Introducción

La delincuencia ocupa un lugar preponderante tanto en los medios de comunicación como en

las demandas de los habitantes de la región latinoamericana en la actualidad y no solamente en
Latinoamérica sino que en el mundo entero, enfocados a nuestro ramo, en lo personal me
gustaría tratar este tema en cuanto al estudio de los procesos de configuración de la identidad de
los seres humanos, donde encontramos la gran dicotomía entre esencialismo versus
construccionismo.

Primero, aclarar que el esencialismo consiste en la teoría según la cual los individuos tienen
tal calidad o tal defecto por esencia, por naturaleza. El construccionismo plantea que la persona
se hace durante su vida mediante todos los distintos factores que influyen en su formación;
paralela a la teoría relacionista, muy similar a ésta pero con algunas diferencias, ésta plantea que
el ser humano no existe como un “yo soy” ya que éste se basa en sus relaciones y sin éstas, el
individuo desaparece, dicho de otro modo, no existe una esencia en su identidad que no sea
producto de una construcción relacional con el entorno. Y por último también tratar una teoría
que podríamos llamar ecléctica o intermedia que toma una postura neutral mezclando elementos
de las teorías anteriores.

En el siguiente trabajo trataremos de visualizar la delincuencia desde los distintos enfoques

que nos proporcionan las distintas teorías ya mencionadas, acompañando de algunos datos
prácticos para su mejor apreciación.
 Desarrollo del problema

Bueno, partiremos enfocando el problema, tomando la delincuencia como en aquellos delitos

de connotación social como conductas agresivas, violaciones, secuestros, homicidios, etc. En su
mayoría casos que atentan contra la vida, ya que en estos casos creemos que es más relevante su
análisis para este trabajo.

La principal pregunta es ¿los delincuentes, los criminales vienen predestinados a serlos,

nuestra sociedad los crea, o ambas?

Para responder a esta pregunta, enfocándola desde el punto de vista esencialista sería simple,
los delincuentes simplemente nacen, o sea viene incorporado en su genética este germen de
maldad que propagan al resto de la sociedad, siendo parte de su esencia, de su naturaleza el
causar daño o atentar contra el valor más preciado, la vida. En resumen, vienen predispuestos
para el mal.

Desde el punto de vista construccionista, el tema es un poco más complejo, ya que el

individuo sería el resultado de todas las acciones y vivencias que le hayan ocurrido a lo largo de
su vida, podríamos llegar a considerar circunstancias tan mínimas como su nombre o apellido,
como otras, mucho más importantes como posibles traumas sufridos en la infancia, además de
múltiples factores como educación que haya recibido, casas en que haya habitado, mascotas que
haya tenido en su infancia, personas cercanas fallecidas, etc.

Y la posición intermedia a su vez simplemente tomaría elementos de los distintos enfoques

para decir que los individuos son una mezcla de todos esos distintos factores.

Ahora tomando algunos datos prácticos como por ejemplo el que acá en Chile el 70%
aproximadamente de los hijos de delincuentes, son a su vez también delincuentes, o también otro
dato como que de entre los seis primeros países en mayor cantidad de homicidios por número de
habitantes, de esa lista cinco pertenecen a países latinoamericanos (Colombia, Venezuela, Brasil,
Rusia, Ecuador, México), estos dos datos prácticos son ambiguos y sirven para sostener ambas
teorías en realidad.
 Si queremos ser esencialistas el apreciar que la mayoría de los hijos de delincuentes, a su vez
también lo son pareciera indicar que la genética manda, y por ende éstos nacen predispuestos
para el mal y no hay mucho que puedan hacer para alterar su naturaleza. Ahora el que los
latinoamericanos tengan la mayor cantidad de homicidios por cantidad de habitantes, todavía
desde el punto de vista esencialista pareciera indicar lo mismo, ya que la genética de nuestros
pueblos es bastante parecida, la gran mayoría mezcla de amerindios con españoles, lo cual
indicaría que está en la esencia de la mayoría de los latinoamericanos causar daños a otras
personas, está en su naturaleza el tener comportamientos agresivos y actuar y reaccionar por
intermedio de la violencia. Además podemos aportar otro dato que respalda esta teoría que según
los científicos en estudios efectuados con criminales han revelado que éstos tienen bajo el nivel
de la hormona adrenalina o epinefrina y de la hormona norepinefrina, la primera de éstas es la
encargada de causar placer, también llamada hormona de la felicidad y la segunda de éstas tiene
que ver con la “impulsividad y desinhibición”. Algunos esencialistas agregan que el proceso del
aprendizaje está subordinado a la esencia, a veces el medio logra quebrar la esencia y termina
quedando algo muy pobre, una caricatura de la persona, algo muy atenuado, pero la esencia
siempre puede rehacerse... cuando la esencia es la que se va desarrollando a lo largo del tiempo
la persona cada vez es más ella misma

