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En el pasado, si quería obtener una calificación, o incluso simplemente aprender algo nuevo, se
inscribía en un curso en una institución física, pagaba las tarifas correspondientes y luego asistía
físicamente a la clase. Eso fue hasta que comenzó la revolución del aprendizaje en línea.
El año pasado, el mercado de e-learning valió una enorme suma de $ 166.5 mil millones. Se estima
que esto crecerá a $ 255 mil millones en 2017. Su creciente valor financiero solo se corresponde
con la creciente cantidad de estudiantes que eligen seguir un curso en línea.
En la última Encuesta Global Shapers de 25,000 jóvenes de todo el mundo, el 77.84% de los
encuestados informó haber tomado cursos en línea en el pasado. Entonces, ¿el aprendizaje en
línea es el futuro de la educación?
Comencemos primero mirando qué es exactamente. La educación en línea toma dos formas
principales. El primero: cursos de crédito donde los estudiantes matriculados en educación
terciaria toman clases en línea ofrecidas por el hogar u otras instituciones de educación superior
para obtener crédito. Algunos casos conocidos incluyen el MIT OpenCourseWare y el aprendizaje
en línea de Harvard.
En la Encuesta Global Shapers, cerca de la mitad (47.79%) de los encuestados dijeron que estarían
dispuestos a obtener la certificación para ciertas habilidades, incluida la certificación en línea, una
vez que hayan comenzado sus carreras laborales. Esto nuevamente habla del gran potencial y
mercado para la educación en línea.
Problemas de dientes
También se ha dicho que el aprendizaje en línea priva a los estudiantes de algunos de los
beneficios de estar en un aula, como la interacción profesor-alumno, así como otras cosas, como
una conexión a Internet confiable y suministro de electricidad.
Superando los desafíos en el aprendizaje en línea
En general, ese progreso parece haber aliviado las dudas sobre la calidad de la enseñanza, y el
40.56% de los encuestados en la Encuesta Global Shapers dijo que la educación en línea es tan
fuerte como el aprendizaje tradicional en un aula, con otro 11.76% que dijeron que no sabían.
La madurez de la tecnología educativa también ha permitido que la educación en línea sea más
manejable y accesible que nunca. Todo lo que un posible estudiante necesita es una computadora,
una conexión a Internet y algunas habilidades básicas de TI.
Además, algunos sostienen que la educación en línea ha ayudado significativamente a hacer que la
educación sea más accesible, logrando así el objetivo de "educación para todos", un tema que se
ha convertido en un mandato global desde la década de 1990. Si bien un gran número de países
han logrado un progreso significativo en la provisión de educación básica a todos los ciudadanos,
todavía hay demasiadas personas, a menudo viviendo en áreas remotas, que no pueden acceder a
la educación.
Pero con un número cada vez mayor de "internautas" en las zonas rurales de muchos países en
desarrollo, la educación en línea podría utilizarse para llegar al último grupo de ciudadanos sin un
acceso adecuado a la educación y, por lo tanto, cumplir el Objetivo de Desarrollo Sostenible 4 con
respecto a una educación de calidad.
Sin lugar a dudas, con la difusión aún más amplia de la tecnología y la profundización del mandato
global de la educación para todos, el potencial de la educación en línea para convertirse en
complementario, o en algunos casos alternativos, a la educación tradicional no puede pasarse por
alto.
En lugar de preocuparse si la educación en línea puede ser tan buena o no como los formatos más
tradicionales, quizás deberíamos centrarnos en cómo podemos usarla para brindar educación de
calidad a las personas de todo el mundo, particularmente a los pobres y desatendidos.
Esta no será una tarea fácil: la educación en línea tiene una gran necesidad de regulación. Los
asuntos pendientes incluyen la cuestión de la acreditación y el control de calidad. Esto se vuelve
aún más complicado si se consideran las dimensiones internacionales. Durante años, el crédito
transfronterizo o la acreditación de títulos ha sido un problema importante para varios sistemas
educativos. La flexibilidad del aprendizaje en línea solo lo hará más difícil.
Los VLE son espacios virtuales que los maestros y los estudiantes pueden usar para presentar y
compartir recursos y actividades e interactuar entre ellos. Estas plataformas se pueden usar para
enseñar un curso completo en línea o como una función de apoyo para cursos presenciales. Los
VLE proporcionan un medio para gestionar la experiencia de aprendizaje, comunicar la experiencia
de aprendizaje prevista y facilitar la participación de tutores y alumnos en la experiencia (Sneha y
Nagaraja, 2013). Su objetivo principal es facilitar, motivar y proporcionar experiencias de
aprendizaje que van más allá del aula. Autores como Barker y Gossman (2013) afirman que los VLE
cuentan con un amplio espectro de investigaciones que muestran impactos positivos en diferentes
contextos (p. 22).
Los VLE disponibles para los estudiantes para este proyecto fueron Edmodo, Schoology y
Uscovirtual. Los dos primeros se han ganado una reputación mundial como entornos de
aprendizaje en línea de acceso abierto, mientras que el último es un VLE de acceso cerrado
utilizado en la institución pública objetivo del estudio. Estas tres plataformas han demostrado ser
entornos de aprendizaje seguros sobre las experiencias de enseñanza de los investigadores. La
mayoría de los docentes del programa de formación docente y los encuestados para este estudio
han utilizado estas plataformas en diferentes momentos a lo largo de los años y afirman que su
experiencia en términos de beneficio pedagógico, ventajas tecnológicas y practicidad ha sido
positiva. Ningún maestro ha informado de ningún daño causado por el uso de los VLE
mencionados anteriormente.
