado endomedular de las fracturas diafisarias de huesos largos. Diseñó un clavo con aristas
que permitía tanto el control axial como rotacional de la fractura. Desarrolló su técnica durante
la Segunda Guerra Mundial y tras la publicación de sus trabajos fue adoptado como método de
elección para el tratamiento de estas fracturas en todo el mundo. Se considera uno de los avances
más importantes en la atención del trauma grave del siglo XX.
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Tema 1
Generalidades de las lesiones óseas traumáticas
Autores: Gonzalo Luengo Alonso, H. U. 12 de Octubre (Madrid). Alberto Touza Fernández, H. U. de Torrejón (Madrid). Ainhoa Guijarro Valtueña, H.
U. Puerta de Hierro (Madrid).
Este es uno de los temas más importantes. Céntrate especialmente Un traumatismo directo suele provocar una fractura lineal (según
en las indicaciones de tratamiento quirúrgico o conservador, las la energía); un traumatismo indirecto, normalmente por flexión,
complicaciones más típicas de cada fractura, y la clasificación y suele asociarse a aparición de un tercer fragmento (ala de mari-
tratamiento de las fracturas abiertas. posa); un traumatismo de alta energía o un aplastamiento (o un
mecanismo combinado) provocan una fractura multifragmenta-
ria; por último, la torsión de hueso lleva un trazo espiroideo.
Clasificación Angulación
Pérdida del alineamiento habitual del hueso afectado; puede
Según mecanismo de producción producirse en un plano frontal (varo, si la parte distal se acer-
ca a la línea media, o valgo, si se aleja) o en un plano sagital
• Alta energía: aplicación de una fuerza intensa sobre el
(anterior/posterior).
hueso de forma que éste se deforma y, una vez superado su
nivel de elasticidad, se fragmenta. La fractura puede provo- (Ver figura 1 en la página siguiente)
carse por un mecanismo directo o indirecto.
• Baja energía: fracturas ante mínimos traumatismos puntua- Rotación
les o repetidos. Giro del fragmento distal en el eje principal del hueso.
- Fractura patológica: cuando un hueso se rompe ante un
traumatismo leve, por existir una patología que debilita su Acortamiento
estructura. Puede ser local como las neoplasias o los quis-
tes, o generalizada como la osteoporosis o la enfermedad Disminución de la longitud del miembro debido a la contrac-
de Paget. Las fracturas osteoporóticas se dan sobre todo ción muscular.
en cadera, columna vertebral y extremidad distal del radio.
Globalmente, las más frecuentes son las fracturas verte- Translación
brales. Por otro lado, la causa más frecuente de fractura
Desplazamiento puro del fragmento distal sin angularse ni rotarse.
vertebral patológica es la osteoporosis (MIR 09, 91).
- Fracturas por estrés o fatiga: el hueso se fractura des-
pués de ciclos de microtraumatismos repetidos. Pueden 1.2. Consolidación
ocurrir sobre hueso sano, generalmente en actividades
que someten al hueso a un esfuerzo repetitivo prolongado
(deportistas, bailarines, marchas en reclutas –fractura de Tipos de consolidación
Deustchländer en el 2.º o 3.er metatarsiano–, etc.). Tam-
bién pueden aparecer en hueso enfermo (p. ej., las zonas • Consolidación primaria (“per priman”) o directa: cuando los
de Looser-Milkman en el raquitismo o la osteomalacia). extremos óseos fracturados están afrontados de forma anató-
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Manual AMIR · Traumatología y Cirugía Ortopédica
• Biológicos: factores de crecimiento (TGF-ß y sobre todo Tabla 1. Factores que modifican la consolidación ósea. Adaptado de: Rockwood
BMP) y proteínas de la matriz extracelular favorecen la con- and Greens. Fractures in Adults, 5.ª Edición.
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Tema 1 · Generalidades de las lesiones óseas traumáticas
1.3. Clínica y diagnóstico general el dolor y disminuir el riesgo de lesiones asociadas, especial-
de las fracturas mente las neurovasculares.
• Inmovilización: tiene como objetivo mantener la reducción
hasta que se decida si el tratamiento definitivo va a ser orto-
Clínica
pédico o quirúrgico.
• Dolor importante.
Se denomina intervalo libre al tiempo que transcurre desde que
• Tumefacción local. se produce la fractura hasta que recibe tratamiento definitivo,
que puede ser ortopédico (conservador) o quirúrgico:
• Impotencia funcional del miembro afecto.
• Hematoma local tras un tiempo.
Tratamiento ortopédico o conservador
• Anemia en caso de pacientes anticoagulados y fracturas de
huesos largos.
Incluye desde la abstención terapéutica (analgesia/reposo)
• Deformidad, dependiendo del desplazamiento de la fractura. hasta la aplicación de una tracción sostenida del miembro
afectado ya sea blanda (adherida a la piel) o transesquelética
Diagnóstico (el peso actúa traccionando directamente a través de hueso),
pasando por todo tipo de vendajes, férulas de yeso, ortesis,
corsés o sindactilias.
• Exploración clínica del paciente y un análisis del mecanismo
de producción del traumatismo: para definir realmente las
lesiones debemos apoyarnos en pruebas de imagen. Tratamiento quirúrgico
• Radiografías: dos proyecciones como mínimo (AP y lateral),
e incluir las articulaciones inmediatamente proximal y distal a Modalidades de tratamiento quirúrgico
la región afecta.
Existen cuatro grandes modalidades:
Existen varias proyecciones típicas del estudio de algunas par-
tes del cuerpo (radiografía axial de cadera, transtorácica para • RAFI (reducción abierta y fijación interna): se aborda directa-
húmero proximal, oblicuas para raquis, pie y mano…), así mente el foco de fractura quirúrgicamente y se estabiliza la
como una larga serie de proyecciones específicas menos im- fractura con placas, tornillos o cerclajes. El objetivo del trata-
portantes (túnel carpiano, sesamoideos, acromioclavicular...). miento quirúrgico es realizar reducción y fijación de la frac-
tura para favorecer su correcta consolidación, restituir su
• TAC: nos dará una mayor definición del trazo de frac- función, permitir una movilización precoz y disminuir en lo
tura y de la posición de los fragmentos. Es típica su utiliza- posible la pérdida de función. Se utiliza principalmente para
ción en fracturas articulares, fracturas sobre hueso esponjoso tratamiento de fracturas con afectación articular y en aquellas
y fracturas conminutas. Se debe plantear su realización ante fracturas que precisen una reducción anatómica.
fracturas de húmero proximal, calcáneo, vértebras y pelvis, así
como ante fracturas dudosas y para planificar una interven-
ción quirúrgica.
• RMN: utilizada para observar las partes blandas. Ade-
más de lesiones musculares, tendinosas, ligamentosas, me-
dulares y articulares, nos es muy útil para valorar la extensión
tumoral y las zonas de inflamación. Tiene un valor fundamen-
tal en el estudio de lesiones meniscales y cartilaginosas.
• Ecografía: ayuda a valorar el estado de partes blandas y el
contenido de cavidades. Puede contribuir al diagnóstico de le-
siones del manguito rotador, lesiones del tendón de Aquiles,
hernias musculares, etc. Es muy importante para la valoración
articular en los niños (artritis séptica/displasia de cadera).
• Gammagrafía: tiene muy alta sensibilidad pero poca especi-
ficidad. Contribuye al diagnóstico de fracturas de estrés y del
estudio de metástasis.
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Manual AMIR · Traumatología y Cirugía Ortopédica
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Tema 1 · Generalidades de las lesiones óseas traumáticas
ca, un mayor índice de fallo de consolidación y un mayor riesgo - Exploración neurovascular distal.
de infección (generalmente por estafilococo, aunque también
- Lavado inicial con suero salino fisiológico, inmovilización
por anaerobios, según el contexto del accidente). La localiza-
provisional con férula y estudio radiográfico.
ción más frecuente es en las fracturas de tibia (MIR).
- Toda fractura abierta debe ser explorada en el quirófano,
• Clasificación: la clasificación más utilizada para la valoración
al menos para realizar un lavado con diez litros de suero
de este tipo de lesiones es la clasificación de Gustilo. Se basa
salino y desbridamiento de todo tejido no viable. Es, junto
en el número de centímetros de hueso expuesto; es la más
con la antibioterapia precoz, la medida más efectiva para
sencilla pero subestima la afectación de las partes blandas:
la prevención de la infección (MIR 18, 173).
- Grado I: los fragmentos óseos lesionan la piel de dentro a
- Estabilización de la fractura (MIR).
fuera, siendo la herida <1 cm. Tienen un escaso riesgo de
infección. Generalmente es suficiente con una cobertura En las fracturas diafisarias de tibia I, II y IIIA se recomienda
antibiótica con cefalosporinas de primera generación ade- realizar un enclavado endomedular, en caso de ser un hueso
más de una limpieza local intensa. largo, como primer tratamiento, salvo si el estado de las par-
tes blandas no lo permitiera (en cuyo caso se realizará una
- Grado II: heridas inciso-contusas >1 cm y <10 cm. Tras un
fijación externa provisional).
desbridamiento y limpieza exhaustiva pueden ser cerradas
de forma primaria, aunque deben evitarse las osteosíntesis A pesar de estas directrices, en casos graves nos podemos
a través del foco de fractura. Debemos usar cefalosporinas plantear la amputación primaria. Para ello se han desarro-
y aminoglucósidos combinados. llado varias escalas, siendo la más importante la Escala MESS
(Mangled Extremity Severity Score), que incluye la edad, el es-
- Grado III: presenta una herida >10 cm, habitualmente pro- tado vascular del miembro afectado, la estabilidad hemodiná-
ducida de fuera a dentro debido al mecanismo de fractura, mica, el periodo de tiempo transcurrido desde el accidente y
y con gran lesión de las partes blandas adyacentes. Suele la energía del traumatismo inicial. El paciente candidato a am-
requerir la asociación de cefalosporinas y aminoglucósidos. putación es aquél con un traumatismo de alta energía, déficit
Según la lesión de partes blandas la dividimos en: de irrigación del miembro afectado de más de seis horas de
• IIIA: es posible la cobertura de hueso expuesto con los evolución, precario estado hemodinámico y edad avanzada.
tejidos lesionados.
• IIIB: para cubrir el hueso expuesto son necesarios proce- (Ver tabla 3)
dimientos de reconstrucción (colgajos).
• IIIC: la fractura asocia lesión vascular, independiente- Síndrome compartimental (MIR 09, 90)
mente del tipo de fractura. Alto riesgo de amputación.
Se produce cuando en un compartimento muscular aumenta
• Tratamiento (MIR): la presión provocando un descenso de la perfusión capilar,
- Estabilización del paciente, según precise (Protocolo ATLS: que compromete la viabilidad de los tejidos pudiendo producir
A, B, C, D, E). necrosis muscular y nerviosa. Este aumento de presión puede
estar relacionado con un aumento del contenido del com-
- Antibioterapia intravenosa precoz. partimento (edema, hematoma, tumefacción muscular por
esfuerzo, reperfusión tras isquemia (MIR), obstrucción venosa
- Profilaxis antitetánica.
o linfática) o de una limitación en la expansión del mismo
• Cefalosporinas*
GRADO I Menos de 1cm de dentro a fuera • Cierre primario
• Tras el lavado y desbridamiento se debe tratar como una fractura cerrada
• Cefalosporinas/aminoglucósidos*
• Cierre tras desbridar
GRADO II 1 cm-10 cm • De elección clavo endomedular. Si existen dudas sobre el estado
de las partes blandas se recomienda tratamiento secuencial.
Primero fijador externo y cambio por clavo en 7-12 días.
• Cefalosporinas/aminoglucósidos*
GRADO III Más de 10 cm de fuera a dentro • Cierre por segunda intención
• Fijador externo de entrada en grados IIIB y IIIC
A • Es posible cubrir el hueso • De elección clavo endomedular. Si existen dudas sobre el estado
de las partes blandas se recomienda tratamiento secuencial.
Primero fijador externo y cambio por clavo en 7-12 días.
B • No es posible cubrir el hueso • Fijador externo de entrada
C • Existe lesión vascular • Fijador externo y reparación vascular
*En caso de que exista contaminación orgánica como tierra o aguas fecales, se debe añadir una penicilina al tratamiento antibiótico
(independientemente del tipo de fractura abierta)
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Manual AMIR · Traumatología y Cirugía Ortopédica
(yeso, suturas a tensión). La causa más frecuente de síndrome • Enfermedad tromboembólica venosa (trombosis venosa
compartimental es asociado a las fracturas diafisarias de tibia profunda/tromboembolismo pulmonar): el origen más fre-
(MIR). La segunda causa son los traumatismos sobre partes cuente es una trombosis venosa profunda de miembros infe-
blandas. Otras causas típicas son las fracturas de radio distal, riores. Son factores de riesgo: edad avanzada, inmovilización
las fracturas supracondíleas del codo en los niños y las fracturas prolongada, alteraciones circulatorias, tabaquismo, obesidad,
de calcáneo. Una causa menos frecuente son las quemaduras etc. La prevención se basa en la combinación de medidas
(MIR 16, 173; MIR 15, 135). físicas y farmacológicas.
