Sei sulla pagina 1di 23

GRUPO V PARA LOS HIPERSENSIBLES: NOGAL, AGRIMONIA, CENTAURA, ACEBO.

FLORES DE BACH PARA LA HIPERSENSIBILIDAD A LAS INFLUENCIAS E IDEAS EXTERNAS

Elaboro Gladys Galvis López


Terapeuta Floral FEMA
Tomando el aporte valioso de Terapeutas Florales y pacientes.

HIPERSENSIBILIDAD COMO ASPECTO POSITIVO

En caso de un desarrollo armónico de la sensibilidad, surge un ser humano


que está en condiciones de reaccionar ante los impedimentos que se oponen
a su autorrealización de una manera vital.
Puesto que siempre se defiende de inmediato cuando se requiere y no
permite que se acumulen en su interior las emociones negativas, es
abierto, directo y carente de falsedad, luchador franco, se lanza
abiertamente contra cualquier injusticia sin cuidarse de sí mismo.

El odio (que es el resultado de una agresión reprimida) no aparece porque


ante cualquier ataque reacciona de forma espontánea y directa, no permite
que se acumulen en su interior las emociones negativas, es abierto,
directo y carente de falsedad, no considera confabulaciones en su contra.

Defiende siempre sus derechos con naturalidad y sabe lo que le pasa.


La agresión en su caso tiene un valor lógico y natural, corresponde al
tipo del luchador franco, que se lanza abiertamente contra cualquier
injusticia sin cuidarse de sí mismo.

HIPERSENSIBILIDAD ASPECTO NEGATIVO

La sensibilidad deja de ser un aspecto positivo para convertirse en


hipersensibilidad, donde el sufrimiento y necesidades personales se
camuflan en una razón verdadera para sufrir por culpa de otros.

Aparece entonces el odio y la agresividad, como justificación al


comportamiento de estos, es entonces cuando el temperamento colérico,
falta de amabilidad, posturas negativas o destructivas, actividad
violenta, ganas de venganza, aparecen en la vida cotidiana falta de
afabilidad, enfado, ira, excitabilidad, envidia, odio, desconfianza,
celos, inhibición, miedo a los conflictos, falta de sinceridad conducta
artificiosa.
La hipersensibilidad permite que aparezcan conflictos internos secretos y
angustias, complejos psíquicos, tendencia a ocultar o fingir problemas
personales.
NOGAL

NOGAL / WALNUT

“Para aquellos que tienen ideales y ambiciones definidas en la vida y que


las están llevando a cabo, pero en algunas ocasiones están tentados de
desviarse de sus propias ideas, metas y trabajo, debido al entusiasmo, la
persuasión o las fuertes opiniones de otros. Este remedio da constancia y
protege de las influencias externas. "

PROTECCIÓN DE LAS INFLUENCIAS EXTERNAS Y AYUDA EN LOS CAMBIOS. CORTE

ORIGEN Y CUADRO DEL SINDROME NOGAL

La predisposición consiste en una gran apertura mental y emocional y en


influenciabilidad. En caso de un desarrollo armónico surge un ser humano
abierto a todo y a todos. Esto hace de él una persona agradable, de buena
fe y que no causa preocupaciones, no conoce los prejuicios ni las
desconfianzas. La mente y el alma son en él como en los pueblos
primitivos, sin estar delimitados por opiniones preconcebidas, reservas o
sistemas mentales unilateralmente racionales. Al contrario, en él se
entretejen lo racional y lo irracional, el milagro y la banalidad, el
sueño y la realidad, dando una rica imagen interna, que engloba también
las profundidades de su ser.
Donde otros sólo ven entre rendijas él contempla un panorama completo.
Vive en el espíritu del gran filósofo que expresó la quinta esencia de las
meditaciones de toda su vida con las palabras: “Sólo sé que nada sé”. Es
decir, sabe que tras toda forma banal y externa se oculta una idea de
infinita complejidad, que como hechos que aparecen de modo definitivo sólo
son instantáneas fugaces desde un ángulo visual fijo y que en todo momento
pueden ser contrarrestados o anulados desde otra perspectiva; resumiendo,
que a la conciencia humana le está vedado el conocimiento absoluto, que
para él todo es relativo y que por eso está lleno de mil posibilidades.
Con esta visión instintiva de la vida recorre su camino, tantas veces
misterioso, siguiendo sólo sus percepciones, intereses y sentimientos y de
este modo, lo mismo que el niño en el cuento, alcanza con seguridad su
meta personal. En él no hay crisis vitales con dudas sobre si mismo,
errores y confusiones pues tiene su brújula interna y cuando parece que es
demasiado influenciable, crédulo e inconsecuente, sólo es un signo de que
el observador está preso en exceso de sus propios prejuicios e ideas, que
carece de sentido de los extraordinario y maravilloso de la vida.
En condiciones desfavorables esta postura libre de prejuicios puede
convertirse en una influenciabilidad exagerada. La apertura de las
personas de tipo Nogal frente a las impresiones mentales y emocionales,
que les hace notablemente crédulos e influenciables, conduce a menudo a
que se vuelvan inseguros o se dejen desviar de su camino. Sobre todo
frente a las personas o instancias con autoridad muchas veces no logran
imponerse, a pesar de que en el fondo saben lo que quieren, quedando
entonces en situaciones o posiciones que no han deseado, como por ejemplo
en una profesión frustrante, una unión infeliz, una vivencia triste. Pero
ya que su alma sufre, reacciona con frustraciones y depresiones o llama la
atención sobre el error en forma de enfermedades, sobre todo de la piel,
del sistema linfático o del sistema hormonal.

NATURALEZA DE LA ACCIÓN DE LA ESENCIA DE NOGAL

Nogal es el remedio para la fuerza defensiva y la estabilidad interna.


Proporciona aguante contra las influencias, sobre todo cuando se inicia un
nuevo camino en la vida. Reduce la buena fe y confianza inadecuada,
refuerza la personalidad y hace posible el desarrollo o la realización de
un proyecto vital propio. Se fomentan los procesos de desarrollo naturales
en contra de las resistencias generales (entre las que se incluyen también
los condicionamientos psíquicos o morales). Se consigue la capacidad de
renunciar a viejas costumbres, de imponerse contra la presión de un
entorno incomprensivo o que sólo piensa en sus ventajas, de liberarse de
las dependencias o de modo general de ser «uno mismo".

CARACTERÍSTICAS PSICOLÓGICAS.

Nogal está relacionado con el arquetipo de "la Protección”, en el aspecto


de propiciar en cada ser "su lugar original y único", permitiendo la libre
expresión y determinación de su vida. En este sentido este complejo
psíquico cuida de cualquier influencia externa que interfiera en el
desarrollo individual.

El estado emocional de Nogal en su faceta negativa está relacionado con la


influenciabilidad, la vulnerabilidad y la sensibilidad exacerbadas.
Se ha definido a la persona tipo Nogal como segura de sí misma, de elevada
sensibilidad, con objetivos claros y abiertos a nuevos horizontes
espirituales y que no se deja influenciar con facilidad. Pero ocurre que
hay momentos en la vida en que hay que tomar decisiones trascendentales
que pueden representar una evolución personal importante. Es entonces
cuando Nogal, en su faceta negativa, se da cuenta que conserva lazos que
lo atan al pasado, como por ejemplo una relación afectiva ya agotada, un
trabajo obsoleto, etc.