Sin embargo, a pesar de los muchos beneficios que un VLE puede brindar a maestros y
estudiantes, hay voces que no favorecen la implementación de estas plataformas en el proceso
educativo. Algunos consideran los VLE como una pérdida de tiempo, otros como un recurso que
no ofrece un valor agregado al proceso de enseñanza-aprendizaje, mientras que otros van más allá
al afirmar que este tipo de tecnología hace poco para estimular el aprendizaje de los estudiantes.
A este respecto, Godwin-Jones (2012) afirma: "Es poco probable que los VLE sean muy atractivos o
estimulantes para los estudiantes porque están muy alejados del mundo en línea vibrante y
siempre cambiante en el que nuestros estudiantes están completamente involucrados" (p. 6) .
Walker y White (2013) van más allá al afirmar que la naturaleza de los VLE, siendo más dirigidos
por la institución que por los docentes, "podría ser una de las razones por las cuales muchos
docentes no se involucran completamente con todas las instalaciones que oferta "(p. 143).
Por lo tanto, para confirmar el impacto, ya sea positivo, negativo o inofensivo, de implementar un
VLE en un aula EFL en el contexto de una universidad pública colombiana, se han establecido los
siguientes objetivos específicos: analizar las percepciones de los estudiantes sobre el uso de un
VLE en su proceso de aprendizaje de idiomas; identificar las ventajas y desventajas de usar un VLE
tanto desde la perspectiva del estudiante como de los maestros; analizar las actitudes de los
estudiantes mientras trabajan en el VLE; para identificar y describir factores extraños que pueden
fomentar u obstaculizar la implementación de un VLE; y finalmente, determinar la viabilidad de
implementar un VLE en un curso de EFL.
Revisión de literatura
Las construcciones teóricas que respaldan este estudio se basan en autores como Dudeney &
Hockly (2007), Green, Brown & Robinson (2008), Walker & White (2013) y Ayres (2002), en lo que
respecta a la conceptualización de VLE y su papel en la educación, los enfoques de aprendizaje de
idiomas asistido por computadora (CALL), aprendizaje de idiomas mejorado por tecnología (TELL) y
aprendizaje de idiomas asistido por dispositivos móviles (MALL), y la revisión de diferentes
estudios de investigación en estos campos.
Tanto los maestros como los estudiantes de idiomas deben ser capaces de interpretar y producir
textos que contengan imágenes y palabras. Argumentamos que esto implicaba enseñar un nuevo
tipo de "alfabetización", y que el papel del maestro podría ser especialmente el de promover el
análisis crítico de dichos textos. (pág. 92)
Según Molnar (1997), Donald Bitzer introdujo por primera vez las computadoras en el campo de la
educación en 1959 a través de un proyecto llamado Lógica Programada para Operaciones de
Enseñanza Automática (PLATO). Fue un proyecto a gran escala creado en la Universidad de Illinois
e implementado en algunas escuelas y colegios en todo Estados Unidos. Molnar describe la
transición histórica de las computadoras en la educación como originalmente utilizada para
operaciones básicas en varias disciplinas y luego extendida a procesos de investigación. Molnar
(1997) afirma que en 1963 John Kemeny y Thomas Kurtz otorgaron a las computadoras una
función más académica mediante el desarrollo de un lenguaje de computadora versátil, BASIC, que
permitió la creación de materiales de instrucción basados en computadora para ser utilizados en
entornos educativos.
Sin embargo, no fue hasta finales de los años setenta que el costoso sistema de tiempo
compartido se cambió a la opción de menor costo de las microcomputadoras, lo que resultó en el
nacimiento de la computadora personal. Esto permitió un crecimiento significativo en el uso de
computadoras en hogares y oficinas, lo que a su vez aumentó la alfabetización tecnológica de las
personas.
Hoy en día, existe una conexión más estrecha con la información y el conocimiento resultante del
acceso instantáneo a inmensas cantidades de datos omnipresentes. Sin embargo, estas máquinas
son inútiles si no van acompañadas de una aplicación significativa para mejorar la educación,
específicamente en el ámbito de ayudar a los estudiantes a aprender mejor, más rápido y de
manera más eficiente. Esos deseos nos han llevado a una nueva perspectiva sobre el aprendizaje a
través de Internet, que ha evolucionado a partir de otros enfoques importantes en la enseñanza y
el aprendizaje de idiomas.
"El advenimiento de los dispositivos portátiles basados en computadora dio lugar al aprendizaje de
idiomas asistido por dispositivos móviles (MALL) tal como lo conocemos hoy" (Burston, 2013, p.
157). Según el autor, MALL se ha centrado en el uso de tecnologías como diccionarios electrónicos
de bolsillo, asistentes digitales personales (PDA) y reproductores de MP3, entre otros. Las nuevas
formas de comunicación basadas en la comunicación síncrona y asíncrona en línea (Facebook,
correo electrónico, Skype, WhatsApp, Line, etc.) a través de los teléfonos inteligentes han tenido
un impacto considerable en la forma en que los humanos interactúan y se comunican (Ngwenya,
Annand y Wang, 2004; Chen, Liu & Wong, 2007; Murphy, 2009). Para algunas personas, estos
avances se consideran una amenaza poco convencional, poniendo en riesgo el paradigma
tradicional de comunicación social e interacción durante esta nueva era digital en la educación
(Siemens, 2004; Selber, 2004; Rose & Meyer, 2002).
Sin embargo, estos cambios han sido inevitables en las últimas décadas debido al advenimiento de
las nuevas tecnologías y su penetración en todos los aspectos de la vida. Es por eso que este
cambio ha mejorado la adaptabilidad específicamente de los maestros que constantemente
piensan en cómo ayudar a los estudiantes a tener éxito en su proceso de aprendizaje. Estos
maestros han llegado a comprender que "los jóvenes de hoy se comunican con amigos a través de
teléfonos celulares, correo electrónico, mensajería instantánea, blogs y salas de chat. Los
proyectos que involucran la comunicación a través de la web, en forma de un sitio web,
aprovechan este interés en la comunicación" (Green, Brown y Robinson, 2008, p. 13). Los
maestros deben aprovechar tanto la experiencia tecnológica como la emoción que los estudiantes
traen consigo para aprender de ellos y conectar el uso de la tecnología con su enseñanza (Walker y
White, 2013).