Clínicamente, aparece primero dolor en reposo, que de - Medidas físicas: la más importante es la movilización pre-
forma típica aumenta con el estiramiento pasivo de los coz de todo paciente intervenido. También se puede utilizar
músculos del compartimento afectado (MIR); después medias de compresión.
aparecen trastornos sensitivos (parestesias, anestesia). El pulso
distal suele estar conservado (MIR) (la afectación vascular es a - Medidas farmacológicas: anticoagulación profiláctica. Los
nivel capilar), salvo que la causa sea una isquemia aguda. La fármacos más utilizados son las heparinas de bajo peso mo-
confirmación del diagnóstico se realiza mediante la medición lecular. También se puede realizar con anticoagulantes orales
seriada de la presión del compartimento afectado (valor normal de acción directa (inhibidores del factor Xa o inhibidores de
15-20 mmHg). La diferencia entre la presión arterial diastólica la trombina). La anticoagulación profiláctica está indicada,
(PAD) del paciente y la presión intracompartimental (Pic) (ΔP = en general, en pacientes intervenidos de cirugía mayor (ar-
PAD - Pic) es un dato más específico que el valor de la presión troplastias de cadera y rodilla, cirugía de columna, cirugía de
intracompartimental aislada. Si esta ΔP es <30 mmHg, existe fracturas de miembros inferiores), en pacientes con encama-
riesgo elevado de lesión tisular. La simple sospecha clínica miento prolongado y en pacientes con inmovilización de un
debe ser suficiente para comenzar el tratamiento, que incluye miembro inferior tras una fractura (férulas o yesos).
inicialmente la retirada de todo tipo de vendajes y yesos • Embolia grasa (MIR): se asocia a fracturas cerradas de hue-
y la elevación del miembro afectado (MIR 10, 86; MIR). sos largos, sobre todo de miembros inferiores (fémur), no es-
Si los síntomas no ceden, se debe proceder a la monitorización tabilizadas (pendientes de intervención) y fracturas inestables
de la presión intracompartimental y el cálculo de la ΔP. Si dicha de pelvis. Clínicamente, tras un intervalo libre (24h-72h),
ΔP es <30 mmHg y continúa descendiendo en la seriación, en el que en ocasiones se ha movilizado al paciente, se apre-
se debe realizar una fasciotomía del compartimento afecto cia (criterios mayores de Gurd):
(MIR). En el caso de que se describa una clínica inequívoca de
- Insuficiencia respiratoria (pO2 <60 mmHg).
síndrome compartimental se puede realizar una fasciotomía sin
realizar la medición de presiones anteriormente descrita. - Depresión del SNC: alteraciones del nivel de conciencia.
La aparición de un síndrome compartimental también puede - Edema pulmonar.
tener lugar en el ámbito deportivo debido al sobreesfuerzo
muscular crónico. Suele afectar a la musculatura distal de las - Petequias difusas en la mitad superior del cuerpo (tórax,
piernas (compartimento tibial anterior) y con menos frecuencia axilas y conjuntivas).
en el antebrazo. Si con la disminución de la intensidad del ejer-
cicio los síntomas no ceden puede estar indicada la medición
También puede asociar (criterios menores de Gurd) fiebre,
de la presión intracompartimental tras el ejercicio, y la realiza-
taquicardia, anemia, trombocitopenia, grasa en la orina o el
ción de fasciotomía en caso de estar elevada.
esputo (MIR). La radiología nos ofrece una imagen torácica en
Secuelas: “tormenta de nieve”.
• Si no se actúa rápidamente aparece necrosis muscular (po- El tratamiento se basa en la oxigenoterapia (pueden requerir
sible sobreinfección, insuficiencia renal por mioglobinuria ventilación mecánica), corticoides y estabilización de la fractura
y retracciones musculares) e incluso nerviosa en casos más cuando la situación respiratoria del paciente lo permita.
avanzados.
• Contractura isquémica de Volkmann por síndrome com-
partimental a nivel del antebrazo (compartimento muscular
anterior profundo), apareciendo deformidad en las articulacio-
nes de muñeca y mano (pronación del antebrazo y flexión de
todas las articulaciones excepto de las metacarpofalángicas).
Embolismos
Por liberación al torrente sanguíneo de aglomerados celulares de
pequeño tamaño, que pueden provocar clínica a distancia por
obstrucción de vasos sanguíneos. Los más importantes son los
producidos por coágulos sanguíneos y por acúmulos de grasa. Figura 6. Embolia grasa. Imagen radiológica típica en “tormenta de nieve”.
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Tema 1 · Generalidades de las lesiones óseas traumáticas
Complicaciones crónicas
Necrosis avascular
El tratamiento de la ausencia de consolidación es quirúrgico:
Existe riesgo en aquellos huesos en los que el riego sanguíneo
• Pseudoartrosis atrófica: abordaje del foco para resecar el viene comprometido por el trazo de fractura. Suele ocurrir en
foco de pseudoartrosis, añadir injerto óseo, en ocasiones vas- zonas que, ya de forma fisiológica, tienen un riego sanguíneo
cularizado, además de la osteosíntesis rígida. deficiente por estar cubiertos por cartílago en casi su totalidad. Es
típica del polo proximal del escafoides carpiano, cuerpo del
astrágalo, cabeza femoral y humeral (MIR). Suele provocar
dolor y se aprecian cambios de densidad ósea en la radiología.
19
Manual AMIR · Traumatología y Cirugía Ortopédica
Síndrome del dolor regional complejo (distrofia Prevención: evitar inmovilizaciones prolongadas, muy rígidas
simpáticorrefleja o síndrome de Süddeck) (compresivas) y favorecer la movilización precoz en la medida
de lo posible. Puede estar indicada la administración oral de
Se produce por una activación mantenida del sistema nervioso
vitamina C en fracturas de radio distal.
simpático en respuesta a una lesión tisular (inmovilizaciones,
cirugía, traumatismos). Clínicamente se manifiesta por dolor
neuropático intenso y aumento de la actividad simpática que Miositis osificante
produce alteraciones cutáneas, aumento de la sudoración y
edema (MIR). Asocia importantes consecuencias de tipo psico- Formación de hueso ectópico en el espesor de un vientre mus-
lógico. Se distinguen dos tipos. cular. Suele aparecer en la cara anterior del codo y también en
la cadera después de traumatismos importantes (típico de las
• Tipo 1: sin lesión neurológica, más frecuente. luxaciones). Los grandes quemados y los pacientes con daño
• Tipo 2: asociado a una lesión de un nervio periférico. neurológico tienen más riesgo de padecerla. En ocasiones cues-
ta diferenciarlos de sarcomas osteogénicos. Suele ser autolimi-
tado (tiende a reabsorberse). La extirpación no está indicada de
Se pueden distinguir tres fases a lo largo de su evolución, que entrada (puede empeorar el cuadro). Cuando un paciente con
es lenta (dura más de un año): antecedentes de miositis osificante y va a ser sometido a una
operación ortopédica, puede realizarse profilaxis de su apari-
• Aguda: 2-3 meses. Trastornos de apariencia inflamatoria,
ción con indometacina o radioterapia.
dolor intenso, rigidez articular, aumento del sudor y del vello.
Radiología normal.
• Distrófica: 3-6 meses. Clínica de déficit vascular y contrac- Recuerda...
turas fijas. Radiográficamente es típica la osteoporosis par-
El síndrome compartimental tiene el pulso conservado
cheada o moteada.
a diferencia de la isquemia.
• Atrófica: 6-12 meses. Atrofia cutánea y muscular, deformi-
dades. En la radiología hay osteoporosis difusa. La embolia grasa aparece en pacientes jóvenes con fractura
de huesos largos intervenidas o pendientes de intervención.
Las fracturas son de extremidades inferiores pero la clínica
El tratamiento es complejo, debe iniciarse de forma precoz y
se centra en la parte superior del cuerpo.
suele realizarse en unidades del dolor. Se basa en tres pilares:
20
Tema 2
Fracturas y luxaciones de la extremidad superior
Autores: Alberto Touza Fernández, H. U. de Torrejón (Madrid). Gonzalo Luengo Alonso, H. U. 12 de Octubre (Madrid). Fadi Ammari Sánchez-
Villanueva, H. U. Virgen del Rocío (Sevilla).
Enfoque MIR • Cirugía (MIR 17, 200): fracturas muy desplazadas, hombro
flotante (asocian lesión del cuello escapular) o de tercio ex-
Recordad las fracturas con nombre propio más comunes, luxaciones terno, fracturas bilaterales, fractura abierta, lesión vascular y
acromio-claviculares y glenohumerales, así como en las fracturas de ausencia de consolidación.
húmero proximal y radio distal, debido a su alta incidencia.
2.2. Escápula
Debemos intentar preservar al máximo la movilidad. Para ello,
además de una buena reducción y control del miembro, las Las fracturas de escápula son raras. Suelen producirse por trau-
inmovilizaciones serán cortas y durante 3-6 semanas como matismos directos de alta energía. Las fracturas del cuerpo
mucho (excepto escafoides). Una inmovilización prolongada de la escápula suelen asociarse a otras fracturas de la cintura
aumenta el riesgo de rigidez articular y pérdida de función. escapular, fracturas costales y lesiones de partes blandas y con-
tusión pulmonar. Su tratamiento es ortopédico la mayoría de
las ocasiones. Las fracturas de cuello, articulares, acromion o
2.1. Clavícula coracoides se deben intervenir si están desplazadas.
Tratamiento
• Fracturas no desplazadas: tratamiento conservador (cabes-
Figura 1. Fractura de la clavícula en el tercio extenro-tercio medio, que es la trillo 2 semanas y luego movilización progresiva).
zona más frecuente.
• Fracturas en dos fragmentos (ver figura 2 en la página
siguiente).
Tratamiento - Tuberosidades (troquín o troquíter): osteosíntesis con tor-
nillo o cerclaje si desplazamiento >1 cm.
• Conservador (más frecuente): con un cabestrillo (Velpeau) o
vendaje en 8, tanto para las no desplazadas como en las des- - Cuello quirúrgico: osteosíntesis si el contacto es <50%.
plazadas (MIR 10, 84), mantenido 3-4 semanas. La secuela
• Fracturas en tres fragmentos.
más frecuente es el callo hipertrófico (repercusion principal-
mente estética) y la más grave la lesión del paquete vascular - Jóvenes: osteosíntesis (agujas, tornillos, clavos o placas).
subclavio. Pueden ocurrir lesiones del plexo braquial y desga-
- Ancianos: artroplastia u osteosíntesis, no hay acuerdo (si se
rros pleurales en casos aislados.
asocia a luxación nos inclinaremos por la artroplastia).
21
Manual AMIR · Traumatología y Cirugía Ortopédica
Las fracturas desplazadas de cuello anatómico del húmero • Conservador: mediante férula primero y posteriormente con
presentan riesgo elevado de necrosis avascular (MIR). Si se ortesis conformada. Para fracturas no desplazadas o con des-
presentan en pacientes jóvenes está indicada la osteosíntesis. plazamiento tolerable (angulación en varo o valgo <30º, an-
En pacientes mayores se opta por artroplastia parcial (hemiar- gulación anterior <20º o posterior y <3 cm de acortamiento),
troplastia). fracturas espiroideas y oblicuas largas.
En el caso de precisar una artroplastia de hombro, esta puede • Cirugía (de elección placas o clavos): también se debe inter-
ser: venir a los pacientes obesos (por la dificultad de manipulación
de la fractura) y las fracturas bifocales.
• Parcial (hemiartroplastia): únicamente se sustituye la cabeza
del húmero.
22
Tema 2 · Fracturas y luxaciones de la extremidad superior
Fractura de Kocher-Lorenz
23
Manual AMIR · Traumatología y Cirugía Ortopédica
Fracturas de diáfisis
Diáfisis de cúbito
Fracturas de olécranon
Diáfisis de cúbito y radio
Debido a estar sometidas a tensión y a interferir en el aparato Habitualmente se fracturan ambas diáfisis cuando el traumatis-
extensor del codo, son fracturas que se deben intervenir. Se mo ocurre a nivel del tercio medio. Se observa una incurvación
emplean dos agujas que atraviesan el foco, sujetas con un en el antebrazo además de impotencia funcional (MIR). Esta
alambre al fragmento distal (fijación en obenque). fractura, en adultos, requiere síntesis con placa y tornillos para
recuperar la curvatura fisiológica; de no ser así, no se recupe-
La complicación más frecuente de las fracturas de olécranon
rará el rango correcto de pronosupinación.
tratadas con un cerclaje son las molestias relacionadas con el
24
Tema 2 · Fracturas y luxaciones de la extremidad superior
Recuerda...
Es importante que recuerdes los nombres propios
Monteggia y Galeazzi.
Figura 12. Mecanismo de la fractura de Colles.
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Manual AMIR · Traumatología y Cirugía Ortopédica
Arteria radial
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Tema 2 · Fracturas y luxaciones de la extremidad superior
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Manual AMIR · Traumatología y Cirugía Ortopédica
Acromion Ligamento
transverso
superior de
la escápula
Ligamento trapezoide
Clasificación
• Grado I: desgarro parcial.
• Grado II: rotura de los ligamentos acromioclaviculares.
• Grado III: implica rotura adicional de los coracoclaviculares.
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Tema 2 · Fracturas y luxaciones de la extremidad superior
Luxación esternoclavicular
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Manual AMIR · Traumatología y Cirugía Ortopédica
30
Tema 3
Fracturas y luxaciones de la extremidad inferior
Autores: Gonzalo Luengo Alonso, H. U. 12 de Octubre (Madrid). Alberto Touza Fernández, H. U. de Torrejón (Madrid). Ainhoa Guijarro Valtueña, H.
U. Puerta de Hierro (Madrid).
Enfoque MIR
Lo más importante de este tema son las lesiones del anillo pélvico,
las fracturas de cadera en el anciano (clasificación y tratamiento),
y las fracturas de tobillo.