Nogal es el remedio ideal para facilitar los grandes cambios para aquellas
personas que lo necesitan o que están deseando se produzcan cambios en su
vida, siendo un buen adaptador para aquellas personas que ya los hicieron
y se sienten raros, incómodos o inadaptados. Es el remedio para las
grandes decisiones que se deben tomar en la vida. Nos protege de las
influencias externas que nos intentan desviar de nuestro camino.

Todas las grandes situaciones de transformación se caracterizan por un


aumento del stress y una inestabilidad interior, que en el caso de Nogal
puede llevar a la irresolución. Es entonces el remedio que corta con esta
situación, aportando decisión y constancia.

TENDENCIAS PSICOSOMÁTICAS

Stress y problemas derivados de los cambios físicos a determinada edad o


circunstancia, tales como cambios dentales, granos de pubertad, trastornos
de la menopausia, destete de los niños, etc.

Nogal nos ayudará también a controlar los trastornos físicos que se


produzcan, ya que se han descrito en este caso dolores migratorios de
difícil tratamiento con otros sistemas terapéuticos.

Es la flor caracterológica del embarazo, ya que desde el momento de la


concepción hasta el parto la embarazada está sujeta a permanentes
transformaciones.

CARACTERÍSTICAS ESPIRITUALES

El aspecto negativo de Nogal estaría en que, aunque se trata de


personalidades abiertas a su YO Superior, reaccionan lentamente a los
dictados de éste, dejándose desviar todavía con demasiada facilidad por la
mente.

Se dice del estado Nogal negativo que guarda relación con causas que se
remontan a otras existencias: lazos kármicos no reconocidos, antiguas
decisiones erradas que ejercen una influencia auto sugestiva en un plano
inconsciente, podrían ser variadas las circunstancias. En cualquier caso
Nogal parece tener mucha relación con el concepto de Karma.

Cuando se habla de que Nogal actúa como un protector de las influencias de


otras personas o situaciones, también queda incluido, naturalmente, el
campo energético y las influencias negativas que de él puedan derivarse.
Estas circunstancias actúan desviándonos de nuestro camino y nuestra
misión en la vida o pueden retenernos prisioneros. En este sentido Bach
definió a Nogal como el "rompe hechizos" porque protege de las energías
que vienen del exterior.

Sumamente útil en etapas de cambio biológico como nacimiento, dentición,


destete, control de esfínteres, pubertad, menopausia, muerte, etc.

OBSERVACIÓNES PSICOTERAPÉUTICAS

Vida significa expansión, crecimiento y autorrealización, por ese motivo


la fuerza impulsora en nuestra vida es el deseo de desarrollar sin trabas
nuestras predisposiciones y posibilidades naturales, que de todas maneras
significa al mismo tiempo conflicto y lucha puesto que existe en todos los
seres vivos: devorar para no ser devorados.
Como seres humanos conscientes podemos, evitar los conflictos con una
visión superior, por un sentimiento humanitario limitar a lo más necesario
la lucha por la supervivencia y poner riendas adecuadas a nuestros
instintos depredadores. Sin embargo, también estamos ligados a nuestra
estructura biológica básica y seguimos siendo parte de la naturaleza que
lucha por su simple existencia.
Por supuesto que hay diferencias individuales. Mientras que una persona
se inspira sobre todo en valores morales e intelectuales, otra busca las
ventajas físicas y materiales; en la lucha por la supervivencia y la
autorrealización se protege siempre el elemento de la personalidad más
importante y si es necesario se prescinde de aquellos otros de menor
relevancia. Así, uno tira por la borda con todo realismo sus bellos
ideales por sobrevivir, mientras que otro sacrifica su cuerpo y su vida en
aras de una convicción o una moral. (Esto no debe evaluarse desde un punto
de vista moral, puesto que cada uno se realiza de modo personal y con
igual derecho.)
En esta lucha, la persona de tipo Nogal tiene las de perder, ya que su
gran infIuenciabilidad, su inocente buena fe y su incapacidad de poner
límites a sus enemigos provocan el ataque; se le empuja, influye,
convence, desvía de su meta, abusa, se le hace participar en fines ajenos,
modifica, se le provoca inseguridad o manipula, en resumen, hace de todo
menos lo que es importante y esencial para él.
Pero esto no funciona durante mucho tiempo ya que el alma, o lo verdadero
de él mismo, quiere realizarse. Por eso, y según el grado de alienación,
se generan las señales de alarma más diversas: agresiones, frustraciones,
depresiones, psicosis, neurosis, trastornos de la conducta o enfermedades
físicas. Un punto crítico lo constituyen las fases de cambio naturales (en
las que el organismo desarrollo características especiales nuevas): la
aparición de la dentadura, la pubertad, el climaterio, el nacimiento o la
muerte.
Cuantas menos perturbaciones aparezcan en el curso de los ritmos
interiores, mejor podrá desarrollar una persona sus cualidades personales
y tanto más consecuentemente podrá seguir su propio camino en la vida en
contra de todas las resistencias internas y externas, tanto mejor le irá,
tanto más sano será y tanto más humano.
La persona de tipo Nogal debería controlar por lo tanto su buena fe y
admitir sólo cuando sea lógico y necesario; debería vigilar
conscientemente su independencia y dentro de lo posible intentar seguir su
camino personal. A menudo resulta difícil ser fieles a uno mismo, pero
traicionarse sin motivo perentorio puede ser el infierno.
MENSAJE

Nogal protege no sólo contra las influencias negativas, por ejemplo las
infecciones, sino que también ayuda a completar sin perturbaciones cambios
importantes en la vida como son la dentición, la pubertad o el climaterio,
el nacimiento o la muerte.

"Está indicado para todos aquellos que tienen que decidirse a dar un paso
adelante, romper con convencionalismos obsoletos, dejar atrás viejos
limites y restricciones y empezar desde cero".

Esta transición puede resultar dolorosa psíquica y físicamente, debido a


los pequeños arrepentimientos y rupturas emocionales, todo ello producto
de viejas ataduras, asociaciones caducas y pensamientos antiguas.

AGRIMONIA
AGRIMONIA/ AGRIMONY

"Para las personas alegres, joviales y de buen humor, que aman la paz y se
afligen por las discusiones y para evitarlas consienten renunciar a muchas
cosas. Aunque generalmente tienen problemas y están atormentadas,
preocupadas e inquietas en la mente o en el cuerpo, ocultan sus
preocupaciones detrás de su buen humor y de sus bromas y son consideradas
muy buenos amigos para frecuentar. A menudo toman alcohol o drogas para
estimularse y ayudarse a soportar alegremente sus aflicciones".