No hace falta decir que las computadoras y otros dispositivos tecnológicos de hoy en día son
instrumentos fundamentales a través de los cuales los alumnos pueden acceder al conocimiento
en cualquier momento y en cualquier lugar. Como sugieren Solomon y Schrum (2010), "las
aplicaciones Web 2.0 están reemplazando y mejorando el acceso de los estudiantes a la
información, las comunicaciones y las colaboraciones; y algunos distritos se están moviendo a la
escuela virtual" (p. 167). Los VLE, entonces, constituyen uno de los caminos recomendados para
tales propósitos.
Un VLE es un sistema en línea que comprende una gama de herramientas para apoyar y gestionar
el aprendizaje (JISC, 2010). Green, Brown y Robinson (2008) se refieren a los sistemas de gestión
de cursos y gestión de aprendizaje (CMS / LMS) como "paquetes de software que permiten a un
instructor impartir partes o un curso completo a través de un entorno basado en la Web" (p. 17) .
Como sugieren estos autores, los VLE desempeñan el papel de apoyar la instrucción al permitir
que los maestros seleccionen y usen diferentes recursos y aplicaciones para revisar el contenido
del curso. CMS y LMS se han utilizado indistintamente para describir un lugar de reunión virtual
para maestros y estudiantes. Dudeney y Hockly (2007) los retratan como "plataformas basadas en
la web en las que se pueden almacenar los contenidos del curso" (p. 137). Un "VLE le permite
crear cursos en línea e inscribir a los estudiantes en ellos; dentro de los mismos cursos puede
combinar varios recursos con elementos más interactivos, como cuestionarios, cuestionarios ..."
(Dudeney & Hockly, p. 153). Por ejemplo, los maestros pueden usar el chat para comunicarse
directamente con sus alumnos o enviar un mensaje, y si desean interactuar con sus alumnos,
pueden usar Skype o videoconferencias para organizar una reunión. Estas aplicaciones son
ejemplos de cómo las herramientas externas se pueden vincular a un VLE como repositorio.
Los VLE pueden ser uno de dos tipos. Por un lado, un VLE puede consistir en software vendido por
una compañía a una institución educativa, con el maestro siguiendo las actividades y recursos
cargados. Por otro lado, el profesor puede configurar un VLE dentro del software libre. En otras
palabras, como lo expresó Walker y White (2013), el primero está más dirigido por la institución,
mientras que el segundo está dirigido por maestros. Para los maestros que pueden considerar que
el uso de un VLE requiere mucho tiempo porque tienen que adaptar las actividades de VLE al
contenido del curso y proporcionar comentarios personalizados a los estudiantes, el tipo de VLE
dirigido por la institución podría ser una opción preferida; mientras que para aquellos a quienes
les gusta crear sus propias tareas y jugar con aplicaciones tecnológicas, el VLE dirigido por un
maestro podría ser la opción. "Esto, por supuesto, involucra a los maestros en más trabajo y puede
requerir cierta experiencia tecnológica, a diferencia de los VLE institucionales que lo hacen todo
por usted" (Walker & White, 2013, p. 143).
Sin embargo, mientras que algunos maestros consideran que los VLE son fascinantes y
significativos, otros los consideran desafiantes e incluso incómodos. Algunos maestros pueden
temer exhibir una debilidad tecnológica percibida cuando usan la plataforma VLE frente a los
estudiantes que podrían tener más conocimientos digitales. Como lo expresó Walker y White
(2013), "en la actualidad, por supuesto, debido a las diferencias de edad, la mayoría de los
profesores universitarios, como la mayoría de los maestros de escuela, son 'inmigrantes digitales' y
la mayoría de los estudiantes son 'nativos digitales'" (p. 142) . Esta categorización ha sido
ampliamente descrita en los campos de CALL y el aprendizaje de idiomas potenciado por la
tecnología (TELL), que también representan claramente los conflictos que se cruzan en el camino
de las iniciativas educativas con la intención de promover un enfoque de enseñanza basado en la
tecnología.
Los dispositivos móviles están equipados con aplicaciones sofisticadas que pueden facilitar y hacer
más efectivo el aprendizaje de un idioma extranjero. Como mínimo, su portabilidad permite a los
estudiantes estar más en contacto con el idioma que están aprendiendo, incluso en circunstancias
que no eran posibles con las computadoras personales. Por lo tanto, los profesores y los
estudiantes están encontrando un camino complementario para el aprendizaje en MALL. Como
Stockwell y Hubbard (2013) declararon, "el aprendizaje de idiomas móvil es un campo que está
madurando rápidamente, y para este fin, ha aparecido un creciente cuerpo de investigación que
destaca las diversas formas en que los dispositivos móviles pueden usarse en la enseñanza y el
aprendizaje de idiomas "(p. 2).
MALL, como parte del campo más amplio de CALL o TELL, ha contribuido a forjar caminos para el
aprendizaje de idiomas de formas que tal vez no reemplacen el trabajo de los maestros en el aula,
sino que lo complementen de manera significativa. El uso constante de dispositivos móviles por
parte de nuestros jóvenes y estudiantes, e incluso por nosotros, constituye una realidad que
maestros e investigadores deben reconocer para encontrar su viabilidad dentro del entorno
educativo. Algunos estudios de investigación sobre el uso de computadoras y teléfonos móviles
pueden arrojar luz sobre su practicidad y efectividad.