Fracturas de pelvis
La pelvis es una circunferencia oblicua hacia delante, cuya Figura 1. Fractura de ramas pubianas.
misión es distribuir la carga que soporta el tronco a través del
raquis lumbar hacia las piernas, pasando por la cavidad cotiloi-
dea. Está formada por el sacro y los dos huesos ilíacos, que se Fracturas complejas
estabilizan con la sínfisis del pubis y los ligamentos sacroilíacos Se producen en traumatismos de alta energía, dando lugar a
(estabilizador principal de la pelvis); también forman parte del inestabilidad horizontal (lesión de la porción anterior de anillo)
sistema el isquion y el cóccix. Hay que entender la pelvis como o vertical (más grave, supone lesión adicional de estructuras
un anillo, de forma que una fractura se considera inestable posteriores). Suelen afectar a pacientes jóvenes y su tratamien-
cuando afecta a dos puntos distintos de su estructura, que to es quirúrgico.
pueden ser óseos o ligamentosos. Cuando en un paciente politraumatizado encontramos
Recordemos también la rica vascularización de la pelvis y la hipotensión sin otra causa de sangrado aparente distinta
presencia en las cercanías de vasos y nervios importantes que de una posible fractura de pelvis, sospecharemos sangrado
pueden ser lesionados: vasos ilíacos, plexo lumbosacro y nervio peritoneal y será necesaria la fijación pélvica mediante fijación
ciático (lesión nerviosa más frecuente). Además, las vísceras externa. Más adelante, se valorará la osteosíntesis definitiva
contenidas en su espacio pueden lesionarse: vía urinaria (es la de las estructuras dañadas. En caso de no cesar el sangrado
más frecuente), recto y vagina. se procederá a la embolización o a la realización de una lapa-
Podemos dividir las fracturas de la pelvis en dos grupos: rotomía infraumbilical extraperitoneal para una compresión
directa de las estructuras vasculares lesionadas (empaquetado
o packing pélvico).
Fracturas simples
Se resuelven, en su mayoría, por tratamiento conservador con Fracturas de acetábulo
reposo en cama. Se incluyen varios tipos:
La cavidad cotiloidea se forma como prolongación de ilion,
• Avulsiones: arrancamientos de la inserción de los potentes isquion y pubis. Las fracturas de acetábulo requieren una alta
músculos locales. Suele afectar a gente joven. energía, por lo que se asocian, en ocasiones, a luxación de la
- Espina ilíaca anterosuperior: músculo sartorio. cabeza femoral.
- Espina ilíaca anteroinferior: músculo recto femoral. • Diagnóstico: además de la sospecha (puede pasar desaper-
cibido en politraumatizados), se realiza estudio radiológico
- Cresta ilíaca: músculos abdominales.
que incluye radiografías anteroposterior, alar y obturatriz. Se
- Tuberosidad isquiática: músculos isquiotibiales. realiza TC para preparar la cirugía y ante dudas sobre el trazo.
En caso de fragmentos grandes es recomendable la fijación • Tratamiento: en principio requieren tracción y luego estabili-
quirúrgica. zación quirúrgica en caso de provocar inestabilidad articular o
• Fracturas de ramas: fracturas de ramas isquiopúbica e ilio- incongruencia de superficies. Otras indicaciones de cirugía son:
púbica, típicas de ancianos. - Asociación con luxación de cadera no reductible.
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Manual AMIR · Traumatología y Cirugía Ortopédica
- Interposición de fragmentos entre las superficies articulares. - Miembro acortado y en rotación externa (más marcada
en fracturas extracapsulares donde además hay tendencia
- El desplazamiento entre los fragmentos >2 mm (MIR).
a la abducción, mientras que en las fracturas subcapitales
En pacientes ancianos se puede optar, si el trazo lo permite, hay tendencia a la aducción) (MIR).
por la prótesis total de cadera.
- Impotencia funcional para la deambulación (MIR).
Entre las complicaciones a largo plazo se incluyen la artrosis
y la necrosis de la cabeza femoral.
Fracturas subcapitales
Extracapsular
Figura 2. Compartimento intracapsular y extracapsular de la cadera. Figura 4. Clasificación de Garden de las fracturas subcapitales de cadera.
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Tema 3 · Fracturas y luxaciones de la extremidad inferior
A B
Figura 5. Fractura de cadera tipo Garden IV. Figura 7. A. Trazos de fracturas extracapsulares. B. Fractura pertrocantérica.
C. Fractura subtrocantérica.
Fracturas subcapitales
Recuerda...
Las fracturas intracapsulares de cadera tienden a la necrosis y
Garden I y II Garden III y IV falta de consolidación, por eso en ancianos se tratan
directamente con prótesis.
Las extracapsulares consolidan bien y siempre son quirúrgicas
Osteosíntesis con <65 años sin tener en cuenta la edad del paciente, por lo que se tratan
tornillos canulados y buena >65-70 años
situación basal con clavos endomedulares tanto en jóvenes como ancianos.
Prótesis
Fracturas de diáfisis femoral
65-75 años
y buena >75 años Fracturas de diáfisis femoral en niños
situación basal
Como mecanismo compensador de la fractura en niños se
Prótesis total Prótesis parcial suele producir hipercrecimiento del miembro afecto, de forma
que se permiten ciertos acortamientos iniciales: se debe por
Figura 6. Tratamiento de las fracturas subcapitales de fémur. La edad es tanto vigilar la aparición de discrepancias de longitud de
aproximada, siempre se debe tener en cuenta la comorbilidad asociada de los miembros inferiores. En pacientes <3 años con una frac-
cada paciente. tura de fémur es obligado descartar maltrato infantil.
El tratamiento depende de la edad del paciente:
Fracturas extracapsulares • Niños de 0-5 años: yeso pelvipédico. Se puede utilizar tracción
Incluye las fracturas del macizo trocantéreo (pertrocantéreas) y al cénit como medida previa a la colocación del yeso.
las subtrocantéreas. Las fracturas pertrocantéreas se produ- • Niños de 5-12 años: clavos intramedulares flexibles.
cen sobre hueso esponjoso, por ello tienden a consolidar bien,
aunque las potentes inserciones musculares y la conminución • Niños >12 años: clavos intramedulares rígidos similares a los
del foco pueden acarrear complicaciones. Suelen ocurrir en del adulto (MIR).
pacientes más ancianos. El tratamiento quirúrgico se puede
realizar mediante enclavado endomedular (opción más utiliza-
Fracturas de diáfisis femoral en adultos
da en nuestro medio) o mediante un tornillo-placa deslizante.
(MIR). Aparecen sobre todo en gente joven debido a
Las subtrocantéreas, además de requerir un enclavado intra- accidentes de tráfico. Se tratan en su mayoría con
medular (proximal o completo según el trazo), son asiento enclavado intramedular (MIR) aunque, de entrada,
frecuente de metástasis y existe el peligro de fallo del implante se inmovilizan con tracción transesquelética.
y pseudoartrosis. Existe un subtipo de fracturas subtrocantéreas Las complicaciones más frecuentes son hemodinámicas por
de trazo invertido denominadas atípicas, que son más frecuen- sangrado (entre 500-1500 ml de pérdida) e incluso por lesión
tes en pacientes en tratamiento con bifosfonatos. de los vasos femorales, embolia grasa (más probable si en el
tratamiento se usan clavos fresados) y pseudoartrosis.
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Manual AMIR · Traumatología y Cirugía Ortopédica
Tratamiento
En fracturas longitudinales y aquéllas con integridad de los ale-
Figura 8. Fractura de diáfisis femoral. rones rotulianos, es posible un tratamiento conservador (yeso
isquiomaleolar 6 semanas).
3.3. Fracturas de rodilla En las fracturas transversales con lesión de los alerones (típica
la pérdida de la extensión activa), la tracción que realiza el
cuádriceps provoca la apertura del foco, por lo que para la
Englobamos las siguientes fracturas en un bloque por afectar a intervención el método de elección es el cerclaje.
la articulación de la rodilla, bien siendo trazos intraarticulares o
En fracturas de polo distal, se puede realizar su exéresis si el
bien por provocar inestabilidad o mala alineación al consolidar
fragmento es pequeño, con reanclaje del tendón.
una fractura extraarticular. Dada su situación de articulación de
carga y con una movilidad compleja en varios planos (flexión, En fracturas muy conminutas se puede emplear la patelec-
extensión, varo, valgo, rotaciones), en la mayoría de los casos tomía. Si se ha desprendido un fragmento osteocondral, se
requieren reducción abierta y osteosíntesis para evitar la extrae por artroscopia.
artrosis postraumática.
Fracturas de rótula
Clínica
Dolor local y hemartros con restos de grasa (indicativo siem-
pre de lesión ósea).
Figura 10. Fractura con hundimiento de meseta tibial medial. Radiografía e
imagen artroscópica.
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Tema 3 · Fracturas y luxaciones de la extremidad inferior
intraarticulares, se impone la reducción para evitar artrosis tres fascículos (peroneoastragalino anterior, peroneoastraga-
postraumáticas; la osteosíntesis se realiza con tornillos o placas lino posterior y peroneocalcáneo), así como a la sindesmosis
y, si el defecto es importante, se añade injerto óseo o algún tibioperonea.
biomaterial de relleno.
Pueden complicarse con un síndrome compartimental (lo
Clasificación
más frecuente), además de la lesión del nervio peroneo o la
artrosis. En algunos casos, en niños, puede fracturarse la espi- Se clasifican según el nivel de la fractura de peroné (por enci-
na tibial por tracción del ligamento cruzado anterior; dará una ma, a nivel o por debajo de la sindesmosis tibioperonea):
clínica de lesión de ligamento cruzado pero en el hemartros
habrá restos de grasa.
Suprasindesmales o Weber C
Es la más grave e inestable porque implica que se ha roto la
3.4. Fracturas de tibia
unión de tibia y peroné. Son siempre quirúrgicas. Hablamos
de fractura de Maissoneuve cuando el peroné está roto en su
Fracturas de diáfisis tibial tercio proximal, y de fractura de Dupuytren cuando lo está en
su tercio distal.
Figura 11. Fractura abierta de tibia. Figura 12. Fractura suprasindesmal tratada mediante reducción abierta y
fijación interna.
Complicaciones
Síndrome compartimental, pseudoartrosis (localización más Transindesmales o Weber B
frecuente de pseudoartrosis), embolia grasa. Las más frecuentes. El tratamiento depende de la presencia o
no de lesión en el lado medial; si existe lesión se tratará con
Tratamiento cirugía, si no existe lesión el tratamiento será conservador.
(Ver figura 13 en la página siguiente)
• Conservador (yeso): en fracturas estables, no desplazadas,
rotadas ni impactadas y con menos de 10º de angulación tras
la reducción. Tras 4 semanas se puede cambiar el yeso por Infrasindesmales o Weber A
una ortesis para comenzar la carga. Este sistema requiere,
además, un seguimiento continuo. No son auténticas fracturas de tobillo, ya que con frecuencia se
presentan aisladas, sin ninguna lesión en el lado tibial. Suelen
• Las fracturas que no cumplan los criterios previos (la gran verse en esguinces graves donde el ligamento en vez de par-
mayoría) se deben intervenir, mediante enclavado intrame- tirse arranca un fragmento del maléolo peroneo. No suelen
dular, salvo las fracturas abiertas IIIB y IIIC en que se emplea requerir cirugía.
la fijación externa.
(Ver figura 14 en la página siguiente)
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Manual AMIR · Traumatología y Cirugía Ortopédica
Fracturas de calcáneo
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Tema 3 · Fracturas y luxaciones de la extremidad inferior
3.7. Luxaciones de la extremidad inferior la presión sobre las crestas iliacas y se deja una tracción blanda
de manera temporal.
En el caso de asociar fracturas de acetábulo se realiza osteo-
Luxaciones de cadera síntesis; también se emplea cirugía para las irreductibles o con
fragmentos óseos intraarticulares.
Se producen por traumatismos de alta energía. La mayoría
son posteriores (90%). Clínicamente, el miembro está acorta-
do / en rotación interna / flexión de cadera / aducción (“bañista
Luxación de rótula
sorprendido”) (MIR 13, 109). Recordad que pueden pasar
desapercibidas en politraumatizados, sobre todo si asocian Suelen producirse en pacientes jóvenes tras un giro de la rodi-
fractura de cotilo. lla. Son más frecuentes en mujeres; otros factores de riesgo son
la hiperlaxitud, la atrofia de la musculatura cuadricipital, altura
rotuliana elevada y alteraciones rotacionales o axiales de los
Complicaciones miembros inferiores.
Rotura del ligamento redondo y de los vasos circunflejos, lo que
explica el elevado riesgo de necrosis avascular. También Tratamiento
puede lesionarse el nervio ciático, la mayoría de las veces de
forma incompleta. Cuando una luxación es anterior (pubiana El tratamiento inicial consiste en la reducción cerrarada, inmo-
–la más frecuente–) u obturatriz, el miembro aparece alargado vilización y rehabilitación (fortalecimiento de la musculatura
/ en rotación externa / abducción, pudiendo lesionar vasos y cuadricipital).
nervio femoral y obturador. El tratamiento quirúrgico se reserva para recidivas o si existen
fracturas osteocondrales asociadas. Se basa en la reconstruc-
ción de los ligamentos lesionados (ligamento femoropatelar
Recuerda... medial), pudiendo asociarse osteotomías para la corrección de
Las luxaciones de cadera son más frecuentes en jóvenes, las deformidades axiales, rotacionales o para disminuir la altura
mientras que las fracturas son predominantes en ancianos. rotuliana.