TORTURA MENTAL ESCONDIDA BAJO UNA FAZ SONRIENTE. ANSIEDAD

ORIGEN Y CUADRO DEL SINDROME AGRIMONIA

En el caso del desarrollo armónico surge un ser humano que, de un modo


instintivo, evita las dolencias de todo tipo. Lo consigue de la forma más
natural que uno pueda imaginarse; calma los problemas aceptándolos como
realidad en la vida y sacando el mejor provecho de ellos. Las dolencias
surgen, en efecto, porque se ignora la realidad, se la falsea o se lucha
contra ella.
De manera espontánea, con naturalidad y no dispuesto nunca a la
confrontación, el ser humano de tipo Agrimonia, con un desarrollo
armónico, no intenta encubrir o falsificar lo desagradable ni echar a un
lado o eludir las dificultades. En los tropiezos de la vida no pierde su
camino ni se contradice; cuando ha de ser, se doblega ante la fuerza del
destino como el junco en la tormenta; elásticamente y con elegancia
natural, sin romperse ni resultar dañado.
Así pues, permanece siempre siendo el mismo; natural, sin artificialidad,
espontáneo y con alegría de vivir. Al ser su principal punto fuerte ver en
todo incluso en la desgracia aparente el lado positivo y mantenerse
instintiva mente en el lado dulce de la vida. A menudo parece como si en
el teatro de la vida interpretara el papel de quien está libre de
preocupaciones, del favorecido por la felicidad. En realidad posee también
un notable talento teatral; pero está tan arraigado en su ser que todo lo
que representa es sólo expresión de su propia predisposición alegre ante
la vida, pero no es nunca un papel ajeno y artificia; por eso, debido a
su naturalidad, su ausencia de preocupaciones, su satisfacción y su
postura optimista, es bien visto en todos sitios.

En circunstancias desfavorables su sensibilidad puede degenerar en


hipersensibilidad, su necesidad de alegría de vivir en huida de la
realidad, su capacidad de representación en falsedad.
La persona de tipo Agrimonia puede y quiere no sufrir, lo que le resulta
especialmente difícil porque su delicada sensibilidad le hace percibir
como exageradamente doloroso todo lo desagradable, de ahí que ante el
temor de sufrir, quite de su camino todo lo desagradable, todos los
conflictos y toda disputa, incluso aunque se trate en realidad sólo de
una discusión franca y sincera, si no lo consigue, simplemente ignora la
problemática y hace como si todo estuviera en orden, eludiendo la
discusión consciente con problemas, miedos y conflictos, los sustituye,
aun cuando sigan gravándole inconscientemente, por imágenes de un mundo
artificial e intacto.
Lleva la máscara del contemporáneo alegre y sin preocupaciones, se muestra
de buen humor y optimista, aunque en realidad su ánimo sea totalmente
distinto, hace chistes mientras sufre en su interior, anima a los demás
mientras que su corazón lleva ya tiempo hundido, o se interesa distendido
por la salud de su terapeuta, mientras se sabe él mismo gravemente
enfermo; como un actor en un papel falso, intenta enseñarse algo a sí
mismo y a los demás, y el rostro alegre que presenta se corresponde en
realidad con la máscara sonriente del payaso que llora.
Su divisa es “sólo eludir, no afectarse", es un ¡sonría por favor!;
simplemente no dejar ver cómo es por dentro, por supuesto, esto sólo se
consigue de manera muy superficial, pues los problemas reprimidos
constantemente corroen sus sentimientos vitales y le provocan miedos y
depresión aunque se presenta despreocupado; cuanto más intenta fingir
hacia el exterior paz y alegría, más pierde en su interior y da una
sensación tanto más artificiosa y forzada.
Con el tiempo, y a fin de conseguir al menos un alivio momentáneo, puede
caer en dependencias de esparcimiento o placer, glotonería, trabajo,
alcohol o drogas. Así como el alcohol provoca en muchas personas un típico
síndrome Agrimonia; desaparecen sus preocupaciones, se vuelven amigables y
alegres de una forma artificiosa, pero al mismo tiempo incapaz de lograr
contactos serios adquirir conocimientos o compromisos.

NATURALEZA DE LA ACCIÓN DE LA ESENCIA DE AGRIMONIA

Agrimonia, es el remedio para la naturalidad y la sinceridad. Actúa contra


la costumbre de reprimir o apartar los problemas y despierta el deseo de
tener una mayor sinceridad con uno mismo y con los demás.

Con Agrimonia se actúa de modo más franco y relajado, aunque al mismo


tiempo más capacitado para los conflictos por lo cual, 22si es necesario,
se enfrenta uno a las situaciones desagradables.
Agrimonia es una de las flores de Bach más importantes y todas las
personas la necesitamos. Debería tomarse o administrarse con toda
psicoterapia porque, reforzando la necesidad de verdad, ayuda al paciente
a conocerse mejor y a ser más abierto frente al terapeuta, gracias al
desmantelamiento de los mecanismos protectores psíquicos a que se está
acostumbrado.
Sucede con frecuencia que los miedos reprimidos se vuelven de forma
transitoria más activos y provocan una defensa inconsciente; se teme
quedar desnudo e inerte, durante esta fase es frecuente que se extravíen,
vacíen o rompan las botellitas de esencia, por supuesto “sin querer” o que
se interrumpa el tratamiento; esta reacción puede contrarrestarse con
nogal, que fortalece la auténtica personalidad, atrofiada bajo el disfraz
de agrimonia.
De manera general y con independencia del tipo de dolencia, cuando la
persona quiere minimizar o mantener en secreto sus males, con Agrimonia se
tiene una influencia positiva en todo el curso de la enfermedad al hacer
desaparecer posturas forzadas, ya sea por miedo o de forma artificial, y
con frecuencia es de utilidad para estados dolorosos graves, dolencias
reumáticas, estreñimiento, trastornos del sueño o intranquilidad interior.

CARACTERÍSTICAS PSICOLÓGICAS

Agrimonia está representada por el arquetipo de “la máscara” .Este


complejo psíquico recuerda a los actores de tragedias griegas que para
dramatizar su papel utilizaban diferentes máscaras. Estas máscaras ocultan
y revelan al mismo tiempo, y es así como Agrimonia puede expresarse,
escondiéndose tras la fachada.

Agrimonia lleva una máscara externa de alegría, jovialidad y optimismo,


dando una imagen de despreocupación, estas características se suelen
acompañar de histrionismo, por lo que Agrimonia es muy apreciado en la
vida social. Su carácter inquieto, bromista y enormemente social lo hace
el animador, el que da ambiente a reuniones y fiestas. Se lo ha comparado
al arquetipo del payaso: el que ríe por fuera... y llora por dentro.
El drama de Agrimonia radica en que cuando se encuentra solo ante si
mismo, la máscara se desvanece y aflora la otra cara, la interior, la
verdadera.
Agrimonia es un ser atormentado interiormente por angustias y temores de
todo tipo. Es muy
Ansioso y sufre por ello. Por eso siempre huye de la soledad y de sí mismo
rodeándose de personas y actividades que lo mantienen distraído. Hay una
tendencia clara al escapismo, lo que muchas veces está representado por el
consumo excesivo de alcohol, tabaco, comida en exceso, drogas prohibidas,
etc.
Ante la enfermedad, el continuo enmascaramiento de Agrimonia lo lleva a
minimizar los síntomas y a desdramatizar la situación, lo que nos puede
desorientar bastante a la hora de establecer un diagnóstico. Hay que
pensar siempre en la doble cara de Agrimonia: buen humor exterior (el lema
es sonreír siempre y la expresión "aquí no pasa nada" y una gran
preocupación interior censurada.
En el trato, Agrimonia siempre busca la armonía, por lo que es proverbial
la facilidad con la que transige ante la menor sombra de confrontación.
Es posible que haya un gran sentimiento de inferioridad. Agrimonia ansía
verdaderamente la paz, aunque solo sea la exterior, la que no puede
encontrar en su interior. Se considera a Agrimonia influenciable por los
demás, pero este hecho no está dado en este caso por una debilidad de
carácter, sino por lo amoldable que resulta en su búsqueda de armonía y
paz.
El conflicto surge porque esta personalidad cultiva la negación. Niega y
oculta una parte importante de su YO: la que considera negativa. En
resumen se trata a toda costa de evitar el "lado negativo de la vida".
Esto lo llevará a una verdadera dificultad en la integración de
experiencias.
Este grave error, esta no aceptación, motivan el que no haya una buena
comunicación entre Ser Superior/Personalidad, por lo que ésta no puede
beneficiarse del programa de aquél. La personalidad, en consecuencia tan
limitada, actúa bajo unas determinadas máximas o premisas que
invariablemente conducen al sujeto a la superficialidad y hacia lo
material. Recordemos que Agrimonia tiende a una positividad en exceso.
Sin embargo, al menos en un nivel inconsciente, Agrimonia aspira aun
estado ideal, en el sentido más espiritual del término. Al no poder
hallarlo en su interior lo suele buscar en el exterior a través de
adicciones diversas.
El perfil del niño Agrimonia es muy característico: niños que lloran poco;
olvidan prontamente sus penas y sus enfados; no suelen comunicar sus
miedos y problemas.