Estudios sobre las opiniones y actitudes de los estudiantes hacia el uso de la tecnología educativa.
La combinación de texto, audio y video hacen del multimedia un formato excelente para
materiales de aprendizaje de idiomas y han dado lugar al nacimiento de una industria en
aprendizaje asistido por computadora (CAL). La disponibilidad de materiales de video digital para
la computadora ha agregado una nueva dimensión al uso del aprendizaje de idiomas asistido por
computadora (CALL) y es una parte cada vez más importante del proceso de aprendizaje de
idiomas. (pág. 256)
A pesar de los beneficios que el uso de la tecnología puede aportar al campo de la enseñanza y el
aprendizaje de idiomas, también hay opiniones y reacciones que pueden no respaldar dichos
beneficios. Es fácil pensar que los estudiantes pueden recibir el uso de la tecnología con
entusiasmo, ya que ya están acostumbrados a lidiar con dispositivos digitales en sus rutinas
diarias. Como afirman Dudeney y Hockly (2007), "los alumnos más jóvenes están creciendo con la
tecnología y es una parte natural e integrada de sus vidas" (p. 7). Los autores continúan apoyando
la existencia de la brecha digital entre los nativos digitales (aquellos que crecieron usando
tecnología) y los inmigrantes digitales (aquellos que han llegado tarde al mundo de la tecnología),
un tema discutido en repetidas ocasiones hoy. Se establece otra división entre los tecnófobos y los
tecnófilos, es decir, aquellos que tienen miedo de usar la tecnología y aquellos que están ansiosos
por usarla. Otra división que vale la pena mencionar incluye la imposibilidad de que algunos
alumnos tengan acceso a tecnologías modernas, ya sea por razones económicas o culturales. A
pesar de pertenecer a una era de alta tecnología, algunos estudiantes y maestros no tienen las
mismas oportunidades para acceder a los diferentes dispositivos tecnológicos disponibles para
tantos jóvenes en la actualidad. Las líneas mencionadas se han dibujado para describir la brecha
que se encuentra comúnmente entre las competencias digitales de los maestros y los estudiantes.
Sin embargo, los sentimientos de renuencia y miedo de los estudiantes hacia las tecnologías
educativas también han sido evidentes a través de diferentes estudios. En un estudio sobre las
actitudes de los alumnos hacia el uso de CALL, cuando se les preguntó a los alumnos sobre su
modo preferido de aprender inglés, un porcentaje significativo de encuestados favoreció la
enseñanza en el aula versus la informática (Ayres, 2002, pp. 246-247) . En el estudio de Simsek
(2008), los participantes expresaron su preferencia por los exámenes con lápiz y papel en
comparación con los exámenes en línea. Argumentaron que los exámenes en línea les causaban
mayor ansiedad, eran más difíciles y no proporcionaban muchos comentarios. Del mismo modo,
en el estudio de Ushida (2005), los estudiantes mostraron un alto nivel de ansiedad durante sus
cursos a través del proyecto Language Online (LOL) de la Universidad Carnegie Mellon, debido
quizás a "la falta de familiaridad con el entorno de aprendizaje LOL específico" (p. 66) . El hecho de
que los estudiantes estuvieran acostumbrados a un tipo diferente de aprendizaje y comunicación
afectó su motivación, al menos en la primera parte del proceso de investigación. El autor continúa
afirmando:
Cursos como LOL pueden dificultar el estudio regular para los estudiantes que no pueden dirigir
sabiamente sus propios procesos de aprendizaje. Para decirlo de otra manera, los cursos de LOL
pueden ofrecer flexibilidad en términos de ritmo de aprendizaje y cómo aprender; Sin embargo, al
mismo tiempo, no todos los estudiantes pueden aprovechar ese entorno de aprendizaje y pueden
tener dificultades para gestionar su propio aprendizaje. (pág. 69)
Como se dijo anteriormente, hay manifestaciones positivas y negativas con respecto al uso de la
tecnología en el aprendizaje de idiomas. Para la implementación de MALL, por ejemplo, la
afirmación de Stockwell y Hubbard (2013),
La investigación en su mayor parte arroja una luz muy positiva sobre el potencial del papel que
pueden desempeñar los dispositivos móviles. Al mismo tiempo, sin embargo, también ha habido
indicios de varias áreas que ciertamente merecen consideración en su implementación (p. 2).
Los resultados del presente estudio confirmarán o complementarán algunas de las
manifestaciones mencionadas anteriormente.
METODOLOGÍA
Diseño de la investigación
Por lo tanto, resultará un texto que describe las percepciones del uso del VLE y las TIC, así como
sus actitudes al interactuar con la tecnología. Se utilizarán estadísticas descriptivas e instrumentos
de investigación cualitativa para dar sentido a las preguntas o hipótesis aquí establecidas.
Instrumentación
Cuestionarios de entrada
Tanto los docentes como los estudiantes completaron una encuesta estructurada que indagó
sobre su nivel de competencia digital, opiniones sobre el uso de las TIC en la escuela y la
experiencia con VLE y diferentes aplicaciones tecnológicas. Se administró una encuesta por
computadora de diez preguntas a los cinco maestros al comienzo del proceso. Asimismo, se
administró una encuesta en papel de trece preguntas a los estudiantes. La limitación de tiempo
fue la única razón para no transferir las encuestas de los participantes a una versión de
computadora. Las encuestas se estructuraron con preguntas de opción múltiple, lo que significaba
que los encuestados no tardaron más de diez minutos en completarlas.
Estos formularios contenían cuatro secciones que organizaban lo que observaban y describían los
asistentes de investigación: recursos del aula, el maestro, los estudiantes y el uso del VLE. Se
asignaron dos asistentes a cada grupo para que pudiéramos tener diferentes perspectivas de los
procesos y elementos observados, proporcionando así una mayor validez a los resultados. Para
mejorar la validez y confiabilidad, Fraenkel, Wallen & Hyun (2012) sugieren el procedimiento de
"verificar las descripciones de un informante de algo (una forma de hacer las cosas o una razón
para hacer algo) contra las descripciones de otro informante de la misma cosa" ( p. 458).