Luxación de rodilla
Tratamiento
Requieren reducción cerrada urgente y control del estado vas-
Figura 17. Luxación central de cadera derecha.
cular durante 48h. La lesión de la arteria poplítea puede ser
subaguda. En caso de dudas sobre la disminución de pulsos, se
Tratamiento debe consultar con Cirugía Vascular, realizar ecografía Doppler
y, si persisten las dudas, angioTC o arteriografía.
Reducción urgente bajo anestesia general (MIR 17, 198;
MIR 15, 116) mediante tracción al cénit, con la cadera y rodilla El tratamiento quirúrgico se basa en la reconstrucción de los
flexionadas, mientras un ayudante estabiliza la pelvis mediante ligamentos lesionados.
37
Manual AMIR · Traumatología y Cirugía Ortopédica
Figura 19. Fractura-luxación de Lisfranc en proyección anteroposterior. Figura 20. Luxación de Lisfranc y de Chopart.
38
Tema 4
Traumatología y ortopedia infantil
Autores: Fadi Ammari Sánchez-Villanueva, H. U. Virgen del Rocío (Sevilla). Ainhoa Guijarro Valtueña, H. U. Puerta de Hierro (Madrid). Cristina Igualada
Blázquez, H. G. U. Gregorio Marañón (Madrid).
Enfoque MIR radio distal, aunque puede verse en cualquier hueso (también
se ve en el cuello del radio).
La Traumatología infantil es el tercer tema más preguntado en el
MIR. Las preguntas se centran en las fracturas típicas de la infancia, • Tipo III: fractura paralela a la fisis hasta que aparece un trazo
la epifisiólisis, y como tema estrella en los trastornos del desarro- hacia epífisis (MIR).
llo de la cadera (diagnóstico diferencial). • Tipo IV: fractura perpendicular a la fisis con trazo desde me-
táfisis hasta epífisis.
• Tipo V. fractura paralela a la fisis con aplastamiento de la
4.1. Introducción misma.
39
Manual AMIR · Traumatología y Cirugía Ortopédica
Perinatales
La más frecuente es la fractura de clavícula, seguida de la de
húmero. Siempre tratamiento conservador.
Tendremos que descartar la presencia de lesiones del plexo
braquial pues clínicamente pueden confundirse.
Incurvación plástica
Fractura supracondílea
Deformidades óseas en las que se observa un hueso incurvado Es de las más frecuentes en los niños (MIR 09, 191). Es impor-
pero sin fractura. Requieren inmovilización hasta la vuelta a la tante por la posibilidad de complicaciones:
normalidad. • Lesión del nervio interóseo anterior, rama del mediano (más
frecuente) y lesión del nervio radial.
Fractura en rodete • Lesión de la arteria braquial.
• Síndrome compartimental.
También llamada torus o en caña de bambú.
Se producen por una compresión axial del hueso, principal-
Se produce por caída con el brazo extendido.
mente el radio distal en caídas, que condiciona un aplasta-
miento trabecular junto a la metáfisis. Encontramos una angulación posterior del fragmento distal.
La zona afecta aparece ensanchada en la radiografía. En las fracturas no desplazadas: tratamiento conservador; tras
la reducción se deja el brazo en flexión completa. Especial
atención a la angulación pues una desviación en varo o valgo
del codo al consolidar dará restricciones de movilidad y posible
lesión nerviosa tardía (lesión cubital en el cúbito valgo).
En las desplazadas: se interviene insertando agujas tras la
reducción, evitando la lesión del nervio cubital durante la
maniobra; después se mantiene el yeso.
Fractura de fémur
Patología de la cadera
¡Muy importante!
Figura 3. Fractura en rodete del radio. Proyección anteroposterior. (Ver tabla 1 y figuras 4 y 5 en la página siguiente)
40
Tema 4 · Traumatología y ortopedia infantil
Línea de Hilgenreiner
EPIFISIÓLISIS
DISPLASIA DEL E. PERTHES FEMORAL PROXIMAL
ARTRITIS SINOVITIS
DESARROLLO DE (OSTEOCONDRITIS
SÉPTICA TRANSITORIA (MIR 14, 158;
LA CADERA DEFORMANTE JUVENIL)
MIR 12, 143)
♀ Hematógena: ♂ ♂ ♂
• Laxitud familiar • Staphylococcus • Infección • Alt. de la • Obesidad
• Presentación de aureus respiratoria previa coagulabilidad • Alt. endocrinas
FR nalgas • SBHGB • Retraso edad ósea • Alt. maduración
• Macrosomía sexual
• Oligohidramios
RN: • Cuadro séptico Cuadro de inicio • Cojera con dolor • Dolor crónico
• Barlow y Ortolani + Inmovilización del agudo que asocia: ligero • Dolor agudo tras
• Limitación abducción miembro • Dolor en ingle • Limitación de traumatismo
• Asimetría de irradiado a rodilla la rotación y ab- • Limitación de la
CL pliegues 12-28 • Marcha dolorosa ducción rotación interna
m: cojera, marcha • Cojera • Talla baja • Flexión, sólo es
Trendelenburg, asi- posible con la
metría MMII (coxar- rotación externa
trosis en adultos)
• ECO (de elección) • ECO • Rx de exclusión • Rx (en tope • Rx: cabeza despla-
• Rx a partir de los • Artrocentesis • ECO de vagón) zada por debajo de
DG 3m • Artrotomía • ECO la línea de Klein-
• RM (precoz) Trethowan
*Se interpreta mal pronóstico en la enfermedad de Perthes si: edad avanzada, sexo femenino, horizontalización de la fisis y subluxación, calcificacio-
nes de la epífisis (MIR 16, 26; MIR 11, 157; MIR).
41
Manual AMIR · Traumatología y Cirugía Ortopédica
42
Tema 4 · Traumatología y ortopedia infantil
Pie cavo
Elevación excesiva del arco plantar. En niños pequeños es
raro y suele ser secundario a enfermedades neurológicas
(parálisis cerebral, neuropatías…) que se deberán descartar
(MIR 09, 192; MIR). A partir de la adolescencia es frecuente
y suele ser idiopático.
Cursa con metatarsalgias por sobrecarga. Se trata con plan-
tillas de descarga; si progresa o en los casos neuropáticos se
utiliza la cirugía (osteotomías).
(Ver tabla 2)
43
Manual AMIR · Traumatología y Cirugía Ortopédica
Patología del miembro superior • Tipo III (grave): herencia AD o AR. Suele afectarse el gen
COL1A2. Presenta el cuadro clínico florido con alteraciones
de la dentición (dientes descoloridos), escleras azules, sordera
• Deformidad de Sprengel: supone una elevación congénita por otosclerosis y fracturas múltiples que producen deformi-
de la escápula, en ocasiones por unión de la misma a apófisis dades óseas progresivas, con complicaciones respiratorias y
espinosas cervicales. neurológicas asociadas.
• Deformidad de Madelung: incurvación progresiva del radio • Tipo IV (moderadamente grave): herencia AD. Al igual que el
hacia la cara volar y cubital del antebrazo. Se debe a una le- tipo I, no presenta alteraciones oculares ni sordera.
sión de la fisis radial distal y provoca dolor local, deformidad
y disminución de la movilidad. En casos muy sintomáticos se
realizan osteotomías de corrección. El diagnóstico se establece en base a la clínica, debiendo
descartarse otras causas de fracturas patológicas incluyendo
• Osteocondritis: las osteocondritis más frecuentes en miem- los malos tratos. El metabolismo fosfocálcico es normal. La
bro superior son: densitometría muestra osteopenia, y las radiografías múltiples
- Enfermedad de Panner: osteocondritis del cóndilo hume- callos de fractura, deformidad ósea y articular y en ocasiones
ral lateral. islotes de osificación inadecuada (MIR 11, 77). Se puede hacer
estudio genético de la descendencia mediante PCR de biopsia
- Enfermedad de Kienbock: osteocondritis del hueso se- corial o amniocentesis, y detectar por ecografía las malforma-
milunar, afecta a adultos jóvenes y cursa con dolor de mu- ciones más severas a partir de la semana 16.
ñeca y pérdida de fuerza de prensión. El tratamiento tiene tres pilares de actuación:
- Enfermedad de Preiser: osteocondritis del escafoides • Tratamiento médico con bifosfonatos (pamidronato).
carpiano.
• Manejo de las fracturas y las deformidades mediante el encla-
- Enfermedad de Friedrich: osteocondritis de la unión es- vado de los huesos fracturados con clavos telescópicos.
ternoclavicular.
• Manejo de las complicaciones neurológicas y respiratorias.
Osteogénesis imperfecta
Acondroplasia
La osteogénesis imperfecta es una enfermedad congénita debi-
da a una alteración en la síntesis del colágeno tipo 1. Afecta a Enfermedad congénita por déficit hereditario de la osificación
1 de cada 10.000 nacimientos. encondral (disminución de células germinales fisarias con
Se han descrito numerosas mutaciones en los genes COL1A1 necrosis y fibrosis local a nivel de las fisis).
(cromosoma 17q) y COL1A2 (cromosoma 7q) que dan lugar a
cuatro formas de osteogénesis imperfecta, clasificadas según
Clínica
la herencia y rasgos clínicos:
Enanismo de extremidades, hiperlordosis lumbar, cráneo
• Tipo I (leve): herencia AD. La más frecuente. Los pacientes
abombado y nariz chata. El desarrollo cognitivo es normal.
sólo presentan fragilidad ósea, sin otras alteraciones.
• Tipo II (letal): produce la muerte en el periodo perinatal. Se
Tratamiento
produce por mutaciones “de novo” en las células germinales,
y el riesgo de transmisión a futuros hijos tras haber tenido un Se ocupa de las complicaciones neurológicas que surjan, así
hijo afecto es del 7%. como de las deformidades óseas y de los alargamientos de las
extremidades.
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Tema 5
Tumores musculoesqueléticos
Autores: Fadi Ammari Sánchez-Villanueva, H. U. Virgen del Rocío (Sevilla). Carlos Corrales Benítez, H. U. La Paz (Madrid). Eloy Tabeayo Álvarez, H.
U. La Paz (Madrid).
- Osteoclastoma (tumor de células gigantes) en adultos. • Osteoma osteoide: dolor nocturno que cede con salicilatos.
- Fibrosarcoma, como forma maligna del osteoclastoma. • Condroblastoma: dolor y derrame articular.
45
Manual AMIR · Traumatología y Cirugía Ortopédica
• Osteocondroma: bursitis y resalte tendinoso por rozamiento. • Analíticas: para el seguimiento del osteosarcoma son útiles
los niveles de fosfatasa alcalina y LDH. En cuanto a la genética
• Quiste óseo esencial: debut con fractura patológica.
es típica de la mayoría de los sarcomas de Ewing la transloca-
• Quiste óseo aneurismático: dolor de aparición postraumática. ción cromosómica t (cromosomas 11 y 22) (MIR).
• Displasia fibrosa: asociación con alteraciones endocrinas (sín-
drome de Albright). Estadiaje
Pruebas complementarias Desde hace unos años el sistema de estadiaje más usado es el
de la MSTS (Musculoskeletal Tumor Society) que incluye tres
estadios:
Radiología simple
• Estadio I: tumor bien diferenciado.
La más útil inicialmente, orienta sobre la agresividad de la
lesión (patrón permeativo, patrón lítico, reacción perióstica) o su • Estadio II: tumor mal diferenciado.
benignidad (bien delimitados, sin destrucción ósea adyacente).
• Estadio III: cualquiera con metástasis.
• Osteoma osteoide: nidus (radiolucencia rodeada de un halo
osteocondensante).
Recuerda...
• Sarcoma de Ewing: reacción perióstica en capas de cebolla.
Al estadio se le añade una letra A o B
• Osteosarcoma: imagen espiculada “en Sol Naciente” o según el tumor sea intra o extracompartimental.
“Fuego en Hierba”, despegamiento perióstico en Triángulo
de Codman.
• Tumores condrales: calcificaciones intratumorales.
Cirugía
• Quiste óseo aneurismático, hemangioma, displasia fibrosa y
osteoclastoma: multicavitados.
• Osteólisis: metástasis (excepto próstata que da imágenes os-
5.3. Principios terapéuticos
teoblásticas). Imagen en “vértebra tuerta” por afectación del
pedículo vertebral. La mayoría de los tumores se tratan con cirugía:
• Granuloma eosinófilo: imagen en sacabocados. • Para los tumores benignos muchas veces se opta por la
abstención terapéutica. Si comprimen estructuras o compro-
• Adamantinoma: pompa de jabón.
meten la función o resistencia mecánica se realizan cirugías
poco invasivas: resección intralesional (curetaje) y resección
RM marginal (que incluye la pseudocápsula).
Prueba de gran utilidad para valorar tanto tumores óseos como • Para los tumores malignos la cirugía suele ser más agresiva.
de partes blandas así como su extensión local (para planificar la Se realizan habitualmente la resección amplia (con margen
cirugía y como control tras el tratamiento con quimioterapia) de seguridad) o la resección radical (tumor y todo el compar-
(MIR 15, 18). timento que lo incluye, con conservación de la extremidad).
La amputación se intenta evitar en la medida de lo posible. La
resección intralesional (curetaje) se emplea como medida pa-
Arteriografía liativa, asociada a QT y RT.