TENDENCIAS PSICOSOMÁTICAS
El desasosiego interior de Agrimonia puede reflejarse en todo tipo de
síntomas. Uno muy característico es la opresión torácica, o bien la
sensación de nudo angustioso en la garganta o el corazón. En este estado
crónico es fácil observar somatizaciones, como úlceras, cefaleas
tensiónales, asma, etc.
Hay una tendencia considerable a las adicciones y la obesidad.
Agrimonia ha sido definido como el ansiolítico del sistema floral. Se debe
pensar en este remedio, siempre que haya cualquier tipo de situación que
pueda suponer una tortura física o psíquica, y naturalmente, cuando haya
un componente ansioso.
Podemos encontrarnos, en primeras visitas, pacientes que niegan que les
pase nada, o que realizan una ocultación de sus problemas. Si no podemos
romper la barrera externa, deberíamos tratar con Agrimonia y esperar unos
días para interrogar al paciente. Normalmente, hay un cambio de actitud
que nos permite trabajar con la emoción que estaba censurada.

CARACTERÍSTICAS ESPIRITUALES

Mente atormentada que le dificulta la práctica de las técnicas de


meditación, concentración, etc. Tendencia a suprimir las experiencias
negativas en el plano espiritual. Su mente tiende a positivar en exceso
sin permitir la unidad con el Ser Superior. Les cuesta mucho asumir
situaciones en que deben admitir la existencia de lo que para ellos
aparece como negativo. No acaban de encontrar el punto de "control y
abandono" necesarios para toda realización espiritual.

REMEDIO para quienes esconden el sufrimiento tras una apariencia


indiferente y feliz, angustia que puede llevar a las adiciones; tortura
interna y ansiedad que la persona se niega a reconocer.
La depresión que suele presentarse a los pocos días, marca el comienzo de
la curación. La toma de Agrimonia trae calma, ayuda a integrar y aprender
de las experiencias, a menudos penosas, que de otro modo serían retenidas
y censurados en el fondo de nuestro ser, trae profundidad y
discernimiento, pero sobre todo aceptación de las diferentes cualidades y
expresiones de nuestra vida emocional, permitiendo abordar nuestro mundo
interno sin miedo y enseñarlo a los otros y a nosotros mismos tal como es.
La toma de Agrimonia da una visión más trascendente de la vida, ya que al
aceptamos tal como somos, los problemas cotidianos se redimensionan en
nuestro interior, se relativizan y dejan de torturarnos y generarnos
ansiedad.

OBSERVACIÓNES PSICOTERAPÉUTICAS

La problemática de tipo Agrimonia se refiere a dos funciones psíquicas


importantes que contribuyen a garantizar nuestra supervivencia: represión
y engaño.

La represión nos protege de las consecuencias de nuestra propia debilidad


e imperfección humana, puesto que si no ignoráramos y reprimiéramos una
gran parte de los que percibimos y averiguamos, no seríamos capaces de
tener un pensamiento claro y actuar con sentido, y si supiéramos toda la
verdad sobre nosotros, nos derrumbaríamos. Por ese motivo, de la infinidad
de informaciones, impresiones y conocimientos que actúan sobre nosotros,
nuestra psique constantemente deja pasar sólo aquellos que en ese momento
podemos asimilar y el resto, que es la mayor parte, lo deja en el archivo
del subconsciente, donde queda guardado bajo llave durante mucho tiempo
hasta que estemos preparados para ello.
El engaño nos protege contra la envidia y la incomprensión de nuestros
semejantes. Así, desde pequeños aprendemos a fingir y mentir en pro de
nuestra supervivencia, es decir, a comportamos bien y «seguir la
corriente». Si nos mostráramos siempre tal como somos en realidad, si
dijéramos con franqueza lo que realmente pensamos o si actuáramos sin
hacer caso de lo que se nos pide, tendríamos muy pocas posibilidades de
sobrevivir en nuestro mundo, en el que impera en el fondo la ley de la
selva. Quien aprende a no chocar con nadie y a presentarse siempre de buen
humor, es bien visto, aunque no haga más que teatro, lo mismo que la
persona agrimonia.
No obstante, por muy útiles y justificables que sean la represión y el
engaño en determinadas condiciones, significan en última instancia una
traición a la verdad. Por eso nuestra alma, que siempre busca la verdad,
sólo nos lo permite cuando nos obligan a ello unos motivos bien
fundamentados o una defensa de emergencia, pero no cuando se hace por
comodidad y a la ligera. De ahí que constantemente hayamos de encontramos
un compromiso con el que podamos permitir por un lado, el suficiente
autoengaño para que no se ponga en peligro nuestra vida, y por otro lado,
la suficiente franqueza como para que nuestra alma nos permita seguir
viviendo. Lo esencial es que no engañemos con frivolidad a nuestra verdad,
que sepamos lo que hacemos y que podamos justificar ante nosotros mismos
nuestro comportamiento.

Como todo el mundo sabe por propia experiencia, este sufrimiento consiste
en una cierta insatisfacción cada vez que sin motivo se finge algo, se
disimula, se reprime con cobardía o se engaña a los propios sentimientos.
En las personas con un marcado carácter Agrimonia, que de modo casi
permanente reprimen sus problemas, eluden los conflictos o engañan a su
entorno y a sí mismos, esto puede dar lugar a graves frustraciones,
depresiones, soledad o angustia secreta. No obstante, por regla general
solo están dispuestos a emprender algo para atajarlo en caso de que el
sufrimiento será considerable. A menudo necesitan ayuda psicoterapéutica
que les haga consientes de su comportamiento, pues se engañan también a sí
mismos y les deje en condiciones de tomar su propio control de modo
voluntario.
Hasta que no pueden evaluar de manera clara la situación de su vida y
decidir libremente si reprimirán algo desagradable o deben ocultarse ante
su entorno, o cuando lo harán, no pueden renunciar a ello cuando no sea
necesario. Y cuando mas consecuentes sean al lograrlo, tanto mas
fortalecerá su autentico ser que, a pesar de todas las presuntas
debilidades e imperfecciones, proporciona en el fondo mucha mas protección
y seguridad que todas las mascaras que se quiera.

