LA COMUNICACIÓN DE LOS SENTIDOS

Para quienes se encuentran inmersos en el extenso y transversal mundo de la

comunicación, es muy importante aprender y entender nuevas teorías, que
permitan crear estrategias cada vez más acertadas que contribuyan al crecimiento
y éxito de sus entornos laborales. En la sociedad moderna, es indispensable
adquirir todas las herramientas posibles que puedan potencializar nuestra
capacidad de ser profesionales competitivos.
Una teoría que cobra cada vez más fuerza, es la de “la comunicación a través de
los sentidos”; advierte básicamente que las personas emiten y reciben mensajes
de distintas formas de acuerdo a la predominancia de cierto sentido. Si bien es
apenas una teoría, puede ser un factor que al analizarse resulte bastante
interesante, siendo una herramienta que a nivel organizacional permita crear
mensajes efectivos y de mayor impacto.

Vista: La mayor parte de las personas necesitan percibir el mensaje a través de la

vista, por lo que es fundamental hacer que el mensaje sea visual, aportando
gráficos o ejemplos. Así mismo, el sentido de la vista es fundamental para
identificar el estado emocional del otro, y detectar si es el momento apropiado
para transmitir una idea.
Las competencias y habilidades asociadas a este sentido son la adaptación y la
estrategia.

Las personas visuales: Inquietas, observadoras y minuciosas, las personas

visuales tienden a tener mayor control sobre los detalles, y para ello utilizan
herramientas como apuntes, dibujos e imágenes que les permiten retener la
información y de la misma manera comunicarla. Su fuerte no es necesariamente el
lenguaje oral.

-COMUNICACIÓN INTRAFAMILIAR -COMUNICACIÓN DE MASAS

-COMUNICACIÓN PÚBLICA -COMUNICACIÓN EFICAZ

2. Oído: Saber escuchar al interlocutor con atención, preguntar e interesarse por

su punto de vista es crucial para empatizar con él y construir argumentos sólidos
que nos permitan llegar a acuerdos y convencer a los demás.
Habilidades asociadas a este sentido son la inteligencia emocional, y el
mindfullness.
Las personas auditivas:
Hablar y expresarse verbalmente es una de sus mayores habilidades; escuchan,
atienden los detalles y difícilmente se les escapa información. Son el tipo de
personas que de vez en cuando expresan sus ideas en voz alta, y pueden
enfocarse en diversos temas al mismo tiempo
3. Olfato: En comunicación, el olfato se asocia a la intuición, y junto con la vista,
es determinante para reconocer e interpretar determinados gestos, silencios o
palabras, y saber utilizarlos a nuestro favor.
La prudencia, la toma de decisiones y la capacidad de análisis son algunas de las
competencias asociadas al olfato.

4. Gusto: No todo el mundo reacciona del mismo modo ante un determinado tono
comunicativo. Para persuadir y transmitir ideas a través de nuestra comunicación,
es importante sabes encontrar el “sabor” que cada persona necesita, y ante el que
responderá mejor a la hora de comunicarse.
Algunas competencias asociadas al gusto son la persuasión, el impacto y la
influencia.
 -Comunicación gustativa
La información se envía a través del gusto.

Por ejemplo si probamos un plato de comida que transmitimos un tipo de

comunicación dependiendo si nos agrada o desagrada.

5. Tacto: El “cómo” decimos las cosas puede marcar la diferencia entre conseguir
o no un determinado propósito. Decir las cosas con tacto, aunque el mensaje sea
duro, hará que sean mejor percibidas.
La asertividad, la empatía y la actitud positiva son habilidades asociadas a este
sentido.
Las personas kinestésicas
Personalidad extrovertida que les lleva a vivir experimentando; estas personas tienen
más desarrollado los sentidos del tacto, el gusto y el olfato, y su fuerte son las
expresiones corporales, las cuales detectan y comprenden de inmediato al entablar
una conversación, además un rasgo significativo es la comodidad con el contacto
físico, lo que les lleva a establecer relaciones más cercanas.
En este sentido, analizar al interlocutor, comprender sus necesidades y determinar la
manera de comunicarse, constituye una herramienta que puede asegurarnos un
impacto positivo,  dentro de las estrategias creadas para potencializar los negocios;
de igual manera, entender nuestros entornos y nuestra propia manera de expresarnos
y de adquirir conocimiento, nos llevará a analizar cuál es nuestro rol y de esta
manera encontrar potenciales oportunidades de mejora.