Los siete grupos fueron visitados cada dos semanas, lo que resultó en un total de
aproximadamente 45 visitas de observación y 90 formularios de observación completos.
Encuestas rápidas
Esta encuesta de cinco preguntas siguió una estructura de escala tipo Likert y se administró al azar
a cinco participantes al final de cada clase de inglés que visitaron. La encuesta preguntó a los
participantes sobre sus opiniones sobre las actividades basadas en VLE, las aplicaciones
tecnológicas, las condiciones del laboratorio de computación y toda la lección. Este instrumento
pretendía verificar las respuestas de los participantes contra las observaciones de los
investigadores. Se administraron un total de 175 encuestas rápidas durante el primer semestre del
año académico.
Cuestionarios de salida
Participantes
Alrededor de 210 estudiantes de siete cursos de inglés institucional (IEC) diferentes participaron
en este estudio, así como los cinco instructores para esos cursos. Dos profesores impartieron dos
cursos diferentes. Estos IEC corresponden a cursos de inglés ofrecidos como requisito de
graduación para estudiantes de diferentes programas de pregrado en una universidad pública
colombiana. Esta muestra de conveniencia se eligió en función de las características que tenían los
profesores de estos cursos. Primero, se envió una invitación con una descripción general del
estudio a unos 40 docentes. Diez maestros aceptaron la invitación para participar, pero después
de una discusión adicional sobre los detalles y las expectativas del proyecto, solo cinco fueron
finalmente seleccionados. El principal requisito para participar era demostrar, a través de una
entrevista y la revisión de las credenciales formales de instrucción, un alto nivel de competencia y
experiencia en TIC con el uso de un VLE.
En cuanto a la distribución de los sexos de los estudiantes participantes, 53.7% de ellos eran
mujeres y 46.3% hombres. Con respecto a las edades, el 56,7% tenía entre 21 y 25 años, el 37,8%
tenía entre 15 y 20 años, el 3% tenía entre 26 y 30 años, el 1,2% tenía entre 31 y 35 años y el 1,2%
tenía más de 35 años.
Consideraciones éticas
Los datos contenidos en los cuestionarios de entrada para maestros y estudiantes, formularios de
observación, encuestas rápidas, cuestionarios de salida y las narraciones fueron revisados para
corregir inconsistencias. Luego, procedimos a seguir el modelo propuesto por Creswell (2009) que
consiste en "organizar y preparar los datos para el análisis, leer todos los datos, codificarlos,
interrelacionar e interpretar temas y descripciones, e interpretar los significados de los temas "(p.
185).
Se utilizó la triangulación metodológica para analizar los datos. Esta triangulación permitió
contrastar la información contenida en cada uno de los instrumentos y así revelar posibles
hallazgos a la luz de los problemas analizados a través de la pregunta de investigación y los
objetivos específicos.
Algunos datos se presentan a través de puntajes y porcentajes brutos, gráficos de barras, gráficos
circulares y descripciones. Por lo tanto, los datos se sintetizan por medio de temas que de alguna
manera se extrajeron deductivamente tanto de la pregunta de investigación como de los objetivos
específicos.
RESULTADOS
Las respuestas más significativas según la naturaleza del estudio fueron seleccionadas para ser
representadas.
La Figura 1 muestra los resultados del cuestionario de ingreso de los estudiantes, que se
administró al comienzo del proceso de investigación. Este instrumento tenía como objetivo
identificar las percepciones que los estudiantes trajeron con respecto a la tecnología y su uso en
su proceso de aprendizaje de idiomas. Se seleccionaron tres preguntas de este instrumento.
Como es de esperar, los estudiantes calificaron su competencia digital o informática como media o
alta, siendo el medio el que tiene el porcentaje más alto (ver Figura 2).
Dado que este instrumento se administró una vez que se completó el proceso de investigación, se
seleccionaron más preguntas para describir el impacto de la implementación de un VLE en las
opiniones y actitudes de los estudiantes en una clase de EFL.
Figura 4: ¿Cuál de las siguientes afirmaciones describe mejor lo que Internet significa para usted?
En comparación con los resultados del cuestionario de ingreso, el porcentaje de estudiantes con
una opinión positiva de Internet (Figura 4) aumentó al 96%. Solo el 2% de los participantes todavía
lo consideraban un recurso inútil, abrumador o confuso.
Figura 5: ¿Cómo te sentiste con respecto al uso de un VLE en tus clases de inglés?
Como es de esperar, los estudiantes calificaron su competencia digital o informática como media o
alta, siendo el medio el que tiene el porcentaje más alto (ver Figura 2).
Dado que este instrumento se administró una vez que se completó el proceso de investigación, se
seleccionaron más preguntas para describir el impacto de la implementación de un VLE en las
opiniones y actitudes de los estudiantes en una clase de EFL.
Figura 4: ¿Cuál de las siguientes afirmaciones describe mejor lo que Internet significa para usted?
En comparación con los resultados del cuestionario de ingreso, el porcentaje de estudiantes con
una opinión positiva de Internet (Figura 4) aumentó al 96%. Solo el 2% de los participantes todavía
lo consideraban un recurso inútil, abrumador o confuso.
Figura 5: ¿Cómo te sentiste con respecto al uso de un VLE en tus clases de inglés?
Muy pocos estudiantes (4%) expresaron sentimientos de desmotivación y desilusión (Figura 5). La
mayoría de los estudiantes expresaron un sentimiento de satisfacción (93%), con notas de
observación de clase escritas por un asistente de investigación para apoyarlo: "Los estudiantes se
entusiasman cuando trabajan con la plataforma".