Para comprobar la vascularización tumoral y realizar la planifi-
cación quirúrgica, incluso para realizar embolizaciones selecti-
vas previas a la intervención.
Biopsia
Nos da el diagnóstico de confirmación, siempre y cuando la
muestra sea suficiente. Lo más rentable es la biopsia quirúr-
gica (una muestra pequeña o el tumor en bloque, esto último
sólo usado para las lesiones benignas), pues la PAAF no suele
aportar datos concluyentes si no es un tejido muy diferenciado.
Es la última prueba a realizar en el diagnóstico y debe evitar
la diseminación del tumor. En la cirugía definitiva se extirpará
también la cicatriz de la biopsia.
Otros estudios
• TAC: pulmonar (también radiografía de tórax) y abdominal
dentro del estudio de extensión.
• Gammagrafía: para valorar los tumores con tendencia a la
multicentricidad (metástasis, sarcoma de Ewing, osteosar- Figura 1. Radiografía anteroposterior de rodilla con megaprótesis tras resección
coma, displasia fibrosa). de un tumor.
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Tema 5 · Tumores musculoesqueléticos
Quimioterapia
Pseudotumores
47
Manual AMIR · Traumatología y Cirugía Ortopédica
Osteocondroma
Tumor óseo benigno más frecuente (MIR). Afecta a las metáfisis
en forma de exostosis, por lo que puede dar lugar a compresión
de estructuras vecinas provocando bursitis, lesión vasculonerviosa
o resortes tendinosos (MIR). La cirugía se reserva para las lesiones
sintomáticas. Las formas múltiples hereditarias pueden tener
transformación maligna.
Condroma
Tumores que afectan a huesos tubulares de las manos y pies
en adolescentes, dentro del hueso (encondroma) o por fuera
(condroma perióstico). En la radiografía aparecen calcificacio-
nes intratumorales. Puede formar parte de síndromes con
condromas múltiples (enfermedad de Ollier) y asociando tam-
bién angiomas de partes blandas (síndrome de Mafucci). Se
realiza curetaje e injerto de las lesiones sintomáticas.
Hemangioma óseo
Lesión lítica multilobulada que aparece en adultos mayores a
nivel de cráneo y raquis. Clínicamente, el dolor empeora con
el calor y la menstruación. Para el tratamiento se emplean el
Figura 5. Encondroma. curetaje y la radioterapia.
48
Tema 5 · Tumores musculoesqueléticos
(Ver figura 9)
49
Manual AMIR · Traumatología y Cirugía Ortopédica
Condrosarcoma
Tumor derivado de los condrocitos. Es típico de adultos mayo-
res y suele estar localizado sobre las metáfisis proximales de
extremidades y en pelvis. Como factores predisponentes están
los síndromes de Mafucci y Ollier, enfermedad de Paget y los
condromas. Presenta un crecimiento lento. Es frecuente la
recidiva. En la radiografía se aprecia osteólisis y microcalcifica-
ciones pero carece de reacción perióstica (MIR).
Los más frecuentes son los de bajo grado (posible confusión
con un encondroma). Su tratamiento es esencialmente qui-
rúrgico, porque es resistente a otros tratamientos (aunque se
añaden quimioterapia o radioterapia si la resección es incom-
pleta o imposible).
Sarcoma de Ewing
Figura 13. Sarcoma de Ewing en diáfisis de fémur. Cortesía del Hospital 12 de
Tumor de aparición temprana en niños y adolescentes, a Octubre. Madrid, España.
nivel de las diáfisis de huesos largos. Se cree que deriva de la
cresta neural primitiva. Clínicamente asocia masa dolorosa
con malestar general e incluso fiebre (posible confusión Metástasis
con la osteomielitis) y en la radiografía encontramos osteólisis
Los tumores de más frecuente aparición de forma global en los
irregular y reacción perióstica (MIR) en capas de cebolla (no es
huesos son las metástasis (MIR 16, 25). Clínicamente, suele
patognomónica). La aparición de metástasis es precoz.
tratarse de un paciente con un tumor primario conocido, en el
En la anatomía patológica se observan células de pequeño que aparece dolor a nivel raquídeo, pélvico o proximal de
tamaño de forma redondeada con núcleos de gran tamaño miembros. Menos habitual es encontrar una fractura patológi-
y citoplasma escaso (MIR 13, 203). Es típica la translocación ca o dolores locales, sin conocerse la existencia de un tumor
t(11;22) (MIR 16, 148). primario previo (MIR).
De cara al tratamiento hay que recordar su radiosensibilidad,
por ello la base del tratamiento es la cirugía con quimioterapia
pre y posquirúrgica, junto a radioterapia.
(Ver figuras 12 y 13)
Cordoma
Tumor raro, de crecimiento lento, que aparece en adultos
mayores a nivel del sacro-clivus. Crece infiltrando tejidos
vecinos, provocando una clínica de lumbociática y trastornos
urointestinales. El tratamiento incluye cirugía y radioterapia.
50
Tema 5 · Tumores musculoesqueléticos
Por orden de frecuencia, provocan metástasis óseas los tumo- • Tratamiento de las metástasis óseas:
res de: mama, pulmón, próstata, riñón y tiroides. Neuroblastoma
- Médico: bifosfonatos. Previenen la destrucción ósea. Se
en niños. El patrón radiográfico es osteolítico, salvo el del car-
añaden a QT, RT u hormonoterapia dependiendo del tu-
cinoma de próstata que es osteoblástico.
mor primario.
- Quirúrgico. Siempre que el estado general del paciente lo
permita y la esperanza de vida sea razonable.
- Estabilización quirúrgica de las fracturas y RT postoperato-
ria en la zona.
- Estabilización profiláctica en caso de que la lesión metastá-
sica presente alto riesgo de fractura. Existe mayor riesgo en
aquellas lesiones situadas en miembro inferior, que producen
dolor, líticas y que afectan a más de dos tercios de la anchura
del hueso afectado (criterios de Mirels) (MIR 19, 202).
>50 AÑOS
INFANCIA ADOLESCENTE VARÓN 20 A 50 AÑOS >50 AÑOS VÉRTEBRAS
<10 AÑOS 10-15 AÑOS ADOLESCENTE TORACOLUMBARES
• Cráneo y • Clínica sistémica • Adulto joven • Afecta a tibia • Maligno primario • Osteoblástica:
esqueleto axial (MEG, fiebre) • Dolor nocturno • Rx: lesiones en + frec. enf. Paget
• Rx: “sacabocados” • Masa dolorosa que mejora con burbujas • ↑ VSG, ↑ calcemia, Cáncer próstata
• Tto.: corticoides + • Rx: “perióstica en salicilatos hiperγglobulinemia • Osteolítica:
RT + QT capas de cebolla” • Rx: nidus • Rx: imagen de Ca. tiroides
• DD: osteomielitis osteoporosis Leucemias
• Radiosensible Linfomas
• Mixtas (+frec.):
el resto
Granuloma Osteoma
Sarcoma de Ewing Adamantinoma Mieloma Metástasis (los + frec.)
eosinófilo Osteoide
51
Manual AMIR · Traumatología y Cirugía Ortopédica
Recordatorio
Epífisis
Infancia Adulto
- Dolor y derrame (principal - Sobre todo mujeres
rodilla) - Crece en embarazo
- Rx: lesión redondeada - Rx: multiloculado en
central con calcificaciones burbujas de jabón
Tratamiento:
curetaje agresivo + N2 líquido
Metáfisis
¿Lesión maligna?
No Sí
Osteosarcoma Condrosarcoma
Tratamiento:
QT-cirugía-QT
52
Tema 6
Lesiones de partes blandas
Autores: Alberto Touza Fernández, H. U. de Torrejón (Madrid). Carlos Corrales Benítez, H. U. La Paz (Madrid). Rodrigo Víquez Da Silva, H. U. Virgen
de la Victoria (Málaga).
53
Manual AMIR · Traumatología y Cirugía Ortopédica
Tendones del
músculo flexor
superficial de los
dedos
Músculo flexor
corto del meñique
Músculo aductor
Músculo oponente del pulgar
del meñique
Músculo flexor
Músculo corto del pulgar
palmar corto
Músculo abductor Figura 2. A. Dedos en “cuello de cisne”. B. Dedos en ojal. C. Dedos en martillo.
Músculo abductor corto del pulgar
del meñique
Lesiones del aparato extensor de la rodilla
Músculos lumbricales
Se producen por un traumatismo en flexión forzada. Se pre-
Figura 1. Tendones flexores profundos y flexores superficiales de los dedos. sentan con imposibilidad para la extensión activa de la rodilla.
La lesión del tendón rotuliano suele afectar a pacientes <40
años y la posición de la rótula asciende respecto a su posición
Para la rotura del tendón de Aquiles (o tendón calcáneo), se original (rótula alta). La lesión del tendón cuadricipital afecta
realiza la maniobra de Thompson, que consiste en comprimir la a pacientes >40 años y la posición de la rótula desciende
masa muscular de los gemelos para ver si se obtiene la flexión (rótula baja) (MIR 17, 203). Ambas lesiones requieren trata-
plantar del pie. Cuando no la hay, subyace una rotura completa. miento quirúrgico.
54
Tema 6 · Lesiones de partes blandas
6.4. Lesiones vasculares Esta lesión imposibilita la prensión de la pinza entre el pulgar
y el resto de dedos.
Para el diagnóstico se realiza, bajo anestesia local, una com-
Tienen lugar sobre todo a nivel de miembros superiores, aun-
probación del bostezo articular bajo control radioscópico (y se
que son más graves las de miembros inferiores por el mayor
compara con la otra mano).
calibre de los vasos. Cuando la lesión es venosa, es suficiente
con la compresión, las venas no suelen suturarse, salvo los Puede no cicatrizar espontáneamente si se interpone la apo-
grandes troncos como la femoral. neurosis del músculo aductor del pulgar entre los dos cabos
ligamentosos seccionados (lesión de Stener). Por ello se reco-
El problema viene con la lesión arterial, caracterizada por un
mienda el tratamiento quirúrgico.
sangrado de sangre roja reactivo al pulso (MIR) y a presión
elevada. Existe un riesgo elevado de shock hipovolémico y
de síndrome isquémico del miembro (las “5 p”: Pain (dolor),
Palidez, Pulso ausente, Parestesias y Parálisis).
La primera y fundamental medida a tomar es la compresión
local de la lesión, primero por presión digital y luego mediante
vendaje compresivo. Después, en quirófano se procede a la
sutura o ligadura del vaso, según sea una rama importante o
una colateral.
Respecto a la irrigación del miembro superior, debemos
recordar que la arteria humeral es la prolongación de la axilar,
que se coloca medial al bíceps y que su rama más importante es
la humeral profunda que irriga a la parte posterior del brazo. La
arteria humeral se bifurca en radial y cubital a nivel de fosa cubi-
tal. La arteria radial comienza aproximadamente un centímetro
por debajo de la flexura del codo, y discurre por la cara lateral
del antebrazo hacia la muñeca, donde es fácilmente palpable
en el espacio comprendido entre el tendón del palmar mayor
y la porción inferior saliente del borde anterior del radio (MIR).
La arteria cubital va desde el centro del pliegue del codo por el
borde medial del brazo hasta el lado interno de la región palmar.
Figura 3. Pulgar del esquiador.
55
Manual AMIR · Traumatología y Cirugía Ortopédica
Ligamento cruzado posterior - En el caso de pacientes que realizan actividad física, espe-
cialmente en jóvenes, está indicada la reconstrucción del
Menisco lateral Menisco medial ligamento cruzado anterior mediante la realización de una
ligamentoplastia con autoinjerto (isquiotibiales o tendón
rotuliano) así como la reparación de las lesiones meniscales
asociadas.
• Tratamiento de las lesiones de los ligamentos colate-
rales: tan sólo la asociación de rotura del LLE y LCA se trata
quirúrgicamente. En el resto de los casos suele bastar con me-
didas antiinflamatorias y proteger la rodilla con una ortesis.
Lesiones meniscales
56
Tema 6 · Lesiones de partes blandas
El diagnóstico de imagen se basa en la resonancia magnética • Diagnóstico: ecografía. En caso de duda, RM.
e incluso la artroscopia diagnóstica.
• Tratamiento: inicialmente conservador con reposo, analge-
sia, AINEs y rehabilitación. Si no mejora pueden realizarse in-
Tobillo filtraciones de corticoides en el espacio subacromial. En caso
de no mejoría se suele optar por el tratamiento artroscópico,
que implica la realización de una bursectomía y sutura de la le-
Lesiones muy frecuentes que en su mayoría afectan al liga- sión tendinosa. Actualmente se desaconseja la descompresión
mento peroneoastragalino anterior (MIR 11, 220) (corres- subacromial artroscópica (acromioplastia) como gesto aislado.
ponde al fascículo anterior del ligamento lateral externo, los
otros dos fascículos –peroneo calcáneo y peroneo astragalino
Tendinopatía calcificante (MIR 19, 198)
posterior– se lesionan por este orden en traumatismos más
graves). El ligamento medial o deltoideo se afecta raramente Formación de depósitos de calcio en el manguito; el supraespi-
y cuando lo hace debemos descartar una lesión proximal del noso es el más frecuentemente afectado. Inicialmente produce
peroné (fractura de Maissoneuve). una clínica de dolor intenso de predominio nocturno que suele
El mecanismo habitual es la supinación (inversión) del pie. mejorar en unas semanas.
