COHERENCIA Y COHESIÓN

Cuando escribimos un texto o cuando leemos alguno, es

fundamental que sepamos escribir con claridad y precisió n, y
que podamos entender y descifrar de un modo exacto y
correcto lo que leemos. Para dominar estas dos competencias
debemos comprender y aplicar dos conceptos fundamentales:
Coherencia (decir algo estructurado y con sentido) y cohesió n
(sin errores ni omisiones de léxico y ortografía).
Los textos son una secuencia estructurada de palabras que
forman una cadena significativa. El enunciado es una unidad
formada por una secuencia de palabras y que comunica un
significado completo. Ejemplo de enunciado con coherencia y
cohesió n:

Las mujeres y hombres del Paleolítico superior se

dedicaron a la recolección, la caza y la pesca.

 LA COHERENCIA

Es la unidad semá ntica de un texto; darle sentido a un texto.

En otras palabras, es la conexió n necesaria que debe existir
entre las ideas que presenta un texto para desarrollar un
tema. Sin coherencia un texto se hace ininteligible. Ejemplo:

Cuando llegó María con sus cuadros después comió

la ensalada porque no mañana.

El texto que acabas de leer sería caracterizado por cualquier

lector como un texto incoherente, porque no tiene unidad de
sentido en las ideas que entrega, no se entiende, ni tampoco
entrega alguna posibilidad de ordenarlas jerá rquicamente.

La coherencia de un texto se funda sobre la base de que los

elementos presentes en él permanecen a lo largo de todo el
mensaje. Ahora bien, en algunos textos literarios, donde se
utilice la "escritura automá tica" y la "corriente de la
consciencia”, lo escrito puede presentar un aspecto de
incoherencia, pero eso no es así, porque esas obras está n
construidas de manera tal que es posible asignarles un tema y
una unidad, aunque ésta sea de una naturaleza distinta a la
que estamos habituados. Ejemplo:

Camino dando tumbos por una superficie movediza y

saltona que me arroja contra los fierros. Un cantor
me salva y me sienta en la silla con una sonrisa en la
cara. Dame plata, platos, piticlín, plin, plin quién es la
que viene ahí tan bonita y tan gentil. Caras frías
pegadas a la ventana, brisa golpeando la frente, la
señora que alega que no le han dado boleto y mi cama
que espera mojada en la casa.

Para que un texto sea coherente debe mantener un mismo

tema y todos los elementos que lo componen tienen que
apuntar a ese tema. Podemos decir que un texto es coherente
cuando cada una de sus partes está relacionada con el tema
central.
Coherencia global: Para que un texto sea coherente, debe
tener un tema central, y todas las ideas, principales y
secundarias, deben estar siempre relacionadas con esa idea. 
Coherencia local: Todas las ideas deben organizarse de
manera ordenada y ló gica, es decir, debe haber una secuencia
interna que nos permita seguir el texto y lograr una mejor
comprensió n de la informació n.
Para que exista coherencia los elementos del texto deben
estar relacionados entre sí y conformar entre ellos una idea
ú nica y unitaria. Desde el punto de vista formal, la coherencia
se basa en el funcionamiento de una serie de recursos para
constituir relaciones entre los elementos de un texto.

LA COHESIÓN

Se refiere a la organizació n lingü ístico del texto. Son los

recursos que se utilizan para unir y dar sentido a las partes
del texto (frases, oraciones y pá rrafos).
Para organizar un texto se debe utilizar la cohesió n léxica, la
gramatical y el uso de conectores.
Cohesión Léxica
En este caso se pueden utilizar diversos elementos de
cohesió n léxica como: sinó nimos, hiperó nimos, sinécdoque,
metá foras. Un ejemplo:

Fernando González se encuentra actualmente entre

los diez mejores jugadores de la ATP. El Feña tiene
cientos de fanáticos que dan cuenta de su encanto,
pues el deportista mantiene su humildad, a pesar de
sus logros. La raqueta nacional viajará esta semana
a Europa para participar en el abierto de España. El
Bombardero, con este viaje, prepara su retorno a
los “Grand Slams”.

sinónimo El Feñ a
Hiperónimo El deportista
Sinécdoque (La parte por La raqueta nacional
el todo)
Metáfora El Bombardero

¿Cómo queda sin cohesión léxica?