La Figura 6 muestra que a pesar del hecho de que un gran porcentaje (61%) de estudiantes tuvo
una experiencia satisfactoria con el VLE, una minoría significativa (30%) de los estudiantes mostró
cierta insatisfacción debido a problemas técnicos al usar el VLE, como la conectividad lenta ,
recursos insuficientes, sin conexión a algunos sitios web, y similares. El siguiente comentario
respalda esta última afirmación: "La conexión a Internet es lenta, lo que causa una pérdida de
tiempo en el desarrollo de actividades de clase".
El número de estudiantes que consideraban su competencia con el VLE como alta disminuyó en
comparación con el cuestionario de ingreso. La Figura 7 muestra que el 8% de los estudiantes
expresaron una nueva categoría de respuesta: "baja competencia".
Figura 8: ¿Le gustaría que los maestros incluyeran un VLE en sus clases?
Un número significativo de estudiantes sugirió incluir un VLE en sus clases (Figura 8). Sin embargo,
todavía había un buen porcentaje de la muestra que estaba indeciso sobre el uso de un VLE o
sugería no incorporarlo en clase.
Los estudiantes mostraron una amplia gama de comportamientos durante las lecciones basadas
en VLE. Estos comportamientos fueron explícitos a través de acciones y comentarios, como se
muestra en la Figura 9. Las categorías que describen las actitudes de los estudiantes al usar el VLE
se establecieron previamente en el formulario de observación de clase utilizado para el presente
estudio. Los diferentes descriptores se enmarcaron dentro de tres categorías principales: el
maestro, los estudiantes y las condiciones tecnológicas (VLE incluido).
Con respecto a las actitudes de los estudiantes, se observó que a menudo usaban su experiencia
previa como base para un nuevo aprendizaje. También mostraron nuevas habilidades y
comprensión. Parecían utilizar las diferentes TIC del VLE de manera efectiva y creativa. El 26% de
los estudiantes tuvo dificultades con algunas aplicaciones digitales. Aunque los estudiantes no
usaron mucho el L2 para profundizar la comprensión, las preguntas que hicieron los estudiantes se
consideraron significativas. En su mayor parte, los estudiantes se mantuvieron en la tarea y la
concentración sostenida. También mostraron orgullo y compromiso durante todo el proceso. Sin
embargo, algunas reacciones negativas durante este proceso también fueron evidentes en
términos de entusiasmo, concentración, competencia tecnológica y articulación entre el
aprendizaje anterior y el nuevo. Un claro aspecto negativo que se representa en el gráfico anterior
es el tiempo de llegada a clase. Se puede argumentar que, dado que las lecciones de VLE siempre
tuvieron lugar en el laboratorio de computación, los estudiantes pueden haber visto esto como
una clase más divertida e informal, lo que resulta en tasas más altas de tardanzas.
Encuesta rápida
La Figura 10 muestra los resultados de una encuesta de opinión rápida que se realizó. Contiene las
respuestas de 163 encuestas completadas después de cinco sesiones de laboratorio. Los
participantes respondieron cinco preguntas específicas relacionadas con su experiencia después
de haber trabajado con el VLE en su clase de inglés.
Para el 83.3% de los participantes, "Las aplicaciones digitales y VLE utilizadas en el desarrollo de las
actividades en el aula fueron fáciles y funcionales". El 61.36% de los participantes prefirió trabajar
con recursos tecnológicos en lugar del libro de texto. Sin embargo, es interesante observar que el
27.16% parece sentirse bien trabajando con el texto o un recurso tecnológico como un VLE. El
76.07% de los participantes declaran que "el laboratorio o las condiciones en las que se
desarrollaron las actividades de clase fueron adecuadas". Finalmente, para el 75.46% de los
participantes de la encuesta, las "actividades de VLE desencadenan la motivación de los alumnos".
A pesar de las preocupaciones expresadas por algunos estudiantes y presenciadas por los
asistentes de investigación con respecto a problemas técnicos que ocurrieron con los recursos del
laboratorio y la conectividad a Internet, hubo un consenso significativo en términos de condiciones
de aprendizaje favorables. Aunque la cantidad de computadoras en el laboratorio no era suficiente
para el tamaño de los grupos, Internet no siempre se conectaba o, a veces, era muy lento, un
número significativo de participantes expresó una opinión positiva sobre las condiciones del
laboratorio, la calidad de las actividades y impacto del VLE en la motivación.
Narraciones de los profesores
Los maestros expresaron que el uso de la plataforma en línea fue beneficioso, enriquecedor y
práctico para los estudiantes (ver Figura 11). Por otro lado, hubo un maestro que calificó esta
experiencia como decepcionante por la forma en que dirigía la plataforma en línea, a la que llamó
"demasiado conductista".
Las respuestas de los docentes destacaron el beneficio del trabajo diferenciado, que es una
ventaja que las plataformas en línea ofrecen a los estudiantes. Este tipo de proceso permite a los
participantes trabajar a su propio ritmo. También se mencionó el beneficio de tener una variedad
de actividades y un tipo diferente de ambiente de aprendizaje. Como se ve en el gráfico, las
respuestas restantes destacaron aspectos como la comunicación, la flexibilidad con los plazos de
asignación, la estimulación del aprendizaje y cómo el VLE complementa positivamente la clase (ver
Figura 12).
Un porcentaje muy alto de respuestas con respecto a las actitudes de los estudiantes fue positivo,
con un 95% respondiendo afirmativamente cuando se les preguntó si los estudiantes tuvieron una
reacción positiva al uso de un VLE en la clase (ver Figura 14). Los maestros declararon que usar un
VLE fue motivador y ayudó a los alumnos a mejorar su rendimiento.