Es muy típica la aparición de dolor brusco inicial seguido El tratamiento inicial es conservador. En caso de no mejoría se
de un periodo de latencia sin síntomas y después una puede optar por la realización de una punción-aspiración guia-
reagudización del dolor que preocupa al paciente pero da por ecografía u ondas de choque. En casos refractarios se
que es el curso natural de la clínica (MIR). realiza descompresión artroscópica de los depósitos de calcio.
Las maniobras conservadoras con hielo, elevación del pie, inmo-
vilización con vendaje compresivo o férula, según la gravedad,
y la realización de rehabilitación posterior de la musculatura
peronea conllevan una buena evolución. Para casos que dejan
inestabilidad crónica sintomática se pueden llevar a cabo
reconstrucciones del ligamento lateral. Para determinar la ines-
tabilidad se pueden llevar a cabo radiografías del tobillo forzan-
do el varo y midiendo los grados de apertura del tobillo (MIR).
Hombro
57
Manual AMIR · Traumatología y Cirugía Ortopédica
El tratamiento inicial es conservador (MIR), aunque en el caso Se pueden ver en la radiografía, en una segunda fase no infla-
de las dos primeras pueden ser necesarias desde la infiltración matoria, como zonas de calcificación del tendón.
local hasta la descompresión quirúrgica.
Mano
Gangliones de muñeca
Herniaciones de la sinovial articular a través de los huesos del
carpo, normalmente a nivel dorsal, dolorosos si el tamaño es
grande o si están en la cara volar del antebrazo. Pueden rese-
carse o puncionarse aunque es frecuente la recidiva.
Rodilla
Factores predisponentes
Recuerda...
Las lesiones del LCA producen derrame hemático inmediato.
Figura 7. Quiste de Baker (flecha verde). El quiste protruye entre los tendones
del semimembranoso y del gemelo interno (flechas azules). Las lesiones de los meniscos producen derrame seroso
con un tiempo de latencia.
Pie
Las lesiones de la meseta tibial dan lugar a derrames
con sangre y grasa.
Tanto el espolón calcáneo como la fascitis plantar por micro-
traumatismos son causas frecuentes de dolor a nivel de la plan- Las lesiones de los ligamentos internos y externos
ta del pie. Suelen resolverse con reposo, plantillas de descarga de la rodilla no producen derrame.
y antiinflamatorios.
58
Tema 7
Lesiones del sistema nervioso periférico
Autores: Alberto Touza Fernández, H. U. de Torrejón (Madrid). Fadi Ammari Sánchez-Villanueva, H. U. Virgen del Rocío (Sevilla). Eloy Tabeayo Álvarez,
H. U. La Paz (Madrid).
Enfoque MIR
C2
Aunque no representa un tema muy preguntado, se centra habi-
tualmente en apartados muy concretos como el plexo braquial y C2 C3
C4
las compresiones nerviosas (sobre todo del mediano). Del resto del C5
C3 C6
temario se deben tener unas nociones aunque no es preguntado. C4 C8
C7
D1
C5 D2
D3
D1 D4
D2 D5
7.1. Anatomía
D3 D6
D4 D7
D8
D5 D9
D6 D10
C6 D11 C6
D7 D12
La médula espinal se extiende entre el foramen magno y la D8
L2
L1
recer la curación.
L4 L5
• Neurotmesis (la más grave): disrupción de axones y tejido
conjuntivo. El tratamiento consiste en la sutura precoz del
tejido conjuntivo (epi y perineuro). Figura 1. Esquema de los territorios inervados por las raíces nerviosas.
59
Manual AMIR · Traumatología y Cirugía Ortopédica
7.3. Lesiones de troncos nerviosos periféricos Circunflejo Abducción brazo a partir de 60º
Circunflejo o axilar Deltoides, redondo menor Se describen a continuación las lesiones nerviosas por
compresión más importantes:
Supraescapular Supra e infraespinoso
Radial (C5-C8) Extensión-supinación del miembro superior Compresión del plexo braquial y los vasos sanguíneos subclavios
entre el raquis cervical y el borde externo del pectoral mayor.
Mediano (C6-D1) Flexión-pronación del miembro superior
La compresión suele producirse a nivel de una costilla
Intrínsecos de la mano, cubital anterior, cervical o entre los músculos escalenos (se afectan plexo y
Cubital (C7-D1)
aductor del pulgar arteria pero no la vena), aunque puede deberse a radioterapia
(meses-años después) o a compresión por otras estructuras
Tabla 1. Diagnóstico del nivel de la lesión nerviosa en miembro superior según menos frecuentes (clavipectoral, pectoral menor, región ante-
el músculo afecto (MIR). rior de cabeza humeral...).
60
Tema 7 · Lesiones del sistema nervioso periférico
Clínica flexión del pulgar y de la flexión del resto de dedos. Por ello,
su lesión puede ser muy incapacitante.
Dolor continuo o intermitente según la posición del brazo, falta
de fuerza (mano), alteraciones tróficas cutáneas, cianosis del Su territorio sensitivo comprende la mitad radial de la palma
miembro, claudicación. NO se alteran los reflejos motores. de la mano y, de los dedos 1.º-2.º-3.º-mitad radial del 4.º, la
cara palmar y el dorso de las falanges distales. Es el principal
Como métodos diagnósticos de localización tenemos:
responsable de todos los músculos flexores y de la pronación.
• Maniobra costoclavicular: si se reproduce la clínica con el
descenso y retropulsión de los hombros la compresión es pro-
Síndrome del pronador
bablemente costoclavicular.
Compresión del mediano a nivel proximal, en la inserción dis-
• Prueba de Adson: en inspiración se gira la cabeza al lado
tal bicipital, inserciones del pronador redondo o flexor común
afecto y se reproducen los síntomas o se atenúa el pulso ra-
superficial de los dedos. Tratamiento conservador o quirúrgico
dial cuando la compresión es interescalénica.
según evolución.
• Test de hiperabducción de Wright: la hiperabducción
mantenida despierta los síntomas si se originan a nivel costo-
clavicular o detrás del pectoral menor. Síndrome del túnel carpiano
• Además de las pruebas anteriores también podemos compri- Importante: compresión del nervio mediano a nivel distal en
mir a nivel interescalénico para reproducir los síntomas o el canal carpiano, túnel rígido por el que pasan además varios
buscar soplos en la arteria subclavia. tendones.
• Pruebas complementarias: radiología simple, arteriografía, Es la neuropatía por compresión más frecuente del organis-
RMN, electrofisiología... mo. Suele afectar a mujeres. El desencadenante suele ser
un aumento del contenido del canal, ya sea por sobrecarga
funcional (amas de casa, martillo neumático, informáticos...) o
Tratamiento por aumento real de volumen (artritis reumatoide, gangliones,
amiloidosis, hipotirodismo, lipomas...). Puede ser secundario a
El tratamiento inicial es fisioterápico, aunque no se descarta
traumatismo de muñeca (MIR).
la cirugía descompresiva si el tratamiento conservador no
obtiene resultados. • Clínica: aparecen de forma progresiva parestesias en la mitad
radial de la mano (tres primeros dedos y cara radial del cuarto)
(MIR), sobre todo nocturnas, y pérdida de fuerza progresiva
Compresión del nervio mediano con hipotrofia de la eminencia tenar (recordad que el mediano
inerva 1.º y 2.º lumbricales y separador corto-oponente-flexor
El nervio mediano es el principal responsable (junto con la par- corto del pulgar), esta última conlleva mal pronóstico.
ticipación secundaria del nervio radial) del mecanismo de pinza • Diagnóstico: el signo de Tinnel es positivo y la maniobra
de la mano (MIR 12, 209), ya que se encarga de la abducción- de Phalen (hiperflexión de muñeca que provoca parestesias)
también es positiva. El estudio electrofisiológico da el diag-
nóstico definitivo. Puede detectarse en sangre un aumento
del factor reumatoide (MIR).
• Tratamiento: inicialmente férulas nocturnas y reducción de
actividad, aunque la cirugía descompresiva es una buena so-
lución (apertura del ligamento volar transverso del carpo).
En cuanto a las lesiones traumáticas, pueden producirse por
fracturas supracondíleas de húmero, luxación de codo, luxa-
ción del semilunar y fractura de Colles, además de por heri-
das incisas y fracturas abiertas.
Figura 2. Músculo pronador cuadrado (MIR 17, 1). Dicho músculo está iner- A nivel posterior del codo, el cubital pasa por un canal entre
vado por el nervio mediano. olécranon y epitróclea, cubierto por una vaina fibrosa; es aquí
61
Manual AMIR · Traumatología y Cirugía Ortopédica
donde se puede producir la compresión (hay casos también Compresión del nervio femorocutáneo
de compresión entre los vientres musculares del cubital ante-
rior). Encontraremos parestesias distales, pérdida de fuerza de
cubital anterior, hipotenares, interóseos y aductor del pulgar También llamada meralgia parestésica. Ocurre con frecuen-
(signo de Fromment). Los test de Tinnel y Phalen son positivos. cia en personas obesas o con ropas ajustadas, la compresión
Cuando falla el tratamiento conservador con férulas nocturnas tiene lugar entre el ligamento inguinal y la espina ilíaca ante-
se realiza liberación y transposición subcutánea o submuscular. rosuperior. Provoca parestesias y dolor en la cara anterolateral
del muslo proximal (MIR) cuando se lleva un tiempo con la
cadera en flexión o caminando. Su tratamiento incluye desde
Síndrome del canal de Guyón pérdida de peso a cirugía, pasando por infiltraciones.
Compresión del nervio cubital a nivel del pisiforme. La clínica
se reduce a la mano. Compresión del safeno
Las lesiones traumáticas se ven por heridas en la muñeca,
fracturas de epitróclea y deformidades en cúbito valgo tras
Cuadro que con frecuencia puede confundirse con lesiones
fracturas supracondíleas de húmero.
meniscales o patología patelofemoral puesto que aparece
dolor en la cara anterolateral de muslo distal y cara medial de
Compresión del nervio radial la rodilla. La compresión puede ser a nivel del conducto de
Hunter (canal de los aductores) o por neuromas en cara ante-
rior de rodilla tras heridas o cirugía.
Su territorio sensitivo comprende la cara dorsal de los dedos
1.º-2.º-3.º-mitad radial del 4.º (excepto las falanges distales
que son del mediano), el dorso de la mitad radial de la mano Compresión del ciático mayor y sus ramas
y la cara posterior del antebrazo. Es extensor de las metacar-
pofalángicas y de la muñeca. Aporta inervación motora a la
Debido a traumatismos pélvicos y de cadera (lesión del ciático
musculatura supinadora-extensora de la extremidad superior.
en luxaciones de cadera), traumatismos de la rodilla (lesión
Es lesionado frecuentemente en fracturas de diáfisis humeral
del nervio tibial o ciático poplíteo interno) y traumatismos de
o fracturas-luxación de radio proximal (rama interósea
cabeza o cuello del peroné (lesión del nervio peroneo común
posterior del radial). La neuropatía por compresión crónica
o ciático poplíteo externo). Provocan parálisis de sus músculos
tiene lugar a nivel de la arcada de Fröhse (arco fibroso pro-
diana, compartimento posterior y planta del pie para el tibial
ximal del músculo supinador) y provoca parestesias y pérdida
y compartimento anterolateral y dorso del pie para el peroneo
de fuerza de la musculatura que inerva. La compresión aguda
común (aparece pie en equino) (MIR 16, 1).
(del “sábado noche”), por compresión del miembro durante
horas en la misma posición, tiene buen pronóstico (es propia
de alcohólicos). Síndrome del túnel tarsiano
Compresión del nervio axilar o circunflejo Compresión del nervio tibial posterior a nivel del canal retro-
maleolar medial. Cursa con dolor y parestesias en la planta del
pie y suele deberse a gangliones, consolidaciones viciosas de
Procede del tronco secundario posterior del plexo braquial
fracturas o tenosinovitis. El signo de Tinnel es positivo.
(como el nervio radial). Su lesión, frecuente en luxaciones de
hombro (MIR 17, 33), provoca anestesia del muñón del hom-
bro y parálisis del deltoides y redondo menor (ver figura 3).
Supraespinoso
Territorio sensitivo
Nervio del nervio axilar
axilar
Infraespinoso
Redondo
menor
Figura 3. Recorrido del nervio axilar. Inerva al músculo deltoides y da la sensibilidad a los dos tercios anteriores de la región anterior del hombro.
62
Tema 7 · Lesiones del sistema nervioso periférico
Figura 4. Nervio peroneo común. Zona más típica de compresión a nivel del
tercio proximal del peroné.
63
Tema 8
Traumatología y ortopedia del raquis
Autores: Ainhoa Guijarro Valtueña, H. U. Puerta de Hierro (Madrid). Gonzalo Luengo Alonso, H. U. 12 de Octubre (Madrid). Rodrigo Víquez Da Silva,
H. U. Virgen de la Victoria (Málaga).
Enfoque MIR cular, los reflejos motores y vegetativos (sobre todo el bulbo
cavernoso) y la sensibilidad superficial y profunda.
Las preguntas sobre raquis son muy poco frecuentes (5%), te debes
Como causas no traumáticas de fracturas, es decir, fracturas
centrar sobre todo en las escoliosis (diagnóstico y criterios quirúr-
patológicas, la más frecuente es la osteoporosis (MIR), pro-
gicos) y en las fracturas de atlas y axis. Pueden aparecer preguntas
vocando acuñamientos vertebrales con clínica silente que dan
aisladas del resto del temario.
lugar a cifosis progresiva. También pueden deberse a metásta-
sis, sobre todo en raquis lumbar y debido a tumores de mama,
próstata y pulmón.