MENSAJE

Si la máscara que tenemos que llevar en caso de peligro o por debilidad


personal la seguimos llevando en los buenos tiempos, si fingimos o
engañamos sin motivo suficiente o si acabamos por creemos nuestras propias
mentiras, nuestra alma se defiende y nos hace sufrir.
CENTAURA

CENTAURA /CENTAURA

"Para personas bondadosas, tranquilas y suaves que están siempre ansiosas


por servir a los demás. En su empeño por lograrlo, sobreestiman sus
fuerzas. Su necesidad de agradar crece de tal modo en ellas, que se
convierten en sirvientes en lugar de actuar como ayudantes voluntarios, su
buena naturaleza les lleva a trabajar más de lo que les corresponde y al
hacerlo así, pueden descuidar su propia misión particular en la vida".

VOLUNTAD DEBIL. MUY INFLUENCIABLE. SOMETIMIENTO.

NATURALEZA DE LA ACCIÓN DE LA ESENCIA DE CENTAURA

Para personas exageradamente bonachonas o sumisas, que dejan que se


aprovechen de ellas demasiado.
Para el tratamiento básico en caso de: debilidad personal o vital debido a
falta de fuerza de autoafirmación, sumisión o servilismo, falta de
independencia, altruismo lleno de preocupaciones, abnegación o entrega. .
Todos los trastornos patológicos que van acompañados o son causados por
una mansedumbre o una sumisión enfermizas.
En la vida cotidiana en caso de: apocamiento, exceso de buen carácter o
docilidad.

Centaura, es el remedio contra el sacrificio y la renuncia enfermiza,


proporciona fuerza personal y estimula la conciencia para poseer un valor
propio y el derecho a la propia vida.

Remedio para los que no saben decir NO y se extralimitan en su deseo de


agradar llegando al servilismo, la toma de Centaura permite desligarse del
yugo de la servidumbre mal entendida.
En la terapia familiar se la necesita a menudo en caso de dependencias o
relaciones de explotación.

Fomenta el desarrollo sexual de los niños con personalidad débil, que no


sean capaces de ocupar y defender su puesto en la sociedad y que va unida
a un gran desprendimiento, se les hace difícil oponerse a las exigencias
de su entorno; sobre todo, los niños altruistas y sensibles que no suelen
tardar mucho en caer esclavos de unos padres o unos educadores
egocéntricos y caprichosos que para poder sobrevivir deben aprender a
ceder siempre, a sacrificarse satisfaciendo las exigencias de los demás y
a contentarse para sí mismos con nada o muy poco. Esto hace que al llegar
a la edad adulta posean una doble naturaleza, ya que no tienen la
posibilidad de desarrollar su propia personalidad; tampoco su entorno les
brinda ocasión para ello puesto que en toda relación humana existe siempre
una cierta influencia.
Richard Wilhelm escribe en el I Chin: “La veracidad contra lo disgregador
es peligrosa; también a las mejores personas se les aproximan elementos
peligrosos, si se traban relaciones con éstos; su influencia destructiva
actúa de manera lenta pero segura y de modo inevitable atrae sus riesgos,
Cada uno de nuestros defectos desencadena en las personas con las que
tratamos la correspondiente conducta, que también es mala”. De forma
sorprendente, esto es válido para la postura de Centaura, en apariencia
ejemplar. Lo mismo que el animal de presa se crece ante el temor de su
víctima, la complacencia forzada y artificiosa de la persona a la que se
exige provoca una arbitrariedad equivalente, que es exagerada y brutal.

Cuando hay que tratar con una persona de tipo centaura, se espera de ella
que ceda de buena gana y de forma automática o que se entregue de manera
desprendida, sin que se le ocurra a uno ceder a sus propias necesidades y
aspiraciones.

ORIGEN Y CUADRO DEL SÍNDROME CENTAURA.

La predisposición consiste en una capacidad de entrega superior a lo


normal y un marcado altruismo.

En caso de desarrollo armónico surge de todo ello un ser humano de


tendencias altruistas, de buen carácter y comprensivo, al percibir
perfectamente si sus semejantes se encuentran bien y porque de ello
precisamente depende su propio bienestar, está siempre dispuesto a ponerse
a su disposición o ayudarles en caso de dificultades. Su conducta se
corresponde con lo que, en buen sentido, se conoce como desprendimiento,
puesto que tiene lugar con gran naturalidad y sin necesidad de ser el
autor reconocimiento concreto. La autorrealización que es el requisito
previo para una vida llena y feliz consiste precisamente en desplegar y
desarrollar de una manera óptima todas nuestras disposiciones y
posibilidades, de este modo ayuda a las personas sin ser un siervo, se
ayuda a sí misma ayudando a los demás, es desprendida por sí misma, y el
aprecio que con ello consigue se ve reforzado todavía más por el hecho de
hacerlo de una forma natural y libre. El aspecto positivo de Centaura se
encuentra en aquellas personas que colaboran y ayudan, pero hacen
relaciones de iguales y no de amo esclavo; tienen gran capacidad de
servicio, inclinándose hacia las buenas causas, pudiendo discernir entre
lo positivo y lo negativo, diciendo que no a lo que considera destructivo.

En circunstancias desfavorables, su desprendimiento puede degenerar en


desinterés y su capacidad de entrega en auto-sacrificio, su actividad
humanitaria provoca entonces un efecto negativo e indigno del ser humano,
consistente en un aprovechamiento desconsiderado y un enfermizo dejarse
utilizar; Estas personas carecen de fuerzas para imponerse y satisfacen a
la fuerza o sumisos todos los deseos y exigencias que se les pide, con
ello se vuelven débiles, frustrados o depresivos y son incapaces de tener
su propia vida llena de sentido, se parecen a esos animales a los que se
les ha quebrantado la voluntad, y cuyo fin en la vida consiste en que se
abuse de ellos y se les utilice, sucede a menudo que dilapidan su vida con
el cuidado sacrificado de miembros de la familia egoístas y
desconsiderados, que dejan que se aprovechen de ellos instituciones
consumidoras o se someten a quienes les imponen autoridad. Por noble que
muchas veces pueda parecer esta postura y resulte agradable para aquellos
a los que les gusta vivir a costa de los demás; al final acaba siendo
siempre perjudicial para el ser humano.
En su aspecto negativo son personas calladas, bondadosa y dóciles, que se
encuentra ansiosa por servir a los demás, pero sobrevaloran sus fuerzas
para esa tarea, a pesar de ello se sienten tan involucrados que se
convierten más en sirvientes que en ayudantes voluntarios; su afán de
servicio los lleva a realizar más trabajo del que les corresponde, a tal
punto que pueden llegar a descuidar su propia misión en la vida." (Edward
Bach) ayuda a encontrar el ser interior, de forma tal que podrá ser un
trabajador activo y positivo en lugar de un agente pasivo.

Aunque aparentemente le alivie ceder a su fuerza enfermiza, en lo más


profundo de su ser, la imposibilidad de vivir a tenor de las propias y
justas necesidades y de desarrollar la propia personalidad provoca
insatisfacción y un estado de ánimo depresivo. Los valores morales de
sustitución con los que a veces intenta compensar la pérdida alegría de la
vida, no pueden cambiar nada, el ser agradable para todo el mundo,
pudiendo abusar de él quien quiera y sin atreverse a llevar a cabo su
autorrealización, la personalidad descolorida o incluso rota, la ausencia
general de fuerzas y la falta de alegría que hay en el fondo demuestran
que algo no funciona bien, que se ha infringido la ley fundamental de la
vida, que siempre se orienta hacia el despliegue, el crecimiento y la
alegría, por ese motivo, en presencia de personas típicamente Centaura lo
más que se siente es pena, pero no alegría.
El masoquismo extremo los domina hasta tal punto que son capaces de
dejarse golpear física o psíquicamente sin decir nada, acumulando el
miedo, sin embargo ese miedo acumulado también se convierte en odio y
resentimiento hacia quienes le rodean, aunque muestre otra faceta, pero a
cada momento es capaz de hacerlo evidente ante quienes como él se dejan
subyugar, alimentando sus visos de crueldad. Esto también lo experimenta,
hacia aquel a quien le sirve abnegadamente, se permite albergar en su
mente y corazón un gran deseo de venganza, lo cual hace en acciones
diarias y consecuentes, de lo que espera el no se dé cuenta; pero que
alimenta el anhelo de deshacerse de su martirio y emancipar su alma, sin
embargo la emancipación nunca será posible porque su conciencia no es
autónoma.