Fernando González se encuentra entre los diez mejores

de la ATP. Por su encanto, Fernando González tiene
cientos de fanáticos, pues Fernando González mantiene
su humildad, a pesar de sus logros. Fernando González
viajará esta semana al abierto de España. Fernando
González, con este viaje, prepara su retorno a los “grand
slams”.

Cohesión gramatical

Para lograr la cohesió n gramatical habitualmente se emplean

pronombres (demostrativos, personales, numerales) y
morfemas (género, nú mero y persona gramatical). Veamos
unos ejemplos:
Félix come manzanas. El las prefiere a las naranjas, pues
estas son ácidas, mientras que aquellas suelen ser dulces.

Queridos amigos: Los invito a la próxima reunión de la

asociación. Esta será este viernes a las tres de la tarde en
el departamento de Pablo. En ella se tratarán los temas
que ustedes propusieron.
Los espero allá.

Los morfemas
Se utilizan para lograr la concordancia gramatical. Esta puede
ser concordancia de género, concordancia de nú mero o de
persona gramatical:

Sin concordancia de nú mero ni género:

Gustavo fue a comprar verduras. Trajo uno que no
estaban frescas.
Sin concordancia de nú mero:
Andrea, Francisca y Rosa son buen amiga.

Pronombres numerales

Los pronombres no tienen significado propio, sino que

adquieren sentido segú n el sustantivo que reemplazan.
Los pronombres numerales se utilizan para señ alar un orden
o la cantidad del nombre o sustantivo (personas, animales o
cosas) que representan
Entre los pronombres numerales tenemos:
Los cardinales (1, 2, 3, 4, 5, 10, 18, 100, etc.)
Los ordinales (primero, segundo, tercero, vigésimo,
centésimo cuarto, etc.). Un ejemplo de pronombres
numerales ordinales:

La corredora argentina va cuarta, la noruega es la

tercera. En segundo lugar, está la competidora belga,
mientras que la chilena es la primera.
Números Ordinales
1º – Primero 40º- Cuadragésimo/-a
2º-  Segundo 50º- Quincuagésimo/-a
3º- Tercero 60º- Sexagésimo/-a
4º- Cuarto 70º – Septuagésimo/-a
5º- Quinto 80º – Octogésimo/-a
6º- Sexto 90º – Nonagésimo/-a
7º- Séptimo 100º- Centésimo/-a
8º- Octavo 200º- Ducentésimo/-a
9º- Noveno 300º- Tricentésimo/-a
10º- Décimo 400º- Cuadringentésimo/-a
11º- Undécimo 500º- Quingentésimo/-a
12º- Duodécimo 600º- Sexcentésimo
13º- Decimotercero/a 700º- Septingentésimo/-a
14º-Decimocuarto/a … 800º- Octingentésimo/-a
  20º- Vigésimo/a 900º- Noningentésimo/-a
 21º- Vigesimoprimero/a 1000º- Milésimo/-a
30º- Trigésimo/a 2000º -Dosmilésimo/-a

Los nú meros ordinales “primero” y “tercero” cambian de

forma cuando van delante de un sustantivo en masculino. 
Ejemplos:
“Publiqué mi primer libro”.
“El atleta logró el tercer puesto”.

