Universidad Arturo Michelena

Facultad de Ciencias Económicas y Sociales

Escuela de Psicología
Cátedra de Educación Sexual

SEXUALIDAD EN TIEMPOS DE CUARENTENA

Profesor: Jesús Olmos

Bachiller:

Borges Josiribel; C.I.: 26.186.012

San Diego, abril de 2020

 SEXUALIDAD EN TIEMPOS DE CUARENTENA

La OMS define la sexualidad como el resultado de la interacción de factores biológicos,

psicológicos, socioeconómicos, culturales, éticos, religiosos y espirituales. Aunque puede
abarcar todos estos aspectos, no es necesario que se experimenten ni se expresen
simultáneamente, pero tal diversidad de condicionantes confiere a la sexualidad de cada persona
un marcado carácter personal y específico que se manifiesta en lo que somos, sentimos,
pensamos y hacemos. La práctica sexual, además de afianzar el vínculo de pareja, favorece la
salud física al fortalecer el sistema inmunológico, disminuye la presión arterial, facilita el sueño
y funciona como analgésico.

La pandemia de COVID-19 tiene a la mayor parte del mundo practicando una estricta
higiene de manos y distanciamiento físico. Se trata de una cepa particular del virus que no había
sido identificada previamente en humanos. Por ese motivo, existe poca información sobre su
gravedad e impacto clínico, y si bien la información fresca llega a un ritmo increíble, una
recomendación médica se ha mantenido constante: la necesidad de distanciamiento físico.
Entonces, ¿dónde cae el sexo en ese espectro?

A medida que el coronavirus se ha propagado en el mundo, la manera en que las personas

tienen relaciones sexuales se ha transformado drásticamente. A juzgar por las publicaciones en
redes sociales, muchos anhelan la intimidad, mientras que otros experimentan un bajo deseo
sexual por el estrés y la ansiedad.

Unos de los principales factores de riesgo a nivel psicológico en el distanciamiento físico

son la depresión, el estrés y la ansiedad debido a que tienen un efecto negativo sobre la libido.
Algunas personas también están sin trabajo y el desempleo puede afectar el deseo sexual. El tipo
de preocupación que las personas experimentan atraviesa muchos dominios: seguridad laboral,
salud, salud de amigos y familiares, economía y la capacidad de tener acceso a atención médica,
por nombrar algunos. Adicional a ello existen aquellas parejas que, previamente a la cuarentena
están afectados por otros problemas, en concepto de aislamiento obligatorio sería ser un
detonante adicional a sobrellevar hoy en día, donde se han registrado diferentes testimonios en
redes sociales de parejas que culminan su relación en medio del confinamiento, lo que
incrementa estos factores de riesgo psicológico antes descritos.
 Sin embargo, se presentan tres posibles escenarios en el contexto de las relaciones: vivir
bajo el mismo techo con una pareja en cuarentena, permanecer en casas separadas y estar soltero.
Y esta situación no solo afecta a las parejas que están juntas en convivencia sino también a los
que por una u otra razón se quedaron atrapados en lugares distintos del mundo, provocando así
una relación a distancia obligatoria, un contexto desconocido para muchas personas y con los
cuales no han sabido lidiar.

Para Sergio Grosman, médico psiquiatra, vicepresidente del capítulo Psicoterapias de la

Asociación de Psiquiatras Argentinos (MN 77443), a las personas “la interacción social nos
nutre, las rutinas nos organizan y tenemos a la libertad en alta estima”. “Los seres humanos
somos cultura, interacción e intercambio. La limitación de estas actividades sociales nos produce
malestar que según cada persona se va a manifestar de diferentes formas. Para algunos como
irritación, aburrimiento y ansiedad, y para otros como falta de aire, sensación de encierro y
molestias corporales”.

“La epidemia de coronavirus nos lleva a replantear muchas de las prácticas sexuales,
tanto en las parejas estables, en las que recién se inician, y en aquellas personas que están solas.
Todo el espectro social se ve alterado ya que el virus se propaga por la cercanía, a través de las
gotitas respiratorias que las personas producen cuando tosen, estornudan o al hablar”, explicó en
diálogo con Infobae Walter Ghedin, médico psiquiatra y sexólogo.

Por ende, al ser tan importante la sexualidad en la vida humana, se deben tomar en cuenta
diferentes factores de protección para llevar a cabo un encuentro sexual, estos deben ser:

1. Si la pareja vive en casas separadas o es una persona soltera que busca sexo
casual, es importante realizarse la prueba del COVID-19 y esperar los 14 días de
confinamiento correspondientes al periodo de aparición de síntomas antes de tener
algún contacto físico.

2. Recurrir a la tecnología para reinventarse en el ámbito sexual y utilizar

aplicaciones que permitan un encuentro sexual placentero sin necesidad de tener
contacto físico. Así como también practicar el sexting o sexo virtual.
 3. En caso de tener contacto físico, mantener las medidas de higiene y prevención
adecuadas. Bañarse previamente, uso de preservativos y utilizar posiciones
coitales donde se evite el contacto cara a cara.

4. Para las parejas que están en convivencia se recomienda buscar juegos sexuales o
romper con la monotonía que estuvo presente durante mucho tiempo para
reinventarse en tiempos de cuarentena. Tales como, juegos de rol, auto
estimulación compartida (cumpliendo medidas de higiene), uso de videos
eróticos, fantasías sexuales, etc.

5. Fomentar el establecimiento de espacios personales para realizar cualquier

actividad individual del agrado de cada persona, así como también planificar
actividades que puedan realizar en conjunto para fortalecer la relación de pareja.

6. Si se está soltero/a, aprovechar el tiempo para redescubrirse y experimentar con su

cuerpo.

Para el Dr. Juan José Moles, psicólogo y sexólogo, “el ser humano es un ser sexuado y la
sexualidad en principio y desde una perspectiva psicofisiológica está para el disfrute, añadiendo
el componente social, para el disfrute consensuado de una sexualidad responsable. La alternativa
de realizar intimidad sexual con una pareja casual no pudiese actualmente ser una opción
recomendable por todo el riesgo que ente presente de distanciamiento social preventivo puede
originar.”

“Que el ejercicio de su sexualidad sea siempre una búsqueda de salud, nunca un motivo
de ansiedad.”

-Dr. Juan José Moles.