8.1. Introducción En cuanto a las pruebas de imagen se realizan radiografías
simples anteroposterior, lateral y oblicua (en fracturas de odon-
Desde el punto de vista traumatológico, la columna vertebral toides proyección transoral). La TC se utiliza para la valoración
cumple las funciones de protector de la médula espinal y la de la morfología de la fractura y la RM para la valoración de
de transmisor de la carga corporal hacia la pelvis. Cuando un las estructuras discoligamentosas. La electromiografía se utiliza
traumatismo afecta a cualquiera de estas dos funciones, se para valorar la extensión de la afectación neurológica (MIR).
plantea la estabilización quirúrgica. Los datos más importan- Los tratamientos pueden ser:
tes sobre los que fijarse, por tanto, serán las indicaciones de
• Ortopédicos: incluyendo collarín rígido, sistemas de tracción
cirugía o de tratamiento ortopédico y la localización típica de
transesquelética y corsés (distinto modelo según la altura de
algunas fracturas.
la fractura), según la localización y estabilidad de la lesión.
Dentro de los trastornos del desarrollo lo más frecuente
son las desviaciones en los tres ejes del espacio, sobre todo • Quirúrgicos: mediante reducción del desplazamiento y fija-
la escoliosis idiopática y la enfermedad de Scheuermann, y la ción (artrodesis), cuando existe inestabilidad o clínica neuro-
necesidad de tratamiento ortopédico o cirugía, según su clínica lógica.
y evolución.
A modo de recuerdo anatómico, recordad que la columna Lesiones de raquis cervical
se considera compuesta por tres pilares, porción anterior del
cuerpo vertebral, porción posterior del cuerpo y el anillo pos-
Inestabilidad occipitovertebral
terior (pedículos, láminas y apófisis con los ligamentos que los
unen). También que existen algunas vértebras con morfología Lesiones frecuentes en niños, producidas en accidentes de
especial: tráfico. Suponen la lesión de los elementos estabilizadores
entre los cóndilos occipitales y el atlas. Tienen una elevada
• C1 no tiene cuerpo, es sólo un anillo. mortalidad.
• C2 presenta la apófisis odontoides para articular con C1.
Inestabilidad atloaxoidea
• Las vértebras cervicales presentan su apófisis transversa atra-
vesada por la arteria, vena y nervio vertebral (atención a las Cuando son traumáticas, la mayoría son mortales. En la radio-
fracturas a dicho nivel). grafía vemos una distancia entre odontoides y atlas mayor de
5 mm. Se tratan mediante artrodesis posterior C1-C2.
En cuanto a la médula, ésta se extiende entre C1-C2 hasta En el síndrome de Down y la artritis reumatoide, así
L1-L2, a partir de L2 sólo encontramos la cola de caballo. La como en infecciones locales de partes blandas en los
médula presenta dos engrosamientos, uno cervical a nivel de niños, encontraremos lesión degenerativa del ligamento trans-
C4-T2 y otro lumbar entre T10-L1, por lo que serán zonas con verso. Habrá inestabilidad crónica y progresiva. Si es sinto-
un espacio comprometido y mayor riesgo de lesión. mática se realiza la artrodesis antes de que la luxación progrese
y provoque clínica neurológica irreversible.
Habrá que tener especial atención cuando estos pacientes
8.2. Traumatología del raquis sufran un traumatismo cervical, puesto que la inestabilidad
de base puede facilitar una lesión grave ante un traumatismo
banal (MIR).
Ante un traumatismo importante se considera inestable una
fractura que afecta al menos a dos de los pilares de la columna,
siendo uno de ellos el central, o bien cuando la fractura se acom- Fracturas de atlas
paña de lesión de los elementos posteriores de estabilización. La primera vértebra cervical o atlas está constituida por dos
Se impone por ello una valoración neurológica exhaustiva para arcos que confluyen lateralmente en las masas laterales (punto
detectar la lesión. La valoración incluye funcionamiento mus- de apoyo de los cóndilos occipitales); además posee tubércu-
64
Tema 8 · Traumatología y ortopedia del raquis
Tubérculo anterior
Apófisis
transversas
Tubérculo posterior
Apófisis espinosa
Apófisis odontoides
Figura 1. Fractura de Jefferson.
Carilla articular
superior Tipo II
- Se pueden producir tanto por flexión como por extensión. - Fracturas por compresión: se manejan bien con ortesis.
65
Manual AMIR · Traumatología y Cirugía Ortopédica
• Fracturas de las apófisis transversas o espinosas: ade- El tratamiento quirúrgico de elección es la descompresión medu-
más de muy dolorosas, pueden presentar lesiones asociadas, lar y la estabilización posterior con tornillos pediculares y barras.
por lo que se debe realizar una TC. Si no existen otras lesio- En el caso de que la fractura no sea quirúrgica, se trata con
nes, es suficiente tratar con ortesis. corsé durante 3 meses.
• Luxaciones facetarias: luxación de las carillas articulares
vertebrales; se reduce mediante tracción bajo control neuro-
Fracturas vertebrales osteoporóticas
lógico. Si no se reduce, habrá que intervenir quirúrgicamente.
Son las fracturas osteoporóticas más frecuentes. El segmento
• Esguince cervical.
más afectado es el T7-L2.
- Lesión de las partes blandas de la región cervical debido a un Clínica: dolor intenso que empeora con los movimientos del
desplazamiento brusco de extensión-flexión (latigazo cervical). tronco.
- Presentan rigidez de cuello y dolor local irradiado a hombro Diagnóstico: mediante Rx simple. En caso de dudas realizar
y raquis dorsal. RMN.
- Inicialmente se aplica collarín, AINE y relajantes musculares. Tratamiento: el tratamiento de elección es conservador con
corsé. En caso de deformidad progresiva con cifosis o dolor
- Puede quedar dolor residual debido a cierta inestabilidad, persistente tras tratamiento conservador se puede considerar
pueden realizarse entonces radiografías funcionales (en fle- el tratamiento mediante técnicas percutáneas:
xión y extensión) para intentar objetivarlo.
• Cifoplastia: introducción de un balón que recupera parcial-
mente la altura vertebral; tras retirar el balón se introduce
Fracturas del raquis toracolumbar cemento en la cavidad.
• Vertebroplastia: el cemento se introduce directamente en la
Se localizan sobre todo en el tránsito toracolumbar (char- cavidad (contraindicada en caso de rotura del muro posterior)
nela) y son producidas, en su mayoría, por un mecanismo de (MIR 17, 202).
flexión. Además de dolor, pueden asociar clínica intestinal (íleo
paralítico) y neurológica (más frecuente en las fracturas a nivel
torácico, aunque éstas se consideran más estables inicialmen- 8.3. Patologías del desarrollo del raquis
te).
Para su diagnóstico es imprescindible la realización de Malformaciones congénitas
una radiografía y una RMN (valora el complejo ligamen-
tario posterior). La clasificación de Denis incluye los siguien-
(Ver manual de Neurología y Neurocirugía)
tes tipos de fracturas según el mecanismo de producción y
su afectación de los pilares del raquis:
Escoliosis
• Fracturas por compresión: afectan sólo al pilar anterior.
• Fracturas por estallido: se producen por fuerzas axiales y se Importante: se define como la presencia de curvas ver-
afectan los pilares anterior y medio. tebrales en el plano frontal (desviación >10º), aunque en
• Flexión-distracción: se afectan los pilares medio y posterior. realidad se trata de una desviación en las tres direcciones del
espacio con rotación vertebral y alteraciones en el plano frontal
• Fractura-luxación: afectación de los tres pilares por compre- y sagital.
sión, tensión, y rotación o cizallamiento. Son las que presen-
tan déficits neurológicos con más frecuencia. Se pueden producir escoliosis falsas (actitud escoliótica) de
tipo postural o antiálgico, pero se detectan por la ausencia de
deformidad vertebral y rotaciones y porque desaparecen con la
Pilar anterior flexión ventral del tronco (test de Adams).
Mitad anterior del cuerpo vertebral En la escoliosis verdadera o estructurada se produce una rota-
Pilar medio ción vertebral sobre el eje axial acompañada del desarrollo de
Mitad posterior del cuerpo curvas anómalas, que originan asimetría de la parrilla costal en
vertebral y pedículos el test de Adams.
Pilar posterior La deformidad es progresiva durante el crecimiento, por lo que
Arco posterior (formado por las láminas), tendrán peor pronóstico los pacientes que comienzan antes su
apófisis articulares, apófisis transversas desarrollo. No ocasiona dolor (si éste aparece pensar en una
y apófisis espinosa
causa infecciosa o tumoral) y de no corregirse, los casos
graves producen una gran deformidad con repercusiones
Figura 4. Pilares de la columna toracolumbar. cardiacas y pulmonares en la edad adulta (MIR). Su progresión
se frena con la madurez esquelética salvo en los casos más
graves que pueden seguir progresando (>45º).
Son indicaciones de cirugía:
La forma más frecuente es la idiopática (infantil, juvenil
• Presencia de clínica neurológica. o del adolescente), aunque puede ser congénita (malforma-
• Fragmentos óseos en el canal medular. ciones vertebrales, raquisquisis, mielodisplasia), traumática,
neuromuscular (distrofia muscular, parálisis cerebral, poliomie-
• Cifosis angular mayor de 25º. litis…), secundaria a enfermedad de Marfan o displasias óseas,
• Pérdida de altura de la vértebra mayor del 50%. raquitismo, etc. (MIR).
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Tema 8 · Traumatología y ortopedia del raquis
Recuerda...
Lo más frecuente: curva torácica derecha y
toracolumbares y lumbares izquierdas.
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Manual AMIR · Traumatología y Cirugía Ortopédica
Hipercifosis
Enfermedad de Scheuermann
Se corresponde con una osteocondritis de los núcleos epifi-
sarios vertebrales (también se conoce como osteocondrosis
deformante dorsal).
Es una deformidad rígida (no se corrige al intentar hiperexten-
der la columna) que puede afectar a nivel torácico entre T7 y
T12 (se consulta por la deformidad) o a nivel lumbar entre L1
y L2 (consultan por dolor) (MIR 16, 147).
Como criterios diagnósticos radiográficos encontraríamos:
• Hipercifosis. Figura 6. Enfermedad de Scheuermann. Nódulos de Schmorl e irregularidad de
los platillos vertebrales.
• Acuñamiento superior a 5º en tres o más vértebras consecutivas.
• Irregularidad de platillos vertebrales.
• Nódulos de Schmorl (herniación del núcleo).
• Pinzamiento del disco intervertebral.
Recuerda...
• En ocasiones, escoliosis y espondilolistesis asociada.
Ante un paciente que presenta dorsalgia debemos pensar,
especialmente en pacientes jóvenes, en causas mecánicas
Para el tratamiento se emplean corsés tipo Milwaukee y reha- por sobrecarga. En el caso de que se asocie cifosis y dolor
bilitación y se reserva la cirugía para las curvas mayores de 75º, debemos pensar en la enfermedad de Scheuermann como
dolor incoercible y progresión a pesar del corsé. primera posibilidad (MIR 16, 147).
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Tema 8 · Traumatología y ortopedia del raquis
Espondilolisis y espondilolistesis
Recuerda...
Espondilolisis
Fractura de la pars interarticularis vertebral.
Espondilolistesis
Desplazamiento anterior de una vértebra sobre otra.
Lo más frecuente es que se produzca debido a una
espondilolisis ístmica (MIR 10, 90; MIR).
Espondilolistesis ístmica
Propia de varones jóvenes, la lesión se localiza en la pars
interarticularis entre L5 y S1 y suele deberse a una fractura de
estrés.
Provoca hiperlordosis lumbar con lumbalgia y contracturas de
músculos isquiotibiales que dificultan la marcha y la flexión del
tronco. Es raro que cause radiculopatía, pero si lo hace será de Figura 7. Espondilolistesis de L5 sobre S1.
las raíces de L5 en adelante (las demás ya han abandonado la
columna en un nivel más alto), cursando con pérdida de fuerza
en el pie (MIR).
Para el diagnóstico se realizan radiografías lateral, anteropos- Recuerda...
terior (veremos superposición de L5 y S1) y oblicua (decapita-
Las escoliosis falsas o funcionales se corrigen con la flexión
ción del “perrito de La Chapelle”). La TAC puede objetivar la
del tronco. Las estructurales producen alteración de la columna
fracturade la pars interarticularis.
en los tres planos.
El tratamiento quirúrgico se emplea en pacientes con despla-
zamientos de grado III (desplazamiento 50-75%) o superior, La artrodesis impide la progresión y corrige la curva;
desplazamiento progresivo o clínica de dolor o déficit neuroló- los corsés no corrigen.
gico no controlados con ortesis y reposo físico.
Espondilolistesis degenerativa
Se debe a artrosis de la pars interarticularis que se rompe o,
más frecuentemente, se elonga. Es más frecuente en mujeres a
partir de la quinta década de la vida. El nivel de afectación más
frecuente es L4-L5. Suele cursar con dolor lumbar mecánico
que se alivia con el reposo, y con dolor irradiado a ambas pier-
nas. En caso de fracaso del tratamiento conservador se realiza
cirugía (descompresión con fusión posterior).
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Tema 9
Ortopedia del adulto
Autores: Alberto Touza Fernández, H. U. de Torrejón (Madrid). Gonzalo Luengo Alonso, H. U. 12 de Octubre (Madrid). Fadi Ammari Sánchez-
Villanueva, H. U. Virgen del Rocío (Sevilla).