CARACTERÍSTICAS PSICOLÓGICAS.

Centaura está representada por el arquetipo "del Sometimiento". Tiene que


ver con la imposibilidad de ser libre de ataduras invisibles que anulan la
voluntad.
La persona Centaura es de carácter pasivo y de individualidad poco
desarrollada, complaciente y con tendencia a la sumisión. Es de fácil
reacción a los deseos ajenos y de poco estímulo para los propios, no
siendo consciente de su naturaleza explotable, queda totalmente expuesto
a la voluntad ajena, cansándose, agotándose con facilidad, y
esclavizándose al intentar ayudar y ser útil, en sus ansias por servir,
sobrevalora sus posibilidades, ofreciendo más de lo que tienen y corriendo
el riesgo de apartarse de su propio camino o misión en la vida. Por su
debilidad, necesita tener a su lado una persona fuerte y para no perderla
se somete a ella, permitiendo que se le imponga.

Le cuesta decir NO, confundiendo cooperación o servicio con servilismo, se


les puede ver atados a la familia, trabajo, enfermedad, relaciones etc.,
mientras sienten callada y tímidamente como abusan de ellos, sin poder
usar su poca voluntad para emprender cualquier reforma cambio u oposición.

El cansancio de Centaura no es psíquico, pues en este plano está muy


alerta; es físico y producido por la gran cantidad de tareas de las que se
hace cargo.

La ayuda desinteresada de Centaura a los demás, así como la entrega


también desinteresada a una misión, son grandes virtudes. Pero en el
Centaura negativo estas características están distorsionadas, no llega a
estas virtudes como conclusión de un proceso de evolución interior, es
decir, como resultado de la armonía de Ser Superior Personalidad, para
ello precisamente se necesitaría fortalecer la personalidad, cosa que en
Centaura es opuesta.

Aunque no lo entienda, en ese "refugiarse en los demás", a menudo esconde


una negación no solo a madurar, sino por supuesto a evolucionar. Centaura
cree que al decir NO a algo que alguien le pide, éste se va a sentir
ofendido retirándole su afecto o aprecio, con ese miedo asume otra carga,
olvidando que él no solamente existe sino que también tiene sus
necesidades. Debido a su debilidad afectiva crónica, se mimetizan con el
medio en el que se encuentran y se someten a los dictados de otros más
fuertes, sobre valorando lo que hacen en detrimento de lo que son, por
toda la actividad que desarrollan y el servicio que prestan a los demás
parecen fuertes y bondadosos, pero en realidad son débiles y esclavos de
aquellos a los que sirven, por ello les cuesta poner límites o dar
órdenes.

TENDENCIAS PSICOSOMÁTICAS.
Cansancio, depresión, tristeza, aflicción, auto-martirio, apego excesivo,
hipersensibilidad, falta de Energía. Suelen tener problemas de dolor de
cabeza y respiratorios, les falta lo vital del respirar, el aire, de piel
sensible y sufre de dolores en espalda, Adicciones.

Por dar energía, en la convalecencia cuando la persona ha quedado


demasiado debilitada después de una enfermedad prolongada, resulta muy
útil en el tratamiento de varices con aplicación tópica.

Debido a su efecto corrector en los trastornos de la columna vertebral,


puede ser también útil con las personas con posturas inadecuadas,
principalmente encorvadas y de actitud apocada, tendencia natural de las
personas de tipo centaura.

CARACTERÍSTICAS ESPIRITUALES.

Excesiva apertura, en planos sutiles puede producir pérdida del sentido de


la realidad cotidiana, muy frecuente en médiums y mentalistas, puede caer
bajo influencias negativas al perder el sentido de su verdadera visión.

OBSERVACIÓNES PSICOTERAPÉUTICAS

Lo enfermizo de todo lo analizado, no consiste en renunciar a los propios


intereses para ayudar a los demás, sino en que esto se produce por una
coacción interior irreflexiva. El buen carácter, el desprendimiento o el
sacrificio es expresión de una neurosis, surgida bajo la presión
amenazadora de un entorno prepotente, y que se practica de manera
automática sin una motivación positiva consciente.
Para el ser humano de tipo Centaura, que por naturaleza necesita la
armonía, es importante mantener buenas relaciones con su entorno, su
comportamiento no es la expresión espontánea e inocente de sus
disposiciones, sino la caricatura que se ha desarrollado bajo la presión
de unas condiciones de vida desfavorables. Éstas no consisten únicamente
en las personas con las que tiene que tratar y a las que se ha
acostumbrado a servir, sino también en el entorno espiritual y cultural en
el que ha nacido, es decir, sobre todo la moral cristiana, que se basa
fundamentalmente en la culpa, la renuncia y la auto-negación, A tenor de
ella, la persona ha de ponerse al servicio de sus semejantes y tiene que
reprimir o eliminar sus necesidades y peculiaridades personales en caso de
que no satisfagan esa línea. Aunque en el fondo esta exigencia no es más
que una teoría alejada de la realidad, pues se opone a las leyes
elementales de la vida y además tampoco las propias Iglesias la practican,
impregna tanto al ser humano educado en la fe cristiana que éste sólo
puede llevar a cabo su autorrealización, para la que posee esta vida, con
sentimientos de culpabilidad.

La religión esclavista, tiene mala conciencia, cuando las cosas le van


bien de inmediato busca de manera imperativa las posibilidades de
expiarlo, estropeando la propia alegría de vivir con el veneno amargo del
mal ajeno; de forma absurda opina que está mejor en el mundo si sufre con
los demás y sigue el lema de que el mal compartido es medio mal.
Pero, en realidad, el mal compartido significa un doble mal pues bajo él
sufren entonces dos personas. El hecho fatal es que con ello se abusa de
un principio que es perfectamente correcto.
Por supuesto que es hermoso y humanitario llevar la alegría al mundo y
disminuir los males; pero nadie puede conseguirlo exponiéndose él mismo al
mal, compartiéndolo, al contrario, lo que hace es añadir al mal del otro
el suyo propio, admitido voluntariamente. La educación religiosa, impide
al ser humano el conocimiento fundamental que sólo a partir de la alegría
puede surgir alegría y que únicamente cuando él mismo está feliz puede
hacer felices a otras personas, por ello, persigue un fin correcto por el
camino equivocado y su conducta en lugar de ser “santa”, es sólo
aparente. En el estado centaura, la persona no se entrega a sus semejantes
por una motivación personal, espontánea y responsable, sino por una
coacción enfermiza interna y una abnegación carente de sinceridad, no se
vuelve feliz y fuerte mientras cuida de los demás, se sacrifica por ellos
o sigue su voluntad sino que en lo profundo de su alma se frustra, un aro
de hierro que ya no se percibe conscientemente, comprime su corazón, que
anhela una vida propia, y al mismo tiempo una voz amenazadora le obliga en
su triste interior a despreciarse a sí mismo y a renunciar a la propia
alegría.