Cohesión por CONECTORES

Los conectores son estructuras del lenguaje que nos permiten

establecer relaciones entre ideas. Estas relaciones son muy
diversas. Van desde la simple enumeració n, hasta las de causa
y consecuencia, adversativas, etc. Este mecanismo de los
conectores se diferencia de los mecanismos léxicos y
gramaticales en que estos ú ltimos no suponen relaciones
explícitas entre las ideas.
Los conectores sirven para unir ideas expresando claramente
el modo en que se relacionan entre sí. Un buen uso de los
conectores le da una mayor coherencia a nuestro discurso y
lo hace má s inteligible para el receptor. Los conectores
pueden utilizarse tanto en textos escritos u orales. Su
principal funció n, como su nombre lo indica, es conectar
distintas partes de un texto, ya sean palabras, frases o,
incluso, pá rrafos completos.
Un ejemplo:

Se ha cumplido con la totalidad de las tareas

presupuestadas; sin embargo, la calidad del producto no
es del todo buena. En consecuencia, debemos poner en
marcha un plan de contingencia. Asimismo, es necesario
que consigamos apoyo de las autoridades. En primer
lugar, es fundamental que consigamos los datos de
contacto. En segundo término, debemos enviar las cartas,
y, por último, tendremos que estar atentos a las
respuestas que lleguen.

Cuando se construye un texto, es necesario poner de

manifiesto las relaciones ló gicas que unen las distintas ideas
para que nuestro interlocutor pueda interpretarlo
correctamente. Una idea nueva puede añ adirse para, por
ejemplo, complementar, contradecir o reforzar otra anterior.
Así pues, del adecuado uso que hagamos de los conectores
dependerá que nuestro texto final sea coherente y de fá cil
comprensió n.
Los conectores no son en sí una categoría gramatical; es
decir, no existe en el diccionario una categoría conector, como
sí puede ser el caso de las categorías artículo, nombre, verbo,
etc. En realidad, los conectores proceden de distintas
categorías gramaticales: para es una preposició n, además es
un adverbio, pero es una conjunció n, etc.
Nómina de conectores

Adición: para añadir una idea

No me gusta el teatro. Además, estoy demasiado cansado para
salir.
Vivir en otro país es enriquecedor no solo porque se puede
aprender otro idioma, sino también por el contacto con otra
cultura.
Causa: para expresar una causa
Como no quieres lasañ a, he comprado una pizza.
No pienso salir porque hace frío.
Condición: para expresar una condición o hipótesis
Si no me dices la verdad, te castigaré.
Te enviaré una postal con tal de que me mandes tu direcció n.
Consecuencia: para expresar una consecuencia
El presupuesto es limitado. En consecuencia, tendremos que
hacer recortes.
Me han despedido. Por lo tanto, empezaré a buscar otro
trabajo.
Finalidad: para expresar un objetivo
Le enviamos esta encuesta con el fin de conocer su opinió n.
Te lo explico para que lo entiendas bien.
Ilustración: para explicar o aclarar
"Muy" es un adverbio; es decir, una palabra cuya funció n es
complementar un verbo.
Es un disco de 2 TB. En otras palabras, un disco con suficiente
espacio para numerosos archivos multimedia.
Oposición: para presentar una idea opuesta o
contradictoria
Confirmó su presencia. Sin embargo, no se presentó .
Má ndame una captura de pantalla. De lo contrario, no podré
ayudarte.

Orden: para expresar un orden, una cronología, una

jerarquización
Primero, abre el enlace. Luego, rellena el impreso. Y, por
último, envíalo.
Comprar la versió n digital es la opció n má s ventajosa. Por
una parte, podrá acceder a la obra en línea y, por la otra,
podrá también descargarla para consultarla sin conexió n.
Referencia: para aludir a algo conocido o ya mencionado
En lo que respecta al dinero, no debes preocuparte en lo má s
mínimo.
Me gustaría comentarle algo con respecto a su inscripció n en
el curso.
Resumen: para resumir o recapitular
Como he mostrado, el consumo de heroína sigue siendo un
problema real al que debemos enfrentarnos.
En conclusión, es la mejor compra que podríamos haber
hecho.
Temporalidad: para situar acciones en el tiempo
Apenas me des tu direcció n, te enviaré el paquete.
El añ o pasado me despidieron. Desde entonces, he
estado buscando trabajo en vano.