Enfoque MIR
Este tema ha recobrado importancia en las últimas convocatorias.
Las preguntas se limitan a los criterios de indicación de artroplastia
y al diagnóstico y tratamiento de la necrosis avascular de cadera.
9.1. Introducción
La ortopedia se encarga de resolver los cuadros que cursan Figura 1. Artrodesis de la muñeca.
con un hueso enfermo (no participan de forma primaria los
traumatismos). Básicamente estamos ante cuadros degenera-
tivos entre los que la artrosis tiene una presencia destacada, Como indicaciones, tenemos la artropatía neuropática, las
porque es una patología de prevalencia creciente con la edad infecciones y los pacientes que han tenido varios fracasos en
de la población. anteriores intentos de artroplastia o aquellos que presentan
Cuando una articulación se degenera de forma importante dolor y deformidad en localizaciones en que no se pueden
debemos actuar sobre ella para reducir el dolor y recuperar emplear prótesis articulares (muñeca, raquis, primer dedo de
la función. la mano, tobillo, pie).
La intervención que se realiza hoy con más frecuencia es la
artroplastia de sustitución articular. Antes de hablar de ella, Artroplastia de resección
vamos a definir otros procesos quirúrgicos que pueden contri-
buir a la curación o, cuanto menos, actuar de forma paliativa
para retrasar el recambio articular. Se basa en la resección de las superficies articulares de una
articulación con artrosis. Se utiliza en pacientes con poca cali-
dad de vida, en el rescate de infecciones de artroplastias y en
Transposiciones de partes blandas algunas cirugías de mano y pie.
Su objetivo es disminuir el rozamiento entre superficies articu- 9.2. Degeneración articular. Síntomas y manejo.
lares. Se emplea en situaciones de trastornos de la alineación
articular, contracturas dolorosas o déficits nerviosos.
Cuando una articulación se ve afectada por una degeneración
artrósica o por enfermedades sistémicas con fondo artríti-
Osteotomías co (LES, AR), encontramos clínicamente una sintomatología
dolorosa y signos inflamatorios ocasionales producto de una
Tiene también como objetivo cambiar los puntos de apoyo incongruencia articular progresiva (MIR).
sobre la articulación afecta. Consiste en seccionar un hueso Encontraremos disminución de la interlínea articular, pinza-
para corregir curvaturas o angulaciones anómalas. Según la miento más marcado en la zona afecta (típica la degeneración
forma en que se haga el corte pueden ser valguizantes, vari- del compartimento medial en la artrosis de rodilla) y creci-
zantes, desrotadoras o combinadas. Muchas veces mejora la miento secundario de osteofitos (un intento del organismo de
clínica durante años (osteotomías valguizantes para rodillas disminuir el dolor reduciendo movilidad). También se podrán
varas con gonartrosis medial). Se realizan en pacientes jóvenes apreciar quistes óseos subcondrales y esclerosis subcondral
en los que existe afectación de un compartimento. como respuesta del hueso adyacente a la articulación.
Este proceso tiene inicialmente siempre un tratamiento médi-
co y conservador, dirigido a aliviar el dolor y mantener la
Artrodesis
función. Lo más importante es la reducción de la sobrecarga
articular, eliminando factores como el sobrepeso y ciertas
Consiste en anular de forma quirúrgica el movimiento de una actividades físicas excesivas y repetitivas o con ayudas a la
articulación, de modo que al eliminar el movimiento desapare- marcha (p.ej. uso de bastón). También la fisioterapia puede ser
ce el dolor. Esta fusión articular se realiza en una posición fun- de ayuda, con aplicación de calor o hielo y con la práctica de
cional, es decir, una posición que le permita realizar una buena ejercicios (mejor isométricos que isotónicos, ya que reducen la
parte de las funciones habituales de la vida diaria. Soluciona sobrecarga articular) (MIR 09, 85).
el problema del dolor, pero elimina cualquier movilidad y es
irreversible, salvo en contadas excepciones.
70
Tema 9 · Ortopedia del adulto
71
Manual AMIR · Traumatología y Cirugía Ortopédica
Tratamiento
72
Tema 9 · Ortopedia del adulto
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Tema 10
Manejo del paciente politraumatizado
Autores: Ainhoa Guijarro Valtueña, H. U. Puerta de Hierro (Madrid). Eloy Tabeayo Álvarez, H. U. La Paz (Madrid). José Manuel Martínez Díez, H. U.
La Paz (Madrid).
Paciente que presenta diversas lesiones traumáticas, de las 2 Muy Urgente Naranja
cuales al menos una es una lesión, generalmente visceral, que
pone en peligro su vida. Es la primera causa de muerte entre 3 Urgente Amarillo
los menores de 44 años.
Tres periodos asistenciales con picos de mortalidad: 4 Normal Verde
74
Tema 10 · Manejo del paciente politraumatizado
10.2. Atención inicial naje pulmonar, sellado de heridas, canalizar dos vías venosas
periféricas (infusión de 2000 ml de cristaloide) o una central
(yugular, femoral), estabilizar fracturas de pelvis y fémur, moni-
Previamente a la atención de un paciente politraumatizado, debe- torizar ECG y TA.
mos conseguir un entorno seguro tanto para el paciente como
para las personas que lo atienden (p.ej., en accidentes de tráfico).
Para ello, debemos aplicar la conducta PAS (MIR 18, 192): Evaluación secundaria
• Proteger: implica tanto la autoprotección (p.ej.: chaleco re-
flectante) como la señalización del accidente con triángulos Una vez estabilizada la situación inicial se realiza una anam-
de preseñalización. nesis de lo ocurrido y un examen exhaustivo en sentido
craneo-caudal. Será el momento de monitorizar frecuencia
• Avisar: llamar a los servicios de emergencia (112) indicando la
ventilatoria, pulsioximetría, presión arterial y ECG y se rea-
localización del accidente, número de heridos y su estado, y
lizarán las pruebas complementarias pertinentes analíticas y
circunstancias especiales (peligros no controlados como fue-
gos, etc.). radiográficas (en el politraumatizado pedir de rutina raquis
completo incluyendo RX lateral cervical, RX de tórax y RX
• Socorrer: iniciar, si es posible, maniobras de primeros auxilios. anteroposterior de pelvis, además de otras radiografías dirigi-
das según la sospecha) (MIR 17, 199).
Valoración inmediata (protocolo ATLS: ABCDE) Para el transporte y movilización se maneja al paciente en blo-
que hasta descartar lesiones vertebrales y compromiso medular
(MIR 09, 92; MIR)
(MIR 11, 98). También inmovilizaremos las extremidades sos-
pechosas de estar fracturadas.
Importante
• Permeabilizar vía aérea controlando columna cervical: Sedación y analgesia
inspeccionar con elevación del mentón y desobstruir la vía aé-
rea, ventilar optimizando la maniobra asistidos por cánula de
Guedel. Mantener collarín cervical (tipo Philadelphia) (MIR). Es necesario aliviar el dolor y la ansiedad de estos pacientes,
Opción de intubación, mascarillas, etc. suprimiendo la actividad simpaticoadrenérgica y facilitando
las maniobras diagnosticoterapéuticas (analgésicos, sedantes,
• Respiración: aparato respiratorio funcionante. Con la vía antipsicóticos, relajantes musculares…).
libre, ante disminución de estado de conciencia se impone
intubación y ventilación mecánica (ojo con >35 o <10 rpm).
• Circulación: presencia o ausencia de latido cardiaco, si no existe
10.3. Manejo de la vía aérea
latido comenzar con RCP. Son elementos muy orientativos:
- Conciencia: si está consciente implica buena perfusión ce- La primera medida es comprobar la permeabilidad de la vía
rebral de oxígeno. aérea, primero se libera la oclusión que provoca la lengua
con medidas posturales (triple maniobra modificada) y luego
- Pulso: presencia y a qué nivel se capta (pulso carotídeo im- se limpia la cavidad oral. En pacientes conscientes la mejor
plica >60 mmHg, pulso femoral indica >70 mmHg y pulso maniobra es la tos natural, como acciones adicionales tenemos
radial implica >80 mmHg). la maniobra de Heimlich.
- Hemorragia: comprimir, no usar torniquetes por sus po- Para mantener la vía aérea se inserta una cánula orofaríngea
sibles efectos adversos (a menos que la presión directa (cánula de Guedel o tubo de Mayo). Para la insuflación de aire
no sea eficaz, la hemorragia esté en una extremidad y el se emplea el ambú (sistema balón-válvula-mascarilla).
profesional esté entrenado en su utilización). Cuidado con Está indicado intubar a:
hemorragias ocultas (hipovolemia de origen desconocido).
• TCE con Glasgow <8 (MIR 17, 225), pérdida de reflejo tusí-
• Evaluación neurológica: no es prioritario el diagnóstico geno, agitación que requiera sedación, deterioro progresivo,
de lesiones intracraneales pero sí lo es el de la hipertensión trastornos de ritmo respiratorio, focalidad neurológica, venti-
intracraneal y su tratamiento agresivo. Valoración inicial rea- lación dudosa…
lizada mediante la Escala de Glasgow y la Reacción Pupilar a
la Luz (Pupilas si están isocóricas y la reactividad a la luz…). • Insuficiencia respiratoria con Sat <90%, hipercapnia, es-
Glasgow: Valoración de apertura ocular, respuesta verbal y fuerzo respiratorio.
respuesta motora. • Quemados con >50% superficie y quemaduras faciales o de
• Extremidades. Sondas. Retirada de ropa y evaluación de vía aérea.
miembros, calentar al paciente con mantas y fluidos calientes,
y, si no hay contraindicación, sonda nasogástrica y vesical.
10.4. Estado circulatorio
Resucitación
Definimos shock como la alteración del estado circulatorio
que conlleva una importante y generalizada disminución de la
Resolución de tres situaciones: parada cardiorrespiratoria, insu- perfusión tisular que provoca lesión cerebral. En general es plu-
ficiencia respiratoria y shock hipovolémico, siendo estas dos rietiológica y su base es un gasto cardiaco inadecuado por alte-
últimas causa de la primera. ración del volumen circulante, la bomba cardiaca o los vasos.
Tras una RCP básica pueden tomarse otras medidas de resu- En general suele haber disminución del nivel de conciencia,
citación para ayudar a superar el peligro: oxigenoterapia, dre- taquipnea, piel fría, hipotensión y disminución de la diuresis.
75
Manual AMIR · Traumatología y Cirugía Ortopédica
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Tema 10 · Manejo del paciente politraumatizado
10.7. Traumatismo raquimedular y • Lesión traqueobronquial: rotura bronquial (en lado dere-
de extremidades o pelvis cho lo más frecuente), aparece neumotórax y hemoptisis con
insuficiencia respiratoria, dolor, enfisema subcutáneo. Diag-
nóstico por broncoscopio. Intubación y cirugía reconstructiva.
(Ver tema 2. Fracturas y luxaciones de la extremidad
• Rotura esofágica: rara pero importante, porque lo más fre-
superior, tema 3. Fracturas y luxaciones de la extremidad
cuente es su producción iatrogénica. Aparece taquicardia,
inferior y tema 4. Traumatología y ortopedia infantil)
roce pleural y fiebre. Se trata con drenaje pleural y mediastí-
nico y cirugía.
• Rotura aórtica: el 90% mueren al instante; de los que llegan Picaduras de medusa
al hospital la mitad muere en 24 h por rotura del pseudoa-
neurisma (por esto se incluye en riesgo potencial de muerte,
los que llegan al hospital tienen probabilidades de sobrevi- Para inactivar la carga de veneno e impedir un mayor envene-
vir…). Lo más frecuente es la rotura a nivel del istmo. Ra- namiento, las picaduras de medusa deben lavarse con vinagre
diografía de tórax: ensanchamiento mediastínico, contorno cuanto antes durante al menos 30 segundos. Una vez retirados
aórtico anormal (lo más sensible), y posibilidad de derrame o neutralizados los nematocistos, el dolor producido por la
pericárdico y pleural izquierdo (MIR 18, 140). Es indicación picadura de medusa debe tratarse mediante inmersión en agua
de cirugía urgente. caliente, siempre que sea posible.
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Valores normales en
Traumatología y Cirugía Ortopédica
Tiempo de inmovilización con yeso de una fractura de radio distal (MIR) 6 semanas
Periodo para revisar una sospecha de fractura de escafoides si la RX es normal (MIR) 2 semanas
Es posible realizar RX en el seguimiento de la displasia del desarrollo de la cadera a partir de los 3 meses
Tratamiento con corsé en la escoliosis idiopática del adolescente si Cobb entre 30-45 grados
Cirugía en la escoliosis idiopática del adolescente si Cobb >45 grados y crecimiento residual
Intubación en paciente si insuficiencia respiratoria con Sat <90%, hipercapnia, esfuerzo respiratorio
Intubación en paciente si quemado con superficie corporal quemada >50% y quemaduras faciales o de vía aérea
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Reglas mnemotécnicas
Traumatología y Cirugía Ortopédica
Regla mnemotécnica
Colles “DO/RA SU MEDIA EXTENSIÓN LARGA”:
DOrsal
RAdial
SUpinación
MEDIAno
EXTENSOR LARGO del 1.er dedo
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BIBLIOGRAFÍA
• Traumatología y Ortopedia para el grado de Medicina. 1ª edición. F Marco, U Martínez-Aedo. Elsevier. 2015.
• Manual de Cirugía Ortopédica y Traumatología, 2ª edición. Sociedad Española de COT. Panamericana, 2010.
• www.orthobullets.com.
80
NOTAS
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