Es decisivo para él darse cuenta de su mutilación psíquica, debería saber


que su comportamiento no es expresión de una moral superior, como se le ha
enseñado y él mismo quiere creer, sino simplemente una medida de
emergencia y la consecuencia patológica de una represión de la
personalidad, que por añadidura favorece las tendencias demandantes y
excesivamente desconsideradas de los demás.
Debería ver que tiene derecho a su propia vida y que aquello que busca por
sus dotes filantrópicas y bonachonas, sólo puede alcanzarlo si actúa a
partir de su globalidad egoísta intacta.
Cuando se haya encontrado a sí mismo y cuando viva a partir de su propia
moral, en lugar de someterse a dogmas y coacciones extrañas que además
considera valiosas moralmente, sabrá cómo debe actuar; unas veces no
satisfará las exigencias de los demás, aunque sufran; y otras, renunciando
a ventajas y placeres, se pondrá de manera desinteresada a disposición de
sus semejantes necesitados de ayuda. Sabe entonces que ha de ser
responsable de sí mismo, pero no del mundo, seguirá las palabras: ¡si se
te llama, acude!, Si seguimos la llamada interna de ayudar de manera
desinteresada a alguien, esto no significa un sacrificio sino una
autorrealización gozosa, pero debemos aprender a reconocernos y no
excusarnos ni mentirnos.

MENSAJE

Centaura se subordina como un niño pequeño, sin ningún albedrío a otra


persona, y con ello a todas las debilidades y desviaciones que puedan
derivarse del otro, con ello, no solo no ayuda a esta persona, sino que
por el contrario hace que la misma refuerce sus patrones negativos de
dominación, obviamente, aunque con esto, en el fondo busque reconocimiento
y consideración, no lo suele conseguir, más bien se convierte en el
“muñeco psíquico" de los demás.
ACEBO

ACEBO/ HOLLY

"Para quienes son atacados por pensamientos tales como los celos, la
envidia, la venganza y la sospecha. Para las distintas clases de ira.
Estas personas pueden llegar a sufrir mucho por dentro, sin que exista a
menudo una real causa para su desdicha"

ODIO, CELOS, ENVIDIA, SOSPECHA, VENGANZA, IRA, VEJACIÓN, RENCOR

ORIGEN Y CUADRO DEL SINDROME ACEBO

La predisposición consiste en una forma muy vital y primitiva de estar


dispuestos para la reacción y la defensa.

En caso de un desarrollo armónico surge un ser humano que está en


condiciones de reaccionar ante los impedimentos que se oponen a su
autorrealización de una manera vital y, si es necesario, agresiva pero no
ofensiva, puesto que siempre se defiende de inmediato cuando se requiere y
no permite que se acumulen en su interior las emociones negativas, es
abierto, directo y carente de falsedad; tienen mentalidad generosa, son
capaces de dar sin pensar en las recompensas, se pueden regocijar con el
éxito de los demás con una disposición a compartir, son comprensivos y
tolerantes.

El odio, que es el resultado de una agresión reprimida, no aparece en él


porque ante cualquier, ataque reacciona de forma espontánea y directa.
Defiende siempre sus derechos con una naturalidad “inocente” y sabe lo que
le pasa al irse por la tangente.
No surgen en él la asechanza y la falsedad, la agresión en su caso tiene
un valor lógico y natural, corresponde al tipo del luchador franco, que se
lanza abiertamente contra cualquier injusticia sin cuidarse de sí mismo.

En condiciones desfavorables, es decir, cuando se quita la espontaneidad a


su agresividad y está excesivamente reprimido en su autorrealización, el
tipo Acebo se desarrolla para dar lugar a un ser humano que se irrita con
facilidad y reacciona de un modo exageradamente agresivo, no actúa ante
los problemas de una manera relajada y comprensiva, sino que de inmediato
se enfada, se irrita o se llena de odio; esta por así decirlo,
constantemente cargado. Otras variantes de este modo de reaccionar son el
odio, la envidia, los celos, el afán de venganza y la desconfianza. El
umbral para tener sensaciones de amenaza o impedimento se sitúa en esta
'mentalidad más bajo de lo normal, la conducta de competencia pierde su
carácter deportivo y franco y puede adoptar una nota vulgar y alevosa.
Muchas personas típicamente Acebo han experimentado una infancia llena de
condiciones de vida agresiva y luchadora y han estado reprimidos, ya sea
por un padre de naturaleza defensiva y blanda o por unos educadores
motivados por la moral, la ideología o el propio provecho.
Al ser la agresión un fenómeno natural e instintivo, que no surge por
violencia ni por la “razón”, cuando no puede liberarse intenta otras
posibilidades de expresión; por ejemplo, los niños que deben reprimir su
ira se aferran dañando animales inocentes o maltratan la naturaleza. El
síndrome Acebo tiene muchas variantes: los pequeños disgustos cotidianos,
el mal humor innecesario, el exceso de excitabilidad, la falta de
amabilidad sin motivos. Puede manifestarse con especial virulencia en
aquellas personas que, siendo por naturaleza flexibles y suaves, pierden
el control cuando se les somete a una presión externa extraordinaria y se
les «nubla la vista».

NATURALEZA DE LA ACCIÓN DE LA ESENCIA DE ACEBO

Acebo es el remedio contra las emociones negativas; puede hacer


desaparecer la agresión, la excitabilidad, el enfado, la rabia, el deseo
de venganza, la envidia y los celos, estimula un control consciente de la
agresión y vuelve más amable, más dispuestos al compromiso, pacientes,
suaves y capaces de amar.
Por supuesto que acebo no puede transformar la rabia o el odio simplemente
en lo opuesto, requiere de un proceso de cambios y modificaciones
permanentes.

Remedio para cualquier bloqueo emocional, para combatir emociones


negativas como celos, la ira, la envidia, el resentimiento, los deseos de
venganza y la desconfianza.
Para cuando el amor se transforma en odio y envenena los pensamientos.
Para acrecentar la capacidad de amar.
En la infancia es un remedio de suma utilidad, ya que puede ser
administrado en caso de rabietas, celos, ira, violencia, agresividad;
emociones estas que en los niños encontramos en estado puro. Es muy
recomendable en el caso de rupturas afectivas principalmente si lo sentido
en ese momento es cual tipo de rabia y agresión.
CARACTERÍSTICAS PSICOLÓGICAS