Analizando los dos datos indicados anteriormente sobre la delincuencia desde la perspectiva
construccionista, pareciera que también afirman y sostienen esta teoría ya que el prisma de un
construccionista sería que el niño al nacer en un ambiente delictual y ser criado y educado en
este ambiente se le traspasaría todo lo necesario para ser un delincuente, teniendo muy pocas
posibilidades de no terminar siendo uno, ya que tenemos el ambiente ideal para construirlo, en el
fondo desde su nacimiento los distintos estímulos, vivencias y factores que vayan influyendo en
su maduración van a formar a este individuo con estas características, y que mejor estimulo
puede ser para un niño que el querer seguir los pasos de su padres, recalcando la importancia que
tienen éstos sobre un niño y lo admirados que son. Sobre el dato de que en Latinoamérica se
encuentran muchos de los países con altos índices de delincuencia, homicidios, violencia
intrafamiliar, etc. También sirve para un construccionista para respaldar su teoría, ya que
nuestras sociedades comparten varios rasgos en común como por ejemplo la pobreza, el alto
desempleo, la mala educación, la falta de oportunidades, la segregación socioeconómica, las
malas políticas sociales, etc. Todos factores que contribuyen a construir personas que se sienten
marginadas de la sociedad y con un alto resentimiento hacia ésta y todos sus integrantes y con
una capacidad de razonamiento distinto, hallando por lo general como única manera de expresión
la de remontar a sus instintos más básicos, la violencia. El individuo no es delincuente por sí
solo, sino que es el fruto de sus relaciones con el entorno experimentadas durante su vida, uno
diría que quizás el niño no nació delincuente, no se le educó para ser delincuente ni paso por
situaciones que crearan a un delincuente, pero que sus relaciones con el entorno lo llevaron a eso,
por ejemplo podemos citar el joven de padres honestos los cuales se han esforzado en darle una
buena vida y buena educación que tiene malas juntas y termina delinquiendo, si elimináramos
esa relación quizás el ser delincuente nunca habría formado parte de su identidad y hubiese
tenido una identidad totalmente distinta, como ser un buen padre de familia y con una buena
profesión para mantener a ésta. En el fondo se sostendría que el ser delincuente como parte de su
identidad se debe a ciertas relaciones con su entorno, y que si elimináramos todas estas
relaciones adquiridas que definen ese tipo de identidad, terminaríamos teniendo otro individuo
con otro tipo de identidad la cual no sería una violenta ni agresiva, ya que las diversas relaciones
que lograron componer a este individuo como tal no dan lugar a este tipo de conductas, ni de
personalidad. Agregar también que algunos de los doctores que sostienen que el delincuente se
hace añaden como factor construccionista la nutrición ya que en un estudio sobre el efecto de las
dietas en la violación de la libertad condicional se descubrió que aquellas personas que
mantenían una mala dieta, cuando la mantenían, el 56% acababa violando la libertad condicional
cometiendo algún acto antisocial (robo, violencia, agresión, etc.), pero si eran sometidos a una
dieta sana sólo el 8% violaba la libertad condicional, además de un estudio que demostró que la
mayoría de los delincuentes adultos están carentes de muchos nutrientes distintos, y que a mayor
carencia de nutrientes, mayor violencia.

Y por último nos queda la teoría ecléctica o intermedia que dijimos asumía una postura
neutral entre la esencialista y la construccionista, bueno esta teoría toma argumentos de ambas
teorías y los combina formando una teoría neutral, en resumen dice que el ser humano es la suma
de la herencia genética y la influencia social, con eso vemos claramente como fusiona ambas
teorías, planteando que uno puede tener una predisposición genética a la violencia, pero el ser
humano es influenciado desde que nace hasta que muere por su ambiente, y la manera en que
maneja estas influencias, forma su carácter y lo hace ser lo que es.
 Conclusión

A modo de conclusión me gustaría agregar mi postura personal sobre este tema, quisiera
partir diciendo que decir que un criminal nace sería en realidad justificar todos los actos que
cometa, sería restarle toda importancia a las decisiones que tome y los hechos que realice,
sacándole todo el peso de la responsabilidad de sus hombros y entonces deberíamos considerarlo
inimputable ya que su conducta no se le podría reprochar, por lo tanto no comparto la teoría
esencialista pura.

Segundo, decir que un delincuente se hace, sería por su parte decir que nuestra sociedad o
núcleos familiares crean criminales, cosa que tampoco comparto ya que en ese caso todas las
personas que hayan vivido situaciones similares, terminarían inmersas en la delincuencia, siendo
que hay hermanos o vecinos que terminan viviendo mundos distintos e incluso personas que
atraviesan más dificultades no terminan delincuentes que otras que muchas veces atraviesan
menos obstáculos, así que tampoco comparto la teoría construccionista pura.

Tercero, esto de la delincuencia no es un problema de un sector económico específico ya que

también existen delincuentes del estrato económico alto o políticos, empresarios, etc. Por ende
vemos que las condiciones económicas no son decisivas pero sí creo que influyentes. Y además
no siempre los delincuentes están asociados a una vida de sufrimiento, por ejemplo, muchas
veces los padres en su afán de complacer a sus hijos, terminan mimándolos y creando individuos
que no soportan el rechazo o el fracaso o los límites, lo cual los termina llevando a la
delincuencia, por lo tanto una crianza balanceada es influyente igual en la formación de un
individuo integro.

Y por último, decir que mi postura está con la teoría intermedia, creo que es la más adecuada
y que se amolda mejor a la realidad, ya que creo que para terminar teniendo un delincuente se
necesitan complementar ambas teorías, en el día a día he podido observar personas que son
sometidas a obstáculo tras obstáculo, sufrimiento tras sufrimiento y no terminan delinquiendo,
creo que vienen “buenos” en esencia o simplemente no están programados para el mal, y tratan
de surgir igual. Es por eso que termino con una cita mía que clarifica mi manera de pensar:
“Uno no nace artista, uno viene con esas aptitudes genéticamente transmitidas pero si uno no las
explota, difícilmente llegara a ser un artista, al igual que el individuo que viene físicamente
programado para ser deportista, pero si nunca hace deporte y nadie se lo fomenta ni le explota
esa aptitud, no llegará a ser un deportista profesional, asimismo hay personas que pueden nacer
genéticamente predispuestas hacia la violencia, pero un ambiente que no apruebe ni fomente esas
conductas no dejará proliferar ese instinto, en resumen, si nadie abre la caja de Pandora ésta
permanecerá cerrada”.