Como se indicó anteriormente, las recomendaciones para mejorar la clase usando VLE se
correlacionan o apoyan las opiniones y actitudes de los estudiantes hacia la implementación de
VLE (Figura 15). También proporcionan información significativa sobre las ventajas y desventajas
del proceso. La sugerencia principal tiene que ver con persuadir a los docentes para que usen
tecnología (22.2%) siendo todos los demás aspectos recomendados en proporción similar (11.1%).
CONCLUSIONES
Cuando se trata de las percepciones de los estudiantes sobre el uso de un VLE en su proceso de
aprendizaje de idiomas, se puede concluir que la cantidad de estudiantes que consideraron el uso
de Internet y los recursos que vienen con él como inútiles, confusos y abrumadores disminuyó
significativamente después de ganar experiencia con eso. Estos estudiantes ven el uso de un VLE
como beneficioso y encuentran que las aplicaciones utilizadas durante el proceso son fáciles y
funcionales. Como es de esperar, la mayoría de los estudiantes prefieren usar recursos de TIC en
lugar del libro de texto tradicional; Sin embargo, todavía hay una parte de la población estudiantil
que, a pesar de la aparición de tecnologías modernas, no está convencida de esta opción. La
exposición a la tecnología educativa, no la misma tecnología que usan en su vida diaria, de alguna
manera alentó a los estudiantes a creer que su competencia digital no era tan alta como
declararon al comienzo del estudio. Del mismo modo, la competencia tecnológica de su maestro
no fue tan baja como la percibieron originalmente los estudiantes. Aquellos estudiantes que han
sido conocidos como nativos digitales pueden ser hábiles para usar los dispositivos y las
aplicaciones que usan con frecuencia para la comunicación o el entretenimiento, pero luchan con
las herramientas y los programas que tienen más fines académicos. No obstante, los estudiantes
sugieren que los maestros deberían incluir tecnología en clase.
Como ventajas, se encontró que el uso de un VLE permite una instrucción diferenciada, es decir, la
posibilidad de que los "maestros modifiquen de manera proactiva los planes de estudio, los
métodos de enseñanza, los recursos, las actividades de aprendizaje y los productos de los
estudiantes para abordar las diversas necesidades de los estudiantes y pequeños grupos de
estudiantes para maximizar la oportunidad de aprendizaje para cada estudiante en un aula
"(Bearne, 1996; Tomlinson, 1999, p. 121). Tener una gran cantidad de actividades y recursos en el
VLE es como tener la oportunidad de acceder al aprendizaje a través de canales multimodales
24/7. Del mismo modo, los plazos de asignación se pueden establecer de manera flexible más allá
de las limitaciones de tiempo de clase, lo que puede ser de gran beneficio para algunos tipos de
estudiantes. En resumen, el VLE per se no es una panacea, pero puede ofrecer un entorno de
aprendizaje que puede complementar más perfectamente el trabajo tradicional en el aula.
Con respecto a las desventajas, se encontró que la capacidad tecnológica de algunas instituciones
educativas continúa siendo una amenaza para la implementación de un VLE en los cursos de EFL, y
la distracción causada por las redes sociales y otros sitios de entretenimiento puede presentar
impedimentos para el proceso. bien. Es responsabilidad del maestro hacer frente a estas
amenazas de una manera ingeniosa y significativa.
Con respecto a las actitudes de los estudiantes, la mayoría de los estudiantes se sintieron
motivados y entusiasmados por usar un VLE en sus cursos de EFL. El uso de un VLE de alguna
manera alentó a los estudiantes a realizar mejor sus tareas mientras les permitía ganar confianza
para desarrollar sus habilidades lingüísticas. Los estudiantes mostraron una mejora en la
participación y el comportamiento en clase; En su mayor parte, se encontraban en tareas durante
todo el proceso y tendían a conectar los antecedentes con nuevos conocimientos. Mostraron
interés en los recursos y actividades tecnológicos debido quizás a la interactividad y disponibilidad
de las tareas de aprendizaje, lo que significa que tenían acceso permanente a ellas y obtuvieron
comentarios inmediatos sobre su desempeño.
Según las opiniones de los alumnos, estas actividades promueven el desarrollo del aprendizaje
autónomo, así como una comunicación eficaz entre docentes y alumnos. A pesar de las
dificultades técnicas que mencionaron, su experiencia con el VLE fue en su mayor parte
satisfactoria, y los estudiantes estaban ansiosos por compartir nuevos conocimientos con los
demás. Además, si bien sabemos que los estudiantes en general navegan constantemente por
Internet, y al final del estudio se descubrió que el tiempo dedicado a este propósito en el hogar
aumentó aún más, la conclusión es que esto quizás se deba a las tareas de VLE asignadas por los
profesores Además, algunos estudiantes aún luchan con aplicaciones educativas que pueden
requerir habilidades diferentes a las que usan con frecuencia con dispositivos electrónicos
personales. Pero a pesar de las desventajas mencionadas anteriormente, al final, el uso de un VLE
proporcionó a los estudiantes un ambiente de aprendizaje menos estresante. Esta conclusión se
correlaciona con otros estudios, que afirman que Internet proporciona a los estudiantes medios
menos amenazantes para comunicarse, lo que resulta en un mayor compromiso, confianza,
responsabilidad (Skinner y Austin, 1999) e ingenio para hacer frente a las tareas en el VLE.
