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Clasificación de los cheques

Podemos clasificar los cheques de dos maneras diferentes, haciendo


referencia al tipo de beneficiario del cheque o al método de cobro del
cheque.

Atendiendo al tipo de beneficiario del cheque encontramos los


siguientes cheques:

o Cheque al portador: Se trata de un cheque sin el nombre del


beneficiario marcado. De este modo cualquier persona puede cobrarlo y
hacerlo efectivo acudiendo al banco.
o Cheque nominativo: El beneficiario es la persona que está indicado en
el documento financiero. Solamente podrá cobrarlo aquella persona que
figura en el cheque o a aquella persona que el beneficiario titular
acredita. Transmitir el cobro de un cheque es posible a partir del "endoso".
De este modo puede cobrar un cheque nominativo otra persona.

La diferencia entre el cheque al portador y el cheque nominativo radica en si


está el nombre del beneficiario por escrito.

Si clasificamos los cheques por el método de cobro encontramos los


diferentes cheques:

o Cheque cruzado: Este tipo de cheque no puede cobrarse en efectivo,


debe ser cobrado a través de una cuenta bancaria. El banco se encarga de
abonar en la cuenta del beneficiario la cantidad de dinero marcado en el
cheque. ¿Cómo distinguimos un cheque cruzado? Este tipo de cheque tiene
una marca en la parte superior, se trata de una doble ralla paralela que indica
que es un cheque cruzado. El cheque puede marcarlo tanto el librado como el
librador.
o Cheque conformado: En este tipo de cheques la entidad bancaria
asegura que el beneficiario podrá cobrar el cheque sin problemas. Esto es
posible porque el librado certifica que hay dinero en la cuenta del librador.
Aparecerá escrita la palabra "Conformado" o "Certificado". Para asegurar el
cobro la entidad bancaria retiene la cantidad de dinero y por este motivo está
asegurado el pago.
o Cheque para abonar en cuenta bancaria: Este tipo de cheque no puede
ser cobrado en efectivo, es parecido al cheque cruzado pero en este caso se
reconoce porque pone por escrito "abonar en cuenta".
o Cheque de ventanilla: Este tipo de cheque no se trata de un medio de
pago como tal, sino de un recibí. Es un documento que firma el cliente como
prueba de que recibe dinero en efectivo de su propia cuenta desde la
ventanilla del banco.
o Cheque del viajero: Es un tipo de cheque poco frecuente, su uso no
está muy extendido pero es interesante conocerlos si viajamos al extranjero.
Este tipo de cheque se emiten en diferentes divisas, no tienen fecha de
caducidad y son aceptados en casi todos los países. El cheque
viajero podemos cobrarlo en efectivo, y además, no está relacionado con una
cuenta bancaria en concreto ya que los emite directamente entidades
bancarias o otros intermediadores financieros como VISA, American
Express....

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