Acebo está relacionado con el principio del “amor universal”. Bach señaló
a este respecto "Acebo es el remedio del amor, ya que nos protege de todo
lo que no lo es. Acebo abre el corazón y nos comunica con el Amor Divino"
En este sentido, es una de las flores de la segunda generación, es decir
de aquellas a las que Bach definió como más espiritualizadas, quizá, en un
aspecto evolutivo sea la más importante de todas.
Acebo es la lección del amor, de la cual si nos apartamos se nos hiela el
corazón con emociones como la venganza y el odio. Es uno de los
catalizadores del sistema.
Es útil en personas hiperactivos lo que en la filosofía oriental se
entiende por personas con exceso de YANG.
Falta de amor, ira y falta de comprensión; fuertes arranques de violencia,
rabia, suspicacia, ausencia de amor, mal carácter, alto grado de
sentimientos negativos, como desconfianza, sospecha, celos, egoísmo,
venganza, etc.
En realidad, íntimamente, la persona en el estado negativo Acebo vive
esperando un amor absolutamente idealizado, de modo que es muy difícil que
entienda la manera singular que tienen de expresar el amor sus seres
queridos. Esperan que los demás se manifiesten como ellos lo han
imaginado, demostrando su disgusto si no lo consiguen, creando sospechas y
explotando las situaciones para desplegar sus celos o su envidia, así
puede amar a una persona y a la vez odiarla por celos o rencor.
La personalidad Acebo es hipersensible a desaires reales e imaginarios,
como un sentimiento de empequeñecimiento de los demás en su corazón. Los
ataques violentos de mal humor pueden convertirse en agresión hacia los
demás, se quejan de los otros creando mal entendidos y a pesar de que,
visto desde fuera, nunca existe una causa aparentemente real, esta
personalidad puede sufrir mucho interiormente, desconfía de las buenas
intenciones de los demás, sin entender los motivos de quienes le tratan.
El odio puede desencadenar o ir acompañado de otros sentimientos como
inseguridad, agresividad, miedo. etc.

TENDENCIAS PSICOSOMÁTICAS

Cualquier situación extrema puede llegar a un desajuste orgánico serio.


Desde cáncer hasta una serie de enfermedad hepática digestivas,
infecciones, etc.

Las zonas orgánicas más delicadas son el plexo solar, vía biliar, hígado,
vesícula, páncreas.
Pertenecen igualmente al tipo Acebo las enfermedades que poseen un
carácter virulento y agresivo tales como la fiebre elevada, las reacciones
alérgicas intensas, las inflamaciones graves repentinas o una
excitabilidad anormal al comienzo de una afección.

CARACTERÍSTICAS ESPIRITUALES

Son aquellas personas que no ven la unión que hay en todo y se sienten
absolutamente separadas del resto. Su Ser superior está temporalmente
suprimido y no le permite que le guíe a través de las relaciones con las
personas y el mundo; es un estado de sufrimiento interno, en el cual los
sentimientos negativos son más poderosos.

El principio positivo de Acebo, es decir, el amor, el cual tenemos


innatamente codificado y que es alentado por nuestro Ser Superior, se
trastoca en su contrapartida. Nos sentimos entonces dolorosamente
aislados, incomunicados, separados de todo, sobreviene una amplia gama de
sentimientos negativos tales como: odio, envidia, celos, sospecha, deseos
de venganza. Podemos llegar a resentimos de la felicidad ajena y a desear
el mal para otras personas. Estas emociones negativas, son generalmente
vertidas al exterior, tanto en explosiones de ira, como, en una actitud
continua de animadversión hacia alguien en concreto.
La toma de Acebo restituye la armonía interior y nos aleja de las
emociones negativas, otorga profunda comprensión de uno mismo y de los
demás en el complejo mundo de la afectividad, protege del odio y de todo
lo que no sea amor;
Detrás de los sentimientos de odio, celos, violencia, envidia y paranoia,
siempre hay una persona abandonada y con una carencia afectiva. Acebo nos
predispone, nos prepara, para dar y recibir el Verdadero Amor, es decir,
el desinteresado, el impersonal.

OBSERVACIÓNES PSICOTERAPÉUTICAS

La agresión es un fenómeno sin el cual no podría haber vida, pues ésta


significa crecimiento, despliegue y autorrealización, lo que a su vez sólo
es posible a costa de otros. Cada vez que una célula aumenta de tamaño,
una planta crece, un animal se desarrolla o un pueblo se extiende,
realizan constantemente actos agresivos contra otras células, plantas,
animales o pueblos; les quitan el alimento, el espacio vital o incluso su
existencia. Ya que el espacio disponible en la Tierra para la Vida en su
conjunto es limitado y no puede multiplicarse cuanto se quiera, todo el
que quiere desarrollarse y aspira a ocupar un determinado espacio vital
está destinado a luchar. Mientras que para el ser viviente individual esto
significa «comer y ser comido», supone que la vida en su conjunto pueda
conservarse.

Con el trasfondo de las limitaciones existentes de espacio vital y


recursos, nuestro deseo natural de no perder lo que tenemos es similar a
la exigencia de otros, por supuesto, el problema está en asumir tal
postura como inamistosa, Pero la vida responde a esta cuestión de un modo
muy sencillo e irrefutable obligándonos a satisfacer nuestras necesidades
existenciales, el alimento o la seguridad, de manera directa e incluso, si
es necesario, de forma agresiva y a costa de los demás. No obstante, esta
afirmación se refiere sólo a las condiciones básicas de la existencia,
ceder el excedente es un principio natural igualmente extendido; los
árboles dispersan sus frutos, los manantiales vierten sus aguas y también
el ser humano comparte con sus semejantes cuando tiene la sensación de
poseer lo suficiente, ya sea material o psico -espiritual.
Para poder vencer el aspecto negativo de Acebo se necesita un profundo
conocimiento de los mecanismos psíquicos, aunque la agresión es una
reacción instintiva básica, por lo general la desencadenan
condicionamientos personales, es decir, se reacciona agresivamente porque
se siente atacado o amenazado, independientemente de que esto sea en
efecto así, por lo tanto, de lo que se trata es de conocer los propios
temores y sensibilidades personales y desencadenantes de la agresión y
modificarlos de tal suerte que sea posible reaccionar de una forma
apropiada y lógica.
En principio es perfectamente posible encontrar posturas y valores que lo
hagan factible, elevarse sobre el nivel de las luchas de la selva
primitivas y no ver en todo ser humano un enemigo y en sus acciones una
amenaza vital. Si poseemos fuerza, intrepidez y autoconciencia, podemos
experimentar de modo correcto y sin falsificar nuestras agresiones; de lo
contrario se transforman en un exceso de presión interna que a la primera
ocasión se libera en forma de hostilidad sin fundamentos, excitabilidad,
rabia, odio, envidia, deseo de venganza, desconfianza, celos y similares.
En este estado, dejamos de ser los dueños de nuestras emociones, aunque
quisiéramos ya no podríamos ser amables y receptivos, requiere que nuestra
rabia se esfume, transformar nuestro odio en amor y desprendemos de
nuestros celos.
Un auténtico tipo Acebo nunca será una delicada paloma, pero puede
aprender a controlar de marea consciente su vitalidad luchadora, Puede
darse cuenta que tiende a ejercer la violencia y cometer injusticias con
los demás, pero que también muchas veces su salvaje conducta le daña a él
mismo puede percibir, que las emociones negativas que le también le
envenenan; ¿quien se siente bien cuando tiene envidia, experimenta ira,
sufre de celos, tiene ganas de vengarse o está lleno de odio? Si tiene
esto bien claro, cegará las fuentes internas de su veneno, mediante un
auto-reconocimiento más generoso y limpio o creará una confrontación
directa que arroje luz sobre el asunto.

MENSAJE

Como seres humanos conscientes no sólo disponemos de las simples


posibilidades de desarrollo animal, sino además de las intelectuales y
mentales. Cuanto más se haya desarrollado la conciencia de nosotros mismos
y del mundo, tanto más tolerantes, magnánimos y fuertes seremos y menos
nos parecerá una amenaza personal la existencia de otros seres humanos.

Potrebbero piacerti anche