Factores extraños que pueden dificultar o fomentar la implementación de un VLE en un curso de
EFL son el uso de dispositivos digitales en clase, la competencia de los docentes en TIC, la infusión
de tecnología en las escuelas, la condición de los laboratorios y la velocidad de conexión a
Internet. Por ejemplo, algunos maestros todavía ven el uso de teléfonos móviles en clase como
una amenaza, mientras que otros pueden usarlos como un recurso valioso para el proceso de
aprendizaje L2 de los estudiantes; asimismo, el nivel de competencia tecnológica que exhiben los
maestros puede influir en los tipos de tecnologías que incorporan en su enseñanza y su tiempo de
inversión en clase. Además, la calidad de Internet o las condiciones de los laboratorios pueden
alentar o desanimar tanto a los maestros como a los estudiantes a usar un VLE y todas las
tecnologías asociadas con ellos.
Como se indicó, para algunos maestros la implementación de actividades de VLE les presentó
ciertos desafíos debido al hecho de que el número de estudiantes por curso superó el número de
computadoras en el laboratorio. A veces, dos o incluso tres estudiantes tenían que trabajar juntos
en una computadora. Además, la conexión a Internet a veces causó frustración tanto en el
maestro como en los estudiantes, lo que provocó que algunas actividades requirieran la
cancelación de la transmisión de audio o video. Estas amenazas a la implementación sin problemas
de las actividades basadas en Internet no permiten a los alumnos disfrutar de los múltiples
beneficios de las TIC, lo que afecta sus percepciones sobre el uso de la tecnología educativa.
Recomendaciones
Independientemente del bajo interés que algunos maestros puedan tener por el uso de
tecnologías modernas, estas son partes inevitables de la vida de nuestros estudiantes y, por lo
tanto, su implementación en las aulas de hoy en día se está volviendo fundamental. Como afirma
Prensky (2001), "los niños y los jóvenes son 'nativos digitales' que piensan de manera diferente a
los adultos y necesitan más contenido visual, juegos y rápidos cambios de ritmo que las
generaciones anteriores". (pág. 170). Como los maestros propusieron en sus narraciones, los
administradores escolares deben continuar abogando por la infusión de nuevas tecnologías
educativas y capacitación para su facultad, estudiantes y personal en general.
En términos de las experiencias de enseñanza y aprendizaje, el uso de teléfonos móviles, redes
sociales y aplicaciones tales como traductores y diccionarios en línea debe ser considerado por los
maestros como grandes beneficios que la tecnología aporta al proceso de enseñanza y aprendizaje
de L2. Deben servir como apoyos y complementos significativos tanto para la instrucción de los
maestros como para el aprendizaje de los estudiantes. Se recomienda que los maestros capaciten
a los estudiantes sobre las potencialidades y los mejores usos de los diccionarios en línea y otras
aplicaciones con fines pedagógicos. Esto ayudará a los maestros a enfrentar el temor anticipado de
la distracción de los estudiantes durante el uso de las nuevas tecnologías. Es quizás un proceso
gradual que puede brindar beneficios invaluables a los estudiantes de nivel 2.
La inclusión de tecnología en los cursos de inglés fue positiva y gratificante para profesores y
estudiantes por igual. Sin embargo, el uso de VLE para las comunidades de aprendizaje estaba
subexplotado. Ninguno de los resultados reunidos demostró que los VLE se utilizaron para
promover interacciones sociales con pares y redes externas, a pesar de que Edmodo y Schoology
son instrumentos que fomentan la colaboración con las comunidades de aprendizaje L2 en todo el
mundo. Por lo tanto, un VLE debe usarse más allá de la función del repositorio de contenido que la
de hacer conexiones globales.
Por último, podemos seguir hablando sobre la belleza de las tecnologías modernas, pero en última
instancia, sus beneficios dependen en parte de la inversión que los administradores universitarios
hacen en su infusión en los planes de estudio. En el caso del presente estudio, la necesidad de
nuevas inversiones es bastante evidente. La implementación y actualización de instalaciones y
recursos tecnológicos indudablemente beneficiarán a la comunidad académica. Del mismo modo,
se espera que la administración escolar y los oficiales de TI complementen la infusión de
tecnología con programas de capacitación permanentes que permitan una mejor explotación de
los recursos.
Los profesores de inglés en particular están llamados a mantenerse al día con los avances en
tecnología educativa, incluidos los VLE y las TIC, para promover caminos de aprendizaje que se
adapten mejor a las necesidades e intereses de nuestros estudiantes de la era digital. Del mismo
modo, se recomienda que los investigadores continúen profundizando en este campo para arrojar
luz sobre el gran potencial para la combinación armoniosa y fructífera de la tecnología y el
aprendizaje de idiomas.
Del mismo modo, el creciente costo de asistir a cursos en colegios y otras instituciones educativas
ya ha obligado a muchos estudiantes a ir a la educación virtual. Los costos de educación
involucrados en la escuela virtual son bastante menores, ya que no incluyen las inmensas tarifas
de cursos y los gastos de recursos entre muchos otros que a veces pasan desapercibidos. Pero con
las escuelas virtuales, la educación impartida no requiere inversiones tan altas y es una ventaja
para los estudiantes con menos privilegios que no pueden asistir a campus conocidos. El costo
involucrado en este tipo de educación a través de internet es mucho menor que el método
presencial.
Ahora, si pensamos más allá del punto de vista del estudiante, también podemos encontrar cómo
la educación virtual también es una gran ayuda para el medio ambiente. Solo piense cuántos
árboles está ahorrando al reducir el uso de papel. La cantidad de papel que necesita mientras
asiste a una conferencia en el aula es enorme y la mayoría del papel utilizado siempre termina en
el basurero. Si bien la educación virtual lo ayuda a salvar el medio ambiente y mantener sus datos
seguros en su computadora.
Las ventajas de la educación virtual son numerosas y estas son solo algunas de ellas. Siempre
debemos recordar una cosa: los beneficios de la educación virtual varían de persona a persona
según las necesidades y requisitos individuales. El gran número de estudiantes que se matriculan
en las escuelas virtuales en sí es testigo de la creciente demanda de educación virtual.